“Nuestra Familia libre del humo del tabaco”

Unidad Promoción de la SaludSEREMI Salud Magallanes y Antártica Chilena

“Nuestra Familia libre del humo

del tabaco”

Elaborado por: Unidad Promoción de la SaludSEREMI Salud Magallanes y Antártica Chilena.

El tabaco pertenece a la familia de las plantas solanáceas, existiendo numerosas especies, la planta del tabaco ha recibido numerosos nombres a lo largo de la historia, algunos son “Hierba del Diablo” o “Hierba de la Reina”. La denominación más comúnmente utilizada es “Tabaco”.

Los navegantes que acompañaron a Cristóbal Colón en el descubrimiento de América en el año 1492, fueron los primeros europeos que vieron a seres humanos fumando tabaco, y fueron quienes lo introdujeron en Europa. El consumo de tabaco se fue extendiendo progresivamente, hasta que durante el siglo XX aumentó considerablemente impulsado por gigantescas campañas de propaganda en los medios de comunicación y en la industria cinematográfica. Sutil y lentamente, fumar se convirtió en una agradable forma de relación humana y se asoció con cualidades tales como elegancia, modernidad, estilo, etc., atribuidas a personajes populares del mundo real y de la ficción. Más tarde, la incorporación de la mujer a espacios sociales anteriormente reservados a los hombres (como la vida laboral), le llevó a imitar algunos de los comportamientos “varoniles”, asociándose el hecho de fumar a independencia, emancipación e igualdad. Fumar se convirtió en una moda acorde con el estilo de vida y la mentalidad de los años 20.

Hasta hace relativamente poco tiempo, no existía preocupación por el daño que pudiese ocasionar el consumo de tabaco. De hecho, las primeras evidencias científicas que demuestran la relación entre consumo de tabaco y cáncer de pulmón datan de 1954 y fueron realizadas por Richard Doll en Inglaterra. Desde entonces son numerosos los estudios que han demostrado los efectos perjudiciales del consumo de tabaco en los fumadores y en los no fumadores.

Hoy se sabe que el consumo de tabaco está relacionado con más de 25 patologías, y se ha convertido en la primera causa de enfermedad y muerte evitable en el mundo.

Introducción

La mayoría de los/as fumadores prueban el tabaco a edades muy tempranas. Los motivos para iniciarse en el consumo están relacionados con diferentes factores sociales y personales, entre ellos influye:

- La familia, por imitación del comportamiento de los/as adultos/as.

- Los/as amigos/as, por ser un elemento facilitador de la integración en el grupo (presión social).

- La sociedad, a través de la publicidad y las facilidades que existen para conseguir el tabaco.

- La propia persona, pues a ciertas edades existe la necesidad de experimentar cosas nuevas y atrae lo desconocido y lo prohibido.

¿Por qué fumamos?

Desde edades tempranas, en las que la persona es muy influenciable

todavía, puede comenzar a fumar atraída por falsos valores de

independencia, libertad o aventura, cayendo en la trampa del tabaco.

Poco después ya se es adicto/a a la nicotina.

Corto plazoEfectos físicos Efectos psicológicos

Taquicardia y aumento de la presión arterial Mal aliento y problemas de salud bucal. En casos de intoxicación aguda: tos, faringitis, dolor de cabeza, mareos, vómitos y sudoración.

Dependencia psicosocial intensa Sensación de relajación y de mayor concentración.

Largo plazoEfectos físicos Efectos psicológicos

Disminución de la capacidad pulmonar. Fatiga. Disminuye la capacidad de los sentidos del gusto y del olfato. Color amarillento de dientes y dedos. Disminución de las defensas del organismo con el consiguiente riesgo de aumento de aumento de infecciones y enfermedades respiratorias. Faringitis, laringitis, bronquitis, asma, etc. Disminución de la capacidad aeróbica, baja el rendimiento deportivo. Envejecimiento precoz.

Aumenta las probabilidades de padecer: Cáncer de Pulmón, Boca, Laringe, Traquea, Esófago, Riñón y Vejiga. Cardiopatías: infartos de miocardio y anginas de pecho.

Reacciones de ansiedad y depresión como consecuencia de la dificultad de dejar de fumar. Manifestaciones de “abstinencia” (irritabilidad, ansiedad, insomnio, fatiga, aumento del apetito)

Efectos asociados al consumo de tabaco.

Dependencia Física INTENSA

Dependencia Psicológica INTENSA

10 Consejos para dejar de fumar

1. Plantéeselo día a día. No piense “no volveré a fumar nunca”, sino más bien “hoy no voy a fumar”.

2. Existen muchas buenas razones para intentar dejar de fumar. Elabore una lista con los motivos importantes para dejarlo.

3. Analice su consumo de tabaco: cuánto, dónde y por qué fuma. Anote el motivo por el que lo hace. Elimine aquellos cigarrillos innecesarios.

4. Busque apoyo en su familia, amigos/as, compañeros/as o en los/las profesionales de salud, para que le ayuden a superar las dificultades. Hágales saber su deseo de no volver a fumar.

5. Elija un día para dejar de fumar. El día anterior: No compre cigarros, retire de su alcance los ceniceros. Evite las situaciones en las que fumaba. Revise sus motivos y refuerce su decisión.

6. Los primeros días sin tabaco: Tómeselo con calma. Beba mucha agua y jugos naturales. Evite el consumo de café y alcohol. Ocupe el tiempo libre: pasee, haga ejercicio. Evite situaciones que le puedan llevar a una recaída.

7. Es posible que los primeros días aparezcan síntomas desagradables (deseos de fumar, irritabilidad, ansiedad, alteración del sueño). Recuerde que son pasajeros y los puede superar; respire profundamente, dúchese con agua caliente, cambie de actividad.

8. Si lleva cuidado, no tiene por qué engordar. Evite dulces, grasas y “picar” entre horas. Haga ejercicio y lleve una dieta variada con alimentos saludables.

9. Tenga presente que el deseo imperioso de fumar disminuye considerablemente después de la segunda a tercera semana. Sin embargo, existen tratamientos que pueden ayudarle a aliviar los síntomas. Consulte con los/as profesionales de su centro de salud más cercano.

10. Por último, piense que ahorrará dinero y podrá permitirse algún capricho. Felicítese por cada día que pasa sin fumar.

Veinte minutos después del último cigarrillo La presión arterial baja a su nivel normal. La frecuencia cardiaca desciende a valores normales. La temperatura de las manos y los pies aumenta hasta valores

normales.Pasadas 8 horas La concentración de monóxido de carbono en sangre baja a

su nivel normal. La concentración de oxígeno en la sangre se normaliza.A las 24 horas Disminuye el riesgo de sufrir un infarto cardiaco.48 horas después de dejar de fumar Las terminaciones nerviosas se acostumbran a la ausencia

de nicotina. Aumenta la agudeza del olfato y el gusto.De 2 a 3 semanas Mejora la circulación. La función pulmonar aumenta hasta un 30%. Caminar se vuelve más fácil.De 1 a 9 meses después de dejar de fumar Disminuye la tos, la congestión nasal, la fatiga y la sensación

de ahogo. Vuelven a crecer los cilios en los pulmones, lo que mejora la

capacidad para limpiar el pulmón y disminuyen las infecciones. Los pulmones se limpian y disminuyen las infecciones.

Beneficios que entrega dejar de fumar

1 año después El riesgo de padecer insuficiencia

coronaria es 50% menor que el de un fumador.

5 años después de dejar de fumar El riesgo de morir de enfermedad

cardiaca es igual al de los no fumadores.

El riesgo de morir por enfermedad pulmonar disminuye a la mitad.

10 años después El riesgo de morir de cáncer de

pulmón es similar al de los no fumadores.

Los hombres y mujeres tienen igual susceptibilidad a las enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco y la exposición. Pero las mujeres corren riesgos específicos suplementarios relacionados con la reproducción. El tabaquismo aumenta la infertilidad y retrasa unos meses la concepción. Los riesgos y las consecuencias del consumo de tabaco y la exposición al humo del mismo durante la gestación son, pese a su gravedad, ignorados o puestos en duda por un buen número de embarazadas. Los efectos adversos en la gestación van desde el bajo peso en el recién nacido hasta el mayor número de partos prematuros, abortos espontáneos y muertes del niño en el parto.Otros problemas que produce el tabaquismo en la mujer son: alteraciones en la menstruación: en las fumadoras, la regla es más irregular y con hemorragias más importantes. La menopausia se adelanta en dos-tres años. El riesgo de osteoporosis y de la disminución de la densidad ósea es mayor en fumadoras y, como consecuencia, sufren mayor porcentaje de fracturas.

¿Cómo afecta el tabaquismo a la maternidad?

El niño/a, desde que nace, toma contacto con el medio ambiente familiar y si éste es de fumadores/as, su salud se ve perjudicada.

El/la pequeño/a se convierte, en este entorno, en un fumador

involuntario, así como los/as que todavía se encuentran en el seno

materno. En el período de lactancia materna, la nicotina pasa a través de la leche al lactante y puede producirle irritabilidad, llanto, insomnio, cólicos, etc. Los/as niños/as que se desarrollan en ambientes de fumadores tienen mayor riesgo de contraer infecciones respiratorias como resfriados, bronquitis, neumonías y descompensaciones asmáticas. Estos/as niños/as tienen un mayor número de ausencias escolares, complicando su proceso de aprendizaje.Se ha calculado que los niños/as cuyos padres son fumadores/as pueden inhalar al año una cantidad de humo semejante al consumo de 30, 50 u 80 cigarrillos, dependiendo si sólo fuma el padre, la madre o ambos, respectivamente.

Además. El/la niño/a sufre todas las consecuencias del tabaco a largo plazo igual que cualquier otro fumador pasivo, aumentando el riesgo de padecer cáncer, enfermedades respiratorias, cardiovasculares, etc.

La familia. Es fundamental para la promoción de hábitos saludables. Los estudios relacionan que el hijo/a comience a fumar en la infancia o adolescencia con que los padres sean fumadores/as, porque asimilan como habitual esta práctica.Las madres y los padres son un modelo a imitar por los/as niños/as y sus comportamientos, opiniones, valores y actitudes influyen mucho en los hijos/as; sobre todo, en las edades tempranas de la vida. Evita fumar en presencia de niños/as y adolescentes.

¿Y a la salud de los hijos/as?

RECUERDA QUE FUMAR DELANTE DE TUS HIJOS/AS ES VULNERAR SU DERECHO A

RESPIRAR EN UN AMBIENTE SANO.

Transmitirles a los/as hijos/as que la situación normal es NO fumar.

Estimular el desarrollo de valores personales y la autoconfianza que los/as hijos/as necesitan para vencer las presiones sociales que conducen al consumo de tabaco.

Comunicar a los familiares, amistades y compañeros que el humo del tabaco no sólo molesta, sino que perjudica nuestra salud y no queremos sufrir sus efectos.

Evitar fumar en presencia de niños/as y adolescentes. Las madres deben mantener abstinencia de fumar en el período de embarazo y lactancia.

Los padres en este período deben de abstenerse de fumar en presencia de la embarazada.

Solicitar a otros familiares, convivientes u otras personas que comparten espacio con la embarazada, que se abstengan de fumar.

Dar ejemplo, no fumando y siendo crítico con los que fumen en tu presencia, en espacios cerrados.

Hablar con su hijo/a de los efectos del tabaco y de las consecuencias para la salud del mismo.

Fomentar el desarrollo de actitudes de ocio y tiempo libre que faciliten la adopción de un estilo de vida más sano.

Introducirles en la práctica de algún deporte y acompañarlos Establecer diálogos con sus hijos/as y las amistades de éstos/as sobre l o s b e n e f i c i o s del deporte y la vida exenta de consumo de drogas en general y del tabaco en particular.

¿Qué se puede hacer?

Colaborar con el establecimiento educacional en las actividades que se programen para potenciar estilos de vida saludables.

Participar e incentivar a que otros padres y madres participen en actividades desarrolladas por centro de padres y apoderados en el establecimiento educacional propiciando la planificación de actividades de lucha contra el tabaco, así como un entorno escolar exento de tabaco.

Solicitar al centro de salud más cercano a su domicilio, colaboración en las actividades de lucha contra el tabaquismo que se generen desde el establecimiento educacional o el barrio.

Defender el derecho de los/as no fumadores/as sobre los/as fumadores/as. Haz a tu hijo/a porta voz y defensor/a de este derecho.

Respetar las normas de prohibición de fumar y colaborar para que no se permita fumar en centros de uso público.

Propiciar actividades deportivas y de ocio y tiempo libre, que generen la cohesión de grupo, la autoestima, el respeto por la vida, la solidaridad, valores y metas positivas.

Trabajar con sus hijos/as las habilidades para superar la presión de su grupo y que diga NO a las invitaciones a fumar.

¿Qué es un/a fumador/a pasivo/a o fumador/a involuntario/a?Es aquella persona reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que, sin fumar voluntariamente, aspira el humo del tabaco por tener que permanecer un tiempo en ambientes donde fuman otras personas. Estas personas, que viven o trabajan en ambientes cargados de humo, corren riesgo de enfermar.

¿Por qué?Cuando un fumador/a enciende un cigarrillo se producen

dos tipos de corrientes de humo:• Corriente principal: la que inhala el fumador con cada

calada.• Corriente secundaria o lateral: la debida al humo producido

por la combustión pasiva del cigarrillo.

El humo del tabaco ajeno o de segunda mano contiene más de 4000 productos químicos, de los cuales se sabe que al menos 250 son nocivos, y más de 50 causan cáncer. No existe nivel seguro de exposición al humo de tabaco (OMS).En Chile, más de la mitad de los niños de 13 a 15 años respiran normalmente aire contaminado por humo de tabaco en sus casas (51,7%) .

La aspiración de estas sustancias hace que vivir o trabajar en un

ambiente cargado de humo de tabaco suponga un riesgo

para la salud.

Las personas que han decidido, libremente, no fumar o dejar de hacerlo se pueden

convertir en fumadores pasivos.

¿Sabía usted que? La mayor parte de la población, incluso los/as fumadores/as apoyan el desarrollo de espacios libres de humo de tabaco.

Las prohibiciones de fumar en los centros de trabajo y los lugares públicos funcionan cuando las personas son conscientes de ellas.

Las personas deberían informar sobre la normativa legal que se aplica en los restaurantes, bares, cafés, centros comerciales, peluquerías, teatros y otros lugares compartidos y deberían conocer los motivos de salud para prohibir que se fume en ciertos sitios.

La información adecuada, el interés por promover estilos de vida saludable, la búsqueda del bien común y la solidaridad con los más débiles como los niños/as, adultos mayores y enfermos/as motivan el cumplimiento voluntario y el éxito de las restricciones del acto de fumar.

Los padres/madres deberían dejar de fumar, al menos dentro de su casa, en el automóvil, y en todos los lugares donde permanezcan personas que no fuman especialmente si son niños/as o mujeres embarazadas o enfermos/as, y además, exigir a otros/as que hagan lo mismo.

Nadie debe aceptar que se fume en ambientes donde permanecen personas que no fuman, especialmente si son niños/as, embarazadas o enfermos/as que son mas vulnerables.

¡¡La Ley establece que no se puede fumar en establecimientos de enseñanza prebásica, básica y media, todos tenemos el deber de exigir que esto se cumpla!!

Las personas pueden hacer saber a sus familiares, amigos y colaboradores que les molesta que fumen cerca de ellos, apoyando los ambientes saludables.

La exposición al humo de tabaco ajeno mata y produce serias enfermedades.

El derecho a respirar un aire limpio, libre de contaminación por humo de tabaco, es un derecho humano.

La mayoría de las personas en el mundo no fuman, y tienen el derecho a no ser expuestas al humo de tabaco de los demás.

Los entornos libres de humo de tabaco son buenos para los negocios, en tanto las familias con niños/as, la mayoría de los no fumadores e incluso algunos fumadores frecuentemente prefieren ir a lugares libres de humo de tabaco.

Los entornos libres de humo de tabaco proveen a muchos/as fumadores/as que desean dejar de fumar, un fuerte incentivo para disminuir el consumo o incluso dejar de fumar definitivamente.

Los entornos libres de humo de tabaco ayudan a la prevención –sobre todo en los jóvenes- del inicio del consumo de tabaco.

Los entornos libres de humo de tabaco cuestan poco y funcionan!

Cuando usted está cerca de una persona que está fumando, usted inhala las mismas substancias químicas peligrosas al igual que él o ella.

El respirar humo de tabaco puede hacer que usted se enferme gravemente. Protéjase y proteja a su familia: no respire humo de tabaco.

Cuando alguien fuma dentro de una casa, todos los que están en la casa respiran el humo de segunda mano.

No existe una cantidad segura de humo de segunda mano. Los niños/as, las mujeres embarazadas, la gente mayor y la gente con problemas cardíacos o respiratorios son quienes más cuidado deben tener.

Incluso el estar cerca de humo de segunda mano por poco tiempo puede dañar su salud.

Todos los miembros de la familia deben

conversar sobre el tema y sobre cómo hacer para que su hogar esté libre

del humo del tabaco para todos los que

vivan allí. Es importante ponerse de acuerdo

en qué decir a los fumadores que visiten

su hogar.

¡POR SUS HIJOS/AS, BIEN VALE LA PENA TOMAR ALGUNAS MEDIDAS CONCRETAS!

Tomen algunas medidas como... 1) Sacar todos los ceniceros del interior de la casa. 2) Adecuen un área para fumadores/as fuera de la casa

(patio, balcón, etc.) 3) Agradecer a los amigos/as por ayudarles a mantener su

hogar libre del humo del tabaco y cuelguen letreros o imanes en algunos lugares de la casa (por ejemplo, la puerta del refrigerador) que digan “Gracias por no fumar”.

4) Sean amables, pero mantengan con fuerza su decisión de no permitir fumar al interior de su hogar.

5) No permita que nadie fume cerca a su hijo/a. 6) No fume ni permita que otros fumen en su casa o en su

auto. Abrir las ventanas no va a proteger a sus hijos/as del humo.

7) No lleve a su hijo/a a restaurantes ni a otros lugares cerrados públicos que permitan fumar.

8) Enséñeles a los niños/as a alejarse del humo de segunda mano.

Algunos consejos para tener un hogar libre del humo del tabaco

Enfermedades asociadas al estar expuesto al humo de tabaco en:

El Feto Muerte fetal intrauterina Retardo del crecimiento fetal intrauterino, lo cual afecta su normal desarrollo para el futuro.

La Gestante Se ve afectada a los mismo riesgos que cualquier otra persona en un ambiente con humo de tabaco, aumentando los riesgos de:

Abortos espontáneos Placenta previa Hemorragias placentarias Desprendimiento prematuro de la placenta. Disminuye la producción de leche materna.

ReciénNacido

Síndrome de muerte súbita del lactante. Bajo peso al nacer (aproximadamente 200 gramos menos que una madre no fumadora).

Problemas respiratorios Favorece la aparición de diarrea. Incrementa la frecuencia del latido cardíaco (taquicardia).

Puede dar lugar al Síndrome de Muerte Súbita. Produce vómitos. Aumentan los cólicos del lactante.

Niño/Niña yadolescentes

Mayor riesgo de bronquitis, neumonías, asma, alergias, etc.

Infecciones oculares y auditivas. Mayor disposición al Acné Perturbación del proceso de aprendizaje debido a un mayor número de ausencias escolares producto de enfermedades y síntomas respiratorios como tos, expectoración, etc.

Los /as hijos/as de padres/madres fumadores/as tienen más probabilidades de hacerse fumadores/as. Ellos/as quieren imitar al modelo adulto que tienen más cercano, los padres, las madres, en todos sus comportamientos, incluido el hábito de fumar.

Adultos/Adultas

Cáncer en distintos órganos del cuerpo. Enfermedades cardiovasculares Enfermedades obstructivas respiratorias. Riesgo de infertilidad en hombres y mujeres Favorece la disminución de la potencia sexual en varones.

SI NECESITAS AYUDA PARADEJAR DE FUMAR LLAMA A:

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La mejor forma de ayudar a nuestros hijos/as a que opten por una forma de vivir respetuosa con su propia vida y

con la de los demás, es dando ejemplo con comportamientos coherentes

con un estilo de vida saludable, mostrándonos, de esta manera, como

un modelo a imitar por ellos/as.