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Encasde pérdua, deter¡orament o subEtllar' assenyalar o tel anotac¡ons, I'usuari haurá d'adqu¡rir el document o re¡ntegEr el seu import. en casd'estar exhaurit.
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Principios de Microeconomia - Parte1

Jan 30, 2016

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Eric Beckman

principios de microeconomia
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Page 1: Principios de Microeconomia - Parte1

En cas de pérdua, deter¡orament

o subEtllar' assenyalar o tel

anotac¡ons, I'usuari haurá d'adqu¡rir

el document o re¡ntegEr el seu

import. en cas d'estar exhaurit.

Page 2: Principios de Microeconomia - Parte1

Indice

MóDULO l. INTRODUCCIÓn v COnCnprOS BÁSICOS

1, EL MARCO ECONOMICO Y EMPRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BASICOS ........

2. DEMANDA, OFERTA Y MERCADOS .............

MóDUL0 II. DEMANDA, PRODUCCION, COSTES, Y OFERTA

3. CONSUMIDORES. DEMANDA Y MERCADO: DETERMINACION Y ESTIMACION .....

4. ELASTICIDAD, INGRESOS, AHORRO E INCERTIDUMBRE

5. OFERTA: PRODUCCIÓN Y COSTES DE LA EMPRESA

Móou¡-o III. ESTRUCTURAS DE MERCADO Y COMPORTAMIENTO EMPRE-SARIAL: BIENES. SERVICIOS. Y FACTORES DE PRODUCCION ......

6. MERCADOS Y EMPRESAS PERFECTAMENTE COMPETITIVAS ............................

7. MERCADOS MONOPOLISTAS ........................

8. coMpETENCIA MoNopolÍsrrcA y DrFERENcracróN re pnoDUCTos .........

9. MERCADoS or-rcopolÍsrrcos y ESTRATEGTAS EMpRESARTALES ................

10. TRABAJO, RECTJRSOS NATURALES Y CAPITAL: MERCADOS DE FACTORES DELA PRODUCIÓN

l l. TEoRIAS DTRECTTvAS y MÉToDos ALTERNATTvoS DE FUAcIóN DE pRECIos ...

IN DIC E

15

19

43

7 l

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127

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159

183

207

229

261

291

Page 3: Principios de Microeconomia - Parte1

MÓDULO IV. REGULACIÓN E INTERVENCIÓN DEL ESTADO EN LA ECONOMiA,POLÍTICAS MICROECONÓMICAS PÚBLICAS, FUNCIONAMIENTOCONJUNTO DE TODOS LOS MERCADOS .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 323

12. POLÍTICAS GUBERNAMENTALES, MEDIO AMBIENTE Y LAS EMPRESAS ........ 327

I 3. EL FLINCIONAMIENTO CONJLTNTO DE LOS MERCADOS: GLOBALZACION Y CO-MERCIO INTERNACIONAL 349

BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA .......,...,.... 379

BIBLIOGRAFIA 381

iNDrcE

[ '- l lrhr. ' qrx c

F'nJcr J l5 |ñ t , l ¡ . . . rmr l ¡l¡. nc-r'.rrl¡dr¡lJtl\ rh 3.1 Enl¡urr- \ J $,\r('n \':un t¡[,. ' . l tf 'rrx &lc. Jc l.r ¡r, huf . I¡rul-tu¿I. clr ' ,tctJ.¡. , 'f,r.-tl r r¡¡13. ¡'.rt'lc r

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Page 4: Principios de Microeconomia - Parte1

Prefacio y plan del libro

El libro que el lector o lectora üene ante sí es un texto introductorio de primer curso lpico para res-ponder a las exigencias de los nuevos Grados en Ciencias Empresarialei en las Univeriidades espa-ñolas, similar a los textos utilizados en todo el mundo. Está pe'nsado para y va dirigido a rerporra", ulas necesidades del nivel de enseñanza co¡respondiente u lo'r tro"uos planes de estudio en la TINEDrelativos al Espacio Europeo de Enseñanza.superior y está plenamente ajustado ar programa de la asig-natura, ya que el índice de contenido.del libro y los epígrafes del hogiu-u a" u{u"íru ." "o,'"rpon_den según una relación 1 a 1. por todo lo anterior prásJnta nivel de Jificurrad esiándar o proÁJ¿¡.Los libros de texto, tanto el teórico c omo er de práctica.r que lo acompana, como todos ros matena_les de la asignatura (Guía, programa, orientaciones'"., iu página;"b;;il;;;;;l;."

(http://portal.uned.es/portal/page?-pag eid=,93,8o39'24.&_aaalortaia]scrre-"=ponrer, óir." vi.-tual, etc') dentro de la del Departamento de Análisis Económico I y ta universidJ. u-un o-;gáo, udos objetivos o fines genéricós: que el alumno o alu-nu up."nJu ru.ateria científica y se forme lomás posible en ella, y ayudarle a pasar ros exrímenes correipondrentes de la misma.

,, . objetiv's técnicos y objetivos pedagógicos. Sin embargo, creemos conveniente distinguir ana-líticamente entre los objetivos técniios de rá materia y los páagógicos, uunque "n

ra prá"tiEa ." en_hemezclan. Respecto a los primeros, el alumno o alunura quizá d-ebiera considera. el cuiricuiuÁ "orrr-q]"19 9:l Grado como unpuzzre o al menos un mosaico en er que ras piezas serian tas asijnatu.as odisciplinas; primero es necesario estudiar las part e" y lo"go ieio, lecturas en un tado más o me.osintegrado y más o menos abierto, articulado y con sitiOí pf*o.

La disciplina que nos ocupal, nuclear e introductoria -ya que todos los demás conocimientos delcurriculum se articuran en tomo a erJa- es. así, u n estudioieóiic:o de ros mecanismos a.ulig"""io,de recursos escasos susceptibres de.usos ¿rternafivo., por pJ" a" una sociedad modem; ;;;;r"piedad privada de los medios de producción y que los asigná a través del i"r""-""i" á"i;;;;, ysus numerosas pafes constitutivas.Las asignaturas de Estadística y Econometría que también forman parte del plan de estudios detGrado, después aportalán las heramientas de contrastaciOn eÁpínca oe la realidad, los hechos. v fa-

I Es complementa¡ia de la Inbodacción a lt Macroeconomíq del segundo cuatnmesre.

PREFACIO Y PLAN DEL LIBRO

Page 5: Principios de Microeconomia - Parte1

miliarizará al alumno o alumna con las fuentes numéricas reales y una ¿Lrticulación de las mismas. Por

tanio, debemos insistir ahora en que este no es un libro de Economía Aplicada'] sino teórica.La col

alumnosobviamer

Como ua VeCeS CU(

cual cone:ces como svalora¡lo rno o alumres obvia). Icontenidos

El librodo llegar eruna enseñisean relatirporales de

Ciertament5ante inc lulos examefmenzar a tfesle caso. tchas décadtemati\ a\:

Curvt u

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I al l-1: rtí |temacionall l ]ndo de \e

c" dec i r . . i

¿a t lqur ¡ . '

1 . .2. .3. .4. .

5 . "

6."

7. .

8."tantes.

9." En ocasiones se establecen ejemplos numéricos en el texto principal'

10." En el libro de ejercicios que acompaña al texto con el mismo título como volumen II, se re-

suelven paso a paso todos los ejercicios.

Todo ello sigue la práctica profesional de la Teoría Económica, al menos a este nivel, desde hace

muchos años,.i-o pott"n de manifiesto numerosos libros de texto aparecidos en-e1 mercado inter-

nacional en los últimos treinta años (muchos de ellos citados en la bibliografía al final del libro).

Se incluyen introducciones a los módulos y objetivos de los temas en cada uno de ellos'

Aparecen glosarios y resúmenes, al final de los temas.

Una Iista de conceptos importantes también al final de cada tema'

Todos los temas van orlados con problemas al modo de ejercicios de varios niveles de difi-

cultad, que completan y profundizan el argumento teÓrico.

Se anaden apénáices -nomalmente matemáticos- con uno o varios temas cuando se con-

sideran adecuados; estos apéndices son partes importantes; quizás menos probabilidad de sa

lir en un examen pero tan materia objeto de los mismos como el texto principal'

Los módulos y temas del libro de problemas o prácticas correspondiente se relacionan con

los del libro teór'ico según una relación biunívoca también.

Aparecen en cursiva en el texto principal los tétminos nuevos y más importantes al desarro-

llo del argumento.Se recuaJran o enfatizan como /¿:¿dl1los, con técnicas de resaltado, Ios conceptos más impor-

l. Sugerimos que los alumnos y alumnas lean cada capítulo rápidamente -y el esquema de reco-

ridos recomendados como para hacerse una idea general del contenido de los mismos. Que lo

vuelvan a leer cuidadosamentg de manera reflexiva y concienzuda, lo que implicará el uso de pa-

pel y lápiz cuando menos, naturalmente incluidos los ejercicios, para después leerlos de nuevo

iápiáamente. Todo ello replicando los gráficos, pero siempre paso a paso' lo que ayuda.a su com-

orénsión. De la misma manera se deben tratar los argumentos algebraicos cuando los hay'

2. For último deberán comprobar lo que han aprendido con las secciones de resúmenes y térmi-

nos clave, que aparecen al final de los temas. Hacer los ejercicios complementarios, tanto los

numéricos óomo los de test de elección múltiple, quizás finalice el ciclo hasta el repaso antes

de los exámenes.

2 Las introducciones a las partes y a los diversos temas y los esquemas orgamizativos del curso. además de los ter¡as mls

mos, apor1arán una guía orientativá de los fines técnicos pelseguidos'

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Page 6: Principios de Microeconomia - Parte1

La comprensión es muy importante, paÍicularmentc de las ideas teóricas abstractas. aunoue losllunnos deberán reforzarlas con los ejemplos y los ejercicios de los diversos tipos. No .onu¡"n",obvi¿rmente, memorizar sin entender.

Como una de las características de la Teoría Económica (de la que la Microeconomía es su núcleo)-: \ eces cuesta entender el argumento, ya se trat¿r casi sienpre de largas cadenas de razonamiento,(ual corresponde a la construcción de modelos teóricos y es preciso detenerse y releerlos tantas ve--.'\ como sea necesario, y trabajarlos con papel y lápiz. Se debe tratar así mismo de relacionarlo todo-' alorarlo y ver si coincide con los hechos y los problemas ¡eales, sobre toclo con los relevantes (el alur¡-:lo o alumna puede y debe discutir el criterio o criterios que estableeen ll relcvancia. y¡ que esta no-" obvia). Se estimula al alumnado a ser crítico, lo que seguro le ayuclará a comprencier y v¿lorar los-')ntenidos discutidos.

El libro se plantea de modo que los argumentos estén bastante o incruso muy explicados, pudien-.i,r llegar en ocasiones a ser tediosos, debido a que se tiene en cuenta el contexto de estudio en la LT{Eu-..rlrt enseñanza a distancia, proceso que a veces se hace en solitario. Todo ello hace que los libr.os'J;rrr relalivamenle vctltuninosos, aunque se intenta lograr un tamaño manejable a las restricciones tem-:'orlles de un curso de estas características.

I rertamcnte lo mejor es una lectura y estudio completo, en su secuencia nornal. Aunctue es intere-'.rnlc lncluso en ese caso saber donde están los énfasis -pero no necesarianrente lu irnportrncia pllr

'. ¿¡{¡¡g¡g¡;-, y echar una mirada rápida a los capítulos o t€mas y a los ejercicioi. antes de co-::r.nzar a trabajar ¿n s¿¡¡o. Ello es ciefiamente así. porque la Teoría Económici. Microeconómica eni'tc caso, trene una lógica interna y lleva cristalizada en una suerte de paradigma expositivo hace mu--:rrs décadas, al menos en su núcleo central. Así, hay cuando menos tres sugerencias de rccorriclo- al-: - ' rn¡ t ivas:

Curso ultrarrápido. Lo constituirían los capítulos siguientcs: 3. 5. 6, 7, l0 y 13.Curso rápido. Formado por los capítulos: l, 3,4, 5, 6, 7, g. l0 v 13.Curso in termedio. 3 ,4, -5,6,7,9, y I3 .

Un tema por semana palece la secuencia recomendada.obviamente, la mejor opción conlodo, es er curso completo, integrado por todos los capítulos, del

. .Ll l3; sólo se establecen las distinciones anteriores, al módo habitrial en ia literatura proferionai in-::'rnacional más seria, para abrir posibilidades de aproximación a la materia y -para 'epetir-, tra-:.inclo de señalar los énfasis.

En Economía, y en consecuencia en Microeconomía, existen tres lenguajes: (a) el:trurio; (b) el geométrico, y; (c) el algebraico. El primero es ra palabra hablad¿ o esó¡itá sin mas,

-' ' clecir' sin aparato formal matemático alguno. Los otros dos son autoevidentes, el primero utili-. '.t tl-quras y gráficos, y el segundo matemáticas más elaboraclas en forma de ecuaciónes. Los tres

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Page 7: Principios de Microeconomia - Parte1

son alterndtivosen el sentido de que, en principio' dicen lo mismo cuando se refieren a la misma

realidad.Sinembargo'e lgradodepotenciaanal í t icadelost ¡esvar ía.Mientrasquelapalabraesquizásdi -

rectamenteinteligible,asuvezpierdepotenciatuandoelargumentoescomplejo'bienporquesere-fiera, por ejemplo, a un con¡untode variables, bien porque ias relaciones entre ellas sean complejas

I r"l"'t*t"it "

rl"g". ,""u"n".iu, argumentales La geometría.por su lado es también relativamente rn-

tuitiva. pero está limitacla g",,"tuií.'"'-"" al plano ciel papel' lá pizana' o la pantalla del ordenador' o

.".;|ilil;;.r-r"ii"Ui", (dimensiones), e incluso en esre caso comparativamente limitado, re-

qr".i,á"t^ "f."^

da pericia.artístíca. Sin duda el más potente es el tercero' el álgebra' o mejor' las

herramientas matematrcas ar uso (matrices, ecuaciones diferenciales, topología, etc ) Es un aparato

más general y ciertamente má, poá"toto, en la medida que consigue' en principio' resultados satis-

l".t,,iios.on un "sfuerzo

analítico relativamente bajopor otro lado, los tres en clefio modo también són complementarios' y desde luego' no hay que

,..ri* ao-o opu"stos. Muchos modelos teóricos y los resultirlos.e los mismos se tefuerzan mediante

.ierpedi.nt. ie util izar dos o incluso los tres métodos sucesivamente'

Peronodebeolv idarsequelasmatemát icasenestecaso'sorrunins,umentoysóloeso'a lserv l -.ioi" iu i.ono*iu. I-o qo" uqri'." posigue, por razones obvias'-es la formación en Economía Cuan-

do haya drscrepanclas enrre uno y ot.o instrumentul (si es que lo hay' que no tiene por qué' pero la

intuición inicial u u".", "ngunuj,'re

recomienda que el alumno o alumna se incline por la versión tn-

iri,iuu y ,..nl.o-.conómic-a Las matemáticas' insislimos' lienen que-ser i" lls^il:,:"::i]::1::

1y no-i" "p,'rnait

de brujo.), una ayuda y refuerzo' que debe completar en su caso la vrslon econo-

mica, y proveer de un senrlmrento áe seguridad respecto a la bondad analítica del razonamlento pu-

ramente económico. En numerosas oaurtn.r, cuando no coincidan por.alguj]a razón, probablemen-

teai .nualasdosciencias,deberáconsegur idadabandonarseprov is ionalmenteel razonamlentoÁaémático, y tratar de apreciar después donde reside la tuente de discrepancla'

,.lc conoc inr icnproblenra. ,' . rt ido tar t to . , \ r ,Olcnla5 Pi lrJ ul

I t l lnl lnta af l l , {

l l . prerunt . r . r\ a tura lnrcr

p lcmcntc .J t rJ lUt l rn i td ( ) . rn la

tcto dL' l.r.e,' '

l ;u r i l i ¡ r i z . r ¡ ¡ .t i r r r le ( l \ quc \ l

.\gra,.le;errl . r ¡ r ignr tu r ¡ JL n i \ e r ' i J rJ \

t , \ dc . {n i i l r . r .( - . , \U l l ! ] .

Específicamente en lo que se refiere a este curso o libro' las matemáticas utilizadas son muy

elementales y serán bren conocidas por el alumno o alumna promedio de la enseñanza secunda-

.ia espanota io del Curso de Acceso a la Universidad para mayores de 25 años)' Las asignaturas

de Matemáticas o Matemáticas p;ra Economistas del P]an de Estudios de primer curso de los Gra-

áá, ""

éi"".iut y EmpresarialJs' van muchísimo más allá- de los prerrequisitos y "1t-?:]:it::-*,:"Teoía Económióa defmismo nivel, por 1o que proveerán de un bagaje más. que sulrcrentt pull

11'necesidades de1 lector o lectora de eite libro' El Curso Virlual' por otro lado' provee de seccrones

de ayudas matemáticas.

: Hoy es muy frecuente en todo el mundo' y en consecuencia en 1as universidades

españolas y en la UNnl en partiÁtar, plantear los exámenes' otras pruebasr' o la mera comprobación

-17iu CuA art Curso y pt.ograma cle la As¡gnatüra.Facolf^dde Ciencias Econ¿n¡icas y En'tpresariales (UNED) y Pró-

lopo ¡ l l ibro de pr 'oblema\ que acomprns e\ le \ olumen

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Page 8: Principios de Microeconomia - Parte1

de conocimiento en foma de tests de diversas altemativas para elegh una (generalmente cuatro). Losproblemas o cuestiones planteadas en ellas deberían ser probablemente muy relevantes en algún sen-¡ido tanto social como científicamente, pe¡o en esta introducción de tales preguntas (ver libro de pro-blemas para un tratamiento amplio de este tipo de cuestiones) nos planteamos --con la tradición do-minante en todo el mundo- algo mucho más modesto y es que el alumno o alumna se familiarice conlas preguntas usuales, su tipo, y la forma de formularlas.

Naturalmente, los alumnos no estarán aún en disposición de contestarlas en ese momento. Sim-plemente se trata.rá, desde el principio y conscientemente de que ello es muy prematuro, exponer alalumnado ante el contexto de evaluatión al qu'e se erfrentará en su momento. Tienen por tanlo el ob-jeto de paseo y panorámica por su entomo natulal, ciertamente al modo de muestra. Quizás ello lesfarnlliatzañ o problematizará con las cuestiones planteadas para que cuando aborden los capítulosteóricos que siguen reparcn en aquellos aspectos de más interés para las pruebas de examen.

Agradecemos su colaboración a Susana Cortés y Susana Siánchez miembros del equipo docente dela asignatüa de,rtroducción a la Microeconomía, en el grado de Administración de Empresas en laUniversidad Nacional a Distancia. También las sugerencias de diversos profesores del Depafamen-ro de Análisis Económico I de esa misma Universidad, y en especial a Maía José Lorenzo y RubénOsuna.

Manuel AhijadoEnero de 2010

PREFACIO Y PLAN DEL L IBRO 13

Page 9: Principios de Microeconomia - Parte1

MODULO I

Introducción y conceptosbásicos

En esta pafie introductoria se trata de establecer el objeto de la Microeconomía (Tema l), así comouna serie de conceptos básicos y otros derivados e instrumentales que irán configurando bloques deherramientas analíticas y un lenguaje propio de la profesión de economistas. Se dilucidan en ella por¡anto cuestiones de gran importancia para la cabal comprensión de la materia bajo estudio. Son temasrelativos al por qué de los contenidos mismos del tema, acaso la cuestión más interesante, y ia qué en¡odo caso dota o no de sentido a la tarea; problemas referentes a su conceptuaiización y ut t"trguul"propio de los economistas.Com-o es habitual en este tipo de temas ---n apariencia tan sólo introductorios- el alumno deberíacstudiarlos_tanto al principio del curso como al final de é1, cuando probablemente obtendrá más pro-vecho de ellos, así como volver sobre los mismos en momentos iniermedios, tantas veces

"o-o ,"u

¡reciso para el entendimiento de las cuestiones planteadas. Sin su conocimiento profundo, la forma-ci<ín carecerá realmente de una base sóüda. Se sabriín mover las cuwas típicas en lós gráficoi e inclusor podrán entender algunas conclusiones de los modelos teóricos estudüdot p"ro, ó¡¡o en las r:a7asrgras, sin saber realmente lo que está sucediendo. po¡ todo ello, se estimula al aiumno o alumna a

los estudie con gran interés.el rema 2 se desarrollan temas básicos, relativos al ftmcionamiento sencillo de los mercados y susIes componentes, como una suerte de vacuna, para evitar la exposición directa del lector a temas de

y demanda a nivel inte¡medio.

Page 10: Principios de Microeconomia - Parte1

. Necesidad de elegir

. Oué, cómo y para quién producir

Soberanía del consumidor vs soberanía dela empresa

. Economía de mercado

. Mercados, precios

. Formas de empresas

. Marco macroeconómico

Page 11: Principios de Microeconomia - Parte1

El marco económicoy empresarial

y los conceptos básicos

INTRODUCCION Y OBJETIVOS DEL TEMA

En este tema planteamos de manera general las principales cuestiones económicas de interés, tan-to oara la sociedad como de la empresa:

Discutimos el oój¿to dela Economía, y los conceptos básicos del sistema económico acrual.

Para ello estudiamos su problema fundamental como una tensión entre los deseos ilimitadosde bienes y servicios por parte de los individuos y/o de las sociedades humanas modemas---<omo distintos de las necesidades básicas-, y los recursos escasos con los que cuentandichas sociedades.

La tensión desemboca en la necesidad de elegir ----elección y asignación de recutsos esca-sos..._, entre posibiüdades altemativas, 1o que lleva al concepto o idea de coste de oportu-nidad como enfoque convencional.

Elaboraremos en tomo a los enfoques o vi'siones de sob¿r¿nía del consumídor frente al desoberanía de la empresa.

Los enfoques micro y macroeconómicos.

El concepto de Sector Público, su función reguladora, los llamados fallos de mercado.

Nos familiariza¡emos con divetsos conceptos muy impodantes como los relativos a agen-tes económicos que son los acto¡es de esta historia que nos ocupa, los mercados que son elescenario en que actúan, los precios o instrumentos que les guían, y el equilibrio como el finque les mueve.

Para relacionarlos con la administración de emüesas introduciremos también el marco ma-croeconómico y el empresarial.

EL MARco EcoNóMtco y EtvtpRESARtAL y Los coNcEpros BÁstcos 19

Page 12: Principios de Microeconomia - Parte1

1.1. EL CONCEPTO DE ECONOMiA

Existen básicamente tres maneras de abordar elproblema económico general y los diversos par-ticulares en que se concreta aquel: 1) hacerlodesde un punto de vista histórico; 2) estableceruna lista de cuestiones de la que se ocupan loseconomistas en el día a día1'3) ofrecer una defi-nición corta al modo tradicional.

Desde el primer ángulo se trataría de vercomo las sociedades históricas fueron planteián-dose las maneras de satisfacer las necesidadesen cada momento. Una pregunta relacionada se-ía preguntarse por qué en el Neolítico las tribusnómadas se asentaron, dando lugar a formasagrícolas y poco después de intercambio (mer-cado donde se trocaban los excedentes de pro-ducción sobre las necesidades mencionadas). Ensí mismo el tema no tendúa hoy mayor impor-tancia si no fuese porque acaso se estén dando enla actualidad situaciones similares; en efecto, unahipótesis seía que el grado de depredación delos recursos de entonces, como facilidad de re-colección de frutos, caza y pesca, respecto a susposibilidades de reposición, dieran lugar a aquelcambio de cultura; algo que pudiera tener un pa-rangón con el uso de los recursos naturales en laactualidad.

El segundo enfoque, hacer una lista de losproblemas económicos de los que dan cuenta adiario los medios de comunicación, y las decla-raciones gubemamentales de los diversos nive-les: tipos de interés, crecimiento económico, sa-larios, inflación, paro, empleo, Balarza de Pagos,globalización, emigración, etc., en un ampüo lis-tado, cuya elucidación precisamente es uno delos objetos del estudio en esta y en otras disci-plinas relacionadas.

Pero se puede buscar delimitar el contenidode la Ciencia Económica de otra manera: daruna definición en forma de frase corta, que enpocas palabras resuma lo que es la Economía,con carácter más general que una lista de ejem-pios concretos. Así, para muchos la Economía

trata de la forma en que puede aconsejar sobrela mejor forma de utilizar los recursos escasossusceptibles de usos alternatívos, de modo que sesatisfagan el mayor número de necesídades po-sibles, básicas y sentidas.

La Economía seía así una ciencía social (yacaso moral) cuyo objetivo es establecer la ex-plicación del modo de funcionar en lo económi-co de las sociedades humanas, que sirva tam-bién para proveer de una base para la actuaciónsobre el desenvolvimiento de las mismas a travésde las políticas económicas.

En suma, el objetivo económico último decualquier sociedad es la satisJacción de las ne-cesidades sentidas, básicas y no básicas, tantoindividuales como colectivas. Pero el problemaeconómico fundamental es la producción de bie-nes, servicios y mercancías que coadyuven aaquella satisfacción de necesidades; o 1o que eslo mismo la producción es previa al intercambioy al consumo. Los bienes necesarios para la sub-sistencia son pocos, de hecho, se suelen agruparen tan sólo tres grandes categoías o grupos ge-néricos: alimentos, vestido, vivienda y en casitodo el planeta. Por otro lado, y con algunas ex-cepciones, de por si preocupantes y dignas deatención en tomo del año 2010, en la mayor par-te de ellas, en grandes iáreas del mundo, estáncubiefas.

Las necesidades básicas son prácticamenteiguales para los ciudadanos, las familias o ¿co-nomías doméstícas de un país rico, tecnológica-mente avanzado, que para los de uno pobre, delos llamados subdesanollados o en vías de de-sarrollo del llamado Tercer Mundo o más atrasa-dos. ¿Pero qué es lo que diferencia a las econo-mías domésticas de esos dos tipos de países?-Pues que los deseos (los deseos y las necesidadesson carencias de algo unidas al deseo de satisfa-cerlas ) en las primeras son mucho mayores queen las segundas; peor incluso, son ilimítados.Todos queremos más, y más y más. Vivimos ensociedades ricas, algunas muy ricas, incluso opu-lentas, pero queremos más de lo que podemos

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Page 13: Principios de Microeconomia - Parte1

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obtener. Individual y colectivamente; y sentimosmuchas <necesidades> y muy variadas. Peor queeso, tan pronto tenemos satisf'echas unas desea-nos otras. Más grave alún, \a publicidad llevadaa cabo por las emprcsas -y las administracionespúblicas en un sentido- en su competencia pornuestras demandas o nuestro gasto o votos, loque es un hecho de cada día, muchas veces nosi¡ea directa e indirectamente (1o que vemos enotros y queremos imitat y deseamos), el deseo deotros bienes. De hecho no sólo muchos de ellosno se necesitan, al menos la mayoría de eltos,:ino que la competencia entre las empresas deja\ iejos u obsoletos algunos bienes casi de forma.ontinua, llevando a que se desechen rápida-nlente (de <<destrucción creativu lo califican al-gunos autores). Y ello es un hecho de la vidareal que mientras no cambie -si cambia alsúnJra-. debemos tomar como un dato. al que no. te-nemos que acostumbrar, pero acaso no demasia-Jo: es un hecho que tenemos que comprender yqulza aceptar pero no paslvamente, al menos,1,:dc rl punto dc vista anolitit o.

Todo lo anterior tiene sin duda alsunos as-pecros positivos: por ejemplo. el disfrute cada\ ez mayor para aquellos que pueden acceder alos bienes y servicios, que no son todos. Es bien'abido que la distribución de los bienes v de lar iqueza en e i mundo. y especia lmente eni ienaspirrtes de é1, es perfectamente deplorable. Eso.Í. los bienes para el conjunto son cada vez más!'n número, diversidad, y quizás calidad (Tv co-It¡r. DVD, MP3, CD Rom, viajes al extranjero,rlimentos múltiples y variados, ropa sofisticada,.rutomóviles, viajes a la Luna, armamento nu-ilear. etc., en una lista interminable).

La Economía trata de la forma en que ouedeaconsejar sobre la mejor lorma de ujil izar losrecursos escasos susceptibles de usos alter-nativos, de modo que se satisfagan el mayornúme¡o de necesidades posibles, básicas osimplemgnte sentidas.

t r ' l

Sin embargo, aceptado el planteamiento ante-rior, y desde un punto de vista analítico que esel que nos ocupa aquí, se sigue q¿l¿ tales deseosy necesidades presionan sobre los recursos es-casos con relación a aquellos deseos ilimita-dos. Lo que cuentan son los totales; los deseosde unas o varias economías domésticas seríanfácilmente satisfechos; o de pueblos, regiones oincluso acaso países, pero el total mundial esclaramente insuficiente de algún modo, para unestado dado de la técnica y los recursos dispo-nibles y aquellos deseos desmesurados. Apartede que esas unidades individuales tampoco po-seen 1o suficiente con relación a sus deseos par-ticulares.

Pero ¿qué son los recursos? ¿con qué recur-sos cuenta un país? ¿y el mundo, el planeta enque vivimos?. Naturalmente ello dependerá dela unidad bajo estudio, o el problema que anali-cemos. Se suele decir a este nivel de análisis.que tres son los grandes tipos de recursos a,9re-gados:

a) La tierra, que incluye no sólo la tierra ensentido estricto, sino que engloba tanto lastierras nisticas y urbanas como los ¡ecur-sos marinos y mineros, el espacio aéreo,los recursos hidráulicos (agua), etc.

b) El trabajo, referido no tanto a la pobla-ción total, como la población en edad ydisposición de trabajar (es decir, desconta-dos los jubilados, los niiios en edad escolarobligatoria, los enfermos y los que no de,sean trabajar que no se pueden considerarrecursos actlvos en este caso). Se consi-dera tanto en su aspecto manual comomental.

c) El capital físico, que son bienes de capitalproducidos y que sirven para produtir asu vez; se refiere a las máquinas, herra-mrentas! automóviles, muchos bienes du-raderos en general, etc.

. . l . l rr ' . ai : : : i ra-,: : t : i , ! , : . ; í la r- i 21

Page 14: Principios de Microeconomia - Parte1

l-

d) El .factor empresarial, la capacidad y eltalento para crear, desarrollar y mantenerun negocio (que a veces no se distinguedel factor trabajo).

El primero, o los factores más desagregadosque incluye, es tn recurso natural, heredado dela naturalgza. El segundo es un recurso especial,porque se refiere a seres humanos, por tanto conrasgos delicados desde un punto de vista social,es decir, su tratamiento no puede ser igual al deuna mercancía cualquiera intercambiada en elmercado (por ejemplo, no hay mercados de es-clavos, y tampoco se debe considerar quizá a lanatalidad de los individuos como una mercan-cía producida másr). El tercero lo hemos dehnidocomo producido. En el Tema 10 se profundizaráen esas cuestlones.

Debemos también distinguir entre los recur-sos que son estrictamente escasos y los que sonreproducibles. Es preciso insistir en que en rea-Iidad los mismos son mtry heterogéneos y qu.epor tanto e\tas son pura,s calegorías con(epluo-les muy agregadas- E)tislen por tanto muchos ti-pos de tierra, muchos de capital y muchos detrabajo y no corviene olvidarlo.

Un país, o el planeta si se prefiere, cuenta enun momento del tiempo con una cantidad dada detodos ellos, un stock. Los individuos se suponeninsatiables, ya que por más que disponga siem-pre se desea más de todos los bienes.

Por tanto, para repetir, si se definen como ne-cesidades las no básicas, es decir, los deseos delujos por encima de las necesidades para la su-pervivencia, ciertamente estas son ilimitadas,mientras que los medios para producirlas son li-mitados en algunos sentidos que se precisaránmás tarde. La escasez así definida por ciertomuy en el sentido contrario al uso común-, qui-zá no casualmente que representa una posiciónparadigmática en la profesión, en el sentido de

generalmente aceptada, esconde en la prácticauna.filosofía consumista que lleva de forma in-mediafa a una política despilfarradora de re-cursos sino estrictamente escasos no ilimitados;y quizás a una discusión de la sostenibilidad ono del crecimiento económico actual de los paí-ses para el conjunto de los del mundo.

Aunque esta posición práctica se ha matizadoalgo en tiempos recientes desde muchas instan-cias tanto privadas como públicas, debido a uncieÍo agotamiento de los recursos naturales, la re-alidad sigue siendo tenazmente consumista-de-rrochadora. Incluso peor, todo ello se ha asociadoa unas desigualdades difíci1es de justificar, espe-cialmente a nivel mundial. Ello requiere cuandomenos dos comentarios adicionales: a) de un ladola curiosa pasividad, inercial, y conservadora delstatu-quo social y político, con que 1os econo-mistas -pafe integrantes de aquel- resignada-mente aceptan sin comentario, y con honrosasexcepciones, estas convenciones sociales, como side rn onlen natural se fratase, que posiblementeesconde una lógica capitalista pura, algo trasno-chada, como señala la más reciente preocupaciónmedioambiental, y; b) la práctica gubemamentalque es en todo lugar bastanfe consentidora, e¡general, con dicha lógica, que otorga al mecanis-mo de mercado en teoria el prolagoni\mo casiabsoluto (para bien o para mal) de \a asignaciónde los recursos a lo largo del tiempo.

l rnpl icat iones de l : r def in ic i í l l i : r r t ter iur .Aceptando lo anterior podemos pensar en dostipos de situaciones de interés. Una, preguntarnospor el precio de las mercancías o bienes escasos,digamos las pinturas de un pintor fallecido o lasmonedas raras (del lmperio Romano. por ejem-plo); ambas son obviamente escasas en sentidoesü:icto. es decir. forman un stock limitado cual-quiera que sea su volumen y no se puede ampliar(o dicho de otro modo, no son reproducibles).

r.1. (I

un cl¡É

ser¡ |s¡¡ efcdEs¡ád

de s¡, F&bü

tr¡YY

I Las cuestiones demográficas desde hace más de cien años se tratan separadamente de la Economía, po¡ más que estén

¡elacionadas con ella.

22 PRiN CIP iOS DE M]CROECONOMIA

Page 15: Principios de Microeconomia - Parte1

R

Denl¡rdas

t : ura 1.1. Oferta di ida.

' , un c¿rso de una ofelta dada frente a una,¡t(la determirl¿da, Ia que sea. por lo que la- r.r sería pasiva. aunque obviamente déiaría: .Li etec[o. dada su fijcza. linlitación o es_

Está claro en este caso que la determina.ri sLr preclo estaría dominada por la cliná-.[. la der¡anda dc ese bien (Figura L I ).

' :.roblema económico central es que los re'.(r\ son escasos respecto a los deseos querlinitados. generando con ellos ¿s¿.ai¿;' : t r t ¡ .

- .rrcpia en general en la literatura tambjén.. r¡t poco ntccánica¡nente. que las tles gran_.. \tloltcs cconínricas derivadas del puntor . !'s decir.. de la neccsidad tle elcgir. son:

t - t ¡ ¡ ' : ¡u , 'J t r , i r - ' . quc b ic l rer . .c lv ic ior o'n¡ lcancías produci r . y c l t coÍ lsecuencr¿r

. i . . rdr . l r ncr 'cr idrd r lc e lce i r _ . qur . lorroduClr.

2. ¿Cónto produtírlo? coll qué técnicas ométodos de producción, de enh.e los disponib¡es técnicanlente:

3. ¡,Para quién producir,l o desde otro ángulo, ¿cómo dividir el producto neto soclaigenerado, cntre aquellos que han colabo_rado -o no colaborado cn algunos casos.pero_ cou algún tipo de derecho a ello_,cn ei proceso productivo.

¡

Sin embargo. aquí la literatura paradójica_mente d¿ndo el prolagonismo a la érnpresa. sernsrste en algo que sin carecer de alguni irnpor-tancla es bastante triviali cnfatizar cn el cómoproducirio. para añadir a renglón seguido quecon tas me1ores técnicas, lo que es al_eo Vacuó yloJmal, porque con excepciones ntenores en al_gun senttdo todos los agentes productivos utilizan técnicas eficaces y cl icientes (por lo menosen las sociedades avanzadas ).

Las tres cuestiones tunil¿lnentaler pitrir-iln cr.altemativamcnte: ¡,t¡ué ¡trotlttt,ir.. t.rjtt¡t ¡ ¿li t| ¡ i | ¡ttt tlo pfodu( iL lo, tonto t onsunt i r lo_uhr¡ r rur lo . , ¡t t t

. t ! t o l t t t ( i t ¡ r C t t i t 1 , , . ) e s l a \ C U C \ l i ñ | | e \ I n t c _

rrelacronando de nlanera compleja y no cn unrazonamtento unidireccional.

Todas estas cuestiones separaoamente y enLo¡ t lun l ¡ drn lugur i - r pJr tc \ e5pccia l iTudls áe lareor i i t Lcunurn jca. r lgun¡ \ c cs le l ibru ¡ o t ra.

cn lo \ r imi lJre. th . vac r .oec,¡nontra.Pero la consicleración incluso ntroductoria

de estas cuestiones esconde en las sociedaclesn:odernar .orcanjzrd i rs un objet i \ o Jc Bieneslar ,quc I lcv¡ l l lmcd i ¡ l l lnente ¡ o lor ! i l r r rn papel _ rdefinrr más tarcie- al S¿..1.r/. p filiru y ^'la, pn-Iítica públicas (y la política económtcajpara con_segurrlo. Aunque este tema de inLert,encton y re-gulaciór pública del juego econórrico privado. ,c puede ¡ s( .debc mrt i , / i - r r . . ¡ por e l lo lu , l i lc l i_n l o 5 I l c r n i r \ f l y l t r . s e p u e d e r a n r b i e n ¡ . edebc detr r qu izr p l rntcado derde c l pr inc ip io.Aunque obviamente debe señalarse también, incluso a este nivel, que no sólo cabe reparar ypensar tan exclusivamente en Ios fallos iel mel_

23

Cur¡rd¿,1

Page 16: Principios de Microeconomia - Parte1

cado, qne dan paso a una cierta intervención pú-blica gubemamental corrigiendo los defectos delfuncionamiento de los agentes económicos pri-vados, sino también y ciertamente en los fallospúblicos quLe manz:an la bondad universal de estaacción correctora.

Aceptados los planteamientos anteriores lacuestión desemboca de forma inmediata en unproblema de elección, que queda impuesto a lasociedad que lo analice y que da lugar, desde elprimer momento, a la consideración del concep-fo de coste de oportunidad deftnido como la me-jor alternath)a perdida, es decir, la obtenciónpor parte de la sociedad de un paquete de nece-sidades necesa¡iamente implica la renuncia a ohoconjunto de ellas.

Las fes cuestiones fundamentales de la eco-nomía son: ¿qué producir?, ¿cómo producir?y ¿para quién producir?

1.4. LA CURVA DE POSIBILIDADESDE PRODUCCION

Si el problema consiste en que los recumosson escasos respecto de las necesidades sentidas(incluyendo los deseos), es evidente qtte tendre.mos que aleglr. Podremos dedicar, es deci¡, elpaís, el mundo o la unidad de que se trate en elanálisis, podrá elegir dedicar sus recu$os, tie-rra, trabajo y capital, a producir unos bienes oservicios u otros. Por ello se debe elegir. Cuantode uno y cuanto de los otros.

Supongamos que se produjese en, digamosEspaña, tan sólo dos bienes o, mejor si se prefie-re, dos tipos de bienes: pantalones vaqueros,como ejemplo y categoría analítica meramenteconceptual e ilustrativa de:

. Bienes d.e consumo, que son los que atien-den las necesidades últimas de consumo,es decir la satisfacción de gste tiDo de ne-

cesidades; no requieren una transformaciónulterior para satisfacer aquellas.

. Y satélites artificiales como categoía debienes de producción, como ejemplo y ca-tegoía analítica, de bienes de capital.

El país podfa dedicar hipotéticamente todoslos recursos, ioda la tierra, todo el trabajo y todo elcapital, a producir sólo pantalones vaqueros, sólosatélites o combinaciones de cantidades de losdos tipos. En la Figura 1.2 medimos en cada ejede coordenadas respectivamente unidades de pan-talones y satélites; España podría obtener respec-tivamente en cada uno de los dos casos, los va-queros en ordenadas y los satélites en abscisas enlas cantidades totales A y E, en los casos extremoso, B, C y D en los casos de combinaciones de losdos, y los infinitos puntos intemedios suponiendoque fu esen divisibles infinitesimalmente.

Ello seía así si dedicara todos sus recursos t¿lcomo hemos señalado ya, y además los utilizarade la mejor manera posible tecnológicamente ha-blando. Podría producir como máximo la canti-dad representada por A, por E, o las combina-ciones inte¡medias, C, la B más cercana a A, quesupone producir muchos vaqueros y pocos saté-

F¡gura 1.2. Cuma de posibilidadcs de producción ocurva de transformacün. Representa las combinacio-nes productivas más eficientes utilizando todos losfecursos,

24 PRrNcrPlos DE MtcRoEcoNoMíA

?e

Satélit€s

Page 17: Principios de Microeconomia - Parte1

o la D, que impüca lo contrario, muchos sa-y pocos pantalones. A esta curva así cons-se la llama frontera de posibilidndes de

o curva de transformación, porquelo máximo que podría producirse en las

descritas.Pero la elección está implícita en la curva,

para producir más de uno de los bienes esque se reduzca la cantidad producida

otro, porque los recursos para hacerlo estránes decir, son escasos; o lo que es lo mis-

se manifiesta el decrecimiento de la misma.su pendiente negativa, que supone costes de

idad. Estos son crst¿s reales, es deci,en unídades fisicas de los bienes que

analizando (no en dinero, ya que no he-hablado de dinero todavía, entre otras cosas

no lo necesitábamos ahora oue estamosde producción expresada en térmrnos

¿Qué queremos decir, qué dicen los econo-cuando hablan de costes? (véase Tema 5)

sobre todo, cuando dicen ¿costes de oportuni-Pues que como no podemos producir todos

bienes que queremos, estamos limitados o res-o constreñidos por los recursos disponi-

tenemos que elegir algo, y en consecuenciaque renuncim a algo por ello; prescindir

oÍo u otros bienes o se¡vicios. Paes a la se-mejor alta nntiva, a la que renunaamos, o

dejamos de producir u obtener, a esollamamos costes de oportunidad. Pot ejemplo,ooste real de leer el lector o lectora en estos

este tema de Economía ¡rna forma deión en capital humana- seía la mejor (se-mejor en relación a la analizada) a.ltemativa

lo que podría haber hecho en ese tiempoha hecho; digamos estudiar francés, esquiar,

la televisión, tomar el sol o ir de compms, etc.dedicado un recurso escaso (aunque acaso

parte del tema y podría haber hecho otras cosas;pues lo que el lector o lectora considere su mejoraltemativa perdida es su coste de opofunidad (nó-tese que en este caso individual, en este ejernplo,eI tema tiene en componente subjetivo).

El problema económico básico de la socie-dad, por tanto, puede representarse por la lla-mada frontera de posibilidades de producción(también llamada como veremos más tarde cur-va de transformación) de la economía en estecaso, la línea ABCDE de la Figura 1.2 anfe-rior, que representa los infinitos puntos, o com-binaciones de cantidades potencialmente pro-ducidas de bienes, un menú, un espectro deposibilidades de producción para la sociedaden cuestión, Si partiendo de B se decide produ-cir algunos satélites adicionales, o algunos sise parte de cero, la pendiente negativa (curvadeoeciente) indica que para producir algo más,digamos pasar de B a C, de satélites es necesa-rio dejar de producir un cierto número de pan-talones. Si la <<curvo>z es una recta (Figura 1.3),

Satéliúes

Figura 1.3. Costes de oportuni.dad constantes. Sílafiontera de posibilidades de producción es una línearecta, la proporción entre las producciones de vaque-ros y satélites de pasar de A a B es igual que la de ha-cer lodeCaD.no le parezca), que es su /i¿ntpo en leer esta

¡ En este curso y siguiendo la tradición, utilizaremos el témino curva paÉ desiguar indistintamente tanto las curvas enest¡icto como las rcctas, sin pérdida de generalidad. El conúexto será cla¡ificador.

EL I\4ARCO ECONÓMICO Y EMPRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BÁSICOS 25

Page 18: Principios de Microeconomia - Parte1

el cociente, es decir, la pendiente de la rnisma,mide el coste de oportunidad en términos depantalones de producir satélites; de hecho deproducir rn satólite adicional, en este caso uncoste de oportunidad constante. Naturalmente,el ratio inverso lo mide en términos de producirun pantalón adicional.

Desde un punto de vista más técnico fo¡malla pendiente también mide \a tasa de transJor-mución, digamos de pantalones por satélites; in-dica la cantidad de uno de los dos bienes quetiene que disminuir (aumentar) para que aumen-te (disminuya) una unidad del otro.

. Como la pentlienle es u)nstante en el casotle una línea recto, tanto el coste de oporttuirlad tontl la fasa de transJbrnutc'iónson constontes, con independencia de cuáles sean las cantidades de ambos bienes deque se paÍa, cual el punto de la recta; natu-ralmente dentro de los límites impuestospor los extremos de la misma.

. En caso de que la frontera sea, por ejemplo,cónt:uva hacia el origen como era en la Fi-gura 1.2 (o conrexa, como podría ser al-ternativamente, Figura I .4), ello implicaque el número de unidades adicionales de

es decir, pantalones, necesarios para obte-ner una unidad adicional de r,, satélites, escada vez menor, a medida que nos move-rnos -la sociedad se mueve hacia la dere-cha, digamos desde A, es decir, a medidaque aumentamos la producción de satélites.Véase también Tema 3.En la Figura 1.4 el punto E no es alcanza-ble por la sociedad dados sus recursos yconocimientos técnicos. El punto 1, en cam-bio, significa que no se han utilizado todoslos recursos disponibles. Ello se cumplepara todas l rs curra. de t rans[ormación.para puntos de tuera al conjunto detenni-nado por las curvas y los ejes, tipo E; lomismo para ellos puntos tipo 1).La Figura I .5 ilustra el efecto de contar conmás recursos y/o experimentar progresotétnico en sus conocimientos tecnológicosy productivos u organizativos.

Hemos trabajado con tan sólo dos bienes,pero en realidad una sociedad moderna determi-na su elección probablemente sobre decenas demillones de ellos. En tres o más dimensiones ysin suponer suavitlad de las cun,as (permitir

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F¡gura 1.4. Frontera de posibilidades de producciónconvexa respecto al origen. El punto -E no es alcanzable para la sociedad. I sí o es, pero ello no es eficiente.

26

Figura 1.5. Frontera de posibil idades de produccióny progreso técnico y/o aumento de las dotaciones defactores.

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Page 19: Principios de Microeconomia - Parte1

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puntos quebrados o discontinuidades matemáti-cas), la frontera de posibilidades de producciónseía muy inegular.

A la segunda mejor altemativa producida, ala que se renuncia (se deja de producir) porproducir otra, se ia llama coste de oportuni-dad. Constituye un coste real, es decir, ex-presado en unidades físicas.

, r '::'¡.li'-- La frontera de posibilidades deproducción del epígrafe anterior ofrece un es-p€ctro de infinitos puntos entre los que la socie-dad puede elegir empleando todos los recursosde que dispone y usándolos eficientemente entrelas altemativas productivas posibles. Pero, encualquier momento para cualquier período, espreciso que la sociedad concrete 1a elección endigamos un punto. Y la cuestión es ¿cómo sedetermina 1a composición del produclo social?es decir, cuanto se produce de un bien y cuantodel otro, en este caso de tan sólo dos (o dosgrandes categorías). La respuesta a esta pregun-¡a es una parte de los llamados sistemas econó-nltcos.

A lo largo de la Historia de la Humanidad hahabido varios tipos de ellos, enfe los mismos Iacostumbre o la planificación central . Sin emba¡-go, hoy y por el momento mientras no se lnventeotro, ya sólo uno e s viable'. el sistema mercado . Yal estudio del mercado, como institución, utili-zada por doquier, para la asignación de recursosescasos desde diversas perspectivas vamos a de-dicar este libro prácticamente entero.

1 , . . , ' ¡ f i f ; , i , - l i r i r r i tJ ! : , -, . l .. i ¡!,]- i. l i ,; l f l ,,:.Fi.-!r 'r ' i i i i :-¡ ' ' ; ; :

f i 'r,.¡tn6: t: iJ,r! ' !, lr i l .-¡ 1. : .¿ :-i ' . 'r ¡ ' ¡, i :::....

La teoría económica dominante, es decir, gene-

ralmente aceptada, de 1a que nos estamos ocu-pando, mantiene que en un sistema de mercado

los consumidores deciden el qué producir; por-que mediante sus demandas vofan por unos bie-nes (haciendo subir 1os precios de los mismos) ydesestimulan la producción de otros al no de-mandarlos (haciendo caer los suyos). Los pre-cios por tanto constituyen en esa visión unos irz-dicadores de escasez relativa y son seiales queel mercado envía a las empresas, indicando quebienes producir y cuáles no. El dinamismo cen-Íal en este planteamiento 10 detentan claramentelos consumidores. es decir, el lado de la demandadel mercado de bienes. Las empresas o el lado dela oferta del mercado de bienes, son indiferentesentre producir unos bienes u otros, ya que tansólo se guían por sus objetivos, digamos obtenerlos beneficios más elevados posibles, pero aten-diendo a 1as indicaciones o señales que les enví-an los consumidores; es decir, su papel es muchomás pasivo. Naturaimente el producir unos bie-nes u otros, en las cuantías que conesponda, im-plica dada la técnica o tecnología, un uso de re-cursos escasos.

El para quién producir es parte del mismoproceso visto, desde otro ángulo. La distribu-ción del producto neto una vez descontado lonecesario para producirlo, queda determinadaasí en los mercados de factores o recursos, s1son agregados, de tierra, trabajo, capital y factofempresarial (Tema 10). Unos bienes u otros yunas técnicas u otras, determinan un uso más omenos intensivo, de los recursos escasos. Entérminos físicos su uso o no uso, o su uso parcialqueda determinadol las remuneraciones corres-pondientes a cada uno de los tipos de recursosen valor, es decir, expresadas en unidades mo-netarias, denominados respeclivamenfe, re ntasde la tierra y alquileres, sueldos y salarios, in-tereses y beneficios empresariales, establecenla participación de los mismos en el valor de laproducción.

Se configuran así los llamados/ujos circula-res de la renta. Si sólo se consideran las unida-des privadas, consumidores y empresas; el siguiente esquema reproduce la situación:

i l \ i iA i i l l - _

\ l r i \ r i i - , - r \ . r ! i ' , . , .1.1.: l ' i i \ ! - : . f i l l i s-; . . l lai 27

Page 20: Principios de Microeconomia - Parte1

Srlario - l | r tcÉsRcnl¡ <-

Flujo circulal dc la relta privado. Llos sectores.

Se supone que en \os ntercados dt ltrotltrtltts,o de bienes y servicios finales, los consumidorcsclemancllrán bicnes y sewicios a las emprcsascon una contraprestación monetaria (y ac¡uellaslcs ofi-ecen bienes y sen'icios a los primeros) (Te-m¿rs 3 \' :1. v 6 a 9); y cn los ntercotlr.rs tle ltrttttrcr. los corrsurnicloLes ofrecen los recutsos quc

|(r\ce11 (lo\ tlive|sos ti¡.ros de tierras, trabajos yirrpitulc': t r Il: crnptesas los demandatátt (Tema

lr)): \ .jLrnto con L-L fxctor empt csu ial poseído por.'l l.L. lL'r ur.rin a cabo ll producción. siendo l¿t cotl-tr.rl]|l11i(la hs lcnrunelaciones citadas antes (rentasclc lr tierra alc¡uileles, suelclos y salarios. intereses). Bajo ciertos supuestos habitualcs los I' lujosde la parte dc arriba y los de abajo son iguales.

Cuando se considel ¿r el papel del Sector Público el juego cconómico se triangulariza. y di-cho agcnte delrae rlel llujo. reduciéndolo, fun-damentalmenle los diversos tipos dc l/?¡/r11¿sl¿rJque constitu.ven su principal fuente de ingrcsoscn cualcluier país dcl mundo, como contraprestación ¡r su función reguladora y organizadora delas coucliciones cconómic¿ts y socialcs que cons-

2a

tituven cl canpo y parte de las reglas del juegopor clonde cliscurre la ¿rctividatl económica. Yclonde üir'¿¿ r¿ al 11ujo de gastos. el Gdsto Público. 1o clue añade al misnto ímpetu y actividadsegún el esqucma de la página siguientc (véasetambién Tema I2) .

Sin erlbargo. debe reparase en que este luegono es simótrico en importanciir, tal como obser-vamos ¿l principio del epígrafe. El protagonismotle los consumidores. siempre de acuerdo con lateoría. es panoriinrico. De hecho el dinamismodel proceso recae completamente en manos delos consumidores y cl ptoceso de asignación dere cursos se convierte en wa avenicla e n uno solatliret:r' iótt, dcsde las prefetencias de los consu-midores a Los recursos escasos pasando por unpapel pasivo de las empresas y donde el SectorPúbtico ponc algunas intewenciones. regulacio-ncs y el proceso de impuestos-gastos descrito.

,,Es la descripción anterior una representación adecuada, o totalmente adecuada a ellos, delos heclros del muntio moderno?. O dicho de otromodo ¿,funciona así el mundo económico actual'J

Page 21: Principios de Microeconomia - Parte1

--+ frrecio

Flujo circular incluyendo el Sector híblico; tres sectores.

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. \ l

+-\

I

quizás una mera parábola o visión?. La res-es no. o no exactamente. Casi podía de-

que 1o contrario de algún modo, muchases decir, funciona casi a la manera inver-

Una consideración libre de prejuicios señalaal menos en las economías de referencia, v

en todas. el dinamismo hov lo d.e-las empresas. Espcialmente en los merca-

monopolizados y oligopoüzados. Claro queuna cierta interacción con los demandantes,estos son claramente pasivos. Aún más, las

vía publicidad, como señalábamos aldel tema, influyen claramente en qué yse demanda; y se crean continuamentees que no lo son realmente. Son laslas que deciden en realidad o en gran

al menos qué, cuiínto, y cómo producir, yo influyen en para quién producir (Te-

Naturalmente estas son descripciones muyestilizadas y no reflejan las complejidades e in-terrelaciones del mundo económico modemo.Pero aquí se trata de esboza¡ la visión y plantea-miento básico que condiciona los desarrollosmás concretos y específicos que aparecerán enlos temas siguientes. Sin embargo, una vez est¿-blecida esta sugerencia de línea altemativa se-guiremos el enfoque tradicional de soberanía delconsumidor, sin pérdida de generalidad.

1.6. AGENTES ECONOMICOS.PRECIOS, MERCADOV EOUILIBRIO

E¡trna economía de mercado mixm, como la es-bozada antes, caracterizaLda por básicamente lapropiednd privada de los medios de produccíón8y9 ) .

EL MARCO ECONÓMICO Y EMPRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BÁSICOS 29

)rr'----...--fT¡ab¿jo - Capital -

\ Sala¡io - InteÉs -'\\ Renta +- _/

Page 22: Principios de Microeconomia - Parte1

(el capital productivo), pero con alguna propiedadpública y con cierta intervención reguladora delEstado, a veces en adelante Gobiemo, por como-didad, como la que caracteriza a la economía es-pañola o a otras sociedades de nuestro entomo enla que estamos insertos, digamos las de la UniónEuropea, es preciso distinguir los conceptos de:

Los principales del jue-go económico son para la teoía que desarrollamos:

Los consumi.dores que ejercen el lado de lademanda en los mercados de bienes y ser-vicios finales (directamente consumibles)y la oferta en los mercados de facto¡es de laproducción, en el típico flujo circular de larenta discutido antes.

Nótese que el suyo es un papel daal, ya quesu tarea es encontrar un plan de acción que hagacompatibles su deseos, acaso maximizar algúníndice de bienestar individual, con las restriccio-nes que les afectan, especialmente sus disponibilidades dc renta, y riqueza quizás, para el gastorl ion¡¿p¡o se amplía en el Tema 3). Debemos

-je.l.rr cl¿ro incluso a cste nivel analítico, que es',,. qr) nr-.csanamente son individuos, sino que:u.(len \cr r de hecho ser:in -para la teoría y:.¡1-irllmcnte para los trabajos empíricos- fa-ru lr¡.. !c'ncralmente denominadas economías

. Lus empresas, kts productores,los agentesJc protlu,, ión y olerta. a quienes corres-ponde la organización de la producción, y latensión de los recursos escasos; se les atri-buye el lado de la oferta en los mercados dehiettes y servicios finales,y, también en unpapel dual, la demanda en los mercados deJáctores productivos (Tema 5).

Sus objetivos son múltiples en una economíamodema, pero por simplificación podría decirse

30

que tratan de maximizar en algún indicador oindicadore: . d igamos benel ic ios. ingresos. ventas, etc., en algún sentido por precisar más tarde(Temas 6 a l3), o, al menos, acercarse lo másposible a un compuesto ponderado de aquellosíndices u oÍos como crecimiento de la empresa,posición en el mercado, etc.

Las dos categorías anteriores forman juntas loque se denomina usualmente el J¿cl, r privado deuna economía; a él 1e corresponde en principio eldinamismo principal de la actuación económicaen una economía capitalista, con el concurso, elmarco y en parte ciertas reglas del juego estable-cidas por el Secto r Público-

Pese a suaparente sencillez el concepto de mercado es unextremadamente ambiguo si no se matiza. Pro-bablemente existen varios conceptos de mercado,y eventualmente una idea más general que losengloba por acumulación.

l.o A veces se define el mercado de un bieno servicio como el área dentro del cualinteraccionan los demandantes y los ofe-rentes; sin mayor precisión por el mo-mento. Como concepto geográfico oespacial, en este caso, su amplitud dependerá de las áreas que se quieran cubrir,lo que en ocasiones dependerá del pro-blema bajo análisis. En el caso de la teo-r ía pura. la cue\ t ión aca\o no rev is la ma-yor problema, en principio, aunque comose observará más tarde, un mayor gradode concreción se¡ía adecuado en aras a laclaridad. Sin embargo, la cuestión es muyabierta, por ejemplo, desde un punto devista empírico. En ocasiones, se defineun o él mercado de factores agregado (tie-rra, trabajo, capital) como el área dentrode Ia cual el Jauor en cuestión se des-plaza enfre usos alternatfuos, dependien-do la amplitud del mismo del períodoconsiderado; cuanto más largo sea aquel,

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Se han sugericomo una Bdónco t Hicksl{.\mazon. B¡demament.. t:cenas de mill10.000 categ<tente r úril c:. t )s tes de n le ltaja de que ncrólo se puede5ume tienlfx)\e nalmenlesacclones toI¡

Page 23: Principios de Microeconomia - Parte1

rrás lo será el mercado, lo que fuerza acxplicitar el tiempo en el análisis, a dife-lencia de los modelos generales al uso,que normalmente son muy estálicos y serefieren a un momento clel tiempo. ElpLurto anteflor pone de ntaniliesto que enotras ocaslones, por tanto, el concepto demercado irnplica tienpo, en rcalidad, más?Ue (Sptt(.to.En oc ls ioncr la l i leratura econotn¡( .u ut ¡ilza -el concepto de me¡cado como unlugar r:ont:rato-, digamos una Bolsa deValores o una lonja dc pescado, una subasta de arte, etc.Sc define el mercado a veccs como, el(conjunto de los actos de compra y ventade una mercancía o servicio en un peíodoJ( l i (n lpo dctcrmin¡do. . . En ot r ls oc ls iU-nes. y n1ás recientemente, se le ha llegadoa ilustrar <<como si> fuet-a un orrlenadorque centralizaría las informaciones rete-fcntes a demandas y ofertas por parle cleclenanclantes y oferentcs para muchosmercados concretos y p¿rticipanles en el

mismo (el ejemplo de las Bolsas de Valo-res mundiales de nuevo hace al caso). Esobvio, que esta ap¡oximación es, o deberíaser -al ser especialmente inviable en lapráctica al menos en muchos años-, tansólo una metáfora o un ideal totalmenter'onceplual pra muchos bienes.

E¡ t lodu cr \o no parcce reaf i r ta penrar quqlos demandantes últimos, las economías domés-ticas, entran en contacto directo con los produc-fores últimos o empresas, cn la mayor parte delos casos. Pero, ¿si no es con ellos, con quién?.Parece más sensato pensar en una cadena del si-guiente tipo: productor, mayorista, minorista,consumidor. Sin ernbargo, hemos ido tan lejos dela idea original de una relación directa entre de-mandantes y productores, que la interacción di_recta de las dcmandaclas y of¿rtas, en el mejor delos casos ha perdido fuerza.

El concepto c leprecio es completamente relativo. Cuando schubla t le l prec iu de un h ien o, .erv¡c io u rner .

NUEVAS FORMAS DE MERCADO

:c han sugerido diversas concepciones de en que consiste en realidad un mercatlo. Los clásicos'r)rno una Borsa de valores (warras), un lonja de pescado (Marshal) o un <<día de mercado>> te-''rico (Hicks), la negociación de <<uno frente a oño>, o un menú de precios fijo no negociabie\mazon, Bames and Noble, con su amplia gama de libros, etc.), pero incluso recienil y mo-

'le rnamente.también e-Bay (una suerte de subasta por Internet). Esia última forma reúne a de-'enas de millones de usuarios, cada día con docé millones áe objeos of'recidos en cerca de11) 000 categoías' con tuertes efectos-red, es decir, cuántos más individuos participen más po,:''nre y útil es el sistema. Esta última forma de melcado tiene además la ventaji de que reduceios)\tes de tnenú, es decir, de información (rr a las tienclas a recabar información.¡, con la desven-:'irr dc que no se ve físicamente, <por.trentro> er objeto -piénsese por ejemplo, en un ribro que'L)lo se puede ver de manera muy rimitada-; asimismo páti.ipo..n una subasta también con-''ne tiempo y nervios, adicionalmente a que no se sabeil preóio hasta er final. Debe recordar-.'' tinalmente que cstos mercacros.representan una fracción rnuy pequeña de los mercados y tran-..rcciones totales del sistema tradicional de mercaclo. Su impaló real luturo está por ver.

31

Page 24: Principios de Microeconomia - Parte1

cancía, en realidad es un precio ¿en términos de

qué?. En una economía modema y real, los pre-

cios de las mercancías en general, se denomi-nan en términos de unidades monetarias abs-

tractas, euros, libras esterlinas, dólares, yenes'

etc.: y estas entre sí o si se consideran inde-pendientemente, al menos en teoría, en térmi-nos de algún contenido, en su día una cantidadde oro, etc. Luego se expresan siempre en tér-minos de a\go. Sin embargo, a los efectos de la\es\i\, s \\g\ss 9\ ñ ñs{g\s 9\ 9\ q\e \s

exista dinero explícito ----como una simplifica-c ión. o por o l ra causa- . no es necesar io. oconveniente. acudir al dinero en el sentido co-nocido. De hecho, siguiendo a la literatura exis-tente, durante muchos temas hablaremos decuestiones microeconómicas sin alusión algunaal dinero en el sentido conocido, trabajandoimplícita o explícitamente con una economíade trueque en la que los precios se expresaráncn ttnidadcs tísicas de unos menancíos res-pe(to de otros.

En una economía con dos bienes, servicios omercancías. como simplificación ilustrativa,eristen doc preclbs monetarios y nn precio rela-,t¡.r. qlE liene dos versiones, el del bien uno enrtmi¡tos del dos- o el del dos en términos delrr. qlr es su inverso, y por ello el mismo pre-cir ko esc precios no son sino relaciones de*rctú¡o físicas de las mercancías, en unad drcptual de trueque en la que noFirr fuo. De hecho si es p,/€/p,/€ ello im-

fliap/p..

Dos deliniciones de equilibrio. Es convenientetambiel una digresión previa acerca del concep-to de equilibrio utilizado en la teoría neoclásicade los precios y la asignación de recursos, que esla que nos va a ocupar casi en exclusiva en estecurso, especialmente cuando nos refiramos a 1osequilibrios de y en los mercados, y a los equili-brios de los agentes económicos, consumidores yempresas dentro de ellos. En estas notas se utilizaran imolícitamente. cuando no se afirme otra

cosa, las dos srguientes defrniciones de equ i-

brio:

1.' Aquella situación en la que los agentes

económicos, consumidores, gmpresas y

acaso el Sector Público, ro tienen inc?n-

livo a desPlazarse de ella-2.' Aquella situación caracterizada por la

igualación de Ia oferta y Ia demanda deuno vanos mercados.

Ambas son bastantes convencionales peroalgo engañosas. Por ejemplo, conviene aclarardesde el principio. y retenerlo siempre in men-l¿, que la segunda puede rza ser exactamente unequilibrio en el sentido de la primera; en efec-to, puerle haber igualdad entre oferta y de-mLnclct cle mercatlo y los agentes que están de-trás de ellas no estar en equilibrio, en elsentido de tener incentivo a desplazarse de di-cha situación aparentemente de equilibrio en elprimer sentido.

Bastará que sus objetivos, sean utilidades sison consumidores, y sobre todo y más clara-mente beneficios si son empresas, difieran delos de otros agentes, para que la situación nosea de reposo, pese a que se vacíe el mercado,es decir, se iguale la oferta a la demanda. Entna economía de mercado capitalista con pro-piedad privada de los medios de producción yen la que el objetivo de los agentes sea la maxi-mización de sus objetivos (digamos beneficio),las empresas se moverán de los sectores conuna menor rentabilidad a los que la tengan ma-yor; y sólo por casualidad, de los precios demercado de igualación de las ofertas y las de-mandas en los mercados, resultarán unas tasasde rentabilidad -incluidos todos los ajustes,por incertidumbre, riesgo y conocimiento delsector, etc. , como ratio de los beneficios alcapital invertido, que sean iguales entre los di-versos sectores.

Dicho de otro modo, conviene reparar en queel equilibrio que vamos a fratar, en general, y a

¡m¡rúagcnrc ad

púHica'r€cord- Ilas de rqmedian¡

para Iatorn., ¡n¡'i

S€ inclecooficorm I

& emfesrlloa crcs¡ll

ión cbr&l Secrc ñ

¡em¡qllr discusi¡h r

32 PRrNcrPros DE rvrcRoEcor\oMrA

Page 25: Principios de Microeconomia - Parte1

\. lrrgo de los siguientes temas, en el segundo de\-* .cntidos anteriores, es un equilibrio exclusi-r¡fn!'nte a crrlo p/azo. Un equilibrio puramentettinicional, que implica, algo tautológicamente,b rgullación de las ofertas y demanda de merca-ab- fEro tan sólo eso.

| 7 . : , ' , _ . : , . : . , ' . i . , - ,

('on¡o no es evidente a priori qué es y en qué. r r . r . l ( e l Sector Públ ico. es necesar io prec isard coneepto del mismo. Por Sector Público en-¡rür'remos ahora aquella parte de La econ]mía* .t'¡ l¡ttís sctbre la que Los diversos niyeles de¡aút¿'rno público, local, regional, estatal e in-clll, ' supranacional, fienen un control directoat ..t tonto de decisiones. Como en este temaah¡\)r|ll]los cuestiones de Teoría Económica, es-!m\). interesados en un concepto básicamente¡r - r r r ( ( r \ no raronónt ico o descr ip t i r o .

El objetivo último del Estado es lograr eltN.',t bietrestar social posible (véase tambiénftnra ll ) y ese objetivo justifica intervencio--' (rrientadas a conseguir mejoras tanto de ¿li-a?r':r r¿ como de eqLtidad. Por otro lado, aunquel>. .¡¡ o¡¿¡dss tipos de decisiones que abordaCt,¡. ,r!(ttt( económico, unas ref'erentes a los¡,2':, ': ptiblicos y otras sobre lngresos, es nece-In(, recordar que deben tenerse también pre-ttTrr!'\ las de regulación de la actividad econó-l r . r . m e d i a n t e l a s q u e e l S e c t o r P ú b l i c oolihlcce parte las reglas del juego et:onómico yd.'rtottlo institucional en que éste se desen-¡r¡"'lr c. Se incluye toda la legislación específi-c¡m¿nte económica, pero también institucionesFrdicas como la propiedad privada o la liber-¡¡J !lL' empresa.

L na cuestión clave podríamos decir quel'¡ ;uestión clave-, es dilucidar la necesidad oD Jel Sector Público, y en su caso su tamañoap(¡no. tema que puede verse como el reverso* I¡ discusión sobre la idoneidad del libre mer-

cado como instrumento asignador de recursos.La Hi \ tor ia del Pensamiento Econcimico es encierto modo una colección de argumentos y re-flexiones sobre si el mercado funciona de formaóptima o no, lo que lleva a considerar la oportu-nidad de una intervención estatal correcÍora.Hoy se conocen cada vez mejor las yenfajas ydesventajas del libre mercado. La soluciónadoptada en todos los países desarrollados pasapor una relativamente fuerte intervención estatalen el funcionamiento del mercado, lo que tienecomo resultado una economía r?¡_rta. Así pues,la esfera privada y pública de la economía, apa-recen siempre mezcladas y mutuamente condi-cionadas. Desde el padre fundador de la Eco-nomía, Adam Smith, a l menos, se admiteuniversalmente que los servicios de policía, de-fensa, educación y sanidad, deben ser atendidospor el Estado en sus diversos niveles (subsidia-riedad).

En último término la cuestión no es. ni hasido nunca, si el Estado debe intervenir o no enla economía sino /r¿sta qué punto debe lutterlo.es decir, qué tamaño y composiciór¿ debe tener elmismo. Esta cuestión ha dependido, y dependerátambién en el futuro, de la contingencia histórica.Desde los finales de los años setenta del siglo pa-sado se ha reforzado al menos aparentemen-te - la in f luencia de los economi\ tas que creenque el papel del Estado en la economía debe re-ducirse, lo que explica la ola de priNat¡zacionesdesde cnlonces { lanto en pro i is ión como ges-tión) y la llamada celebraci(n del mercado (so-bre todo que siguió a la caída de los regímenescomunistas). Sin embargo, durante el períodoque siguió al término de la Segunda GuerraMundial se vivió en el mundo occidental unacierta eufbria rdc ionalizadora, como se llamabaal proceso contrario de la privatización. En 2009,en cambio, tras la crisis financiera mundial, sehabló incluso de la necesidad de refundar el ca-pitalismo. Por tanto, en el pasado ha habido unmovimiento pendular en las creencias sobre laspropiedades benéficas del mercado puro y las

! l L ¡ / - \ l : C ¡ i - C ¡ i \ l o f v t l c ! \ ' ; a , : : . : ' : r r : . | , : : \ a ! p - r O i j B ¡ , S i a l t 3 3

Page 26: Principios de Microeconomia - Parte1

del Estado intervencionista. Hoy se conocen me-jor que nunca los méritos y defectos de las dosopciones,lo que no evita que siga habiendo unamplio margen para la discusión. Hoy por hoy,en las principales economías europeas desarro-liadas, el Estado recauda y gasta en media entomo del 40 por cien del Producto Interior BrutoIPIB).

F¿llos de rnercado. El principal aval de la inter-vención estatal son los /allos del mercado. Porestos entendemos situaciones en las que el libremercado (las empresas) proporciona una solu-ción no óptima desde el punto de vista del bie-nestar de la sociedad.

Ejemplos típicos que analizaremos másabajo son, por ejemplo, el fema de la con-taminación, en sentido amplio o toda la pa-rafemalia incluida en el llamado cambíoclimático, donde las empresas no tienen encuenta todos los costes relevantes, y la in-tervención del Estado, como apreciaremos.permitirá que las empresas en ocasiones ln -ternalícen esos costes y se alcance una so-lución óptima desde un punto de vista so-cial.Otro ejemplo son los bienes públicos, quelas empresas privadas no proporcionan encantidad o a precios adecuados por eI mis-mo motivo que no tienen en cuenta la con-taminación: no les resulta rentable.

Si se privatizara completamente el transportepor fenocarril (u otros servicios, aéreos, telefó-nicos, etc.) algunos trayectos no rentables no secubrirían y determinadas localidades podríanquedar incomunicadas por tren. Ya que se consi-dera un servicio público el Estado, a través deuna empresa pública, o su provisión, garantiza elsewicio.

Una intervención activa por parte del Esta-do, central, regional, etc., se justifica tambiénoor la necesidad de estimular la eficiencia eco-

nómica, promoviendo la competenaa como ob-servamos al analizar el monopolio (Tema 7).Como sabemos las empresas despliegan estrate-gias que merman la capacidad competitiva delas rivales, como las barreras a la entrada o loscárteles . Estas estrategias tienen costes sociales yconducen a posiciones sub óptimas de bienes-tar. El Sector Público interviene para tratar deconegirlas mediante la política de competenciapor lo que la estudiaremos ahora. El Teoremadel Second Best nos previene de tratar de alcan-zar a toda costa las condiciones perfectamentecompetitivas (Tema 13).

Otra explicación fundamental de la inter-vención gubernamental en la economía es labúsqueda de una mayor equidad en la distribu-ción de la renta y la riqueza que la que propor-ciona el libre funcionamiento económico. Porúltimo, el Estado define el marco institucionalen el que se desenvuelve la actividad económi-ca, garantizando la propiedad privada o esta-bleciendo los mecanismos necesa¡ios para obli-gar al cumplimiento de los contratos, por ponertan sólo dos ejemplos. Resumimos algunas delas motivaciones de la intervención del SectorPúblico en la economía (el listado obviamenteno es exhaustivo):

1. Actua¡ sobre los fallos de mercado en ge-neral, garantizando la provisión adecuadade bienes públicos y estimulando la pro-ducción cuando existen extetnalidades po-sitivas o limitándola cuando hay externa-lidades negativas.

2. Promover la competencia y la eficienciaproductiva.

3. Redistribuir la renta y la riqueza conside-.radas inadecuadamenle repafidas por elmercado.

4. Definir el marco institucional en el que sedesenvuelve la economía (velar por elcumplimiento de los contratos privados ypúblicos, definir y defender el derecho a laFopiedad, etc.).

34 PRrNcrPlos DE MrcRoEcoNoMÍA

Page 27: Principios de Microeconomia - Parte1

5. Actuar sobre los efectos extemos o exter-nalidades.

6. Garantizar la provisión adecuada de bienespúblicos.

7. Estimular el crecimiento económico.8. Otros muchos (cuya mera explicitación se-

ía prolija ahora).

El comportamiento del Sector Público es cru-para el bienestar social. Apüca para sus deci-

criterios normativos basados en los iuiciosvalor, ideologías de los individuos o grupos so-

y políticos. es decir. sistemas de creenciaslo que la sociedad debe s¿r. Para hacer el

más complejo el objetivo de esos diri-y grupos puede ser en parle público (ma-

el bienestar social) y en parte privadosus propios objetivos). Por si fuera

existe también un conflicto de objetivos (re-que aquí no se incluyen los de carácter

), al ser muy ambicioso el nú-de ellos que persigue el Estado y no ser po-alcanzarlos todos simultáneamente. Además

uiÁIisis del bienestar es también más complejolos problemas que presenta entre otros la

de las preferencias de los individuosaquel debe y dice representar (Tema 12).

A través de la función asignativ¿. es decir. deia en la asignación de los recursos, el

modifica dirccta e indirectamente la con-del producto social. Dicho sector va

veces más allá de una asignación Paretobeneficiando a algunos agentes privadosde otros en principio por criterios deSus instrumentos de intervención son la

ica presupuestaria y \a política impositiva.Conviene distingub ente \a provisión públicabs bienes y servicios (públicos) y su produc-

o incluso su gestión. El Estado puede pro-determinados bienes y servicios públicos

producirlos él mismo, ni directamente ni ade empresas propiedad pública, subven-

por ejemplo, la actividad de empre-privadas.

Ejemplos típicos de la provisión pública noproducida por el Estado son los productos far-macéuticos y el material bélico. Un ejemplotradicional -no necesariamente actual-, deproducción pública es el transporte ferrovia-no.

1.8. EL ENTORNOMACROECONOMICOY EL EMPRESARIAL

Los gobiemos de los distintos niveles, a tra-vés de sus divenas pofticas, industrial, de la com-petencia, regional, incluso por supuesto la mone-taria -tipos de interés, oferta monetaria-, lafiscal o de tipo de cambio de las moneda nacionalrespecto a las del resto del mundo, etc., afectan alcomportamiento diario de las empresas. Del mis-mo modo a través el ma.rco regulatorio y supervisor, al poner algunas restricciones al juego econó-mico; seguridad en el trabajo, salarios mínimos,fitosanita¡ias, de control del medio ambiente, etc.(Temas 12 y 13).

El ciclo económico. es decir. las fluctuacionesde la producción agregad,a, alavez afectado porlas políticas, y el fenómeno globalizador, 1as cri-sis financieras, etc.. también establecen un es-cenario continuamente carnbiante. Si la demandaagregada es demasiado alta con ¡elación a laoferta agregada, puede aparecer recalentamientoen la economía, si es al contrario, inflación, etc.Los déficits o superávits de Balanza de Pagosde los países y sobre todo los déficits públicos, silos hay, el aumento de la Deuda Riblica y sus re-percusiones sobre los tipos de interés y las cues-tiones asociadas también afectan al entorno enque se mueven 1as emprcsas.

Si la demanda agregada es demasiado bajaen relación a la oferta agregada pueden aparecerproblemas de recesión y desempleo (paro). Elnivel agregado de output o producto, para unciefo nivel de agregación, es la suma ponderada

EL MARCO ECONÓMICO Y EMPRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BÁSICOS 35

Page 28: Principios de Microeconomia - Parte1

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de los outputs individuales de las empresas quecomoonen la economía en cuestión.

Una empresa puede definirse como utn unt-dad productiva, dedícad.a a la transformación deinputs (factores de la producción) en outputsQ)roductos, bienes y senticios finales) con el ob-jetivo de colocarlos en el mercado (o en SectorPúblico) buscando un beneJicio. En general, yaque también existen empresas no lucrativas. Laempresa es una unidad de decisión comparativa-mente autónoma dentro de las restricciones insti-tucionales y de todos los úpos que la condicionan,donde se combinan, articulan y tensionan los re-cu¡sos. En la teoía tradicional (neocliísica) bajo el.paradigmn de mrtrimización del beneJiclo (comomotivación exclusiva de la empresa la mayor par-te de las veces), cada vez más la teoía se inclinapor desglosar y desagregar, diversificar, distin-guiendo las diversas formas legales, los distintosobjetivos y las varias resficciones que afertan alamultiplicidad de tipos de empresas existentes enel mundo en las economías modemas,

Un estudio más completo y pormenorizadoimplicaría la consideración del autoconsumoagrícola y otros, los diversos niveles de agrega-ción, los problemas que todo ello genera en elcómputo en la Contabilidad Nacional del país

3 Es decir, conocimiento gene¡alrnente aceptado por la profesión e¡ un momento,

PRINCIPIOS DF MICROECONOMiA

cuyas empresas se analizan, la discusión de as-pectos relacionados, los costes sociales y priva-dos provocados por la actividad de las mismas,el anáüsis de cuestiones asociadas a la creación oconstitución, definición de objetivos, tipos deactividad, etc., (si se trata de un mercado interioro por el contrario esl4n las unidades de produc-ción orientadas a la exportación); se debe repararen las áreas de localización, la dimensión de lafinanciación y sus problemas asociados; la suje-ción a triámites administrativos, contables fisca-les, sanitarios, etc. La dimensión de las plantas yla tecnología, el aprovisionamiento, los costes, laestructuras administrativa, el conocimiento delmercado y tipos de mercado, la publicidad y lasventajas competitivas, etc.

No se trata ahora de ser exhaustivos y de ha-cer no operativo el análisis por inmanejabilidadsimultánea del conjunto de las variables y as-pectos, paÍámetros y restricciones, etc., que afec-tan al proceso. De hecho ello desembocada enuna casuística y en un mapa a escala lxl de todala realidad. El conocimiento teórico ha sido y esselección y enfoque de los problemas 4 Íatar yde las variables más significativas que lo afectan,generalmente analizando una de ellas por vez.Ahora bien, este proceso de simplificación sejuzgará brásicamente por su capacidad explicativae interpretativa e idealmente predictiva y en rea-lidad en el caso de las empresas reales por sus re-sultados económicos. Se empobrecerá intolera-blemente el análisis si se abstrae tanto como pamperder contacto con el mundo real, cualquieraque sea la manera en que se defina este. Existeun cierto grado de sustituibilidad entre ambosenfoques que es necesado domeñar y en elloconsistirá el inte¡és o no interés de la teoría. Eso rsí, el problema quizá se pueda separar significa-tivamente y en partes y así tratarlo.

Segrin el paradigma3 dominante llamado deEstructura-Conducta-Resultados en todo caso elresultado o rendimiento, rentabilidad o beneficio

36

Políticas económicas

Page 29: Principios de Microeconomia - Parte1

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de la empresa, dependerá -incluso dado todo lodemás, ya mencionado- del tipo de mercadode que se trate. Por ejemplo, si 1a estructura demercado es tn monopolio /egal, es decfu, insti-¡uido con la autorización del Estado u otra auto-ridad, ni siquiera podrrín crearse e instalane em-pesas competitivas, por poner dn ejemplo clarorápidamente, lo que afectará lógicamente al de-¡anollo del juego económico y sus resultados.lás estructuras de mercado son las que estudia-temos en los siguientes temas. Por otro lado, lostipos de empresas difieren en España de oÍos

de la Unión Europea por no decir Japón oLru., u otras iáreas, aunque existe un proceso

acercamiento o convergencia entre ellos den-de un desarrollo generalizador o unificador y

de todo ello estiá la tendencia histórica dedel capitalismo en la que estamos m-

hov. Pero como oonen de manifiesto los La segunda:de diferenciación del producto y de estra-dentro del paradigma citado, las empresas

tienen algo que decir.

organización interna de la empresa. Lasconcretas a través de las que se organizan

operan las empresas muchas veces estián deter-por el tamaño de las mismas, 10 que tiene

lógica en sí mismo, lo que se observará enposteriores. Pero también la técnica o téc-

que estas utilizan, lo que a su vez está rela-con el tamaño y viceversa. Todo ello qui-

. Empresas en forma de U (o forma unitaria).

. Empresa en forma de M (o forma de múlti-ples divisiones).

La primera es aquella en la que la alta direc-ción de la empresa, bien el ejecutivo jefe o elequipo de ellos equivalente, se responsabiliza dela formulación de la esÍategia general de la em-presa como de la administración del día a día delos nesocios.

Forma en U

Forma en M

Sobre todos estos aspectos y los anterioresse elaborará a continuación en los sisuientestemas.

se visualiza mejor a través de organigamas; yello han sursido las denominaciones de:

EL MARCO ECONÓMICO Y EMPRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BÁSICOS 37

Page 30: Principios de Microeconomia - Parte1

1.9, CONCEPTOS IMPORTANTES

EconomíaNecesidades básicasEconomías domésticasDeseos ilimitadosRecursos escasosTierraTrabaioGapitalfísicoFactor empresarialRecursos naturalesRecurcos reproducibles

1,10. GLOSARIO Y RESÚMENES

1. Los deseos son ilimitados en las sociedadesde consumo que caracterizan a las modemasde nuestro entomo y la nuestra propia.

2. Los recursos necesa¡ios para la producciónde bienes y servicios, son escasos respecto aaquellos deseos.

3. Las grandes categorías de recursos son latierra, el trabajo y el capital físico.

{. La escasez conduce a la necesidad de ele-gir.

-i. Al elegir se aprecian los costes reales de lasdiversas elecciones, los llamados tambiéncostes de oportunidad.

6. Los costes de opofunidad son costes rea-les, expresados en unidades físicas de unbien, e indican la segunda mejor altemativa,a la que la sociedad renuncia al producir unaunidad adicional de otro bien.

7. Las grandes cuestiones económicas son:¿qué producir?, ¿cómo producir?, ¿paraquién producir?.

8. Es preciso añadir a la lista anterior el Bie-nestar, que lleva inmediatamente a otorgarun papel al Sector Riblico y la política eco-nómica y a la consideración de tanto los

38 PRrNcrPros DE MtcRoEcoNoMÍA

Necesidad de elegirFrontera de posibilidades de producciónCostes de oportunidadSoberanía del consumidorSoberanía de la empresaFluio circular de la rentaSector Públ¡coEntorno macroeconómicoEmpresa clásicaEmpresa en forma de UEmpresa en forma de M

9.

10.

fallos del mercado como de los fallos pú-blicos.La llamada ftontera de posibilidades de pro-ducción indica las posibilidades potencialeso máximas de producción cuando los recur-sos se utilizan de forma eficiente dada latécnica.Los sisiemas económicos son las formas ins-titucionales de organizar las grandes cues-tiones económicas; a lo largo de 1a Historialos principales han sido: la costumbre, laplanificación central y el mercado.La soberanía del consumidor implica que eldinamismo de1 sistema económico esLá do-minado por las preferencias de los consu-midores.La soberanía de la empresa significaríaque la dinrímica de comportamiento de laeconomía viene conúolada por los objeti-vos y estrategias de las empresas, siendoel papel de los consumidores básicamentepasivo.La Microeconomía se reserva para sí el es-tudio del consumidor individual típico y elestudio de sus demandas; lo mismo para el

12.

Page 31: Principios de Microeconomia - Parte1

o empresa individual y sus ofer-lo que incluye las complementarias de-

y ofertas de factores de la produc- 21.

Macroeconomía entendida ahora comoón de magnitudes, conductas, y re-

hciones microeconómicas para toda la eco-nomía, se le reserva el estudio de los nivelesagregados de output (producción) y empleoy sus determinantes.La satisfacción de las necesidades que cons-tituye el problema económico central, seconcreta en dos problemas cenÍales comoobjeto de la Ciencia Económica: uno de es-casez relativa que desemboca en uno deasignación óptima de los recursos, y unoproblema de distribución de la renta que de-semboca en un problema de justicia o equi-dad en dicha distribución.En una economía de mercado mixta a efec-tos analíticos se consideran tres tipos detgentes económicos: los consumidores, lascrnpresas y el Sector Público.l-os consumidores o economías domésticasejercen el lado de la demanda en los merca-dos de bienes y servicios finales y la ofertaen los mercados de factores en el flujo cir-cular de la rentaEl papel de los consumidores es encontralun plan de acción que haga compatibles susdeseos, acaso maximizar algún índice debienestar individual, con las restriccionesque les afectan, especialmente sus disponi-bilidades de renta, y riqueza quizás, para elg¡rsto.l-as empresas, los productores, los agentesde producción y oferta, organizan la pro-ducción, y llevan a cabo la tensión de los¡ecursos escasos; les corresponde el lado dela ofena en los mercados de bienes y servi-cios finales, y, también en un papel dual, lademanda en los mercados de factoresLos objetivos de las empresas son múltiples,pero para la teoía en general maximizar al-

gún indicador o indicadores, beneficios, ven-ras, erc.Las dos categoías anteriores fotman lo quese denomina usualmente el sector privadode una economía; a é1 le corresponde enprincipio el dinamismo principal de la ac-tuación económica en una economía capi-talista.El sector público engloba diversas adminis-traciones y diversos niveles de gobiemo, lo-cales en el caso de los ayuntamientos. re-gionales o autonómicos, nacionales e inclusoya en el caso de la Unión Europea, porejemplo, supranacionales.

23. Desde la época modema la necesidad delSector Público se ha justificado a través dela acción compensatoria del privado ante,bien la ausencia de iniciativa privada o de-bido a la conveniencia de compensar los fa-llos del mercado en la asi.gnación eficiente yequitativa de recursos.

2il. Algunas de las funciones más importantesdel Sector Público son: promover la eficien-cia productiva, redistribuir la renta y la ri-queza; promover la competencia; velar porel cumplimiento de los contratos privados ypúblicos; actuar sobre los efectos extemos oextemalidades; garanrizar la provisión ade-cuada de bienes públicos, y; estimular e1 cre-cimiento económico.

25. En ocasiones la literatüra económica utiliza elconcepto de mercado como un lugar concre-to, por ejemplo, una Bolsa de Valores o unalonja de pescado, una subasta de aÍe, etc.

26. Se define el mercado a veces como, el <<con-junto de 1os actos de compra y venta de unamercancía o servicio en un peíodo de tiempodeterminado>. En ocasiones, y más recien-temente. se le ha llegado a ilusrar '.como si.fuera un ordenador.

27. Los precios relativos no son sino relacionesde intercambio físicas de las mercancÍas, enuna economía conceptual de trueque en laoue no exista dinero.

22.

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EL MARCO ECONÓMICO Y EIV]PRESARIAL Y LOS CONCEPTOS BASICOS 39

Page 32: Principios de Microeconomia - Parte1

Una situación de equilibrio es aquella en laque los agentes económicos, consumidores,empresas y acaso el Sector Piblico, no tie-nen incentivo a desolazarse de ella.

PRrNcrPros DE MtcRoEcoNoNríA

Otra definición de equilibrio de mercado esaquella situación caracfeizad,a por la igua-lación de la oferta y la demanda de uno va-rios mercados.

29.

Page 33: Principios de Microeconomia - Parte1

Demanda individual y agregadaDeterminantes

Equ i l ib r ioPrecios

. Estabi l idad

. Mercados intervenidos

. Excedente del consumidor

. Excedente del productor

Page 34: Principios de Microeconomia - Parte1

Demanda individual y agregadaDeterminantes

Equ i l ib r ioPrec¡os

. Estabi l idad

. Mercados intervenidos

. Excedente del consumidor

. Excedente del Droductor

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Demanda, oferta y mercados

INTRODUCCION Y OBJETIVOS DEL TEMA

asignación de recursos escasos de la sociedad y eljuego económico todo que esboza-Gn el tema anterior, así como el de las emptesas, pasa en una economía modema capita-6pica, economía de mercado, por lo estudiado en el tema anterior, a través de los mer-

y estos se configuran a partir de sus dos grandes partes componentes, la oferta y laPor ello, y con carácter introductorio se analizan dichos mercados ahora, como una

aproximación. La comprensión de su funcionamiento es fundamental para la cons-de todo lo demás que sigue.

consecuencia, cuando te¡mine de estudiar este tema el lector o lectora. deberá conocercuestiones:

De qué depende la cantidad demandada de un bien por parte de un consumidor indivi-düal típico durante un período.El funcionamiento de la condición c¿ eteris ¡mribus , qle significa <<todo lo demás cons-tante>.I¿ relación inversa entre precio de un bien y la canüdad demandada del mismo, deno-ninada ley de la demanda.El conce?to de b¿¿nes independientes, de bienes complementarios y de bienes sustituti-yos en el consumo.El concepto de árenes normales y el de bienes inferiores.Distinguirá entre desplazamientos de las curvas de demanda y oferta y desplazamientosa lo largo de las curvas.Habrá aprendido a conceptualizar 1a c urva de demnnda de mercado de tn bien a parti¡de las curvas de demanda individuales, así como la de curva de demanda inversa.Distinguirá los bienes de consumo duradero o losbienes de inversión así como sus de-terminantes.

DEMANDA, OFERTA Y MERCADOS 43

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lii'i

il

También, la cantidad ofrecida de un bien por un agente oferente o empresa individualtípica y sus determinantes.Establecerá la curva de ofeÍa u oferta-precio para la empresa individual típica.

Analizará el concepta de equilibrio de mercado cuando para un precio (el denominadode equilibrio) la cantidad que están dispuestos a demandar los demandantes y la que es-t¡án dispuestos a ofrecer 1os oferentes coinciden.Asimismo los conceptos de excesos de oferta cuando para un precio la canüdad de-mandada sea inferior a la ofrecida, y de exceso de demnnda cuando para un precio la can-tidad demandada sea superior a la ofrecida.Una posición de equilibrio será un est¿do de reposo en el que no se dan incentivos eco-nómicos para que esta situación cambie o se altere (o alternativamente aquella en la quese produce la igualdad de la demanda y la ofefa de mercado).Un mercado se dirá que está en desequilibrio cuando exista exceso de demanda o exce-so de oferta.Altemativamente, se definirá el equilibrio en un mercado cuando el mercado se vacía ocuando se cumplen los planes de los agentes que están defás de las cuwas de oferta ydemanda.Un mercado se denominará estable cuando existan fuerzas económicas en é1, tales quecuando se perturba, dichas fuerzas tiendan a hacerle regresar al equilibrio; se analizarántambién las condiciones de estabílidad.Se revisará el mercado llamado en ajusfe de tela de araña.También los precios de intervención.Se discutirá el concefio de excedente del consumidor (y del productor) como una suer-te de beneficio social.

2,1. LA FUNCIÓN DE DEMANDAINDIVIDUAL BASE DE LADEMANDA DE MERCADO

La demanda es una importante variable econó-mica y juega un papel central en el proceso teó-rico de asignación de recursos escasos que esta-mos analizando a través del sistema de precios.La demanda y su sensibilidad a los precios o ren-tas, es una variable central al compodamiento delas economías domésticas, para el cálculo eco-nómico de las empresas que atienden sus prefe-rencias e incluso oara el Sector hiblico con rela-

ción al establecimiento de las políticas fiscales deingresos.

Supondremos para comenzar que existe oanalizamos a un agente consumidor, o econo-mía doméstica, individual típica de la que po-demos pensar que es un agente representativqo promedio en un sentido teórico. Parece ra-zonable y plausible en una primera aproxima-ción al tema, que la cantidad demandada de unbien o servicio digamos el i, por parte de eseconsumidor individual típico y a la que deno-tamos por rfduranfe un período sea función odependa de:

44 PRrNctPros DE MtcRoEcoNoMíA

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de

i oao-

t) El precio del bien (o servicio) bajo análi-sis (denotado p).El precio de los derruis bienes relacionadoscon él (pr).

c, La renta nominal del agente en ese peío-do, o si se prefiere los ingresos disponiblespara el gasto (J).

d) Los gasros del agente con relación a esebien, a los que denotamos mediante (g), yacaso los gustos relativos a los bienes re-lacionados e independientes en el consu-mo.

e) Las expectativasr de evolución futura delos precios, de todos los mencionados (pr",p:).

f) La publicidad rclativa sobre el bien, y so-bre el resto de los mismos (p.).

g) Otros factores sin determinar a este nivel,que recojan el reslo de las variables que tie-nen algún tipo de influencia sobre la de-manda, al modo de residuo de influencia(denotado o), no necesariamente pequeñaa priori.

Por tanto será una variable J'lujo quc ttene di-temporal (puede ser un día, una semana,

<peíodo de mercado>>, etc.). Las variablesno tienen dimensión temporal se denominanables fondo o stoc¿; estas se establecen parafecha concreta (por ejemplo, la riqueza de un

'

o de una economía el 31 de Diciembre dedeterminado, o cualquier otra fecha).

El lector o lectora puede pensar en principiolos rasgos anteriores se aplican a cualquiero servicio de las centenas de millones a los

te enfrenta potencialmente todos los días, enmodema en la que vive (se invita a

se haga la sustitución del bien i, por dichoejemplo). Digamos bienes perecede-

aquellos que se consumen en un corto pe-o se pierden, se degradan.

Porque si se trata de un bien (naranjas), de unservicio (una enhada de ópera), de un activo fi-nanciero (una participación en un fondo de in-versión) o de un bien de consumo duradero (unalavadora) los determinantes de la demanda decada uno de ellos no seían iguales en todos loscasos.

En todo caso podemos escribir fomalmente lafunción de demanda -simplificiíndola a cuatroy¿1 i¿llgs- ¿6ms;

x! = f @,,p¡,y,s)

La función de demanda anterior es una fun-ción generalizada porque en la misma la deman-da depende simultáneamente de cuatro va¡iables.Si todas variasen a la vez, como de hecho puedenvariar y varían, cuando analizásemos los cambiosen xf no sabíamos si dichos cambios o varia-ciones se debían a las variaciones del precio, a lasde los demás precios, la renta, etc. Por ello, ana-líticamente, se estudia una variación por vez, de-jando congeladas las restantes variables. Esasvariables influyen y están influyendo igualmen-te en la demanda, pero si se dejan constantes ana-líticamente, es evidente que no pueden por defi-nición, inlluir en las variaciones.

Por tanto, es conveniente desde un punto de vis-ta teórico a¡alítico o académico, aplicar un análi-sis parcial aplicando la llamada condición caeterispariáas, término latino que signifrca todo lo de-más constante- Es decir, a¡ralizando una variaciónpor vez, en sus efectos sobre la variable depen-diente, en este caso la demanda del bien i, deiandoal resto de vanables congeladas o constanl.es.

Por ejemplo, en la expresión anterior, dejarva¡iar sólo ¡1, en función de las variaciones de 4,si las p' y, g, anteriores (los demás precios, ren-ta y gustos, etc.) permanecen constantes. En estecaso, y normalmente, cuando el precio de un bien

,o-wOta-¡a-un,selo-0 0 es lo que se espera dellazro, sus valores futuros y sus vadaciones, en relación a algo, en este caso res-

variables económicas. Las hay de muchos tipos, regresivas, adaptativas y racionales entre otms.

DEMANDA, OFERTA Y MERCADOS 45

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sube (o baja), la cantidad demandada del mismo,baja (o sube). Esta es la llamada ley de la de-manda. es decit. existe una relación inversa en-tre precio de un bien y la cantidad demandada delmismo: para un precio elevado (dada la cut'vaylo la función de demanda) la cantidad deman-dada será pequeña y para uno pequeño serágrande; para un alza en el precio la cantídad caey para una caída la cantidad aumenta.

Matemáticamente podemos denotar el su-puesto caeteris parlázs, por ejemplo, al escribirlas variables afectadas por la constancia con unaraya encima:

Donde la función ;f original se conviefe enuna función <distinta>, F (que sólo depende ensus va¡iaciones del precio del bien en cuestión).

En ella se cumple que F'(p,) < 0 lo que indicaque su primera derivada es negativa, es decir,qr;e la pendiente o inclinación de la cut'va de de-manda es negath)ai o lo que es lo mismo, desdeel punto de vista económico ahora y no matemá-tico -porque el económico es el que nos intere-sa más aquí-, qru.e el precío y la cantidad semuet'en en dirección inversa. Olo qu.e es 1o mis-mo, que cuando aumenta el precio disminuye laca¡tidad e inversamente, tal como se dedujo li-

'

terariamente antes. Gráficamente podemos ¡e-

Fes€r¡tado como en la Figura 2.1.Suponemos a la demanda lineal, tna línea

r€cta, para simplificar, dejando constancia deque, desde luego, puede adoptar otras formas nolineales, curvas en sentido estricto. AceptandoIa linealidad, si el precio del bien es alto, pr(osube de p, a pr) la cantidad demandada de x,, x,en este caso, es baja (o desciende de xraxr)2-81análisis, de las diversas variables que influyen enla demanda, aplicando elméfodo caeteris paribus

Figura 2.1. Demanda decreciente habitual. Relacróninversa entle el precio de un bien y la cantidad de-mandada del mismo, caeteris paribus.

se puede y se debe llevar a cabo también para elresto de las variables del mismo modo. Lo queformalmente no añade gran cosa porque el mé-todo es similar, y hace al análisis algo reiterativo.En todo caso analizaremos algunos de ellos paraenfatizar el método.

A la relación inversa entre precio y cantidaddemanda del mismo se 1e denomina ley de lademanda. Indica que para un precio elevadoIa demanda será pequeña y para uno pequeñoserá grande. Y para un alza en el precio la can-tidad cae y para una caída la cantidad au-menta.

La cantidad demandada de un bien por paltede un consumidor individual típico como f'un-cién del precio de los demás bienes. Suponga-mos ahora que la cantidad demandada, o mejorsus variaciones, es tan sólo función del precio de

' ! = f (p,, p j.t,E,Fí, t i. n',a)= rg,¡

2 Supondremos que las variables se pueden di\1idir ínrtnüesimalmente , panpoder llevar a cabo un a¡¡ilisis de cálculo di-ferencial.

46 PRINCIPIOS DE MICROECONOMÍA

P2

P 1

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demás mercancías y servicios, caeteris pari-Formularemos la función parcial, no gene-

. Si los bienes son independientes en el con-sumo (por ejemplo, la demanda de bonsais(i) de Brasil y los cursos de alemán f), lavariación del precio de los cursos no afec-ta¡á a la demanda de árboles y se cumpliráque:

p, =dx! ldp¡ =0

. Miás fuerte, de otro lado, y en principio, es larelación entre la demanda de azúcar y el pre-cio del café. En ambos casos los bienes soncomplementarios en el consumo, es decir, sedemandan y consumen coniuntamente, o deotro modo, sat¡sfacen conjuntamente unamisma necesidad. Por ello, aumentos (dis-minuciones) en el precio del café hanán dis-minuir (aumentar) la demanda del café, y,por consiguiente, disminuir (aumentar) lademanda de azúca¡. Por lo que en este caso,F'=@xi lap) <0 (Figra2.2). Precio del

2.2. Curva de demanda precio de un bien de-de otro bien relacionada con el orimero en elbienes complementarios.

' != f (F, ,p¡ ,y ,E)-p@¡)

Figura 2.3. Curva de demanda precio de un bien y de-manda d9 otro bien relacionado con el orirnero en elcaso de bienes sustituüvos.

bien y cantidad del bien relacionado semueven en dirección inversa.

. Lo contrario ocurriúa con los bienes s¡lsfi-tutivos en el consumo, es decir, los que sa-tisfacen alternativamente una misma nece-sidad.Por ejemplo, café y té, mantequiüa ymargarina, cine y DVD, etc. En este últimocaso se cumplirá que: (drfldp,)>0 (Fi-

gwa2.3).

La cantidad demandada de un bien en funciónde la renta. Supongamos ahora que la cantidad

' demandada es función tan sólo de la rcnta del su-jeto, es decir, que el resto de las variables per-manecen constantes. Si se cumole:

F ' ,>0

Es decir, que 1a cantidad demandada aumenta(disminuye) cuando la renta del agente aumenta(disminuye). O lo que es 1o mismo, existe una re-lación directa o positiva entre ambas vmiables, yse cumple por tanto que F'=dxfldy>0. Peroseriín:

. Bienes llamados normales aqtrcllos que losagenfes aumentan la demanda del bien a

DFMANDA, OFERIA Y MERCADOS 47

* i =f \p, .p¡ ,v,s)=Fo)

I

f

3

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med¡da de que disponen de más renta, paratodas las demás variables constantes, pre'c¡os y gustos, etc. En principio estos bienesson la mayoría de los existentes y/o de losque se intercambian dia¡iamente en los mer-cados de una economía modema.

Pero existe en principio una fracción, usual-mente pequeña en la actualidad dados los nivelesde desarrollo y de renta en las economías euro-peas avanzadas, por ejemplo, que son nuestra re-ferencia, llamados inferiores :

. Bienes inferiores, son aquellos en los que lad.emanda desciende (aumenta) cuando larenta de un agente aumenta (desciendz),esdecir, que guardan una relación inversa onegativa. Por lo que en ese caso escribiía-mos: (dr, / dy) < 0.

A veces la demanda del bien respecto a larenta puede compoÍarse altemativamente comonormal, inferior o incluso ser constante (en esteúltimo caso los aumentos en la renta no alferart ala cantidad demandada) para distintos niveles derenta. De hecho un bien no será nunca inferiordesde el principio para un agente, es decir, paraniveles bajos de renta será normal, y sólo al au-mentar la renta caeteris paribus, se invertirá su.consideración y pasará a ser inferior @igura 2.4).

I-a cantidad demandada de un bien en funciónde los gustos o preferencias. Supongamos aho-ra oue la cantidad demandada sea una función delos gustos del sujeto. Si mejoran o empeoran, losgustos de un agente consumidor con relación a unbien (o servicio), para todo lo demás constante,ello implica aumentos (disminuciones) en la can-tidad demandada del bien. Escribiríamos al modoya conocido:

48 PRrNcrPtos DE MtcRoEcoNoMiA

xl = f\p"pj ' t ,s)=F(s)r ,=@xi ldg)>0

Figura 2.4. A medida que la renta aumenta entre 0 ey, la cantidad dema¡dada aumenta: entre 0 y x.*-.(también para y, en el grafico), donde en este caso seestanca. Pero si la renta sigue creciendo a partir de y2,

la demanda incluso decrecela en este caso. Además lademanda es no lineal.

2.2. DESPLAZAMIENTOS A LOLARGO DE LAS CURVAS DEDEMANDA Y DE LAS CURVASDE DEMANDA: LA CONDICIONCAETER¡S PARIBUS

Si se está llevando a cabo un análisis parcial, deltipo de los realizados en el epígrafe anterior,y va-ría algtna de las restantes variables incluidasen Ia condición caeteris paribus, es decir, se pro-duce el proceso contrario o inverso al que hemosseguido anteriormente, que dejaba las variablesincluidas en esta cláusula constantes, la curva (orecta) derivada del análisis parcial, se desplaza.Es preciso por tanto distinguir entre los despla'zamientos de las cun¡as como diferentes de losdesplazamientos a lo largo de las curvas.

Hasta aquí sólo hemos considerado movi-mientos a lo largo de las curvas. Así, aumentos ydisminuciones de l,en x'f = f 6 ¡ dariín lugar a

disminuciones y aumentos en xd, a lo largo de lacurva (Figura 2.1); y análogamente en el resto devariables. Sin embargo, en la misma función lasva¡iaciones de cualquiera de las variables inclui-

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(c)

2.5. (a) Incremento de la renta (desplazamiento a la derecha) y disminución (desplazamiento a la iz-, de la curva demanda-precio; (b) Bienes sustitutivos (aumento del precio del bien relacionado y aumento

del bien bajo análisis y viceversa); (c) Bienes complementarios, aumenta el precio del bien relaciona-&\plazamiento a la izquierda y viceversa, disminuye la demanda-precio del bien baio estudio.

crr la cláusula caeteris paribus, es decir, to-las demás, en este caso (pj, ), g), una por vez

ias a la vez, darán lugar a desplazamientostts curvas. Está distinción es obviamenle de

¡ utilidad, dado que en el mundo real losson continuos v simultáneos. v e1 análi-

¡)uda a sistematizar los efectos de los diver-cambios potenciales (Figura 2.5 ).

de demanda utilizada antedormente. vG¡rt as coresDondientes. se refeían a la de-

de un agente consumidor individual, típi-representativo. Pero nuestro interés principalestá en la demanda de mercado ya que éstaa la oferta de mercado establecerá el orecio

ibrio. o desequilibrio. y las canridades de-(y ofrecidas) de equilibrio o desequili-

¡nra ese mercado y bien bajo análisis.curva de demanda de mercado de un bien

esla suma horizonfal, es deci¡, la sumademandas de los diversos individuos oue

el mercado de ese bien o servicio, para

Fecio. ¿n ausentia de eferto.s e¡ternos:

. La cut-va de demanda inditidual por fanfoes el lugar geométt'ico de las cantidadesdemandadas por el consumidor a los dife-rentes precios y la cu¡va de demando demercado es el llgar geométrico de las can,tidades demandadas de ese bien Dor todoslos agentes que intervienen en el mercado alos diferentes precios.

Geométricamente (Figtra2-6) se tata, en au-sencia de efectos exlenros, es decir, de interrela-ciones entre las funciones de utilidad y/o de de-manda de los diversos agentes, de la sumahorizontal para cada precio de las curvas de de-manda individuales.

Nótese que la curva de demanda de mercado esquebrada, debido a que tan sólo hemos consideradotres agentes, pero se suaviz¿fía en el caso de tomarun número elevado de ellos. Debe apreciarse lam-bién, que al sumar las rentas de todos los individuosque componen el mercado, la demanda dependeráde la renta monetaria agregada a ese nivel, y porranto de la disfribución de la renta, además del ¡amaño de la poblacló¿, o número de i¡dividuos quecomponen ese mercado (véanse ejercicios).

Repitiendo el ejemplo pira los precios enre.p = 0 y p = p^¿^(p, aquí) en la Figura 2.6 obte-

. : . , : . . , : , , . 49

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