ConseJero Familiar 5

8/16/2019 ConseJero Familiar 5

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1 Como debemos conducirnos en la casa de Dios

EL A PÓSTOL PA BLO se d ir ig ió a Timo teo, su hi jo espi r i tu al , diciéndo le: «Te esc ribo esto con

la esperanza de i r pro nto a ver te . Y si tardo, para que sepas cómo con duc i r te en la casa de

Dios, qu e es la ig les ia del Dios vivo , co lum na y b aluar te de la verdad» (1 Timoteo 3: 14-15).

Aprendiendo a vivir en esta familia

El apóstol Pablo sabía que todo nuevo creyente necesita recibir

instrucciones que le ayuden a vivir correctamente su fe. Así

como el bebé va aprendiendo de los miembros de su familia

todo lo necesario para desarrollarse, quienes te han precedido

en el camino del Señor pueden ayudarte en tu crecimiento

espiritual . «Acordaos de vuestros dirigentes, que os hablaron la

Palabra de Dios. Considerad el resultado de su vida, e imitad su

fe» (Hebreos 13: 7).

Consulta tu Biblia y responde

¿Qué debemos tener en cuenta al escoger nuestro modelo? Éxo do 23:

2 ; 1 Tesa lon icenses 5 :21

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A algunos hermanos, cuando ingresan en la iglesia, les

puede parecer que ya entraron en el cielo. Pero la iglesia

todavía no es el cielo. A la iglesia más bien hemos de con-

siderala un hosp i ta l ... ¿Qué encontramos en un hospital?Pues, enfermos , que están en distintas etapas de curación

o rehabilitación . Algunos están muy graves, otros en terapia

intensiva, hay quienes van mejorando muy bien... aunque

todos deben cu idar se d e las r ecaídas .

Todos los que integramos la iglesia tenemos la propensión a

recaer; por lo cual es importante que, desde el punto de

vista espiritual, pongamos siempre buena atención por

donde caminamos. Así que no te sorprendas demasiado si

ves a algún hermano, incluso con años en la iglesia, que no

se comporta como es debido. Él todavía tiene sus luchas, y

no es tu modelo. Nuestro modelo es Cristo.

Normas elementales de convivencia

En toda familia que se precie de tal hay elementales normas

de convivencia que se enseñan a los niños: «No ensucies las

paredes...» «Por favor, mantén tu cuarto en orden...» «Lávate

las manos... los dientes...» «Tienes que estar de vuelta antes de

las diez...» En la iglesia, como parte de la fami l ia de Dios , no

puede ser menos. Es necesario cuidar el edificio...

conservarlo en buen estado y en orden. Hay que llegar

puntualmente a las reuniones... Y las manos limpias pueden

representar la conducta limpia que debemos vivir...

Consulta tu Biblia y responde ¿Qué se

recomienda con respecto a la asistencia a la iglesia? Heb reos

10:22-25

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La asistencia a la casa de Dios no es una opción, es un deber

señalado por el Señor. Nos beneficia personalmente, porque la

iglesia nos ayuda a crecer corno h i jos de Dios y a

forta lecer nuestra fe . Y nuestra presencia también beneficia a

otros, porque un asiento vacío es un voto en contra del

progreso de la iglesia.


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2 Esta es nuestra gran fami l ia

LA CRUZ DE CRISTO es el puente que, con uno d e sus extrem os enclavado en la t ierra ,

ha unid o la fami l ia de este planeta con la fami l ia del c ie lo . La fami l ia celest ia l es

grand iosa , y la de la t ier ra no pu ede ser menos. A co n t inuac ión vamo s a con ocer a lgo

más d e la hermosa fam i l ia advent is ta a la que te has un ido p or el baut is mo .

El pueblo Elegido

La ig lesia tiene una razón de ser . «Vosotros sois linaje elegi-

do, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para Dios,

par a qu e anun ciéis las virtudes de Aquel que os llamó de lastinieblas a su luz admirable» (1 S. Pedro 2: 9).


En forma simbólica, ¿cómo se describe al pueblo de Dios?

Cantares 6:10

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Los ejércitos marchan en orden, y del mismo modo debe

funcionar la iglesia. Aunque siempre hemos de estar dis-

puestos a mejorar, pues la perfección es el ideal que siempre

hemos de tener como meta, gracias a Dios, la Iglesia

Adventista del Séptimo Día está bien organizada para cumplir

la misión para este tiempo.

Como funciona nuestra iglesia

Tú ahora formas parte de una iglesia local. Si es numerosa, se

la llama " ig lesia organizada" . Si es pequeña, se la denomina

"congregac ión" o " grupo de creyentes", y si apenas está

comenzando, será una f i l ia l o una esc uel a sabátic a . En

cualquiera de los tres niveles, los miembros de iglesia tienen

que elegir democráticamente a sus propios dirigentes, una vez

por año, por medio de una comisión de nombramientos

elegida especialmente. Los miembros de dicha comisión se

reúnen, oran y analizan qué hermanos son idóneos para cada

cargo.

Cuando concluyen sus deliberaciones presentan una list

para votar su aprobación, a toda la ig lesia reunida e

asamblea. En esa lista la Comis ión de Nom bramien to

propone los diferentes nombres para cada responsabilida

que son, por lo menos, las siguientes:

Anc ianos : Asociados al pastor, son sus colaboradores

los principales dirigentes de la iglesia, para conducir lo

servicios de culto y supervisar que todo funcione co

eficacia.

Diáco nos y diaco nis as: Son los responsables de vel

por la feligresía, el edificio, los bienes materiales de

iglesia, y el orden en general.

Secretar io y Tesorero: Cuidan de los registros y de la

finanzas respectivamente.

Directores de departam entos: Deben hacer que cad

área desarrolle apropiadamente su ministerio. Los pri

cipales departamentos son:

Esc uela Sabátic a: Este departamento es el encargad

de conducir la primera reunión del sábado, incentivand

elestudio diar io de la Bibl ia

a través de las leccione

correspondientes a cada edad.

Sociedad de J óvenes: No solo organiza la reunión d

sábado de tarde, sino que vela por el crecimiento espir

tual de la juventud de la iglesia.

Sociedad de Benef icencia Dorcas: Es el departamen

que provee ayuda a los necesitados. y Publicacione

Facilita la adquisición de libros y revistas cristianos.

Minister io Personal: Departamento que organiza a

iglesia en su acción misionera de difundir el evangelio.

Minister ios de la Mujer : Organiza a las damas para

servicio.

Otros departamentos cubren la música , las comun icac ione

la educación , la sa lud , etcétera.Todos los cargos mencionados son honorarios, y cada cr

yente elegido debe cumplir sus funciones con responsabilida

considerando un privilegio el que se le haya nombrado. Pa

guiar a todos ellos está el pastor , que se dedica a tiemp

completo a servir a la iglesia. Y para que todo marche co

orden, El manual de la Iglesia ofrece las instruccione

necesarias.

Las organizaciones superiores

A fin de lograr una eficiencia mayor, las iglesias son superv

sadas por la Asociación como órgano administrativo. Cad

asociación cuenta con un presidente , un secretar io , u

tesorero y directores de los mismos departamentos que ha

en


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las iglesias locales. Los responsables de las asociaciones son

generalmente pastores experimentados, que pueden aconse-

jar a los pastores y ancianos, y a los directores de los departa-

mentos en las iglesias. La Asociación también provee a las

iglesias locales de materiales para el mejor desempeño de ca-

da tarea. En sus oficinas se reciben los diezmos que se recau-

dan en las iglesias, y allí se distribuyen, en base a un presu-

puesto, para el sostén de los diferentes ministerios. Una

Asociación de iglesias generalmente coincide con los límites

de uno o más estados o provincias, y coordina la misión de

todas las iglesias incluidas dentro de su jurisdicción. Para un

mejor desempeño, cuatro, cinco o más asociaciones se

agrupan en una entidad superior llamada Unión . Esta

generalmente coincide con uno o más países, en un mismo

grupo lingüístico. Aquí también hay un presidente, un

secretario, un tesorero y los directores de los departamentos,

que aconsejan y proveen materiales a los responsables en las

asociaciones.

La obra y el desarrollo de las uniones los coordina la Divis ión .

La Asociación General , que es el máximo órgano ad-ministrativo de la Iglesia, tiene su sede en Washington (EE.

UU.), tiene dividido actualmente el mundo en grandes

regiones: tres divisiones en América (NAD: División

Norteamericana, DÍA: División Interamericana, DSA: División

Sudamericana), dos en Europa, tres en África y otras cinco en

Asia y Oceanía.

La elección de los dirigentes de todos los niveles adminis-

trativos de la iglesia se hace en forma dem ocr átic a y ningún

cargo puede ser vitalicio. Según el nivel, todos los cargos se

renuevan cada tres para las Asociaciones, y cada cinco años

para las Uniones y la Asociación General. El sistema de

gobierno de la Iglesia Adventista del Séptimo Día es

representat ivo , por lo que cada miembro de iglesia participasiempre de algún modo en las decisiones administrativas de

todos los niveles.

Instituciones de apoyo

Para ayudar a cumplir la misión, y por inspiración divina,

nuestra iglesia también ha establecido alrededor del mundo

diferentes instituciones. Entre las que cabe destacar: más de

600 instituciones sanitarias (sanatorios, hospitales, clínicas y

dispensarios); 56 editoriales que publican libros y revistas en

más de 200 idiomas; 27 fábricas de alimentos saludables;

unas 6.000 instituciones educativas, incluyendo casi un cen-

tenar de universidades y colegios superiores; y una docena de

centros de producción de programas de radio y televisión.


¿Qué profecías están ayudando a cumplir todo el programa de

la iglesia? S. Mateo 24: 14; Apo calips is 14:6-7; 18:1

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Cada semana, miles de personas son bautizadas y se forman

nuevas congregaciones en diferentes lugares del mundo.

Cuando tú te uniste a la iglesia entraste a formar parte de ungran movimiento mundial que pronto se reunirá con la fami l ia

del cie lo . Recuerda que cuando te bautizaste hiciste un pacto

con el Señor y al aceptarlo como tu Salvador personal también

te comprometiste a contarle a otros acerca de Jesús y su plan

de salvación. Igual que te ayudaron a ti a conocer al Maestro,

tú debes hacer lo mismo con los demás. Persevera en este

camino hasta llegar a la meta final. Dios te bendiga para que

así sea.

«[La ven id a de l Señor ] n o d em or ará más q ue e l ti empo

que tom e la tarea de presentar el mens aje a toda nac ión,

lengu a y p ueblo» (Review and Herald, 18.06.1901).


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3 Tú eres una pieza impo rtan te

LOS AUTOMÓVILES, como mu chas otras máquin as y aparatos, están cons t i tu ido s p or

cien tos , y aun m iles, de di ferentes piezas q ue se r elacion an entr e sí. De algu nas p od ría

presc ind i r -se, pero otras s on abs olutam ente vi ta les y sin el las la máquina, desde luego ,

no puede fu ncio nar . En la m aquinar ia d e la ig les ia , como verás, tú eres una p ieza

impor tan te .

Formamos parte de un cuerpo vivo

Si te resulta frío comparar la iglesia con una máquina, el

apóstol Pablo presenta una ilustración semejante, pero ba-

sada en el cuerpo humano.


¿Qué significado tiene la ilustración del cuerpo? 1 Cor in t ios

12: 12-27

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Todos los miembros del cuerpo de Cristo tenemos nuestro

lugar y somos importantes. Cada cual debe servir al Señor

según el don o la inclinación que posea. Es un error pensar

que no tenemos nada que hacer. Todos y cada uno de

nosot ros somos un órgano necesario en este organismo vivo

que es la iglesia, y por eso es necesario que desempeñemos

un papel activo dentro de ella. Veamos a continuación algunos

ámbitos donde tú eres imprescindible.

La Escuela Sabática

Ciertamente el Señor te está ayudando para que tu fe crezca

pero, para que tu fortaleza sea cada vez mayor, hay algo que

no debes descuidar.

Sociedad de Jóvenes. Reunión de Oración

Sí eres joven, también deberías pertenecer a la

Sociedad de Jóvenes . Siempre habrá programas

interesantes los sábados por la tarde y los domingos.

Aunque las actividades están orientadas a los jóvenes,

es posible colaborar tomando parte en cualquiera de

los diferentes programas.

El escuchar la predicación de la Palabra de Dios es de gran

ayuda, pero es necesar io que leas y estudies la Bibl ia por

t i mismo . En este sentido encontrarás un gran apoyo en laEscuela Sabática. Esta actividad de la iglesia facilita dos as-

pectos importantes para tu crecimiento espiritual:

Te ayuda a co nocer m ás y m ejor las en señanzas

bíb li ca s , porque a través de la Guía de Es tu di o (folleto,

librito) de las Lecc iones de la Esc uela Sabática

encontrarás los textos bíblicos más importantes sobre

determinados asuntos y un valioso material auxiliar. Se

preparan guías para adultos, jóvenes y niños; así que

cada miembro de tu familia puede tener la

correspondiente a su edad. Si todavía no posees tu Guía

de Estudio del próximo trimestre, solicítala al encargado

de Publicaciones de tu iglesia.

Las clases de la Escuela Sabática son pequeños grupos

en los cuales se divide la feligresía, que facilitan la

interrelación entre los hermanos en la fe. Todo adventista

debe ser miembro de la Escuela Sabática, registrado en

una clase, y compartiendo el sábado con los demás

alumnos la lección que ha estudiado cada día en su


¿De qué modo se puede aumentar la fe? Rom anos 10: 17

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La Reunión de Oración es otro lugar donde se espera tu

presencia. «Es necesario ser diligentes en la oración;

ninguna cosa os lo impida. Haced cuanto podáis para

que haya una comunión continua entre Jesús y vuestra

alma. Apro vechad toda oportun idad de ir a donde se

suela orar . Los que están realmente procurando

mantenerse en comunión con Dios, asistirán a los cultos

de oración, fieles en cumplir su deber, ávidos y ansiosos

de cosechar todos los beneficios que puedan alcanzar.

Aprovecharán toda oportunidad de colocarse donde

puedan recibir rayos de luz celestial» (El camino a Cristo,

pág. 145).

Una virtud que no siempre abunda

Es posible que tarde o temprano los hermanos te pidan que

asumas una responsabilidad en alguno de los departamentos

de la iglesia. Si así fuera, debes considerarlo como un llamado

de Dios.


¿Cómo hay que responder al llamado de Dios? Salmo 110:3 __________________________________________________

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Cuando los ángeles anunciaron el nacimiento de Jesús pro-

clamaron "Paz a los hombres de buena voluntad ", es decir a

los que están siempre bien dispuestos. Estos son los que

gozan del favor de Dios. Y gozarán también del aprecio de los

hermanos. Por eso Pablo exhorta: «Haya en vosotros el

mismo sent ir que hubo en Cristo Jesús. Quien, aunque era

de condición divina, no quiso aferrarse a su igualdad con Dios,

sino que se despojó de sí mismo, tomó la condic ión de

siervo , y se hizo semejante a los hombres» ( Fi l ipenses 2: 5-

7 ); pues el propio Jesús dijo: «El que quiera ser el primero,

sea siervo de todos. Porque el Hijo del hombre no vino para,

ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por

muchos» ( S. Marcos 10: 44-45 ). Tu iglesia siempre se sentirá

feliz y agradecida de tu disposición a echar una mano, o mejor

las dos.

Y si tengo que mudarme…

Si tienes que irte a vivir a otra parte, informa de ello sin falta al

pastor o anciano y al secretar io de tu iglesia. Ellos te dirán

donde queda la iglesia más cercana a tu nuevo domicilio y te

orientarán acerca de la Carta de Traslado . Este es un

documento muy importante, que servirá para que seas

recibido como miembro de la iglesia en tu nuevo lugar de

residencia. Incluso aunque te mudes dentro de la misma

ciudad, es necesario que notifiques tu cambio de domicilio,

para que tu iglesia pueda visitarte y ayudarte en cualquier

circunstancia. Por favor, nunc a te traslades sin comunicar alos líderes de tu iglesia tu nuevo dom ic i lio . Recuerda que tú

eres una pieza importante. Con tu colaboración la iglesia

marchará mucho mejor y tú recibirás la aprobación del Señor.

«Porq ue Dios nos un D ios d e conf usión , sino d e paz. [...]

Hágase tod o d ecentem ente y con ord en»

( 1 Corint ios 14: 40 ).


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4 E l que oye diga: “ ¡Ven! ”

LA BIBL IA SE CIERRA con las p alabras q ue d an títul o a est a un idad : «Y el Espíritu y la esp os a

dic en: " ¡Ven!" . Y el que o iga, tamb ién dig a: " ¡Ven!" . Y el qu e tiene sed y q uiera, veng a y reci ba

del agu a de la v ida gratu i tamente» (Apocal ip s is 22: 17). Tú escuc haste el l lam ado q ue te h ic ieron

el Espíri tu Santo y la ig les ia ( la espos a) . Aho ra te toc a a t i l lamar a otros .

Un testigo muy singular

Jesús fue nuestro ejemplo en todo, y por supuesto en la

mis ión . Por eso se embarcó con sus discípulos y, después de

cruzar el mar de Galilea, llegó a la región de los gadarenos,

donde se produjeron unos hechos impresionantes.


¿Qué sucedió en Gadara?

¿Qué pidió el hombre curado y qué le respondió Jesús?S. Marcos 5: 1-20

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Aquel hombre usó un método de predicar el evangelio de gran

eficacia y que está al alcance de todos: el tes t imon io

personal . Cuando, tiempo después, Jesús regresó a esa re-

gión, encontró una multitud dispuesta a escucharlo.

El endemoniado, liberado de la opresión del espíritu maligno,

ahora vivía bajo el impulso de un nuevo Espíritu, que lo había

capacitado para lograr el cambio entre su gente. Aquel que

había estado esclavizado por el diablo, sencillamente lo que

hizo fue contar su propia experiencia y dar testimonio de cuán

bien se sentía desde que Cristo estaba en su corazón. Fue el

mismo método que más tarde usarían los apóstoles Pedro y

Juan: «Porque no podem os dejar de decir lo que hemos

visto, y oído» ( Hec ho s 4: 20; v er tam bién 1 S. Ju an 1: 1 ).

Testigo en círculos crecientes

Esta manera sencilla de predicar fue la que Jesús ordenó a

sus seguidores antes de su ascensión, cuando ellos estaban

inquietos por saber cuándo se establecería el Reino.


¿Qué mandó Jesús a los primeros discípulos y a nosotros?

Hechos 1:6-8

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El Señor nos asegura que el Espíritu Santo nos acompañará y

que la misión seguirá creciendo, como los círculosconcéntricos cada vez mayores que se forman al echar una

piedra en el agua. Los primeros discípulos debían comenza

por Jerusalén, luego Judea, Samaria y hasta lo último de la

tierra. Era una forma de concretar la gran comisión que Jesús

les había encomendado: «Por tanto, id y haced disc ípulo s en

todas las naciones , bautizándolos en el nombre del Padre

del Hijo y del Espíritu Santo» ( S. Mateo 28:19 ).

Nuestro primer campo misionero

Jesús dirigió al gadareno, al que había liberado del diablo, a

su propia familia. Ahí tenemos nuestro pr imer campo

mis ionero . Cuéntales a los tuyos que ahora eres adventista

Diles cómo te sientes. Expresa tu fe l ic idad y tú gozo de ha

ber conocido a Jesús, y no necesariamente todas las doctrinas

que conoces. Como veremos más adelante, para que alguien

llegue a una decisión, hay pasos que dar progresivamente

Ahora bien, para dar tu testimonio, debes tener en cuenta dos

virtudes: prudencia y paciencia.

Prudencia es cautela, moderación, sensatez y buen jui

cio, para saber quédec ir y el mom ento aprop iado para

hacerlo.

Paciencia es la facultad de saber esperar lo que se

desea con intensidad y la capacidad de soportar las

vicisitudes de la espera sin alterarse.

Ambas virtudes — prudencia y paciencia— son necesarias

porque podríamos cometer el error de dec ir lo q ue to davíano conviene decir e impacientarnos por la fal ta de

respuesta .

Los círculos mayores

"Judea" representa al segundo círculo donde el Seño

espera tu testimonio: tus amigos , tus com pañeros de

trabajo, tus vec inos .

"Samaria", un poco más lejos, es un símbolo del barr io o

local idad vecina , donde tu iglesia está organizando la

visitación previa a una campaña de evangelización y

donde espera tu colaboración.

"Lo último de la tierra" es la invitación a involucrarse en la

misión global más allá de nuestra ciudad e incluso de

nuestro país.


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5 “ Ustedes tendrán que sostener las cuerdas”

WILL IAM CAREY ERA UN ZA PATERO in glés, qu e sint ió el l lamado d e Dios p ara ser

mis ionero le jos de su patr ia . Decid ido a part i r , un día se di r ig ió a sus hermano s en la ig le -

sia c on estas palabr as: «Yo d escen deréa la m ina d e la India, per o u stedes tend rán q ue

sos tener las cuerdas.»

La manera más fácil

No importa cuál sea nuestra tarea, nos sentimos agradecidos

cuando los demás la reconocen y nos ayudan a realizarla.

Pero hay una ocupación sagrada , la de llevar a otros el

evangelio, a veces en circunstancias muy difíciles, que exige

que los mis ioneros puedan contar con la simpatía y el apoyo

efectivo de sus hermanos.


¿Que pidió Pablo a los creyentes romanos? Romano s 15: 30

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Todos podemos, y debemos, "sostener las cuerdas", es decir,

apoyar a los que están llevando el evangelio a otros, a través

de la oración intercesora . Si Pablo la necesitaba entonces,

cuánto más los misioneros que trabajan hoy en día. Puedes

orar en tu casa, con una lista personal de oración, y en todo

momento y lugar. Y también es bueno que te reúnas con otros

hermanos en un grupo de oración. Además de los misioneros,

podemos rogar por los que gobiernan, los desanimados, por los

compañeros de trabajo o estudio, por los familiares no

convertidos, por nuestros amigos... ( Colosenses 1: 9; 4: 3; 2

Tesaloni censes 1: 11; 3: 1-2; 1 Tim oteo 2:1-2, 8; Hebreos

13: 18; Santiago 5: 16 ).

La manera más activa

Otra forma de "sostener las cuerdas" es trabajando activamente

en la difusión del evangelio, ocupando el tiempo que de todo

corazón queramos dedicar. En la unidad anterior ya vimos

algunas maneras de hacerlo, pero ahora agreguemos que todo

depende de los dones o talentos que poseamos.


¿Cuáles son algunos de los dones espirituales? 1 Corint ios 12:27-31

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Además de la lista que presenta el apóstol, cada uno de

nosotros tiene habilidades innatas o adquiridas. ¿Qué

haremos con ellas? Ellen G. White escribió: «Largo tiempo ha

esperado Dios que el espíritu de servicio se posesione de la

iglesia entera, de suerte que cada miembro trabaje por él

según su capacid ad » (Los hechos de los apóstoles, pág. 91).

Ya ves, no se nos pide que hagamos nada que esté fuera de

nuestro alcance, sino según la capacidad de cada cual. Y en

otro lugar Ellen G. White añadió: «Cristo encomienda a sus

discípulos una obra indiv idual , que no se p uede delegar . La

atención a los enfermos y a los pobres y la predicación del

evangelio a los perdidos, no deben dejarse al cuidado de

juntas u organizaciones de caridad. El evangelio exige

responsabi l idad y esfuerzo indiv iduales, sacr i f ic io

personal » (El ministerio de curación, pág. 106).

Lee, por favor, Rom anos 12:3-13 , y consulta con tu pastor o

ancianos para que te orienten acerca de la mejor manera de

servir al Señor.

La manera más generosa

Junto con tus oraciones y tu esfuerzo personal, el sosténeconómico es otra forma como podrás ayudar en tu iglesia.

Ya hemos estudiado Mal aqu ías 3 :8-1 2 , donde se nos

recuerda que si somos fieles en entregar los diezmos y las

ofrendas Dios nos prosperará abundantemente. El diezmo es

una parte fija, el diez por ciento de nuestras ganancias; pero

las ofrendas son cantidades voluntarias adicionales, fruto de

nuestra decisión basada en la reflexión y tomada con el

corazón.


¿Qué se hará en el día final con los que ofrendaron genero-

samente? Salmo 50:3-6

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¿Recuerdas que hace un tiempo señalamos que la palabra

'felicidad', comienza con fe , y que continúa con l ic i ?

(consejero familiar n° 2, unidad 1). Dijimos entonces que a la

fe es necesario agregarle la obediencia , esto es, vivir dentro

de la Ley, haciendo lo que es lícito delante de Dios. Ahora

destaquemos que felicidad termina con dad . Por eso el

apóstol Pablo indica: «Cada uno dé como propuso en su

corazón, no con tristeza, ni por necesidad: porque Dios ama

al q ue d a co n al egría » ( 2 Corint ios 9:7 ).

Quien cultiva la generosidad es feliz. De eso no cabe duda,

pues la felicidad es como un perfume que no podemos colocar

a otros sin que nos queden unas gotas en nuestras propias

manos. El propio apóstol Pablo lo puso de relieve con estas

palabras: «En todo os he enseñado que, trabajando así, sedebe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del

Señor Jesús, que dijo: " Es más dic hos o dar qu e recibir "»

( Hechos 20: 35 ).

«Cuand o los m iembr os de la ig lesia de Dios efec túen su

labor señalada en lo s cam pos men esteros os d e su país y

del extranjero, en cumpl imiento de la comisión

evangélica, pr ont o será amo nestad o el m und o en tero, y el

Señor J esús vo lverá a la ti erra c on po der y gra nd e glo ria»

(Los h echo s de los apóstol es, pág. 91).


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6 Enfrentando la tentación

MUY PRONTO EN L A EXPERIENCIA CRISTIANA te enf rentarás c on la tent ación, «po rqu e

no tenemos lucha con t ra sangre y carne ; s ino con t ra pr inc ipados , con t ra po tes tades ,

con tra dom inadores de este mu ndo de t in ieb las, con tra malos espíri tus d e los ai res»

(Efesio s 6:12).

Una lucha de toda la vida

Antes de su muerte, Josué presentó a Israel las dos alterna-

tivas: seguir con lealtad y fidelidad al Señor que los había

librado de la cautividad egipcia, o la apostasía, es decir,

volverse atrás, a la esclavitud y la idolatría.


¿Cómo respondieron los israelitas? Jo sué24:1 6-18

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La respuesta rápida y positiva del pueblo contrasta con lo que

agrega Josué en el versículo siguiente, el 19: «Entonces

Josué dijo al pueblo: "No podréis servir al Señor, porque él es

Dios santo, Dios celoso. No tolerará vuestras rebeliones y

vuestros pecados"». El caudillo estaba reconociendo la

incapacidad moral del hombre de obedecer por sí mismo los

mandatos divinos.

¿Con quédram at ism o Pab lo des c r ib e su

d i f icu l tad? Romanos 7: 15-24

¿Quién me librará?

Josué se estaba anticipando al apóstol Pablo en cuanto a

reconocer lo que Jesús también dijo a sus adormilados dis-

cípulos en el Getsemaní: «El espíritu está pronto, pero la

carne es débil» ( S. Mateo 26: 41 ).

La lucha del apóstol Pablo es la misma que tienes tú, que

tenemos todos los creyentes. Sabemos lo que es bueno y lo

que es malo, la voz de la conciencia nos llama a hacer lo

correcto, queremos hacer lo bueno pero no nos resulta fácil.

Se cuenta de un niño que se hallaba parado frente a una

frutería. Como la actitud del muchacho le resultó sospechosa

al vendedor, este se encaró con él diciéndole: «¡Ya veo que

están intentado robarme la fruta...!» El chico respondió: «¡No,

señor! Estoy tratando de no robársela.»

Gracias por nuestro Señor Jesucristo

Pablo sabe dónde está la victoria: «¡Gracias doy a Dios, por

nuestro Señor Jesucristo! [...] Pero ahora, ninguna con-

denación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no

andan según la carne, sino según el Espíritu» ( Romanos 7:

25; 8:1 ).


¿De dónde podemos obtener la fuerza para vencer el mal?

Fi l ipenses 2:13

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«Dios no puede hacer nada por nosotros sin nuestro con -

sent imiento y cooperación . Asimismo, no podemos hacer

nada sin la ayuda de Dios. La fe y las obras son como los dos


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remos de un bote, los cuales deben usarse a la par. La parte

del hombre consiste en escoger el camino correcto y luego

dedicarse a recorrerlo, reconociendo plenamente su total

dependencia de Dios. La parte de Dios es suplir el poder que

capacita. Está dispuesto en todo momento a cumplir su parte

del contrato. Pero la pregunta es: ¿Cumpliremos nosotros con

la nuestra? ¿Escogeremos desechar lo malo y adoptar lo

bueno? ¿Nos dedicaremos activamente a hacer que los

propósitos de nuestra elección sean una realidad?»

(Comentario bíblico adventista a Josué 24: 19, t. 2, pág. 297).

Armas para la victoria

Los cristianos disponemos de poderosas armas de probada

eficacia para vencer la tentación. A nosotros nos corresponde

tomarlas y utilizarlas correctamente.

Vestidos con la coraza , de la just ic ia de Cristo , no de

las invenciones humanas, estaremos firmes sin participar

en los errores de doctrina que identifican a tantas

corrientes filosóficas y grupos religiosos.

Con su casco estamos seguros de nuestra salvación .

El escudo de la fe nos ayuda a no caer en el desánimo,

para protegernos de los ataques del enemigo.

Pero no solo tenemos que defendernos, sino avanzar con

espíritu victorioso:

La espada es la Bib l ia , con ella en nuestras manos, y

nuestros pies llevándonos a donde haya un alma dis-

puesta, debemos presentar batalla y rescatar a millones

que hoy están en las garras del enemigo de Dios.

Y por supuesto, no te olvides de la oración .

Con esta armadura, y dejándonos conducir por el Maestro

Jesucristo, ¡la victoria es nuestra!


¿De qué está constituida la armadura de Dios? Efesios 6: 11-

18

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Como en la antigüedad, los soldados de hoy necesitan ele-

mentos protectores. Nosotros somos soldados en un conflicto

de alcance cósmico y no podemos salir a la batalla sin la

debida protección.

Observemos la armadura del cr ist iano . Tiene piezas

defensivas , que nos ayudan a permanecer en la verdad:

«Así, el que pi ens a estar f irm e, mir e qu e no c aiga. No

os ha venido ningu na tentación, sino hum ana. Pero

Dios es fiel, y n o os dejará ser ten tados más de l o q ue

podáis resis tir. An tes, junt o co n la tent ación os dará

tam bién la sa lid a, par a que podáis sop or tar» (1

Corin tios 10:12-13).

"Fel iz hombre que soporta la tentación; porque al

super ar la prueb a, recibirá la coro na de la vid a, que

Dios ha prom etido a los que lo aman" (Sant iago 1:12).


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sino que prosigo, por ver si alcanzo aquello para lo cual fui

también alcanzado por Cristo Jesús. Hermanos, no considero

haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago, o lv ido lo que

queda atrás, me ext iendo a lo que está delante, y pros igo a

la meta, al premio al que Dios he ha llamado desde el cielo en

Cristo Jesús» ( Filipen ses 3: 12-14 ).

las grandes recompensas que nos esperan y luego pide, a los

que por la fe han llegado a ser nuevos miembros de la familia

espiritual, que añadan una serie de virtudes.


Además de la fe, ¿que otros siete peldaños señala el apóstol?

2 S. Pedro 1:5-7

La parábola del sembrador

Jesús ya previo que algunos querrían volverse atrás. Uno de

los ejemplos más ilustrativos es la parábola d el sem brado r ,

la cual, después de haberla expuesto en público, la explicó en

privado a sus discípulos.


¿Cuáles son los cuatro terrenos en los que puede caer la se-

milla y con qué resultado? S. Mateo 13: 1-9, 18-23

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La excelente calidad de la semilla la libera de cualquier culpa

por la falta de fruto. La semi l la es la Palabra de Dios . El

problema radica en los terrenos. Los tres primeros no dan

fruto por fallas inherentes a ellos mismos. El primero repre-

senta al oyente desatento que ni siquiera permite que la se-

milla germine. El segundo, al que acepta superf ic ia lmente la

Palabra, pero no permite que eche raíces. El tercero, a quien

su amor por e l mundo llega a ser superior al amor a Cristo y

al cielo. Por amor a ti mismo, no seas ninguno de los terrenos

mencionados y sé como el cuarto , permitiendo que la semil la

fruct i f ique abundantemen te en tu vida .

La escalera de Pedro

Una de las ilustraciones más claras de lo que significa elcrecimiento cristiano aparece en lo que podríamos llamar " la

escalera de Pedro" . El apóstol la introduce, repasando

Está claro por qué el apóstol Pedro espera que los nuevos

Está claro por qué el apóstol Pedro espera que los creyentes

obren así. «Porque si estas v irtud es están en vos otr os, y

abun dan, no os dejarán ocio sos , ni sin fruto en el

conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. El que carece de

ellas, es corto de vista y ciego, y ha olvidado que ha sido puri-

ficado de sus antiguos pecados. Por lo cual, hermanos, procu-

rad tanto más af irmar vuestra voc ación y elección ; porque

al h ace r es to , no cae réis jamás . De esta manera os será

concedida amplia y generosaentrada en el Reino eterno

de

nuestro Señor y Salvador Jesucristo» ( 2 S. Pedro 1:8-11 ).

¡Allá nos encontraremos, por la gracia de Dios!

«Entonces Pedro le d i jo : " Nosot ros lo hemos de jado todo

y te hemos seguido . "Jesús respond ió: " Os aseguro que

ningun o que haya dejado casa, herm anos o herm anas,

padre o madre, esposa o hi jos, o heredades por c ausa de

míy del evangelio , dejará de recib ir cien tan tos ah ora, en

este t iempo, casas, hermanos, hermanas, madres, hi jos y

heredades, con p ersecuciones, y en el sig lo ven idero la

vi da etern a» (S. Marc os 1 0: 28-30).

«Séfiel has ta l a m uert e y yo te d aréla c oro na de l a v ida»

(Apocal ipsis 2: 10).

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ConseJero Familiar 5

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