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ILiberar la verdad
Sidney Rooy
Cul es el propsito de ser un discpulo-aprendiz,involucrado con
el seor en una relacin de conocer-por-amar?Hemos visto varias
conclusiones a esta pregunta. primero, elnico modo de aprender
realmente es ser discpulos. Segundo,un discpulo aprende en el
camino, viviendo y actuando.Tercero, uno aprende cuando sigue al
maestro como modelo yluego modela una vida que llama a otros
aldiscipulado. Cuarto,aprender g, consecuentemente, conocer
requieren uncompromiso de amor hacia aquellos a quienes selimos y
unllamamiento dirigido a otros como discpulos potenciales
opracticantes. Y, quinto, el conocimiento verdadero opta conCristo
por cambios histricos y concretos, cuando tales cambiospromueven el
cumplimiento humano de la voluntad de Diospara todas sus
criaturas.
"Si se mantienen fieles a mis enseanzas -dijo Jess-
sernrealmente mis discpulos; y conocern la verdad, y la verdad
los
har libres" (Jn 8.31-32). Los discpulos conocen la verdad.
Laverdad es que los seres humanos fueron hechos libres, pero estnen
cadenas; son cocreadores, pero destn-rctores; llevan la imagende
Dios, pero son pecadores. amantes de la vida, pero electoresde la
muerte; recipientes de la gracia plena, pero
desgraciados;altruistas, pero egostas; seruidores de I)ios, pero
complacientes
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n4 Los ne'ros DEL coNoclMlENTo
con los hombres: discpulos-aprendices, pero
vagabundoslvlcladizos: conocedores orientados por la experiencia,
perotecncratas entrenados por las mquinas; portadores humildesciel
Espritu Santo, pero caudillos caprichosos'
En alguna parte se desvi la verdad y se necesitaredescubrirla.
Esa fue la misin de Jess: poner la verdad en superspectiva
original, liberar la verdad de su crcel de odio'violencia, egosmo y
pecado humano'
Por esta razn, para Jess la verdad no es en primer lugar
unbloque de conocimiento objetivo. La verdad, como el acto
deconocer, es una forma de vida. una forma de ser y creer' unameta
a ser alcanzada. Por esto, Jess se represent como lapuertay como eI
camino. Slo por medio de l puede el hombresalir de su crcelpersonal
de iemor y maldad, y entrar al mundolibre y creativo de1
discipulado y del amor' Como Jess mismrrdijo: "Yo soy el camino, la
verdad y 1a vida" (Jn 14 6)' tressinnimos para expresar su
identidad y su misin . El camino es
el viaje 1argo, que no caminamos solos, ya que viajamos
juntoscon 1; la uerdad es la relacin que tenemos con Cristo
-Llnrrelacin personal-, por la cual somos recibidos en gracia
com()hermanosyhermanas,compaerosdeviaje'Estarelacinclt'percln y
reconciliacin que nos fortalece es la revelacin plen;r
de la uido, la vida como debera ser, para sostener,
par;trestaurar, para enriquecer, para tec[ear' para
iransformar'
Sin embargo, esta verdad no la conocemos realmente' Pueilt'
ser una esperanza, una promesa, una meta' pero es una vercltr
I
iodava demasiado escondida para nosotros' No slo l;rsEscrituras
dan testimonio de que vivimos en un m'tlndo bajo ''lpoder de las
tinieblas; nuestra propia experiencia delvalle clc l'r
.o*bru lo confirma. Las ambigedacles de nuestro mttlrtl"
I -IgeRnR LA VERDAD
presente oscurecen tanto las decisiones ticas coflictivas de
hoycomo los posibles enigmas en el camino de maana.
Este es nuestro problema bsico y, a la vez, nuestro granclesafo
en la educacin cristiana. Podemos expresarlo as: elobjetivo de la
educacin cristiana es hacer que la verdad lleguea ser realidad.
Para personas atadas a tradiciones estticas o asituaciones sociales
esclavizantes (en el trabajo, 1a familia, losgrupos profesionales o
los sistemas de clase), esto significa unllamado claro a
convertirse en discpulos obedientes, paracambiar las crceles en
casas de libertad. Aprender y conocer laverdad significa para ellos
denunciar las fuerzas de la muerte queIos entrampa
-a ellos y a quienes sufren junto con ellos- y
luchar para llegar a ser agentes libres en el Reino de Dios.
Quizsu cadena ms fuerte es el estado psicolgico que acepta
larealidad presente como un sistema sagrado e intocable.
Un compaero de viaje en la Argentina me comento un da:"Realmente
no creo que est bien hablar con los indios en elChaco sobre su
situacin de pobreza y ar-ralfabetismo. ZPor qudarles ms problemas?
Son ms felices como son". Sin embargo,Jess responde que el llegar a
ser su aprendiz significa,precisamente, llegar a conocer 1a verdad:
saber por qu sus niosmueren tan jvenes, por qu los peces y las aves
desaparecen desus ros y bosques, por qu se rebelan 1os jvenes 9
emp\ezan atomar licor, por qu su expectativa de vida es menos de la
mitadque la de muchos otros pueblos. Ellos deben saber que
lascadenas son hechas por los hombres y no por Dios
Debenexperimentar que el don de 1a vida, preciosa y sagrada, es
Llnderecho de la creacin, y que un da los que 1a destn-ryenconocern
la ira de Dios, quien retribuye y castiga a losopresores. De alguna
manera, se debe comunicar a la mitacl delos pueblos en nuestro
mundo una visin de quines son y de lo
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776 Los REros DEL coNocrMrEN-to
que, por la gracia divina, pueden llegar a ser, porque
elconocimiento de la verdad les fue negado.
Para quienes viven en lo que Freire lrama el nivel
transitiuo-ngenuo del conocimiento, el problema educativo es, a la
vez,ms fcil y ms difcil. Es ms fcil porque en este grupo existeun
reconocimiento limitado de las prioridades bsicas de la vida.El
problema es doble. Por un lado, existe un optimismosuperficial
acerca de la capacidad del cristian o como tal deanalizar y
resolver los problemas humanos. por otro lado, existeuna
incapacidad para reconocer la complejidad y el carcterentrelazado
de todos los elementos de la existencia humanacontempornea.
con referencia al optimismo superficial del cristiano,
debemosrogar y luchar por la humildad, que nos permite reconocer
laslimitaciones humanas. El dogmatismo que circula detrs demuchas
de nuestras formulaciones teolgicas, el aisramiento quecaracteriza
nuestros "eclesiasticismos" y la determinacin conque vivimos
nuestras afinidades ideolgicas, todo encarna laspretensiones
humanas que niegan la humildad. Esto essorprendente,
particuiarmente en cristianos evanglicos que hanconfesado por tanto
tiempo su aceptacin de la depravacinhumana. Por el contrario, la
confesin delsentido profundo delpecado humano debe despertarnos a
la profunda y extensapresencia del pecado en todo aspecto de la
vida. Esto significaque existe no slo el pecado personal sino, lo
que es mscomplicado, elpecado social, un elemento constiiutivo de
todasnuestras sociedades humanas.
Aqu debemos confesar que la libertad, tal como fue en elpropsito
de Dios, est llegando a ser progresivamente menosalcanzable para la
mayora de los pueblos del mundo. por lotanto, para aquellos que
quieran formar parte del grupo que
LISERAR LA VERDAD
Paulo Freire denomina crtico-constructiuo -los que tienen un
alto nivel de conciencia-, la educacin cristiana
requiereprincipalmente una conversin profunda a Jess y a
lasdemandas de su Reino. Esta conversin exige dejar atrs todo 1oque
desiruye y deforma, aplasta y castra, reprime y condena a
ladesesperanza a grandes sectores de la humanidad. Cuandocreemos
que estos males estn presentes mayormente en otrassociedades y muy
poco en la nuestra, somos parte de lavegetacin, quizs algo lindo de
ver, pero totalmente incapaz deefectuar el cambio. La conversin
real requiere el cambio de lapersona junto con su mundo concreto.
Para ial persona, todaslas cosas son nuevas.
En otro contexto, el apstol Pablo afirma este principio:"Cristo
nos libert para que vivamos en libertad. Por lo tanto,mantnganse
firmes y no se sometan nuevamente al yugo deesclavitud" (G 5.1).
Para los judos esto signific la liberacin deun sistema religioso de
salvacin por obras oneroso, la cualinclua el mundo concreto de la
tica comunal y personal.Porque la libertad real, contina Pablo, es
servirse unos a otros,amando alprjimo como a uno mismo (G
5.14).
Sin embargo, la tragedia es que vivimos en un mundo queEsa-
vende diariamente esa iibertad por un plaio de
lentejas. Debemos pensar seriamente: aQue significan hoy
losconceptos de tarifas proteccionistas, seguridad
nacional,globalizacin de comunicaciones, neoliberalismo
aplastante,deudas externas, pobreza asfixiante y contaminacin
ambientalpara la mayor parte de una humanidad sufriente y
marginada?iNo estn predeterminados para proteger la llamada
"libertad"cie un grupo privilegiado? No aseguran, ms bien, la
existenciacontinua de un mundo de marginados y libres, de ricos y
pobres,de poderosos y excluidos?
t77
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778 Los Rrros DEL coNoctMrENTo
La simplicidad severa del programa liberador de Jess es
vistacomo demasiado ingenua para ser considerada seriamente hoy,o
as parece pensar mucha gente. icreemos realmente que el darla otra
mejilla es una opcin viabre en ras decisiones personares,sociales o
internacionares? iEs posible cambiar ras armas porrejas de arado y
vender lo que tememos para drselo a lospobres? cul es la verdad de
Dios para arcanzar ra prenitud dela vida, la vida abundante, y sta
llegue a ser una realiclad paratodos?
Hemos puesto como meta de la educacin cristiana
elllegar_a-conocer la verdad de la voruntad de Dios para su mundo.
Esto,ciertamente, requiere ra confesin gozosa der nombre de
cristoen medio de las pruebas y ras ambigedades de ra vida actuar.
Erdiscpulo debe seguir adelante en fe: fe en la persona y en
losideales ticos de nuestro Maestro_profesor, y fe ensu amor,
quenos faculta para superar ras diferencias profundas que
dividennuestro entendimiento der camino que debemos seguir.
Eldiscpulo debe buscar la verdad, pero tambin riberar ra
verdad,para que sta obre su misin en medio del mundo de Dios.
sedeben renovar las cisternas viejas, y construir cisternas
nuevas,para que el agua de la vida fluya gratuitamente a todos
lospueblos, y tambin ellos gusten y canten de la bondad de
Dios.
IO
fr y aprenderSidney Rooy
En el Nuevo Testamento elaprendizale se asocia siempre conla
experiencia. Uno aprende cuando sale y vive. Mateo 9.13aclara la
secuencia de un modo cristalino. Literalmente, Jessdice: "Despus de
salir (o saliendo), aprendan lo que estosignifica", lo cual puede
afirmarse como un primer principiopedaggico'. uno aprende en la
accin.
Esto no significa que no se puede aprender de los dems.Todo lo
contrario. Pablo dice a los corintios que deben aprenderde los
apstoles cmo vivir de acuerdo con las Escrituras (1Co4.6). Aconseja
a los filipenses a aprender de su propio ministerio(Fil4.9).
Recuerda a los colosenses que aprendieron de Epafraselevangelio
portador de fruto (col 1.7). La relacin se extiendeincluso a la
naturaleza porque, si la observamos con atencin,aprendemos a leer
las seales de los tiempos (Mt24.32). De estemodo, uno aprende
mediante una inieraccin viva con lanaturaleza y con los dems.
Sin embargo, no todo aprendizaje es una experiencia
positiva.Algunos "siempre estn aprendiendo y nunca pueden llegar
alconocimiento de la verdad" (ZTi 3.7). Estn aquellos queencuentran
placer en su antiguo modo de vida: se embriagan,viven en la
inmoralidad, calumnian, se aferran al legalismo; sonempecinados,
mentirosos y orgullosos. pero pablo reprocha: ,,No
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181180 Los Rgros npl conazN
fue sta la enseanza que ustedes recibieron acerca de cristo"(Ef
4.20).Talvez algunos hoy consideraran a pablo culpable demachismo
por su mencin particular de la susceptibilidad de rasviudas ms
jvenes para convertirse en chismosas yentromeiidas. En todo caso, l
condena tal aprendizaie (lTi5.13).
De igual manera, eI concepto paralelo en el AntiguoTestamento
(lamed) establece claramente la posibilidad deaprender prcticas
abominables. Israel no debe aprender niacostumbrarse a las
abominaciones de las otras naciones (Dt18.9), ni debe practicar sus
obras de maldad (Sal 106.35). Nodebe aprender el culto de Baal, con
todas sus prcticas inicuas ysus mentiras (Jer 2.33; 9.4; 13;
12.21-23). En cambio, elverdadero israelita debe aprender a
practicar el bien, a buscar lajusticia, a corregir la opresin y a
defender a la viuda (ls 1.17).La visin del maana de Dios sostiene
que "cuando tus juicios(justicia) llegan a la tierra, los
habitantes del mundo aprenden 1oque es justicia" (Is 26.9).
A partir de estos pasajes descubrimos que el aprendizaje
esunproceso dinmico. Las diferentes traducciones del trmino en
laBiblia clarifican su significado. El entrenamiento
(lase"aprendizaje") de los animales como bestias de carga, o de
losmsicos para el culto deltemplo, o de los soldados en el uso
delas armas no sucede en un momento. Astambin , elaprendizajedel
temor de Dios, el habituarse a sus preceptos, elacostumbrarse a sus
caminos es algo que continua a 1o largo detoda la vida. As como los
padres ayudan a sus hijos a aprenderlos caminos de Dios, de igual
modo todo el pueblo deberaprender "para que aprenda a temerme todo
eltempo que vivaen la tierra" (Dt 4.10).
Sin embargo, el apren d\zaie no es slo un proceso que dura
toda la vida sino tambin un proceso en el que uno tomaconciencia
de la diferencia entre el bien y el mal, y efecta unaeleccin
consciente entre uno y otro. Aqu est claro que elhombre no es un
pen de apdrez en el tablero de Ia fortuna'sujeto a las
manipulaciones de los dems' El hombre fue creadocon la capacidad
innata de aprender y es constantementedesafiado en las Escrituras a
ejercitar tal aptitud. Para expresarlocon otras palabras, aprender
es tomar partido a favor o encontra. Uno no aprende, en primer
lugar, para conocerinielectualmente. Ms bien, aprende para actuar,
para vivir' para
servir, y uno no acta o vive o sirve solo' Se convierte
endiscpulo, en alumno' Aquel que sigue a Cristo es su
alumnoparatoda la vida, es su discpulo' Cada vez qe 1a Biblia usa
lapalabra "discpulo", seala literalmente a aquellos que hanLlegido
ser los alumnos de Jess. "Si alguien quiere ser midiscpulo, tiene
que negarse a s mismo, tomar su cruz yseguirme,, (M:16.24),Ta]es
vidas se convierten e inspiran a otrosa hacerse tambin alumnos.
As, el aprendizaje se transforma en un concepto niveladorentre
los educadores y los alumnos, entre los maestros y 1osestudiantes,
entre padres e hiios. Todos somos alumnos y todos
somos maestros en la medida en que somos verdaderosdiscpu1os de
Cristo. Es verdad que algunos han sido aiumnospor ms tiempo que
otros. Y tambin es cierto que' a menudo'lo, nunro. discpulos ven
ciertas realidades con mayor clarldadque los ms antiguos. Y es casi
universalmente cierto que unoaprende y conoce la experiencia y la
realidad propias meior delo que podra hacerlo un extrao'
De este modo, aprender es, en primer lugar' hacer
uninventariodelpropiocontexto,delapropiarealidad'ytomar
IR v RpRr.NoeR
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IR Y APRENDER 183l82 LoS REToS DEL COMZN
conciencia de lo que all significa elegir entre el bien y el
mal, lajusticia y la injusticia, la libertad y la opresin. En
segundo lugar,aprender significa tomar partido, lanzarse
personaimente a lalucha por el bien, la justicia y la libertad en
cuanto discpulo yalumno de Cristo. Y si acto como tal, mi vida se
transforma enun modelo que ensea a los dems, es decir, en un
agenteviviente de la educacin de Dios para la humanidad.
No es esto 1o que nuestro texto expresa con tanta belleza
gsobrecogedora simplicidad? "Vayan y aprendan lo que significa:'1o
que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios"' (Mt9.13). Y,
"pongan en prctica lo que de m han aprendido,recibido y odo, y lo
que han visto en m..." (Fii 4.9). O, "queaprendan los nuestros a
empearse en hacer buenas obras, a finde que atiendan a lo que es
realmente necesario y no lleven unavida intil" (Tit 3.14).
Permtaseme resumir. En un sentido positivo, el aprendizajees el
proceso de experiencia personal y comr:nitaria por el cualuno toma
conciencia de su realidad personaly social, y elige serun
instrumento activo para elcambio positivo. Para el cristiano,el
aprendizaje es el proceso de discipulado por el cual descubrela
falta de amor y shalom (lapaz integralde Dios) en el mundo,g, como
alumno de1 Maestro, lucha para transformar esarealidad. Uno sabe
que esto no va a ser fcil. No fue fcilpara elMaestro. En efecto,
para lsignific aprender obediencia a travsdel sufrimiento (Heb
5.8). Y nosotros sabemos que l fueobediente hasta la muerte, y
muerte de cruz (Fil2.8).
Tomar partido por el Maestro. o unirse a su equipo. si
seprefiere, es una tarea terriblemente difcil. Somos
presionadospara unir fuerzas con la mayora, con el modo de eiercer
controlen nuestra sociedad, con la inercia institucional y Ia
rigidezestructural de la tradicin, y esta presin inclina nuestra
mente
colectiva y las voluntades personales en direccin del statu
quo.En realidad, preferimos no cambiar, y mucho menos
serinstrumentos del cambio. Luchar contra las mareas
delconseradorismo estrecho y del provincialismo nacional oideolgico
demanda ms coraje y sacrificio que el que estamosdispuestos a poner
en Prctica.
Olvidamos que la conformidad con la realidad del malpresente de
nuestras sociedades niega nuestro discipulado,nuestro proceso de
aprendizaje. Esa es, ta1 vez,lamayor tragediade nuestra era: tantos
conformistas que son discpulos-alumnos,pero sio de nombre. Estos
son los que estn siempreaprendiendo, pero nunca logran un
conocimiento de la verdad.El Apocalipsis se refiere a ellos cuando
expresa con tristeza Iatotal incapacidad de algunos para aprender
elcntico nuevo queel cielo ensea (14.3).
Entonces, escuchemos las palabras de nuestro Maestro:"Vayan y
aprendan". Esto exige una nueva apertura antenuestro momento
histrico, demanda una voluntad para elegirel bien, la justicia y la
libertad para todos los hombres, y nosobliga a seguir el camino de
la cruz en oposicin a la marea quenos envuelve.
Si nuestra eleccin da por resultado nuestra propia ventajasobre
la de nuestro prjimo, debemos sospechar de laautenticidad de la
decisin, pero si nuestra eleccin abre anuestro prjimo las puertas
del amor, la justicia y la libertad,entonces podemos dar gracias
porque nuestro largo peroexcitante viaje ha comenzado.
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ttArnar y eonoeer
Sidney Rooy
Una vez le preguntaron los discpulos a Jess: "ZCmopodemos
conocer eicamino?" (Jn 14.5). Elviaje bien podra serlargo y arduo,
incluso una aventura, pero debemos saber adnde vamos. Para el
discpulo-aprendiz una respuesta essuficiente. El profesor-Maestro
responde: "Yo soy el camino, laverdad y la vida". Si lo conocemos a
1, conocemos y hemosvisto al Padre.
Conocer y ver van juntos. Un verbo que en el NuevoTestamento
significa "conocer" (oida) viene de una raz quesignifica "vey" .
Otro verbo (gnooskein) significa elacto de "llegara conocer" , en
vez de tener conocimiento como una posesinesttica. El
sujeto-conocedor es un viajero responsable. Llega atomar conciencia
de algo y lo conoce, lo nota y reconoce, lodetecta y confirma, lo
aprende y comprende. Todos estos pasosson actos en el camino del
conocer. Aunque algo entre en lapantalla de una persona ms de una
vez, Io ms significante eselproceso de conocer en los
acontecimientos de la vida.
Sobre ese aspecto se concentra el concepto de "conocer"(yadah)
en el Antiguo Testamento. Sentir o aprender porexperiencia resulta
en conocimiento. Veamos algunos ejemplos:Ias mujeres estriles
conocen lo que significa no poder tener hijos(ls 47.8), los malos
conocen el castigo divino (Jer-16.21), y los
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186 Los Rgtos DEL coNocrMrENTo
enemigos del pueblo de Dios conocen su venganza (EzZb.l4).La
mujer y el hombre se conocen mutuamente en la intimidaddel
encuentro sexual (Mt 1.18).
Ningn principio eterno, ni cadena causal, predetermina
talconocimiento. Cuando falleci la madre de mi esposa, unhombre
viejo coje hacia mi suegro, se par en silencio un ratoal lado de 1,
puso una mano sobre su hombro, y con voz llenade emocin le dijo;
"Yo s cmo te sientes." Por supuesio que losaba, ya que su propia
esposa haba muerto apenas tres mesesantes.
En las Escrituras, conocer o saber taravez se refieren a
merainformacin o a la percepcin sabia de un contemplativo.Conocer
no es como el proceso de programar datos para lacomputadora para
hacerlos disponibles por un acceso inmediato.Quizs elpositivismo y
1o que Paulo Freire llama "la metodologaeducativa bancaria" son
compatibles con los mtodostecnolgicos modernos, pero no reflejan de
ningn modo lapedagoga bblica. Por el contrario, en la Biblia el
conocimientoes sinnimo del aprendizaje de los discpulos y de las
decisioneshumanas concretas. Uno sabe el bien y el mal. El acto
cleconocer niega la posibilidad de neutralidad. por el acto.
ladecisin est hecha, para bien o para mal. Por esta razn.
elconocimiento del cristiano, o el cristiano conocedor, califica
lavida por su decisin. As, el Seor Dios puede decirconcretamente de
un rey justo de Israel: "Defenda la causa delpobre y del
necesitado, y por eso le fue bien. Acaso no es estoconocerme?" (Jer
22.16).
El acto conocedor reveia las lealtades del que acta. pordecirlo
de otra forma, conocer a Dios y temer a Dios, en ellenguaje del
Nuevo Testamento, son conceptos sinnimos. porotro lado, el conocer
de Dios est cerca de su gracia electora.
AMAR Y CONOCER
Este es un don que demuestra su voluntad de gracia, que lograas
su propsito en la historia. Muestra, tambin, nuestrarespuesta a su
demanda de que seamos discpulos obedientes.Estos son los elementos
verdicos delconocer cristiano: recibir lagracia y dar la
obediencia, unidos como en un abrazomatrimonial. Cada movimiento de
vida es un proceso deaprendizaje que se eleva a la experiencia
enriquecedora delconocer, pero el milagro de conocer ocurre slo en
el encuentrocon la realidad. Permtaseme ilustrar esto.
La gente vive en niveles diferentes de conciencia.
Muchaspersonas viven (segn Freire) en el nivel
sem-intransitiuo,caracterizado por una mentalidad de aceptacin.
Todo lo que lespasa est predeterminado: "Qu se va a hacer", "qu
malasuerte". Viven tan inmersos en la realidad que llegan a ser
partesmecnicas de la misma, meros adherentes de ella. Su
sumisinreligiosa y comunal a la pobreza desesperada y a la
injusticiaestructuralse caracteriza por una cultura de silencio,
una accinsocialdefensiva y una terapia mgica. Conocen por
experienciaque es mejor trabajar, si pueden, y no decir nada.
Otra gente vive en elnivel transitiuo ingenuo, para seguir conla
clasificacin de Paulo Freire. Estas personas se acercan a lavida de
manera simpiista. Con un ojo puesto en el mundo y elotro en Ia
Biblia, las respuestas vienen fcilmenie. La idealizacindel pasado y
1a subestimacin de la profundidad del pecadohumano engendran un
optimismo falso. Ofrecen solucionestemporales a nuestro barco que
se est hundiendo. Estaspersonas tan bien intencionadas conocen con
un dogmatismoferozlaverdad absoluta de sus mesianismos. Para ellos
eldilogono slo est excluido sino estignratizado como relativismo
puro.Lo que necesita urgentemenie nuestro munclo, afirman, es
la
t87
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188 Los Reros DEL coNoctMIENTo
estabilidad y el orden garantizados por la fuerzade la ley y de
lasarmas.
Al lado de los niveles semi-ntransitiuo y transitiuo-ingenuoest
el nivel crtico-constructiuo. Este grupo reconoce la
casiimposibilidad de la tarea humana. Tiende a preguntar envez
deresponder; a dialogar ms que a dogmatizar; a criticar antes quea
dar culto a personas; a ver la reaiidad ntegra, sin fragmentarla;a
denunciar las injusticias y rehusarlapazantes que acomodarseal
sfofu quo. Para ellos, ei propsito es desacralizar las
vacassagradas de las tradiciones y estructuras opresivas y
transformarla realidad para adelantar Ia voluntad creativa y
redentora deDios.
Estos tres niveles demuestran claramente el
predicamentoeducativo moderno. El primer nivel conoce el mundo
demaneras temerosas y defensivas, as como los demonios queconocen a
Dios y tiemblan. Para ellos, la educacin cristianatiene como modelo
el gueto, la separacin obligatoria deimundo.
El segundo grupo sabe que la existencia humana requiereaplicar
remedios divinos en el espacio y el tiempo actual, peroestablece la
educacin cristiana como una agencia reparadora(stop-gap) cuyo fin
es contener la maldad humana, rescatar lasalmas y construir
sistemas de apoyo para ayudar al mundo,herido mortalmente, a llegar
coieando a su destino final.
El tercer grupo rechaza tanto la tentacin de escapar del
maltrgico moderno por medio del "guetosmo" como
elreformismoadoptado como medio para superar los egosmos personales
ylos males estructurales. Ms bien, este grupo reclama conocer aDios
y 1a situacin humana en un plano diferente.
Auanv coNocER
Se trata de conocer a Dios como el que crea, restaura, liberay
transforma la historia humana. AIavez, se trata de reconocera los
seres humanos como dibujados en las palabras delEspritudivino:
"siempre se descarra su corazn, y no han reconocidomis caminos"
(Heb 3.10; ver tambin Sal 95.10). Para estegrupo, 1a educacin
cristiana cuestiona los pilares de nuestrassociedades actuales,
pide cambios fundamentales en ladistribucin de los recursos de la
creacin y demanda larendicin de cuentas del ser humano a Dios por
el sufrimientoinnecesario de su prjimo.
Conocer los caminos de Dios no es aigo que se da fcilmente.Jess
saba que elcamino de Dios conduca hacia la cruz. Eso loentristeci,
pero continu adelante. Dio su vida por nosotros; poreso sabemos que
lnos ama (1Jn 3.16). Y este gnero de amores el corazn del
conocimiento verdadero: "Nosotros sabemosque hemos pasado de la
muerte a la vida porque amamos anuestros hermanos" (1Jn 3.14).
Somos llamados a amarnosmutuamente porque el amor es de Dios, "y
todo ei que ama esnacido de l y lo conoce" (1,Jn 4.1,7).
No debemos hacer del amor una sustancia etrea,espiritualizada y
ultramundana como elconcepto medievalde lagracia. Ms bien,
encarnmoslo y hagmoslo concreto en nuestrocontexto histrico
contemporneo. Al conocer el amor, nosunimos con los pueblos
marginados, sufrientes y moribundos. Elamor que conoce el camino
agoniza sobre 1a cruz que otrostienen que llevar, sacude a los
seres humanos de su fatalismo yrechazala contradiccin aceptada
entre el conocimiento teorticoy elconocimiento tico, entre una
salvacin que incltrye tanto lajustificacin plena delpecador como
una justrcia pron-iedio parala sociedad moderna y para el
prjimo.
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190 Los Relos DEL coNocrMrENro
La postergacin de la tica de Jess, condenada como elpecado
particular de los dispensacionalistas, ha llegado a serdemasiado
popular entre los cristianos contemporneos.
No obstante, las demandas de Dios son ms altas que lasnuestras.
Su palabra todava es verdad: "El que no ama noconoce a Dios, porque
Dios es amor" (1Jn 4 8). Nosotrosmedimos el poder del conocimiento
por el producto brutonacional, las cabezas nucleares teledirigidas
y la cienciatecnolgica y ciberntica. Dios mide el conocimiento por
ladisposicin al sacrificio, el sufrimiento compartido y el
testimoniode amor. Ilemos estado viaiando ya por largo tiempo y
todavatenemos mucho por aprender antes de llegar a conocer
laplenitud de su amor, y, por lo tanto. la amplitud de nuestra
tarea.
I
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