INFORME FINAL Prospección arqueológica del sector bajo de la Cuenca del Ramis (Ríos Azángaro y Ramis), Puno Sometido a la "Comisión Nacional Técnica de Arqueología" Presentado por CHARLES S. STANISH (BS-8802 ) Department of Anthropology University of California, Los Angeles Los Angeles, California U.S.A. ADAN UMIRE ALVAREZ ( CU-9403 ) Universidad Católica Santa María Arequipa. Perú Julio, 2004
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Prospección arqueológica del sector bajo de la Cuenca del Ramis (Ríos Azángaro y Ramis), Puno
Prospección arqueológica del sector bajo de la Cuenca del Ramis (Ríos Azángaro y Ramis), Puno
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INFORME FINAL
Prospección arqueológica del sector bajo de la Cuenca del Ramis (Ríos Azángaro y Ramis), Puno
Sometido a la "Comisión Nacional Técnica de Arqueología"
Presentado por
CHARLES S. STANISH (BS-8802 ) Department of Anthropology
University of California, Los Angeles Los Angeles, California U.S.A.
ADAN UMIRE ALVAREZ ( CU-9403 ) Universidad Católica Santa María
Arequipa. Perú
Julio, 2004
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INDICE
Resumen Introducción 3 Antecedentes 5 Participantes y sus funciones 5 Metodología 6 Cronología de Referencia 7 Prospección del Sector Bajo del Río Ramis 9 Objetivos del Proyecto 9 Area del Proyecto 9 Resultados de la Prospección 9 Registro de Sitios 11 Bibliografia Fotos
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"Prospección Arqueológica del Sector bajo de la Cuenca del Ramis (ríos Azángaro y Ramis), Puno"
Charles Stanish (BS-8802)
Adan Umire Alvarez. (CU-9403)
Resumen Se presenta los resultados de las labores de prospección arqueológica realizadas en el sector bajo de la cuenca del río Ramis, específicametne en los alrededores de la laguna de Arapa. El trabajo se realizó en dos tempradas, autorizadas por los acuerdos C /DGPA-0160-2002 y C/DGPA-0134-2003. El objetivo de nuestro proyecto fue obtener datos sobre la ocupación del sector norte de la cuenca del Lago Titicaca. Como resultados significativos tenemos el hallazgo de 809 sitios con ocupación multicomponente distribuidos alrededor de la laguna de Arapa y en parte del sector bajo del río Ramis.
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"Prospección Arqueológica del Sector bajo de la Cuenca del Ramis (ríos Azángaro y Ramis), Puno "
INTRODUCCIÓN Dentro de la historia pre-hispánica de la región circum-lacustre, el período Formativo Tardío (500 a.C. - 400 d.C.) está representado principalmente por Pucara, una de las sociedades complejas más grandes desarrolladas en el Altiplano. Tanto por su ubicación cronológica, pero sobre todo por la naturaleza misma de su desarrollo, Pucara constituye el más importante antecedente en el origen y proceso expansivo del estado Tiwanaku. De otro lado, la estratégica ubicación de Pucara lo convirtió en el nexo de unión e intercambio entre las tradiciones formativas de los Andes Centrales y posiblemente también de la selva, con el área Centro -Sur andina y particularmente el Altiplano. Pucara ostenta ser el primer centro urbano-ceremonial desarrollado en el Altiplano. El sitio de Pucara mismo, está compuesto por un sector con pirámides escalonadas y estructuras hundidas en forma de “U” orientadas al este, complementado por un amplio sector de viviendas (Mujica 1979:187). El patrón de asentamiento en el altiplano presenta una disposición jerárquica de los sitios en al menos tres niveles: en el primero, el centro urbano-ceremonial de Pucara; en el segundo “centros semi-urbanos” o centros secundarios como Taraco e Incatunuhuiri, en los cuales se cumplían funciones administrativas y ceremoniales; en el tercer nivel, están los asentamientos domésticos y productivos, ubicados cerca a las fuentes de materia prima, agua y recursos agro-pastoriles, estos últimos no presentan arquitectura monumental. (Mujica 1988:89-90). Todo ello sugiere la existencia de una jerarquía interna tanto en lo político como en lo socio-económico. La textilería, la litoescultura y principalmente la cerámica de estilo Pucara se encuentra a través de una extensa área que incluye el sector occidental y septentrional de la cuenca ampliándose, inclusive, hasta el sitio de Batan Urco, al sur del Cusco. De otro lado, es probable que algunos especímenes hallados en Kallamarca, en el valle de Tiwanaku, correspondan a contextos Pucara (Portugal 1988; Lumbreras y Mujica 1982; Mujica 1988), asimismo no se descarta una intensiva ocupación en el sector oriental del lago.
Diversas evidencias de Pucara han sido halladas en los valles del Pacífico: textiles decorados, en contextos Alto Ramirez en Arica (Focacci y Erices 1971; Mujica 1985, 1991) y en la desembocadura del rio Loa; además de elementos del complejo de Rape en Iquique (Mujica 1991:289); de otro lado, en Moquegua, (Feldman 1990a, 1990b), y en Arequipa (Jose A. Chávez com.pers 1993) se han hallado restos de cerámica asociada a asentamientos multicomponentes.
La distribución de los asentamientos Pucara en el altiplano, apunta a una economía mixta de agricultura, pastoreo y explotación de recursos lacustres. A la vez que las evidencias costeñas sugieren mecanismos de colonización y de intercambio a larga distancia (Mujica 1985, 1991)
Por el momento, nuestro conocimiento de Pucara, fuera del sitio principal, sólo se perfila en términos generales. Tenemos una perspectiva de conjunto pero todavía nos falta conocer los detalles. Hasta ahora los principales trabajos de investigación se han concentrado en el centro urbano-ceremonial de Pucara mismo, en tanto que los estudios de asentamientos de segundo y tercer orden son totalmente escasos, limitándose en muchos casos únicamente al hallazgo de especímenes en superficie o a descripciones parciales de conjuntos arquitectónicos. A través de nuestras investigaciones hemos avanzado y profundizado nuestra comprensión de los asentamientos periféricos de Pucará, sin embargo todavía falta mucho trabajo para tener una perspectiva más completa. Entre tanto muchas de las interrogantes fundamentales todavía permanecen ignoradas o parcialmente conocidas. Una de tales interrogantes está referida a la expansión y control que mantuvo
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Pucara en su territorio nuclear inmediato. Se ha propuesto, (Mujica 1985, 1988) que la estrategia expansiva de Pucara, se sustentó en el manejo de dos sistemas de control complementarios: a) control de espacios productivos y recursos locales del altiplano y, b) control de circuitos de tráfico e intercambio interregional, tanto con los valles del Pacífico como con la región de las Yungas o valles amazónicos. En términos geográficos este control estratégico de recursos, espacios y circuitos se alcanzó a través del establecimiento de una red de asentamientos ubicados a lo largo de cuencas de grandes rios cuyos orígenes en el divortium aquarum occidental y oriental, permitía aprovechar “accesos naturales” a las cuencas del Pacífico y/o del Amazonas. En tanto que durante su recorrido y desembocadura en el Lago Titicaca, cortaba extensas pampas de alto potencial agrícola y pecuario. Aunque esta estrategia fue ampliamente utilizada por diferentes sociedades altiplánicas (Tiwanaku y posteriormente los señorios aymara) creemos que el origen de tales estrategias expansivas y patrones de asentamiento están asociadas a Pucara en tanto que, históricamente, fue la primera sociedad compleja que pudo articular diferentes sistemas productivos en un extenso territorio de características ecológicas múltiples. En este contexto, un estudio de los patrones de asentamiento en las cuencas fluviales norteñas proveerá de sustantiva información relativa a la expansión y dominio de Pucara de esta zona, en tanto que corresponde a lo que fue su área nuclear.
De manera específica nos interesa abordar dos temas que consideramos fundamentales para entender el proceso de complejización de Pucara como cultura: a) el primero está referido al uso y control del espacio de su área nuclear en términos de asentamientos, áreas productivas, rutas de tráfico, etc. y b) es necesario evaluar el rol que cumplió la interacción entre el altiplano y regiones adyacentes principalmente con los valles orientales de la Amazonía. ANTECEDENTES El presente proyecto corresponde a la cuarta etapa de los estudios realizados en la zona. Con anterioridad se desarrollaron otras campañas de prospección (Stanish y De la Vega 1999, 2000) y de excavación (Plourde 2001) Las referidas campañas de prospección ofrecieron datos significativos sobre patrones de asentamiento y ocupacionales a partir del hallazgo de más de 550 sitios distribuidos a lo largo del sector medio y bajo de los valles de las subcuencas del Pucará y Huancane.
Las excavaciones en el sitio HU-14 de Cachichupa Churura (Putina) dan cuenta de un gran yacimiento de alrededor de 5.0 a 7.0 Hás. formado por un conjunto de estructuras rectangulares que corresponden a habitaciones domésticas y áreas de talleres. La presencia de un monolito y abundante cerámica superficial señalan su filiación Pucara. Su ubicación estratégica señala el importante rol que tuvo en el control del tráfico interregional con los valles orientales (Ver Stanish y De la Vega 2000)
PARTICIPANTES Y SUS FUNCIONES La Dirección General del Proyecto estuvo a cargo del Dr. Charles Stanish (BS 8802) de la Universidad de California, Los Angeles (UCLA). En la Co-Dirección estuvo el Lic. Adán Umire Alvarez (CU-9403). Cada uno de ellos manejó un equipo de por lo menos cuatro personas (entre estudiantes de arqueología, antropología y miembros de las Comunidades Campesinas locales). El Gabinete estuvo a cargo de la Bch. Cecilia Chávez Justo. Como asesor del Proyecto se desempeño el Lic. Edmundo De la Vega Machicao (CD-9724) de la Universidad Nacional del Altiplano, quien coordinó la participación de estudiantes de la C.P. de Antropología de dicha universidad.
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METODOLOGÍA Metodología de Prospección y Registro de Sitios La metodología aplicada es la misma que fuera utilizada en proyectos de reconocimiento anteriores (véase Stanish et.al.1997 y Stanish 1999). La metodología utilizada consiste en un reconocimiento sistemático intensivo que considera la cobertura total del área en un 100 %. Dos equipos de 4 personas, cada uno, mantienen un desplazamiento paralelo cada 10 a 25 metros de distancia uno del otro, siguiendo transectos preestablecidos de modo que se cubre totalmente el área designada. Haciendo uso de un GPS, los sitios fueron ubicados en sistema de coordenadas UTM. el registro se realizó en cartas nacionales 1:100,000 y eventualmente, cuando existian, en planos catastrales a escala 1:25,000. Cada uno de los sitios encontrados fue registrado en un formulario especialmente diseñado (ver Anexo B) La identificación de los sitios utilizó un sistema binomio alfanumérico donde el área de prospección se identifica con dos letras mayúsculas (“TA” para Taraco y “AR” para Arapa). A estas le sigue un número arábigo que identifica al sitio, el cual es asignado de acuerdo a la secuencia de hallazgo. Además en casi todos los sitios se ha consignado el nombre o nombres locales. Debemos señalar que la notación numérica de los sitios inicia en el número 600, con el fin de darle continuidad a la secuencia iniciada en prospecciones anteriores en la sub-cuenca del río Huancané (ver Supra Antecedentes) En cada sitio de hallazgo se realizó una colección de material superficial, de modo que cada sitio tiene una muestra representativa de material cerámico y lítico. No se realizó colecciones de huesos, salvo que hayan sido identificados como instrumentos. El muestreo fue aleatorio simple, recolectando principalmente elementos diagnósticos. Recolección Superficial
La recolección superficial proveé de datos significativos sobre tamaño, número y distribución de las ocupaciones presentes y evaluación cronológica del sitio. Para ello se recurrió a la estrategia de una recolección aleatoria de material diagnóstico presente en toda la superficie del sitio.
Los artefactos recolectados fueron segregados de acuerdo al tipo de material (cerámica, lítico
y hueso). Para su registro se utilizó el Código del Sitio al que se le añadió un Número de Bolsa correspondiente al tipo de material respectivo y el número de especimen. Labores de Gabinete
Las labores de gabinete se desarrollaron en dos fases. La primera de manera paralela al trabajo de campo. Consistió en el cotejo de los números de bolsa con los del Registro de Bolsas; los materiales de cerámica y líticos fueron lavados en tanto que los huesos sólo se limpiaron con cepillos de cuerdas finas. Todos los materiales diagnósticos fueron rotulados, con el Código de Sitio más el Número de Bolsa y el Número de Espécimen (e.g. TA-10-015-4). Para cada bolsa se contabilizó el número de especimenes y el peso total de ellos (ver Anexo C)
La segunda fase del trabajo de gabinete, tuvo lugar al finalizar las labores de campo. En esta
fase se realizó un análisis preliminar de los materiales, principalmente de la cerámica y los líticos. El objetivo fue identificar artefactos o materiales diagnósticos pertenecientes a cada período cultural (del arcaico al Horizonte Tardío). Cada espécimen diagnóstico fue descrito y dibujado, de los artefactos más significativos se hicieron fotografías individuales y de conjunto, con lo que se obtuvo un registro gráfico de los especimenes y materiales presentes en cada sitio.
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Registro y Depósito de Materiales El registro de los materiales se realizó de acuerdo al sistema descrito anteriormente (Sitio-
Bolsa-Espécimen). Respecto al depósito temporal de los materiales se utiliza el local del Programa Collasuyo en la ciudad de Puno hasta que se cumpla con el plazo establecido por ley (R.S. 004-2000-ED) El destino final de las colecciones, una vez concluidas las investigaciones, serán depositadas en el local que señale el INC-Puno.
CRONOLOGÍA DE REFERENCIA Una larga experiencia acumulada a través de más de quince años, realizando excavaciones, prospecciones y reconocimientos superficiales, llevadas a cabo por la Asociación Collasuyo (Proyecto Juli, Proyecto Lupaqa) la que se suma a las investigaciones de otros arqueólogos han permitido articular una tipología cerámica que sirve como un excelente marco de referencia para la identificación de sitios y su ubicación cronológica relativa. En la cuenca norte y noreste del Lago Titicaca, estos tipos de cerámica nos indican las fases y fechas de los sitios encontrados en el catastro y el reconocimiento. Inca (Horizonte Tardío) circa 1450-1532 d.C. La cerámica del Horizonte Tardío es fácilmente distinguida, tanto por el tipo de pasta, la decoración, el tratamiento superficial, y la forma de las vasijas, las cuales se diferencian significativamente de sus antecesores. Mientras que existe una gran variabilidad en los estilos cerámicos de los centros de producción de la cuenca del Titicaca, toda la cerámica de este período sigue rígidos cánones que la distinguen y diferencian de cualquier otro período previo. Hasta el momento, el mejor trabajo sobre cerámica Inca en la región es el desarrollado por Katherine Julien (1983). Su trabajo permitió definir la cerámica Inca del área de Hatuncolla. Anteriormente, Marion Tschopik (1946) definió el tipo Taraco Polícromo y la serie Sillustani que son encontrados en la región (Tschopik 1946:22, 25-27, 31-32). Ejemplos de tipos de cerámica Inca que sirven para distinguir la cronología y que podemos usar para la identificación de sitios del período Inca en la región incluyen los dibujados en estos libros: Julien 1983, apéndice; Stanish et al. 1997: apéndice 1, y Tschopik 1946: figs. 17j; 18a-c,e; 22a-i; 23a-h; 24c,g; 25d-i; 26e. Periodo Altiplano (Periodo Intermedio Tardío o Colla) circa. 1100-1450 d.C. El Período Altiplano corresponde al momento en que el señorío pre-Inca de los Collas, dominó al área norte de la cuenca en la que se enmarca nuestra investigación. Los tipos de cerámica distintivos tienen una recurrencia única para este período. Sus principales indicadores son la pasta y la decoración, sin embargo, existe una forma de cuenco bastante diagnóstica. La principal referencia documental viene a ser, nuevamente, el trabajo de Tschopik (1946) quien definió la serie “Collao” de la cual los cuencos y jarras del tipo Collao Negro sobre Rojo son un indicador muy sensible de este período. Sin embargo, algunos otros tipos no son tan diagnósticos como el caso de Allita Amaya que tiene una distribución y asociación más vinculada al señorío Lupaqa, en tanto que el tipo Sillustani Negro sobre Rojo puede ser hallado tanto en contextos pre-Inca e Inca temprano. En el área de estudio, hasta Conima en el sur, los tipos de cerámica más comunes del periodo Altiplano son los denominados Vilquechico Gris y Vilquechico Naranja (Stanish et al. 1999). Este tipo de cerámica se distingue por las formas típicas del periodo Altiplano, hechos en una pasta
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distintiva con grandes inclusiones de granito y/o calcita Otro tipo diagnóstico es la cerámica Quequerana (Amat O. 1977:5). Tiwanaku Expansivo circa. 400-1100 d.C. El periodo Expansivo de Tiwanaku corresponde a la temporada durante la cual el estado de Tiwanaku ejerció algún tipo de control e influencia en el área de estudio. Los alfares Tiwanaku son muy fáciles de distinguir especialmente por la forma y decoración. Igualmente ciertos tipos de pasta, también, son muy diagnósticos. Los resultados de nuestras investigaciones muestran que las áreas incorporadas bajo la influencia del estado Tiwanaku imprimen en su cerámica los cánones decorativos de Tiwanaku. La cerámica llana por lo general no sufrió cambios drásticos, por el contrario mantuvo sus rasgos característicos aunque eventualmente se incorporaron formas nuevas asociadas a Tiwanaku. En otras palabras, los sitios provinciales Tiwanaku se caracterizan por el reemplazo de los antiguos tipos decorados por los de Tiwanaku y la adición de nuevos tipos llanos. Por otro lado los trabajos de Stanish y Steadman 1994 señalan que, para el caso de Tumatumani, en Juli, la mayoría de la cerámica decorada Tiwanaku fue localmente manufacturada imitando a la cerámica del área nuclear. La cerámica decorada de Tiwanaku, del sur de la cuenca del Lago Titicaca, ha sido descrita en variedad de publicaciones (Alconini 1993, 1995; Bennett 1934; Ponce 1981). Ejemplos de cerámica Tiwanaku que sirven de referencia cronológica están presentes en Kidder 1943 (fig. 3, nos. 31,33-38) Steadman 1994 (fig. 156-165); Steadman 1995, Tschopik 1946 (fig. 27a-f.) Ejemplos de cerámica llana diagnóstica en el área de estudio están dibujados en Steadman 1994: fig. 79-80. Formativo Tardío circa 400 a.C. - d.C. 400 El Formativo Tardío fue un tiempo de muchos cambios en el desarrollo de las principales sociedades complejas previas a la emergencia de Tiwanaku. En el norte de la cuenca la sociedad dominante fue Pucara cuya cerámica diagnóstica es reconocida por la decoración, forma y tratamiento superficial. El tipo más fácil de ser reconocido es el Pucara Inciso Polícromo, este tipo usa los colores rojo, negro y/o amarillo (Kidder 1943, Rowe y Brandel 1971, Mujica 1985, Franquemont 1986) Los incensarios son, también, elementos muy diagnósticos (Chávez 1985, Steadman 1994) los cuales serian contemporáneos con Tiwanaku Temprano o Qeya en el sur. Estos tipos distintivos presentan, ocasionalmente, incisiones con pintura post-cocción. Otro tipo diagnóstico son las trompetas decoradas en un estilo típico de Pucara Polícromo inciso, casi siempre se observan, al interior del tubo, las huellas del uso de antiplástico vegetal. Por otro lado se reconocen ciertos tipos de cerámica llana Pucara o Pucaroide que pueden servir también para datar los sitios (Stanish et al. 1997 y Steadman 1995) Formativo Medio circa 1100-400 a.C. La cerámica diagnóstica de este periodo incluye los tipos llano y decorado de Qaluyu, identificado por Chávez (1985), Rowe (1942, 1956) y por Steadman (1994). Los tipos diagnósticos tienen bordes distintivos. Las ollas sin cuellos son formas representativas de la cerámica llana para identificar al periodo. También el incensario inciso encontrado por Chávez 1985 y Steadman (1994) se puede usar por identificación durante la prospección. Este tipo muy distintivo se encuentra ocasionalmente con pintura post-cocción en las incisiones, y está dibujado en Steadman (1994: figs. 137-146) y Chávez (1985). Otros artefactos diagnósticos. Hemos encontrado lajas y monolitos en nuestros estudios iniciales. La decoración de los monolitos se puede usar para dar un periodo de construcción. También, piedras
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pulidas son comunes en el periodo del Formativo Tardío. Hay, también, formas diagnósticas de puntas de proyectil.
PROSPECCIÓN DEL SECTOR BAJO DEL RÍO RAMIS
OBJETIVOS DEL PROYECTO
El Proyecto, como conjunto que involucra estudios escalonados en varias temporadas, está orientado a la obtención de información sobre el patrón de asentamiento de la cultura Pucara, en el sector norte del Lago Titicaca, particularmente en el área de la cuenca del Ramis. Esta cuenca que abarca más de 15,000 km2 de superficie, se caracteriza por articular diversos espacios ecológicos (Suni, Puna) y productivos (agrícolas, pecuarios, pesqueros) a la vez que su constitución geomorfológica e hidrológica presenta un abanico de ejes de articulación interregional entre el altiplano y los valles amazónicos del Vilcanota, a través de la subcuenca del río Pucará, la subcuenca del Azángaro que comunica con la región del Carabaya e Inambari y la subcuenca del río Huancané que está asociada al valle de Tambopata.
La investigación en temporadas anteriores aportó una significativa información sobre dos de estas subcuencas la del Pucara y del Huancané.
Los datos obtenidos en esta temporada (2002-2003) proceden del reconocimiento de un
amplio sector que abarca la parte baja y desembocadura del río Ramis en el lago Titicaca, pero fundamentalmente ofrece un registro minucioso de gran parte del área que circunscribe la laguna de Arapa. Con los resultados obtenidos se amplia nuestra comprensión Con ello se proveerá de un contexto regional para evaluar los datos de estudios anteriores además que nos permitirá evaluar nuestras hipótesis respecto a la interacción Altiplano-Amazonía durante el formativo. AREA DEL PROYECTO
La cuenca del Ramis, es la más grande e importante del lago Titicaca. Está formada por tres sub-cuencas principales correspondientes a los ríos Pucará, Azángaro y Huancané. Nuestra área de investigación se limita a la parte baja de la cuenca, específicamente al tramo correspondiente al río Ramis, esto es desde la confluencia de los ríos Azángaro y Pucara en el sector de Achaya hasta su desembocadura en el lago Titicaca.
Inicialmente el área de prospección incluía la sub-cuenca Azángaro-Ramis, sin embargo,
finalmente, decidimos concentrar las labores en el sector bajo especialmente en los alrededores de la laguna de Arapa. Esta decisión se tomo considerando que en esta zona se hallaba una fuerte concentración de sitios con ocupación y/o reocupacion durante el Formativo. Así también se evaluó la variada topografía del área (pampas, quebradas, laderas de cerros, montículos, desembocadura del río, etc.) lo que permitirá evaluar modos particulares de uso y acondicionamiento del espacio para ocupaciones domésticas, ceremoniales y/o productivas. Es este último caso la asociación con sistemas agropecuarios, de waru warus, terrazas y cochas, erá muy importante. RESULTADOS DE LA PROSPECCION Como resultados de la prospección podemos señalar la identificación de 809 sitios de hallazgo todos ellos con ocupación multicomponente correspondiente a una secuencia cronológica de cinco grandes periodos culturales. A continuación se presenta una síntesis de los hallazgos según períodos de ocupación.
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Periodo Arcaico (8,000 – 2,000 a.C.) Se registraron 60 sitios, correspondientes a este periodo. Los yacimientos se caracterizan por ser sitios abiertos, tipo campamentos al aire libre que ocupan pequeños montículos o terrazas fluviales. Se ubican principalmente en las pampas, ya sea cerca de ríos o lagunas y/o en las bases y laderas bajas de cerros. El rango del tamaño de los sitios, con ocupación exclusivamente arcaica (04), es menor a 0.5 hás. En el resto de sitios, con ocupaciones múltiples, la mayor frecuencia del tamaño varia entre 1.00 y 3.00 hás. El material recolectado incluye tanto instrumentos (especialmente puntas de proyectil, raedereas y cuchillos) como desechos de talla de diversos materiales, (obsidiana, cuarzo, basalto y cuarsita).
Periodo Formativo (2,000 a.C. – 400 d.C.) Para este período se identificaron aproximadamente 300 sitios. El 98% del conjunto presentan reocupación en periodos posteriores. Los sitios más comunes son los espacios abiertos con material disperso y sin arquitectura superficial visible, por lo general son montículos que se ubican en las pampas o en las partes bajas de los cerros, pero en todos los casos presentan cierta cercanía a fuentes de agua, ya sea ríos o pequeñas lagunas. En los sitios con arquitectura visible se observa que esta corresponde a estructuras ceremoniales (patios hundidos) en algunos casos asociados a monolitos. La mayoría de sitios tienen un tamaño menor a 1.0 hectárea pero por lo general su tamaño no excede las 3.0 hectáreas. La cerámica diagnóstica corresponde a los tipos Qaluyo y Pukara. También están presentes puntas de obsidiana de forma triangular y tamaño pequeño. Período Tiwanaku (400 – 1,100 d.C.) Son mas de 150 los sitios con cerámica Tiwanaku, aunque todos tienen un ocupación multicomponente, es importante señalar que cerca del 80% de los sitios reocupan asentamientos del período formativo, y sólo 20% fueron ocupados a partir de este período; la reocupación de los sitos en períodos posteriores es también muy alta (96%). La proporción en el tamaño de los sitios es similar al del período anterior.
Como material diagnóstico se utilizó la cerámica Tiwanaku cuyas formas de vasijas y estilo decorativo es sumamente característico. Un tipo particular de punta de proyectil también fue usado como elemento diagnóstico complementario. Período Altiplano (1,100 – 1,450 d.C.) Los yacimientos correspondientes a este periodo son los más abundantes, mas que 600 sitios en total. La mayoría (55%)presentan ocupaciones previas, pero es significativo el número de sitios que se ocupan recién a partir de este periodo. Hay que resaltar la bajísima presencia de pucaras o poblados amurallados de cumbre (08 en total) y únicamente 03 no presentan ocupaciones previas. Estas cifran son contrastantes con las que se observa en otras zonas de la cuenca. Como en períodos anteriores, el tipo de sitios mas comunes son los espacios abiertos con material disperso y sin arquitectura superficial visible, también son abundantes los sitios asociados a estructuras funerarias ya sean tumbas subterráneas y/o chullpas.
Respecto al tamaño de los sitos estos también son en su mayoría menores a una (1.00) hectárea. Como elementos diagnósticos se utilizaron los tipos de cerámica Collao y la serie preinca de Sillustani.
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Período Inca (1,450 – 1,533 d.C.)
Los sitios de este período son, también, muy abundantes; se registraron mas que 400 en total. Con la excepción de dos (02) pequeños sitios de tamaño restringido (menos de 0.5 há.s) y escazo material superficial, todos los sitios de este periodo presentan ocupaciones previas. Por tanto el tipo de sitio y el tamaño de los mismos son similares a los registrados en periodos anteriores. En 17 casos se encontró evidencia de una reocupación durante la Colonia. Los estilos de la cerámica Inca cusqueño y local fueron los principales elementos diagnósticos. REGISTRO DE SITIOS La prospección ofreció una gran cantidad de datos significativos respecto a diversas variables de los sitios, tales como coordenadas de ubicación, tipo de sitio, tamaño, filiación, etc. Toda esta información ha sido ordenada en un solo cuadro que resume las principales variables utilizadas para el análisis de los sitios (Ver Anexo A) El cuadro esta compuesto por 17 columnas, cada una de las cuales representa un criterio descriptivo y de análisis. Columna A. Número de Sitio. Se consigna el código de registro e identificación de cada sitio. (ver supra Metodología) La numeración de los sitios se inicio con el número 600 y concluyo con el 1408 Columna B. Nombre del sitio. Se consigna el nombre local de los sitios. En algunos casos se precisas su ubicación respecto a el norte magnético. Columna C Coordenadas UTM norte. Columna D Coordenadas UTM este Columna E Altitud GPS. Este dato puede variar al ser tomado por un altímetro y/o ser comparado con cotas de la carta geográfica. Columna F Tipo de sitio: Los sitos han sido clasificados en los siguientes tipos:
1. Sitios con material disperso. Sin arquitectura visible. 2. Cementerios a. Chullpas b. Tumbas subterráneas (incluye slabs cist) c. Chullpas y tumbas d. Tumbas en cuevas e. Tumbas en aleros o abrigos 3. Terrazas domésticas 4. Pukaras 5. Estructuras habitacionales 6. Estructuras ceremoniales a) Patios Hundidos b) Plataformas elevadas
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7. Estructuras funcionalmente no definidas 8. Sistemas agrícolas a. Andenes b. Waru Warus c. Cochas d. Canales e. Reservorios 9. Petroglifos (figuras pintadas o grabadas en roca)
a. En cuevas b. En aleros c. En bloque rocosos d. Arte moviliar
10. Monolitos a. Huancas b. Estelas c. Escultóricos
11. Cortes o perfiles 12. Rellenos y/o escombros 13. Hoyos en afloración rocosa 14. Camino 15. Canteras
Columna G Topografía Paisaje: Se consideraron las siguientes variables
A. CERRO 1 Base 2. Ladera 3. Cima 4. Abra B. QUEBRADA 1. Fondo 2. Ladera C. PAMPA
Columna H Unidad Topográfica: Se consideraron las siguientes variables.
a. Montículo b. Lomada c. Promontorio d. Escarpado e. Afloración rocosa f. Terraza 1. Fluvial 2. Lacustre g. Ribera u orilla 1. Lago 2. Laguna 3. Río
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4. Cocha 5. Riachuelo h. Cueva i. Abrigo o alero
Columna I Area : El tamaño del sitio es expresado en hectáreas. Columna J Arcaico: Se consignan aquellos sitios que presentan restos de una industria lítica principalmente vinculada a puntas de proyectil. Se ordenaron según los siguientes variables
a. Arcaico Temprano b. Arcaico Medio c. Arcaico Tardío d. Arcaico Terminal
Columnas K a la Q Periodos Formativo (K); Tiwanaku (L); Altiplano (M); Inca (N); Colonial (O); Moderno (P) y Desconocido NN (Q): Sitos con evidencia cerámica, se consignan el numero de fragmentos recolectados correspondientes a cada periodo.
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