Mar 06, 2016
VILLA Y TIERRA DE SEPÚLVEDA, UN BUEN SITIO PARA
PEDALEAR
Muchos son los motivos que pueden hacer dirigir nuestra bici hacia esta
tierra que a pesar de la austeridad de sus paisajes y de sus gentes, o
precisamente o por esto, nos ofrece muchos más alicientes que los
publicados habitualmente en las guías turísticas.
Deben quedar pocas personas que no conozcan aún la villa segoviana de
Sepúlveda. Pero de lo que sí estamos seguros es que sí hay muchos
aficionados a la bicicleta y el ciclo turismo que todavía no explotaron las
enormes posibilidades de esta zona que reúne unas inmejorables
características para la práctica del ciclismo de carretera o la práctica del MTB
Siempre que preparemos nuestra
escapada prestando atención al
tiempo que nos espera, no hay
problema para visitar la zona a
lomos de nuestra bicicleta en
cualquier época del año invierno
incluido.
Primavera y otoño siempre son
aconsejables por la mayor
suavidad de temperaturas y en
verano, las sombras de estas
“choperas” nos vendrán bien a
mediodía.
Si eres de los que no conoces aún sus caminos, carreteras y
parajes, o sólo pasaste por allí para degustar su potente
gastronomía dominada por el mundialmente conocido lechazo,
te interesa indagar un poca más en esta zona para comprobar
que las riquezas de la Tierra de Sepúlveda van más allá de lo
que hasta la fecha se hablo y escribió sobre esta histórica
comarca de Castilla y León.
Pasear por las calles de
Sepúlveda -mejor si lo
hacemos en un día
laborable- para
descubrir sus rincones
menos fotografiados,
nos abrirá una nueva
perspectiva a lo más
conocido de esta
población.
Siendo espectacular su Plaza Mayor dominada por el Castillo de Fernán
González o su afamada colección de bellísimas iglesias románicas, esta villa
de Segovia nos ofrece la posibilidad de hacer unos recorridos por su intricado
callejero que nos abrirá un sinfín de perspectivas visuales; y dependiendo de
la hora del día también olfativas, cuando sus innumerables figones
comienzan a dar el punto optimo a sus hornos de leña que inundan el
ambiente con el aroma del autentico cordero asado.
Aún no sabemos si es intención
del Ayuntamiento de Sepúlveda la
construcción o la ubicación de
alguna zona de aparcamiento
para bicicletas. El cicloturista que
porta alforjas en su bici lo
agradecería. Esta localidad
segoviana alberga innumerables
rincones que merecen la atención
del que se acerca a visitarla y
poder tener la bicicleta en un lugar
seguro mientras paseas, sería
interesante y cómodo.
Por cierto a pesar de que en Sepúlveda existen decenas de restaurantes en los que en su carta no falta su
reconocido lechazo, si acudimos en fin de semana, será fundamental realizar la reserva de mesa a primera hora
de la mañana; ya que sería una tragedia para el cicloturista pasear por sus calles acompañados de ese aroma y
no conseguir mesa para degustarlo. Si esto ocurre, lo mejor será acomodarse en la barra de algún bar y
dedicarse a probar sus pinchos.
Es posible que lo más transitado por el ciclista aficionado en la provincia de Segovia sea la vertiente norte de la
Sierra de Guadarrama, pero esta parte de la meseta castellana ofrece la posibilidad de hacer mucha carretera
-en general de buen firme- sin que el tráfico nos apabulle.
Realizar los recorridos que unen los diferentes pueblos será muy
placentero, ya que estamos hablando de poblaciones que fuera
de la época estival no alcanzan en ocasiones los 100 habitantes.
Valga como referencia que transitando por esta zona de Tierra
de Sepúlveda, en un recorrido de algo más de siete kilómetros
uniendo los pueblos de Barbolla y Navares de Ayuso con la
localidad de Aldeonte hacia la mitad del itinerario, sólo me cruce
con un par de tractores. Esto último y una orografía no
demasiado exigente le permiten tener al aficionado el tiempo
suficiente para respirar tranquilidad e incluso contemplar el vuelo
de las numerosas rapaces que sobrevuelan la zona sin tener
que poner pie a tierra ya que entre tanto silencio, apreciar la
llegada por detrás de un vehículo a motor es sencillo.
Si nuestra afición se decantó hace tiempo por el uso de la
bicicleta MTB, la duda surge a la hora de elegir qué camino
seguir. Existen muchos de uso agrícola. En cualquier caso,
esta zona permite circular decenas de kilómetros por trazados
de tierra bien conservados y en los que sólo tendremos que
hacer un alto para reponer fuerzas o ver paisajes, ya que
apenas existen vallas que limiten nuestros movimientos.
Lógicamente lo más transitado en las cercanías a Sepúlveda
son los itinerarios que bordean o se introducen en el Parque
Natural de las Hoces del Río Duratón, pero aún así merece la
pena acercarse para contemplar este sorprendente paraje.
Podemos utilizar Sepúlveda como centro de nuestros
recorridos MTB como si de carreteras radiales se tratara, ya
que esta villa se encuentra enclavada en pleno nordeste de la
provincia. Existen numerosos alojamientos de turismo rural en
la zona, por lo que con nuestra bicicleta de montaña o
carretera podemos alcanzarnos hasta otras poblaciones
igualmente de interés. Riaza se encuentra a 26 km, Cantalejo
a 20 km, Pedraza a 24 km, o Sacramenia, cercana a la
vallisoletana ciudad de Peñafiel a 33 km.
Por otra parte, todo lo que sea entrar por caminos orientados a
Valladolid y Burgos, nos introducirán en las tierras segovianas
de la Denominación de Origen Vinos de Ribera del Duero, lo
que representa un aliciente más en
nuestros itinerarios por esta zona que
bien merece nuestra visita para ser
pedaleados.
Nuestra llegada a Sepúlveda siempre
que lleguemos de lugares alejados a
esta localidad, y por lo tanto si nuestra
bicicleta viaja en el porta bicis de nuestro
automóvil, puede ser a través de
diversas carreteras. Desde el norte de la
península accediendo por la carretera N-
I y desviándonos en la localidad de
Boceguillas, desde Madrid y el sur de
España igualmente por la N-I saliendo
en el desvío de Castillejo de Mesleón,
desde el noroeste a través de la CL-112
después de pasar Valladolid y desde el
este del país atravesando Soria y El
Burgo de Osma circulando por la N-122.
Para los más valientes, aquellos que desean amortizar esas buenas alforjas
de su bici, disponen de esas mismas carreteras y de infinitos caminos por los
que transitar, e insistimos en que aunque en todo momento tenemos la Sierra
de Guadarrama a la vista, la orografía no es exigente y predominan los llanos
La influencia del arte románico
inunda cualquier construcción a
pesar de que alguna es de
reciente construcción.
La rehabilitación de viviendas
antiguas ha tratado de no alterar
la estética e incluso se mantiene
la típica posición de la “teja
segoviana”.
y el terreno ondulado. Por lo demás, todo lo que sea transitar
por carreteras locales o caminos será un ejercicio placentero en
el que el tráfico de vehículos a motor es muy escaso.
Eso sí, es importante elegir bien la época del año en que nos
escapemos a transitar estos parajes, en verano el calor aprieta
aunque las noches y las mañanas son frescas. El invierno es
verdaderamente frío en esta zona, por lo que es aconsejable
realizar nuestro viaje durante primavera y otoño. Si lo que
pretendemos es realizar una escapada para aprovechar un
puente o fin de semana, verano también puede ser perfecto
siempre que recordemos que el último fin de semana de agosto
son los Toros de Sepúlveda y la localidad se pone reventar.
Para los valientes que quieran pedalear en invierno, siempre
que se aseguren que no habrá nieve o no lloverá, la opción
puede ser válida ya que bien abrigados y alimentados podemos
disfrutar de unas frías jornadas de ciclismo, pero de una luz
espectacular.
Saludos y buen viaje para todos aquellos que se acerquen a
pedalear por tierras de Sepúlveda.
Texto Cikista Sospechoso Twitter @CiklistaSospe Fotos Ciklista Sospechoso y Pregonero Digital de Sepúlveda
IMÁGENES DESDE LA BICICLETA
Por lo general el amante de la bicicleta es un fotógrafo en potencia. No olvidéis vuestra cámara
Panorámica de Sepúlveda desde el mirador de Zuloaga en la entrada a la villa por la SG-232
Las cuevas a los pies de la muralla dan cobijo y sede a las peñas y charangas en las Fiestas de los Toros Los balcones de la Calle San Justo y Pastor en un soleado día del mes de octubre
Blasón en la fachada de “caliza rosa” de La Casa de las Conchas Crucero renacentista en San Bartolomé
Caminando por la Calle de los Fueros hacia la Plaza del Trigo Entrando a la Calle Victoriano de la Serna
La aguas termales de la Fuente de la Salud se mantienen a 18 grados todo el año, suficiente para bajar de la bici y darnos un baño. Curiosamente mejor en invierno y cuanto más frío haga mejor Panorámica de los cañones del Duratón en el Parque Natural de las Hoces El acceso a la Fuente de la Salud se puede realizar en bici sin problemas La Puerta de la Fuerza continúa soportando nevadas después de siglos
Existen empresas en la zona especializadas en el ocio de naturaleza. Por ejemplo piragüismo en el fondo del cañón del Duratón, navegando por los meandros del río Hacer aguas menores no es ocio y nos lo recuerdan
El origen de la palabra que da nombre a esta localidad, apunta a que tiene relación con las siete puertas de entrada que había en la muralla original de Sepúlveda y siete llaves conforman su escudo La Puerta del Río es una de las que aún resisten el paso de los siglos El gusto por las puertas se mantiene entre los sepulvedanos
Junto a la Puerta del Azogue o Ecce Homo se encuentra el Jardín de la Señora celebre por la reunión de las autoridades con el carlista Balmaseda en 1838 La Iglesia del salvador desde la empinada cuesta de la calle del mismo nombre
El Museo de los Fueros acomoda su sede en la Iglesia de los Santos Justo y Pastor La casa del Moro actualmente reconvertida en centro de eventos y convenciones
La torre de la Iglesia del Salvador une su torre a la nave por un pasadizo Subida por la Calle Barbacana hacia la Plaza Mayor, recorrido inicial de los Encierros de Sepúlveda
Sin casi infinitos los rincones que pueden llamar nuestra atención No son muchos los visitantes de un día de otoño y al gato parece que no le molestamos
La subida a la calle Isabel la Católica en horario de fin de jornada laboral Algunos prefieren el viaje desde Inglaterra sobre cuatro ruedas… Es una opción