r J *JANO. Jano es uno de los dioses n¡ás antiguos del panteón romano. Se le repre- senta con dos caras opuestas, una que mrra hacia delante, y la otra, hacia atriís. Susle- uendas son exciusivamente romanas y están íieadas a las de los orígenes de la ciudad' -Sesún ciertos mitógrafos, Jano era en Romá una divinidad indígena, y en otro tiempo habría reinado en ella con Cameses, un réy mítico del cual apenasse conoce m¿is que el nombre. Segrln otros, Jano era ex- tianjero, oriundo de Tesalia, y desterrado "n Ro-a. donde Cameses lo habria acogido cordialmente, hasta el extremo de compar- tir el reino con é1. Jano habría erigido en- tonces una ciudad en la cima de la colina' oue se habría llamado Janículo tomando este nombre del del dios. Llegado a [talia con su esDosa. llamada Camise o Camasena, tuvo allí hijos, principalmente uno llamado Tíber, epónimo del rio. Mris tarde, a .la mueie de Cameses, reinó solo en el Lacio, v acoeió a Saturno, expulsado de Grecia -por s,ittijo Júpiter (v. Crono y Zeus). Mien- iras Jano ocuiaba el Janiculo, Saturno rei- naba en Saturnia, ciudad emplazada en la cumbre del Capitolio. Se atribuyen i este reinado de Jano las habitualescaracterísticas de la edad de oro: honestidad perfecta en los seres humanos' abundancia, paz completa, etc. Jano, ha- bría sido el primero en emplear barcos para trasladarseáe Tesalia a ltalia; también se- ría el inventor de la moneda. En efecto, las monedas romanas de bronce más antiguas llevaban en el anverso la efigie de Jano' y en el reverso una proa de barco' Jano ha- bría civilizado ademása los primeros habi- tantes del Lacio, 'los Aborígenes - 1o cual se atribuye tambiérf a Saturno --. Antes de é1. éstos llevaban una existencia mísera y no conoclan ni ciudades,ni leyes, ni el cul- tivo del suelo. Jano les enseñó todo esto' Después de su muerte, Jano fue divini- zado, y a su personalidad divina se unen otras léyendas que no parecen guardar re' lación óon las precedentes. Se le atribuye especialmente un milagro que salvó a Roma de la conquista sabina. En la época-en que Rómulo y sus compañeros raptaron las mu- jeres sabinas,Tito Tacio y los sabinos ata- taron la nueva ciudad. Una noche, Tarpeya' hija det guardiándel Capitolio (v..Tarpeva)t entrególa ciudadela al enemigo. Este escalÓ las aliuras, y estabaa punto de rodear a los defensores. óuando Jano hizo brotar ante los asaltantes un surtidor de agua caliente, que les asustó y les puso en fuga. Para conme- morar estemilagro, decidióse que en tiempo de guerra se dejaría siempre abierta la Jano: V¡nn., I. .L.,V, 156; Vll,2'I; MAcRoB" -soi.. l. S. l7: Ov., Met.,XlY,778 s.; Fasr.,I, 259 s.i Vrnc., En., Vlil,3l9 s.' v 358; Prur', O. sr.. 4l: Senv. a VInc., Ez., VIII, 319; S¿t'¡ ÁcÚsi. o" Civ. Dei. vll, 4l soLINo, Il' 5 s.: JoH. LYD., De mens., IV, 2. Cf. P. Gnuuu.'