EL PRINCIPITO POR: Lui Valery Parizaca Nina
EL PRINCIPITO
POR: Lui Valery Parizaca Nina
CAPITULO 1
Cuando el niño tenía seis años leyó un libro de la selva
virgen que se llamaba “HISTORIAS VIVIDAS” y vio una
ilustración de una boa que devoraba a su presa y él
empezó a dibujar a una boa devorándose a un elefante y se
lo enseñaba a las personas mayores y le decían que era un
sombrero y las personas mayores le dijeron que dejara eso
y se interesara en la geografía e historia y aprendió a ser
piloto y aprendió a distinguir los países.
CAPITULO 2
Él sufrió una descompostura en su avión pero solo
iba él y se puso a reparar y de pronto cuando estaba
dormido escucho una voz que le pedía que le
dibujara un cordero, pero le hizo el único dibujo que
sabía el de la boa y no lo acepto y dibujo varios
corderos pero solo aceptó uno, y así fue como
conoció al Principito.
CAPITULO 3
Él principito hacía muchas preguntas pero no respondía a
ninguna. Cuando el Principito vio el avión por primera vez
pregunto ¿que era esa cosa? Le dijo que no era una cosa, que
era su avión y le dijo que lo volaba y el Principito le preguntó
que si calló del Cielo y le dijo que si y el Principito se empezó a
reír y se molestó el piloto y quería que lo tomara en serio, el
Principito sacó el cordero de su bolsillo y el piloto le dijo que si
le dibujaba una cuerda porque se podría ir y le dijo que no
podría ir muy lejos.
CAPITULO 4
Él piloto se dio cuenta que el Principito venía de un planeta apenas
más grande que una casa, al cual un astrónomo turco lo descubrió y
le puso B 612 pero nadie le creyó por su atuendo y años después se
lo creyeron porque estaba elegante, el piloto volvió a pintar pero no
se le hacía tan fácil porque tenía mucho tiempo sin hacerlo y solo
sabía hacer el de la boa tragándose a un elefante y a veces el dibujo
le sale grande o chico, empezó a practicar y le salía bien y mal pero
tal vez su amigo no lo hubiera perdonado y el piloto pensaba que se
estaba haciendo viejo, como las personas mayores.
CAPITULO 5
Cada día se enteraba de algo nuevo acerca del planeta y al tercer día
se enteró de los baobabs y el Principito le preguntó si los corderos se
comen los arbustos y le dijo que si y el Principito le preguntó que si
también se comen los baobaps y le contestó que ni con un rebaño de
elefantes no se lo pueden comer y el Principito le dijo que hay baobaps
pequeños y el piloto se puso a pensar y se dio cuenta que en el planeta
del Principito hay hierbas buenas i malas al igual que en otros
planetas, y también semillas pero que se duermen en el secreto de la
tierra y salen después y el Principito le dijo que en su planeta o en un
planeta chico hay que darse cuenta si las semillas son buenas porque
si son malas y no las quitas crece el baobab y puede ser una catástrofe.
CAPITULO 6
Al cuarto día entendió que el Principito tenía una
vida melancólica, y el Principito le dijo que le
gustaba ver mucho las puestas de sol y que había
visto tres, y en ese momento quería ver una, pero
tenían que ir a Francia que estaba muy lejos y en el
planeta del Principito solo tenía que mover la silla,
también le dijo que cuando alguien está triste le
gusta ver las puestas de sol.
CAPITULO 7
Al quinto día todo se le fue revelado, y el Principito le pregunto
si los corderos comen arbustos, también comen flores y lo
contestó que sí, y luego le pregunto, ¿entonces también tienen
espinas? Le contestó que sí, el Principito preguntaba y
preguntaba pero estaba muy ocupado arreglando su motor del
avión. Dijo que las espinas lastiman y el Principito le dijo que las
flores son débiles, el Principito hacía muchas preguntas y
siempre que hacía una no se rendía hasta que le gritó, conocía
un señor en otro planeta que no le interesaba nada más que las
cifras y le decían hongo y después empezaron a platicar.
CAPITULO 8
Comprendió que en el planeta del Principito habían flores que
salían por la mañana y en la tarde se extinguían y que el
Principito tardaba horas en arreglarse porque era muy coqueto.
Un día oyeron una flor muy conmovedora hablar, empezaron a
hablar y les dijo que le tenía miedo a las corrientes de aire
porque eran peligrosas para las flores y le pidió al Principito que
le trajera agua para que la riegue y se dio cuenta que solo lo
estaba usando y dijo que nunca le hubiéramos hablado y que solo
la hubiéramos visto y olido.
CAPITULO 9
Antes de irse de su planeta, el Principito deshollinó
los dos volcanes activos e incluso el extinguido
porque nunca se sabe si pueden hacer erupción,
arranco los últimos brotes de baobaps y regó las
flores. Le dijo a la flor que acababan de conocer
adiós pero ella no respondió sino tosió y le dijo al
Principito que fue una tonta y que igual el y que si se
quería ir que solo se largue y que ella iba a estar
bien.
CAPITULO 10
El Principito se encontraba en una región de asteroides y vio sentado a un rey
y el rey dijo que aquí venía su súbdito y el Principito se preguntó porque le
decía así para los reyes todos son sus súbditos el principito se sentó y bostezó y
el rey le dijo ¿qué hacía y porque? Y el Principito le contestó que no había
dormido y estaba cansado entonces el rey le ordeno que lo hiciera, después el
Principito le dijo que sobre que reina y el rey le contestó que sobre todo, las
estrellas, planetas, etc. Entonces el Principito le dijo que si podía ver una
puesta de sol pero le dijo que todo tenía un momento. El Rey le dijo que lo
nombro ministro y le dijo que no había a nadie a quién juzgar y el rey le
contestó que había una rata que la podía juzgar cuando quiera pero le dijo que
no quería juzgar a nadie y entonces lo nombro embajador y el Principito dijo en
su mente que los adultos son muy extraños.
CAPITULO 11
El segundo planeta al que el Principito fue, un
vanidoso lo recibió diciendo que lo venía a admirar y
lo saludo mientras el Principito se sorprendió y le
dijo para que sirve ese sombrero y el vanidoso le dijo
que era para saludar y luego le dijo que pegara sus
manos una contra otra (aplaudir) y el vanidoso se
quitó el sombrero, después de un tiempo el
Principito se aburrió del juego y le pregunto que era
admirar y le respondió que era que lo adoraba y era
el mejor.
CAPITULO 12
El siguiente planeta estaba habitado por un
bebedor que tenía una colección de botellas
alrededor de él, el Principito hizo muchas preguntas
a las cuáles todas tenían que ver con lo que hacía y a
todas les respondió, (el bebedor bebía por
vergüenza) después el Principito pensando que los
adultos son muy extraños, se marchó.
CAPITULO 13
El cuarto planeta estaba habitado por un hombre que solo contaba
números y ni siquiera saludo al Principito, su suma llego a millones y el
Principito le dijo millones de qué pero el hombre no le respondió y el
Principito le seguía preguntando hasta que le dijo que contaba las
estrellas y que eran suyas y las dejaba en un banco, al Principito el
pareció gracioso y el hombre le respondió que entonces si encuentras
un diamante es tuyo solo si no le pertenece a nadie y el Principito le
dijo que posee una flor que la riega todos los días tres volcanes que los
deshollina pero que el hombre no es útil para las estrellas y el hombre
se quedó callado y el Principito se fue.
CAPITULO 14
El quinto planeta le pareció curioso al Principito, era el más
pequeño de todos y se preguntaba cómo podían caber un farol y un
farolero. Fue al farol y vio a un hombre prendiendo y apagando el
farol cada minuto y le dijo que porque hacía eso, y le respondió que
gracias a él había día y noche y que no podía descansar como antes
que la rotación era normal, el Principito le dijo que si caminaba
podía ser como si hubiera sido mucho tiempo, pero al farolero solo
le interesaba dormir. Al Principito le pareció que era el mejor porque
no solo se preocupaba por si mismo sino también por los demás.
CAPITULO 15
El sexto día era diez veces más grande y estaba habitado por un anciano que
escribía buenos y grandes libros. El Principito llegó y se sentó porque estaba
cansado y le preguntó al anciano qué escribe y el anciano le respondió que un libro
de geografía porque era un geógrafo, el Principito le preguntó qué era eso y le dijo
que era la persona que estudia mares, montañas, etc. El Principito le dijo que era un
gran planeta y que si había océanos o algo así pero el anciano no sabía porque no
tenía exploradores y él no lo puede hacer porque es muy importante. El anciano le
pidió que le platicara de su planeta y le dijo que era pequeño y había tres volcanes y
una flor, y al anciano no le intereso la flor porque luego se extingue y el solo anota lo
que dura eternamente o mucho tiempo, el Principito triste le preguntó que planeta le
convenía visitar y/o le dijo que la Tierra y después el Principito se fue muy triste por
lo de la flor.
CAPITULO 16
Él séptimo planeta fue la Tierra, donde habían
muchísimos reyes, hombres de negocios, vanidosos,
bebedores geógrafos, habían muchas personas
mayores. Habían muchos faroleros que solo
encendían su farol en el momento adecuado cada día
y luego se iban a dormir, excepto por los del Polo
Norte y Sur que solo trabajan dos veces al año
CAPITULO 17
El Principito estaba preocupado porque no sabía si
se había equivocado de planeta, después se encontró
un anillo en el suelo y luego salió una serpiente y
empezaron a charlar la serpiente decía que era muy
poderosa por el veneno, aunque el Principito no le
creía tanto, el Principito le pregunto que si aquí no
hay hombres y la serpiente le dijo que este es un
desierto que está en África y que aquí no hay, que
están más lejos.
CAPITULO 18
El Principito atravesó el desierto y encontró una
flor con tres pétalos y le preguntó si había visto
hombres y la flor le dijo que los pudo ver hace años,
que era una caravana, luego los dos se despidieron.
CAPITULO 19
El Principito subió una montaña y dijo al azar
buenos días y el eco se lo repitió tres veces, y así
cada vez que hacía una pregunta, entonces el
Principito se dijo así mismo: “que planeta tan
extraño”.
CAPITULO 20
Después de que había caminado por rocas, arena,
etc, vio un camino que de seguro lo enviaba con los
hombres, se encontró con un jardín de flores pero se
dio cuenta que eran flores porque se lo dijeron y se
decepciono porque su flor le había dicho que era la
única de su especie, el Principito pensó que se sentía
rico con esa flor y se ella se diera cuenta de lo que
pasó fingiría hacer cosas y el tendría que fingir
consolarla, entonces se tiro al suelo y lloró.
CAPITULO 21
El Principito conoció al zorro y le preguntó que si había visto hombres y el
zorro si los había visto, pero él solo había visto a los cazadores, le dijo que
cazaban gallinas. El zorro le pidió al Principito que lo domesticara, pero el
Principito no sabía qué era eso y el zorro se lo tuvo que explicar, le dijo que
tenía que quedarse lejos de él y cada día acercarse así serían útiles uno
para el otro y que siempre cada día tenía que llegar a la misma hora, el
zorro le dijo que fuera a ver a las rosas que se parecían a la suya y les
dijera que no son iguales a la que él tiene porque él las domestico y las
rosas se sintieron mal. El zorro le dijo un secreto al Principito que mientras
más tiempo estés alejado de tu flor, se va a hacer más importante.
CAPITULO 22
El Principito saludo al guardagujas, y le dijo que
hacía, el guardagujas le dijo que clasificaba a los
viajeros en paquetes de mil e igual despacho a los
trenes que los transportan a cualquier lado. Pasaron
varios trenes iluminados y el Principito le preguntó
que si uno venía atrás de otro, y le contestó que no,
El guardagujas le dijo que las personas van ahí y que
siempre bostezan excepto los niños que apoyan su
nariz en el vidrio.
CAPITULO 23
El Principito se encontró a un comerciante que
vendía píldoras perfeccionadas que se te tomas una
por semana no te da sed durante toda la semana. El
Principito le preguntó para que vende eso y le
respondió que los expertos dicen que te dan
cincuenta y tres minutos por semana libres, el
Principito dijo que el caminaría tranquilamente hacía
una fuente si tuviera ese tiempo.
CAPITULO 24
Ya era el octavo día en el desierto y el Principito dijo que sus
historias eran muy buenas y conmovedoras. Como los dos
querían ir a un pozo con agua o a una fuente porque se estaban
muriendo de sed, emprendieron su marcha y se fueron,
después de un rato empezaron a hablar y descansaron en la
noche y platicaron y al comerciante le conmovió el Principito y
cuando se durmió lo cargo y parecía que estaba cargando algo
muy ligero. Y así caminando descubrieron el pozo.
CAPITULO 25
Habían llegado al pozo, pero no era un pozo como
los otros, de pronto el pozo despertó y estaba todo
preparado, sintieron que era raro, entonces el
comerciante agarró el balde y le dio de tomar al
Principito y él cerró los ojos, después empezaron a
charlar del planeta de cada uno. El Principito le dijo
al comerciante que fuera a reparar su avión y él lo
iba a esperar mañana en la tarde sentado en ese
lugar.
CAPITULO 26
Al lado del pozo estaban unas viejas ruinas de un muro de piedra.
Al día siguiente vio al Principito. El comerciante estaba confundido
porque escuchaba hablar al Principito pero no lo veía, entonces
llegó y bajo la mirada al pie del muro y vio a una serpiente
hablando con el Principito, entonces sacó su revólver y dio un
salto, pero hizo ruido y la serpiente se fue. Después, como siempre,
empezaron a platicar, y el comerciante dijo que ya había reparado
su avión y que ya iba a irse. Y el Principito dijo que su flor solo
tiene cuatro espinas para defenderse contra todo el mundo.
CAPITULO 27
El comerciante se dijo a si mismo que el Principito
ya se había porque no estaba en el desierto y dijo
que ya había vuelto a su planeta y recordó que no le
dibujo un bozal a su cordero y se puso a pensar que
en la noche sin hacer ruido puede comerse a la flor
del principito pero él siempre le ponía un cristal,
mas que se le haya olvidado ponérselo y se la coma,
pero quien sabe.
FIN