Top Banner
O O C C E E L L O O T T L L Á Á N N VOLUMEN 6 (1) JUNIO 2009 GRUPO DE TRABAJO DE MASTOZOOLOGÍA DE EL SALVADOR [email protected]
10

OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Jan 11, 2020

Download

Documents

dariahiddleston
Welcome message from author
This document is posted to help you gain knowledge. Please leave a comment to let me know what you think about it! Share it to your friends and learn new things together.
Transcript
Page 1: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

OOCCEELLOOTTLLÁÁNN

VOLUMEN 6 (1)

JUNIO 2009

GRUPO DE TRABAJO DE MASTOZOOLOGÍA DE EL SALVADOR

[email protected]

Page 2: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

1

Page 3: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

2

La importancia de los mamíferos ha trascendido desde sus

orígenes hasta la actualidad. Es por eso que todas aquellas investigaciones históricas, ayudan a comprender cómo han evolucionado para convertirse en las especies que son hoy en día. En este número se presenta información sobre los mamíferos prehistóricos de El Salvador. Dicha información es de mucho valor, tanto para la paleontología de El Salvador como para conocer la fauna que habitó alguna vez nuestro territorio. Es a la vez importante seguir generando información que mantenga actualizada la situación de los mamíferos a nivel nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones generadas en el hábitat natural de muchos mamíferos, estos deben adaptarse y reacomodarse día a día. Es por ello que cualquier publicación al respecto es de mucha importancia, tanto para el lector como para todos aquellos que trabajamos en pro de la conservación de los mamíferos. Por la situación que enfrentan muchos bosques en la región, es esencial enfocar nuevas investigaciones que proporcionen información biológica y de la dinámica de los bosques con las poblaciones humanas que habitan alrededor. Conocer el impacto humano sobre las áreas es de vital importancia para encontrar estrategias que contribuyan a conservar determinado sitio y su biodiversidad. En este sentido, el GTMES permanece como una entidad promotora de la ciencia y la conservación de los mamíferos en El Salvador. Continuemos investigando para tomar decisiones que contribuyan con la protección de la mastofauna del país.

Seguimos adelante con nuestra labor Grupo Editorial

Page 4: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

3

Mamíferos Prehistóricos de El Salvador

Por Mauricio Alejandro Molina Leddy Departamento de Paleontología, CONCULTURA. Museo de Historia Natural de El Salvador, MUHNES, Calle los Viveros, Colonia Nicaragua, San Salvador, El Salvador. [email protected]

El Salvador posee una gran diversidad paleontológica, como puede ser observada en las diferentes formaciones geológicas que constituyen los suelos. Entre los suelos, se encuentran desde materiales calizos que datan de hace unos 150 millones de años entre el período Jurásico Tardío y Cretácico, hasta suelos más jóvenes que poseen unos cuantos miles de años, especialmente en las zonas costeras, depositados en el período Cuaternario (Stirton & Gealey, 1949; Misión Geológica Alemana, 1978). A pesar de esta riqueza geológica, los primeros reportes paleontológicos de mamíferos en El Salvador ocurren en las rocas asignadas a las épocas Mioceno, Plioceno, y en mucha mayor medida al Pleistoceno, abarcando las Edades de Mamíferos Terrestres de América del Norte (NALMA) Henfiliano, Blancano, Irvingtoniano, y Rancholabreano, que corresponden a los últimos 10 millones de años. En El Salvador se pueden dividir las rocas y los sitios paleontológicos de estas edades basándose en un evento de gran importancia evolutiva que ocurrió cuando se formó el canal de Panamá, dándose así el Gran

Intercambio Biótico Americano (GIBA); y por lo tanto, podemos encontrar tres tipos de sitios: sitios pre-intercambianos, sitios intercambianos, y sitios post-intercambianos, siendo estos últimos los más abundantes en el territorio salvadoreño (Stirton & Gealey, 1949; Webb y Perrigo, 1984; Webb y Perrigo, 1985; Cisneros, 2005) (Cuadro 1). Gran Intercambio Biótico Americano El surgimiento del Istmo de Panamá marca el inicio de una serie de eventos de gran importancia. En primer lugar, permite el comienzo de la Glaciación del Hemisferios Norte, iniciándose así el ciclo glaciar-interglaciar en el que se encuentra el planeta, hace unos 2,5 millones de años (Turner y Antón, 1997; Turner y Antón, 2004; Bartoli et. al., 2005). Y en segundo lugar, crea un puente de tierra definitivo que unió a la fauna de América del Norte y América del Sur hace 5 a 4.7 millones de años (Webb y Perrigo, 1985; Carroll, 1988; Turner y Antón, 1997; Graham, 1998; Iturralde-Vinent y MacPhee, 1999; Palmer, 2000; Bell et. al., 2004; Carranza y Miller, 2004; Flynn et. al, 2005). Este puente de tierra funcionó como un sistema de dispersión de especies ecológicamente selectivo. Datos biogeográficos demuestran que existieron tres tipos de corredores en el puente de tierra panameño: bosque tropical húmedo, sabana húmeda, y sabana seca. Durante la fase interglaciar húmeda, bosques tropicales dominaban los trópicos,

ERA CENOZOICO

PERÍODO Neógeno Cuaternario

ÉPOCA Mioceno Plioceno Pleistoceno Holoceno

NALMA Henfiliano Blancano Irvingtoniano Rancholabreano

Formación del Istmo de

Panamá (4.7-3 Ma)

SITIOS Pre-

Intercambianos Intercambianos Post-Intercambianos

Cuadro 1. Las últimas Edades NALMA del Cenozoico, su relación con la Formación del Istmo de Panamá y los sitios paleontológicos de El Salvador.

Fuente: Elaboración propia, modificado de Graham, 1998; Prothero, 1998; Bell et. al., 2004; Carranza y Miller, 2004; Tedford et al., 2004.

Page 5: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

4

y la dispersión predominante era desde la Amazonia a América Central. Durante la fase glacial más árida, las sabanas predominaban y se extendían hasta los trópicos, la dirección predominante de la dispersión se invertía y la fauna se desplazan de norte a sur (Cortés-Ortiz et al., 2003; Sánchez et. al., 2004; Ortiz-Jaureguizar y Cladera, 2006). Entre los animales que se desplazaron desde América del Norte hacia América del Sur se encuentran: mustélidos, pecaríes, mefítidos, caballos, canidos, félidos, gonfotérios, tapires, camellos, venados, musarañas, y varios grupos de roedores. Entre la fauna vertebrada que entro a América del Norte en este intervalo se encuentran: perezosos arbóreos, perezosos gigantes, perezosos medianos, armadillos, zarigüeyas, gliptodontes, forusrácidos, hormigueros gigantes, tamandúas, notoungulados, monos y capibaras (Fig. 1). El resultado final fue un incremento en la diversidad de especies en ambos continentes. (Graham, 1998; Iuliis de y Cartelle, 1999; Palmer, 2000; Cortés-Ortiz et al., 2003; Porta de, 2003; Bell et. al., 2004; Benton, 2005; Kemp, 2005). Sitios Paleontológicos Pre-Intercambianos Los sitios paleontológicos pre-intercambianos son aquellos que poseen fauna endémica de América del Norte, es decir aquellas en donde no hay rastros de mamíferos de origen sudamericano, como lo son los xenártros, capibaras y sus parientes, y notoungulados. Esta clase de sitios no son muy abundantes en nuestra región, y actualmente se conocen tres faunas, la Fauna Cucaracha del Heminfordiano de Panamá (15 millones de años), Fauna Gracias de Honduras y Fauna de Corinto, en El Salvador, ambas del Henfiliano, es decir de hace unos 7-8 millones de años (Rich y Rich, 1983; Webb y Perrigo, 1984). En la Fauna de Corinto se han reportado un total de cinco taxa de mamíferos, y la mayoría ha sido identificada en base a materiales dentales (Webb & Perrigo, 1984). Entre las especies encontradas, se encuentra un cánido borofágino, identificado originalmente como Osteoborus cynoides, y sinonimizado posteriormente a Borophagus hilli

(Wang et. al., 1999). Este tipo de canidos se caracterizaban por poseer los molares robustos y resistentes, muy semejantes a los dientes de las hienas, y es debido a eso que se conocen

vulgarmente como perros-hiena (Fig. 2), y posiblemente al igual que estas, los Borophagus vivían en jaurías y probablemente eran cazadores activos que en ocasiones se alimentaban de carroña (Webb y Perrigo, 1984; Van Valkenburgh et. al., 2003). El mamífero más abundante en el sitio es el mastodonte gonfotério Rhynchotherium blicki, el cual poseía dos pares de colmillos, los superiores siendo más grandes, rectos y dirigidos ligeramente hacia abajo, mientras que los colmillos inferiores eran cortos y ligeramente dirigidos hacia arriba, haciendo un movimiento como de ―tijeras‖ con los colmillos superiores. Este proboscídeo probablemente se alimentaba de hojas de árboles, aunque al parecer habitaba sabanas boscosas (Lambert y Shoshani, 1998). Las otras tres especies, dos caballos (Cormohipparion cf. occidentale y Pliohippus hondurensis) y un camélido (Procamelus cf. Grandis), se caracterizaban por ser altamente hipsodontes, aptos para alimentarse de material abrasivo como el pasto, y además, eran animales muy cursoriales, adaptados a desplazarse en ambientes abiertos como las sabanas. (Webb y Perrigo, 1984).

Figura 1. Ejemplo de especies migrantes durante el GIBA. Las especies de color verde representan organismos de origen sudamericano, y las de color azul, especies de origen norteamericano. Fuente: Kemp (2005).

Page 6: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

5

Sitios Paleontológicos Intercambianos Hasta la fecha, en Centroamérica solo se conoce un sitio intercambiano, el cual a su vez es el sitio paleontológico más grande y diverso de toda la región, el Sitio Paleontológico Río Tomayate, ubicado en el Municipio de Apopa, del Departamento de San Salvador (Cisneros, 2005). En el sitio, se reportan una gran variedad de especies animales, entre las que se encuentran cocodrilos, tres especies de tortuga, un anseriforme, y más de 20 especies de mamíferos. Se dice que es un sitio intercambiano porque en este se ha reportado un Borophagus hilli (un cánido caracterizado en toda América del Norte por ser pre-intercambiano) coexistiendo con organismos provenientes de América del Sur, lo que sugiere que este sitio muestra una de las primeras fases de intercambio de este evento faunístico. En el sitio se conocen tres especies de carnívoros, el Borophagushilli, una especie de felino diente de sable del género Smilodon, y un oso de cara corta, cf. Arctotherium. Este oso es una de las especies más importantes del sitio, ya que sus parientes más cercanos habitaron en América del Sur varios millones de años después, y nos indica que El Salvador y Centroamérica sirvieron como un punto de evolución y dispersión para varios grupos en su camino hacia el norte o el sur (Soibelzon et. al., 2008).

Las especies de herbívoros que se han encontrado en el sitio pueden dividirse en dos grupos: los de ramoneo y los de pastoreo. Entre los primeros, se encuentran los organismos de mayor tamaño reportados: el mastodonte Cuvieronius hyodon, el cual poseía un par de colmillos superiores rectos y dirigidos hacia adelante; y dos especies de perezosos gigantes del género Eremotherium, animales que se desplazaban sobre cuatro patas y utilizaban sus manos y garras para jalar las ramas de las que se alimentaban. Tanto el mastodonte como los perezosos habitaban en sabanas boscosas y en los linderos de los bosques, y se desplazan grandes distancias en busca de alimentos (Webb y Rancy, 1996; Cisneros, 2005). Además se reportan dos especies de venados, Odocoileus sp, y Mazama sp (Webb y Rancy, 1996; Cisneros, 2005). La mayor diversidad de herbívoros se encuentra dentro del grupo de pastoreo. Para el sitio, se reportan 3 especies de caballos del género Equus, y dos especies de camelidos emparentados con las llamas (Paleolama sp., y Hemiauchenia cf. seymourensis), lo que indica la presencia de amplias zonas de sabana. También se reportan dos especies de perezosos medianos, de los géneros Megalonyx y Meizonyx, los cuales habitaban zonas de sabana alimentándose de pasto (Webb y Rancy, 1996; Cisneros, 2005). Además, se han reportado dos especies de mamíferos con hábitos semiacuáticos, un armadillo gigante (Glyptotherium arizonae) y el notoungulado Mixotoxodon larensis, conocido comúnmente como hipopótamo americano, y ambas se alimentaban de pasto, probablemente en los alrededores de charcas o ríos. Junto a estos organismos, se reporta también una especie de roedor aún no identificada (Cisneros, 2005; Kemp, 2005). En conclusión, el Sitio Paleontológico presenta una gran diversidad de fauna, y representa un hábitat mixto, en donde predominaron las sabanas (Fig. 3), con mucha presencia de cuerpos de agua como lo evidencian los cocodrilos, tortugas, Glyptotherium y Mixotoxodon encontrados en el yacimiento, mientras que las zonas un poco más elevadas

Figura 2. Una pareja de Borophagus hilli se alimentan de los restos de un camélido, una escena bastante común en el Mioceno de El Salvador. ® Mauricio Antón.

Page 7: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

6

predominaron sabanas boscosas y hábitats más cerrados.

Sitios Post-Intercambianos Los sitios post-intercambianos son los más abundantes, habiéndose reportado para los años 50 más de 40 localidades, de las cuales sobresalen por su relevancia La Barranca de Sisimico, en San Vicente, y El Hormiguero, en San Miguel (Webb y Perrigo, 1984). En La Barranca de Sisimico, se reporta una gran diversidad de mamíferos y vertebrados con una antigüedad de 1,8-1,5 millones de años, entre los que destacan dos especies de perezosos medianos endémicos para el país, Megalonyx obtusidens y Meizonyx salvadorensis, el perezoso gigante Eremotherium, el mastodonte Cuvieronius, un Mixotoxodon, un cérvido y el único fósil de un murciélago, Pteronotus panelli, para El Salvador. El hábitat representado en este sitio corresponde a una sabana con presencia dispersa de árboles, y comienza a observarse un aumento en la aridez ocasionada por las glaciaciones (Webb y Perrigo 1984; Webb y Perrigo, 1985). Por otro lado, El Hormiguero representa una fauna en a finales del Pleistoceno en donde el clima fue mucho más árido y las sabanas predominaron en la mayor parte del territorio evidenciado por la presencia del género Bison. También se reporta el capibara Neochoerus, un Glyptotherium y un Mixotoxodon, que demuestra que en algunas partes de nuestro territorio predominaban zonas ligeramente más húmedas. Entre otros mamíferos

destacan un felino diente de sable Smilodon, un perezoso gigante, un mastodonte, algunos caballos y un camello (Webb y Perrigo, 1984). La presencia de Mammuthus columbii en algunas zonas del país demuestra que durante esta época el clima era mucho más árido que en la actualidad. Referencias Bartoli, G., M. Sarnthein, M. Weinelt, H. Erlenkeuser,

D. Garbe-Schönberg, D W. Lea. 2005. Final closure of Panama and the onset of northern hemisphere glaciation. Earth and Planetary Science Letters, 237: pp. 33-44.

Bell, C. J., E. L. Lundelius Jr. (Co-Chairmen), A. D. Barnosky, R. W. Graham, E. H. Lindsay, D. R. Rues Jr., H. A. Semken Jr., S. D. Webb, R. J. Zakrzewski. 2004. The Blancan, Irvingtonian, and Rancholabrean Mammal Ages. In: M. O. Woodburne (ed.), Late Cretaceous and Cenozoic mammals of North America. Columbia University Press: New York. pp. 232-314.

Benton, M. J. 2005. Vertebrate Paleontology. 3ª Edition. Blackwell Science Publishing: Oxford. 455 pp.

Carranza-Castañeda, O., W. E. Miller. 2004. Late Tertiary Mammals from Central México and their Relationship to South American Immigrants. Revista Brasilerira de Paleontología. 7(1): pp. 249-261.

Carroll, R. L. 1988. Vertebrate Paleontology and Evolution. W. H. Freeman and Company: New York. 698 pp.

Cisneros, J. C. 2005. New Pleistocene Vertebrate Fauna from El Salvador. Revista Brasilerira de Paleontología, 8(3): pp. 239-255.

Cortés-Ortiz, L.; E. Bermingham, C. Rico, E. Rodríguez-Luna, I Simpaio, M. Ruiz-García. 2003. Molecular systematics and biogeography of the Neotropical monkey genus, Alouatta. Molecular Phylogenetics and Evolution, 26: pp. 64-81.

Flynn, John J., B. J. Kowallis, C. Nuñez, O. Carranza-Castañeda, W. E. Miller, C. C. Swisher Iii, E. Lindsay. 2005. Geochronology of Hemphillian-Blancan Aged Strata, Guanajuato, Mexico, and Implications for Timing of the Great American Biotic Interchange.

Graham, R. W. 1998. The Pleistocene terrestrial mammal fauna of North America. In: C. M. Janis, K. M. Scott, L. L. Jacobs (eds.), Evolution of Tertiary Mammals of North America: Volume 1: Terrestrial

Figura 3. El hábitat predominante en el Tomayate, en donde una pareja de Paleolama se alimenta de pasto, y al fondo se observa un perezoso gigante Eremotherium alimentándose de las hojas de un árbol. ® André Houot.

Page 8: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

7

Carnivores, Ungulates, and Ungulatelike Mammals. Cambridge University Press: Cambridge. pp. 66-71.

Iturralde-Vinent, M., R. D. E. Macphee. 1999. Paleogeography of the Caribbean Region: Implications for Cenozoic Biogeography. Bulletin of the American Museum of Natural History 238: pp. 1—95.

Iuliis De, G., C. Cartelle. 1999. A new giant megatheriine ground sloth (Mammalia: Xenarthra: Megatheriidae) from the late Blancan to early Irvingtonian of Florida. Zoological Journal of the Linnean Society, 127: pp. 495-515.

Kemp, T. S. 2005. The Origin and Evolution of Mammals. Oxford University Press: New York. 331 pp.

Lambert, W. D., J. Shoshani. 1998. Proboscidea. In: C. M. Janis, K. M. Scott, L. L. Jacobs (eds.), Evolution of Tertiary Mammals of North America: Volume 1: Terrestrial Carnivores, Ungulates, and Ungulatelike Mammals. Cambridge University Press: Cambridge. pp. 606-622.

Misión Geológica Alemana. 1978. Mapa Geológico General de la República de El Salvador 1:500000. Bundesanstalt für Bodenforschung. Hannover.

Ortiz-Jaureguizar, E., G. A. Cladera. 2006. Paleoenvironmental evolution of southern South America during the Cenozoic. Journal of Arid Environments, 66: pp. 498-532.

Palmer, D. 2000. Atlante del Mondo Preistorico. Arnoldo Mondadori Editore S.p.A.: Milano. 224 pp.

Porta De, J. 2003 La formación del istmo de Panamá. Su incidencia en Colombia. Rev. Acad. Colomb. Cienc., 27(103): pp. 191-216.

Prothero, D. R. 1998. The Chronological, climatic, and paleogeographic background to North American mammalian evolution. In: C. M. Janis, K. M. Scott, L. L. Jacobs (eds.), Evolution of Tertiary Mammals of North America: Volume 1: Terrestrial Carnivores, Ungulates, and Ungulatelike Mammals. Cambridge University Press: Cambridge. pp. 9-36.

Rich P. V., T.H. Rich 1983. La Ruta de Dispersión Centroamericana. En: D. H. Janzen (ed.) Historia Natural de Costa Rica.. Editorial Univ. de Costa Rica. pp. 13-34.

Sánchez, B., J. L. Prado, M. T. Alberdi. 2004. Feeding ecology, dispersal, and extinction of South American Pleistocene gomphotheres (Gomphotheriidae, Proboscidea). Paleobiology, 30(1): pp.146–161.

Soibelzon, L. H., M. R. Romero, D. H. Aguilar, V. B. Tartarini. 2008. A Blancan (Pliocene) short-faced bear from El Salvador and its implications for

Tremarctines in South America. Neues Jahrbuch für Geologie und Paläontologie, Abhandlungen, 250(1): pp. 1-8.

Stirton, R. A., W. K. Gealey. 1949. Reconnaissance Geology and Vertebrate Paleontology of El Salvador, Central America. Bulletin of the Geological Society of America 60: pp 1731-1754.

Tedford, R. H., L. B. Albright Iii, A. D. Barnosky, I. Ferrusquia-Villafranca, R. M. Hunt Jr., J. E. Storer, C. C. Swisher Iii, M. R. Voorhies, S. D. Webb, D. P. Whistler. 2004. Mammalian Biochronology of the Arikareean Through Hemphilian Interval (Late Oligocene Through Early Pliocene Epochs). In: M. O. Woodburne (ed.), Late Cretaceous and Cenozoic mammals of North America. Columbia University Press: New York. pp. 169-231.

Turner, A., M. Antón. 1997. The Big Cats and their fossil relatives. Columbia University Press: New York. 234 pp.

Turner, A., M Antón. 2004. Evolving Eden: An Illustrated Guide to the Evolution of the African Large-Mammal Fauna. Columbia University Press: New York. 269 pp.

Van Valkenburgh, B., T. Sacco, X. Wang. 2003. Pack Hunting in Miocene Borophaginae Dogs: Evidence from Craniodental Morphology and Body Size. Bulletin of the American Museum of Natural History 279: pp. 147-162.

Wang, X., R. H. Tedford, B. E. Taylor. 1999. Phylogenetic Systematics of the Borophaginae (Carnivora: Canidae). Bulletin of the American Museum of Natural History, 243: pp. 391.

Webb, S. D., S. C. Perrigo. 1984. Late Cenozoic Vertebrates from Honduras and El Salvador. Journal of Vertebrate Paleontology. 4(2): pp. 237-254.

Webb, S. D., S. C. Perrigo. 1985. New Megalonychid sloths from El Salvador. In: G.G. Montgomery (ed.), The Evolution and Ecology of Armadillos, Sloths, and Vermilinguas. Smithsonian Institution Press: Washington. pp. 113-120.

Webb, S. D., A. Rancy. 1996. Late Cenozoic Evolution of the Neotropical Mammal Fauna. In: J. B. C. Jackson, A. F. Budd, A. G. Coates (eds.), Evolution and Environment in Tropical America. University of Chicago Press: Chicago. pp. 335-358.

Page 9: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

8

Ocurrencia de Potos flavus en Jucuarán, Departamento de Usulután. Por Ricardo Ibarra Portillo Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN). Calle y Colonias Las Mercedes. Km 5 y ½ carretera a Santa Tecla, San Salvador. El Salvador. (Hasta 30 de Junio, 2009). [email protected].

El 9 de mayo de 2006 se encontró un individuo adulto muerto de Potos flavus en la parte baja de la quebrada La Piragua, cantón Salamar, jurisdicción de Jucuarán, departamento de Usulután (13° 10’ 3.53’’ N y 88° 13’ 46.28’’ O). Posiblemente murió por acción antropogénica, ya que se encontraba sobre el lecho rocoso del mencionado cauce, y la osamenta seca aún presentaba restos de piel. Posteriormente, el 5 de diciembre de 2008, en el sector de El Caballito, al suroeste de la quebrada La Piragua (13° 10’ 16.88’’ N y 88° 13’ 44.85’’ O), se encontró el cráneo de un individuo adulto. Éste presentaba los dos colmillos superiores, el segundo premolar derecho y el segundo par de molares superiores. Las medidas son: 9.5 cm de largo, 4.5 cm de alto y 6.7 cm de ancho. Estos registros constituyen el segundo y tercero para la zona, de acuerdo a la base de datos de la Colección de Mastozoología del Museo de Historia Natural de El Salvador (MUHNES), donde se totalizan 30 especímenes para nueve departamentos del país: 8 para San Miguel (laguna de Olomega y volcán de San Miguel con 4 especímenes cada uno), 5 para el departamento de Chalatenango (Los Esesmiles-Cerro El Pital), 4 para Santa Ana (Montecristo, Cerro Los Naranjos y volcán Santa Ana), 4 para el departamento de Morazán (Cerro Cacahuatique). Los departamentos de Ahuachapán, Usulután (en las localidades de Jucuarán y Puerto El Triunfo) y La Libertad, presentan dos registros cada uno. Por otro lado, San Vicente y Sonsonate reportan un espécimen por departamento. Agradecimientos Al Dr. James Owen por facilitar su base de datos de colectas, donde están incluidos los registros del Museo de Historia Natural de El Salvador.

Figura 1. Cráneo de Micoleón (Potos flavus) localizado en el sector el caballito, Jucuarán, departamento de Usulután. Diciembre 2008. Fotografía por Ricardo Ibarra Portillo.

Page 10: OOCCEELLOOTTLLÁÁNN · nacional. Como todo en la naturaleza, las poblaciones sufren cambios constantes y, actualmente, por las modificaciones ... El surgimiento del Istmo de Panamá

Ocelotlán 6 (1) Junio 2009

9

El Grupo de Trabajo de Mastozoología de El Salvador (GTMES), es un grupo de científicos, profesionales y estudiantes con interés en los mamíferos. Es de carácter investigativo y conservacionista. El grupo promoverá el intercambio científico, mediante reuniones y la publicación de este boletín (Ocelotlán). El grupo abordará los problemas socioeconómicos del país tanto y cuanto afecten la mastofauna de El Salvador. Los artículos de Ocelotlán pretenden ser referencia sobre la investigación en El Salvador. GTMES es también una entidad integradora donde ningún miembro de la comunidad científica se sienta excluido. Trata de fomentar la comunicación entre las distintas organizaciones pertenecientes a la comunidad científica, donde exista competencia para ello. GTMES quiere ser un organismo de consulta, donde se reúnan los especialistas del área.

Suscripción al Boletín

Al boletín se pueden suscribir todas las personas interesadas en esta información. Para suscribirse sólo tiene que mandar un correo en blanco a [email protected] o accesar a la página: http://groups.yahoo.com/group/gtmes/ y seguir las instrucciones dadas en esa página. Así mismo puede comunicarse al correo [email protected] y dirigir su solicitud a Stefany Henríquez (Coordinadora GTMES). En este boletín se publican varios tipos de materiales: notas sobre descubrimientos o nuevos rangos, avances de investigación, revisiones de literatura, artículos de opinión de temas relevantes, entre otros. De preferencia enviar artículos entre 500 y 1500 palabras, y notas entre 300 y 500 palabras. Para publicar envíe su nota o artículo a la dirección electrónica [email protected] dirigido a Milagro Salinas, quien se pondrá en contacto con usted y los miembros del consejo editorial. Para mandar información al grupo una vez suscrito, sólo tiene que enviar un correo a [email protected] y automáticamente su correo circulará entre los miembros.