PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATLICA ARGENTINA SANTA MARA DE LOS
BUENOS AIRES FACULTAD DE TEOLOGA
Licenciatura especializada en Sagradas Escrituras
Literatura Paratestamentaria
presentado a: Dr. Ren Krger por Edgar Amado D. Toledo Ledezma
OP
Diciembre 2011 CABA
Literatura Paratestamentaria
INDICE
INDICE
....................................................................................................................................
2 Introduccin
..........................................................................................................................
3 La figura de Judas en el Evangelio de Judas y en la tradicin
neotestamentaria. ................ 4 1. Los evangelios apcrifos.
...............................................................................................
4 1.1. 1.2. 2. Qu son los evangelios apcrifos?
........................................................................
4 Nota acerca de los evangelios gnsticos.
............................................................. 5
El Evangelio de
Judas......................................................................................................
6 2.1. 2.1.1. 2.1.2. 2.1.3. Breve presentacin del Evangelio gnstico
de Judas. ............................................ 6 El
cdice...............................................................................................................
7 La forma literaria y los contenidos.
.....................................................................
8 La
estructura........................................................................................................
8
3.
La figura de Judas.
..........................................................................................................
9 3.1. 3.2. 3.3. La tradicin neotestamentaria sobre Judas, llamado
Iscariote: en los sinpticos 9 La tradicin neotestamentaria sobre
Judas, llamado Iscariote: en Ev. de Juan. .. 13 Judas en el
Evangelio de Judas.
............................................................................
14
4.
Algunas conclusiones sobre la figura de Judas.
........................................................... 15
BIBLIOGRAFIA
......................................................................................................................
18 ANEXOS
................................................................................................................................
19
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 2
Literatura Paratestamentaria
Introduccin
El presente trabajo intenta presentar la figura de Judas, el
polmico compaero de Jess, confrontando los datos que nos ofrecen la
tradicin neotestamentaria y los del Evangelio de Judas. Para ello
hemos estudiado los textos pertinentes y acudido a las fuentes y
estudios ms relevantes sobre el tema. El mtodo de trabajo es
bsicamente la comparacin, un momento de la crtica literaria de los
MHC, que nos aporta interesantes datos. Para una mejor organizacin,
nos pareci dividir el trabajo en cuatro partes. Una primera aborda
el tema de los evangelios apcrifos en general; luego nos ocupamos
del evangelio de Judas, presentando el cdice y algo de crtica
literaria; en un tercer momento estudiamos la figura de Judas tanto
en la tradicin neotestamentaria como la del evangelio que lleva su
nombre. Nos parece que es la parte ms extensa del trabajo. Por
ltimo, y como una especie de recuento y conclusin, ofrecemos
algunas consideraciones sobre la figura de nuestro personaje.
Podemos decir que el estudio y la elaboracin del trabajo nos ha
servido muchsimo y nos ha dejado el deseo de seguir profundizando
en el tema, conscientes adems de que lo que ofrecemos aqu es solo
una puntada inicial para los que se quieran iniciar en el tema.
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 3
Literatura Paratestamentaria
La figura de J udas en el Evangelio de J udas y en la tradicin
neotestamentaria. 1. Los evangelios apcrifos.1.1. Qu son los
evangelios apcrifos? Sabemos que Jess de Nazareth no dej ningn
escrito sobre la Buena nueva que anunciaba en los albores del siglo
I. Sus discpulos y seguidores fueron trasmitiendo en forma oral
(kerygma) y de predicacin la persona y el mensaje del maestro de
Nazareth. Recin a mediados del siglo I empiezan a ponerse por
escrito "tradiciones" acerca de Jess1 y as surgen los Evangelios
sinpticos. En este ambiente mezclado de tradiciones orales y
escritos, ya a finales del siglo I, pero especialmente en los
comienzos del siglo II y III surgen y proliferan varios textos y/o
tradiciones que intentaban narrar, recoger y trasmitir datos,
leyendas, historias y cosas secretas acerca de Jess. De Santos
Otero lo sintetiza de esta forma:"De esta simbiosis entre tradicin
oral y escrita surgieron a finales del siglo I y sobre todo en el
decurso del IIal margen o dependientes de los cuatro evangelios
numerosos escritos de mayor o menor extensin que recogan dichos y
sentencias dispersos de Jess (logia y agrapha) y que en algunos
casos llegaron a adoptar la forma de evangelios. As tenemos el
evangelio de los Hebreos, de los Nazarenos, de los egipcios, etc.
De esta literatura que hoy llamaramos extracannica, pero no apcrifa
en el sentido que esta palabra adquiri despus, nos han quedado
restos en papiros de gran antigedad y numerosas referencias en
autores del siglo III y 2 IV."
El mencionado autor clasifica en siete grupos estos evangelios,
a saber: textos fragmentarios, apcrifos de la navidad, apcrifos de
la infancia, apcrifos de la pasin y resurreccin, apcrifos
asuncionistas, cartas del Seor y apcrifos gnsticos de Nag Hammadi.
Es necesario distinguir los distintos trminos utilizados para
referirse a este grupo de escritos, de hecho, De Santos Otero los
distingue de esta manera: en un primer momento fueron denominados
"extracannicos" porque no estaban en el canon, que recin en el
siglo IV fue definido con cierta claridad. Luego con la irrupcin de
la corriente gnstica aparecer "apcrifo" utilizado por ellos mismos
para referirse a sus escritos. Muchas veces publicaban bajo el
nombre de algn apstol para adquirir autoridad y poder penetrar en
las comunidades cristianas. Este fenmeno tambin es conocido como
"pseudoepigrafa", es decir, publicar un texto bajo otro nombre. As
aparecieron1
Aqu se produce el debate acerca de la formacin de los Evangelios
y ms que su formacin, las fuentes, tradiciones que lo formaron, las
distintas etapas y influencias que fue recibiendo. Es bien conocido
la hiptesis de las dos fuentes, pero no menos importante es la
hiptesis del P. Boismard, ver: RAFAEL AGUIRRE 9 MONASTERIO; ANTONIO
RODRGUEZ CARMONA, Evangelios sinpticos y Hechos de los Apstoles,
Navarra, 2009 , 68-72 2 AURELIO DE SANTOS OTERO, Los Evangelios
apcrifos, Madrid, BAC, 2005, XI
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Literatura Paratestamentaria
numerosos textos pseudoepgrafes no solo en ambiente heterodoxo,
sino tambin al interior del cristianismo; ejemplo de esto sern las
leyendas acerca de al infancia de Jess, sobre la Virgen Mara,
etc.3"La multiplicacin de escritos pseudoepgrafos tanto en el
sector heterodoxo como en el ortodoxo influy notablemente en la
formacin del Canon del Nuevo Testamento, ya que con su presencia
evidenciaban tales escritos la necesidad de fijar un canon de los
libros que se consideraban como portadores autnticos de la
revelacin (evangelios, epstolas, hechos de los apstoles,
apocalipsis), y de excluir todos aquellos que usurpaban el nombre y
la autoridad apostlica para difundir sus propias ideas. Este
proceso fue largo y no exento de contradicciones, hasta que en el
siglo IV qued definitivamente fijado en 27 el nmero de libros que
integran el 4 Nuevo Testamento."
En este contexto el trmino "apcrifo" adquiri un nuevo
significado, esta vez para referirse a todo escrito considerado
espurio, oculto, falso, como contrapartida a lo cannico; no
obstante esto no supuso una condenacin oficial de los libros
apcrifos. En la actualidad se "conservan en total unos cincuenta
evangelios apcrifos, que los estudiosos clasifican de diversas
formas: por su tendencia teolgica -como los evangelios gnsticos-,
por la etapa de la vida de Jess -existen, por ejemplo, evangelios
de la natividad, de la infancia o de la pasin de Cristo-, o por
algunos temas colaterales, como los apcrifos asuncionistas, que
abordan la muerte (o dormicin) de la Virgen."5
1.2. Nota acerca de los evangelios gnsticos. La corriente
gnstica ha sido muy estudiada, no es fcil ofrecer una descripcin
breve completa del mismo.6 No obstante, "gnstico" deriva de la
palabra griega que significa "conocimiento", de ah que "gnstico" se
dice del que posee el conocimiento. El nombre de "gnsticos" fue
aplicado por personas pertenecientes a otros grupos, excepto los
"carpocratianos", pues ellos mismos no lo utilizaban para aplicarse
a s mismos. Entonces, generalmente, se habla de "gnosis" o
"gnsticos" para referirse a una forma de conocer a Dios y las cosas
divinas, propia de filsofos y msticos que han existido antes del
cristianismo y que posteriormente han perdurado an dentro de ella.
Las doctrinas gnsticas que se acercan al cristianismo tienen una
amalgama de elementos provenientes del judasmo de la dispora,
conceptos del neoplatonismo, doctrinas tomadas de religiones persas
o de oriente, y del cristianismo. Con esta mezcla
3 4
ibid, XII-XII Ibd., XIII., ofrece distintas listas de los libros
cannicos en la historia de la iglesia, desde las primeras ahsta las
ms completas: se destacan las de Orgenes, san Atanasio y el decreto
Gelasiano. 5 ANTONIO PIERO, "Evangelios apcrifos. Las otras vidas
de Jess", en: Los Evangelios apcrifos, National Geographic, 58 6
Remitimos a las obras de FRANCISCO GARCA BAZN, La Gnosis eterna.
Antologa de textos gnsticos griegos, latinos y coptos, Madrid, Ed.
Trotta, 2003-2007; JOS MONSERRAT TORRENTS, Los gnsticos. Obra
completa, Madrid, Ed. Gredos, 1990; FRANCISCO GARCA BAZN, El
gnosticismo: esencia, origen y trayectoria , Buenos Aires,
Guadalquivir, 2009
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particular, la doctrina cristiana quedaba desfigurada totalmente
y por esa razn sus seguidores no eran reconocidos como
"cristianos".7 En el contexto descrito ms arriba, y a principios
del siglo II surgen los escritos gnsticos que irrumpieron con gran
fuerza dentro del cristianismo. Veamos que tienen de particular
estos evangelios."Los evangelios gnsticos dibujan una figura de
Jess muy distinta a la que aparece en el resto de los evangelios
apcrifos. Para los seguidores de las corrientes gnsticas, la
salvacin se obtena no por la pasin y la muerte de Cristo en la
cruz, sino por la fe y por el conocimiento revelado (la gnosis) que
Cristo comparta con algunos escogidos. En los evangelios gnsticos,
Jess apareca como un ser divino emanado de un Padre Trascendente,
que era enviado a la tierra con el fin de rescatar a los espritus
aprisionados en la materia, esto es, en la carne."8
Hasta el siglo XVIII se tena muy pocos escritos gnsticos, de
hecho la doctrina y los libros de los gnsticos eran conocidos
fundamentalmente por citas en las obras de los padres de la iglesia
y filsofos que polemizaron con ellos. Este panorama empez a cambiar
a finales del mismo siglo. Se descubrieron textos provenientes de
Egipto y escritos en copto: Pistis Sopha, Los dos tratados de Jeh y
Topografa celeste, el Evangelio de Mara, la recensin corta del
Apcrifo de Juan; la Sabidura de Jesucristo y los Hechos de Pedro.
El principal hallazgo de fuentes directas del gnosticismo fue entre
1945 y 1946 en las proximidades de Nag Hammadi, a unos 100 km al
norte de Luxor (Egipto). Se tratara de una biblioteca del s. IV que
contena 12 cdices y 8 pginas de un decimotercero, conteniendo 52
tratados, la mayora de origen gnstico. Estn escritos en copto, la
mayora en dialctico subacmmico y sahdico, probablemente copiados en
el monasterio de san Pacomio, ubicado a 108 km del lugar. Los
llamados evangelios gnsticos (Sabidura de Jesucristo, Evangelio de
los Doce Apstoles, Evangelio de Felipe, Evangelio de Toms,
Evangelio de Matas, Evangelio de Mara Magdalena, Apcrifo de Juan,
Evangelio de Judas) son un intento de afirmarse sobre la autoridad
de Jess o de alguna persona que ha estado cerca de l, con la
finalidad de respaldar una enseanza que no se encuentra en los
evangelios cannicos, aceptados tradicionalmente por la
Iglesia.9
2. El Evangelio de Judas 2.1. Breve presentacin del Evangelio
gnstico de Judas. Fue descubierto cerca de la ciudad de Al Minya y
difundido en el 2006, aunque el hallazgo fue de unos aos antes. El
anuncio del descubrimiento y de la publicacin respectiva suscit un
amplio eco en donde, como es comn, se mezclaron distintos tonos,7
8
cf. LUIS H RIVAS, Los gnsticos y el evangelio de Judas, Buenos
Aires, Lumen, 2006, 11-12. A. PIERO, ibd. 9 cf. L. H. RIVAS,
op.cit. 51-55
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matices y afirmaciones acerca del mismo. Fue llamado el
"evangelio prohibido", el "evangelio falso", el "mal llamado
evangelio de Judas", etc. El P. Rivas aclara que ni la Iglesia ni
ninguna autoridad eclesistica han prohibido este evangelio. 10 Para
H. LONA, la denominacin de "falso" no hace justicia a la obra,
porque para los gnsticos lo que escriban no era ninguna falsedad;
tampoco el ltimo apelativo sera correcto, pues es anacrnico, ya que
"Evangelio de Judas" es el ttulo de la obra, y adems el proceso de
"canonizacin" de los cuatro evangelios est en plena marcha y habra
sido improbable que el mismo haya sido advertido y aceptado por
muchos cristianos.11
2.1.1. El cdice El envoltorio de cuero con los manuscritos fue
descubierto probablemente en 1978 en Jebel Qarara, cerca de la
ciudad de Naghagha, provincia de Al Minya; parece ser que despus de
muchas peripecias Frieda Nussberger-Tchacos, de Zurich, compra el
cdice en el 2000. Al ao siguiente el texto pasa al poder de la
"Maecenas Foundation for Ancient Art", Basilea. Aqu aparece
Rodolphe Kasser, profesor emrito de copto de la Universidad de
Ginebra, quien asume la responsabilidad de restaurar el texto que
estaba en condiciones deplorables, con la ayuda de Florence Darbre,
especialista en restauracin de textos. En el 2004 se suma Gregor
Wurst, especialista en copto. Aqu aparecera el respaldo de la
National Geographic para la publicacin y posterior difusin.12 El
cdex tiene un total de 66 pginas, stas miden unos 30 cm de alto por
unos 15 cm de ancho, y el texto distribuido mayoritariamente en 26
renglones. El evangelio de Judas est escrito en las pginas 33-58,
en las otras pginas estn otros textos ya conocidos (la Carta de
Felipe a Pedro, un fragmento del Ap. de Santiago) y uno ms,
desconocido hasta ahora (el "Algenes"). Los estudios de datacin
practicados con carbono radiactivo10
cf. L. H. RIVAS, op.cit., 124. Es interesante percibir el tono
de duda o probabilidad con que el autor describe el hallazgo, es
escptico al respecto, mientras que otros autores lo afirman
directamente. 11 HORACIO LONA, Judas Iscariote: verdad y leyenda.
De los evangelios al evangelio de Judas, Buenos Aires,
Ed.Claretiana, 2006, 79-80. En esta obra se presenta las tres
publicaciones ms importantes sobre el tema, todas en junio del 2006
y son: El Evangelio de Judas, editado por R. KASSER; M. MEYER; G.
WURST, comentarios de B.D. EHRMANN, Barcelona, National Geographic
Society & RBA,2006; H. KROSNEY, El evangelio perdido. La
bsqueda del Evangelio de Judas Iscariote , Buenos Aires-Barcelona,
Del Nuevo Extremo: National Geographic & RBA, 2006, sta ofrece
muchos detalles sobre la historia del descubrimiento hasta su
reconstruccin y traduccin; El Evangelio de Judas, edicin y
comentarios de F. GARCA BAZN, Madrid, Ed. Trotta, 2006 12 Para
mayor detalle, se puede ver la lnea de tiempo ofrecida por NATGEO:
NATIONAL-GEOGRAPHIC, Linea de tiempo desde el origen del codice
hasta su auntenticacion, [en lnea], [consulta: 06-12-2011], para
ver en lnea el texto copto del cdice con la traduccin y apreciar el
estado del mismo, las reconstrucciones, etc, ver
NATIONAL-GEOGRAPHIC, The Gospel of Judas, [en lnea], [consulta:
30-11-2011]; G. WURST; M. MEYER, Preliminary trasncription of
digital photographs of the new fragments of the Gospel of Judas by
Mrs. Tchacos-Nussberger, [en lnea], 2009 [consulta: 30-11-2011]
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 7
Literatura Paratestamentaria
permitieron ubicarlo entre el 220 y 340; es decir, el cdice
hallado es autntico. Est escrito en copto sahdico.13
2.1.2. La forma literaria y los contenidos14. El ttulo
"Evangelio de Judas" aparece solamente al final del escrito, pero
se puede notar fcilmente que Judas tiene un papel privilegiado en
el texto; l es el destinatario de la revelacin de Jess. La forma
literaria es el dilogo, algo comn en escritos de este tipo15, ya
que el ttulo no necesariamente refleja la forma literaria del texto
en cuestin. El lugar del dilogo se supone que es Jerusaln (33,
2216) tres das antes de la Pascua (33, 1-6). Por medio del dilogo
el autor expresa los contenidos del dualismo gnstico que determina
su visin teolgica; as Judas recibe de Jess la revelacin sobre la
verdad de un Dios que no es el de los discpulos. Los discpulos
viven en el error, en las pocas veces que aparecen como
interlocutores de Jess, reciben crticas a su modo practicar la fe y
a la gran Iglesia; ellos no tienen ninguna posibilidad de
reaccionar. Los contenidos podran explicitarse de la siguiente
forma: la diversa imagen de Dios, la confesin de fe de Judas, la
eleccin de Judas, la revelacin sobre el origen del mundo, la crtica
a la gran Iglesia (crtica al culto, a los ministros, al Dios del
culto) por el sufrimiento a la plenitud, la hora de la plenitud, la
hora de la entrega.
2.1.3. La estructura Presentamos la estructura y los temas que
van apareciendo, nos parece que la propuesta sigue el criterio de
divisin por temas tratados. Introduccin Contenido y tiempo:
Revelacin de Jess a Judas, tres das antes de la Pascua (33,1-6a)
Mirada retrospectiva sobre la actividad de (33, 6b-21) Jess en el
mundo y sus apariciones a los discpulos 1er.Dilogo: Jess aparece a
sus discpulos (33, 22-35,14a) mientras celebran la eucarista. El
Dios de los discpulos no es el Dios del Salvador 2 Dilogo: Jess y
Judas. Confesin y (35, 14b-36,10) eleccin de Judas; al final Jess
abandona el lugar comn13 14
cf. LONA,Judas Iscariote: verdad y leyenda. De los evangelios al
evangelio de Judas, 81 Todos los puntos que siguen a continuacin,
seguimos a H. LONA, op.cit, 82ss, en su presentacin, cuando no sea
as, lo indicaremos oportunamente. 15 cf. El libro de Toms; La
epstola de los Apstoles; Carta de Santiago; Dilogo del Salvador;
Primer apocalipsis de Santiago; Carta de Pedro a Felipe. 16 El
primer nmero indica la pgina del original copto y la segunda
corresponde al rengln.
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 8
Literatura Paratestamentaria 3er.Dilogo: Al da siguiente.
Revelacin a (36,11-37,20a) los discpulos sobre la generacin grande
y santa. 4 Dilogo: Otro da. Visin de los (37,20b-43,11) discpulos y
la interpretacin de Jess. 5 Dilogo: Jess y Judas o Tema 1:
revelacin a Judas sobre el futuro del gnero humano (43,12-44,14) o
Tema 2: visin de Judas y la interpretacin de Jess (44,15-47,1a) o
Tema 3: revelacin a Judas sobre el origen del mundo y la humanidad
(47,1b-53-7) o Tema 4: revelacin a Judas sobre el futuro de la
humanidad y sobre el fin del mal (53,8-55,20) o Tema 5: Jess revela
a Judas su exaltacin (55,21-58,8) 6 Dilogo: los sumos sacerdotes y
Judas; el momento de la entrega (58,9-26)
El dato temporal dada en la introduccin se cumple a lo largo de
los dilogos. Los cambios de escena se dan por los cambios en los
participantes en el dilogo. En el 1,3 y 4 se encuentra Jess con sus
discpulos; en el 2 y 5 con Judas. La distincin de los cinco temas
en el 5 dilogo surge de la diversidad de contenidos tratados,
excepto el 3 donde Judas hace la pregunta que motiva el desarrollo
temtico. En el ltimo encuentro con Judas, Jess le anuncia su
exaltacin y al final Judas aparece solo con los sumos sacerdotes y
los escribas. Esta propuesta es muy diferente de la que ofrecen los
otros autores mencionados: Kasser, Meyer, Wurst y Garca Bazn.
3. La figura de Judas. 3.1. La tradicin neotestamentaria sobre
Judas, llamado Iscariote: en los sinpticos En la lista de los
apstoles, Judas Iscariote aparece al final, las ms semejantes son
Mc y Mt, en ambas est precedido por el de Simn, el cananeo, es
decir, el zelota. Mt 10,4 Mc 3,18-19 Lc 6,15
, , . . El hecho de que Judas sea mencionado al final y se lo
caracterice como el "que entreg a Jess", quiere decir que los datos
provienen de la tradicin oral, en un tiempo en que no se saba nada
o poco acerca de la mayora de los doce acompaantes de Jess. Luego
ser completada esta informacin en los relatos de la pasin. Algunos
autores sostienen que la formacin de los "doce" responde ms bien a
una realidad postpascual, pero para nuestro autor esto se vuelve
muy problemtica a la hora de explicar lo de Judas. Porque si l
fuera uno de los seguidores como tantos otros, se hace muy
difcilEdgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 9
Literatura Paratestamentaria
explicar su nombre en la lista de los doce cuando ya todos lo
consideraban "traidor". Actualmente la mayora de los autores
considera que el grupo se form en los comienzos de la actividad de
Jess. Los tres evangelistas comienzan el relato de la pasin con la
decisin de los sumos sacerdotes y escribas de arrestar y matar a
Jess (Mc 14,1-2; Mt 26,1-5; Lc 22,1-2) en este contexto aparece el
acuerdo entre Judas y los sumos sacerdotes. Mc y Mt narran este
hecho entre la uncin de Betania y la preparacin de la cena pascual
(Mc 14,3-9; Mt 26,613); en cambio Lc lo ubica entre la decisin de
la autoridad juda de matar a Jess y la preparacin de la cena (Lc
22, 7-14), vemos que las versiones concuerdan en los datos bsicos.
Judas no haba sido mencionado de vuelta despus de la lista de los
doce, abruptamente aparece de nuevo en la parte final, es decir, en
los relatos de la pasin. Mt y Mc no dicen nada sobre los motivos
que lleva a Judas a entregar a Jess; la decisin es sorprendente y
los evangelistas no hacen nada para volverla ms comprensible
siquiera. Pareciera ser que Lc advierte esta dificultad y explica
el hecho diciendo que Satans haba entrado en Judas (Lc 22,3) y se
convierte en un instrumento guiado por el propio Satans. Sea cual
fuere la intencin de Lc, abre nuevos interrogantes: Por qu Satans
entr en Judas? Haba hecho algo como para merecer esa "posesin"? Cmo
se debe interpretar la expresin? Judas se contacta con los sumos
sacerdotes que figuran como los representantes de los enemigos de
Jess y los que poseen el poder de eliminarlo (los del sanedrn). El
encuentro se presenta como un acuerdo entre dos partes: Judas se
compromete a entregarles a Jess y los sumos sacerdotes se
comprometen a pagarle una suma de dinero. Mc y Lc solo hablan de
"plata", ; en cambio, Mt introduce una cita implcita del profeta
Zacaras 11,12 y precisa la cantidad de dinero que Judas recibe: 30
monedas de plata. Aqu Judas aparece interesado en recibir plata
como pago por la entrega, no como en Mc y Lc donde los sumos
sacerdotes acuerdan darle una suma de dinero como agradecimiento y
no como exigencia por parte de l. Mt retomar el tema de las 30
monedas cuando relate el fin de Judas, que slo conocemos por esta
tradicin. Judas busca el momento oportuno para cumplir su parte,
mientras que en Lc se dice que quera hacerlo sin que se enterara el
pueblo. Para Mc y Mt la designacin como el "traidor" referido a
Judas sucede durante la cena pascual, justo antes de las palabras
sobre el pan y el vino, mientras que Lc invierte el orden. En el
centro de la escena est Jess que sabe de la traicin y de quin ser
su agente, as como el castigo que recibir: "ms le valdra a aquel
hombre si no hubiera nacido". Para Mc Jess no es vctima sino que
sabe todo de antemano y sigue este camino para que se cumpla lo que
estaba escrito sobre l. Obviamente, esto no eximira a Judas de la
responsabilidad, al presentarlo como simple instrumento del
cumplimiento de las Escrituras.Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP
10
Literatura Paratestamentaria
En Mc no es claro si Judas se dio cuenta de que Jess saba de su
propsito; Mt quita toda duda, pues Judas mismo le pregunta a Jess
si l era el traidor. En Lc, ni Judas ni ninguno de los discpulos
sabe quin es el traidor. Las tres versiones, seguramente son fruto
de una reflexin cristolgica que prepara el momento del arresto de
Jess. La pregunta necesaria es: saba Jess de antemano que Judas lo
iba a traicionar? Si Jess tena la concepcin cosmolgica propia de su
tiempo, entonces, tambin tena el saber limitado propio de cualquier
ser humano, aun siendo de condicin divina, pero esto es tema de
otra discusin. El momento en el que se decide la historia de Judas
es un momento de "entrega"; la raz de la palabra es entregar, ; as
el "entregador" es el "traidor"; la escena se ubica en el monte de
los olivos. Judas encabeza una multitud armada con espadas y palos,
mandada por los sumos sacerdotes y los ancianos. El haba acordado
una seal para identificar al maestro: a quien bese, a se deben
arrestar. Mientras que Mc describe el hecho e inmediatamente el
arresto; Mt y Lc introducen una pregunta de Jess que queda sin
respuesta: Amigo, para qu has venido? No parece tener mucho
sentido, sobre todo despus del anuncio de la traicin. La pregunta
que Lc pone en labios de Jess es ms directa: "Judas, con un beso
entregas al Hijo del hombre?", subraya la contradiccin entre el
beso como signo de afecto y amistad con la intencin de
traicionarlo. Posiblemente la escena de 2Sam 20,8-10 haya servido
de inspiracin, un ejemplo del beso que lleva a la traicin:Joab dijo
a Amas: "Ests bien, hermano mo?", y sujet Joab con su mano derecha
la barba de Amas 10 como para besarle. Amas no se fij en la espada
que Joab tena en su mano; ste le hiri en el vientre y se
esparcieron sus entraas por tierra. No tuvo que repetir para
matarlo.
El motivo se retomara en Hech 1, 18 donde se dice que los
intestinos de Judas se desparramaron como consecuencia de su cada.
Sobre el final de Judas o su muerte hay dos versiones o tradiciones
con diferencias bien marcadas, la de Mt y la de Lc en Hech.17Mt
27,3-10 Entonces Judas, el que le entreg, viendo que haba sido
condenado, fue acosado por el remordimiento, y devolvi las treinta
monedas de plata a los sumos 4 sacerdotes y a los ancianos,
diciendo: "Pequ entregando sangre inocente." Hech 1,16-20
"Hermanos, era preciso que se cumpliera la Escritura en la que el
Espritu Santo, por boca de David, haba anunciado ya acerca de
Judas, que fue gua de los que prendieron a Jess.17
Porque era uno de los nuestros y obtuvo un puesto en este
ministerio. Ellos dijeron: "A nosotros, qu? T vers." l tir las
monedas en el Santuario; despus se retir y fue17 5 18
ste, pues, con la paga de su crimen compr un campo y cayendo de
cabeza, revent por medio y
Para profundizar en los detalles remitimos a H. LONA, op.cit.,
20-26
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 11
Literatura Paratestamentariay se ahorc.6
todas sus entraas se esparcieron.
Los sumos sacerdotes recogieron las monedas y dijeron: "No es
lcito echarlas en el tesoro de las 7 ofrendas, porque son precio de
sangre." Y despus de deliberar, compraron con ellas el Campo del
Alfarero como lugar de sepultura para los 8 forasteros. Por esta
razn ese campo se llam "Campo de Sangre", hasta hoy.9
19
Y todos los habitantes de Jerusaln lo conocieron, hasta el punto
que llamaron aquel terreno, en su lengua, Haqueldam, es decir:
"Campo de sangre".
Entonces se cumpli lo dicho por el profeta Jeremas: Y tomaron
las treinta monedas de plata, cantidad en que fue apreciado aquel a
quien 10 pusieron precio algunos hijos de Israel, y las dieron por
el Campo del Alfarero, segn lo que me orden el Seor.
20
Pues est escrito en el libro de los Salmos: Quede su majada
desierta y no haya quien habite en ella . Y tambin: Que otro ocupe
su cargo
En ambos textos se intenta demostrar que el fin de Judas
significa el cumplimiento de las Escrituras como la expresin de la
voluntad de Dios, cada autor sigui caminos diferentes. En Mt el
hilo conductor del relato es el texto de Zac 11,12ss y los motivos
fundamentales son sacados de all.18 El tema de la compra del campo
no est en Zac y la cita del profeta Jeremas no corresponde a ningn
texto del profeta, sino una combinacin de distintos textos de la
Escritura que Mt rene libremente para darles un nuevo
significado.19 Es la muerte de un culpable que reconoce su culpa
pero que no encuentra el camino del perdn y por eso decide l mismo
poner fin a su vida. Para L. Rivas, Judas queda en cierta forma
rehabilitado: se arrepinti por sus actos y fue el nico que se
present ante los sacerdotes diciendo que Jess era inocente y
devolvi el dinero que le dieron por haberlo entregado; as el
suicidio de Judas queda ambiguo.20 Lc ubica esta tradicin no en la
seccin narrativa sino en boca de Pedro, la intencin es claramente
eclesiolgica. Judas es presentado no como un simple traidor sino
como el "gua" de los que prendieron a Jess, aunque tambin se
reconoce que fue contado entre los discpulos y que tuvo parte en el
ministerio. Judas no devuelve el dinero, sino que l mismo compra el
campo o la finca (), no se ahorca sino que cae de cabeza (de lo
alto?) ( ) y revienta. Su muerte no es un suicidio, sino que
accidental pero bastante extrao. Los detalles drsticos del relato
corresponden a la forma literaria de describir la muerte de
aquellos que han perseguido a los justos (Sab 4,19) como la18
21
tambin se pueden identificar otros motivos: el amigo traidor que
come en el mismo plato: "hasta mi amigo ms ntimo, del que yo me
fiaba, el que comi mi pan, se puso en contra m" (Sal 41,10); "si mi
adversario se alzara contra m, me ocultara de l, pero eres t, un
hombre de mi condicin, mi amigo y confidente! (Sal 55,14); el amigo
que traicion a David y luego se ahorc: "cuando Ajitfel vio que no
haban seguido su consejopuso en orden los asuntos de su casa y se
ahorc" (2Sam 17,23) 19 fenmeno caracterstico de los targumes y sus
principios y reglas cf. A. RODRGUEZ CARMONA, "Tradicin targmica y
tradicin evanglica", Estudios Biblicos 48 (1990) 338-349. 20 El
suicidio en la antigedad tena diversa aceptacin, los hroes se
suicidaban, era una muestra de valor y honor, pero tambin en otros
sectores era reprobado, cf. L.H.Rivas, op.cit., 102-103 21 Tanto la
traduccin de y no resulta fcil, tiene dificultades y
ambigedades.
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 12
Literatura Paratestamentaria
muerte del impo Antoco Epfanes en 2Mac 9,5-10. Para L. Rivas, el
final de Judas tambin est en conexin con la muerte drstica de los
esposos Ananas y Safira despus de mentir sobre el precio de un
campo (Hech 5, 1-11), pues Lc a lo largo de su evangelio trata
desfavorablemente el tema de las riquezas, de ah la expresin
"precio de iniquidad" que aparece en Hech, al igual que "Mammona de
la iniquidad" (Lc 16,9) y as Judas aparece como una imagen opuesta
a los buenos cristianos (stos compartan sus bienes, Hech 4,34-35).
Mientras los cristianos venden sus campos, Judas compra uno, al
igual que el de la parbola que se excus por no ir a la fiesta
"porque haba comprado un campo"(Lc 14,18). Ahora bien, el dato de
que el acontecimiento haya sido conocido por todos los habitantes
de Jerusaln es una labor redaccional, quiere mostrar la relevancia
de la traicin de Judas y su muerte desastrosa, para poner de
relieve, indirectamente, la importancia de la muerte de Jess. Desde
un punto de vista histrico es muy improbable que esto haya sido as,
pocas personas debieron enterarse del hecho y an menos los que
conocan los detalles de su trgico final. Despus de todo lo visto y
no slo por las diferencias entre las dos tradiciones sobre el fin
de Judas, sino tambin el fuerte trasfondo veterotestamentario que
acompaa a ambos textos nos obliga a preguntar sobre la historicidad
de los relatos. Es significativo que Mc no trasmita ninguna
tradicin al respecto. Para H.LONA, la informacin de las fuentes no
es segura y no se puede descartar la posibilidad de que despus de
los hechos que llevaron a la muerte de Jess, Judas haya
desaparecido de Jerusaln y se perdiera toda informacin sobre l.
Cuando se pusieron por escrito las tradiciones, ya nadie habra
tenido datos seguros sobre lo que haba sido de l.
3.2. La tradicin neotestamentaria sobre Judas, llamado
Iscariote: en Ev. de Juan. Parece ser que el evangelista tuvo que
enfrentar a los que criticaban a Jess, por haber sido traicionado
por sus propios discpulos, por eso desde el principio muestra que
Jess saba quin lo iba a entregar (Rivas). Hay muchos rasgos
ausentes de los sinpticos, se puede constatar un creciente inters
por la persona de Judas (LONA). En Jn est muy claro que Jess conoce
a quin elige y que nadie viene a l si el Padre no lo atrae; de ah
que no deja de sorprender la eleccin de Judas. La primera mencin de
Judas es en 6,7 y aparece como , . En el lavado de los pies,
contexto de la cena (13,28.21), Jess habla del mismo tema y aade
que realiz la inslita eleccin para que se cumpliera la Escritura
sobre el amigo traidor (Sal 41,10) y demuestra su condicin divina
anunciado que uno de los suyos lo entregar (13,19).
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 13
Literatura Paratestamentaria
Jess revela al discpulo amado quin es el que lo entregar con un
gesto amigable: moja un trozo de pan en el plato y lo pasa a Judas
(13,26), pero los dems no entienden y cuando Judas sale, piensan
que se va a dar alguna limosna o hacer una compra, pues era el
encargado de la bolsa, una especie de procurador del grupo. Aqu Jn
conserva un detalle que no lo tienen los sinpticos, Judas se retira
de la cena, y sale en la oscuridad de la noche, todo un smbolo ms
que significativo que presenta a Judas sumergido en las tinieblas y
alejado de Cristo, que es la misma luz. El Ev. de Jn acusa a Judas
de ser "ladrn" (12,4-5). En dos ocasiones se pone a Judas con
relacin al diablo: cuando Jess lo define como un "diablo" (6,70),
luego dir que el diablo es "homicida desde el principio" (8,44), de
ah que todo homicida es "hijo del diablo", y nuestro personaje se
hace solidario de los que matarn a Jess y por eso mismo, l es un
diablo. Luego, antes de comenzar la cena, se dice que el Diablo
haba puesto en su corazn (de Judas) la idea de entregar a Jess; aqu
es el Diablo quien toma la iniciativa y decide que Judas sea un
"traidor" -idea ya presente en Lc-. No obstante para Jn, Jess sigue
gobernando los hechos y Satans no tiene dominio sobre l, de ah que
el mismo Jess ordena a Judas que haga lo que tenga que hacer
(Rivas). La ltima vez que se menciona a Judas es en el episodio de
la entrega. El llega junto con el grupo, una cohorte de soldados22
que viene a prender a Jess y no realiza ninguna accin, queda en
segundo plano, casi en las sombras (algo sugerente) pues, el mismo
Jess se identifica a sus captores (18.3.5). No se dice nada sobre
su final, desaparece en las sombras de la noche y de la historia
que guarda su misterio.
3.3. Judas en el Evangelio de Judas. Lo ms llamativo y quizs lo
que ms atrae al pblico en general de este texto es el punto de
vista peculiar, del todo singular acerca del polmico y
controvertido compaero de Jess, presentado no como "el traidor",
como lo hace la tradicin cannica, sino como el discpulo que mejor
entenda al Maestro, un verdadero conocedor, un gnstico digno de las
revelaciones que Jess no hizo a sus otros discpulos. Judas es
exaltado y pasa a ser el discpulo modelo23. Confiesa su fe en
Jess:Judas le dijo: Se quin eres, y de dnde has venido. T eres del
territorio de los inmortales de 24 Barbelo . Yo no soy digno de
pronunciar el nombre de aquel que te ha enviado, (35, 15-21)
Es elegido por Jess para una misin superior y se aparte del
resto del grupo:
22
increble cantidad, una cohorte era la dcima parte de una legin.
La legin estaba compuesta por 6.000 soldados, luego la cohorte
equivale a 600 soldados. 23 cf. A. PIERO, ibd. 24 nota del
traductor: en el Evangelio Apcrifo de Juan, hallado en la
Biblioteca Nag Hamadi, Barbelo es descripto como El primer poder,
la gloria, la gloria perfecta en los Eones, la gloria de la
revelacin
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 14
Literatura ParatestamentariaJess le dijo: Aprtate de los dems,
yo te ensear los misterios del Reino. Es posible que lo alcances
pero para ello, un trato te habr de causar afliccin. [36] Por
alguien ms sers remplazado, para que los doce [discpulos] puedan
volver a estar completos con su Dios. (35,23- 36,4)
4. Algunas conclusiones sobre la figura de Judas. En este punto
seguimos las conclusiones de H. Lona25. Es muy poco lo que se sabe
sobre los orgenes de Judas, en Jn 6,71; 13,2.26, es nombrado como
el hijo de Simn Iscariote. Las traducciones castellanas lo nombran
como "Judas Iscariote" y es el que resulta ms familiar, pero no
corresponde a ninguna de las formas trasmitidas por los mss
griegos. La palabra que lo designa es Iskariote (Mt 10,4; 26,14; Mc
14,43; Lc 22,3; Jn 6,71; 12,4; 13,2.26; 14,22), en Mc 3,19; 14,10;
Lc 6,16 aparece ; otras variantes leen . El significado del nombre
o sobrenombre no es claro y no existe un acuerdo en su explicacin.
La investigacin actual, no obstante, considera que Iskariote es la
trascripcin griega de una palabra hebrea o aramea y significara
"ish keriot", hombre de Keriot, haciendo referencia a su lugar de
origen. Tampoco tenemos ningn dato cierto sobre su origen, quizs
haya venido de Judea y se uniera a un grupo de corte netamente
galileo, pero tampoco es altamente probable. "Judas" como nombre no
indica ningn origen de Judea, por ej. "Judas Galileo", fundador de
los zelotas, era claramente galileo. Para poder comprender a Judas
habr que ubicarlo en el contexto de su tiempo y para ello ser
necesario considerar muchos datos que no tienen que ver
directamente con su figura, pero conforman el horizonte prximo de
la historia. Aqu solo mencionaremos algunos, pues el mismo, excede
la naturaleza de este trabajo: en tiempos de Jess, los judos
llevaban siglos de experiencia de opresin poltica (desde el exilio
en el 538 a.C hasta la ocupacin de los romanos, 63 a.C). Este hecho
tena una dimensin mucho ms importante de lo que podamos
imaginarnos. era un tiempo de anhelante esperanza mesinica,
paradjicamente, la realidad de ser un pas ocupado acuciaba la
esperanza. (cf. la pregunta de Juan Bautista desde la crcel, Mt
11,2 y par) la esperanza mesinica juda tiene un componente de
concrecin social que le es constitutivo. Un mesas que no cambia
nada la realidad social del pueblo no se corresponde con esa
esperanza. nace el movimiento de los zelotas buscando la
independencia del poder poltico, pero no significa que su motivacin
sea solamente esta. Los "sicarios" formaban una guerrilla urbana de
los otros grupos zelotas que vivan dispersos en la provincia de
Judea.
25
H.Lona, op.cit. 43-62.
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 15
Literatura Paratestamentaria
en este contexto surge el movimiento de Jess de Nazareth en
donde est involucrado Judas. Es innegable que en este grupo haba,
por lo menos uno, que era zelota: Simn, el cananeo, que en arameo
significa el "celoso" (Mc 3,19; Mt 10,4) Quizs se dio algo
semejante con Judas, el Iscariote, pero los textos no ofrecen ms
detalles. Un dato interesante es que la tradicin los mantena unidos
en la lista conservada de los apstoles. (Mc 3,9-10 y par)
El conflicto no surge simplemente de Judas, como si fuera un
personaje difcil, sino tambin tiene que ver con la persona de Jess
y sus muchas facetas que debieron descolocar a sus contemporneos
Basta repasar los puntos de su predicacin y estilo de vida y las
distintas obras que en las ltimas dcadas se han publicado acerca de
su figura26. Solo un momento de esta historia nos interesa por
ahora y refleja toda la expectativa del grupo de discpulos: el
conocido pasaje de la "confesin de Pedro" que lo reconoce como
mesas. El contacto con Jess les haba convencido de la dimensin nica
de su persona. Ahora bien, si se tiene presente el proyecto de Jess
por un lado, y las expectativas del pueblo judo por el otro, el
conflicto era inevitable. La subida a Jerusaln fue entendida
probablemente en forma diferente por Jess y los discpulos. Es
importante tener en cuenta los hechos acaecidos en ese contexto y
las interpretaciones que tuvieron. Conviene distinguir entre los
hechos indiscutibles, las fuentes que aportan otros detalles y la
interpretacin en s. Los evangelios no nos trasmiten los detalles
antes del proceso de detencin, juicio y muerte de Jess, pero
ciertamente no habra sido arrestado por los romanos; aunque stos lo
castigan con la muerte de un zelota. Un funcionario romano,
Pilatos, que conoca bien el problema no est convencido de su culpa
segn nos trasmite la tradicin. Fue Judas, segn los escritos
evanglicos, el que llev a los servidores de los sumos sacerdotes al
lugar en donde estaba Jess y as lo entrega para que lo arrestaran.
Es creble esta fuente? Nos parece que s, porque es muy difcil que
encontraran el lugar donde Jess estaba con los discpulos, en medio
de la noche si no fuera informado por uno de los suyos previamente;
adems el dato que se conserv: Judas "era uno de los doce"(Mc 14,10
y par) no hubiera sido inventado, porque simplemente desprestigiara
o burlara la persona del maestro. Por qu Judas habra entregado a
Jess? Creemos que fue la decepcin frente a la esperanza mesinica no
cumplida. As Judas, parece haber sido el primero en darse cuenta de
la discrepancia entre las esperanzas mesinicas del pueblo en ese
momento y el objetivo que persegua Jess; los dems lo harn ms tarde
cuando Jess es arrestado y se dispersen ellos. Al entregar a Jess,
sella Judas la ruptura con l y con el grupo para "reintegrarse" al
ambiente de donde provino. Un conflicto que se agudiza exige
tomar26
cf. JOS MONSERRAT TORRENTS, Jess el galileo armado. Historia
laica de Jess., Madrid-Mexico-Buenos Aires, EDAF, 2007
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 16
Literatura Paratestamentaria
decisiones para clarificar la propia posicin, de este modo,
Judas toma la decisin de entregar a Jess como respuesta al
conflicto. Por ltimo, quedara todo un captulo para tratar la
interpretacin de la figura de Judas a partir de los datos bblicos e
histricos; pero esto sobrepasa la intencin del presente trabajo27,
no obstante concluimos afirmando que Judas no es ni el instrumento
del diablo ni de Dios para cumplir su voluntad. Tampoco es la
personalizacin del mal o de la traicin. Pues todas estas
interpretaciones absolutizaran la accin de Judas y lo convertira en
un paradigma que representa algo que supera en mucho el mbito de su
obrar.
27
Para ello remitimos a la obra de H. Lona. op.cit.
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 17
Literatura Paratestamentaria
BIBLIOGRAFIAAGUIRRE MONASTERIO, RAFAEL; ANTONIO RODRGUEZ
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Antologa de textos gnsticos griegos, latinos y coptos, Madrid, Ed.
Trotta, 2003-2007. El Evangelio de Judas, editado por KASSER, R.;M.
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de Jess", en: Los Evangelios apcrifos, National Geographic, 57-67.
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Lumen, 2006. RODRGUEZ CARMONA, A., "Tradicin targmica y tradicin
evanglica", Estudios Biblicos 48 (1990) 335-349. WURST, G.; M.
MEYER, Preliminary trasncription of digital photographs of the new
fragments of the Gospel of Judas by Mrs. Tchacos-Nussberger, [en
lnea], 2009 [consulta: 30-11-2011].
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 18
Literatura Paratestamentaria
ANEXOS
Edgar Amado Dejess Toledo Ledezma OP 19
Mat. 10,4 Mat. 26,14,25,47 Mat. 27,3 Mar. 3,19 Mar. 14,10,43
Luc. 6,16 Luc. 22,3,47-48 Juan 6,71 Juan 12,4 Juan 13,2,26,29-30
Juan 18,2-3,5 Hch. 1,16,25 23xSimn el Cananeo y Judas el Iscariote,
el que le entreg. (Mat. 10:4 BJ3)
Mat. 10,4 Mat. 26,14,25,47 Mat. 27,3 Mar. 14,10,43 Luc. 22,47
Juan 12,4 Juan 13,2,29 Juan 18,2-3,5 Hch. 1,25
. (Mat. 10:4 BNT) , , (Mat.26:14 BNT)
Entonces uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue donde los
sumos sacerdotes, (Mat. 26:14 BJ3) Entonces pregunt Judas, el que
iba a entregarle: "Soy yo acaso, Rabb?" Dcele: "T lo has dicho."
(Mat. 26:25 BJ3) Todava estaba hablando, cuando lleg Judas, uno de
los Doce, acompaado de un grupo numeroso con espadas y palos, de
parte de los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo. (Mat.
26:47 BJ3)
, ; . (Mat.26:25 BNT)
. (Mat. 26:47 BNT) , (Mat.27:3 BNT)
Entonces Judas, el que le entreg, viendo que haba sido
condenado, fue acosado por el remordimiento, y devolvi las treinta
monedas de plata a los sumos sacerdotes y a los ancianos, (Mat.
27:3 BJ3) y Judas Iscariote, el mismo que le entreg. (Mar. 3:19
BJ3) Entonces, Judas Iscariote, uno de los Doce, se fue donde los
sumos sacerdotes para entregrselo. (Mar. 14:10 BJ3) Todava estaba
hablando, cuando de pronto se presenta Judas, uno de los Doce,
acompaado de un grupo con espadas y palos, de parte de los sumos
sacerdotes, de los escribas y de los ancianos. (Mar. 14:43 BJ3)
, .(Mar 3:19 BNT)
.(Mar. 14:10 BNT)
. (Mar.14:43 BNT)
a Judas de Santiago y a Judas Iscariote, que fue el traidor.
(Luc. 6:16 BJ3) Entonces Satans entr en Judas, llamado Iscariote,
que era del nmero de los Doce. (Luc. 22:3 BJ3) Estaba todava
hablando cuando se present un grupo; el llamado Judas, uno de los
Doce, iba el primero, y se acerc a Jess para darle un beso. (Luc.
22:47 BJ3)
, (Luk 6:16 BNT) , (Luk 22:3 BNT) , . (Luc. 22:47 BNT)
Jess le dijo: "Judas, con un beso entregas al Hijo del hombre!"
(Luc. 22:48 BJ3) Hablaba de Judas, hijo de Simn Iscariote, porque
ste le iba a entregar, uno de los Doce. (Juan 6:71 BJ3) Dice Judas
Iscariote, uno de los discpulos, el que lo haba de entregar: (Juan
12:4 BJ3) Durante la cena, cuando ya el diablo haba puesto en el
corazn a Judas Iscariote, hijo de Simn, el propsito de entregarle,
(Juan 13:2 BJ3)
, ; (Luk 22:48 BNT) , .(Joh 6:71 BNT)
[] , (Juan 12:4 BNT)
, , (Juan 13:2 BNT) [] . [ ] .(Joh 13:26 BNT)
Le responde Jess: "Es aquel a quien d el bocado que voy a
mojar." Y, mojando el bocado, lo toma y se lo da a Judas, hijo de
Simn Iscariote. (Juan 13:26 BJ3) Como Judas tena la bolsa, algunos
pensaban que Jess quera decirle: "Compra lo que nos hace falta para
la fiesta", o que diera algo a los pobres. (Juan 13:29 BJ3) En
cuanto tom Judas el bocado, sali. Era de noche. (Juan 13:30
BJ3)
, , [] , . (Juan 13:29 BNT) . . (Joh 13:30 BNT)
Le dice Judas - no el Iscariote -: "Seor, qu pasa para que te
vayas a manifestar a nosotros y no al mundo?" (Juan 14:22 BJ3) Pero
tambin Judas, el que le entregaba, conoca el sitio, porque Jess se
haba reunido all muchas veces con sus discpulos. (Juan 18:2 BJ3)
Judas, pues, llega all con la cohorte y los guardias enviados por
los sumos sacerdotes y fariseos, con linternas, antorchas y armas.
(Juan 18:3 BJ3)
, , [] ; (Juan 14:22 BNT) , . (Juan 18:2 BNT) . (Juan 18:3
BNT)
Le contestaron: "A Jess el Nazareno." Dceles: "Yo soy." Judas,
el que le entregaba, estaba tambin con ellos. (Juan 18:5 BJ3)
. . . (Juan 18:5 BNT) , , (Act 1:16 BNT)
"Hermanos, era preciso que se cumpliera la Escritura en la que
el Espritu Santo, por boca de David, haba anunciado ya acerca de
Judas, que fue gua de los que prendieron a Jess. (Hch. 1:16 BJ3)
para ocupar en el ministerio del apostolado el puesto del que Judas
desert para irse a su propio puesto." (Hch. 1:25 BJ3)
. (Hch. 1:25 BNT)
este es el ttulo aplicado a Judas en los sinpticos.