Fletes y averías
Los fletes y averías, es decir, el precio del
trasporte y de las posibles pérdidas o
deterioros que durante el mismo hubieran
podido sufrir las mercancías, se liquidaban
por los maestres en el destino y fueron
utilizados para la investigación del periplo de
algunas sacas. Al parecer, la flota de Sancho
Dávila que acudió al socorro de Middelburg
en 1574, consiguió pasar a Amberes cierta
cantidad de sal, cochinilla y otras
mercadurías, por lo que los aseguradores
buscaron pistas de rescates puntuales que
afectasen a las lanas. Por ejemplo, 38 sacas
entregadas al factor del Consulado en
Amberes, por las que a su vez se
presentaron fianzas para utilizarlas “al
servicio de su Majestad y de dichas naos de
la armada” y efectivamente, fueron devueltas
tras el uso militar.
Estas partidas tendrán importancia porque
los aseguradores reclamarán el descuento deARCHV, PL CIVILES, MASAS (F), C.1049, 1 pieza 189, fol. 1r – 7r
su venta durante la ejecución de la sentencia en 1579. Pueden rastrearse en todo el proceso,
sobre todo en el rollo principal y en las piezas 197 a 220 que contienen las pruebas de revista.
1576-06-29, Brujas. Traslado del registro de averías del Consulado de la nación española en Brujas
Archivo de la Real Chancillería de Valladolidc/ Chancillería ,4 – 47071 Valladolid
Tf.(34) 983 25 47 46