PRINCIPIOS FUNDANTES DE LA PEDAGOGÍA PASTORAL

PRINCIPIOS FUNDANTES DE LA

PEDAGOGÍA PASTORAL

Estos principios deben llevarnos a los educadores,

a formar a la niñez y juventud en un conjunto de actitudes que hagan que la vida sea plena no sólo para el ser humano sino para la

creación.

AMAR LA VIDA QUE SE NOS HA DADO POR AMOR Y EN AMOR.

“Tanto amó Dios al mundo que le dio a su hijo único, para que todo el que crea en él no perezca,

sino que tenga vida eterna” Jn 3, 16.

Amarla cada día con pasión, amar la propia vida y la vida de cada

persona; la de los débiles y los pobres; la vida naciente y la vida

ya gastada.

ADMIRARLA VIDA

“Y vió Dios que todo lo que había creado era muy

bueno, muy bello” Gn 1, 31.

El amor nos invita a admirar, a dejarnos

envolver y sorprender por la vida, a contemplarla en su misterio y a sentir las ganas y el gozo de vivir.

AGRADECER LA VIDA3.

“Todo cuanto hagan o digan háganlo en nombre de Jesús, el

Señor, dando gracias a Dios padre por medio de él”

Col 3, 17.

El amor desencadena el agradecimiento. La vida de

toda persona es siempre acción de gracias.

RESPETAR LA VIDA

4.

“La sangre de tu hermano me grita desde la tierra”

Gn 4, 10.

El amor implica respeto sagrado porque la vida es

sagrada. Respetar la vida es respetar al creador.

PROTEGERLA VIDA

5.

“…al llegar junto al herido y verlo, sintió compasión.

Se acercó y le vendó las heridas, le montó en su

cabalgadura y cuidó de él” Lc 10, 33 – 34.

Porque la vida está rodeada de peligros, porque es muy

vulnerable, porque los hombres y mujeres somos seres capaces

de ser heridos y de herir.

CUIDAR LA VIDA

5.

“La creación vive en la esperanza de ser también

ella liberada de la servidumbre de la

corrupción y participar así en la gloriosa libertad de los

hijos de Dios” Rom 8, 20 – 21.

Cuidar la vida de todo y de todos. Reconocer, pues, la dignidad de la

tierra, respetar la naturaleza y aceptar la

riqueza de todas las criaturas.

6.CURAR LA VIDA

“El tomó nuestras flaquezas y cargó con nuestras

enfermedades” Mt 8, 17

Curar las heridas, la enfermedad y el

sufrimiento, y acompañar a los heridos. Ofrecer

razones para luchar, sufrir, vivir y esperar.

7. ENTREGAR LA VIDA

“Nadie tiene amor más grande que quien da la vida por sus amigos”

Jn 15, 13.

Dar la vida, compartirla y repartirla cada día es el signo más grande del amor, de la solidaridad sin límites.

EDUCAR EN ELVALOR DE LA VIDA

8.

“Ante ti están la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige la vida y

vivirán tú y tu descendencia” Dt 30, 19.

Suscitar el sentido y la alegría de vivir, el aprecio

por los valores y el respeto por la dignidad de toda

vida.

CELEBRAR LA VIDA

“Yo soy la resurrección

y la vida” Jn 11, 25.

Celebrar la vida es amar, admirar y celebrar al Dios de la vida. También es cultivar la mirada

contemplativa ante la naturaleza, ante la creación y ante cada uno de nosotros.

OSCAR A. PÉREZ SAYAGOSecretario General de CIECConfederación Interamericana de Educación Cató[email protected]@ciec.edu.coWhatsApp: +57 3214449650

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