Salmo XXIII—Forma métrica Un soneto Catorce versos de once sílabas (endecasílabos) Cuatro estrofas Dos cuartetos—se dirigen a la mujer Dos tercetos--(1) se dirige a la mujer (2) conclusión del soneto-- >consideración filosófica general Rima Consonante
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Salmo XXIII—Forma métrica Un soneto Catorce versos de once sílabas (endecasílabos) Cuatro estrofas Dos cuartetos—se dirigen a la mujer Dos tercetos--(1)
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Salmo XXIII—Forma métrica
Un soneto
Catorce versos de once sílabas (endecasílabos)
Cuatro estrofasDos cuartetos—se dirigen a la mujerDos tercetos--(1) se dirige a la mujer (2) conclusión del soneto-->consideración filosófica general
Rima ConsonanteABBA, ABBA, CDE, DCE
Los dos cuartetos
Exaltan la belleza de la mujer a la par que la describen
Comparáda con la naturaleza—norma en el renacimiento
Imágenes naturales de las primeras dos estrofas
El color del rostro (gesto) es el de dos flores
La roja rosa (los labios)
La blanca azucena (la piel de su rostro)
Imágenes naturales de las primeras dos estrofas
El cabello se asocia con el oro escogido La nieve que cubre la hermosa cumbre es el
cabello que se ha vuelto blanco
Efecto de los colores
El rojo sugiere pasión, juventud, calor
El blanco pureza, edad, frío
Elementos opuestos en versos
Numerosas antítesis Su rostro es rosa (rojo) y azucena (blanco) Su mirada es “ardiente” (apasionada) y “honesta”
(marcando distancia) “enciende” (levanta pasión) y “refrena” (la detiene) Su cuello es “enhiesto” (recto) y su cabello flota
desordenado Hay contemplación estática y hay movimiento
Elementos opuestos en versos
La mujer seduce y al mismo tiempo permanece distante
Terceto Primavera (juventud) e invierno (vejez)
El primer terceto
Anima a la mujera que aproveche su juventud antes de que llegue la vejez El dulce fruto de la alegre primavera La nieve en la hermosa cumbre: el pelo banco en
su cabeza Expresa el carpe diem renacentista con
tranquilidad y alegría
Ejemplos de encabalgamiento
El verso 1 continúa en el 2 El 5 en el 6 El 6 en el 7 El 9 en el 10 El 10 en el 11
Estos primeros versos hablan del fluir del tiempo, suave, ininterrupido, inexorable
Ejemplos de encabalgamiento
Los primeros once versos forman una sola frase que, junto con las sinalefas, hacen que el poema fluya y continúe ininterrumpido
Algunas comas sirven de pausas, otras desaparecen en una sinalefa
Sinalefas
Rosa y azucena Enciende el Y en tanto Que el Que en la vena Se escogió Blanco enhiesto Mueve, esparce y
Repetición
Los versos 1 y 5 Empiezan con “En tanto que”
Reiterando, insistiendo, dando más fuerza al paso del tiempo cíclico y repetitivo
La repetición al principio del verso se llama anáfora
Cambio en el orden normal de las palabras
Hipérbaton Común en la poesía renacentista y más en la
barroca Las primeras dos estrofas son cláusulas
adverbiales que dependen del verbo principal, “coged” (verso 9) En habla normal irían después Al ponerlas no sólo antes, sino al principio del
poema y de las dos estrofas, el poeta enfatiza la temporalidad, el transcurso de esta etapa de la vida de la mujer
Cambio en el orden normal de las palabras
5 a 8 “el viento mueve...el cabello”
9 y 10 “coged el dulce fruto de vuestra...”
11 y 12 “el viento helado marchitará la rosa”
Tiempos verbales
Varios presentes, un pretérito, un imperativo y dos futuros Presente, pasado y futuro
El correr del tiempo
El imperativo de la exhortación del carpe diem relacionado con ello
El más frecuente es el presente porque el poema está precisamente exaltando el aprovechamiento del momento
Estaciones del año
La primavera La juventud
El invierno La vejez
El poeta insiste en lo natural, el envejecer como algo esperado y carente de angustia
El retrato de la mujer en el poema
El retrato es incompleto física y emocionalmente
No sabemos nada sobre la mujer No nos impresiona como un individuo específico
Parece ser sobre la mujer, que permanece impersonal y desconocida Realmente refleja los sentimientos y las
disquisiciones del poeta
Canon renacentista de la belleza femenina
Es de rostro pálido, de cabello rubio y esparcido al viento, cuello asbelto.
Es a la vez reservada y tentadora
No hay en ella nada individual ni personal
Es exactamente como la primavera o la Venus saliendo de las aguas de Botticelli.
La perspectiva del poema
El poeta habla a la mujer, una mujer bella e inespecífica, sin conexión personal con él
La mujer parece ser una excusa para que el poeta exponga sus propias reflexiones y su capacidad de admirar la belleza.
El tono del poema
El tono es sereno, tranquilo: las imágenes son naturales, las palabras de contenido positivo (alegre, primavera, dulce).
La consideración final que ahonda en lo que podría ser triste es natural y crea un tono armónico y sosegado
Todo en el poema es una afirmación de la naturalidad del paso del tiempo y de la prudencia de aceptarlo así como es
El tema central del poema
El tema es el paso del tiempo, expresado en ese fluir del poema, acompañado del carpe diem.
El terceto final reafirma la idea: el paso del tiempo es algo completamente natural.
El hecho de que traiga cambio es lo único que no cambia.