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Universidad Autónoma de San Luis Potosí
.v. Coordinación de
e y Humanidades
"El papel de los curas párrocos en los pueblos de la provincia de San Luis Potosí durante las Reformas
Borbónicas. (1786-1821)"
TESIS QUE PARA OBTENER EL GRADO DE
LICENCIATURA EN HISTORIA
PRE S ENT A: Lorena Gpe. Bustamante Chávez
DIRECTORA DE TESIS:
Dra. Ana Irisarri Aguirre
San Luis PotosÍ, S.L.P. Abril 2008
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~e~ Coordinación de el< Ciencias Sociales
' e y Humanidades 1
EGRESADO: BUSTAMANTE CHAVEZ LORENA GUADALUPE
TITULO DE TESIS: 1\ -1 \ 1 \ Por la presente tenemos a bien comunicar a usted que, después de revisar el . t I Cl J)( e 1" e leí ( l\j trabajo cuyo titulo aparece al margen, cada no de nosotros, miembros del Comi té de
¡) G tr () ( U') u\ l () ) I) U l hlc ') Tesis, emitimos nuestro dictamen aprobatorio, considerando que dicho trabajo reúne 1 \ los requisitos académicos necesarios para presentar el examen profesional d ( ( O P f v j' j 11 ( I Ci d t. correspondiente.
SGn l UiJ Poi Uj; dUf(irl1C ! CJ j Re r'" (il¡ OJ í3c í bo'n I ((~) f
( 11 B b'- 16 di] ~ \
ATENTAMENTE "SIEMPRE AUTÓNOMA, POR MI PATRIA. EDUCARÉ"
San Luis Potosí, S.L.P. a 31 de MARZO de 2008.
Nombre de los asesores
Clave Oil ["d 6~
e Genera9ión :J CS l\n (10
Año (ingreso"egreso)
J CO:3 '.. J 00 '7
C7 El Alumno E:7 Secretaria Académica CCSyH E:7 Depto. Control Escolar CCSyH C7 Coordinación de Licenciatura
Firma de aceptación del trabajo escrito .
Fecha
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2
AGRADECIMIENTOS
• A Dios, por pennitinne estudiar una carrera y tenninarla. Por bendecir mi vida y por danne una oportunidad de superación personal.
• A CONACYT, por permitimle integranne a un proyecto de investigación como becaria presentando este trabajo como resultado de ello . El proyecto se titu ló: La vida diaria en San Luis Potosi a finales del virreinato: una primera aproximación.
• A la Dra. Ana Irisarri Aguirre, por animanne y apoyanne incondicionalmente en la elaboración de este trabajo así como durante toda la licenciatura.
• Al Dr. Alexander Betancourt, a la Maestra Gabriela Torres Montero , al Dr. Carlos Casas, por leer este trabajo y apoyanne con sus aportaciones y comentarios para su enriquecimiento.
• A mi madre, por ayudarme en esta etapa de mi vida, dándome apoyo y sustento para salir adelante y alcanzar mi objetivo.
• A mis hennanos Ili, Pao, Toño, Chris y Noel, por su ánimo, confianza y soporte en todo lo que emprendo.
• A mis tíos Merey y Mele, por su cariño y mejores deseos . • A mis maestros, por su apoyo y confianza, sus consejos y enseñanzas durante mi
estancia en la Universidad. • A Liliana e Iveth, por su amistad incondicional y por todo 10 que compartimos
juntas durante estos cuatro años y medio, haciendo que mi estanci a en la Coordinación fuera desestresante, divertida, e interesante. Tambi én qui ero agradecer a mis compañeros y amigos Rosa María, Memo, Jacinto, Móni ca, Marichuy, Neira, Arely, Tina, Maricela y Moni por su amistad y todos sus bueno deseos.
• Finalmente, a mi pequeño Osear, quien tuvo la paciencia suficiente para entender que tuve que dedicar a la escuela, el tiempo que era para él, pero que con su amor, apoyo y confianza hoy los dos, pudimos alcanzar esta meta.
3
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INDICE
INTRODUCCiÓN ....................................... . .......................................... 5
CAPÍTULO l. LAS REFORMAS BORBÓNICAS ............................................................ J9 1. El planteamiento de las reformas: de los Habsburgo a los Borbones ............. . .. 20 2. El reformismo en las Indias .................................................................. 22 3. Las reformas en la Nueva España ........................................................... 25
3.1 La llegada de Gálvez a Nueva Esparia .............................................. 26 3.2 Las reformas económicas, militares y sociales de la Nueva Esparia ............. 27 3.3 La implementación de las Intendencia ............................................... 3]
4. Las reformas en San Luis Potosí.. .......................................................... 35 4.1 La administración pública y la organización territorial de la Intendencia
potosina ........ ........................................................................................ 37 4.2 La condición social y económica que se vivía en la provincia potosina ........ 39
CAPÍTULO 11. LA RELACIÓN IGLESIA-ESTADO CON LA IMPLANTACIÓN DE LAS REFORMAS BORBÓNICAS .......................... .. ........................................ 42 1. Las reformas eclesiásticas durante el régimen de los Borbones ...................... .43
1.1 La Iglesia Católica y el gobierno de los Habsburgo ............................. .43 1.2 La Iglesia Católica y el gobierno de los Borbones ............................... .44 1.3 La influencia del jansenismo o la del regalismo en el mundo hispánico ...... .44 1.4 La reestructuración eclesiástica .................................................... .46
1.4.1 La secularización del clero ............................................... .46 1.4.2 La expulsión de losjesuitas ....... . ....................................... .47 1.4.3 La restricción de las actividades civiles ................................ .49 1.4.4 La pérdida de inmunidad eclesiástica .................................... 50 1.4.5 Lasflnanzas de la Iglesia .................................................. 53
2. La relación Iglesia-Estado durante el reformismo borbónico ......................... 53
CAPÍTULO 111. LA ESTRUCTURA ECLESIÁSTICA EN SAN LUIS POTosí y LA FIGURA DEL PÁRROCO ...................................... .. .. ..... ........................................... 57 1. La administración eclesiástica en San Luis Potosí: obispados, parroquias y
misiones ..................................................................................... . .... 58 1.1 Los obispados ............................. . .... . ........................................ 58 1.2 Las parroquias y las misiones ........................................................ 59
2. La provisión de los puestos de párrocos en la provincia de San Luis Potosí.. ..... 6J 2.1 Los aspirantes al sacerdocio: su formación y ordenación ....................... 62 2.2 En búsqueda de una parroquia .......................................... . ............ 62
3. Párrocos: denunciados y denunciantes ..................................................... 68 3.1 Curas párrocos como denunciados ............................................ .. .... 69 3.2 Curas párrocos como denunciantes ................................................. 78
1 ...
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4
CAPÍTULO IV EL PÁRROCO ANTE LA PRIMERA ETAPA MOnERNIZADORA ................ 82 1. Actividades de los curas párrocos ........................................................... 83
l . Los curas párrocos y su participación dentro de la "política" ........... . ...... 83 2. Los curas párrocos y la "educación" del pueblo .................................. 87 3. Los curas párrocos y su papel en la "salud" y el "bienestar" de la población ... ................................................................................. 92 4. Los curas párrocos como notarios en lo "civil" ................................... 97 5. Los curas párrocos y la" economía" de los habitantes de sus comunidades .. 99
CONCLUSIONES ..................... . .... . ... . ................................................ 104
FUENTES Y BIBLIOGRAFÍA ............................................................... 11 O
ANEXO ........................................................ ... .................................. 119
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5
INTRODUCCIO
Con la llegada de la dinastía borbónica al Imperio español se implementaron
varias reformas orientadas a la centralización de su gobierno, este cambio también dio
alcance a las tierras americanas y es conocido como el reformismo . Éstas contemplaron la
reestructuración administrativa y política de los reinos, ya que de acuerdo con Jaime E.
Rodríguez O. , Brian Hamnett y David A. Brading,1 a los Borbones no les intere aba que
las Indias fueran reinos, sino más bien, colonias. De de su perspectiva, las colonias no
tenían por qué ser gobernadas por los americanos, ya que esto podía facilitar la creación
de redes familiares o de clientelismo entre las élites gobernantes de cada región
frustrando el deseo del Estado por alcanzar dicha centralizac ión.
Estas innovaciones no sólo fueron políticas sino que abarcaron todos los aspectos
de la sociedad, entre ellas se encuentran las reformas de carácter económico, militar y las
religiosas. Estas últimas fueron especialmente importantes, ya que por medio de ell as el
Estado trató de limitar el poder y frenar la influencia que ejercía el clero católico en el
territorio americano.
I Véase: Jaime E. Rodríguez O. La independencia de la América española. (M éxico, olegio de MéxicolFondo de Cultura Económica, 2005. 472 pp.) ; Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado y cri sis multidimensional en el periodo colonial tardío, 1760- 1808" en Josefina Zoraida Vázquez. (Coord .) In terpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, ueva Imagen, 1992, pp . 67-108) ; Y Horst Pietschmann. Las refo rmas borbónicas y el sistema de intendencias en Nueva España: un estudio político administrativo . (México, Fondo de Cultu ra Económica, 1996. 322
pp.). David A. Brading. Mineros y comerciantes en el México borbónico 1763- 18 / 0. (México, Fondo de Cultura Económica, 2004, 498 pp.).
:
6
La labor principal de los párrocos estaba concentrada en atender las necesidades
espirituales de la población de su parroquia, aunque en realidad , sus funciones iban
mucho más allá: además de administrar los sacramentos actuaban como jueces,
representantes de los vecinos, mediadores entre éstos y las autoridades, abogados,
maestros, etc. Este trabajo de investigación pretende conocer cómo afectaron las reformas
borbónicas a la relación que mantenían los curas pruTOCOS de la provincia de San Luis
Potosí con sus feligreses y las funciones que éstos ejercían.
Para ello se analizarán si las leyes de reforma dictadas por los Borbones fueron o
no respetadas por los párrocos de la provincia potosina; cuáles fueron las consecuencias
del h cho de intentar limitar el poder de la Iglesia al implantarse las reformas borbónicas;
cómo fue la participación del párroco en la vida com nitaria de su localidad; hasta qué
punto servía de referente para solucionar los problemas diarios, qué actitud tomó ante los
nuevos procesos económicos que incluían el fomento agrícola o la venta de tierras
comunales; cuál fue su papel en los procesos modernizadores como la fundación de
escuelas de primeras letras y la construcción de cementerios fuera de las iglesias o el de
la distribución de las primeras vacunas para la población; y finalmente, conocer cómo fue
la relación existente entre el clero regular y el secular con las nuevas autoridades civ i les
que fueron designadas durante el reformismo borbónico, en éste caso, con los
subdelegados, el intendente y el virrey.
La bibliografia escrita sobre el siglo XVIII en América y en la Nueva España es
muy abundante; entre los trabajos centrados en la política de los Borbones en América
:
7
podemos citar el de José de la Puente titulado "La administración colonial,,2, que refiere
al modo en que la época colonial estableció un marco institucional único que permitió la
unificación de Iberoamérica, destacando cómo fue la administración colonial y sus
organismos de gobierno, la burocracia real , la iglesia y su organización, las Leyes de
Indias y por supuesto, el reformismo borbónico.
Los trabajos de Las reformas Borbónicas en América. El Plan de Intendencias y
su aplicación de Luis Navarro García,3 "Las reformas borbónicas: un proyecto
neocolonial" de Felipe Castro Gutiérrez4 y el de Las intendencias de Nueva España de
Aurea Commons,5 explica cómo fueron establecidas las Intendencias en América,
principalmente en el territorio de la Nueva España y cuál fueron las consecuencIas
políticas, económicas y sociales de ello.
Stanley J. Stein "Bureaucracy and Bussiness in the Spanish Empire, 1759-1804:
Failure of a Bourbon Reform in Mexico and Peru,,6, estudia la manera en que la
burocracia de ambos virreinatos se vio involucrada con la explotación comercial del
repartimiento de mercancías a la población indíge a; y Miles Wortman, "Bourbon
Reforms in Central America: 1750-1786,,7, explica la importancia de las reformas
borbónicas para entender la independencia latinoamericana.
2 José de la Puente Brunke. "La administración colonial" en Historia cormín de Iberoamér':ca. ( spaña,
Edad-ensayo, 2000, pp. 203-240). 3 Luis Navarro García . Las reformas Borbónicas en América. El Plan de Intendencias y su aplicación. (Sevilla, Secretariado de Publicaciones de la Universidad de Sevilla, 1995, 140 pp.). 4 Felipe Castro Gutiérrez. "Las reformas borbónicas: un proyecto neocolonial" en Nueva Ley y Nuevo Rey. Reformas borbónicas y rebelión popular en Nueva España . (México, Colegio de Michoacán-Institllto de Investigaciones Históricas UNAM, 1996, pp. 98-102). 5 Aurea Cornrnons, Las intendencias de Nueva España (México: AM, 1993, 253 pp.). 6 Stanl y J. Stein. "Bureaucracy and Bussiness in the Spanish Empire, 1759- 1804: Failure oC a BOllrbon Reform in Mexico and Peru" en Th e Hispanic American Historical Review. (vo l. 61 , no. 1, 198 1, pp. 2-28) . 7 Miles Wortman. "BOllrbon Reforms in Central America: 1750-1786" en Th e Americas. (vol. 32, no. 2,
1975, pp. 222-238) .
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8
El trabajo de Jaime E. Rodríguez O., La independencia de la América española,8
pretende que sean entendidos los movimientos revolucionarios de independencia
hispánicos al analizar primero, los antecedentes históricos que le precedieron y que se
remontan a la toma del poder de los Borbones y su nuevo sistema de centralización del
poder.
Entre los trabajos historiográficos que se refieren a la Nueva España está la
recopilación hecha por Josefina Zoraida Vázquez titulada Interpretaciones del siglo XVIII
mexicano: el impacto de las reformas borbónica/, que expone los objetivos, alcances y
consecuencias de dicho reformismo.
Otro de los autores que más ha trabajado el sigl XVIII novohispano es David A.
Brading. En su libro Mineros y comerciantes en el México borbónico (1763-J 8 J 0.)'° nos
explica que en gran medida el éxito de las reformas borbónicas en la Nueva España se
debió al espíritu de empresa y al de capital que los hombres de negocios que habitaban la
región dispusieron; también, califica a estos años com de "revolución en el gobi erno".
En el artículo titulado "Las minas de plata en el Perú y México colonial. Un estudio
comparativo"/ I examina los progresos y los problemas que se presentaron en las minas
de estas dos regiones y cómo a pesar de ello, fueron conducidos de diferente manera .
Finalmente, analiza la composición de las élites mexicanas durante el siglo XVIII, su
participación en la política y los cambios necesarios a los que se recurrió para alcanzar en
8 Jaime E. Rodríguez O. La independencia, 472 pp. 9 Josefina Zoraida Vázquez. (Coord.) Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impac/o de las reformas borbónicas. (México, ueva Imagen, 1992, 215 pp.). 10 David A. Brading. Min eros y comercian/es, 498 pp. 11 David A. Brading. "Las minas de plata en el Perú y Méxic colonial. Un estudio comparati vo" en Desarrollo Económico. (vol. 11 , no. 41 , 1971 , pp. 101 -111).
..
:
9
un momento dado la independencia en su obra: "Government and Elite in Late olonial
En el "Absolutismo ilustrado y cnsls multidimensional en el periodo colonial
tardío, 1760-1808", 13 de Brian Hamnett, se visualiza la percepción que tuvieron los
diversos grupos sociales en la Nueva España por esta nueva intención de la orona
española de centralizar el poder. Los trabajos de Pedro Pérez Herrero: "El México
borbónico: ¿un "éxito fracasado?,,14 y "Los beneficiarios del refomli smo borbónico :
metrópoli versus élites novohispanas", / 5 ofrecen un análisis esclarecedor del
funcionamiento de los cabildos y de la autoridad del monarca en busca de un crecimiento
económico y una demostración de la eficacia política y económica de las reformas
borbónicas.
Carlos Marichal en su capítulo "La bancarrota del virreinato: finanzas, guerra y
política en la Nueva España, 1770-1808,,16 expone la hipótesis de que la supervivencia de
un régimen político, como es el de los Borbones, ependía en buena medida de la
solvencia económica que tuviera, pemlitiendo conocer cuáles fueron los propósitos por
alcanzar de esta dinastía en el poder. Horst Pietschmann, "Protoliberalismo, refonnas
borbónicas y el sistema de intendencias en Nueva España: un estudio político-
12 David A. Brading "Government and Elite in Late Colonial Mexico" en The Hispanic American Historical Review. (vo l. 53 , no. 3 1973, pp. 389-4 14). 13 Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado y crisis multidimensional en el periodo colonial tardío, 1760-1808" en Josefina Zoraida Vázquez. (Coord.) Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, Nueva Imagen, 1992, pp. 67-108) . 14 Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico: ¿un "éxito" frac sado?" en Josefina Zoraida Vázquez. (Coord.) Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, Nueva Imagen, 1992, pp. 109-15 1). 15 Pedro Pérez Herrero. "Los beneficiarios del reformismo borbónico, metrópoli versus elites novohispanas". En Historia Mexicana. (vo l. XLI, núm. 2, 1991,207-265 pp.). 16 Carlos Marichal. "La bancarrota del virreinato: finanzas , guerra y política en la ueva España, 1770-1808" en Josefma Zoraida Vázquez. (Coord.) In te/pretaciones del SIglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, ueva Imagen, 1992, pp. 153-186).
.-
10
administrativo,, 17, aquí el autor agrupa en tres etapas temporales a estas reformas y
explica cómo es que el proceso de centralización y también el de la descentralización
eran parte de estos nuevos cambios. Por su parte, Iván Franco Cáceres, La Intendencia de
Valladolid de Michoacán 1786-1809, 18 trata sobre la instauración de W1 nuevo régimen
de gobierno y su modernización.
En cuanto a la consulta que se hizo sobre las reformas militares se encontraron los
trabajos de Christon I. Archer, El ejército en el México borbónico 1760-1810,19 "The
Army ofNew Spain and the Wars ofIndependence, 1790-1821 ",20 "Bourbon Finances
and Military Policy in New Spain, 1759-1812",21 y al de Virginia Gued a titulado " la
organización militar", 22 donde se visualiza la compos ición y la actuación del ejército
form ado por el virrey Iturrigaray, cuáles fueron las dificultades y las experiencias por las
que atravesó la milicia borbónica durante la época.
Para el contextualizar la vida social , económica, cultural e institucional de la
Nueva España, se revisaron las obras de William Taylor, Entre el proceso global y el
conocimiento local. Ensayos sobre el estado, la sociedad y la cultura en México del siglo
17 Horst Pietschmann. "Protoliberalismo, reformas borbónicas y revolución: La ueva spaña en el último tercio del siglo XVlII" en Josefina Zoraida Vázquez. (Coord.) Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, ueva Imagen, 1992 , pp. 27-66). 18 Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Va lladolid de Michoacán : 1786- 1809. (México, Fondo de Cultura Económica, 2001 , 306 pp.). 19 Christon I. Archer. El ej ército en el México borbónico / 760- /8/0. (México, Fondo de ultura Económica, 1983 , 411 pp.) 20 Christon 1. Archer. "The Army of the ew Spain and the Wars of the Independence" en rIJ e Hispanic American Historical Review. (vol. 61 , no. 4, 198 1, pp. 705-714). 2 \ Christon l. Archer. "Bourbon Finances and Military Po lic. in ew Spain, 1759-1812" en rIJ e
Americas. (vo l. 37, no. 3, 1981 , pp. 315-350) . 22 Virginia Guedea. "La organización m.ilitar" en El gobierno provincial de la Nueva Esparia, /5 70- / 78 7. Woodrow Borah (Coord .), (México, Universidad aciona1 Autónoma de México-Instituto de Investigaciones Históricas, 2" Edición, 2002, pp. 159-161).
1 1
XVIII;2J el de María del Refugio González, "La intervención del Estado en la economía y
en la sociedad en México: sus orígenes y desarrollo. Una propuesta de interpretación,, /4
los trabajos de Margarita Menegus Bomemann de "Economía y comunidades indígenas:
el efecto de la supresión del sistema de mercancías en la Intendencia de México 1786-
1810" 25 Y El repartimiento forzoso de mercancía en México, Perú y Filipinas ;26 y los de
Dorothy Tanck de Estrada titulados: Pueblos de indios y educación en el México
Colonial, 1750-182127 Y "Castellanización, política y escuelas de indios en el
Arzobispado de México a mediados del siglo XVIlI" .28
Para el caso de San Luis Potosí, se encontraron los trabajos de Jesús Motilla
Martínez, La administración pública en la ciudad de San Luis Potosi, a finales del siglo
XVIII Y principios del XIX9, donde se da a conocer al lector cuál era la mentalidad
predominante de la época y cuáles eran las activid des cotidianas de su población; Ana
Irisarri Aguirre, El reformismo borbónico en la provincia de San Luis Polosí durante la
Intendencia, JO que tiene como finalidad explicar la formación de la Intendencia en an
Luis Potosí en el año de 1787; el de Ángel Senosiain "Bruno Díaz de Salcedo, Vicente
23 WilIiam B. Taylor. Entre el proceso global y el conocimiento local. Ensayos sobre el Estado, la sociedad y la cultura en el México del siglo XVflI . (México, Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Iztapalapa-CONACYT-Miguel Ángel POlTÚa, 2003 , 507 pp.). 24 María del Refugio González. "La intervención del Estado en la economia y en la sociedad en México: su orígenes y desarrollo . na propuesta de interpretación" en Mexican Studies/Estudios Mexicanos . (vol.
5, no. 1, 1989, pp . 25-68). 25 Margarita Menegus Bornemann. "Economía y comunidades indígenas: el efecto de la supres ión del si tema de reparto de mercancías en la Intendencia de Méxi o, 1786-1810" en Mexican SlIIdies/Estudios
Mexicanos . (vol. 5, no. 2,1989, pp. 201-219) . 26 Margarita Menegus Bornemann. (Comp.) El repartimiento forzoso de mercal/cías en México, Perú y Filipinas. (México, Instituto de Investigaciones Dr. Jo é María Luis Mora- entro de Estudios sobre la
Universidad-UNAM, 2000, 280 pp.) . 27 Dorothy Tanck de Estrada. Pueblos de indios y ed cación en el México Colonial, 1750-182 1. (México, El Colegio de México, Centro de Estudios Históricos, 1999, 669 pp.). 28 Dorothy Tanck de Estrada. "Castellanización, política y escuelas de indios en el Arzobispado de México a mediados del siglo XVIII". (En Historia Mexi ana, vol. XXXVIII, núm. 4, 1989, pp. 70 1-74 1). 29 Jesús Motilla Martínez. La administración pública en la ciudad de San Luis Potosí, a jinales del siglo XVJ1I y principios del XIX. (San Luis Potosí , H. Ayuntamiento de San Luis Potosí, 1992, 190 pp .). 30 Ana Irisarri Aguirre. El reformismo borbónico en la provincia de an Luis Potosí durante la
Intendencia . (En prensa p. 19).
12
Bemabeu, Félix María Calleja y los comienzos del Régimen de Intendencias en an Luis
Potosí,,31 en el que explica los comienzos de la Intendenci a potosina y el trabajo
administrativo de su primer intendente así como d v la relación entre éste y su teniente
letrado; los trabajos de Isabel Monroy Pueblos, misiones y presidios de la Intendencia de
San Luis Potosí y el que elaboró en conjunto con Tomas Calvillo Unna, Breve historia de
San Luis Potosí, 32 así como el de Rosa Helia Villa de Mebius, San Luis Potosi. UI/a
historia compartida, 33 tratan brevemente y a manera de contexto , la situación que se
vivía en San Luis Potosí durante estos años.
La bibliografia que se ha escrito para entender cómo afectaron las Refom1as
Borbónicas a la Iglesia es la siguiente: sobre las relaciones Iglesia-Estado en
Hispanoamérica antes y después de la refon11as borbónicas esta el trabajo de
Iberoamérica Coloniap4 de Johl1 Fisher y el de La expresión de corrientes en la iglesia
neogranadina ante el proceso de reformas borbónicas y la emancipación politica (J 750-
1821i S de Ana María Bidegaín, que tiene como objetivo comprender el devenir hi stóri co
del cristianismo en Colombia al estudiar las refon11a borbónicas y la ilustrac ión. e
encontraron también las obras de Antonio Acosta RodlÍguez "La reforma eclesiástica y
3 1 Ángel Senosiain. "Bruno Díaz de Salcedo, Vicente Bernabeu, Fé lix María alleja y los comienzo de l Régimen de Intendencias en San Luis Potosí" en Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, (tomo LIX, no. 1 y 2, 1944, pp. 67-68). 32 Ma. Isabel Monroy de Martí. Pueblos, misiones y presidios de la Intendencia de San Luis Potosí. ( an Luis Potosí, Academia de Historia Potosina, 2" Edición, 1991 , p . 11 -15); Y María Isabel Monroy Castillo y Tomás Calvillo Unna. Breve historia de San Luis Potosí. (México, El colegio de MéxicoFideicomi o Historia de las Américas-Fondo de Cultura Económica, 1997, pp. 138- 140). 33 Rosa Helia Villa de Mebius. San Luis Potosí. Una historia compartida. (México, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 1988, pp. 39-40). 34 John Fisher. "Iberoamérica Colonial" en Manuel Lucena Santoral ( oord. ), Historia de Iberoaméricn. Tomo 11 Historia Moderna. (Madrid, CLM, S.L.2002, pp. 527-662). 35 Ana María Bidegaín. "La expresión de corrientes en la Iglesia neogranad ina ante el proceso de reformas borbónicas y la emancipación política ( 1750- 182 1)" en Historia del cristianismo en Colombia. Corrientes y diversidad. (Colombia, Taurus, 2004, pp. 145- 180) .
:
13
misional (siglo XVIlI)",36 donde puede conocerse cuáles fueron las reformas implantadas
por el gobierno a la Iglesia y qué tipo de relación se originó entre ambas Instituciones; la
de John F. Schwaller "La Iglesia en la América colonial española",3? quien explica cómo
con el trabajo de los misioneros desde la época de la conquista hasta el siglo XVIII, la
Iglesia católica fue la principal institución en la América española dándole ese gran poder
que los Borbones quisieron restringirles; y la de Murdo J. MacLeod titulado "La Iglesia
Católica en la Hispanoamérica colonial",38 quien hace un recuento y un análi sis
historiográfico de la implantación del catolicismo en América desde la época de la
conquista hasta la época de Independencia latinoamericana.
Luisa Zahino Peñafort, Iglesia y sociedad en México 1765-1800: tradición.
reformas y reacciones,39 en este texto se puede conocer cómo era la cotidianidad de la
Iglesia católica en el arzobispado de la ciudad de México al ser una institución só lida,
influyente y poderosa en la vida del mundo indiano.
También está la obra y colección del Padre ariano Cuevas, La Historia de la
Iglesia en México,4o ya que permite contextualizar en esta época los diferentes procesos
de la vida nacional desde la expulsión de los jesuitas, la muerte de Carlos IlI, la subida al
36 Antonio Acosta Rodríguez. "La reforma eclesiástica y misional (s iglo XVIII)" En Historia General de América Latina. Procesos americanos hacia la redeflnición colonial. (París , vol. IV , diciones UNES O/TROn' A, 2000, pp. 543-574). 37 John F. Schwaller. "La Igles ia en la América española" En Historia General de América Latina. Consolidación del orden colonial. (París, vo l. III tomo 2, Ediciones UNES O ROTI A, 2000, pp. 543-574). 38 Murdo J. MacLeod . "La iglesia católica en la Hispanoamérica colonial" En Leslie Bethell , (edil .), Historia de América Latina. (Barcelona, vol. II, 1990, pp. 185-207 ). 39 Lui a Zahino Peñafort. Iglesia y sociedad en México 1765- 1800: tradición. reforma y reacciones. (México, Universidad Nacional Autónoma de México/Instituto de Investigaciones Jurídicas, 1996, 237
pp.). 40 Mariano Cuevas. "La Destrucción", Libro Tercero, en Historia de la Ig lesia en México. Tomo Cuarto 1700- 1800. (México, Editorial Patria, 1947, pp. 435-546) ; Y "La Igles ia y la Independencia Naciona l 18 10-182 1" Libro Primero, en Historia de la Ig lesia en México. Tomo Quinto 1800- 1910. (México, Edi torial Patria, 1947, pp. 35- 124).
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14
trono de Carlos IV, el regalismo y la desamortización, hasta los aspectos reli giosos de la
Independencia y su consumación.
Las obras de David Brading, Una Ig lesia Asediada: el Obispado de Michoacán
1749-1810,4\ Y "El jansenismo español y la caída de la monarquía católica en México".42
En la primera se presentan los resultados de la pugna Iglesia- stado así como de la
conmoción causada por el ataque de los Borbones a la iglesia mex icana y en la segunda,
se explica la participación del clero en la dirección del movimiento independentista a
consecuencia de las reformas que la Corona española estaban impl ementando y de cómo
las ideas del jansenismo les estaban aquejando.
Hasta el día de hoy, se han publicado muy pocos trabajos en San Luis Potosí que
permiten entender hasta qué punto era importante la influencia y el ascendente moral que
los pastores de la iglesia católica ejercían en la vida de sus feli greses, por 10 que se
considera que esta investigación puede aportar mucho al conocimiento hi stórico de
nuestra entidad, no sólo por que se puede conocer la cotidianidad de la sociedad potosi na,
sino porque es en este momento , cuando se integra territori almente el estado de San Luis
Potosí y se da comienzo a lma nueva época de modernidad.43
Para entender mejor lo que estaba pasando con nuestro actual territorio , se
recurrió los trabajos de Osear Mazín Gómez -por ser parte integral del obispado de
41 David A. Brading. Una Iglesia asediada: El obispado de Michoacán /749- /8/0 . (México, Fondo de Cultura Económica, 1994, 304 pp.) . 41 David A. Brading. "El jansenismo españo l y la caída de la monarquía católica en México" en Josefi na Zoraida Vázquez. (Coord .) Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano: el Impacto de las reformas borbónicas. (México, Nueva Imagen, 1992, pp. 187-215). 43 Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas del Estado Mexicano . (México, UNAM, 1994, p. 5) quien afirma que la modernidad en México estuvo ausente antes e 1765 y que las reformas borbónicas han sido uno de los sucesos históricos más decis ivos para el desarroll de nuestro país.
15
Michoacán-, El Cabildo Catedral de Va lladolid de lvfichoacán,44 el cual tiene como
objetivo explicar el impacto el impacto que las refonna:; borbónicas causaron en la iglesia
y que sentimientos originó en la población la presencia del visitador José de Gálvez; en
el caso de su obra titulada Entre dos Majestades,45 se i tenta reflej ar el confli cto de poder
que se estaba llevando a cabo entre el poder eclesiástico y el de la administración
virreinal novohispana y peninsular.
Otras obras que han sido de gran utilidad son la de Rafael Montejano y Aguiñaga,
El clero y la indep endencia en San Luis Potosí,46 ya que para su autor, -aunque no
destaca el reformismo borbónico como tema central e su estudio- si considera que el
clero potosino tuvo una participación muy importante ara alcanzar la independencia de
la Nueva España. En su trabajo se encuentra un li stado de aquellos reli giosos que
participaron como insurgentes, tri garantes o realistas destacando a manera de reseña,
cuáles fueron sus actividades militares y políticas dentro de este proceso histórico ; el de
Primo Feliciano Velázquez, en Historia de San Luis Po osí,47 explica cómo se encontraba
San Luis Potosí ante la inminente expulsión de los jesuitas, razón por la cual, Gálvez tuvo
que visitar la región y tomar cartas en el asunto; y el de José Alfredo Rangel ilva, "Lo
que antes era casa de Dios ... Adaptaciones del liberalismo en los ámbitos locales, 1820-
1825", donde pretende explorar las relaciones que se establecieron entre las ideas y
prácticas políticas del liberalismo y los actores que vivieron durante la época48
.
44 Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Valladolid de Michoacán . (México, El olegio de
Michoacán, 1996, 499 pp. ). 45 Osear Mazín GÓmez. Entre dos Majestades . (México, El Coleglo de Michoacán, 1987, 305 pp.). 46 Rafael Montejano y Aguinaga. El Clero y la independencia en San Luis Potosí. (San Luis Potosí, Academia de Historia Potosina, 1971 , 100 pp.) . 47 Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, ( an Luis Potosí , vo l. 2, 2004 , 3" edición, p.
290). 48 José Alfredo Rangel Silva. "Lo que antes era casa de Dios . . . Adaptaciones del libera lismo en los ámbitos locales, 1820-1825" en Historia Mexicana , vol. UJl, núm. 1, 2003, 11 7- 160 pp.
.-
16
Por último se debe mencionar de una fonna destacada el libro de William Taylor
titulado Ministros de lo Sagrado: sacerdotes y f eligreses en el siglo XVIII.49
Se puede
afirmar que este estudio es el que más se asemeja al análisis que se ha querido hacer en
este trabajo, porque está interesado en la labor de los curas que diri gían las parroqui as
rurales de la arquidiócesis de la ciudad de México y la diócesis de Guadalajara. Los
describe como agentes eclesiásticos del Estado y como intem1ediarios entre la autoridad
civil y los feligreses durante el periodo colonial tardío.
Taylor presenta a manera de evaluación, el alcance y las consecuencIas que
tuvieron las reformas borbónicas en la organización ele la vida pública a través de sus
sacerdotes y feligreses .5o Su obra está dividida en cuatro partes dónde se aprecian los
estudios y el análisis que el autor dedica a la política y a la reli gión de manera más
general, a la vida sacerdotal , a la vida de los feli .. , eses y a la política de la vida
parroquial. Dentro de estos puntos se destacan no sólo los aspectos políticos de la época,
sino también los sociales, los económicos y los culturales, permitiendo al lector entender
la importancia que jugaron los sacerdotes dentro de la vida cotidiana de la población.
Para realizar este trabajo de investigación se revisaron ciento trece documentos de
archivo; de ellos se ha recopilado información compuesta por la correspondencia
mantenida entre las autoridades; leyes y decretos ; los censos de población y los diversos
infom1es que tratan ternas como la educación, la salud y los asuntos electorales. De estos
expedientes, 97 fueron localizados en el Fondo de Inte denci a del Archivo Hi stórico del
Estado de San Luis Potosí (AHESLP); dos en el Grupo Documental de Intendencia del
49 WiIliam B. Taylor. Ministros de lo sagrado: sacerdotes y f eligreses en el México del Siglo XVIII . Traducción Osear MazÍn y Paul Kersey, (México, El Colegio de México-Secretaría de Gobernación (Subsecretaría de Asuntos Religiosos)-EI Colegio de Michoacán, 2 vols., 1999, 83 1 pp.). 50 William B. Taylor. Ministros de lo sagrado, pp. 15-24 .
-.
--
17
Archivo General de la Nación (AGN). Estos documentos permitieron encontrar
información sobre la ciudad de San Luis Potosí , San Luis de la Paz, la Hacienda Los
Amoles, Villa de Valles, Mexquitic, La Hedionda, Valle de San Francisco de los Pozos,
Tierra Nueva, Coxcatlán, Armadillo , Congregación de la Soledad, Venado, Real de
Catorce, Charcas, Matehuala, Santa Maria del Río, Río Verde, Guadalcazar, Tancanhuitz,
Salinas del Peñón Blanco, Ciudad del Maíz, Cerro de San Pedro, Haci enda de Bocas,
Cedral, La Pastora, Villa de Ramos, Aquismón, Ahualulco y Tamazunchale; cada uno de
estos lugares se encuentran distribuidos dentro de los ocho partidos que componían la
provincia potosina durante la época de la Intendencia entre los años de 1790 y 1821 .
Por otro lado, se hizo una revisión de las oposiciones que eran decretadas por el
Obi po de Michoacán para ocupar las vacantes de parroquias en la ciudad de San Luis
Potosí, Guadalcazar, Río Verde y Armadillo . Esta documentación se encuentra en el
Archivo Casa de Morelos (AHMCR) en Morelia Michoacán.
El texto se ha dividido en cuatro capítulos que tienen como finalidad lo si guiente:
• En el primero, se hace un análisis de la. llegada al poder de los Borbones y
la implementación de sus reformas, cu ' les eran sus obj etivos, qué alcances
tuvieron y cuáles fueron las consecuencias que trajeron a la Nueva España
y al estado de San Luis Potosí al llegar el visitador Gálvez y comenzar con
el nuevo sistema de Intendencias.
• En el segundo capítulo se presenta un análisis sobre las innovaciones que
se pretendieron implementar en la Iglesia por los reformadores borbónicos,
así como de la relación que surgió a consecuencia de ello, entre el
gobierno político administrativo y el eclesiástico.
:
18
• El tercer capítulo nos pemlite conoc r cuál fue la división ecles iástica del
territorio potosino durante la Intendencia, quiénes fueron lo curas
párrocos que fueron convocados para cubrir las parroquias y ll evar a cabo
su trabajo ministerial así como de presentar las relaciones entre las
autoridades civiles y las eclesiásticas que tuvieron lugar en la provincia de
San Luis Potosí y ver cómo afectaron a la población en general.
• El cuarto capítulo se pretende explicar cuáles fueron las actividades
eclesiásticas y civiles de los curas párrocos en la provincia potosina y
visualizar hasta qué punto se mantuvieron como referentes morales e
incluso, como representantes del pueblo ante los distintos problemas que
debieron afrentar.
Finalmente, este trabajo de investigación culmina con las conclusiones y un anexo que
contiene una lista con los nombres de los curas párrocos que ministraron en los di ferentes
pueblos de la provincia potosi na durante la época de la Intendencia.
;
CAPÍTULO 1 LAS REFORMAS BORBÓNICAS
Este capítulo tiene como objetivo explicar cómo la Dinastía Borbónica al ascender
al trono español a principios del siglo XVIII, decidió -tanto por convicción como por
necesidad- comenzar un nuevo sistema de organización administrativo, político y
financiero que le permitiera la centralización y la modernizac ión de sus territorios en
Europa yen ultramar. 1
Se ha dividido este pnmer capítulo en cuatro subcapítulos, los cuáles
contextualizarán la situación que se vivió en la Metrópoli , Iberoamérica y especialmente
Nueva España y San Luis Potosí al momento de implementarse las reformas borbónicas.
Con ello se pretende conocer cuáles fueron sus alcances y cuáles las consecuencias que
trajeron consigo no solamente en el territorio peninsular, sino en todo Hispanoamérica.
I Véase: Jaime E. Rodríguez O. La independencia, 472 pp.; lván Franco Cáceres. La Intendencia de
Valladolid, 306 pp. ; Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borhónicas, 3 15 pp.; Luis Navarro García. Las reformas Borbónicas en América, 140 pp.; John Fisher. "fberoamérica olonial" pp. 527-662) ; Carlos Marichal. "La bancarrota del virreinato .. . " , pp. 153- 186; William B Taylor. "El camino de los curas y los Borbones hacia la modernidad" en Álvaro Matute, Evelia Trejo y Brian onnaughton ( oord .), Estado. Iglesia y Sociedad en México. Siglo XIX. (México, AM, 1995, 8 1-11 3 pp.)- Y Pedro Pérez Herrero. "Los beneficiarios .. . " , 207-265 pp.
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20
1. El planteamiento de las reformas: de los Habsburgo a los Borbones
Durante el gobierno de la dinastía de los Habsburgo el imperio español era
gobernado por dos grupos de Consejos: el de los Estados -que era el que se encargaba de
regir los distintos dominios del Imperio : Consejos d Indias, de Castill a y de Aragón; y
los Consejos con jurisdicción en todo el territorio: Consejo de Guerra, de Policía, de Rea l
Hacienda, y de Justicia. Significando entonces, que no existía un control absoluto del
poder por parte del monarca, ya que estaba dividido entre estos dos organi smos. Dicho
Consejos permitían a sus dirigentes gozar de privilegios sociales, políticos y económicos
sin que el rey pudiese obj etar tal asunt02, en otras palabras, todas las deci sione
administrativas, políticas, militares y monetari as estaban bajo la dirección de no una, sino
de varias personas, complicando así , la gobernabilidad del imperio . Sin embargo, y de
acuerdo con Ornar Guerrero3, los Habsburgo tuvieron la suficiente capacidad para regir el
territorio español bajo este sistema gubernamental por más de dos siglos .
La Casa de Austria gobernó a España hasta el año de 1700, el último rey de esta
dinastía fue Carlos n. Sin ningún descendiente directo que heredara el trono de di cho
imperio, este rey se vio obligado a cederlo a su descendi ente más cercano, el Duque de
Anjou, Felipe V de Borbón.
Cuando Felipe de Borbón (1700-1746) ascendió a la Corona española, se di o
cuenta de que era necesaria una organi zación del Estado para moderni zarl04
. us
antecesores, no habían alcanzado ese nivel de evolución en sus dominios, que para
2 Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Valladolid. p. 38. 3 Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas. pp. 20-23 . 4 "La modernidad consiste en el desenvolvimiento de nuevas capacidades del stado para incrementar su poder y reproducir sus fuerzas interiores". Véase: Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas. pp. 5 Y 139; Jaime E. Rodríguez O. La independencia. pp. 52-80, Luis Navarro García . Las reformas Borbónicas en América, pp. 27-28 ; Iván Franco Cáceres. La /ntendencia de Va lladolid. p.39; y Horsl Pietschrnann. Las refo rmas borbónicas y el sistema de intendencias, pp. 13-37.
:
21
entonces, ya existía en algunos enclaves europeos. Felipe V se encontró con una
monarquía en plena decadencia económica y social a consecuencia de la Guerra de
Sucesión, además de la pérdida de tierras como Flandes e Italia y la codicia de los
Estados Modernos por el imperio hispánicos.
El nuevo proyecto Borbón se fundamentó principalmente en la centrali zación de
la economía, las bases sociales y la política de la enínsula ibérica. 6 Las refornlas se
orientaron principalmente al área de la administración y el servicio público, las finan zas,
la junta de comercio, la separación de las instituciones, la justicia, el ejército, la
agricultura, la minería, la industria, la navegación y el transporte, la educación y la
cultura.
Fernando VI (1746-1759) tanlbién promovió constantes innovaciones dentro de
estos rubros, pero no fue sino hasta el gobierno de Carlos III (1759-1788), cuando se
contempló la transformación de todo el imperio españ 1 para alcanz ar un régimen que no
estuviera fundado en esas prerrogativas y así lograr un mayor beneficio para la Real
Hacienda y recuperar para España el estatus de potencia internacional. 7
Las reformas borbónicas tuvieron su génesis en las ideas ilustradas,8 debido a
esto, los Borbones se encontraban rodeados de un grupo de personas que compartían
5 Estados europeos modernos: Holanda, Francia e Inglaterra. John Fisher. "fberoamérica Colonia l", p. 529. 6 De acuerdo con María del Refugio González, los Barbones fueron los que sentaron las bases para la " la modificación del contenido de lo que debería ser la acción .el Estado" Véase: María del Refugio González. "La intervención del Estado ... ", pp. 63-64 ; Ornar G erre ro Orozco. Las raíces Borbónicas, rp. 61 -63 ; y Horst Pietschrnann. Las reformas borbónicas y el si ·tema de intendencias. 322 pp.
Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Valladolid, pp. 37-38. 8 Según José de la Puente, el siglo XVIII, conocido como el Siglo de las Luces, fue el siglo de la razón y " las propuestas ilustradas en el ámbito de la organización administrativa de los estados fueron bien acogidas por ciertos monarcas". Esto significa que los Barbones no fueron la excepción, ya que al poner en práctica el poder absoluto, organizaron la reestructuración del imperio español con el único objeto de la centralización y la unificación del reino en manos del monarca . Véase: José de la Puente Brunke. "La administración colonial", pp. 232-234 ; Véase también 105 trabajos de Horst Pietschmann. "Protoliberalismo, reformas borbónicas y revolución ... " pp. 27-66 y Las reformas borbónicas y el sistema de intendencias. pp. 24-3 1.
22
ideas de razón y de progreso y se les conoció como "reformadores". Éstos contaban con
la autoridad del monarca para planificar y poner en archa los nuevos cambios que
habían de ser implementados para obtener una mejor administración y dirección del
Estado.9
2. El reformismo en las Indias
La monarquía borbónica decidió introducir las nuevas reformas en los remos
ultramarinos una vez que tuvo lugar el cambio administrativo en la metrópoli. Para el
reino español , sus colonias 1o tenían que ser partícipes de este revolucionario movimiento
y de la unificación que esto traía consigo, ya que le aseguraría al Estado un mayor auge
económico, social, político y comercial al fomentarse su crecimiento y al fortalecerse el
poder de la Corona. I I
Se puede observar que una de las mayores preocupacIOnes de los Borbones al
implementar estos canlbios revolucionarios en sus territorios ultramarinos se debió a la
monopolización que unas cuantas familias de españoles americanos estaban haciendo de
los altos puestos de gobierno. Esto fue tejido por medio de redes clientelares - a través de
9 Algunos de los nombres que se manejan como participantes de este grupo y que fuero n conocidos como altos funcionarios del Estado español al aplicar sus conocimientos ilustrados son: ampillo, Ensenada, Aranda, Campomanes, Floridablanca y Jovellanos. Horst Pi tschmann. Las reformas borbónicas y el
sistema de intendencias, p. 26. 10 De acuerdo con Jaime Rodríguez, "Los funcionarios de Carlos 1II fu eron los primeros en referirse a las poses iones americanas con el titulo de "colonias" . Ya que al parecer éstos " rechazaron la idea de los Habsburgo acerca de los reinos ' federados ', propugnando en lugar de éstos una España unida y centralizada que reinara sobre sus colonias". Véase Jaime E. Rodríguez O. La independencia, p. 53 . 11 in embargo, hubo temor por estos nuevos cambios en la administración gubernamental en algunos grupos que "se dieron divisiones" entre ellos. "Algunos españoles europeos apoyaban al nuevo orden, mientras que muchos criollos favorecían el antiguo régimen. La lucha por el poder que se dio en las clases alta y media brindó oportunidad a los grupos rurales y urbanos descontentos de presentar sus demandas. Las disputas regionales complicaron todavía más la pugna política en los reinos americanos. Estas tensiones precipitaron la violencia, la guerra civil y el terror, ofreciendo a los jefe militares oportunidades para conseguir poder, riqueza y posición." Jaime E. Rodríguez O. La independencia, pp. 26-27 ; véase también John Fisher. "Iberoamérica Colonial", p. 555 .
23
matrimonios por conveniencia, con las relaciones de amistad, por razones comerciales e
incluso, hasta por casos de soborno y extorsión-12
, orillando a los funcionarios
administrativos a tomar parte conciente de la conupción. Todo esto era visto por los
reformadores no solamente como un problema de mal gobiemo sino como una posible
causa para perder el control político y el poder económico de sus co loni as . Con el tiempo,
se pudo observar que los americanos al anhelar la autonomía de su gobiemo y no
alcanzarla, buscaran y obtuvieran entonces, la emancipación de la Corona españo la
empujados por la coyuntura ocurrida tras la invasión napoleónica.13
Con los Habsburgo, las poseSIOnes espa~ olas en América estaban bajo la
jurisdicción de dos virreinatos: el de la Nueva Espai'ía y el de Perú . Una de las primeras
innovaciones que tuvieron lugar dentro del territorio americano, fue el de la creación del
de Nueva Granada y el del Río de la Plata. Esto a su vez, trajo consigo la elevación de
los reinos de Venezuela y Chile entre 1777 y 1778 al rango de capitanías generales,14
ocasionando con ello, no solamente un cambio en las fronteras , sino también porque se
llevó a cabo la creación de nuevas entidades políticas que tu vieron su economía, sus
costumbres y sus propias leyes.
Entre los cambios más significativos en la administración gubernamental
podemos enumerar los siguientes:
12 "Si bien los españoles americanos protestaron contra las re[onnas borbónicas, en ocasiones con violencia, no buscaron separarse de la Corona española. Sólo cuando la monarquía española se colap 6 en 1808 como el resultado de la invasión francesa de la Península, 32 años después de que se habían rebelado los angloamericanos, fue que los españoles americanos buscaron u autonomia" Jaime E. Rodríguez O. La independencia, pp. 25-26 Y 55 ; véase también: Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Va lladolid, p.52; Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado ... " p. 79 ; Y Horst Pietschmann. Las reformas borbónicas y el
sistema de in tendencias, pp. 106 Y 11 6. 13 Véase: Jaime E. Rodríguez O. "La natura leza de la representación en ueva España y Méx ico" en Secuencia (núm. 6 1, enero-abril, 2005 , pp. 7-32); Jaime E. Rodríguez O. La independencia, pp. 25-26; Y Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Valladolid, pp. 403--406. 14 Véase: Luis Navarro García . Las reformas Borbónicas en América, pp . 79-94 ; John Fisher. " Iberoamérica Colonial", p. 575 ; Y Omar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas, p. 136.
24
1). Se instauraron las audiencias en Buenos Aires, Caracas y Cuzco entre los afios
de 1783 Y 1787 .15
2) La Real Hacienda sufrió transfOlmaciones que le permitieron evitar la
monopolización de bienes, así como del aumento financiero de las arcas del Estado a
través de la recolección de impuestos. Otra de las consecuencias en este aspecto , fue el de
la supresión del repartimiento de mercancías, el cual a su vez, fue motivo de abusos hac ia
los indios por parte de las autoridades de cada localidad.16
3). Se estableció el mismo modelo burocrático que había sido implantado en la
península Ibérica, el de las Intendencias 17 - las cuáles serán tratadas con mayor
profundidad en el siguiente subcapítulo-.
Estos cambios fueron dirigidos hacia diversas áreas, por ejemplo , en la jurídica, se
pretendió erradicar el abuso e incompetencia no sólo de las autoridades civiles \00
también de las eclesiásticas; con ello, se procuró mejorar la administración de justici a.18
En el aspecto económico, los Borbones pennitieron el libre comercio entre las
colonias indianas y la metrópoli, facilitando la mercantilización de productos elaborados
en América, por ejemplo, la producción de azúcar en Cuba o la producción tex til en Perú
15 John Fisher. "Iberoamérica Colonial", p. 575. 16 Véase los trabajos de: Margarita Menegus Bornemann. "Economía y comunidades indígenas ... ", pp. 201-219 Y El repartimiento forzoso de mercancías. 280 pp. En e\1os se explica cómo este mecanismo de coerción conocido como el repartimiento de mercancías si rvió para "extraer plustrabajo de las comunidades indígenas"; Además véase a: Stanley J. Stein. "Bureaucracy and Bussiness in the Spanish Empire ... ", pp. 2-28 ; Y Rodolfo Pastor. "El repartimiento de mercancías y los alcaldes mayore novohispanos: un sistema de explotación de sus orígenes a la crisis de 1810" (en El gobierno provincial de la Nueva España. /570-/ 787. Woodrow Borah (Coord.), México, Unjversidad acional Autónoma de México- Instituto de
Investigac iones Históricas, 2" Edición, 2002, pp. 2 19-258) . 17 Véase: Stanley J. Stein. "Bureaucracy and Bussiness in the Spanish Empire ... ", pp. 2-28; Aurea Commons, Las intendencias de Nueva España, 253 pp.; Luis Navarro García . Las reformas Borbónica en América. pp. 13-77 Y 95-134 ; Y Horst Pietschmann. Las reformas borbónicas y el sistema de
intendencias, p. 237. 18 John Fisher. "Iberoamérica Colonial", p. 580.
25
yen Nueva España. 19 También, con un fuerte control fisca l, en regiones como la actual
Nicaragua, Costa Rica y Guatemala, se comercializaron la plata, el índigo y el ganado.2o
En el aspecto militar, el ejército tuvo una reorganización dentro de sus tropas, con
el único obj eto de defender mejor los dominios españoles, un ejemplo de esto, fue la
fundación y la fortificación de los puertos21 -como fue el caso del de San Blas22
-.
consideramos esto, podemos entender que una reforma traía como consecuencia otra, ya
que los puertos además de que eran defendidos por los militares, también servían como
punto de partida para los expedicionarios y como centros de comercialización entre los
cargueros de la península y los de la población americana.
3. Las reformas en la Nueva España
Uno de los principales instrumentos de la C sa de Barbón para las co loni as,
fueron las Visitas Generales. Con ellas pretendieron conocer de pnmera mano el
territorio para planificar las refo rmas. La visita de José de Gálvez a la Nueva España es
un claro ejemplo de esta política. Con ello, Carlos In pretendió transformar todos lo
poderes establecidos y extender su proyecto de Estado a todo el imperio .
19 Véase Jobn Fisber. "Iberoamérica Colonial", pp. 595-602 ; Y Ornar Guerrero Orozco. Las ra íces
Borbónicas, p. 136. 20 Miles Wortrnan. "Bourbon Reforms in Central America ... ", pp. 222-238). 21 José de la Puente Brunke. "La administración colonial", pp. 236-237 ; Williarn B. Taylor. Entre el
proceso global, p. 62). 22 El puerto de San Bias se encuentra localizado en la región norte del actua l Estado de ayarit. Limita con el municipio de Santiago Ixcuintla al norte, con el de Compost .la y Jalisco al sur con Tepic y Jalisco al este y con el Océano Pacífico al oeste. Para mayor información sobre este lugar se puede vi sitar la página Web del Instituto aciona l para el Federalismo y el Desarro llo Municipal del Gobierno de ayari t en http://www.e_ local. gob.mx/work/templates/encic lo/nayari t/mpios/ 180 l 2a. htm.
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26
3. J La llegada de Gálvez a Nueva España
José de Gálvez23 fue enviado a México corno visitador e l 18 de julio de 1765,
para inspeccionar todos los tribunales de la Real Hacienda y de Ju ticia, así com dc
erigir y organizar un dispositi vo militar que le permiti era a la orona mejorar la
administración de estas tierras . A su llegada f e recibido por el virrey Joaquín d
Montserrat, marqués de Cruillas (1760-1766), quien no dudó en mostrarl e ab iertamente
su desacuerdo ante estas nuevas disposiciones al sentirse ensombrec ido y desplazado dc
su cargo. Ante tal amenaza, Gálvez se vio en la necesidad de relevar a l virrey, quedando
al frente de este cargo D. Carlos Francisco de Croix (1766-1771), qui en a diferencia de u
antecesor, facilitó la tarea del visitador al echar andar sus ideas d cambio y de
24 progreso.
Las Visitas Generales eran asistidas por Instrucciones mu y deta ll adas quc
conferían a los visitadores las facultades necesarias para alcanzar los objetivos emitido
por el rey y el Consejo de Indias, así como para conocer lo medios a los que podían
acceder para conseguirlo.
En las Instrucciones giradas para Jo"'é de Gálvez, se destaca que una de us
finalidades era la de procurar los recursos económicos necesan o para sufragar los
23 José de Gá lvez nació en la Provincia de Málaga en 1720 y murió en 17 7. Es tudió abogac ía en Salamanca y aprendió francés . En 1747 al fungir como abogado de la corte y actuar con gran capac idad y desempeño el rey Carlos TII lo convocó a una audiencia privada . En 1764 fu e des ignado como alca lde de Casa y Corte y hac ia 1767, el rey le nombró ministro del Consejo de Indias. En 1773 le fu e encomendado la inspecc ión del Archi vo de Indias y el de Simancas yen 1775 alcanzó e l ca rgo de ecretario de Indias . u carrera administrativa culminó en 1780 al ingresar como miembro del onsejo de E tado y fina lmente en 1785 adquirió el título de marqués de onora. Su obra ad rninistrativa maestra fu e: la Ordenanza de Intendentes de la Nueva España en 1786. Véase: Ornar Guerrero Orozco. Los raíces Borbónicos, pp. 141-145. 24 De a cuerdo con Guerrero, para Cruillas la polémica inic ial "se derivó en una disputa formal sobre la letra y fo ndo de las Instrucciones para el visitador general , que e l virrey denunciaba como extraordinariamente exten as y lesivas a su competencias" véase en: Omar Guerrero Orozco. Los raíces Borbónicos, p.148 y 156; Luis Navarro García . Los reformas Borbónicos en América. pp. 40-42 Y 74-77; Josefina Zoraida Vázquez. (Coord.) lnterpretacione del Siglo XVIII mexica Jl o. pp. 17- 18; Y Aurea Commons, Las intendencias de Nueva Espaiia, p. 16.
27
problemas de cuestión financiera a los que se enfrentaba la Metrópoli a cons cuencia de
la reciente guerra que había enfrentado contra Inglaterra. Además de II var a cab una
evaluación al sistema judicial ; inspeccionar las minas y conocer la realidad le us
ingresos; y por supuesto, de la organización comercial del virreinato . Gálve fue
habilitado también para reglar la administración financiera ; enmendar los errores y
mejorar las cuestiones hacendarias ; nombrar visitadores subalternos; ev itar el
contrabando ; ratificar a los empleados que se desempeñaran satisfactoriamente; revi sar
los contratos y anular los que no fueran de provecho ' inspeccionar tribunales ; e inclusive,
entenderse de los bienes materiales que habían sido xpropiados a los jesuitas.2
3.2 Las reformas económicas, militares y sociales d la Nueva E paFia
Al buscar un sistema más eficaz, se lograrían más beneficios para la Real
Hac ienda? 6 Esto fue posible por medio del sector minero, ya que de acu rdo con Brian R.
Harnnett27 la producción minera fue canalizada a la Metrópoli directamente para sufragar
la mala sihlación financiera por la que estaba atravesando. Por otro lado, se ha reconocido
que el impulso que tuvo la mineria28 no únicamente benefició a este sector, s ino tambi én
a otras zonas económicas como fueron las del ra o textil, la agricultura y el comerc io .
Otros de los beneficios que se obtuvieron fueron el de la urbani zac ión y el incremento del
comercio, dichos aspectos tuvieron que ser implementados para el so tenimi ento de I
empleados que laboraban en las mmas. Dicha transformación dependió de las
2 Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas, pp. 145-152; Y Josefina Zoraida Vázquez. Interpretaciones del Siglo XVIII mexicano, p. 17. 26 Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Va l/adalid, p. 40 . 27 Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado . . . ", pp. 67- 108. 2 "Para mantener el nivel de producción de plata , la Corona se vio obligada no só lo a reducir los cos to del azogue y de la pólvora, sino además a eliminar los impuestos indirectos sobre toda aquell as mercancías esenciales para las minas" Carlos Marichal. "La bancarrota del virreinato .. . ", p. 159.
28
innovaciones implementadas por los refonnadores, David Brading29 sugiere que Nueva
España produjo más del 67 por ciento de toda la plata en el continente americano y su
acuñación fue de 27 millones en el año de 1804. Si comparamos estas cifras con las de
1702, existe una diferencia de 22 millones, ya que fueron acuñados 5 millones so lamente.
Las causas de este incremento fueron varias: por un lado el aumento de la Real
Hacienda no se originó desde la implantación de las Intendencias, aunque sí con las
refonnas y por el otro, hubo una mayor cantidad de impuestos recaudados con la creación
de la fábricas de puros y cigarros que fueron establecidas en 1769 en México, Puebla,
Querétaro, Oaxaca, Orizaba y Guadalajara,30 además de los que se recopilaron por la
com rcialización de "el papel sellado, la venta de azogue, la de pólvora, los naipes, la
comercialización de la nieve e incluso las peleas de gallos",31 y finalm ente, el comercio
se vio también fortalecido porque se introdujeron nuevos métodos contables a la
circulación de mercanCÍas en toda la Nueva España.32
Pedro Pérez Herrero dice que hubo un cambio en el sistema de cobro de los
impuestos, esto tuvo como finalidad la reducción de los costos de importación para tratar
de erradicar los centros manufactureros. Sin embargo, los centros manufactureros
continuaron funcionando, y junto a las fábricas y los talleres, é tos comenzaron a rendir
frutos de manera tal , que tanto la producción de grana, como la de cochinilla, lino y
29 David A. Brading. "Las minas de plata en el Perú y México colonial. Un estudio comparativo" en Desarrollo Económico (vol. 11 , núl11. 41 , 1971 , p. lOS). 30 Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico ... " , p. 11 5). 31 Carlos Marichal. "La bancarrota del virreinato ... ", p. 159. 32Las relaciones mercantiles también fueron favorecidas por ese cIientelismo tejido entre las familia s con mayor poder económico y comercial de las regiones a través del "matrimonio, el parentesco y la am istad" los cuales "continuaban siendo los medios característicos p ra conso lidar y promover su intereses comercia les" Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado ... " p. 79; Véase también e l trabajo de Iván Franco Cáceres. La Intendencia de Va lladolid, pp. 54- 61 , donde exp lica la situac ión económica y la población en Michoacán donde se refiere también a este tipo de alianzas socia les que influye ron en e l desarrollo de su sociedad.
29
cáñamo ascendió notablemente. Sin embargo, esto no significa que siempre fue a í, ya
que cuando no había conflictos militares y los puertos eran abiertos, la demanda de
productos que venían del extranjero era tanta, que los elaborados en nuestro continente
disminuían su precio considerablemente y únicamente eran valorados en su condición de
materia prima. 33
Las milicias también fueron objetivo de cambio y renovación en la Nueva España
para los Barbones. De acuerdo con Christon 1. Archer34 los peninsulares consideraban
importante que debido a las recientes conquistas británicas en las ti erras de Canadá y
Florida, así como de la temporal ocupación de La Habana, los habitantes de la ueva
España debían de contar con su propio ejército, la milicia ya no era sufi ciente para
enfrentarse a tropas militares como las británicas o las de alguna otra potenci a de la
época, por lo que los reformadores tuvieron que b scar cuál era la causa de semejante
ineficiencia y darle una solución. Por ello, y por primera vez en toda la época colonial , e l
gobierno se vio en la necesidad de crear un ejército regular. Para conseguirlo, éste
recurrió a la ayuda de los militares expertos de la península para que organizaran a las
nuevas tropas americanas. 35 También hubo la necesidad de estructurar nuevo
presupuestos para sufragar los gastos de la milicia, -desde su sustento, hasta la creac ión
de fortificaciones e instalaciones militares-, al incrementarse el impuesto en producto
33 Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico . .. ", p. 116. 34 Véase los trabajos de Christon 1. Archer. "Bourbon Finances and Military Policy ... ", pp. 3 15-350 Y "The Army ofthe New Spain ... ", pp. 705-714; Y el de Felipe Castro Gutiérrez. Nueva Ley y Nuevo Rey. pp. 98- 102. 3, "La tropa regular en la ueva España, por ejemplo, aumentó de unos cuatro mil soldados en 17 4 a más de 10 mil hacia fmes del siglo, mientras que la milicia se incrementó con mayor rapidez, alcanzando una cifra de alrededor de 20 mil hombres armados en 1803" . Carlos Marichal. " La bancarrota del virrei ato .. . ", p. 165.
.-
30
como el pulque, el tabaco y la bebida del chinguirito - aguardiente de caña de calidad
inferior consumido en Cuba y La Nueva España-. 36
Una de las ventajas de contar con una milicia fue que los ayuntami entos al
necesitar de su respaldo, tuvieron la oportunidad de controlar los ascensos de los
candidatos a oficiales y al mismo tiempo del reclutamiento de los so ldados, así como de
mantener la paz de la colonia. 37
Las medidas reformistas tomadas por Gálvez, -principalm nte los de la pre ión
fiscal y la lucha por los puestos administrativos-, provocaron un gran descontento en la
élite criolla.3
Por otro lado, el sector rural también comenzó a verse afectado ya que su
productividad se vio mermada al existir una sobreexplotación en la mano de obra
impidiendo el crecimiento del mercado interno. Los trabajadores urbano tambi én vieron
afectada su economía al percibir que sus ingresos eran insuficientes para la manutención
básica de sus familias; 39 Carlos Marichal explica que las contribuciones financi eras que
eran recibidas por el virreinato habían recaído también en "las clases sociales más
humildes y explotadas: los mineros, los artesanos, los p eones de hacienda, los
campesinos indígenas ." 40 Todo esto ocasionó que los sectores sociales se vieran
empobrecidos, el sistema de crédito fuera debilitado y el numerano comenzara a
36 Microsoft® Encarta® 2007. © 1993-2006 Microsoft Corporation. 37 Véase: Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico ... ", p. 145; Y Virginia Guedea. " La organi zac ión militar", pp. 159- 161. 38 Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado ... " pp. 75 ,85, 89 Y 94 . 39 Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico ... ", pp. 125 Y 126 . 40 "A cada uno de los trabajadores más humildes, incluyendo a los pastores , albañiles y peones (casi todos eran indios) se les quitó un peso de su ' raya ' (pago mensual) como donativo"; " inclusive aportaron sumas los cómicos, bailarines y músicos del Teatro del Real Coliseo, ofreciendo entrega r el dinero de varias funciones para este propósito (los donativos)"; "En la capital fueron ob ligado a contribuir los veci nos (ricos y pobre) a instancias de los alcaldes de barrio, quienes iban de casa en casa a co lectar los donati vos . Asimismo entregaron fondos los miembros de los gremios de artesanos: panaderos, curt idores, tin toreros, sastre , zapateros , talabarteros, carroceros, hiladores de sed , tejedores de algodón, bordadores y carpi nteros, entre otros" véase Carlos Marichal. "La banca rrota de l virrei nato ... ", pp . 163, 168, 17 1 Y 172.
31
escasear. La mayor crisis se registró con la Real Consolidación en el año de 1804, esta
vicisitud fue mejor conocida como la Consolidación de los Vales Reales y que se
explicará con mayor detalle en el siguiente capítulo, dónde se analizarán las
consecuencias que tuvieron las reformas en la relación Ig1es ia-Estado.4 1
3.3 La implementación de las Intendencias
Entre las modificaciones más importantes dentro del refo rmi smo borbónico que
estuvieron orientadas a la centralización del gobierno españo l, se encuentra el
establecimiento del Sistema de Intendencias. Dicho gobierno administrativo , tuvo su
antecedente en el modelo que fuera implementado en Francia por el cardenal Richeli eu
en 1616. La casa de Borbón dictó la orden para establecer este sistema admini strativo en
1718 y fue revocado en 1721 , sin embargo, en 1749 vo lvió a ser reimplantado, quedando
integrados de manera uniforme tanto su administración como su territorio. 42
En América, se dispuso la implantación de Intendencias primero en Cuba en 1764
y después en Luisiana en 1766. Transcurridos di ez años se establec ió la Intendencia de
Caracas y en 1782 las del Río de la Plata y Nueva Granada. Entre 1786 y 1787, se
crearon la de Nicaragua o León, la de Honduras o Comayagua, la de la N ueva spaña y
la de Chile. Por último, en 1811, se creó la Intendencia de Puerto Ri co.4
La propuesta de Intendencias en la Nueva España se hizo mediante el "Inform e y
Plan de Intendencias,,44 firmado por el virrey Cro ix y el visitador Gálvez el dí a 15 de
4 1 Carlos MarichaI. "La bancarrota del virreinato .. . ", p. 174. 42 "La implantación de las Intendencias en Francia dio como resultado el que su sistema po lí ti coadministrativo-territorial lograra su unificación, dando lugar a la formación de Francia como Estado moderno". Véase: Aurea Commons, Las intendencias de Nueva Espaí1a, pp. 2-5 Y L uis Nava rro C arcía . Las reformas Borbónicas en América, pp. 15-19. 43 Aurea Commons, Las intendencias de Nueva Espa/ia, pp. 5-8. 44 Los puntos más sobresa lientes de este Plan de intendenc ias son los siguientes de acuerdo con Co mmons: " 1. Que si se continuaba con el mismo sistema de gobiemo en la Nueva España , se iría a la ru ina. 2. El virrey tenía demasiadas funciones y le era imposible controlar todo.
. -
32
enero de 1786. Dicho plan tenía como objetivo, satisfacer la n ces idad a la que e
enfrentaba la Corona española por refornlar la administración del virreinato de la ueva
España. Consideraban que un reino tan vasto como éste, debía de ser gobernado por un
representante del rey, el cual debía rodearse de colaboradores a los que se les delega rían
responsabilidades que en su conjlmto, facilitarían la gobernabilidad del virreinato.45
Horst Pietschmarm46 considera que para alcanzar dicho objetivo, era necesari o
primero "descentralizar" el poder que estaba en manos de unos cuantos y "centrarlo" de
una manera más organizada y eficaz en un grupo que estuviese dedicado espec ialmente a
ello . La propuesta de Pietschmann de descentralizar para poder centrali zar, se refi ere a la
idea de Gálvez de querer abolir a los alcaldes mayores de sus puestos gubernamenta les a
los cuales consideraba como personas corruptas, abusivas y criminales, que en lugar de
actuar como representantes del rey, tenían como único obj eto su enriquec imi ento
personal a costa de la población y además, de que el pueblo les viese como tiranos, por lo
cual, se acreditaba como necesaria esa transformación porque además de que e
eliminaría, " la depravación que existía dentro del mismo gobierno" y "se podría alcanzar
la unificación del Estado" .47
3. Los alca ldes mayores y corregidores que debían ser su - co laboradores, se encontraban en franca corrupción . 4 . e proponía como solución dividir al virreinato en 11 intendenc ias de prov inc ia y una de ejército y prOVJJlCla. 5. Los intendentes tendrían conocimiento de las cuatro causas. 6. El ramo de tributos aumentaría con una adecuada administración. 7. En la Rea l Hacienda ya se habían logrado un incremento con los aj ustes rea lizados por el visitador Gálvez. 8. Los intendentes tendrían como subalternos a los subdelegados y alcaldes ord inari os para la reca udac ión. 9. Se abolirían las alcaldías ma yores y los corregimientos y se establecerí an subdelegacio nes." Aurea Commons, Las intendencias de Nueva España, p. 17. 45 L uis Navarro GarCÍa. Las reformas Borbónicas en América, pp. 39-77 . 46 Horst Pietschmann. "Proto liberali smo, reformas borbórucas y revo luc ión . . . " , pp. 42-54. 47 Véase: Luis Navarro GarCÍa. Las refo rmas Borbónicas en América, pp . 53-58; Josefina Zoraida Vázquez. In terpretaciones del Siglo XV/l1 mexicano, p. 19; Y para más información sobre e l sistema de corrupción dentro del gobierno en nuestro país desde la época co lonia l ha ta e l Méx ico moderno,
33
David Brading también exp lica que para Gálvez era necesaria la e liminac ión dc
los puestos de alcaldes mayores porque sus servicios eran innecesario y podían ser
sustituidos Sll1 ningún problema por los intendentes; además, justificó su acc ión al
informar que en sus visitas encontró muchos casos en los que los alcaldes mayore eran
corruptos y se dedicaban a la opresión de los indios para a lcanzar sus prioridades.48
Hubo mucha gente que se mostró inconforme con las ideas de revoluc ión en el
gobierno propuestas por Gálvez, tal es el caso del mi smo virrey Anton io María Bucareli y
Ursúa o el Arzobispo Francisco Antonio Lorenzana, quiénes veían, por ej mplo , la
exclusión de los criollos de los puestos burocráticos con total desacuerdo, ya que no
podían exp licarse por qué si los miembros en la Audiencia de M éx ico en 1769 habían
sido en su mayoría españoles americanos y estaban cumpliendo con su trabajo, para 1779
además de haberse incrementado el número de plazas labora les, el 75 p r ci ento de I
cargos estaban siendo otorgados a los peninsulares;49 asimismo, consideraban que estos
últimos ni siquiera tenían la capacidad suficiente de poder gobernar de manera capaz un
ten"itorio que ni siquiera conocían y que por ende no podían entender.
La promulgación de la Ordenanza de Intendentes para la N ueva España fu e el 4 de
diciembre de 1786. Con este proyecto hubo también una propuesta de di vidir el territori o
del virreinato de la N ueva España en Intendencias. Con ello, se pretendió reducir la
división administrativa del gobi erno de más de 150 alcaldes mayores a únicamente 12
consúlte e el artículo c ientífico de: Claudio Lomnitz. "Ritual, rumor y corrupc ión en la formac ión de l espacio nacional en México" en Revista Mexicana de Sociología, (Vol. 58, no . 2, April -June, 1996, pp. 2 1-51 ). 48 David Brading. Min eros y comerciantes, pp. 57-109. 49 David Brading. Mineros y comerciantes, tablas 2 y 3 pp. 66 Y 67 ; Brian R. HamnetL '"Abso lul ism ilustrado .. . ", p. 89; Y Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, p. 290.
:
".
4
Intendencias: México, Michoacán, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Guanajuato , Mérida ,
Durango, Zacatecas, Guadalajara, Ari zpe y San Luis Potosí. 50
La jerarquía de mando de la nueva administración de gobi erno de la Nueva
España quedó reestructurada de la siguiente manera:
• El virrey.
Era considerado como el representante del rey en los reinos transoceánico y su
trabajo consistía en la administración de la justicia, cuidar la paz y el orden, recaudar
impuestos, emitir instrucciones que reglamentaran la vida pública y la economía, diri gir
las tropas militares, vigilar y supervisar a los funcionarios , además de ejercer funci one
de control sobre el clero regular y el secular. 51 De acuerdo con Brian Hamnett, la
intención de Gálvez era disminuir la autoridad del virrey al quedar c ntrali zado el poder
directamente en Madrid, sin embargo, esto no pudo ser posible, ya que el vi s itador murió
antes de que sus proyectos fueran completad s y sus seguidores no fu eron lo
suficientemente rígidos para continuar con dichos planes.52
• El Intendente.
A éste se le encomendaron las funciones en las cau as: de justicia, policía,
hacienda y guerra53. Dentro de sus actividades primordiales destacaban : manten r la paz
en los pueblos de su jurisdicción; promover el comercio la industri a, la agri cultura y la
minería; infonnar la calidad de las tierras que tenía a su cargo; e laborar inforl11es de
50 Aurea Commons. Las intendencias de Nueva España, pp. 27-84; Luis Navarro García . Las refo rlllas Borbónicas en América, pp. 65-67; Y Ana Irisarri Aguirre. El refo rmismo borbóll ico en la provincia de San Luis Potosí, p. 19. 51 Horst Pietschmann. Las refo rmas borbónicas y el sistema de intendencias, pp. 65-77 . 52 Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado . .. ", p. 92 . 53 Pedro Pérez Herrero. "El México borbónico . .. " p.144.
-.
35
producción, supervisar la administración de ti erras; vigilar el cobro de rentas reale ,
impuestos, tributos, estancos y di ezmos; y atender la as istencia de las tropa
• Los subdelegados .
Estos funcionarios eran nombrados por el intendente y su obl igac ión como
representantes del gobierno, era el de administrar la justicia en todos aq uellos pueblo
que eran perteneci entes a sus partidos; mantener el orden entre los naturales; y hacer lo
padrones de sus provincias; y cobrar y recaudar los fondos tributario
• El teniente letrado.
Este servía como ayudante del Intendente y fungía labores de abogacía en 10
casos de carácter civi l y criminal.54
4. Las reformas en San Luis Potosí
Una vez promulgada la Ordenanza de Intendentes en la Nueva spaña, e
procedió a reorganizar el territOlio del virreinato con el único .fin de alcanzar su mejo r
administración y gobernabilidad, siendo San Luis otosí , la intendencia con mayor
extensión territorial.
54 Antes de la implementac ión de las intendencias, la organizac ión admin istrativa en la Nueva España estaba dividida en tres jerarquías : la cumbre estaba ocupada por el vi rrey y la audiencia , quienes t ní an competencia en la rama c ivil, la eclesiástica y la militar; a continuación la de los corregidores y los alcalde mayores quienes se concentraban en las ramas del gobierno civil : y por último, la que ocupaba el cabildo, que dependiendo de su ubicac ión geográfica y de las persona a las que representaba , su funciones variaban . Aurea Commons, Las intendencias de Nueva Espaíia , pp . 13- 14; Claudio Lomnitz. "Ritual , rumor y corrupción .. . ", pp. 24-27 ; yen espec ial se recomienda el trabajo de Borah, quién exa mina cuales fueron los diferentes puestos de auxiliares del gobernador provincial. Woodrow Borah, " Lo auxiliares de l gobierno provincial" (en El gobierno provincial en la Nueva Espa íia , / 570- / 787. en Woodrow Borah (Coord.), México, Universidad acional Autónoma de México-J stituto de Investigaciones Hi stóricas , 2" Edic ión, 2002, pp. 54-70) .
.-
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INTENDENCIA DE SAN LUIS POTosí SEGÚN ORDENANZA DE INTENDENCIA DE 178655
55 Aurea Cornrnons, Las intendencias de Nueva Espaiia, p. 65
36
.-
".
37
4.1 La administración pública y la organización territorial de la Intendencia potosina
D. Bruno Díaz de Salcedo fue nombrado por el rey Carlos III como Intendente de
San Luis Potosí y D. Vicente Bernabeu Pomares, como Teniente Letrado y Asesor
Ordinario del Intendente el 7 de marzo de 1787, tomaron posesión de sus cargos el 25 de
octubre del mismo año. 56
La Intendencia potosina fue conformada por la ciudad capital de San Luis, las
minas de San Pedro Guadalcazar, la Alcaldía de la villa de los Valles, Matehuala, Ramos,
Salinas del Peñón Blanco, Nuevo Reino de León, Charcas con los pueblos de Catorce,
Hedionda y Venado, la colonia de Santander y las provincias internas de Coahuila y
Texas.57 Con dichos territorios se organizó la intendencia en cinco provincias que fueron:
San Luis Potosí - la que es el objeto de estudio de este trabajo- , Nuevo Santander - actual
estado de Tamaulipas-, Nuevo León, Coahuila y Texas.58
La provincia de San Luis Potosí a su vez se dividió en 8 subdelegaciones o
partidos, los cuales se componían de la siguiente manera: la ciudad capital y su
jurisdicción, Santa María del Río, Charcas, El Venado, La Congregación de las Reales
Salinas de Santa María del Peñón Blanco, El Real de Minas de San Pedro de
Guadalcazar, Río Verde y San Miguel Aquismón o Villa de Valles. 59. Cada una de éstas
56 Podemos encontrar en el trabajo de Senosiain una extensa investigación sobre la relac ión entre el Intendente Díaz de Salcedo y su Teniente Letrado Bernabeu, ya que el autor hace una recopilación y un análisis de las cartas que fueron enviadas al virrey y dónde se puede apreciar la s ituación política que vivían estos dos personajes. Véase : Ángel Senosiain. "Bruno Díaz de Salcedo, Vicente Bemabeu, Félix María Calleja ... ", pp. 67-68; Jesús Motilla Martínez. La administración pública, pp. 67-68; Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, p. 354; María Isabel Monroy Castillo y Tomás Calvillo Unna. Breve historia de San Luis Potosí, pp. 138- 140. 57 Véase: Ma. Isabel Monroy de Martí. Pueblos, misiones y presidios, pp. 11 -15; Jesús Motilla Martínez. La administración pública, pp. 65-66; y Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, p. 354. 58 Ana Irisarri Aguirre. El reformismo borbónico en la provincia de San Luis Potosí, p. 24. 59 Esta composición territorial de la provincia potosina fue el comienzo de la actual di stribución municipal del Estado de San Luis Potosí. Ana Irisarri Aguirre. El reformismo borbónico en la provincia de San Luis Potosí, pp. 29-33 .
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;
38
era regida por un subdelegado qUIen a su vez, estaba bajo las órdenes directas del
intendente y de acuerdo con Ana lrisarri , su objetivo principal era el de "informar a las
autoridades centrales de la realidad de su jurisdicción y hacer cumplir las distintas
ordenanzas que llegaban de México o San Luis Potosí" .60
DIVISIÓN EN PARTIDOS O SUBDELEGACIONES EN LA PROVINCIA DE SAN LUIS POTosí61
163501 2708752
2341414 163504
---o
•
6 •
1.
2.
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OI.COI ••• 29. Tillifill P.- :Il. Tlul'iINUliI
Tillq lay'iUiD 31. ~III: IU! Sal f I'iIIUEII
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:n. VIl la.
:n. I lI rtIiI
Cuando el Intendente Díaz de Salcedo llegó a la ciudad de San Luis y tomó
posesión de su cargo, se enfrentó - como precursor de un nuevo sistema de gobierno que
60 Ana Irisarri Aguirre. El ref ormismo borbónico en la provincia de San Lui . Potosí, pp. 7 1-72 . 6 1 Ana Irisarri Aguirre. El reformism o borbónico en la provincia de San Luis Potosí, p. 34.
..
..
39
recién se estaba implementando- a varias dificultades: tuvo que cesar al alcalde mayor
que se encontraba en ese momento en funciones D. Josef de Castilla y Loaeza, sacar
adelante trabajos rezagados; además, comenzó una rivalidad política con Vicente
Bemabeu, su Teniente Letrado.62
Una de sus diligencias como Intendente, fue la publicación de un "bando de buen
gobierno" el 3 de noviembre de 1787, el cual tenía que ser cumplido sin importar cuan
estricto fuera y el cual tenía como finalidad evitar la evasión fiscal y el enriquecimiento
ilícito.63 Estos incidentes originaron una ola de descontentos en la sociedad potosina, no
únicamente en las altas esferas de la sociedad sino también dentro de la población de
menos recursos .
4.2 La condición social y económica que se vivía en la provincia potosina
La provincia potosina durante la época de la Intendencia contaba únicamente con
algunos telares y sólo algunas de sus haciendas tenían molinos.64
in embargo, la
economía se basaba en la producción minera, la renta de tabaco, las alcabalas, la venta
del azogue y la producción salina. Por su parte, la situación económica en la provincia de
San Luis Potosí iba en aumento , ya que de acuerdo con Primo Felici ano Velázquez,65 las
minas que estaban siendo trabajadas en Catorce durante la época eran: la de la
Valenciana, la Campanita, la Cata, Santa Rita y la Cruz; en el Cerro de San Pedro: la
Princesa, la de San Pedro el Bajo, la de los Remedios, la Concepción, la del ocavón, la
de Santa Ana, la de San Pedro Celestino, la de Santa Clara, la de la Cruz, la de an Pedro
62 Véase: Ángel Senosiain. "Bruno Díaz de Salcedo, Vice te Bernabeu, Félix María alleja ... ", p.68 ; Y
Jesús Motilla Martínez. La administración pública, pp. 68 Y 71. 63 Jesús Motilla Martínez. La administración pública, pp. 78-88 ; Aurea ommons, Las in tendencias de Nueva España, p. 164; Y Ángel Senosiain. "Bruno Díaz de Salcedo, Vicente Bernabeu, Félix María
Calleja . . . ", p. 69. 64 Aurea Commons, Las intendencias de Nueva Espolia, p. 165 . 65 Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí , p. 360.
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".
40
el Alto, la de San Jorge, la de San José; en GuadaIcazar: la de San Antonio; yen el Valle
de San Francisco: la de San Cristóbal y la de Nuestra Señora de los Dolores.
En 1790 se establecieron los guardas de pito que eran necesarios para cu todiar la
ciudad en las noches y se surtió a la localidad de agua potable. Para 1792 e fundaron dos
colegios para niños y uno para niñas. 66
Los naturales de la región vivían bajo ciertas reglas, por ejemplo, tenían que hacer
pago de tributo, no podían portar arn1as de ninguna clase sin licencia -bajo pena de
muerte-, no podían montar a caballo y sus vestiduras debían ser las tradicionales -los
hombres debían usar tilmas y las mujeres sus huipiles-, en caso de querer vestir como
españoles serían azotados y encarcelados - y al reincidir, serían incluso desterrados-.67
Es
importante destacar que la población se vio envuelta en conflictos agresivos a
consecuencia de los cambios que se estaban originando con las reforma de lo Borbones,
entre ellos destacan, los tumultos y las revueltas en 1767, que incluso tuvieron que ser
castigados por el mismo Visitador Gálvez.68
El objetivo fundamental del reformismo borb ' nico fue lograr un tado fuerte y
centralizado que acaparara todas las competencias de gobierno. Para esto debía limitar la
influencia que ejercían las distintas corporaciones e instituciones que actuaban en la
sociedad y que suponían una merma del poder del Estado. Dentro de estas corporaciones
estaba la Iglesia quien por su influencia tanto religiosa como económica, suponía un reto
fundamental para los deseos centralizadores de la nueva dinastía. No se trataba de una
66 Aurea Commons, Las intendencias de Nueva España, p. 164. 67 Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, pp. 284-285 . 68 Véase: Primo Feliciano Velázquez. Historia de San Luis Potosí, pp. 267-292; María Isabel Monroy Castillo y Tomás Calvillo Unna. Breve historia de Sal! Luis Poto 'í, pp. 117-118 Y 138; Rosa He1ia Villa de Mebius. San Luis Potosí, pp. 39-40); Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, pp. 355-356; Y Dorothy Tanek de Estrada. Pueblos de indios, p. 251 .
41
reforma contra la religión sino contra el poder y la influencia "temporal" que ejercía la
Iglesia en la sociedad, sobre si esta influencia no estaba acorde con los intereses del
Estado.
La reestructuración que sufrió la Iglesia no sólo ocasionó que sus integrantes se
vieran afectados en su economía, en sus derechos personales y en sus privilegios como
"representantes de Dios", sino que también, trajo como consecuencia una modificación
en su relación con el Estado, ocasionando incluso, un distanciamiento y rivalidad entre
ambas autoridades y los pobladores a los que ministraban. Por esto, una vez que se han
analizado las reformas borbónicas en general, en el capítulo II vamos a centramos en
cómo afectó la nueva política a la Iglesia y a su relación con el Estado y la población.
CAPÍTULO 11 LA RELACIÓN IGLESIA-ESTADO CON LA IMPLANTACIÓN DE LAS
REFORMAS BORBÓNICAS
Este segundo capítulo ti ene como objetivo explicar los cambi os que fueron
implementados a la Iglesia durante las reformas borbónicas y la relación que surgió a
consecuencia de ello entre ésta y el Estado.' Esto es importante porque permite
comprender si para el caso de la provincia potosi na dichas innovaciones fueron o no
puestas en práctica o sólo quedaron en la teoría, modificando el papel que el cura pálToco
venía jugando dentro de la sociedad hasta ese momento.
Este segundo capítulo se ha dividido en dos subcapítulos, los cuales permitirán
conocer al lector cómo se vieron afectados el alto y el bajo clero en su economía, su
ejercicio y su administración cuando los Borbones quisi eron restarles el poder y la
influencia que habían ejercido hasta entonces dentro del territorio españo l. En la primera
parte nos centraremos en las refomlas que afectaron a la Iglesia y en la segunda, a las
relaciones entre las autoridades civiles y las ec lesiásticas. Es importante destacar, que
dichos cambios repercutieron también en la política e tema con las autoridades civi les,
principalmente con los subdelegados y los Intendentes.
1 WiIliam B. Taylor. Ministros de lo sagrado, 83 1 pp.; Rosa Camelo. "El cura y el alca lde mayor" en: Woodrow Borah (Coord.), El gobierno provincial en la Nueva Espaí7a, / 570-1787. (México, Un iversidad Nacional Autónoma de México-Instituto de Investigaciones Históricas, 2002, pp.163- 181); John Fisher. "Iberoamérica Colonial" p. 646.
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43
1. Las reformas eclesiásticas durante el régimen de los Borbones
1.1 La Iglesia Católica y el gobierno de los Habsburgo
Al expandir su imperio a tierras americanas, los Austrias se comprometieron a
evangelizar las nuevas tierras. 2 Esto significó una relación de dependencia entre el Estado
y la Iglesia, ya que los reyes católicos tenían como obligación "la conversión de los
habitantes de las tierras recién descubiertas y a proteger y mantener a la iglesia
militante bajo el Patronato Real"3 debido a las bulas papales que le fueron concedidas
desde Roma, y con las cuales la Corona:
"l . Se reservaba el derecho de presentar candidatos para los nombramientos ecles iás ticos en todos los niveles . 2. Se responsabilizaba de pagar los salarios y de construir y dotar catedrales, igles ias, monasterios y hospitales con los diezmos de la producción agrícola y ga nadera . 3. Se reservaba el derecho de autorizar el traslado del personal eclesiástico a las indias. 4. En 1538 ordenó que todas las comunicaciones entre Roma y las indias tendrían que \levarse al Consejo para su aprobación y 5. Activar la sumisión y la europeización de los indios y predicar lea ltad a la orona de
Casti\la" 4
En otras palabras, el Estado y la Iglesia compartirían la responsabi lidad de ver que
la población recién sometida cumpliera con las actividades cristianas, las morales, las
sociales, las misioneras y las educativas.5
2 William B. Taylor. Ministros de lo sagrado, p. 29 ; Y Osear Mazín GÓmez. Entre dos Majestades. (México, El Colegio de Michoacán, 1987, p. 11). 3 Murdo J. MaeLeod. "La iglesia católica ... ", p. 186; por su parte Schwa\ler dice que : "La igle ia católi ca era sin duda alguna la principal institución de las colonias españolas de América . Sólo la Corona disponía de una autoridad semejante". Véase: John F. Sehwaller. "La Igles ia en la América española", p. 27) ; José de la Puente Brunke. "La administración colonia l", pp. 216-217; David A. Brading. Una Ig les ia asediada, p. 29; Y Naney M. Farriss. La Corona y el lera en el México colonial 1579-1821 . La crisis del privilegio eclesiástico. (México, Fondo de Cultura Económica, 1995, p. 25). 4 Bulas papales : In ter caetera (1493) Y Eximiae devotionis (1493 Y ) 502) dictadas por A lejandro VI ; Universa/is ecclesia (1508) por Julio Il ; y Exponi novis () 523) por Adriano VI ; véase: M urdo J. MaeLeod. "La iglesia católica ... ", p. 186; Y David A. Brading. Una Ig lesia asediada, p. 29. 5 Fisher nos dice que: "la expansión del catolicismo estaba inextricablemente unida a la autoridad rea l, dado el enorme control que ejercían las Coronas española y portuguesa sobre la administración nacional de los asuntos eclesiásticos. Ambos soberanos eran la cabeza no só lo de la jerarquía de la adrn.ini u'ación secular, sino también del gobierno de la Iglesia en la metrópoli y las colonias, pues estaban capaci tados por concordatos preexistentes para hacer nombramientos eclesiásticos y formular leyes y ordenanzas a las que habían de atenerse las comunidades religiosas de todos sus reino ". Véase : John Fisher. "Iberoamérica Colonial" p. 637.
44
1.2 La Iglesia Católica y el gobierno de los Borbones
Cuando la dinastía de los Borbones ascendió al trono, uno de sus objetivos dentro
del proceso de centralización del imperio, fue el de reestructurar a la Igles ia para ev itar
que esta Institución obstaculizara su plan de modernización tanto n spaiia como en
América. 6 Para la nueva casa gobernante, el poder que había adquirido el clero ev itaba no
sólo el progreso material, sino también la razón y la eficacia, de ahí que los reformadores
borbónicos sugirieran que para alcanzar un equilibrio entre el Estado y la Iglesia e
debían expropiar sus bienes y además, su poder debería ser limitado a través de diferentes
caminos como la restricción de sus funciones temporales, los privilegios ecles iásticos, la
economía y su fuerza moral ante la población que ministraban.7
1.3 La influencia del jansenismo o la del regalismo en el mundo hispánico
Para poner en práctica la reestructuración eclesiástica, los funcionarios reformistas
de la monarquía borbónica dirigieron su política de transformación hacia la ideología del
jansenismo.8 Tradicionalmente se ha dicho que los innovadores reformados se basaron en
el jansenismo para justificar las reformas y limitar el poder del clero. Dicha doctrina
surgió en Francia y entre otras cosas afinnaba que la Iglesia no podía tomar parte en los
6Véase: Jaime E. Rodríguez O. La independencia, 472 pp.; Iván Franco Cáceres. La Intendell cia de Va lladolid, 306 pp.; Ornar Guerrero Orozco. Las raíces Borbónicas, 315 pp. ; Luis Navarro García . Las reformas Borbónicas en América, 140 pp.; John Fisher. "Iberoamérica Colonial" , pp. 527-662; Carlos MarichaI. "La bancarrota del virreinato ... ", pp. 153-186; William B Taylor. "El camino de los curas . . . ", ~p. 81-1 13; Y Pedro Pérez Herrero. "Los benefic iarios ... ", pp. 207-265.
Ana María Bidegaín nos dice que las reformas borbónicas pueden co s iderarse como un segundo intento por conquistar a América y evitar la diso lución imperial reencontrando su camino de prosperidad a costa de las colonias . Véase: Ana María Bidegaín. "La expresión de corrientes en la Igles ia neogranadina ... ", pp. 145-146); Jaime Rodríguez supone que "los reformadores consideraban al numeroso clero como parásitos improductivos que agobiaban a la sociedad y que, al mantener la tierra en un régimen de manos muertas, privaban al Estado de ingresos y a la sociedad de riqueza productiva". Véase: J llime E. Rodríguez O. La independencia, pp. 65-66; Wi1liam Taylor nos dice que: "los funcionarios borbónicos tendían a ver a los sacerdotes a usurpadores de la autoridad real y a la Iglesia como un obstáculo para el progreso material" Véase: William B. Taylor. Ministros de lo sagrado, p. 30. 8 David A. Brading. "El jansenismo español. .. ", p. 187-215 ; David A. Brading. Una Iglesia asediada , p. 24; Jaime E. Rodríguez O. La independencia, p. 66.
45
asuntos terrenales y su obediencia y lealtad debía ser hacia el rey y no al papa. Sin
embargo, autores como Taylor, Fisher, Farriss, Mazín y el mismo Brading, no opinan lo
mismo, ya que en lugar de verse respaldados por el pensamiento francés -que está
enfocado principalmente hacia el protestantismo- éstos autores afirman que la nueva casa
gobernante continuó con la política regalista que había tenido lugar desde siglos
anteriores y que incluso más tarde fue reforzada con la corriente teo lógica del
galicanismo.9
En el afán del gobierno Barbón por lograr un mayor control sobre los virreinatos,
era indispensable poner fin al poder adquirido por el clero novohispano durante el
reinado de los Austrias, y para alcanzar dicho propósito , era necesario aumentar el
absolutismo del Estado ante la Iglesia, permitiendo que se produj eran los cambios
necesarios para reafirmar los derechos del monarca y así restringir los del clero.
Dorothy Tanck de Estrada señala que la idea política de los Barbones de "intentar
cancelar el antiguo orden legal y establecer un 'nuevo sistema de gobierno económico'"
necesitaba de "un gobierno centralizado. regalista y económicamente eficiente y
próspero". 10
9 De acuerdo con Fisher, la doctrina rega lista sustentaba, en ste caso, que "el rey de España tenía el derecho y el deber de desempeñar la función de vicario general de Dios en la Igle ia America na". Esto quedó ratificado con la Real Cédula del 14 de julio de 1765. Véase: John Fisher. " fberoaméri ca olonial" p. 638 ; por otro lado, el jansenismo también consideraba importante que la sa lvación de las almas no consistía en las buenas obras y cualquiera podía tener acceso a una Biblia sin neces idad de que fuera un cura el único que la interpretase, los reformistas borbónicos n nca cumplieron esta parte de la corriente ideológica del jansenismo, por eso, Brading nos dice que en el mundo hispánico no hubo un jansenismo como tal. Véase: los trabaj os de David A. Brading. "El jansenismo españo l. . . " , p . 187-2 l 5; Una Iglesia asediada. p. 24 ; Y Mineros y comerciantes. pp . 58-59 ; Y Nancy M. Farriss. La arana y el clero. pp. 19 Y 36-45 , donde explica como el vicariato real estaba basada en la doctrina rega li sta que declaraba que los "reyes de españoles tenian la función de vicario general de Dios en la igles ia americana". 10 Dorothy Tanck de Estrada. "Castellanizac ión, política y escuelas de indios ... ", p. 725 .
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46
1.4 La reestructuración eclesiástica
Una vez decidida la reestructuración dentro de la Iglesia por la orona, los
innovadores ilustrados, propusieron algunos cambio al "modelo familiar" que habían
mantenido los Habsburgo durante los dos siglos de su mandato y que había sido heredado
a su gobierno. 11 Estas transformaciones oCUlTleron de la siguiente manera:
• 1.4.1 La secularización del clero
Al llegar los españoles a las Indias, además de los conquistadores, los que
arribaron al nuevo continente fueron los frailes misioneros de diversas órdenes religiosas
que tenían como objetivo principal la evangelización de los indios. Este clero regular
estaba integrado por los clérigos, monjes y frailes que habían hecho los votos de pobreza,
el de castidad y el de obediencia, pero sobre todo, se caracterizaban por vivir bajo una
regla especial denominada regula o regla. 12
Con el tiempo, los sacerdotes encargados de las parroquias que estaban sometidos
a la autoridad de un obispo fueron integrándose al nuevo mundo, y a diferencia de los
"regulares", su vida se desenvolvía junto a la de sus feligreses y se les conoció como
integrantes del "clero secular" - en latín, saeculum-. 13
11 Este modelo consistía en que el gobierno del imperio estaría bajo el mando del padre que sería la orona y el de la madre, que sería la Iglesia; para los monarcas Borbones, la modernidad consis tiría en que dicha gobernabilidad quedara bajo la responsabilidad única del padre o sea, la Corona . Véase : William B. Taylor. Ministros de lo sagrado. p. 29 ; Según Osear Mazín, para el régimen borbónico " los centenarios privilegios de la Iglesia novohispana no representaba sino una siniestra y corrupta herencia del pasado." Véase: Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Valladolid, p. 385 . 12 John F. Sehwaller. "La Iglesia en la América española", p. 543 ; Murdo J. MaeLeod. " La igles ia católica .. . ", p. 192; ancy Farriss nos dice en su texto que : " las órdenes religiosa en América estaban menos sujetas al control patronal , aunque sí a la supervisión real". Véase : Naney M. Farriss. La Corona y el clero, p. 28 . Un es tudio muy completo que nos explica sobre las ordenes seculares y las regulares en Cuba lo podemos encontrar en el libro de Ana Irisarri Aguirre. El oriente cubano durante el gobierno del obispo Joaquín de Osés y Alzúa (/790- /823). España, Ediciones Universidad de avarra, S.A. ( A) , 2003,372 pp. 13 John F. Sehwaller. "La Iglesia en la América española" , p . 543; y Murdo J. MaeLeod. "La igles ia católica .. . ", p. 192.
.-
47
Durante la colonia, el clero regular se hizo cargo de las misiones y de la
administración de algunos de los sacramentos; de la educación de los indios; de su
representación; de la enseñanza para su subsistencia a través de los cultivos y la cría de
los animales; del mantenimiento de los hospitales y las beneficencias ; y también de la
elaboración del calendario laboral - el cual estaba organizado en función de las
festividades religiosas-o Sin embargo, con las ideas de renovación de los funcionarios
borbónicos -como fue en este caso las del Marqués de Ensenada y las de José de arvaja l
y Lancaster-, se aprobó el 4 de octubre de 1749 una cédula real , donde Fernando VI
transfería todas las doctrinas del clero regular de México y Lima al cuidado del clero
secular con el único fin de que las órdenes religiosas quedaran bajo el dominio absoluto y
la subordinación del Estado, dejándolas con sus ingresos reducidos y sus privi legios y
derechos milenarios extinguidos. 14 A pesar de que la leyera muy clara, su puesta en
práctica fue muy larga, lo que provocó importantes enfrentamientos entre las autoridades
civiles y los religiosos.
• 1.4.2 La expulsión de los jesuitas
La orden de los jesuitas fue creada en 1540. Se instaló en Nueva España hac ia e l
año de 1570 y ahí adquirió tierras, gran capital y tuvo éxito en la producción ganadera y
la explotación agrícola, todo esto les facilitó el dominio y la influencia en la vida
educativa y cultural del virreinato. 15
14 Luisa Zahino Peñafort. Iglesia y sociedad en México 1765- / 800, pp. 45-50 Y 113- 11 7; Naney M. Far riss. La Corona y el clero, p. 20; Osear Mazín GÓmez. Entre dos Majestades, pp . 153- 16 1; Y David A. Brading. Una Iglesia asediada, p. 77, quien nos dice que: para "febrero de 1753 el proce o de secularización se extendió a todas las diócesis del imperio de spaña en Améri ca." 15 De acuerdo con MacLeod, esta orden fue el "fruto ideal del reformismo" y se destacaro n porque "soñaban con implantar un cristianismo" en América " libre de los errores que desfiguraban la fe en uropa. Su impulso utópico floreció plenamente en el siglo XVII" y "su deferencia hacia Roma y su marcada estructura jerárquica se ajustaban también al modelo del cristian ismo decretado en el oncilio de Trento" . Véase: Murdo J. MaeLeod. "La igles ia católica .. . ", p. 188 ; por su parte, Antonio Aco la nos di ce que
48
Para los innovadores ilustrados, los jesuitas fueron consid rados como un estorbo
a la confimlación del poder sobre la Iglesia por parte del Estado, ya que di cha orden
religiosa contrariaba los deseos de la Corona de concentrar a las instituciones en una ola,
porque era muy celosa de su autonomía y además, eran extremadamente obedi entes y
fieles al papa. 16
Para mediados del siglo XVIII se declaró abiertamente una campaña antij esuíti ca
por parte del gobierno, pero no fue sino hasta el 27 de febrero de 1767, bajo el mando
soberano de Carlos III que se optó por expulsar a todos los miembros de la orden de los
jesuitas de su imperio17. Esta decisión provocó una crisis dentro del clero ya que
prácticamente significó de manera indirecta, primero, quedarse sin defensa ante el
eminente deseo de la Corona por restarle su poder y segundo, eliminar la fu erte
oposición que representaba esta orden regular frente al absoluti smo monárquico que
pretendía la Casa de Borbón. 18
En Nueva España, la expulsión de los jesuítas coincidió con la vi sita de José de
Gálvez. La expulsión de la orden originó muchos descontentos entre la población de todo
para "mediados del siglo XVIII, los jesuitas de ueva España poseían más de 130 hac ienda , ra nchos, ingenios azucareros y otros centros agrícolas de diversa clases." Véase: Antonio Aco ta Rodríguez. "La reforma eclesiástica . . . ", pp. 565 Y 568); Y Guillermo Boils M. "Aquella modernidad: sociedad y arte en el siglo XVIII novohispano" En Revista Mexicana de Sociología, (vo l. 53 , núm. 4, 199 1, pp. 6 1-63). 16 Véase los trabajos de : Murdo J. MacLeod. "La iglesia católica ... ", p. 204 ; John Fisher. " lberoamérica Colonial" pp. 638-642 ; Felipe Castro Gutiérrez. Nueva Ley y Nuevo Rey, p. 108; Antonio Acosta Rodríguez. "La reforma eclesiástica .. . ", p. 368; Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, p. 352-353; David A. Brading. Una Iglesia asediada, pp. 15-32; Y David Brading. Min eros y comerciantes, p. 59. 17 Para Brading, "Carlos III jamás se habría atTevido a expulsar a los jesuitas de no haber estado seguro de que contaba con el apoyo de un bando influyente dentro de la Igles ia española ." Véa e: David A. Brading. Una Iglesia asediada, p. 23 ; Por su parte, Mariano Cuevas hace un recuento sobre la expulsión de los jesuitas su viaje hasta donde fueron desterrados en la península itálica y cómo fue ron distribuidos los bienes de la Compañía por el Estado. Véase: Mariano Cuevas. "La Destrucción", pp. 41 2-448 . 18 Murdo J. MaeLeod. "La iglesia católica ... ", p. 205 ; John Fisher. "Iberoamérica olonial" pp. 649-650; David A. Brading. Una Iglesia asediada, pp. 15-32; David A. Brading. "El janseni roo españ l. .. ", p. 70; Jaime E. Rodríguez O. La independencia, p. 67; Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, p. 364-366; Horst Pietsehmann. "Protoliberalismo, reformas borbónicas y revolución . . . ", p. 60; y Ana María Bidegaín. "La expresión de corrientes en la Igles ia neogranadina ... ", p. 146- 148 .
:
49
el virreinato, algunas de las revueltas más destacadas fueron las de Valladolid , Pátzcuaro ,
Celaya, Guanajuato, León y la provincia potosina y de las cuales, álvez tu vo que
hacerse cargo personalmente a su llegada a la ciudad de San Luis Potosí el 24 de julio de
1768, justo en el momento que acontecía la expulsión de los últimos jesuitas que aún
quedaban en la ciudad.\ 9
El problema que se suscitó al momento de haber sido expulsada esta orden
religiosa de los territorios del imperio español, fue que la educación se vio interrumpida
debido a que tuvieron que cerrarse, al menos en la Nueva España, más de treinta co legios
que estaban en servicio y millares de estudiantes matriculados se quedaron sin continuar
la educación de los ilustrados.2o
• 1.4.3 La restricción de la actividad civil
Otra manera de restringir el poder y la influencia de la Igles ia en la ociedad
novohispana fue eliminando su jurisdicción en el ámbito civil. Para los años de 1787 y
1788 se manifestó en las reales cédulas que los derechos que el clero tenía de imponer
castigos corporales a todos aquellos que no cumplieran con los valores sociales que eran
requeridos para ser considerados buenos cristianos, quedarían abrogados y únicamente
serian los representantes del Estado los que se encargarían de impartir la justicia? \ Esto
quiere decir que los curas párrocos no podían castigar más a sus feligreses por casos de
19 Primo Felieiano Velázquez. Historia de San Luis Potosí pp. 267-293; Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Vallado lid. p. 352-359; Osear Mazín GÓmez. Entre dos Majestades, pp. 146- 153 ; David A. Brading. Una Iglesia asediada, p. 18; Jaime E. Rodríguez O. La independencia. p. 61; María Isabel Monroy Castillo y Tomás Calvillo Unna. Breve historia de San Luis Potosí, pp. 11 5- 11 8; Felipe Castro Gutiérrez. Nueva Ley y Nuevo Rey, pp. 120-152; Y Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado . . . ", p. 76) ; Rosa Helia Villa de Mebius. San Luis Potosí, pp. 39-4 1. 20 Guillermo Boils M. "Aquella modernidad .. . ", pp. 61 -63 . 2 1 Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedra l de Va lladolid, p. 397.
:
50
embriaguez, apuestas o relaciones sexuales ilícitas, sino que debían de so licitar "el 'real
auxilio' o la asistencia de los funcionarios reales" .22
Además de la restricción del papel judicial por parte de los curas, se les
suprimieron también los de carácter fisc al y político, ya que se les limitó su participac ión
en las elecciones locales, -más adelante veremos que al menos en la prov incia potosi na
esto no ocurrió así-, y en todas aquellas activ idades que tuvieran que ver con la economía
de la comunidad en la que ministraban23 -como lo fueron las cofradías y las cajas de la
comunidad-o En el capítulo cuatro se analizará cómo se vio afectado el bajo clero en los
pueblos de la provincia potosi na en estos aspectos, y se observará si a ellos les afectaron
o no dichas reformas ordenadas por el Estado para la Igles ia.
• 1.4.4 La pérdida de la inmunidad eclesiástica
Como se mencionó anteriormente, el rey de España quedó como pad re de la
Iglesia en sus territorios peninsulares e indianos - ya que ejercía la práctica total de los
poderes eclesiásticos del papa-, por lo que obtuvo la potestad nece aria para
responsabilizarse por el bienestar de la Iglesia y también para controlar la conducta de sus
miembros. En 1795, el monarca expidió una real cédula dónde estab lecía que todos
aquellos miembros del clero que fueran encontrados culpables por haber cometido
22 Véase: WilIiam B. Taylor. Ministros de lo sagrado , p. 31 Y 3 16; WilIiam B. Taylor. Elltre el pI" ceso global, p. 67; Y Nancy Farriss nos dice que: "La iglesia en España y en las Indias, como en todos los países católicos, tenían su propio sistema de cortes, que complementaban al judiciario civ il , con la jurisdicción exclusiva sobre los asuntos espiritua les y también sobre todas las personas del e tatuto ecles iásti co. Aún cuando la Corona española reconocía la pretensión de la Iglesia de que esta autoridad judicial amp lia era un medio necesario para la obtención de su fin , la salvación de las almas, no estaba dispuesta a perrni tir que esta autoridad funcionara de manera completamente independiente, tal como lo planteaban lo cánones". Véase: Nancy M. Farriss. La Corona y el clero, p. 64 23 WilIiam B. Taylor. Ministros de lo sagrado, pp. 31-32 .
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51
crímenes fuesen juzgados en los tribunales de la Audiencia de México, quedando
restringidos sus privilegios básicos del fuero y del canon.24
Estas nuevas restricciones provocaron una violación a los derechos y privilegios
que los miembros de la Iglesia habían estado gozando por mucho ti empo y adcmás,
afectó gravemente a la Iglesia, ya que fue más fácil que algunos personajes - tanto de la
población civil como la del gobiemo- que tuviesen problemas con los cl ' ri gos, pudieran
acusarles ante la sala de crímenes de la Real Audiencia al usar falsos testimonios en
contra de ellos, provocando que los clérigos quedaran desacred itados ante los fi ele a los
que ministraban y su influencia moral y espiritual quedara reducida a la nada.2
• 1.4.5 Lasflnanzas de la Iglesia
Carlos Marichal26 sugi ere que la Iglesia fue la institución que "proporcionó la
mayor cantidad de dinero al erario público" al ser "obligada a aportar sumas cuantiosas
a la Corona". Como antecedente de ello fueron los préstamos que la Iglesia otorgó al
Imperio en 1781 , cuando de manera indirecta, proporcionó al Consulado de Comerciantes
y al Tribunal de Minería, el efectivo necesario para qu se pudi eran completar sus cuotas;
la contribución de 1792, cuando la Corona solicitó a la Igles ia los "subsidios
eclesiásticos", que consistían en el aporte económico que los obispos tenían que
24 Jaime Rodríguez nos dice que para "finales del siglo XVIlI las sa las de crimen de las audiencias juzgaban a los infractores pertenecientes al clero. En tanto que algunos miembros de la alta jerarquía de la Iglesia aceptaban como necesarias muchas de las reformas, la mayoría de los ec le iá ticos, en especial el clero bajo, se oponía amargamente y resentía la pérdida de la inmunidad ecles iástica , aspecto que influyó en numerosos curas en la posterior lucha de Independencia". Véase: Jaime E. Rodríguez O. La independencia. pp. 66-69; Nancy Farriss explica que cuando la Corona puso en duda la lea ltad de l clero, fue necesario suprimir los la inmunidad personal de los eclesiásticos y para ello era necesario que posprivi legios del fuero y del canon quedaran eliminados. Véase: Naney M. Farriss. La Caralla y el lera. pp. 16,17 Y 11 9- 129; David A. Brading. Una Iglesia asediada. pp. 146-149; Y David A. Bradillg. "El jansenismo español ... " , p. 190. 25 Jobn Fisber. "Iberoamérica Colonial" p. 639; David A. Brading. "El jansenismo español ... ", pp. 187-215; David A. Brading. Una Iglesia asediada. p. 21; Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, pp. 397-398. 26 Carlos Mariebal. "La bancarrota del virreinato ... ", pp. 174- 1 3.
52
desembolsar de manera voluntaria para el rey; y en 1793, la Iglesia contribuyó con un
donativo para financiar la guerra que estaba enfrentando el imperio contra Francia.
Además, a partir de la implantación de las Intendencias en 1786, las catedra les
perdieron la administración de los diezmos, esto significó que el cobro de dicha dádiva
que tenía que ser ofrecida por los feligreses a la Iglesia de manera obligatoria, tendría que
ser recolectada y distribuida por los oficiales reales y ya no por los ec lesiá ticos27. Esto
trajo como consecuencia la protesta de la Iglesia ya que de acuerdo con lo escrito en las
Sagradas Escrituras, el diezmo es una ofrenda que debía de ser cobrada, de fendida y
recogida únicamente de manera espiritual sto conforme a lo sostenido por Juan de
Palafox y Mendoza, obispo de Puebla del siglo XVII- y con el nuevo procedimi ento "el
culto religioso de la Iglesia se habría venido abajo". Esto repercutiría no so lamente en la
Iglesia, sino también en la sociedad que dependía de la ayuda económica que era
patrocinada por las catedrales en sus fundaciones de obras piadosas y de sus préstamos.28
Para 1788, se gravaron con dos nuevas cargas fiscales al clero . Las me adas y las
anatas, dichos impuestos pretendían cobrar a los religiosos por el fruto obtenido durante
el desempeño de su trabajo por un año. Esto significa que la Corona ejercía un severo
control dentro del clero y no dejaría de presionar para demostrar su control ab o luto. 29
Finalmente y debido a la crisis económica por la que estaba atravesando la Corona
española a principios del siglo XIX, la casa gobernante se vio en la necesidad de recurrir
a la Iglesia una vez más, y promulgó un decreto de consolidación de va les o de
amorti zación el 26 de diciembre de 1804, en donde el rey exigía que todo el capital del
27 Osear MazÍn GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, pp. 41 Y 352. 28 A. Brading. "El jansenismo españo l. .. ", pp. 89- 190; Y Osear MazÍn G6mez. El cabildo atedral de Valladolid, p. 42 . 29 Osear MazÍn G6mez. El cabildo catedral de Va lladolid, p. 374.
53
clero fuera depositado en la Caja Real de Amorti zación, y sería este lugar, qUI n s
encargaría del trabajo de la cobranza por plazos o libranzas de todos aquellos que
tuvieran préstamos y también se harían cargo de pagar las utilidades del capital qu había
sido puesto en depósito a razón de un interés del tres por ciento.3o
Esta nueva legislación originó graves consecuencIas económicas para los
terratenientes, mmeros, comerciantes, hacendados, ganaderos y las comunidades
indígenas que no solamente habían legado los fondos a las capell anías u obras pías,
censos y depósitos, sino que también, habían adquirido préstamos de los Juzgados de
Testamentos, Capellanías y Obras Pías. Para estos individuos resultaba muy gravoso
tener que hacer sus pagos en la Caja de Amortización, porque tenían que efectuar los
completos y en el tiempo estipulado yen cambio si los hacían en la Iglesia, éstos podían
ser hechos de manera parcial sin que esto les perjudicase en sus prendas empeñadas.31
2. La relación Iglesia-Estado durante el reformismo borbónico
Con la llegada de los Borbones al trono español y con las reformas ori entadas
hacia la descentralización del poder y la influencia que el clero había adquirido ha ta
entonces, las cosas comenzaron a mostrar un tinte muy diferente a lo ya establecido por
30David A. Brading. Una Iglesia asediada . p. 21 ; David Brading. Mineros y comerciantes, p. 449 ; David A. Brading. "El jansenismo español .. . ", p. 191 ; Brian R. Hamnett. "Absolutismo ilustrado ... ", pp. 102-103; Margaret Chowning. "The Consolidación de los Vales Reales in the Bishopric of Michoacá n" En Th e Hispanic American Historical Review. (vol. 69 núm 3, 1989 pp. 45 1-478); Y Jaime E. Rodríguez O. Sobre Michael P. Costeloe "Church wealth in Mexjco. A study of the "Juzgado de capellanía in lhe Archibishopric 1800-1 856. En Historia Mexicana, vol. XVIll , núm.2, 1968, pp. 3 14-3 16. 31Jean Bazant. Sobre Michael P. Costeloe "Church wealth in Mexico. A study of the "Juzgado de capellanías in the Archibishopric 1800-1856". En Historia Mexicana . (vol. XVIll , núm.2, 196 , pp. 12-314); Arnold J. Bauer. "The Church in the Economy of Span ish Ameri ca: en sos and Depó itos in lhe Eighteenth and Nineteenth Century" En Th e Hispanic American Historia ¡/ Review. (vol. 63 , núm. 4, 1983, pp.707-733); Y Asuncion Lavrin. "El capital eclesiástico y las élites sociales en la Nueva España a finales del siglo XVIII " En Mexican Studies/Estudios Mexicanos . (vo l. 1, núm. 1, 1985 , pp. 1-28).
..
54
los Austrias. Esta diferencia originó una ruptura entre los representantes del gobi erno
civil y los eclesiásticos.
La génesis de esto, fue que para el siglo XVIII, la Iglesia estaba ej erc iendo una
fuerte influencia dentro de la población americana. La Casa de Barbón concluyó que para
alcanzar sus metas de centralización, era necesario disminuir el poder y para ello, centró
su atención en reorganizar e implementar cambios que le faci litaran obtener dicho
objetivo dentro de la estructura eclesiástica. Estos cambios - vistos en el subcapítulo
anterior- ocasionaron el descontento de los integrantes del clero hacia el gobierno civil ,
ya que no sólo vieron mermada su influencia y su poder sino también su independencia. 32
Se han hecho estudios que han analizado las consecuencias de estas re formas
implantadas a la Iglesia por los Barbones, pero únicamente se han centrado n los
obispados y los cabildos; sin embargo, se conoce muy poco de cómo afectaron al medio y
al bajo clero , especialmente en la relación que mantenían los párrocos con sus feli greses.
Los curas actuaban - aparte de su labor ministerial- como "guardianes locales del
orden y la moral pública" pero también informaban a las autoridades "sobre las
condiciones agrícolas, los desastres naturales, los disturbios locales y otras noti cias
políticas" que acontecían en los pueblos donde ministraban, así como de registrar a la
población, supervisar las elecciones, participar como ''patrones en caso de enfermedad o
necesidad' y para representar al Estado ante la comunidad y en caso de ser necesario,
para representar e interceder por los pueblos ante las autoridades.33 Esto es algo que se
pretende comprobar en el capítulo cuatro, al trabajar con las fuentes encontradas en los
diferentes archivos a los que se tuvo acceso. Además de esto , el clero manifestó su
32 Nancy M. Farriss. La Corona y el clero. 268 pp. )) Véase: William B Taylor. "El camino de los curas . .. ", p. 82; Y William B Taylor. Entre el proceso global. p. 67 .
55
enfado hacia el gobierno Borbón porque el clero americano comenzó a ser sustituido de
los altos puestos por los peninsulares. 34
Por su parte, el Estado cambió de una actitud pasIva a una actitud más activa,
cuando también intentó reorganizar a su aparato administrativo y decidió encomendar a
los gobernadores de distrito - en este caso los intendentes y los subdelegados -que se
encargaran de expandir su jurisdicción real más allá de 10 establecido, e inc luso a retomar
en sus manos las actividades de justicia, de economía e incluso de política, que
anteriormente estaban a cargo de los propios curas. ¿Qué provocó esta nueva legi lac ión
de los Borbones? En primer lugar hizo que ya no existiera esa estrecha colaboración entre
el clero y las autoridades civiles como había sucedido durante el gobierno de los Austrias
y después, que tal vez se originara una rivalidad de poder, ocasionando no sólo un posible
conflicto para ambas autoridades, sino también para la población dónde se encontraban
desempeñando sus respectivas funciones. 35
Una vez determinada la reestructuración eclesiástica por los Borbones, los
cambios dentro de la Iglesia comenzaron a llevarse a cabo. Los estudios de Oscar Mazín
e Iván Franco Cáceres36 permiten entender mejor como estos cambios afectaron al clero
en el Obispado de Michoacán; sin embargo, no se sabe mucho sobre la manera en que
estas reformas afectaron al bajo clero tras la imposición de estas nuevas leyes por parte
del Estado más que en los casos de México y Guadalajara, según el trabajo de William
Taylor37. En el capítulo III, se pretende conocer, cómo es que estas refo rmas borbónicas
34 Osear MazÍn GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, pp. 37 1-372 Y 379. 35 WilIiam B. Taylor. Ministros de lo sagrado, pp. 587-630; Y Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, pp. 350-35 1. 36 Franco Cáeeres, Iván. La intendencia de Va lladolid de Michoacán , 306 pp.; Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Va lladolid, 499 pp.; Y Mazín Gómez, Osear. Entre dos Majestades, 305 pp. 37 Tay1or, William B. Ministros de lo sagrado. 83 1 pp.
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afectaron al bajo clero que ministraba en la provincia potosina, qué papel jugó el cura
párroco y cuál fue la relación que mantuvo con la autoridad civil al ex plicar como e taba
organizado el clero en la provincia, quiénes eran sus representantes y cómo actuaron ante
los nuevos cambios.
CAPÍTULO 111. LA ESTRUCTURA ECLESIÁSTICA EN SAN LUIS POTOSÍ Y LA FIGURA DEL
PÁRROCO
Este capítulo se dividió en tres subcapítulos. El pnmero, tiene como objetivo
mostrar cómo era la administración eclesiástica en la provincia potosina durante la época
de la Intendencia, desde los obispados a los que pertenecía, hasta las parroqui as y
misiones que se encontraban en ella. En el segundo, se pretende conocer cuál era el
proceso burocrático que los sacerdotes debían superar para ascender de puesto u ocupar
las vacantes de las iglesias que se quedaban sin su párroco, -ya sea a consecuencia de un
traslado o principalmente por la muerte del cura que las ministraba-o Por último, en la
tercera parte, sabremos cuáles fueron las relaciones que se dieron entre algunos de estos
curas y los representantes del gobierno y los feligreses en su vida cotidiana, dentro de la
provincia potosi na durante los años de 1786 a 1821.
58
1. La administración eclesiástica en San Luis Potosí: obispados, parroquias y
misiones.
1.1 Los obispados
El territorio de la Intendencia de San Luis Potosí no contaba con un obi spado
propio, por 10 que su territorio se encontraba dividido entre tres diócesis: la de México, la
de Guadalajara y la de Michoacán. De acuerdo con Ana Iri sarri , para la provincia
potosina los partidos que la integraban - y que son de interés para este estudio- quedaron
distribuidos de la siguiente manera:
Arzobispado de México Obispado de Guadala.iara Obispado de Michoacán
Partido de Valles* Charcas San Luis Potos í
Venado Santa María del Río
Salinas del Peñón Blanco Guadalcazar Río Verde
El Valle del Maíz
* A excepción del Valle del Maíz. I
Los obispos dependían directamente del Papa y a su cargo se encontraban todas
las parroquias que comprendían su diócesis . Él era el responsable del obispado y por lo
tanto se encargaba de la ordenación de los nuevos curas, la erección d nuevas parroquias
y las visitas pastorales.2 Junto a ellos, se encontraban los miembros de los cabildos
catedracilios, como: el deán o presidente, el arcediano, el chantre, el maestrescuela y el
I Ver los trabajos de Ana Irisarri Aguirre. El reformismo borbónico en la provincia de San Luis Potosí, p. 43 Y "La vertebración y construcción del espac io interior en el norte novohispano a través de las intendencias: el caso de San Luis Potosí" . En Juan José Sánchez Baena y Lucía Provencio Garrigós (eds). El Mediterráneo y América: Actas del XI Congreso de la Asociación Española de American istas. (. spaña, Editora Regional de Murcia, 2006, p. 630; además se encuentran los trabajos de Iván Fra nco Cáeeres. La Intendencia de Va lladolid, pp. 61-65 Y el de Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Valladolid de Michoacán, pp . 65-69, que hablan sobre la estructura territorial del obispado de Michoacán y el de William B. Taylor. Ministros de lo sagrado. que se refiere al trabajo de investigación que hizo el autor sobre el obispado de Guadalajara y al arzobi pado de México. 2 Robert F. SehwaIler. "The Episcopal Succession in Spanish America 1800- 185 0". En Th e A mericas (vol. 24, núm. 3, 1968, p. 209).
59
tesorero. 3 Estas dignidades le ayudaban al obispo en la administración eclesiástica de
todos y cada uno de los curatos que tenían bajo su responsabi lidad dentro de u
jurisdicción parroquial.
1.2 Las parroquias y las mis iones
Como se mencionó anteriormente, los obispados estaban integrado por vanas
parroquias o curatos y algunas misiones. Las parroquias de la provincia potosi na, se
dividieron como se muestra a continuación:
Curatos gue Qertenecían al Curatos gue Qertenecían al Curatos gue Qertenec ían al ArzobisQado de Méxic04 ObisQado de Guadalajara5 ObisQado de Michoacán6
Coxcatlán Venado San Luis Potosí
Tamazunchale San Jerónimo la Hedionda San Pedro de los Pozos
Tampamolón Charcas San Sebastián Extramuros
Tancanhuitz Matehuala T laxcalilla
Real de Catorce San Miguel Mexquitic
Cedral Cerro de San Pedro
Santa Isabel del AI111adil lo
San Francisco de lo Pozos
Valle de San Francisco
Santa Maria del Rí
San Pedro Guadalcazar
Santa Catarina del Río Verde
Cada parroquia tenía bajo su tutela algunas capi ll as que se encontraban en la
haciendas o rancherias de su demarcación, las parroquias eran las únicas que se podían
encargar de la impartición de los sacramentos y de expedir los certificados de lo
3 El deán o presidente era el responsable del oficio divino y del culto ; el arcediano, era e l que se encargaba de los nombramientos de los vicarios capitulares cuando había una vacante; el chantre, era el jefe de la capilla de música ; el maestrescuela, era el que se encargaba de enseñar en la escuela catedralic ia y e l tesorero, era quien administraba los bienes dedicados al culto . Véase: Osear Mazín GÓmez. El cabildo catedral de Valladolid de Michoacán, p. 15. 4 William B. Taylor. Ministros de lo sagrado. p. 723 5 William B. Taylor. Ministros de lo sagrado. p. 160; Y Ana Irisarri Aguirre. El refo rm ismo borbó"i O
en la provincia de San Luis Potosí, pp. 38-40 6 Osear Mazín GÓmez. Entre dos Majestades, pp. 241-242; Y AHMCR, Diocesano, ección- obiemo, Siglo XVIII, Serie-Visitas, Sub serie-Informes, Caja 508 179 1, S de fólder : Visita del Obispo de Michoacán Fray Antonio de San Miguel y e l Lic . Abad y Queipo a los curatos de la provincia potosina que eran parte del Obispado de Michoacán en el año de 179 1.
60
bautismos y los de matrimonio. Éstas se encontraban ubicadas en las cabeceras de lo
partidos, e incluso ahí, era adonde se acudía cuando se convocaban las juntas de partido y
las elecciones parroquiales -tema que se abordará con más detalle en el capítu lo cuatro-o
Las misiones por su parte, estaban a cargo de religiosos. stos debían de
encargarse únicamente de la evangelización de los indios, cuando dicha actividad estaba
terminada por completo, las misiones dejaban de existir como tales, ya que pasaban a er
pueblos de doctrina. En ellos, los clérigos seculares eran los que se encargaban d serv ir y
ministrar a los feligreses , evitando que lo siguieran haciendo los reli giosos.7
Un ejemplo de cómo se encontraba subdividida una parroquia e ob erva a
continuación en el siguiente recuadro:
Haciendas y Ranchería de su Parroquia Obispado al que pertenece jurisdicción8
Valle de Santa Isabel de Armadillo Obispado de Michoacán Valle y pueblo de Armadillo
Hacienda de Peotillo
Hacienda Parada
Hacienda Joya
Hacienda de Santa atarina
Hacienda del Pozo
Los curas párrocos eran los encargados de estas parroqUIas. Según William
Taylor, éstos "debían estar minimamente instruidos, saber algo de latin y haber pasado
exámenes públicos en el campo de la teologia moral" .9 Estos conocimientos eran
adquiridos en los colegios y seminarios de las ciudades ep iscopales. En el caso de lo
curas de la provincia potosi na, estos asistieron al Colegio de San Francisco Javi er de la
7 Ana Irisarri Aguirre. El reformismo borbónico en la provincia de San Luis Potosí, pp. 37-38. 8 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Visitas, Sub serie-Informes, aja 50 179 1, S/N de fólder : Visita del Obispo de Michoacán Fray Antonio de San Miguel y el Lic. Abad y Queipo a los curatos de la provincia potosina que eran parte del Obispado de Michoacán en el año de 179 1. 9 William B. Taylor. Ministros de lo sagrado. p. 125.
61
ciudad de Santiago en Querétaro y al Oratorio de San Felipe Neri de la Villa de San
Miguel el Grande para su fonnación .' o Ahí, obtenían el grado de bachiller -e l cua l, era
suficiente para hacerse cargo de un curato y de su feligresía- y si continuaban con sus
estudios superiores en teología y derecho canónico, podían incluso, alcanzar el grado de
licenciados o el de doctores. "
Los vicarios, los coadjutores y los capellanes también eran clérigos que trabajaban
ministerialmente en las parroquias y su sueldo dependía del párroco. Usualmente
ayudaban a los sacerdotes en las diferentes actividades eclesiásticas del curato en los que
se encontraban sirviendo, tal era el caso de las visitas a los enfennos o moribundos,
visitas a los diferentes pueblos, haciendas y rancherias que pertenecían a la parroquia; y
algunas otras veces, eran los que asistían a los párrocos en la celebración de la misa.
2. La provisión de los puestos de párrocos en la provincia de San Luis Potosí
Es importante destacar que los curas párrocos que pertenecían al Obispado de
Guadalajara y al Arzobispado de México y muchos otros del Obispado de Michoacán, no
aparecerán dentro de este apartado, ya que lo que se intenta aqu í es dar una idea al lector
de cómo se proveían los puestos de los curas párrocos en San Luis Potosí , haci ndo
simplemente un estudio de caso . Sin embargo, esto no significa que el procedimiento
para ocupar una vacante en cada uno de los tres obispados haya sido diferente.
10 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Seminario, Sub serie-Órdene , aja 426, 1765 , Fólder 238: Solicitudes de vacantes de los eclesiástico Salvador Sebastián Nieto, con fecha de 7 dc noviembre de 1765 y José Ignacio de Otaegui el 18 de noviembre de 1765. 11 En el trabajo de WilIiam B. Taylor. Ministros de lo sagrado, pp. 125- 134, se explica más detalladamente cómo se podía obtener la formación sacerdotal necesaria para cubrir el pue to de cura
párroco.
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62
2.1 Los aspirantes al sacerdocio: su formación y ordenación.
De acuerdo con William Taylor, para que la carrera sacerdotal de un cura tuvi era
éxito eran muy importantes sus orígenes, su educación y sus relac iones personales.12
Los curas párrocos podían -como se mencionó anteriormente- tener como mínimo
en su educación el grado de bachiller para poder alcanzar, mediante una opos ición
convocada por los obispos, una parroquia. Su educación básicamente consistía en uno
conocimientos mínimos de latín, filosofia, gramática y retórica. La educación sacerdotal
comenzaba a muy temprana edad en los colegios o seminarios, y en el transcurso de su
formación debían prestar servicios a la comunidad. Dichos servicios podían ll evarse a
cabo en los pueblos donde realizaban sus estudios o en aquellos que se encontraban a lo
alrededores. 13
La ordenación y la colocación de un cura en alguna parroq ui a dependían de la
edad, de la conducta personal y sobre todo de su conocimiento del culto y la doctrina.
2.2 En búsqueda de una parroquia
Cuando una parroquia quedaba vacante a consecuencia de la mu rte del cura que
la ministraba o de su traslado a otro lugar, el obispo se encargaba de convocar una
oposición a través de un bando, ejemplo de ello se observa en el siguiente edicto
expedido por el Obispo de Michoacán Ignacio de la Rocha en 1779:
" os el Doctor y Maestro D. Juan Ignacio de la Rocha por la Divina Gracia y dc la Santa Sede Apostólica Obispo de Valladolid de Michoacán del Consejo de su Maj estad. Estando como estamos determinados a celebrar órdenes, presentándonos la vida, y fuerzas el conservador supremo de todas las temporas del próximo me de febrero , convocamos por el presente edicto, y llamamos a los Ecles iást icos de nuestra Dióces i que están ya en su carrera y a los demás nuestros domici liarios que tengan verdadera vocación al estado clerica l para que en tiempo oportuno se pre enten ante nos y i fuesen
12 WiIliam B. Taylor. Ministros de lo sagrado. pp. 125- 134. Taylor nos dice que en el caso de uada lajara, el 5 % de los curas párrocos eran de origen indígena, en el caso de San Luis Potosí, no pudimos encontrar
una referencia al respecto . 13 WiIliam B. Taylor. Ministros de lo sagrado. pp. 125- 130.
63
admitidos procedan a practicar las diligencias que les corresponden y procura r que e ejecuten las respectivas en nuestra Secretaría de Gobierno para que al tiempo debido estén habilitados a su promoción, pero deberán estar advertidos de que no e rec ibirá en aquella oficina escrito de pretendiente alguno a quien falten los requisi tos prevenidos en nuestro edicto de veintisiete de julio del año próximo y de que, promov idos que sean, estarán prontos para el cumplimiento de lo que en el mismo tenemos acordado para que sean Ministros útile de la Ig les ia . Dado en uestro Palacio Episcopal de Va ll adolid a diez y ocho de enero de mil setec ientos setenta y nueve años .
Obispo de Valladolid de Michoacán Por medio de S. S. y el Obispo mi eñ r:
Juan Francisco as ill a y abre ra otari o Ofic ia l. ,,14
Una vez publicado el bando, los curas que querían ascender de grado o aq uellos
que se encontraban recién egresados de los colegios episcopales, hacían una so li citud al
Obispado y éstos a su vez, les entregaban un oficio dónde les pedían proporcionar
información sobre su legitimidad, su limpieza de sangre, su educación sacerdotal, sus
virtudes y sus buenas costumbres. Esta información debía de ser entregada con una
certificación hecha por alguna autoridad civil o por algún juez eclesiástico - en caso de
encontrarse en una localidad donde no hubiera otra autoridad-, además de las cartas de
los testigos que legitimaran los datos proveídos por el solicitante. Dentro de las
indicaciones del obispado, también se ordenaba que corrieran las amonestaciones
necesarias durante tres días festivos - inter Missarum solemnia-, según lo dispuesto por el
Concilio de Trento , para saber si alguna persona que conociera algún impedimento en el
candidato, lo hiciese saber. Quien diera falso testimonio en la información que proveía,
en su registro o por parte de los testigos, estaría bajo pena de excomunión . Una vez
cumplidos con estos requisitos, los curas enviaban toda su documentac ión al ob ispado
14 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIIl, Serie-Seminario, Sub serie-Órdenes, aja 448 1779, Fólder 347: Edicto convocatorio para órdenes genera les en las próximas temporas de febrero de l año
corriente para el obispado de Michoacán.
64
para ser valuados, esperaban un promedio de 15 a 20 días, y SI eran elegidos, podían
entonces cubrir la vacante que se había solicitado l 5.
Cuando los documentos se encontraban en poder del obispo, se procedía con la
selección del candidato adecuado para ocupar la vacante que estaba bajo contienda, una
vez ya escogido, el obispo se encargaba de darle el nombramiento y ordenar u
reconocimiento como nuevo párroco. Como ocurrió en la ciudad de San Luis Potosí en
1783, también se benefició con la vacante del curato de la misma ciudad a D . Manuel
Joseph de Herrera, quien a partir de las 10 de la mañana del día 22 de agosto de 1783,
tomó posesión de su cargo "entre todos los actos y solemnidades acostumbradas". 16
En el siguiente cuadro se muestran algunos de los datos más importantes de la
solicitud que hicieron algunos curas que aspiraban a obtener un puesto parroquial.
15 Esta informac ión se desprende del análisis de doce casos sobre provisión de parroquias vacantes en la provincia de San Luis Potosí: AHMCR, Diocesano, Sección- obierno, Siglo XVUl, Se ri e-Seminario , Sub serie-Órdenes, Caja 426, 1765, Fólder 238: Solicitudes para vacantes de las parroquias de Sa n Luis Potosí, Guadalcaza r y Río Verde de los curas: Salvador Sebastián Nieto, Francisco Oliván, Jo é Igna io de Otaegui, Felipe María Arduengo, Manuel Antonio de Echalecu e Ignacio Lambarri ; AHM CR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVlll, Serie-Seminario, Sub serie-Órdenes, Caja 427, 1765, Fólder 239 : Solic itud para vacante de la parroquia de San Luis Potosí del cura : Joseph Antonio de Elcano; AHMCR, Diocesano , Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Seminario, Sub serie-Órdenes, Caja 428 , 1766, Fólder 24 1: o li citud para vacante de la parroquia de San Luis Potosí del cura : Francisco Buenaventura Olivar; AHM R, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII , Serie-Seminario, Sub serie-Órdenes, Caja 428, 1766, Fólder 242: Solicitud para vacante de las parroquia de San Luis Potosí del cura: icolás Obispo de Lima; AHMCR, Diocesano, Sección-Gobiemo, Siglo XVIII , Serie-Seminario, Sub seri e-Órdenes, Caja 489, 1779, Fólder 347: Solicitud para vacante de las parroquia de an Luis Potosí del cura: José María Arduengo; AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII , Se ri e-Seminario, ub serie-Órdenes, aja 450, 1781-1 782, Fólder 364: Solicitudes para vacantes de las parroquias de Armadillo y San Luis Poto í de los curas: Santiago Palau y Fernando Ortiz de Salinas. 16 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Sacerdotes, Sub se rie- ombram.iento , aja 315, 1739- 1782, Fólder 49 : 1770. Que el cura de del Valle de San Francisco, en ausencia y por enfermedad del cura de SLP, pase al curato de Santa María del Río y tome poses ión de la Parroquia , Ermitas y api ll as para que con reglamento y superior orden se le entregue al Licenciado Higinio Vicente Martínez Morentín, presbítero, e l curato con las ceremonias acostumbradas, y lo reconozcan como el nuevo párroco; AHM R, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Sacerdotes, Sub serie-Nombramien tos, Caja 3 16, 1783-1799, Fólder 70: 1783 . Dónde se beneficia con la vacante al curato de la c iudad de Sa n Lui Poto í a D. Manuel Joseph de Herrera. Véanse también el expediente : AHMCR, Diocesano, Sección-Gobiern , iglo XVIII, Serie-Sacerdotes, Sub serie-Nombramientos, Caja 473 , 18 10-183 1, Fólder 43: Se nombra como cura interino de Tlaxcalilla a Fray José Santos Rayas ante el fallec imiento de su cura José Antonio Vargas el día dos de julio de 18 10.
NOMBRE DEL CURA Q E PETO
ERA CAN DIDATO y SU LUGAR DE NACI M I ENTO
VACANTE FECHA DE QUE SOLICITA SOLICITUD Y
EL DE CAN DIDATOS NOMINACiÓN
Salvador Sebastián ieto. San Luis Potosí. Eclesiástico
Cura Vicario y Juez
Francisco Ecles iástico o Oliván. substituto de la San Luis Potosí. cd . S.L.P .
Cura Vicario y Juez
José Ignacio de Eclesiásti co o Otaegui. substituto de la San Luis Potosí. cd. S.L.P .
Cura Vicario y Juez
Phelipe María Eclesiástico o Arduengo. substituto de la San Luis Potosí. cd. S.L.P .
7 de noviembre de 1765 5 de diciembre de 1765
18 de nov iembre de 1765 2 de diciembre de 1765
I de noviembre de 1765 2 de di ciembre de 1765
14 de noviembre de 1765 2 de di ciembre de 1765
AUTORIDAD QUE VER I FICA INFORMAClÓ '
DE LOS CANDIDATOS
Antonio Cardozo Comandante de los antos Tribunales de Inqu isición y Cruzada
Antonio Cardozo Comandante de los Santos Tribunales de Inqu isición y Cruzada
TE T IGO DE LEGITIM IDAD, LIMPIEZA I)E ANGRE, VIDA
Y COSTUMBllES Juan Joseph Gómez, Ignac io Baca y Castro, Juan Perecto de Arcos, Vicente Cuevas, Ignacio Antonio de Faudas, Miguel Ange l Verástegu i, Fernando de Cárdenas, Ignacio García Tobe, Ig llacio GOll zález de Malilla, Joseph Mariano Buen Rostro y Domingo Francisco Buen Rostro. Ju an Angel Cortés, Francisco Javier Faudas, Joscph de la Vía Ochoa, .l uan Joseph Gómez, Man uel Enríquez, Ignacio Gómez de Malina. Lázaro Dionicio de Boa Quintana, Juan Gómez
Antonio Cardozo Ca sío, Francisco Comandante de Javier Cordero, los antos Fernando de Tribunales de árdenas, Joseph Inquisición y Cruzada
Antonio Cardozo Comandante de los Santos Tribunales de Inquisición y Cruzada
Vellfura de Ira¡;:orri. Vicente Cuevas, Antonio Machimbarrena, Gregario Izachin de cheverría, Juan Joseph Gómez de Ma lina, Juan Ángel Canés, Bernabé Gómez Cossío.
65
O 'UI>ACION CA, TA DE DE LO LOS
CAN DIDATOS CANDIDATOS
stud iante grad uado del Colegio de an Francisco Javier de la ciudad de Santiago Oro.
Estudi ante del Oratorio de
3n Felipe eri de la Vi ll a
dc an Mi guel el Grande.
Hijo legítimo. Español
Hijo legítimo Español
I lijo legítimo Español
11 ijo legí timo Español
66
Baltazar A I/tol/io Delgado, Igl/acio de Jara, Jllal/ A I/tol/io
Higi nio Martínez Gall/arez, Joscph 25 de de Morentín , Francisco de
Cura Vicario y noviembre de Cura interino y Mesa, Andrés Juez 1765 Juez Eclesiástico González Ibañez,
Manuel Antonio Eclesiástico o 12 de del Real y Minas Luis Joseph de Echalecu. substituto de diciembre de de San Pedro López de Hijo legí llm Guadalcazar. Guadalcazar 1765 Guada lcazar Páramo. Español
Vicario in Mal/ll el de Meza, capite, Juez Ig l/acio de Eclesiásti co o Terra zas, Bel/ito
Ignacio Substituto del Posada, Diol/isio Lamberri. Partido de Río Martíl/ de Es clérigo Vi llas del Dulce Verde y de las 5 de Cepeda, Carlos subdiácono, nombre de Vi ll as del Dulce noviembre de Juan de Dios Ellsebio de ayudante de la Jesús, Río nombre de 1765 ieto, Agllado, A I/tol/io parroquia Hijo legílimo Verde. Jesús Sin fecha Notario Receptor Romero. local. Español
Joseph Xavier de Herrera y Bustamante, Jerónimo Gómez de Molina, Joseplr Fral/cisco GÓl1I ez, Joseph
Antonio Cardozo Ventura de Cura Vicario y 14 de Comandante de Iragorri, Ignacio Juez noviembre de los Santos Gonzá lez de
Joseph Antonio Ec lesiásti co o 1765 Tribunales de Medina, Javier Diácono del de Elcano substituto de la 2 de diciembre Inquisición y Vicente de Obispado de HiJo Icgflim San Luis Potosí cd. S.L.P. de 1765 Cruzada Lecarra . Michoacán. Españo l
Juan Angel ortés, Ignacio
Go nzá lez de Molina , Nicolás de Cabrera , Ju an
Antonio Cardozo González de Cura Vicario y Comandante de Molina, Sebasti án
Francisco Juez los Santos Fernando de Buenaventura Eclesiástico o 16 de agosto Tribunales de Cárdenas, J oseph Olivar. substi tuto de la de 1766 Inquisición y Buenaventura Hijo legítimo San Luis Potosí cd. S.L. P. Sin fecha Cruzada de Iragorri. Español
Joseph Gabino Hernández de Castro, Joseph Antonio de Elcano, Lázaro de Boo y Quintana, Gregorio Sacristán
Antonio Cardozo Ruanova, menor del Cura Vicario y 19 de Comandante de ebastián Santuario de la Juez noviembre de los Santos Fernando de milagrosísima
Nicolás Obispo Eclesiástico o 1766 Tribunales de árd enas, Joscph imagen de de Lima. substituto de la 9 de diciembre Inquisición y Felipe de Boo y Guadalupe, en Hijo Icgí limo San Luis Potosí. cd . S.L.P . de 1766 Cruzada Quintana. la cd . deS.L.P . Español
67
Pedro Zarzosa, Juan José González y Malina, Bernabé Gómez ossio, Matias Flores de
Raymundo Valdés, Mal/uel 21 de febrero Sotomayor, Pascual de
José María de 1779 Juez Eclesiásti co Rorg/a,
Arduengo. El 8 de marzo de de San Luis Fral/cisco del Hij leg itimo
San Luis Potosí. Sacrod iaconado 1779 Potosi Castillo . Español Joaquil, Ro(lríguez de Herrera , Jose! de JestÍs Guzmál/, José
25 de agosto Manuel Garcia, Igl/acio Ro/tlál/ ,
de 1787 Cura y Juez Antonio Justo Cura y Juez 16 de Eclesiástico de Roldán, José Eclesiástico
Santiago Palau. El diciembre de dicho Valle y su Fral/cisco del Vall e del Hijo legitim
Armad illo. Sacrod iaconado 1787 j urisd icción Pali,io . Armadillo. Español Francisco Xavier Cordero, Mal/u el Marlíl/ez, Igl/acio del Castill{) , Vicente
Antoni o ardozo de Cuevas, La primera Comandante de Gregario de
clerical tonsura los Santos Ruanova y Cura Vicario y
Fernando Ortiz y cuatro 2 I de marzo de Tribunales de Tomás de Juez
de Salinas. menores 1776 Inqu isición y Brazeral y Ec lesiástico cd. HiJO legítimo
San Luis Potosí. ordenes Sin fecha Cruzada Ocampo. de S.L.P. Españo l
Estos doce curas, hijos legítimos y criollos, so licitaron las vacantes para ocupar
los cargos de curas, jueces eclesiásticos y el d sacrodiaconados en las diferentes
parroquias de la ciudad de San Luis Potosí, Armadillo, Guadalcazar y Río Verde. ran
originarios de la provincia de San Luis Potosí y de algunos de sus pueblos, esto es
importante ya que nos indica que al menos en la provincia potosi na durante esa época, no
existía una movilidad por parte de los curas de otras regiones haci a esta provinci a y, e de
suponer que conocerían mejor la región y las neces idades de la comunidad donde se
encontraban laborando. Cada uno de ellos proporcionó la información requerida por el
Obispado de Michoacán para ocupar dichos puestos y sus testi gos sustentaron ante la
autoridades que ninguno de ellos había sido casado y que tampoco habían vivido en
amancebamiento ; que no eran jugadores, mal hablados, ni pend nci eros; aseguraron que
68
tampoco que se les había visto con malas compañías ni acostumbraban visitar ca as
sospechosas. Estos testigos eran españoles y algunos de ellos eran vecinos de la loca lidad
donde vivían los aspirantes y se dedicaban al comercio. En el cuadro se observan algunos
de ellos en letras cursivas y resaltadas, y esto se debe a que ellos fueron sacerdotes que
fungieron como testigos y dieron sus testimonio de legitimidad limpieza de sangre y
buenas costumbres de algunos de los candidatos que pretendían ocupar una de e ta
vacantes.
Los obispos también se encargaban de nombrar a todos aquel10s curas que irían
como ayudantes de los párrocos que se encontraban enfeml0s o con avanzada edad y que
no se retirarían por completo del servicio ministerial; 17 sin embargo, no se encontró si
para estos cargos se hacían oposiciones como en el caso de las vacantes a 10 puestos de
los curas párrocos o sólo se nombraban a los asistentes conforme a las necesidades de las
parroquias que los requerían.
3. Párrocos: denunciados y denunciantes
Con el plan de Intendencias, empezó la reestructuración dentro de la Iglesia y las
relaciones entre las autoridades civiles y las eclesiásticas comenzaron una nueva etapa.18
En este subcapítulo se pretende mostrar cómo se dieron estas relaciones entre amba
autoridades en la provincia potosina durante la época de la Intendencia, con el fin de
17 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, iglo XVIII, Serie-Sacerdotes, Sub erie-Nombramientos, aja 315, 1739- 1782, Fólder 57: Sobre el nombramiento de coadjutor que pidió se le pusiera el cura del Valle de San Francisco Lic. D. Cri stóbal de Escobar y Llamas en el año de 1775 ; y AHM R, Dioce ano, Secc iónGobierno, Siglo XVIll, Serie-Sacerdotes, Sub serie- ombramientos, Caja 471 , 1800- 1 05 , Fólder I 1: Sobre el nombramiento del sustituto del cura del Valle de San Francisco Bachiller D. alvador Sebas ti án
ieto, conferido del Bachiller D. José María Arroyo en el año de 1803 . 18 Ver el capítulo 2 de este trabajo .
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69
entender no só lo cómo se desarrollaron éstas, sino también, comprender cómo afectaron a
la población que ambas instituciones representaban.
3. J Curas párrocos como denunciados
En los archivos revisados se encontraron quejas en contra de los curas párrocos
que ministraban en la provincia potosi na que presentan tintes políticos y económicos
principalmente. Los más perjudicados con el proceder de estos curas, eran los pobladore
de sus parroquias y por lo regular, las autoridades civiles eran qui enes procuraban
denunciar al cura y en muy escasas ocasiones fueron los propios habitantes los que
procedían a enviar las quejas en contra de sus párrocos ante las autoridades de mayor
rango civil o eclesiástico.
Algunas de las demandas más recurrentes tuvieron que ver con el cobro excesivo
de impuestos por servicios. En Mexquitic en 1798 donde el Intendente de an Luis Potosí
levantó una denuncia en contra del cura párroco D. José Ignacio Lozano debido a la queja
que presentaron los naturales de esta comunidad. Las quejas consistían en el abuso que el
cura cometía en contra de los indios que trabajaban en la fábrica espiritual de la Igles ia -
en dicha fábrica se pretendía que los indios laboraran todos los días del año.
Normalmente los que trabajaban en estas fábricas espirituales lo hacían por cortos
periodos y no durante todo el año-, negándoles además la ayuda económica que
sirviera de sustento básico para sus familias, y por si fuera poco, si alguno de los
naturales se atrevía a quejarse por este trabajo obligado, su "recompensa" en el último de
los casos, sería la cárcel. 19 El cura Lozano negó las acusaciones en su contra y, además,
señaló que únicamente estaba continuando con las viejas costumbres palToquiales de sus
19 AHESLP, Intendencia, 1796- 1799 .1, exp. 15: Correspondencia entre autoridades civi les sobre las incidencias que se suscitaron entre los naturales e Mexquitic en contra de su cura párroco sobre exacc iones y servicios. San Luis Potosí, 1798.
70
antecesores - razón por la cual, no cometía ningún delito en contra de nadie-; el cura
Ignacio Lozano quedó sin ninguna reprimenda o castigo y el asunto quedó archivado.
Otro caso por abusos cometidos por los "siervos de Dios" en contra de los
feligreses, se encontró en el Valle de San Francisco, donde debido a la avanzada edad d I
cura párroco y al no querer aceptar la ayuda de los vicarios, según el subdelegado del
partido de Santa María del Río , "sus hermanas " -quienes le socorrían en la
administración de la parroquia- eran las que "tratan con mucha dureza y tiranía a los
feligreses en la exacción de dineros ". 20 Ejemplos más claros de esta injusticia cometida
hacia los feligreses de la provincia potosi na fueron los cobros excesivos que lo cura
pretendían hacer a los pobladores de su área ministerial , al momento de querer dar
sepultura a sus difuntos. Tal fue el caso de este mismo cura y sus hemlanas del Valle de
San Francisco, donde incluso, tuvieron que intervenir las propias autoridade civil es para
completar el dinero que era requerido para el sepelio , ya "que los familiares del difunto
no contaban con la cantidad necesaria para cubrir los gastos de entierro debido a u
b " 2\ extrema po reza .
Una situación similar se vivió en Río Verde, donde un Regidor del Ayuntami ento
Constitucional , D. Juan José Gómez, levantó una querella en contra de Fray Juan de
Uribe y de Fray Isidoro Carranza, por no permitir el entierro de los difuntos en la
parroquia a menos que sus familiares desembolsaran una cuota de "seis p esos y cuatro
20 AHMCR, Diocesano , Sección-Gobierno, Siglo XVIII, Serie-Sacerdotes, ub serie- ombramiento , aja 471 1800-1 805 , Fólder 11 : Correspondencia entre el Subdelegado del Partido de Santa María del Río y el Obispo de Michoacán Francisco Antonio de San Miguel Iglesia, donde acusa al cura del Valle de an Francisco, D. Salvador Sebastián ieto, de incapacidad para cumplir con su deberes evangé licos como es necesario, causando el perjuicio de los fieles. Santa Maria del Río, 1803. 21 AHMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII, erie- acerdotes, ub serie- ombramientos, aja 47 1 1800- 1805, Fólder 11 : Correspondencia entre el Subdelegado del Partido de Santa María del Río y el Obispo de Michoacán Francisco Antonio de San Miguel Igle ias donde acu a al cura del Valle de an Francisco, D. Salvador Sebastián ieto, de incapac idad para cumplir con sus deberes evangé li cos como es necesario, causando el perjuicio de los fieles. Santa María del Río, 1803.
71
reales" para los adultos y de "cuatro pesos y cuatro reales" para lo niños . Los feligre es
protestaron porque desde 1753 se había pactado en este Real , no cobrar estipendio algun
en los entierros, casamientos y bautismos por haber sido los indios quienes, con su
esfuerzo y dinero, habían construido la iglesia22. Debido a estas arbitrariedades, los
cuerpos quedaban a la intemperie durante días, como fue el caso de los cuerpos de D.
José Maria de Torres y del niño José Facundo, los cuales fueron sepultados hasta que su
familiares pudieron conseguir el dinero requerido para el entierro o hasta que ll evaron a
un fiador. Además, en el caso de un muchacho sin identificar, quedó expuesto "hasta
ponerse corrupto e inflamado" porque no hubo qu ien se hiciera responsable para cubrir
sus gastos de inhumación. Todo esto originaba no únicamente la angustia y la impotencia
de los seres queridos que se veían ante la dificultad de conseguir el dinero para que los
cuerpos no quedaran expuestos a la intemperie o de un aval, sino que también al quedar
en exhibición el cuerpo al público, traería como consecuencia malos olores y animal s
rondando el cuerpo, e incluso, esto podría acarrear posib les in fecciones y epidemias a la
localidad.
Continuando con los casos por cobros excesivos, nos encontramos que el alcalde
de Tierra Nueva recién electo en 1821, escribió a sus superiores pidi endo consejo d
cómo debía de gobernar sin que esto ocasionara más problemas con el cura párroco,
quien estaba siendo muy insolente con él y con los regidores del Ayuntamiento , a qui enes
reprendía siempre con dureza y severidad e igualmente hacía con los indios, a quienes
22 AHESLP, Intendencia , 1820.3, exp. 1: Correspondencia entre el Reg idor del Ayuntamiento Constitucional del pueblo de Río Verde y el Intendente de San Luis Poto í sobre los cobros exces ivo del cura para la sepultura de los difuntos en la Iglesia . Río Verde, l 20 .
72
además, les exigía siempre el pago por predicar los sermones en los días de fi esta .23
Aquí podemos observar cómo es que el cura párroco, quería seguir ejerciendo su posible
influencia no únicamente en los fieles , sino también dentro del gobierno del partido, a
pesar de que con las nuevas leyes de reforma impuestas por los Borbones, los cura
párrocos tenían prohibido inmiscuirse en asuntos que no fueran concernientes a su labor
ministerial.
Otro tipo de quejas en contra de los curas párrocos era el abuso que cometían
cuando querían obligar a los naturales a que les prestaran servicios personales, los cuales
también fueron prohibidos durante estos años. Caso de ello lo localizó en la Villa de
Santiago de los Valles, cuando los indios remeros del río de Tampaón presentaron una
queja al virrey, el Conde de Revillagigedo, en contra del cura Fray Bernardino Pérez
Osorio, por ser obligados a prestarle servicios personales a él y a los demás curas que
visitasen la Iglesia. Estos indios se dedicaban a transportar gente, carga y bestias a travé
del mencionado río en sus propias canoas, por lo cual , cobraban un pequeño importe; sin
embargo, el cura Pérez Osorio, pretendía que cuando él y los religiosos que le visitaran e
hicieran uso del río para su transportación, no debían de remunerar a los indios pues éstos
tenían la obligación de servirle al convento. El virrey, ordenó una investi gac ión sobre el
caso y le pidió al subdelegado de dicha villa D. José Placencia y Voarte que publi cara un
oficio que especificara la manera de cobro por el servicio que prestaban los indios
remeros del río Tampaón y la necesidad de hablar con el cura personalmente para
explicarle que "los indios de la expresada Villa de Santiago de los Valles son libres, y no
están en obligación alguna de prestar servicios a los curas, y que a éstos, sólo les deben
23 AHESLP, Intendencia , 1820-1823.2 , exp. \: Correspondencia que e cribe el Alcalde de Tierra Nueva sin especificar a quién sobre la conducta que observa el cura párroco de la comunidad, pidiendo consejo de cómo debe tratarlo . Tierra ueva y Santa María del Río, 182 1.
73
los derechos, que les asigna el arancel" y que no debía continuar con la explotación d
los indios remeros que trabajaban honradamente para la manutención de sus familias .24
Volviendo al Valle de San Francisco, el Bachill er D. Salvador Sebastián iet
fue acusado por el subdelegado del partido de Santa María del Río ante el Obispo de
Michoacán D . Francisco Antonio San Miguel Iglesias, porque debido a su avanzada edad,
ya no gozaba de buena salud y no estaba cumpliendo con sus deberes evangélicos como
era requerido. Por otro lado, se negaba a recibir la ayuda de los vicarios. Esto trajo como
consecuencia, que muchos de los fieles de los ranchos y las haciendas vecinas hubieran
muerto sin confesión por no haberles podido asistir durante sus últimos momentos.25
in
embargo, cuando el subdelegado recibió la contestación a su misiva, se le noti ficó que ya
se le ha enviado al cura Nieto la ayuda de un cura sustituto y además que no había por
qué alarmarse ya que el Bachiller Nieto, a pesar de su avanzada edad, gozaba de
excelente salud y las acusaciones en su contra eran injustas. Sin embargo, se encontró
anexo al expediente, un documento donde se le notificaba al Obispo de Michoacán que el
cura Nieto acababa de fallecer (con fecha 27 de abril de 1803 - esto ocurrió 2 me es y
medio después de que le escribiera el subdelegado y le notificara la mala ad mini stración
eclesiástica del párroco-) y que debido a su enfermedad y a la época de cuaresma, había
resultado imposible para el cura Arroyo - párroco sustituto-, rec ibir en forma y orden lo
libros y demás documentos del curato, la sacristía y la fábrica pidi endo se le indicara lo
24 AHESLP, Intendencia, 1790- 179 1, exp. 13: Correspondencia entre autor idades civiles sobre que los indios no están en obligación de dar servicio personal a los cura doctrineros. Valles, 1792; y AH ~ LP , Intendencia, 1796- 1799. 1, exp. 15: Correspondencia entre autoridades civi les sobre las incidencias que se suscitaron entre los naturales e Mexquitic en contra de su cura párroco sobre exacciones y serv icios. an
Luis Potosí , 1798. 2S ARMCR, Diocesano, Sección-Gobierno, Siglo XVIII , Serie-Sacerdotes, ub seri e-Nombramiento , aja 471 , 1800-1805 , Fólder I\: Correspondencia entre el Subdelegado del Partido de Santa María del Río y el Obispo de Michoacán Franc isco Antonio de San Miguel Igles ias, donde acusa al cura del Va lle de Sa n Francisco, D. Salvador Sebastián Nieto, de incapacidad para cumplir con sus deberes evangélicos como es necesario, causando el perjuicio de los fieles . Santa María del Río, 1803 .
74
que debía hacerse en ese caso. Esto nos indica que el subdelegado, preocupado por la
conducta del cura ante la feli gresía de la región estaba bien fundada , pero las autoridades
eclesiásticas no se tomaron el tiempo suficiente para llevar a cabo una investigación del
asunto y sin más resolvieron concluir que todo marchaba bien y que las denuncia
presentadas por la autoridad civil no eran más que mentiras sin fundamento . Se pued
pensar entonces, que en la pugna entre autoridades civi les y ec les iás ticas, al menos los
obispos cerraron filas y apoyaron en todo momento a sus párrocos.
Como se puede apreciar, el mayor problema entre los párrocos y sus fe li greses fu
de índole económico. Razón por la cuál, con las reformas borbónicas y la nueva
mentalidad, se intentó poner fin a la política patemalista que se había proclamado con lo
pueblos indígenas.26 Esto originó muchos problemas porque al considerar e incluir a los
indios como iguales con el resto de la población, por un lado se eliminó el trabaj
personal , pero por otro, los párrocos comenzaron a cobrarl es por los servi cios que
ministraban de la misma manera que lo hacían con los españoles y los mestizos.27
Hubo situaciones donde el aspecto monetario no fue el asunto primordial de la
denuncia; en Tamazunchale, el subdelegado del partido D . Bartolomé de la Peña, acu ó al
Bachiller D . Lucas Antonio Rosado de imponer a un maestro de primeras letras que
únicamente se aprovechaba del trabajo de los niños y no les enseñaba nada para su
provecho escolar, todo esto era sabido por el cura pero como siempre se encontraba bajo
los efectos del alcohol no tomaba nota de ello y dej aba que continuara el abuso hacia lo
26 David A. Brading. Una Iglesia asediada, pp. 77-97 . 27 José Alfredo Rangel Silva. "Lo que antes era casa de Dios ... Adaptaciones del liberalismo en lo ámbitos locales , 1820-1 825" en Historia Me.xicana, vo l. UIl, núm. 1, 2003 , 11 7- 160 pp.
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75
niños?8 La pnmer medida tomada por el subdelegado fue la de nombrar un nu v
maestro de primeras letras que sustituyera a D. Rafae l Gil Barragán no obstante, el cura
molesto decidió denunciar tal atropello, pero al llevarse a cabo una investigac ión dios
hechos se concluyó que el subdelegado de la Peña había actuado con prudencia y bajo e l
entendido de buscar un mejor beneficio y el mayor provecho para los esco lares. I cura
continuó molesto por haberse saltado su autoridad y se dedicó a hosti gar al nuevo
maestro de primeras letras, el cual escribió al subdelegado notificando su renunci a al
puesto para el que había sido encomendado.
Otro tipo de denuncias en contra de los curas párrocos de la provinci a potosi na,
fueron los derivados de no cumplir "decorosamente" con los servicios litúrgicos que le
correspondían. Se encontró la acusación levantada en San Luis Potosí en agosto de I 20,
donde los representantes del cabildo se lamentaron de que el cura D. José Antonio de la
Lama, encargado de predicar la misa y de efectuar el canto del Te Deum, con moti vo de
la celebración de la Junta Electoral de Parroquia, no mostró en ningún momento , la
solemnidad que el evento requería. Algo parecido ocurrió con el Bachiller José Antonio
Gómez de la Villa de Valles en la misma fecha, no ll evó a cabo con respeto los actos
cívicos y religiosos conforme a lo establecido por la ley. 29 Esto ocasionó la
inconformidad no sólo de los electores, sino también la de los votantes y de los
representantes del gobierno que asist ieron al evento . Todo esto nos indica la importancia
28 AGN, Intendencia , vo l. 30, exp. 12, o. 1057 : Representación del cura de Valles obre el nombramiento de escuelas de primeras letras. San Luis Potosí, 1804. 29 Véase los siguientes expedientes: AHESLP, Intendencia , 1820.9, exp. 12: orrespondencia entre la autoridades civi les y las eclesiásticas con motivo de la inconformidad de los e lectores y los representantes del gobierno por no haberse llevado a cabo los servicios religiosos conforme a lo establecido por la ley para tan importante evento. Provincia de San Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820.1, exp. 10: Correspondencia entre autoridades civiles relativa a los procedimientos del cura párroco de la mjsma, con motivo del juramento y promulgac ión de la Constitución y subsecuentes elecc iones que prev iene. Tancanhuitz de Villa de Valles, 1820- 182 1.
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que tenían los curas en los acontecimientos de esta magnitud, -ya que como
observaremos en el siguiente capítulo-, los curas párrocos no se limitaban a la
evangelización, SinO que tenían una participación activa en los di fe rentes ámbi t
sociales, políticos, educativos y económicos de la población. Las autoridades del nuevo
régimen constitucional seguían viendo en el clero un importante elemento, tal vez no
como un legitimador, pero sí como de cohesionador del sistema político. ería interesante
comprobar si los párrocos se negaban a cumplir con su responsabi lidad, por su oposición
al régimen constitucional o por una simple dejadez y abandono de ella.
Finalmente, otro tipo de querella en contra de los curas que tuvo que ver con su
conducta política, ocurrió a consecuencia del movimiento insurgente de principio del
siglo XIX. En el caso de la provincia potosina, dichas acusaciones también se
presentaron, ya que hay algunas demandas levantadas en contra de unos cuantos
religiosos de las órdenes de franciscanos y carmelitas de Ahualulco y an Luis Poto í,
por observar una conducta subversiva contra el gobiemo. Para Rafael Montejano y
Aguiñaga, apenas se presentaron condiciones de insurrección en nuestro estado, por ser
"adictos a la Corona", tampoco había sido capaz de rebelarse el pequeño grupo de
burgueses que vivía en San Luis, debido a que gozaban de grandes privilegios y no
estaban dispuestos a perderlos. 30 No obstante, Montejano considera que "sólo quedaba
como yesca revolucionaria fácilmente combustible, la plebe" y que "fu e el el ro,
especialmente el regular, la llama que la hizo arder".3 1 Dificilmente se han podido
rastrear casos concretos de párrocos insurrectos en la provincia potosi na, pero de acuerdo
con el propio Montejano sí hubo párrocos -especialmente los del clero regular- que
30 Rafael Montej ano y Aguiñaga. El clero y la independencia, 100 pp. 31 AHESLP, Intendencia , 1821.6, exp. 8: Oficios relativos a la conducta política que estaban observa ndo algunos religiosos de las ordenes del Carmen y San Francisco en contra del gobierno. México, 182 1.
77
participaron activamente en el movimiento independentista, pero que al ver que 10
realistas estaban tomando el control del poder limitaron su partic ipación en él. Por su
parte, el rey Carlos III decretó un bando el 12 de enero de 1814, ante la insistencia de 10
eclesiásticos de dar su opinión sobre los movimi entos insurgentes:
"El buen ejemplo del Clero secular y regular trasc iende a todo el cuerpo de los demá vasallos de una ación tan religiosa como la Española : el amor y el respeto a los soberanos, a la Familia Real y al Gob ierno, es una obligac ión que dictan la leye fundamentales del Estado, y enseñanza las letras divinas a los súbditos como punto grave de conciencia . De aquí proviene que los Ecles iásticos, no so lamente en sus ermones, ejercicios espirituales, y actos devotos deben infundir al pueblo estos principios, sino también y con más razón, abstenerse ellos mismos en todas ocasiones, y en las conversac iones familiares, de las dec lamaciones y murmuraciones depres ivas de las personas del Gobierno que contribuyen a infundir od iosidad contra ellas, y tal vez dan ocasión a mayores excesos, cuyo crimen estima como alevosía y traic ión la ley 2 títu lo 1 libro 3 de esta Recopilación ... Por tanto, a fin de que no e abuse de la buena fe de los seculares, se guarde al Trono el respeto que la religión ca tólica inspira , y ninguna persona dedicada a Dios por su profes ión se atreva a turba r por tales medios los ánimos y orden público, ingiriéndose en los negoc ios de Gobierno, tan di stintos de su conoci miento como impropios de sus ministerios espirituales; de c ierta cienc ia y pleno poder Rea l, con madura deliberación y acuerdo , he venido en resolver que mi onsejo expida las . rdenes circulares a los Obispos y Prelados regulares de estos mis Reynos, al tenor del re ferido capítulo de la expresada ley ... cuidando todos e llos de su exacto y puntua 1 cumplimiento ... e igual prevención se haga alas justic ias para que estén a la mira , lo adviertan a los Prelados ; y si notasen descuido o negligenc ia de su parte, reciban sumaria información del nudo hecho sobre las persona Ec les iásticas que olvidadas de u estado y de sí mismos, incurriesen en los excesos sobredichos, y la remitan al Presidente del Consejo para que se ponga el pronto y conveniente remed io .... ,,32
Dicho edicto fue recibido por el Intendente de San Luis Potosí , D . Manuel de
Acevedo el 4 de febrero de 1814, y fue publicado el dí a 10 del mismo . Anexo a este
decreto, se encontraron los informes de los diferentes subdelegados que integraban la
provincia potosi na en la época, dónde manifestaban haber rec ibido copia de tal bando.J3
32 AHESLP, Intendenc ia, 18 14.4, exp. 3: Bando con inserc ión de la Rea l Orden que enca rga a todas las autoridades, bajo la más estrecha responsabilidad, la vig ilancia y cuidado sobre ev itar que lo ecle iás ti cos
divulguen especies sedic iosas contra el Gobierno. México, 18 14. 33 AHESLP, Intendencia, 18 14.4, exp. 3: Bando con inserc ión de la Rea l Orden que enca rga a t da las autoridades, bajo la más estrecha responsabilidad, la vigi lanc ia y cuidado sobre evitar que los ec\es iás tic s divulguen especies sedic iosas contra el Gobierno. México, 18 14; y AHE LP, Intendencia , 1820- 1823 .1, exp . 18: Notificación del Secretario del Ayuntamiento Constitucional del Pueblo de Santa María del Río D. Telésforo Villaseñor, El de San Nico lás T ierra Nueva D. Vicente Armijo y e l del Valle de an Franc isco Ignacio de Lara, de haber recibido un decreto sobre e l modo de juzgar a los ecle iás ticos con pape les
subversivos que ataquen al Gobierno. 1822.
78
3.2 Curas párrocos como denunciantes
Los curas párrocos no sólo fueron acusados, también se descubrió que éstos se
convirtieron en portavoces de aquellos fi eles que acudieron en busca de su ayuda cuando
alguna autoridad o algún hacendado querían abusar de su poder o su dinero y
perjudicarles impunemente. Probablemente detrás de estas denunci as estaba el
enfrentamiento entre ambas autoridades.
En 1804 el cura párroco D. Vicente González del pueblo de la Hedionda, levantó
una queja al Intendente de San Luis Potosí , en contra del gobernador de natural s
Jerónimo Niño por azotar y tratar mal a los demás "de su común". De acuerdo con el cura
González, los indios se acercaron a él en busca de la ayuda necesaria para que el
gobernador Niño no volviera a azotarles en público - ya que éste lo hacía sin importarle i
eran hombres o mujeres que contaban con la mayoría de edad-o El cura onzá lez
consideraba que a los indios debía de tratárseles con el amor, la prudencia y la suavidad
necesarias para poderles corregir conforme al delito que éstos hubieran cometido. El
Intendente hi zo comparecer al gobernador que era de origen indígena, Jerónimo iño y
se le aprehendió por "el acto cruel y duro, con que se ha conducido a aquellos
naturales" , procediendo en su contra con todo el ri gor de daño.34
Retomando al cura de Mexquitic, D . José Ignacio Lozano, observamos como
escribió al Intendente de San Luis Potosí una queja sobre las injusticias cometidas por el
comisario del pueblo Manuel Ramos Hernández - es importante resaltar que est e el
cura del que se había hecho referencia sobre una queja en su contra, por cobros exces ivo
de impuestos y servicios a los naturales de la misma comunidad-o En esta querella, el cura
34 AHESLP, Intendencia , 1804.2, exp. 6: Correspondencia e tre el cW'a párroco de la Hed ionda y el Intendente de San Luis Potosí, pidiendo que intervenga en contra del abu o de autoridad de l gobernador de naturales Jerónimo Niño. San Luis Potosí, 1804.
79
Lozano declaró que el comisario Ramos hacía constante abuso de su autoridad y cuando
algo o alguien lo molestaba sin razón aparente, los mandaba azotar públicamente sin
considerar si se cometió un delito o cuál era la condición fisica de las personas que estaba
azotando - mujeres, niños, ancianos y enfeml0s-. Su casti go era tan fuerte que a veces
caían desmayados e incluso, hasta hubo quienes quedaban imposibilitados fi sicamente
por tanto azote. El cura incluyó en su queja que además de azotarles sin razón, éste lo
hacía con crueldad y con venganza e hipocresía. Mani festó haber hablado personalmente
con el comisario sobre esto y le explicó que la "crueldad nunca puede concebir respeto,
sino aversión" y sin embargo, dicho personaje no le hi zo el menor caso. El Intendente
otorgó el 17 de enero de 1812 un nuevo nombramiento para comisario del pueblo de an
Miguel de Mexquitic al Sr. José Olayo Mendoza quien se encargó de cubrir el puesto del
antiguo comisario Manuel Ramos Hemández, a partir del día 22 de enero de 18 12. 35
Otro caso de igual magnitud, lo encontramos en Coxcatlán , cuando el cura se quejó del
abuso de autoridad cometido por el Ayuntanliento de Villa de Valles, en contra de los
indios que ministraba.36
Los curas no sólo se enfrentaron a las autoridades cuando defendían a los
feligreses también se opusieron a las élites económicas de las poblacion s donde
ministraban. Un ejemplo de ello lo observamos en el Valle de San Francisco en 1790
cuando los hacendados de Gogorrón y Zavala desviaron las aguas de los ríos hacia sus
represas las cuales se encontraban en malas condiciones fisicas . Esto podía ocasionar
35 AHESLP, Intendencia , 1812, exp. 14: Correspondencia entre e l cura párroco de an Miguel de Mexquitic y el Intendente de San Luis Potosí en dónde se queja de las injusticias que estaba cometiendo el comisario en contra de los fieles de esta comunidad. Mexquitic, I 12. 36 AHESLP, Intendencia, 1821.1 , exp. 1: Queja presentada p r el cura de Coxcatlán en contra del Ayuntamiento de Villa de Valles por abuso de autoridad en contra de los naturales de la región. Prov incia de San Luis Potosí, fecha sin especificar, 18 11 -182 1.
i.
80
inundaciones en las pequeñas viviendas de los pobladores d la región y en la iglesia
como había ocurrido cuando di ez años atrás una inundac ión había arrasado con
viviendas y con las cosechas de la poblac ión. Además de esta queja, l cura párroco
denunciaba que los mismos hacendados estaban cometi endo atropellos en contra de los
indios que laboraban en sus hac iendas, ya que sus mayo rdomos los ca ti gaban
severamente con azotes, lo que hasta el momento , había ocas ionado la muerte de tres
personas, y por si fuera poco, estaban cometi endo fraude fiscal con su venta de vingarote.
Todo esto , de acuerdo con el propio cura, ori ginaba una falta d autoridad civil por parte
del teniente sustituto del valle.37 El Intendente de San Lui s Potosí Bruno Díaz alc do,
prometió ll evar a cabo las averi guaciones necesarias de lo qu estaba ocurri endo en el
valle y poner orden ante tal situación de daños, colusión, desorden y excesos de parte de
los dueños de las Haciendas de Gogorrón y la de Zavala. Esto casos nos muestran que
los párrocos seguían ten iendo un poco de poder e influencia en la población, ya que ante
una queja de un eclesiástico, las autoridades civiles respondían de forma rápida y
contundente.
Una vez establecidas las reform as que habrían de serv Ir para reestructurar la
administración eclesiástica, el abuso contra los indios cometidos por los curas párroco
vio en aumento. Esto se originó porque la Corona determinó qu los indios no debían de
prestar servicios personales a los curas y debían ser tratados como iguales junto con los
peninsulares y los criollos. Esta reforma provocó que los párrocos comenzaran a
cobrarles a los indios por los servicios eclesiásticos que les brindaban , tal fu e el caso de
la celebración de misas en las fi estas parroquiales, los bautizos, los casamientos y los
37 AG , Intendenc ia, vol. 9, ex p. 7, No. 78 : Representac ión del cura de l Va ll e de San Francisc sobre e l abuso cometido por los hacendados de Gogon'ón y Zavala en el Vall e. an Lui s POlosí, 1790.
".
8 L
entierros. Antes de tomarse dicha medida, los indios pagaban al cura por suministrarl es
estos sacramentos con los serv icios personal e , pero debido a que e to ya no serí a
posible, los curas convinieron en obligar a los indios a cumplir con el cobro de ellos, yen
algunas ocasiones, los indios no tenían el dinero sufi ciente para cumplir con el pago
continuaron prestando servicios a los curas.
En cuanto a la relación Iglesia-Estado, se observó que las autoridade civil e ya
no estaban bajo la influencia del clero, que se sintieron libres de quejarse ante la
autoridades civiles o eclesi ásticas cuando consideraban que estos párrocos cometían
excesos con la población. En ambos casos se percibi ó que el trasfondo de di chos abusos
casi siempre contenía un tinte económico . Por otro lado se observó que cuando fue
necesario, el gobierno tomó cartas en el asunto y sin importar que el acusado fu era un
cura o un representante civil, se decidió a resolver los inconvenientes con j usti cia.
Una vez que se ha visto la estructura admini trati va ec lesiásti ca en la prov incia
potosina y el perfil de las personas que ocuparon el puesto de párroco y coadjutor en las
distintas parroquias, en el próximo capítulo vamos a ver qué papel desempeñaron en la
vida cotidiana de sus pueblos y hasta qué punto su influencia sobrepa ó sus fun ciones
espiri tuales .
CAPÍTULO IV EL PÁRROCO ANTE LA PRIMERA ETAPA MODERNIZADORA
Este capítulo tiene como objetivo explicar cuáles fueron las funciones civi les que
desempeñaron los curas párrocos en la provinci a potosina durante la Intendencia,
permitiéndonos visualizar hasta qué punto se mantuvieron como referentes morale y
como representantes del pueblo ante los distintos problemas que debieron afrontar en su
diario convivir. Ha sido dividido en cinco apartados que nos pemlitirán en tender cuáles
fueron las actividades en las que siguieron participando los curas párrocos en cada uno de
los pueblos donde ministraban, yen las que, de acuerdo con el reformismo borbónico, ya
no tenían ningún derecho de intervenir.
. .
".
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Actividades de los curas párrocos.
La labor principal de los párrocos estaba concentrada en atender las neces idades
espirituales de la población de su parroquia, aunque en realidad, sus funciones iban
mucho más allá: además de administrar los sacramentos actuaban como jueces,
representantes de los vecinos, mediadores entre éstos y las autoridades civile , abogado ,
maestros, etc. A continuación veremos si su participación dentro de la vida social del
pueb lo al que representaban - al menos en la provincia de San Luis Potosí- continuó
siendo de gran importancia a pesar del objetivo de la Corona por restarl es su poder e
influencia dentro del mundo hispanoamericano.
Para faci litar el análisis hemos dividido las actividades en las que se vieron
envueltos los párrocos en cinco tipos que son: políticas, educativas, civiles, económicas y
de salud pública.
l. Los curas párrocos y su participación dentro de la "política "
La participación de los curas párrocos dentro de la vida política fue muy act iva y,
paradójicamente, se puede decir que el régimen borbónico la acrecentó con la
Constitución de Cádiz. A diferencia de lo sucedido en la arquidiócesis de México y la
Diócesis de Guadalajara, I el Estado continuó viéndose en la neces idad de seguir contando
con el apoyo de los curas párrocos para obtener la infonl1ación necesaria de cada uno de
los diferentes pueblos que confomlaban la provincia potosi na. Su principal labor fu e
levantar los censos de población para poder celebrarse las elecc iones de las junta
parroquiales para las Cortes. 2
I De acuerdo con el estudio elaborado de Wil liam Taylor a los cura párroco e les limitó u part Ic Ipac ión en las elecciones loca les y en aquellas actividades que tuvieran que ver con la economía de la comunidad que ministraban. Véase: William B. Taylor. Ministros de los Sagrado, pp. 3 1 Y 32. 2 Ver el capítulo 2 de este trabajo .
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La elaboración de las listas parroquiales fue especialmente importante porque en
algunas de ellas los curas párrocos no sólo daban a conocer al gobierno cuántas almas
vivían en el curato a su cargo - lo que le permitiría saber cuánta gente participaría en la
elecciones parroquiales y para las Cortes-, sino que, dichas listas permitían conocer más
detalladamente la extensión geográfica de cada curato, su calidad étnica, la edad con que
contaban las personas que lo integraban, su condición civil , el número de familias o hasta
incluso, saber cuántos de ellos eran militares o religiosos y en algunos casos, saber con
cuántas cofradías contaban algunos de ellos. 3
Una vez elaboradas las listas parroquiales por los curas párrocos de cada región ,
se enviaban al intendente y de ahí al virrey, qUIen tenía la responsabilidad de di ctar la
orden para que se publicara en tiempo debido las convocatorias para celebrar la
elecciones de juntas parroquiales en cada región4. Conocidos cuántos electores habrían de
3 AHESLP, Intendencia , 1813. 1, exp. 8: orrespondencia entre autoridades c ivile y ecles iás ticas sobre la elaboración de listas parroquiales de San Luis Poto í. an Luis Potosí, 1 13; véase también AH E LP, Intendencia, 18 \3 . 1, exp. 18: Correspondencia entre autoridades civiles y ecles iásticas obre el plan estadístico que demuestra la existencia de habitantes que fOlman el curato de San Miguel Mexquiti c. Mexquitic, 1813 ; AHESLP, Intendencia, 1813 . 1, exp. 20: Lista genera l de los lugares, puestos y ranchos que con sus familias y número de almas se comprenden en la jurisdicc ión del Real de an Pedro elaborad por el Bachiller D. Francisco de Salazar, cura propio de este partido . Cerro de San pedro, 18 13; AH ' LP , Intendencia, 18 \3 . 1, exp. 21: Padrón del Real de San Francisco de los Pozos formado el 19 de j unio de 18 \3 por el Bachiller D . Manuel Ignacio J iménez y Segura . San Francisco de los Pozo, 18 13; Y A 1-1 E LP, Intendencia, 18 \3 . 1, exp. 26 : Plan estadísti co del curato de Tlaxca lilla que comprende los pueblos de Santiago, Tequisquiapán, San Juan y San Miguel, con el número de almas y famili a . San Luis Potosí, 18\3 . 4 AHESLP, Intendencia, 181 3, exp. 12 : Edicto convocatorio para las juntas electorales y de parroquia de San Jerónimo de la Hedionda. Venado, 18 13; AHESLP, Intendencia , 18 \3.4 , exp. 17: onvocatori a para la celebración de las juntas parroquiales en an Luis Potosí. an Luis Potosí, 18 13; AH ES LP, Intendencia, 1814.1, exp. 15: orden de que las elecciones de indi viduos para los ayuntamientos se ejecuten sin con fes ión y con el mayor orden posible en los pueblos en que ha ya má de una parroquia . an Luis Potosí, 18 14 ; AHESLP, Intendencia, 1820.2, exp. 4 : onvocatorias para la ce lebración de las juntas electora les de parroquia en San Miguel de Mexquitic, el cerro de an Pedro , Bocas, alina del Peñón Blanco, Venado, Real de Catorce, Guada1cazar y Cedral. San Luis Potosí, 1820; AH ESLP, Intendencia, 1820.4, exp. 9: Bando que hace re ferencia a la renovación de la mitad de los ayuntamientos y juntas e lectora les de parroquia de la provincia potosina. San Luis Potosí , 1820; AH E LP, Intendencia, 1 20.9, exp. 25 : Publicación del aviso sobre las eleccione parroquiale para el bienio 1822- 1 23. San Luis Potosí, 182 1; AHESLP, Intendencia , 1820.9, exp. 33: A viso para la ce lebración de juntas parroquiales en an Luis Potos í a celebrarse el 17 de diciembre de 1820 en San Luis Potosí. San Lui Potosí, 1820; y AHESLP,
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participar y con un año de antelación a las elecciones de Cortes, e l primer domingo del
mes de diciembre se celebraban las votaciones en los atrios de las igles ias . Estas juntas
parroquiales tenían como objetivo escoger de entre los ciudadanos avecindados y
residentes del territorio de una parroq uia, a los compromisarios que actuarían como
representantes de la población al momento de celebrarse las elecc iones de Cortes. Dichas
elecciones estaban presididas por algún representante del gob ierno y además era
importante que estuviera presente el cura del pueblo ya que además de tener que celebrar
la misa y dar un discurso correspondiente a las circunstancias, su presencia aseguraría la
solemnidad requerida por este hecho. 5
Intendencia, 182 1.3, exp. 4 : Sobre que se haga n las e lecc iones de partido en Vi ll a de Va lles. Prov inc ia de San Luis Potosí, 1820. 5 AHESLP, Intendencia, 1813, exp. 3: Lista de Individuos que resultaron electos en la junta parroquial de varios municipios y certificación de la elecc ión. San Luis Potosí, 18 13; AHES LP, Intendencia, 1813 , exp. 17: Elecciones parroquiales en Guadalcazar, Rea l de Ca torce, Salinas del Peñón Blanco y el Valle de Sa n Francisco. San Luis Potosí, 1813; AHESLP, Intendencia, 1813, exp. 24: Francisco de Sa lazar, cura párroco del Cerro de San Pedro , solemniza rá el acto de junta parroquial. Rea l Cerro de an Pedro, 18 13; AH ES LP, Intendencia, 18 13- 18 14, exp. 6: Actas originales donde consta la elecc ión de lo e lec tores parroquiales de San Luis Potosí. San Luis Potosí, 18 13; AHE LP, Intendencia , 1820. 1, exp. 9: Repre entación en la Vi ll a de Valles para que Tancanbuitz sea cabecera del partido y ahí se ce lebren las juntas parroquiales. Prov incia de San Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia , 1820.2, exp. 5: Junta para e lectores de parroquia de Armadillo, Santa María del Río y San Francisco de la Palma . Provincia de Sa n Luis Potosí , 1820; AHESLP, Intendencia, 1820.2, exp. 6: Testimonios y actas de juntas parroquiales, convocadas a fin de nombrar a nueve e lectores de la provincia de San Luis Potosí. San Luis Potosí , 1820; AHESLP, Intendencia, 1820 .9, exp. 12 : Defectos advertidos en la ce lebració n de la misa yel Te Deum con mot ivo de la celebración de elecciones parroq uiales en San Luis Potosí. San Lui s Potosí, 1820; AHE LP, Intendenc ia, 1820- 1823. 1, exp . 4 : Elecciones palToquiales y de partido en anta Ma rí a del Río. Sa nta María del Río, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820- 1823. 1, exp. 11 : Elecc iones parroquiales y de partido en Santa María del Río . Santa María del Río , 1820; AHESLP, Intendencia, 1820- 1823.3, exp. 2: Elecciones parroq uiales y de partido en Venado, Cedral y Río Verde. Provincia de San Lu is Poto í, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820-1823 .3, exp. 5: Elecciones palToquiales y de partido en Matehuala y Charcas. Provincia de San Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820-1 823.3, exp. lO: Elecc ione parroquiales y de partido en Rea l de Ramos. Provincia de San Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820- 1823 .3, exp. 15: Elecciones palToquiales y de partido en Real de Ramos y Charcas. Provinc ia de San Luis Poto í, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820- 1823.3, exp. 24: Elecc iones parroquiales y de partido en erro de an Pedro, Villa de Santa Elena y Pozos . Provincia de San Luis Potosí , 1820; AHESLP, Intendencia, 182 1.1 , exp. 7: So licitud de que las juntas electorales de parroquia deben componerse de todos lo c iudada nos avecindados y res identes en el territorio de la parroquia respectiva . Provincia de San Luis Potosí, 1820; y AH ESLP, Intendencia, 182 1.3, exp. 4 : Sobre que los electores de parroquia , e presenten a las juntas electora les de part ido en la Villa de Palma con los documentos que acredi ten su elecc ión. Provincia de an Lui s Potosí, 182 1.
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Es de gran importancia hacer notar que en los documentos de archivo se encontró
que además de su participación en las elecciones de las junta parroqui ale para la
celebración de la misa y del Te Deum, los curas párrocos alían elegidos como
representantes para las elecciones de Cortes, tal fue el caso de los curas Bachiller D. Jo é
María Semper en Real de Catorce, el Bachill er D. Francisco de Salazar en el Cerro de
San Pedro, el Bachiller D. Mateo de Brazaras en San ebasti án de Pozo , Bachiller D.
Diego Bear y Mier en Armadillo, los Bachilleres D. Manuel Fau tino Camiña, D.
Santiago de los Reyes y D. Anastasio Hemández en Santa María del Río, el cura D.
Lorenzo Agustín de Azpeitia en Cedral, el cura D. Rafael Pérez Maldonado y el
Presbítero Cornelio Guerrero en Venado, el Bachill er D. Antonio Delgado Valle en Río
Verde, los Bachilleres D. José Antonio Becerra, Miguel Cortés y Cresenc io Puente en
Matehuala, el Bachiller D. José Domingo Díaz de León en Charcas y los Bachilleres D.
Manuel Antonio Delgadillo y D. Pedro José Campos en Santa María de los Ramos6. Esto
es especialmente interesante, porque su participación dentro de ell as sign ificaba que a
pesar de que el gobierno borbónico quería restringirles su poder e influencia , permitió sin
ningún problema que los representantes del bajo clero siguieran rep resentando los
intereses de los vecinos que confonnaban su curato; además, cabe mencionar, que esto
6 AHESLP, Intendencia , 18 13, exp. 3: Lista de Individuos que resultaron e lectos en la junta parroquial de varios municipios y certificación de la e lecc ión. San Luis Potosí, 18 13; AH LP, Intendenc ia , 1 13, exp. 17: Elecciones parroquiales en Guada\cazar, Rea l de atorce, Sa lina del Peñón Blanco y el Valle de San Francisco. San Luis Potosí, 1813 ; AHE LP, Intendencia , 181 3, exp. 24 : Francisco de a lazar, cura pálTOCO del Cerro de San Pedro, so lenmizará el acto de junta parroquial. Rea l elTO de San Pedro, I 13; AH ES P, Intendencia, 18 13- 1814, exp. 6: Actas origina les donde consta la elección de los e lectores parroquiales de San Luis Potosí. San Luis Potosí, 181 3; AHESLP, Intendencia, 1820.2, exp. 5: Junta para electore de parroquia de Armadillo, Santa María del Río y an Francisco de la Palma. Provincia de San Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia, 1820- 1823. 1, exp. 4 : Elecciones parroquiales y de partido en Santa María de l Río. Santa María del Río, 1820; AHE LP, Intendencia , 1820- 1823. , exp. 2: Elecc iones parroquiales y de partido en Venado, Cedral y Río Verde. Provincia de an Luis Potosí, 1820; AH SLP, Intendencia , 1820-1823.3 , exp. 5: Elecciones parroquia les y de partido en Matehuala y harcas . Provincia de an Luis Potosí, 1820; y AHESLP, Intendencia , 1820-1823.3, exp. 10: Elecciones parroquiale y de partido en Rea l de Ramos. Provincia de San Luis Potosí , 1820.
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tampoco cambió durante la etapa constitucional. El hecho de que miembros del clero
fueran elegidos como representantes constitucionales nos indica que las reformas
borbónicas no limitaron su influenci a ni su prestigio .
2. Los curas párrocos y la "educación " del pueblo
Los objetivos de la educación en los territorios americanos fueron : el desarrollo
económico y el fortalecimiento del Estado .7 Con el reformismo borbón ico se pr tendió
mejorar la educación en todas las colonias; hubo una gran preocupac ión por parte del
gobierno por establecer -o en su defecto-, por renovar las escuelas de primeras letra ya
instituidas en los pueblos que comprendían el territorio anlericano .
Un ejemplo de ello lo vemos en la correspondencia que fue dirigida al intendente
Salcedo de San Luis Potosí por el virrey BrancifOlte en el año de 1796 bajo el acuerdo
no. 3598,8 dónde pidió se le infonnara detalladamente sobre la cantidad de escuela
establecidas en la provincia potosina, saber si estaban enseñando a los naturales en
castellano a leer y a escribir, conocer cuál era la ubicación exacta de las escuelas, quiénes
eran los maestros, con qué fondos se sostenían, cuándo habían sido estab lecidas y
además, era necesario infonnarle cuáles eran las condiciones físicas en las que se
encontraban las aulas donde se impartí an las clases a los niños.
Para que los intendentes pudieran recabar esta información con mayor facilidad y
rapidez, procuraban reenviar estas peticiones a los subdelegados de los partidos que
7 Véase: Negrín Fajardo, Olegario. "La enseñanza de las primeras letra ilustradas en Hispanoamérica. Historiografía y Bibliografía" en Diana oto Arango, Miguel Ángel Puig-Samper y Luis arios Arboleda (Edit.) La Ilustración en América Colonial, Madrid, CS¡ -COLCIE lA , 1995, pp. 70-7 1; Tanck de Estrada, Dorothy. Pueblos de indios, 669 pp.; Y Tanck de Estrada, Dorothy. " a te llanizac ión, política
~ escuelas de indios ... ", pp . 70 1-74 1 AHESLP, Intendencia, 1792- 1795, exp. 22 : Correspondencia entre autoridades civiles obre las el número
de escuelas establecidas para enseñar en castellano a los naturales a leer y escribir, además de conocer las condiciones en que se encontraban éstas . San Luis Potosí, 1796; véase también: AHE LP, Intendencia , 1810-1 811.2, exp. 7: Correspondencia entre autoridades civi les sobre el envío de una copia del decreto sobre el establecimiento de escuelas de primeras letras. an Luis Potosí, 18 11 .
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comprendían la Intendencia con la orden directa de pedirles a los curas párrocos su ayuda
para cumplir con semejante enmienda. Tal fue el ca o donde los curas párrocos D. Juan
de Bustamante y D . Tomás Vargas de Guadalcazar o el Diego Bear y Mi er d I Valle del
Armadillo en el año de 18129, quienes en respuesta a la súplica dellntendente Acevedo ,
enviaron la información detallada de las escuelas de primeras letras que e encontraban
en sus localidades al subdelegado interino del partido de Guadalcazar. Dicha informac ión
fue tan detallada, que permite no únicamente conocer cómo funcionaban las escuelas que
se encontraban dentro de su área parroquial , sino que al ser leídos se pueden percibir las
condiciones económicas y sociales de las comunidades en donde laboraban
ministerialmente. Esto resulta importante, ya que gracias a la infomlación recopilada por
los curas párrocos, el gobiemo podía conocer mejor la situación de vida - social, política
y económica- de todos aquellos lugares que eran de dificil acceso, así como tambi én, de
cuáles eran las condiciones fisicas y geográficas de ellas .
La participación de los curas no consistía únicamente en informar a las
autoridades civiles sobre las escuelas y su funcionamiento, hubo qui én se encargó de
escoger personalmente a los facultados de instruir a los niños en su educac ión básica y de
evaluar y supervisar su trabajo. Así en Tamazunchale1o
, el cura pán'oco D . Lucas Antonio
Rosado fue quien nombró para la enseñanza de los niños a D . Rafael Gil Barragán, qui ' n
9 AHESLP, Intendencia, 18 12, exp. 5: Correspondencia entre autoridades civiles y el c lero sobre el informe requerido para conocer las condiciones de las escuelas de primeras letras en la provincia potos ina. an Luis Potosí, 1812 ; véase también el caso de Tinguistengo que inspiró a los curas de Armadi llo y Guadalcaza r: AHESLP, Intendencia , 18 10-18 11.3, exp. 22: Correspondencia entre autoridade civile y e l clero sobre el estado que guarda la educación y las medidas que debieran de tomarse en cuenta para mejorarla ya que el cura de Tianguistengo hizo lo propio en su localidad . Con esto e pretende e busquen ta mbién mejoras y se
propongan soluciones. México, 1811 . 10 AG ,Intendencia, vol. 30, exp. 12, o. 1057 : Representación del cw-a de Valles sobre el nombramiento
de escuelas de primeras letras . San Lui s Potosí , 1804.
9
se mantuvo en su cargo, el cual desempeñó con plena satisfacción y aprobación del cura,
durante dos años.11
También jugó un papel importante en la fundac ión de las e cuelas de primeras
letras yen las que tuvieron que ver más directamente los curas párrocos, [u al momento
de "la paga del maestro". Según la real cédula expedida el 6 de abril de 169 1, ésta tenía
que ser financiada con los fondos de las cajas de comunidad de los pueblos indígenas,1 2
pero en algunos lugares como en Tierra ueva, Pozos, Coxcatl án, Río Verde, Ojo
Caliente y Salinas del Peñón Blanco,13 la situación económica no permití a que el sueldo
del maestro fuera sufragado con los fondos de la comunidad, razó n por la cual, alguno
de los curas párrocos solían aportar de su propio bolsillo -ya sea parte o e l monto total-
del salario del preceptor, incluso, en algunas ocasiones, hubo qui n hic iera aportaciones
también para la compra de materi ales esco lares para qu los niño pud ieran trabajar
durante la jornada de estudio . Este fue el caso de las contribuciones hechas por los curas
párrocos Manuel Camiña en T ierra Nueva l4, Tomás Vargas en Guadalcazar
l 5 o el d
11 De acuerdo con Taylor, la relación entre los maestros rurales y los curas párrocos era tan buena que "el maestro era un dependiente del sacerdote y operaba bajo su supervisión y patrocinio", véase: William B.
Taylor. Ministros de lo sagrado, p. 494. 12 Tanck de Estrada, Dorothy. "Castellanización, política y escuelas de indios . . . " , pp. 704 ; véase también el expediente: AHESLP, Intendencia , 1820.3, exp. 6: Sobre que del fondo de comunidad se tomen 300 pesos para la dotación de un maestro de primeras letra . San Luis Potosí , 1820; y María Isabel Monroy Castillo y Tomás Calvillo Unna. Breve historia de a/1 Luis Po tosí, p. 137. \3 AHESLP, Intendencia , 18 10- 18 11.2, exp. 7: orrespondencia entre autoridades civiles sobre el envío de una copia del decreto sobre el establecimiento de escuelas de primera letras. an Luis Potosí, 18 11 ; AHESLP, Intendencia, 1820.9, exp. 11 : Sobre arreglo de dotación de escuelas de pri meras letTas y enseñanza pública. San Luis Potosí, 1820; AHE LP, Intendencia, 1820.9, exp. 20 : El ayun tamiento de Río Verde consul ta de qué fondos se di spone para pagar el presupuesto de una escuela. an Luis Potosí, 1820; AHESLP, Intendencia, 182 1.1 , exp. 8: La situación económica de Sa linas de Peñón Blanco no permite e l pago del salario del maestro de escuela de primeras letras, por lo que se pide ayuda o se ve rán en la necesidad de suspender la educación en la comunidad . alinas del Peñón Blanco, 1820. 14 AHESLP, Intendencia, 1820.9, exp. 11: Sobre arreglo d dotac ión de escuelas de primeras letras y
enseñanza pública . San Luis Potos í, 1820. 15 AHESLP, Intendencia, 18 12, exp. S: orrespondencia entre autoridades civi les y e l c lero s bre e l informe requerido para conocer las condiciones de las e cuelas de primeras letras en la pr vincia potosi na.
San Luis Potosí , 18 12.
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Diego Bear y Mier en Arrnadillo. 16 Estos dos últimos curas, se atrevieron tambi én a
proponer al gobierno el aumento del impuesto de eis reales por año en las fanegas de
maíz cosechadas en cada localidad, para que de ahí se obtuvieran los fondo nece ano
para cubrir los gastos de sueldos de maestros y hacer las compras de lo material es
didácticos como libros, plumas y papel para que los niños cuyos padres no pudieran
sufragar estos gastos, tuvieran acceso a ellos sin ningún problema. La administración de
los dineros recabados con este nuevo impuesto , debía de estar bajo el cargo de una junta
compuesta y presidida por el propio párroco, el subdelegado d I partido y el síndico
procurador.
En cuanto a la metodología educativa que era impartida en la época, los curas
párrocos también tuvieron su opinión y participación al respecto , ya que a pesar de que la
educación estaba a cargo del gobierno y bajo la responsabilidad del pr ceptor, el cura se
sentía con el compromiso de intervenir cuando consideraba que algo no era adecuado.17
Un ejemplo de esto lo observamos en Guadalcazar, cuando el cura de la localidad
manifestó no estar de acuerdo con los azotes que eran impartidos a los niños cuando no
aprendían de manera correcta las enseñanzas del maestro o cuando tenían un mal
comportamiento. Creían que estos castigos debían ser eliminados y motivaban a los
maestros para enseñarles a los niños a conducirse apropiadamente con "honra, honor y
crédito". Tampoco coincidían con la idea de qu los niños debían únicamente de
memorizar las cosas que les enseñaban en clase, razón por la cual, el cura proponía que el
16 AHESLP, Intendencia , 18 12, exp. 5: Correspondencia entre autoridades civiles y e l clero sobre el informe requerido para conocer las condiciones de las escuelas de primeras le!Tas en la provincia pO! sina .
San Luis Potosí , 18 12 17 Conforme al trabajo de Taylor " los mae tros bien podían saber leer y esc ribir, pero muy pocos habrían logrado el grado de licenciado que detentaba la mayoría de los curas párrocos", tal vez por ello e sentían con mayor libertad de opinar y eliminar lo que no les parecía lo más correcto. Véa e: WiIliam B. Taylor.
Ministros de lo sagrado. p. 494 .
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maestro explicara la cosas de manera que fu eran más entendib les para los niños y éstos,
en lugar de aprenderlas de memoria, las razonaran . 18
Los últimos estudios reali zados sobre el tema de la educación nos muestran que,
contrariamente a lo que se pensaba, una buena parte del clero fu e mucho más progres i ta
en el tema de la educación que otros autores ilustrados que fu eron muy progresi tas n
otros asuntos. Así José Santos Puerto afinnó que las ideas del religioso Sarmiento fueron
mucho más avanzadas que las de Pablo de Olavid .19
La documentación indica que la relación entre los curas pán'ocos y los maestros
de escuelas de primeras letras en su mayoría fue buena. Únicamente encontramos un caso
en Tamazunchale donde el subdelegado consideró que el antiguo maestro no era la
persona más apta para desempeñar tal cargo y lo destituyó nombrando a un nuevo
sucesor, semejante decisión molestó grandement al cura del pueblo . Éste se encarg' de
levantar una queja formal en contra del subdelegado ante el intendente, ya que por haber
sido él, quien por más de nueve años se había encargado "del arreglo e piritual de los
maestros", no se le había consultado tal decisión y se le estaba ignorando su autoridad.
De acuerdo con los documentos, el nuevo maestro expresó que dicho cura se ded icó en el
futuro a molestarle todos los días en búsqueda de su renuncia, la cual , obviamente
consiguió con el paso del tiempo por su peso moral dentro de la comunidad que e
encontraba ministrando.2o
18 AHESLP, Intendencia, 18 12, exp. 5: Correspondencia entre autoridades civi les y el clero sobre el informe requerido para conocer las condiciones de las escuelas de primeras letras en la provincia potosina.
San Luis Potosí, 18 12. 19 José Santos Puerto. Martín Sarmiento: Jlustración, educa ión y utopía en la España del siglo XVIIf sin lugar, Instituto de Estudios Gallegos Pad re Sarmiento-Fundación Pedro Barr ié de la Maza, 2002 . 20 AG , Intendencia , vol. 30, exp . 12, o. 1057: Representac ión del cura de Valles sobre el nombramiento
de escuelas de primeras letras. San Luis Potosí, 1804 .
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3. Los curas párrocos y su papel en la "salud " y el "bienestar" de la población
Como se mencionó anterionnente, cuando los Barbones a cendieron al trono
español, propusieron como obj etivo de su gobierno la centralización del poder y la
modernización de todos sus territorios de Europa y Ultramar. Dentro de este proc so
modernizador sobresalen los progresos que se enfocaron haci a el ámbito urbano y la
política de salud pública. En este tercer punto, nos centraremos en aquello que tuvicron
que ver de una manera más directa, con la participación de los curas párrocos para
alcanzar estas metas: la construcción de los cementerios fuera de los poblados y la
administración de las vacunas para evitar la propagación de epidemias a consecuencia de
la viruela.
Durante la colonia existía la costumbre de enterrar a los muertos dentro de los
templos, en algunas ocasiones, incluso la iglesia, se comprometía con los pobladores para
que hicieran uso de los templos para dar sepultura -sin costo alguno- a todos aquellos que
ayudaran en la construcción del santuario religioso. Este fue el caso de los habitantes de
Río Verde cuando en el año de 1753, el Fray Juan de Uribe, se comprometió con los
habitantes de la región a perdonarles a todos los que estaban trabajando en la
construcción del templo "todas las obenciones que tuvieran que pagar a La parroquia"
así como de los estipendios causados por los "entierro. Los casamientos y Los
bautismos". 21
En 1814 el intendente interino D. Josef Rui z de Aguirre escribió al Brigadier D.
Manuel Maria de Torres, para exponerle a nombre del cura de la ciudad de San Luis
Potosí que a D . Vicente Longoria, presbítero de la ciudad era necesario enterrarl e dentro
21 AHE LP, Intendencia, 1820, exp. 1: orrespondencia entre e l Regidor del Ayuntamiento onstituc ional del pueblo de Río Verde y el Intendente de San Luis Potosí sobre los cobros excesivos del cura para la
sepultura de los difuntos en la Igles ia . Río Verde, 1820.
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del templo, ya que ni en la ciudad ni en sus alrededores existía ningún camposanto como
los que existían en Cádiz u otras ciudades.22 Esta carta es interesante, ya que según el
cura que iba a proceder a dar la sepultura del cadáver de D. Vicente Longoria dec idió
recurrir al intendente para notificarle que el Brigadier de Torres no había estado de
acuerdo con la sepultura de los cuerpos en las iglesias y que el entierro d su cuerpo
había sido pospuesto por dicha razón . Esta situación estaba provocando escándalos en la
población por tener el cuerpo expuesto, el cura dijo al intendente que no se contaba con
otro lugar para darle sepultura y era necesario tomar una decisión inmediata al respecto .
No obstante, dicho párroco consideró también , que era importante darle continuidad a las
ideas modernizadoras del Brigadier y que había que construir los lugare apropiados para
la sepultura de los cuerpos. Sin embargo, no fue sino hasta 1822 cuando se decretó como
proyecto de progreso y medida sanitaria, la construcción de cementerios, quedando "los
enterramientos en las Iglesias dentro de los pueblo ,,?3 D. Telésforo Villaseñor qui en
fuera Secretario del Ayuntami ento Constitucional de Santa María del Río en 1822,
certificó haber recibido un oficio dirigido por la Excelentísima Diputación el 26 de mayo
de 1822, en el que se ordenaba no se hicieran más entierros dentro de los templos
religiosos ni cerca de los lugares poblados.
En este asunto podemos percibir la preocupación por la salud pública, y como
muestra más clara de ello se observa que los Procuradores Síndicos de la ciudad de Río
22 AHESLP, Intendencia, 1814.1 , exp. 17: COITesponelencia entre autoridades c iviles ele porqué es necesa rio dar sepultura a un presbítero en la iglesia a falta de un camposanto . San Luis Potosí, 18 14. 23 D . Telés foro Villaseñor quien fuera Secretario e1el yuntamiento onstitucional de Santa María del Río en 1822, certificó haber recibido un oficio dirigido por la Exce lentí sima Diputación e l 26 de mayo de 1822, en el que se ordenaba no se hicieran más entierros dentro de los templos religiosos ni cerca de lo lugares poblados. Véase: AHESLP, Intendencia, 1820- 1823.2, exp. 4 : C rre pondencia entre e l ec retario del Ayuntamiento Constitucional del Pueblo de Santa María del Río y Manuel Camjña sobre no lleva r a cabo más entierros dentro de la Iglesia. anta María del Río, an ico lás de Tierra lleva y Va ll e de an
Francisco, 1822 .
94
Verde pidieron a las autoridades civiles como representantes de la población, "la
realización de nuestros deseos de que se construya un cementerio a extramuros del
pueblo, para que no se profane la casa del Se/íor, con el bárbaro e intolerable abuso de
enterrar en ella los cadáveres, en perjuicio de la salud pública y contra lo mandado
" 24 expresamente .
Durante el siglo XVIII, en el campo de la m dicina, uno de los descubrimi entos
con mayor importancia fue el de la vacuna para atacar la viruela. Dicha enfermedad
estaba ocasionando grandes estragos a ni vel demográfico causando fu erte pérdida en los
rubros político y económico dentro de la administración del imperio e pañol.
Para el afio de 1814, el pueblo de Venado se vio afectado por un nuevo brote de
viruela. En una carta dirigida al Intendente de an Luis Potosí , Manuel Jac into Accedo,
por algunos de los vecinos del pueblo, se obs rva que la situación era dificil , ya que había
mucha gente enfenna y otro tanto ya había fallecido, pero además, que el ayuntamiento
no contaba "con fondos arbitrios ni recursos para socorrer a los dolientes más
infelices". 25 Hasta el momento , habían subsistido con la ayuda que había sido provi sta
por una junta organizada y presidida por el cura párroco de la localidad y algunos de los
vecinos más pudientes y distinguidos, los cuales habían aportado hasta el momento dos
mil pesos para que se reconstru yeran algunas de las casas que habían tenido qu ser
quemadas para evitar los contagios, así como de maíz, leña, frazadas , alimentos y algunas
medicinas para que los sobrevivientes pudieran continuar con sus vidas.
24 AHESLP, Intendencia, 1820, exp. 1: Correspondencia entre el Regidor de l Ayuntamiento on tituc ional del pueblo de Rio Verde y el Intendente de San Lui Potosí obre los cobros excesivos de l cura para la
sepultura de los difuntos en la Iglesia. Río Verde, 1 20. 25 AHESLP, Intendencia , 18 14.2, exp. 11: oticias que da el ayuntamiento de Venado allntcndente de an Luis Potosí sobre la epidemia que aqueja a la región, además de so licitar auxilio . Venado, 1 14 ; ver también: AHESLP, Intendencia, 18 14.1, exp. 5: Correspondencia del Intendente de San Luis Poto í donde facilita los fondos necesarios para socorrer a pobres enfermos epidemiados. an Lui s Potosí , 18 14 .
95
Cuando la vacuna fu e descubierta y aprobada, e l gobierno peninsul ar dec idió
enviar a América en 1804, una expedición con la medicina para tratar de rradicar los
problemas epidémicos a los que se estaba enfrentando la población de la época.26
La vacuna contra la vi ruela llegó a San Lu is Potosí el 5 de enero de 1805, y para
su propagación el gobierno s enfrentó a dos grand problemas: el primero , fu e la
dificultad para conseguir el fluido para inocular a la poblac ión y el segundo, las
reticencias de la población a aceptar la inoculación a la que ll amaban enf¡ rmedad
voluntaria. Aquí fue donde entró la labor de "convencimiento" de los curas párroc s para
que la población aceptara vacunarse y evitar que las pidemi as de virue la continuaran
arrasando con la vida de los pueblos.27
Cuando estos reportes ll egaban al Intendente, éste so lí a escribir al vlrr y para
notificarle lo que estaba oculTi endo en los territorios que estaban bajo su cargo, con la
finalidad de so licitar ayuda económica y para que les swninistraran los medicamentos
necesarios para solventar los problemas de la gente. En algunas otras ocasiones, era 1
virrey quien procuraba que los intendentes le mantuvi eran informado de cuántas dosis s
26 Ver los trabaj os de: Francisco Xavier Balmis. Prólogo y traducción caste ll ana del "Tratado hi lórico y práctico de la vacuna de J. L. Morcau ( 1803). Va lencia , 19 7, 36 pp.; Gonzalo Anes Álvarez. La corona y la América del siglo de las luces. Madrid, 1994, 185 pp.; Miguel E. Bustamante. "La Viruela en México, desde su origen hasta su erradicación", en Emique Florescano y EIsa Ma lvido , ( omp.), El1sayos sobre la historia de las epidemias en México. Mexico, IMSS, 1982, pp. 40-67 .; María de los Ángeles C alatayud Arinero. Catálogo de las expediciones y viajes científi os espaiioles {( A mérica y Filipinas (. iglos XVIII y XIX). Madrid, 1984, 433 pp.; Gonzalo Díaz de Yrao\a. La vuelta al mundo de la expedición de la vacuna . (/803-1810). Madrid, Escuela de Estudios Hispanoamericanos, .S.l. ., 2003, 132 pp.; Y Susana María Ramírez Martín. La salud del Imperio: la Real expedición filantrópica de la vacuna . España, 2002 . 27 Irisarri Aguirre, Ana. "La \'~ c unac i ó n de la " iruela en la pro inc ia de San Luis Poto í tras la Expedición de Balmis: \ 805- 182\" cn: Fronteras de la Historia, (Vo l. 12, Bogotá, 2007 , pp. 197-226); véase también: AHESLP, Intendencia \ 04. \ , exp. 6: informe sobre la e 'pedic ión de la vacuna en an Luis Potosí, firmada por el teniente lctr;:¡do, José Ignacio Vélez y dirigida a l vi!Tey. Sa n Luis Po to í, 1805; AHSLP, Intendencia, 18 10-18 J 1.3, exp. 2: Estado histórico-práctico de los principa les result ados y fenómenos que han ofrec ido a la observación del médico de ciudad D. Anastasio Rui z de Bustama nle los ensayos de vacunac ión que por ord ' n del señor intende nte D. Manucl Jac into de Acevedo, ha practi cado el cirujano D . Francisco Guardiola con el obj eto de examinar la calidad del pus, que a soli c itud de este último fac ultativo ha sido tran portado el hi];:¡s desde Vall adolid. an ui s Potosí, 18 10.
96
requerían en sus territorios para que se procurara el sumini tro en cuan to fu era posible,
ejemplo de ello lo vemos en e l siguiente requerimiento escrito por e l vi rrey Del Venadito
al intendente potosino el 19 de abri I de 1820:
"Señor Intendente de la Prov incia de San Lu is Potosí . Deseoso de proporcionar a lo habitan te de este Reino , lo bene fi cios que se ex perimentan con la propagación de la vacuna , prevengo a V. . que a la mayor brevedad me diga que dosis necesita de este precioso pus para que éste bi en se haga extensi vo en toda esta provincia de su mando , para que en su vista pueda di sponer su pronta remisión .
Dios guarde a V .S. muchos años. Méx ico 19 de abri I de 1820
Del Venad ito .,,28
Los curas párrocos participaro n en este proces , cuando a ellos se les encargaba el
cuidado del pus que era traílla desde la Ciudad de éx ico . Las dosis proporcionadas a
cada intendencia a veces resultaban ser insuficientes, en el caso de San Luis Poto í, al
menos en el afio de 1820, el intendente se quejaba de que aún con tanto esfu erzo por
surtir la vacuna hasta los lugares más recónditos, a veces "por la ignorancia del pueblo,
que no conoce, y por lo mislll o no aprecia los beneficios efectivos de la vacuna,,29 é ta no
era aprovechada por la gente y además era desperdi c iada. A consecuencIa de ello, el
intendente propuso que para conseguir más fluido , se le recompensara a los vac unados
que volvieran con pústulas variolosas, con una gratificac ión de dos rea le . E l dinero que
se emplearía para cubrir este gasto sería tomado de los Fondos de Propios y Arbitrios o
de los Bienes de Comunidad. Dicha medida, dijo el intendente, no iba a ser necesaria en
toda la intendencia, ya que se había procurado "excitar el celo" d los curas párrocos para
que motivaran a la gente durante los sermones o sus visit as pas torales para que acudieran
28 AHSLP, Intendencia, 1820.9, cxp . 6: Sección de Gobernacióll exped iente relativo a la vacunac ión en la
r.rovincia de San Lu is Potosí. an Luis Potosí, 1820. 9 AHSLP, Intendenc ia, 1820.9, cxp. 6: ecc ión de Gobernaci óll , expediente re lativo a la vacunac ión en la
provincia de San Lu is Potosí. San Luis Potosí , 1 20.
97
a vacunarse a los pórticos de las iglesias y así prevenir las enfenlledades y ev itar las
desgracias públicas. Las autoridades pusieron como ejemplo al cura Vicente d Vitoria
quien con su "agradable /1/ odo " ayudó a convencer a la población de una comunidad de
Río Verde,-y que hasta entonces se encontraba escéptica al medicamento-, de que se
vacunara para que quedaran libres del contagio de viruela.3o
4. Los curas párrocos como l/o/arios el/. lo "civil "
En las actividades cotidianas también tomaron parte activa los curas párrocos. En
el ámbito jurídico, participaron como albaceas, testi gos en procesos judiciales e inclusive,
hasta llegaron a actuar como representantes de la 1 y, al encargarse de reali zar los
inventarios de los bienes materiales de aquellas personas que habían fall ec ido y que no
habían dejado sus cosas en orden. A continuación veremos ejemplos de estos trabajos que
habían sido confiados a los curas párrocos como una muestra de confi anza y apoyo para
aquellos que los vieron más al lá de ser sólo sus interm di ari os con Dios.
Al morir doña Marí a Ignacia Guerrero quedó como a lbacea de sus bi ene el
Bachiller D . José Marcelo Ga rcía . Su trabajo consi lió en realizar primero, un inventario
de todo el caudal que poseía doña María para pres ntarlo ante el Juzgado de Bienes de
Difuntos para que después se pudiera proceder a su reparto, a cada uno de los testadores
de la difunta. Una vez reali zado este primer paso, I cura párroco debía de cumplir con la
voluntad de doña María 19nac ia, que consistía, en buscar a un hermanastro que se
encontraba en Manila y a qui én debía de entregársc le la herencia íntegra que le había
30 AHESLP, Intendencia 1819. 1, exp . 10: Correspondencia ent re el subde legado de Río Verde, José María de Cepeda yel intendente de an Luis Potosí sobre la res istenc ia de la gente a la vacuna . Río Verde, 18 19.
98
dejado su padre, y que por una cosa u otra, nunca había sido cumplida en vida por doña
María Ignacia.31
En otro caso, el 3 de octubre de 18 12, el cura párroco, Bachill er D. Manuel
Ignacio Ximenez Segura, envió al Juzgado de Bienes Difuntos la documentación
requerida para presentarse como albacea de D. Santiag alderón . n su calia de
presentación, el cura expuso que su trabajo como albacea di señar Calderón había
consistido en el cuidado y la admini stración de todos sus bienes materi ales y además,
declaraba, que para poder entregarlos a las legítimas herederas que viv ían en la iudad de
México, era necesario primero, recaudar un dinero que aún se le debía al difunto a
consecuencia de la renta de tabacos.32
En ambos casos, al cura párroco se le encomendó la tarea por parte de sus fi eles
de cumplir con su última voluntad, administrar sus bienes y ver que sus her deros los
recibiera sin ningún probl ma. o se especifica en ningún momento cuál haya sido la
razón para que se les encomendara a estos minist ros el e Dios con esta labor, pero se
presume que a quien se le encomienda semejante trabajo, no puede ser cua lqui er persona
si no que debe ser algui en en quien se confia , quien conoce sobre semejantes menesteres
y sobre todo , a quien se respeta por lo que representa.
En cuanto a su part icipac ión en los casos e ordcn judicial, en 1783 hubo un
hombre quien se vio en la necesidad de enviar una queja al Obispo de Michoacán en
contra de su propio párroco, ya que por replicar las acusaciones que su muj er estaba
levantando en su contra deb ido a su conducta de incc: y ma lo tratos su juic io no estaba
3 1 AHESLP, Intendencia 1790- 179 1, exp. l: Instrucción de dI 11:1 • lalia Ignacia Guerrero para que el Bachiller D . José Marcelo Garcí J , como su albacea se hic iera cJ r~o de cumplir con su última vo luntad . San
Luis Potosí , 1799. 32 AHESLP, Inte ndencia 18 12, exp. 13: El cura párroco del Rea l de los Pozos, manifiesta la disposición
testamentaria de D . Santiago Pedro Calderón . Rea l de los Pozos. \ 8 \ 2.
'-
99
siendo imparcial. Esto oculTió en el Barrio de San cbas liún en el año de 1783, cuando
Rita Gertrudis Vera Colunga denunció a su marido, .losé Dionisia Rodríguez, por haber
cometido incesto en repetidas ocasiones y además de h ~bcr sido víctima de maltrato y
lujuria. Durante el proceso criminal , dicha mujer pre cntó ~ I propio cura de San ebasti án
como testigo de los abusos cometidos por su marido, sin cmbargo el acusado declaró que
al cura no le constan tal es hechos y únicamente estaba solapando las fantasías de su
mujer, motivo por el cual el juicio no podría celebrarse imparcialm nte, por estar
influenciado por dicho cura.33
5. Los curas párrocos y la" economía " de los habitan l 's de sus comunidades
Durante la época de la Intendencia, los curas p ~IITOCOS tambi én intervini eron en la
economía local. Su interés se mostró en la admi l1 :st r:lci' n de las cofradías cuando
proponían nuevos proyectos económicos con los quc se bcnefi ciaba a la población. Las
cofradías eran congregacIones o herl11 ~ nd ad es laicas que actuaban dentro de la iglesia
católica y que tenían como finalid ad proveer "s (, (~II ,.id{/d olectiva al/te casos de
invalidez, enfermedad, muerte, falta de empleo, etcétero . mediante unas pensiones o
subsidios,,34 , y que se ded icaban principalmente a ot r~ ';lr crédito financi eros que fueron
fundamentales para el desarrollo económi co de las reglones dónde se encontraban
establecidas.3s
33 AHMCR, Diocesano, Sección-Justicia , Si l' o XV III. Se rie-P I"< 'l'SII" Cr iminales, Sub se rie-Inccstos, aja 837, 1700-1792, Fólder 26: P roceso en con lra de José Dionisio l:od,l:,: ucz por haber cometido incesto y sevicia y malos tratos contra su mujer. Barrio dc an Sebastián, ellll o .1 ju l io dc 1783 . 34 Las cofradías se fundab an únicamente si contaban con licenc ia rea 1 y esto se encontraba estipulado en la Ley XXV del libro J, título 4° de la RecopilaciólI de IlIdias . Lui , a Zah illo l'cflafort. Ig lesia y so iedad en
M éxico, p. 90. 35 Véanse los trabajos de Dagm :l r Bechtloff: 1.11.1' C(!(mdías de ,'.' 'c!wlI("cill dllran te la época de la co loll ia . Lo religión y su relacióll pol ílica y económica en l/ lIa soci l!dl, .t ill( (' /,clIl /lIra l . México, ~ 1 o legio de Michoacán, 1996, 405 pp. Y " f a formació n le una o.; oe iedad il"'I' I!l1Ira l' la s co fradía en el Michoacán colonial" En Historia M exican ll, vol. XLIll , 11 ': 111. 2 ( 70), octuh . " 'lhr" 1993, pp. 25 1-264
"
100
Las cofradías se fundaban al momento de reci b ir alou lla donación por parte de sus
miembros más pudientes, algún caci que, un capitán n de l cu ra de la comunidad.36
Su
patrimonio "es taba representado por ovejas, reses )' h/leyes; estancias; embradíos de
trigo, cebada y turmas (papas); algunos instrumentos CO III O el barretón, el hacha, apero
para arar y arados de cuerda; cero para las ve! IS . e illlágenes del santo y sus
ornamentos, incluidas cajas para gU(ff"{larlos,,?7 Dicho heredad estaba bajo el cargo de l
mayordomo, pero los cofrades eran los que se encargaba n d I cuidado de los animales, de
la agricultura y de la industria que era produc ida den t ro de os l rrenos pertenecientes a
las cofradías .38
Como importantes centros de in gresos económ i 'OS , las cofradías debían e tar bajo
supervisión dual de la IgI sia y la orona, debían s 'r c\irit'id as por miembros elegido
conforme a lo establecido en las consti tuciones parti cuhres " debían estar aprobadas por
funcionarios locales y jefes ecles iústi cos.39 De nim.!, lIll :.l manera se permitía la
participación en forma directa de los curas párrocos lkn ro el b admini stración de estas
instituciones, su trabajo cOllsistía ún icamente en asi st i·· ':' supervisa r las elecc ione de los
mayordomos quienes serían los encar~' ado s de " la c fflerci(/ Ii::oción de los productos de
la lana, ovejas, ganado y los cultivos; cobro a los IlI iclllhros y alférez de las cuotas
estipuladas; la responsabilidad de o/",':!, oni: o/" y SUPt n iS(1I '(/ 5 /IIi 'as y fi estas para la
veneración del santo patrono; la CUSlu lia de la imagell y ( L' lodos sus ornamentos,,40 . Un
ejemplo de lo ello lo encontramos e l l o \cdad cuandu .'e llo ti fi ca al Intendente de an
36 Véase a: María Lucía Sotomayor. Cr>' ,dí({\", cll ciques ,. 1/ '.1"11 ' )/110 '. Reconstruc ión social y reorganización política en los pdeblos de il/ I, siglfi .\'1'''1 . Du, '" l., •. !\) olombiano de Antropología e Historia, 2004, p. ISI ; y Willi a m B. Tayl Il J. \ Iin i.1 1m.\' de lo ~ r, "·/I/IJ. p. ·5 3. 37 María Lucía Sotomayor. Cofradías, cacir, s y I/ ¡"-\urdomos. l . l· '. 38 AHESLP, Intendencia, 18 19.1, exp. 6: V3!. ,; vecino ocun'C ll " l' !,'!l0 e \es recoja el telTcno que se les repartió, perteneciente a la cofradía de la .' !:dad. Sa n Luis Pr , ,; 1, I C) .
39 William B. Taylor. Ministros de lo sagroll<¡. p . . ~ . 40 María Lucía SotomayoL Cofradías, cacir¡ /(, 's y II/ ayordomos, ;1. I 1(1.
101
Luis Potosí, D. Manuel Jacinto de Acevedo, que se habrian de celebrar Elecciones de los
Mayordomos de las Cofradías fundad as en la congregación de la Soledad el día 28 de
enero de 1821 , en punto de las nueve de la mañana, y que era necesario, que part icipara y
presidiera dicha junta porque el cura de la localidad responsable de las elecciones se
encontraba ausente.4 1
En el caso de San Luis Potosí no se encontró información sufi ciente para
establecer más claramente la participación de los párrocos dentro de las cofradías. No
obstante, autores corno Taylor, Zahino Peñafort, Bechtloff y Sotomayor sugieren que al
menos en las cofradías de México, Guadalajara, Michoacán y Boyacá en olomb ia, los
curas párrocos sí tuvieron una participación muy activa dentro de ellas, y a pesar de que
su establecimiento y fundación era para favorecer la situación económica y religiosa de
sus integrantes, los curas párrocos ponían espec ial atención en sus ac ti vidades
económicas por ser una de sus principales fuentes de ingresos.
Otra actividad en la que se vieron envueltos los curas párrocos fue la promoc ión
de la agricultura como medio de vida para los indios que habitaban las regiones donde
ésta, no había sido llevada a cabo por no saber cómo cultivarla y por falta de los medios
necesarios para llevarla a cabo; un paradigma de ello lo observarnos cuando el presbítero
Juan Inocente Pérez, en octubre del año de 1814 se presentó ante el cabildo pidiendo se le
concediere en propiedad un ojito de agua que no tenía dueño particular ni comunal, para
que la ti erra de la comunidad que representaba pudi era aprovecharl a, ya que por fa lta de
4\ AHESLP, Intendencia, 182 1.4, exp. 9: Solicitud para el Jefe Político de la apilal D. Manuel Jacinto de Acevedo, asista a las Elecciones de Mayordomos de las cofrad ías fu ndadas en Soledad . an Lu is Potosí,
182 1.
. '.
102
industria se encontraba inutilizada.42 El presbítero Pérez supo cómo debía pedir e tOJo
de agua que beneficiaria a la comunidad en general, ya que al momento de hacer su
solicitud, diplomáticamente sugirió que si se les concedía, él podría instruir a lo
habitantes del pueblo para sembrar y que pudieran cosechar, esto contribuiría a una mejor
vida para la comunidad y también podrían aportar los impuestos necesarios para cubrir su
cuota correspondiente, beneficiando las arcas del monarca. Obviamente la idea agradó a
los representantes del gobierno y el ojito de agua fue finalmente concedido al cura y al
pueblo que representaba.
Los Borbones pretendieron como estrategia de su gob ierno, centrali zar el Imperio
en un solo poder. Para ello se tuvieron que dirigir cambios tácticos en el gobiern
administrativo, político, y económico de su territorio. Una de las reformas implementadas
fue el dirigido a la Iglesia. Esto es importante ya que para poder t ner un contro l abso lut
del Imperio era necesario restringir la autoridad que el clero ej ercía, por tener un gran
peso dentro del territorio español.
Los cambios que sufrió el clero como institución , afectaron la economía y I s
privi legios personales y eclesiásticos a lo que tenían derecho los curas; sin embargo, ha
sido poco estudiado si dichas transfonnaciones afectaron o no al bajo clero, el cual,
ministraba en los pueblos de las diferentes provincias de las Int nd ncias de la Ll eva
España. Este trabajo ha tenido como objetivo conocer si las reformas borbónicas
alcanzaron a los curas párrocos de la provincia de San Lui s Potosí y si su papel e
influencia ante las comunidades donde trabajaban ministerialmente fueron o no limi tad s
confonne a lo establecido por las nuevas leyes de Estado.
42 AHESLP, Intendencia , 1814 .5, exp. 2: Solicitud del presbítero Juan Inocente Pérez, para extraer agua y
fomentar la agricu ltura, 18 14.
-- ----------------------------------------------------~
103
De acuerdo con lo revisado en los documentos de archivo, se encontró que al
menos en la provincia potosi na, el poder e influencia del clero se limitaron conforme a 10
requerido por los Borbones sólo en la teoría, ya que en la práctica, los curas párrocos
siguieron interviruendo en los asuntos políticos, económicos y sociales de los pu blo
donde se encontraban realizando su labor evangélica. Todo esto se debió n gran parte a
que el mismo gobierno se vio en la necesidad de requerir de la ayuda de los curas para
conocer lo que acontecía en cada uno de los pueblos, así como de la situación en que se
encontraban, al pedirles informes detallados de estas cosas. Por otro lado, los propios
curas párrocos consideraron necesaria su participación en estos rubros, debido a la falta
de voz y representación del propio pueblo ante las autoridades civil s, especi almente las
locales.
La documentación consultada nos revela que el deseo del Estado de " modernizar"
la sociedad hi zo que los párrocos no sólo mantuvieran su poder sino que incluso lo
incrementaran. El deseo de fundar escuelas, crear obras públicas e infraestructuras o
desarrollar ciertas medidas de salud pública hi zo poco menos que imprescindible el papel
del cura. Lo mismo ocurrió en las etapas constitucionales, ya que los sacerdotes fu eron un
elemento fundamental para organizar las elecciones, así pues el triunfo liberal de 18 12-
1814 Y 1820-1821 supuso un realce más que un menoscabo de la influencia de lo
párrocos.
104
CONCLUSIONES
A pnnclplOs del siglo XVIII una nueva dinastía tomó el control del eñorío
español. Al no tener ningún descendiente directo, el sucesor del rey Carlos II de Au tria
fue el Duque Felipe V de Borbón, quien llegó al trono tras una guerra de quince año.
Una vez en el poder, la administración borbónica decidió implementar un nuevo sistema
de gobierno que le pern1itiera centralizar y modernizar sus dominios tanto en Europa
como en América. Este nuevo sistema es conocido como el de las "refonnas borbónicas",
y se caracterizó por promover una reestructuración administrativa, política, económica,
militar y religiosa dentro de todos los territorios que comprendían el imperio .
Las refonnas que fueron dirigidas hacia la Iglesia, tuvieron como objetivo
primordial la limitación de su poder y la sustitución en los puestos de la administración
civil de todos los miembros del clero por que esto interfería con los ideale que tení a el
monarca por concentrar la autoridad únicamente en manos del Estado. La historiografia
ha demostrado que las refonnas borbónicas limitaron de una manera más fuerte el poder
del alto clero y provocaron un enfrentamiento entre la Iglesia y el Estado . in embarg ,
las cosas fueron muy diferentes entre el clero rural y las autoridades civi les, al men s
para el caso de la provincia potosina. Los documentos consultados nos indican que los
párrocos de las distintas regiones tuvieron un papel fundamenta l en la vida cotidiana de
sus localidades, e incluso, que el Estado se vio obligado a reculTir a ellos para poner en
marcha cie11as iniciativas del gobierno.
Los curas párrocos de la provincia potosina palticiparon activamente en el
desarrollo de sus comunidades, compartieron muchas de las ideas ilustradas del momento
• I
105
y de hecho, muchos de ellos fueron los principales impulsores de ciertos "avances" en u
poblaciones. Su participación en las actividades cotidianas tuvo que ver en algun s ca os
con la educación, la salud y el bienestar público de los feligreses la economía y la vida
política de la región donde se encontraban ministrando.
El programa de gobiemo centralista y modemizador que trató de implantar el
gobiemo borbónico en todos sus territorios, hizo que el Estado nece itara del clero ,
especialmente de los párrocos de los pueblos alejados del centro del virreinato. Es dccir,
que durante estos años además de realizar las labores "civi les" que habían desempeñado
con anterioridad reali zaron otras distintas y propias de la mentalidad ilustrada. De las
primeras se destaca la labor del cura párroco como notario civil, ya que en algun s
pueblos, los curas párrocos a veces eran los únicos letrados y a ellos se acudía cuando era
necesario realizar los inventarios de bienes de aquellas personas que habían fallecido .
Éstos eran un requisito necesario para que los testados pudieran acceder a u her ncia;
otras veces, cuando quedaban como albaceas de un difunto , se encargaban de buscar a los
herederos para entregarles los bienes materiales que les habían sido heredado ; hubo
quienes se encargaron también de recolectar los pagos de las deudas o de pagarlas l era
necesano, de las personas que habían fallecido y que habían pedido que el cura les
representase legalmente. Finalmente, los curas párrocos participaron como "abogados" de
sus feligreses cuando les representaban para pelear una herencia o cuando eran
maltratados por una autoridad civil.
Durante el siglo XVIII el Estado ordenó que se fundaran escuelas de primeras
letras en todas las poblaciones de indios y españoles con el fin de que apr ndi eran el
español y a leer y escribir. Donde ya existían se debían mantener con un profesor de
106
calidad y con los materiales necesarios. Los curas fueron los encargado de informar la
situación en que se encontraban y de las necesidades que tenían; proponer recurso para
pagar al maestro y el material didáctico ; escoger al profesor adecuado para el cargo,
supervisar la enseñanza impartida, etc . Incluso, en algunas ocasiones ll egaron a co lab rar
con el pago del maestro.
En algunas otras regiones, hubo quienes se manifestaron de acuerdo con las idea
de los ilustrados de crear cementerios a las afueras de las ciudades, -tomando como
ejemplo lo que se había hecho en grandes ciudades como Cádiz- . Con esto querían ev itar
que las iglesias estuvieran sobrepobladas con cadáveres, sobre todo , en tiemp s de
epidemias o desastres naturales, y así impedir 1 s problemas de sa lud pública que
pudiesen traer como consecuencia malos olores que a su vez atraían a los an imales para
rondar los cuerpos, los cuales podrían ocasionar nuevos brotes de infecc ión . Además todo
esto influiría negativamente en la economía de las distintas localidades.
Por otro lado, los curas párrocos de todos los pueblos, e taban encargado de
levantar los censos de sus curatos, de informar al Estado de los resultados obtenido cn
ellos y, además, de supervisar personalmente que las elecciones parroquiales para las
Cortes se llevaran conforme a lo establecido en la Constitución. De acuerdo a los
documentos revisados en archivo, además de celebrar la misa, cantar el Te Deum y dar un
discurso sobre la importancia de las elecciones, algunos de los curas párroco se vier n
envueltos en las propias votaciones. Algunos de ellos fueron elegidos como prc identes o
secretarios de mesa encargados de entregar los votos electores, en otros ca os, algunos
curas resultaban electos, -con un gran número de votos-, para representar a los pueblo en
las Cortes. Esto indica que los curas párrocos además de contar con la confi anza del
- I
l07
gobierno para supervIsar las elecciones, también contaban con la confianza de los
electores para que les representase ante ellos .
Durante la investigación, se observó que tanto los intelectual como las
autoridades civiles sabían que la mejor forma de "convencer" a la población de la utilidad
de ciertas innovaciones, eran los propios curas párrocos· ya que ellos eran visto , - n la
mayoría de los pueblos-, no sólo como los encargados de enseñarles I camino hacia
Dios, sino como aquel padre protector que si les procuraba el cielo , les procuraría
también su bienestar físico, económico y social. Pmeba de ello se encontró cuando e les
pidió a los curas que se encargaran de promover la vacuna en contra de la viruela en sus
sermones y en sus visitas pastorales a los parroquianos que vivían en sus curatos;
acompañar a los niños que portaban el pus en sus cuerpos para compartir la vacuna con
los feligreses de otra región ; cuidar y almacenar el pus cuando era enviado desde Méx ico
y no era portado por un ser humano; así como de hablar con todas las familias que no
estaban de acuerdo con este nuevo método de prevención y que se oponían a él, para
evitar el contagio de la viruela y detener las epidemias que afectaban a la poblaci ' n no
solo en la salud pública, sino también en lo social y lo económico.
De igual manera, los párrocos jugaron un papel muy importante dentro de su
comunidades cuando participaban activamente en su economía. Al gunos curas se
mostraron preocupados por que sus feligreses aprendieran a cultivar sus ti erras para que
de ahí se sustentaran y mantuvieran a sus familias, promoviendo a la vez el pago de los
impuestos respectivos, para que el gobierno les ayudase con lo necesario para la
producción agrícola. Su participación - aunque de manera más indirecta- tambi én sc vio
reflejada en las cofradías. Éstas estaban encargadas de proveer ayuda económica a sus
- ,
;
10
miembros en casos de invalidez, muerte, falta de empleo, etc ., y para ello contaban con
bienes materiales, efectivo, ganado y cultivos, los cuales se encontraban bajo el resguardo
de tres llaves y una de ellas pertenecía al cura, quien además supervi saba que t do
marchara adecuadamente y en beneficio de todos aquellos que componían la cofradía.
Al principio, cuando se puso en marcha el Plan de Intendencias, los reform ad re
borbónicos propusieron el cambio de la administración gubernamental ; con ello e
originó la creación de nuevos puestos políticos, tal fue el caso de los intendente, 10
subdelegados y los tenientes letrados. De acuerdo con la historiografía esto supuso un
problema para el clero, ya que los nuevos funcionarios de gobi erno vendrían a
desempeñar toda clase de actividades políticas, económicas y social s que hasta ese
momento, habían estado únicamente bajo su responsabilidad. Sin embargo, en los
documentos de archivo se encontró que los conflictos que se produj eron entre las
autoridades civiles y el bajo clero en la provincia potosina durante la época de la
Intendencia, fueron muy esporádicos, por que los problemas que se presentaron entre
ellos tuvieron que ver más con conflictos de intereses que por cuestiones ideológica.
Dichas pugnas tenían que ver con el abuso de autoridad civil o eclesiástica, como fu e el
del trabajo obligado a los naturales y el del maltrato físico de los pobl adores. stas
actividades tenían un trasfondo económico y cuando alguna de las autoridades, civiles o
eclesiásticas, no actuaban conforme a lo debido, su contraparte se encargaba de
denunciarle.
Este trabajo es un pnmer esfuerzo por profundizar en las consecuencIa del
reformismo borbónico en un territorio concreto como la provincia polosina. En él
podemos afirmar que la influencia y el prestigio de los curas párroco no sufri eron
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menoscabo con las reformas borbónicas, ya que los curas mantuvieron el papel de ser
portavoces de sus localidades, ya que al menos en sus acusaciones en contra de la
autoridades civiles, se observó que tenían mucha injerencia o cuando alguno de ello
fueron favorecidos en las elecciones constitucionales como representantes de su l ca lidad
era hecha por los propios feligreses. A través de este estudio de caso, e puede conocer
mejor las complejas relaciones Iglesia-Estado en los albores de la Independencia,
motivando a otros a profundizar en el estudio de ellas.
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Zahino Peñafort, Luisa. Iglesia y sociedad en Méxic0 1765-1800: tradición, reforma y reacciones. México, Universidad Nacional Autónoma de México/Instituto de Investigaciones Jurídicas, 1996,237 pp.
http ://www.e- Iocal.gob.mx/work/templates/enciclo/nayarit/mpios/ 180 12a. htm Fecha de consulta: 23 de Agosto de 2007 .
"
119
ANEXO
Algunos curas párrocos que ministraron en la provincia de San Luis Potosi durante las Reformas Borbónicas.
Nombre Cargo Lugar Barrio de San
Adriano Valdés Cienfuegos Bachiller Sebastián
Agustín Sánchez Bachiller San Luis Potosí Barrio de San
Anastasio Guardiola Bachiller Sebastián
Anastasio Hernández Bachiller Santa María del Río Barrio de San
Ángel Villegas Bachiller Sebastián
Antonio Caballero Presbítero San Luis de la Paz
Antonio Delgado Valle Bachiller Río Verde
Antonio Fernando Irragoiti Bachiller Río Verde
an Sebastián Agua del Antonio Hipólito Cura Venado
Bachi lIer Sacristán Rea l de an Pedro de Antonio Justo Roldán Mayor GuadaJcazar
Santa María de los Antonio Manuel Delgadillo Bachiller Ramos
Antonio Niño Subdiácono San Luis Potosí
Antonio Salinas Bachiller, cagellán Tierra Nueva
Bachiller, Sacristán Antonio Salinas Mayor Santa María del Río
Santiago o Villa de los Bernardino Pérez Osorio Cura Valles
Cayetano Val verde Reverendo Villa de los Valles
Cornelio Guerrero Presbítero Venado Barrio de San
Cresencio Puente Presbítero-Bachi Iler Sebastián
Cristóbal de Escobar y Llamas Cura Valle de San Francisco
Diego Bear y Mier Bachiller Armadillo
Diego Narciso Chávez Bachiller Villa de Valles
Fray- administrador de Domingo de la Cruz la Hacienda del Pozo San Luis Potosí
Domingo García de la Cuesta Bachiller San Luis de la Paz
Año
1791 1791
1791 1823
1791 1813 1820 1791
1807
179 1
1820 1815 1791
1791
1792 1813 1820
1820 1775 1812 1821
1800 1791
120
Barrio de San Francisco Sandoval Bachiller Sebasti án 179 1
Cura, Vicario y Juez Felipe María Arduengo Eclesiástico San Luis Potosí 1765 Fernando Coronel Cura San Luis de la Paz 1791
Cura y Juez Barrio de San Fernando Ortiz de Salinas Eclesiástico Sebastián 1776
Cura, Vicario y Juez Francisco Buenaventura Olivar Eclesiástico San Luis Potosí 1766 Francisco de Salazar Bachiller Cerro de San Pedro 1813
Valle de Santa Isabel Francisco Miguel Palau Capellán de Almadillo L791
Cura, Vicario y Juez Francisco Oliván Eclesiástico San Lu is Potosí 1765
de San Francisco y luego de Santa María
Higinio Vicente Martínez Morentín Presbítero del Río 1770
Cura, Vicario y Juez Río Verde y Villas del Ignacio Lambarri Eclesiástico Dulce nombre de Jesús L765
Bachiller-Teniente de Ignacio Maria Careaga Cura Valle de San Francisco 179 1 Ignacio Thomas Carranco Bachiller Valle de San Francisco 1791
Barrio de San Ignacio Valladares Bachiller Sebastián 1791 Isidoro Carranza Bachiller Río Verde 1820 Jerónimo José Alvárez Bachiller-Cura Cerro de San Pedro 179 1 José Anastasio Samano Bachiller San Luis Potosí 1813 José Antonio Baeza vicario el bachiller Cerro de San Pedro 179 1 José Antonio Becerra Bachiller Matehuala 1820
Bachiller, Cura y Juez Tancanhuitz Villa de José Antonio de la Lama Eclesi ástico Valles 1820 José Antonio Decea Bachiller-Cura San Lui s de la Paz 179 1
Barrio de San José Antonio Elcano Bachiller Sebastián 179 1
Tancanhuitz de Villa José Antonio Gómez Bachiller de Valles 182 1
Bachiller, Cura y Juez Real de San Pedro de José Antonio Montes Villavicencio Eclesiástico Guadalcazar 179 1 José Antonio Pérez Gonzalo Bachiller Valle de San Francisco 1791 J osé Antonio Vargas Cura Tlaxcalilla 18LO José Domingo Díaz de León Bachiller Charcas 1820
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• '1
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José Francisco Miranda
José Francisco Salazar
José Francisco de Zarazúa
José García Ramos
José Ignacio de Otaegui
José Ignacio Fernández de Llar y Barbontin
José Ignacio Lozano
José Ignacio Otaegui
José Jacinto de Bear y Mier
José Joaquín flores de Valdés
José Joaquín Zárate
José Marcelo García
José Marcelo García
José María Arduengo
José María Arroyo
José María Verástegui
J osé María Centeno
José María de Nava y Solano
José María Pérez Corcha
José María Semper
José María Vicuña
Bachiller Capellán del Colegio de Niñas de San Nicolás Obispo
Bachill er Capellán de la Casa de Recogidas
Bachiller
Bachill er-Teniente de Cura
Cura, Vicario y Juez Eclesiástico
Cura y juez eclesiástico
Bachiller, Vicario y Juez Eclesiástico
Bachiller
Bachiller Sacristán Mayor
Bachiller-Cura
Bachiller
Bachiller-Teniente de Cura
Cura
Sacrodiaconado
Bachiller-Cura
Bachi lIer-Capellán
Bachiller-Tenjente de Cura
Bachiller
Bachiller
Bachiller
Bachiller, Cura Coadjutor y Juez Eclesiástico
121
Barrio de an Sebastián 179 1
San Luis Potosí 179 \
Valle de Santa Isabel de Armadillo 179 1 Parroquia de San Diego del Bizcocho en el Valle de San Francisco 179 1
San Luis Potosí 1765
Valle de Santa Isabel de Armadillo 179 1
San Miguel de Mexquitic 179 1 Valle de San Francisco 179 1
Villa de San Felipe 1791 Barrio de San Sebasti án 179 1
Real de San Pedro de Guadalcazar 179 1
Barrio de an Sebastián 179 1 San Luis Potosí 1777 San Luis Potosí 1799 Valle de San Franc isco 1803
Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe 179 1
Marquesado del Xara l Valle de San Franci sco 179 1 Barrio de San Sebastián 179 1 Salinas 1814 Real de los Catorce 1814
San Luis de la paz 179 1
, ..
•
,-
José María Zarco
José Mariano Arduengo
José Mateo Braceras
José Santos Rayas
José Vicente Olvera
José Eusebio Sánchez de Bustamante
Juan A. Gutiérrez
Juan Ángel Nieto
Juan Bustamante
Juan de Uribe
Juan Francisco Agui lar
Juan Gervasio Quiroz
Juan Inocente Pérez
Juan José Román
Juan Luis de Echalecu
Juan Mariano Bocanegra
Juan Miguel Lozano de la Peña
Juan Osorio
Juan Osorio
Lázaro Boo y Quintana
Lorenzo Agustín de Azpeitia
Lorenzo Cayetano Gutiérrez de Coz
Bachiller
Bachiller
Bachiller
Cura
Cura y Juez Eclesiástico
Doctor-Teniente de Cura
Bachiller-Subdiácono y Medio, ordenado de capellanía
Bachiller-Capellán .
Bachiller-Capellán .
Bachiller
Bachiller-Vicario
Presbítero Cura y Juez Eclesiástico
Bachiller ordenado de capellanía
Presbítero
Bachiller-Presbítero ordenado de capellanía
Bachiller
Cura
Bachiller-Capellán del Colegio de Ex-Jesuitas
Cura
Bachiller
122
San Pedro de los Pozos Palmar de Vega 179 1 Barrio de San Sebastián 1791 Barrio de San Sebastián 179 1
Tlaxcalilla 18 10
Santa Catarina Mártir del Río Verde 1792
Marquesado del Xaral Valle de San Francisco 179 1
Real de San Pedro de Guadalcazar 179 1
Valle de Santa Isab 1 de Armadi 110 179 1
Santuario del Desierto en San Luis Potosí 179 1
Convento de Santa Catarina y Martín del Río Verde 1820
Valle de San Francisco 182 1
Tierra Nueva 1791
San Esteban de T laxcala del Saltillo 18 14
Venado 18 13
Real de San Pedro de Guadalcazar 179 1
Misión de San José del Valle del Maíz 179 1
Valle de San Francisco 179 1
Real de San Pedro de Guadalcazar 179 1
San Luis de la Paz 18 12
Barrio de San Sebastián 1791
Cedral 1820 Barrio de San Sebastián 179 1
123
Bachiller, Cura y Juez Lucas Antonio Rosado Eclesiástico Tamazunchale 1804
Cura Vicario y Juez Manuel Antonio de Echalecu Eclesiástico Guadalcazar 1765
Real de San Francisco Manuel de Viana Teniente de Cura-Fray de los Pozos 1813
Barrio de San Manuel Eulogio Erreparaz Bachiller Sebastián 179 1
Santa María del Manuel Faustino Camiña Cura Río/Tierra Nueva 1820
San Francisco de los Manuel Ignacio Jiménez Segura Bachiller Pozos 1812
Barrio de San Manuel José de Herrera Cura Sebastián 1783
Bachiller-Clérigo-Manuel María Gorriño Subdiácono San Lui s Potosí 1813
Real de San Pedro de Mariano Coz Bachiller Guadalcazar 1791 Mateo de Brazaras Bachiller San Sebastián de Pozos 1813
Licenciado, abogado de las Reales Audiencias, Vicario y Juez
Miguel Chacón Eclesiástico Santa María del Río 179 1 ..
Miguel Cortés Bachiller Matehuala 1820
Cura Vicario y Juez Nicolás Obispo de Lima Eclesiástico San Luis Potosí 1766 Nicolás Vicente de Torres Bachiller Tierra Nueva 179 1
Barrio de San Pablo Antonio Peñuelas Bachiller Sebastián 179 1
Bachiller-Subdiácono Pedro Fondón ordenado de capellanía Mexquitic 1791
Santa María de los Pedro José Campos Bachiller Ramos 1820
San Pedro de los Pozos Pedro José González Bachiller Palmar de Vega 179 1 Pedro Pascasio Quevedo Cura San Luis de la Paz 179 1
Vicario y Juez Eclesiástico ordenado Barrio de San
Pedro Zarzosa de capellanía Sebastián 179 1 Rafael Crespo Cura Valle de San Francisco 1815
,-
124 , e
Misión de San Jo é del Ramón de Llano Cura Valle del Maíz 1791
Cura párroco y Juez Salvador Nieto Ec les iástico Vall e de San Francisco 1790 Santiago de los Reyes Bachiller Santa María del Río 1823 Santiago Palau Sacrodiaconado Armadillo 1787
Barrio de San Sebastián Fernando de Cárdenas Bachiller Sebastián 179 1 Tomás Vargas Doctor-Cura Guadalcazar 1812 Vicente de León Bachi Il er-Capellán Tierra Nueva 1791 Vicente de Vitoria Cura Río Verde 1819 Vicente González Cura Hedionda 1804 Vicente Longoria Cura San Luis Potosí 1814
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