Perfil De Un Maestro Apóstol Sergio G. Enríquez O. Segundo Servicio El Ministerio Magistral Guatemala, 7 de febrero del Año De La Revelación www.ebenezer.org.gt 1 Hemos estado enseñando respecto a que si verdaderamente queremos aprender más, necesitamos despojarnos de la idea que ya lo conocemos todo porque puede ser el primer obstáculo para llenarnos más del conocimiento de Dios. Sin embargo, también debemos estar conscientes que el ministerio magistral es uno de los más delicados por cuanto es la enseñanza propiamente de la palabra de Dios, por eso si un Maestro es falso, lo que enseñará son herejías. No obstante también debemos recordar que así como existen 5 ministerios de luz, existen 5 antiministerios, veamos cómo los identifica la Biblia: Estrellas errantes = falsos profetas. Nubes sin agua = falsos apóstoles. Árboles otoñales = falsos pastores. Fieras del mar = falsos evangelistas. Cisternas sin agua = falsos maestros, como trampas, hoyos que atrapan gente. Lo extraordinario con esto es que cuando vemos a través de la historia, resulta que existen Maestros de la palabra de Dios en forma específica, por lo tanto de igual manera podemos decir que existe el antiministerio falso en forma especifica; lo cual podría llevar a que en la edificación del cuerpo de Cristo, haya una pieza que sea falsa y que no sostenga lo que debería estar concatenado, por consiguiente lo demás estará débil, por eso debemos darle importancia al perfil que debe tener un maestro porque si los cimientos de una casa no es consistente, se debilitará fácilmente. Santiago 3:1 (LBA) Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos un juicio más severo. Con esto lo que debemos aprender es que no todos somos llamados a ocupar un mismo lugar en la obra de Dios; porque quizá alguno esté enseñando la palabra en calidad de discipulador, pero eso no significa que sea un Maestro de la palabra de Dios; es mejor que sea el Señor el que nos entregue las credenciales celestiales para identificarnos como lo que El desea que seamos en Su obra considerando los 5 ministerios primarios. Romanos 2:17-24 (LBA) Pero si tú, que llevas el nombre de judío y te apoyas en la ley; que te glorías en Dios, 18 y conoces su voluntad; que apruebas las cosas que son esenciales, siendo instruido por la ley, 19 y te confías en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas, 20 instructor de los necios, maestro de los faltos de madurez; que tienes en la ley la expresión misma del conocimiento y de la verdad; 21 tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas que no se debe robar, ¿robas? 22 Tú que dices que no se debe cometer adulterio, ¿adulteras? Tú que abominas a los ídolos, ¿saqueas templos? 23 Tú que te jactas de la ley, ¿violando la ley deshonras a Dios? 24 Porque EL NOMBRE DE DIOS ES BLASFEMADO ENTRE LOS GENTILES POR CAUSA DE VOSOTROS, tal como está escrito. Aquí podemos ver mucho del perfil de un maestro porque el que tenga las credenciales, lo primero que debe tener es una enseñanza a sí mismo para tener una respuesta en el momento adecuado,