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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA 61 Tema 11.- La Iglesia en la Amazonía FUNDAMENTACIÓN Los moradores de la selva pertenecen a lo que en los libran llaman “Amazonía” porque los ríos desembocan en el Amazonas. Todos tienen una manera de vivir, de pensar, de creer, muy parecida. Son costumbres heredadas de los antiguos. Entre los pueblos hay muchas cosas parecidas: comidas, vestidos, celebraciones que todos festejamos. Para todos los moradores, los ríos son las despensas y el mercado. Y todos hacen trabajos similares: la caza y la pesca, la chacra. Las creencias también son comunes: creen en Dios, Ser Supremo, aunque cada grupo le haya dado un nombre diferente. Saben conversar con Dios para que les ayude en la chacra, en el monte, en el río. A este ambiente llegaron los misioneros para completar su visión religiosa: la figura de Jesús y el amor de Dios Padre por cada uno de sus hijos e hijas. Conoce y valora la evangelización llevada a cabo en la Amazonía. Juan 10, 1-21 CONOCEMOS LA REALIDAD Despertando el interés Trabajo en grupos. Escenifican algún mito amazónico que conozcan, con toda la creatividad que quieran expresar, ya sea musical, mímica, escénica, coreográfica... A continuación explican el significado y el mensaje a nivel social y a nivel religioso que encierra el mito. Recogiendo los saberes previos ¿Compartan alguna historia de la Amazonía que ustedes conozcan? ¿Qué valores encierra la cultura amazónica antigua? ¿Qué temores están presentes en la cultura amazónica? ¿Qué riquezas posee la Amazonía? Cuando terminen sus estudios, ¿piensan quedarse en la Amazonía o ir a otro lugar? Confrontando los saberes La religión católica se ha introducido en la Amazonía, ¿creen que ha sido un aporte positivo o negativo? ¿Cuáles creen que pueden ser las causas de que en la Amazonía no se viva fielmente la religión católica? ¿Creen ustedes que los ritos de la religión católica se ven un poco como elementos mágicos? Ustedes que son jóvenes, ¿cómo creen que se puede vivir la fe en Jesucristo aquí en la Amazonía?
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Tema 11.- La Iglesia en la Amazonía

Jun 27, 2022

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Page 1: Tema 11.- La Iglesia en la Amazonía

TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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Tema 11.- La Iglesia en la Amazonía

FUNDAMENTACIÓN

Los moradores de la selva pertenecen a lo que en los libran llaman

“Amazonía” porque los ríos desembocan en el Amazonas. Todos tienen

una manera de vivir, de pensar, de creer, muy parecida. Son costumbres heredadas de los antiguos.

Entre los pueblos hay muchas cosas parecidas: comidas, vestidos,

celebraciones que todos festejamos. Para todos los moradores, los ríos

son las despensas y el mercado. Y todos hacen trabajos similares: la caza y la pesca, la chacra.

Las creencias también son comunes: creen en Dios, Ser Supremo,

aunque cada grupo le haya dado un nombre diferente. Saben conversar con Dios para que les ayude en la chacra, en el monte, en el río.

A este ambiente llegaron los misioneros para completar su visión

religiosa: la figura de Jesús y el amor de Dios Padre por cada uno de sus hijos e hijas.

Conoce y valora la evangelización llevada a cabo en la Amazonía. Juan 10, 1-21

CONOCEMOS LA REALIDAD

Despertando el interés

Trabajo en grupos.

Escenifican algún mito amazónico que conozcan, con toda la creatividad que quieran expresar, ya sea musical, mímica, escénica, coreográfica...

A continuación explican el significado y el mensaje a nivel social y a nivel religioso que encierra el mito.

Recogiendo los saberes previos

¿Compartan alguna historia de la Amazonía que ustedes conozcan?

¿Qué valores encierra la cultura amazónica antigua?

¿Qué temores están presentes en la cultura amazónica?

¿Qué riquezas posee la Amazonía?

Cuando terminen sus estudios, ¿piensan quedarse en la Amazonía o ir a otro lugar?

Confrontando los saberes

La religión católica se ha introducido en la Amazonía, ¿creen que ha sido un aporte positivo o negativo?

¿Cuáles creen que pueden ser las causas de que en la Amazonía no se viva fielmente la religión católica?

¿Creen ustedes que los ritos de la religión católica se ven un poco como elementos mágicos?

Ustedes que son jóvenes, ¿cómo creen que se puede vivir la fe en Jesucristo aquí en la Amazonía?

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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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CONSTRUYENDO EL APRENDIZAJE

Iluminando con la Palabra de Dios

Contexto

El primer europeo que navegó cerca al estuario del río Amazonas fue Américo Vespucio. La siguiente expedición para explorar las costas brasileras y el estuario del Río Amazonas fue dirigida por Vicente Yánez Pinzón, que había sido el comandante de la Niña en el viaje de Colón en 1492. Después de un mes, Diego de Lepe, se adentró en el río y tuvo contacto con numerosos indígenas y fue el primero en llamar Marañón al gran río.

Francisco de Orellana realizó la primera exploración del “Río Amazonas”. Describió numerosos pueblos indígenas y aldeas con extensos campos cultivados. Logró llegar al océano, llevando a cabo el más grande viaje de exploración fluvial.

A partir de 1570, la Corona española autorizó un lento pero constante flujo de jesuitas y franciscanos en los territorios del Virreinato del Perú.

Sin duda, fueron los misioneros que exploraron la selva llevando la evangelización, los forjadores de la integración de la Amazonía al territorio del Virreinato y a la República peruana. Fueron ellos, también, los que escribieron la historia, describieron la geografía y estudiaron las lenguas y las costumbres de los pueblos amazónicos.

La historia de estas misiones es grandiosa y estimulante por el heroísmo desplegado, debido a las dificultades y obstáculos enormes de todo tipo. Cuando leemos las relaciones o crónicas de los misioneros se percibe un esfuerzo casi sobrehumano, alentado por el impulso de la fe.

Tanto los jesuitas como los franciscanos se preocuparon en fundar pueblos y reducciones para instruir a los pobladores en la religión católica.

La misión de los jesuitas

En 1638, con la llegada de los misioneros jesuitas, comienzan las famosas fundaciones de las Reducciones o Pueblos Misionales, en las cuales se catequizaba a los indígenas. La Compañía de Jesús o jesuitas tuvo acceso a la Evangelización de toda la selva, extendiendo su actividad misionera a todo el territorio de la Amazonía.

Los misioneros jesuitas, amaron al poblador amazónico y se adaptaron a su ambiente, le defendieron de los atropellos y cruel explotación de los conquistadores. Les facilitaron el trabajo, proporcionando hachas, azuelas, machetes; les adiestraron en la agricultura y, sobre todo, les educaron en los principios de la convivencia y de la vida cristiana. Tampoco faltó la sangre martirial de algunos misioneros, por ejemplo, el P. Francisco Figueroa, en la desembocadura del Aipena.

Fueron muchos los viajes de exploración que hicieron los jesuitas. Los padres Acuña y Artieda, que exploraron el Napo, Marañón y Amazonas. El padre Lucero exploró el Marañón y amazonas, fundando el pueblo de La Laguna. El padre Samuel Frizt, explorando las riberas del amazonas y entrando en contacto los las etnias más importantes de la zona; fundó más de 33 pueblos, destacando el de Nuestra Señora de las Nieves de Yurimaguas; se le considera uno de los más grandes misioneros del Marañón; trazó el primer mapa del Amazonas y escribió gramáticas y vocabularios de los idiomas más extendidos en su misión.

En 1767, los jesuitas fueron expulsados de todo los territorios españoles, incluidos el de la Amazonía. La salida de los jesuitas supuso para la obra misional un derrumbe casi completo. Con visión histórica podemos indicar que la expulsión de los jesuitas del Marañón produjo un cambio radical para el futuro de la Amazonía.

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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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La misión de los franciscanos

Al expulsarse a los jesuitas de esta zona de la Amazona la misión pasó a manos de los clérigos seculares. Estos estuvieron poco tiempo.

La Congregación franciscana de Quito asumió la Misión que dejó el clero secular. No se siguió el trabajo dejado por los jesuitas, por lo que al final se produjo una gran inestabilidad en la guía pastoral y pastoral de los pueblos amazónicos.

Al declararse la independencia el 28 de julio de 1821, el obispo Rangel, huyó de Moyobamba, rumbo a España. La mayoría de los misioneros franciscanos eran españoles y tuvieron que retirarse. Sólo en algunas poblaciones como Lamas, Yurimaguas, y Lagunas, quedaron curas seculares para la atención pastoral del pueblo.

En 1880 empieza una de las épocas más prósperas para algunas empresas en la amazonia: la época de caucho. La shiringa o el árbol del caucho, traerá la riqueza a los hombres venidos de otros países, así como nacionales de la costa y sierra peruana, generando todavía una mayor opresión para los indígenas, que son utilizados como mano de obra en la extracción de la goma, escribiendo otra página sangrienta en la historia de la selva.

La misión de los agustinos

En 1901 la congregación de los agustinos se hace cargo de toda esta zona de Loreto. En esta época se está dando la explotación del Caucho, las personas venidas de fuera han sometido a los indígenas a una esclavitud tiránica. Desde Iquitos los agustinos comenzaron con la Evangelización de la zona, venciendo distancias, se hicieron presentes en Yurimaguas, Borja, Lagunas, Jeberos, no de forma permanente, sino con visitas pastorales.

Es mérito de los agustinos el haber informado a las autoridades eclesiásticas nacionales la verdadera situación en que se encontraba esta región y haber contribuido a la creación de nuevas demarcaciones misionales.

Escuchamos la Palabra

Yo soy el Buen Pastor. El buen pastor da su

vida por las ovejas. No así el asalariado, que

no es el pastor ni las ovejas son suyas. Cuando

ve venir al lobo, huye abandonando las

ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa. A él

sólo le interesa su salario y no le importan

nada las ovejas.

Yo soy el Buen Pastor y conozco a los míos

como los míos me conocen a mí, lo mismo

que el Padre me conoce a mí y yo conozco

al Padre. Y yo doy mi vida por las ovejas.

Tengo otras ovejas que no son de este corral.

A esas también las llevaré; escucharán mi

voz, y habrá un solo rebaño con un solo

pastor. (Juan 10, 11-16)

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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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Interiorizando la Palabra

En el pueblo de Israel, todos conocían a los pastores, pues eran figuras cotidianas y familiares. Jesús, partiendo de esta realidad, compara la forma en que los dirigentes judíos cuidan de su pueblo y la forma en que él va a hacerlo. Mientras que las autoridades judías sólo aparentan guiar a su pueblo, cuando en realidad, están vendidos a los poderes extranjeros y de dominación, Jesús muestra que él está dispuesto a dar su vida para que cada persona pueda conseguir la vida plena, que consiste en estar unidos a Dios, en tenerlo por Padre, en amarlo, amándolo a través de las personas que nos rodean.

El Reino de Jesús, se vive en el corazón, y no en las apariencias externas. En el Reino de Jesús, se gasta la vida para que otros tengan vida, y no se hacen ridículas limosnas. En el Reino de Jesús, se sirve a los más pequeños y desprotegidos, y no se firman convenios con los poderosos para vivir mejor aunque los demás mueran de hambre.

Con tal de conseguir que todos puedan tener acceso a este Reino, donde se podrá vivir en paz y en armonía, Jesús es capaz de dar todo lo que tiene, hasta la vida si es necesario. Y vemos, que al final tuvo que dar la vida, para que nosotros, cada uno de nosotros, sus ovejas queridas, podamos tener la vida plena en el corazón de Dios.

Mensaje para hoy

En nuestra sociedad se va extendiendo cada vez con mayor fuerza la idea de que cada uno es dueño de su vida y puede hacer con ella lo que quiera, con la convicción de que cada uno debe vivir su mundo. Y así llegamos al convencimiento, de que no debemos preocuparnos por los demás, de que cada uno debe arreglar sus asuntos por sí solo, de que no debemos buscar la justicia en el otro, porque quizás todo eso nos traiga problemas a nosotros mismos.

Los misioneros fueron personas que sí se comprometieron con los demás, porque querían llevarles esta gran noticia: Dios es Padre, les ama a cada uno de ustedes y quiere que sean felices. Por llevar esta Buena Nueva, como el Buen Pastor, enfrentaron peligros y defendieron a su gente hasta la muerte, pues no podían permitir que los falsos pastores los abandonaran en el peligro.

Cada uno de nosotros debemos seguir este gran ejemplo de Jesús y de los grandes misioneros, tratando de hacer algo por los demás, por aquellos que más nos necesitan, por aquellos que sin nosotros no serán escuchados, ni les será aplicada justicia. Hagamos de buenos pastores allá donde estamos. En cada lugar, tendremos esas personas perdidas por la vida, que necesitan de alguien que se les acerque y les dé una buena palabra, una sonrisa, una pequeña ayuda, una experiencia de amor.

Conversamos:

¿Qué es lo que más admiras de los primeros misioneros en la Amazonía?

¿Crees que el mensaje del Evangelio es bueno para los habitantes de la Amazonía?

¿De qué manera ha contribuido la Iglesia con sus misioneros en la Amazonía?

¿Cuáles crees que son los retos que tiene la Amazonía en estos momentos y cómo puede apoyar la Iglesia en esta tarea?

¿Cómo debería presentarse el mensaje evangélico a los jóvenes amazónicos hoy día?

Recordamos

Los misioneros fueron los forjadores de la integración de la Amazonía.

Los misioneros se preocuparon en fundar pueblos y reducciones para instruir a los pobladores en la religión católica.

Los misioneros amaron al poblador amazónico, se adaptaron a su ambiente y le defendieron de los atropellos y explotación de los conquistadores.

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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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APLICAMOS LO APRENDIDO

Actuando en la vida

Escenificación por grupo.

Elijan uno de los mitos religiosos que existen en nuestra zona y escenifíquenlo. Explicarán también su significado y lo comparan con lo que nos dice la Iglesia.

Danza por grupos.

Eligen una danza típica de nuestra zona, con un sentido religioso. Explican su significado y lo comparan con la doctrina de la Iglesia.

Trabajo en grupo.

En un papelote grafican los grandes problemas y retos a los que se enfrentan los jóvenes amazónicos.

Fotomontaje por grupos.

En grupos realizan un fotomontaje sobre los grandes problemas ambientales y cómo se pueden buscar soluciones desde una perspectiva cristiana.

Grafican un mapa

En un papelote dibujan un mapa de la Amazonía. Buscan los lugares donde están asentadas las diferentes etnias que los alumnos y alumnas conocen (al menos diez) y describen alguna característica social y religiosa de ellas.

Reflexión por grupos.

De forma individual se reflexionan las siguientes frases. Después se exponen en el grupo, que elige una de ellas para presentarla a los demás grupos.

La Tierra no es una herencia de nuestros padres, sino un préstamo de nuestros hijos. (Antiguo refrán indio)

Conviertan un árbol en leña y podrá arder para ustedes; pero ya no producirá flores ni frutos. (Tagore, Rabindranath)

Mil máquinas nunca harán una flor. (Luis Fernando Finat)

Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha. (Hugo, Victor)

Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un árbol. (Martín Luther King)

Cuando Plantamos árboles, plantamos las semillas de la paz y de la esperanza. (Wangari Maathai)

Sólo cuando el último árbol esté muerto, el último río envenenado, y el último pez atrapado, te darás cuenta que no puedes comer dinero. (Sabiduría indoamericana)

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TEMA XI: LA IGLESIA EN LA AMAZONÍA

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Compromisos:

Personal Agradeceré a Dios por hacerme vivir en esta naturaleza extraordinaria.

Social Con otros compañeros y compañeros ayudaré a personas que nos necesiten.

Eclesial Participaré en grupos de jóvenes cristianos.

Ecológico Buscaré aliados para defender nuestra Amazonía.

Viviendo la Celebración

En este momento vamos a colocar una mesita en el centro del aula, con una Biblia y una vela encendida,

significando que Dios está en medio de nosotros. En su presencia, realizamos esta celebración.

Iniciamos: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

Entonamos el canto: “Alabanza Amazónica”.

1.- Al principio era la selva paraíso terrenal, una tierra de armonía y de paz. Y encima estaba el cielo con su luna y con su sol; con sus nubes, sus estrellas y su luz (bis).

¡Gracias, Señor! ¡Gracias Padre Dios! Diste al universo armonía y tu corazón a nuestra Amazonía (bis).

2.- De las fuentes de la vida comenzaron a surgir vegetales y animales por doquier; manantiales con sus peces que jugaban con la luz, y las aves que brindaban su cantar (bis).

3.- Pero nadie preguntaba para quién era la luz; para quién, aquellos bosques de color, Y el aire transparente, y las aves y la flor. Para quién tanta belleza y esplendor (bis).

4.- Y surgiendo en los confines de la casa de la luz, de las aguas, de los vientos y del sol, llegó al fin el que faltaba, para oír y preguntar, y formar en nuestra selva un hogar (bis).

Elevamos alguna petición de perdón. Después se invita a que los alumnos y alumnas puedan añadir alguna más.

Recordamos brevemente el evangelio de hoy.

A continuación se invita a que los alumnos y alumnas realicen un pequeño comentario sobre el mensaje que nos deja el Evangelio para nuestras vidas.

En forma espontánea los alumnos y alumnas hacen una oración de petición o de agradecimiento, relacionada con el tema de hoy.

Recitan todos juntos la siguiente oración:

Te damos gracias, Padre,

por habernos reunido en esta

comunidad.

Gracias porque estamos unidos en tu

nombre,

buscando cómo vivir con fidelidad

la buena nueva del evangelio.

Danos, Señor,

la fuerza para la marcha,

ayúdanos a superar las dificultades,

que los tropiezos y las vacilaciones

no detengan nuestra caminada.

Que no perdamos el rumbo,

que nuestra dirección sea hacia el Reino,

que el viento que nos empuje

sea el aliento de tu Espíritu,

presente y vivo entre nosotros.

Al finalizar las peticiones, oramos con el Padre Nuestro.

Terminamos la celebración con el canto: “Alabanza Amazónica”.