Iglesia/ Oficina Parroquial Pastor: Fr. Honesto Agustin 747-0722 ext. 5601 Vicario: Fr. Patrick Klekas 747-0722 ext. 5600 1250 Wyoming Avenue, Reno, NV 89503 1259 St. Albert’s Drive, Reno, NV 89503 (Correo) Telephone: 775.747.0722 Fax: 775.746.3976 Website: http://www.stalbertreno.org email: [email protected] Confeciones (O con previa cita a cualquier hora) Sabados 2:30—3:30 PM Misas Semanales Lunes a Viernes 10:30 PM SACRAMENTOS Bausmos Bautismos para infantes hasta los 7 años son celebrados generalmente en cualquiera de las misas del fin de semana (excluyendo Adviento y Cuaresma.) Por favor llame a la oficina o vaya a la pagina web www.stalbertreno.org para que llene la solicitud de bautismo, se requiere tomar una clase prebautismal para papas y padrinos, La clase sera programada por el Deacono Richard Ramm una vez recibido el formulario de solicitud de bautismo. Padres de niños mayores de 7 años porfavor de contactar a Beth Lujan en la oficina de Formacion Religiosa. Bodas Todas las bodas tienen que ser planeadas con 6 meses de anticipacion. Es necesario tomar una clase preparatoria. Favor de llamar a la oficina para planear su boda. Funerales Nina Weaver 747-0722 Ext.5603 [email protected] Educacion Religiosa (Grados k –8) Beth Lujan 747-0722 Ext. 5609 [email protected] Confirmaciones David Willems 747-0722 Ext. 5608 [email protected] Director del Ministerio Lano Victor Gonzalez 747-0722 Ext. 5900 [email protected] Reflexiona Esto La gente odia la por beneficiar lo que sea que amen más que la verdad. Aman la verdad cuando brilla calurosamente sobre ellos, y la odian cuando los reprende. —San Agustín E n aquel tiempo, Jesús iba enseñando por ciudades y pueblos, mientras se encaminaba a Jerusalén. Alguien le preguntó: "Señor, ¿es verdad que son pocos los que se salvan?" Jesús le respondió: "Esfuércense en entrar por la puerta, que es angosta, pues yo les aseguro que muchos tratarán de entrar y no podrán. Cuando el dueño de la casa se levante de la mesa y cierre la puerta, ustedes se quedarán afuera y se pondrán a tocar la puerta, diciendo: '¡Señor, ábrenos!' Pero él les responderá: 'No sé quiénes son ustedes'. Entonces le dirán con insistencia: 'Hemos comido y bebido contigo y tú has enseñado en nuestras plazas'. Pero él replicará: 'Yo les aseguro que no sé quiénes son ustedes. Apártense de mí todos ustedes los que hacen el mal'. Entonces llorarán ustedes y se desesperarán, cuando vean a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el Reino de Dios, y ustedes se vean echados fuera. Vendrán muchos del oriente y del poniente, del norte y del sur, y participarán en el banquete del Reino de Dios. Pues los que ahora son los últimos, serán los primeros; y los que ahora son los primeros, serán los últimos''. CONOZCAMOS NUESTRA FE CATÓLICA ¡LA ALEGRIA DEL EVANGELIO! 261. Cuando se dice que algo ene «espíritu», esto suele indicar unos móviles interiores que impulsan, movan, alientan y dan sendo a la acción personal y comunitaria. Una evangelización con espíritu es muy diferente de un conjunto de tareas vividas como una obligación pesada que simplemente se tolera, o se sobrelleva como algo que contradice las propias inclinaciones y deseos. ¡Cómo quisiera encontrar las palabras para alentar una etapa evangelizadora más fervorosa, alegre, generosa, audaz, llena de amor hasta el fin y de vida contagiosa! Pero sé que ninguna movación será suficiente si no arde en los corazones el fuego del Espíritu. En definiva, una evangelización con espíritu es una evangelización con Espíritu Santo, ya que Él es el alma de la Iglesia evangelizadora. Antes de proponeros algunas movaciones y sugerencias espirituales, invoco una vez más al Espíritu Santo; le ruego que venga a renovar, a sacudir, a impulsar a la Iglesia en una audaz salida fuera de sí para evangelizar a todos los pueblos. I. Movaciones para un renovado impulso misionero 262. Evangelizadores con Espíritu quiere decir evangelizadores que oran y trabajan. Desde el punto de vista de la evangelización, no sirven ni las propuestas míscas sin un fuerte compromiso social y misionero, ni los discursos y praxis sociales o pastorales sin una espiritualidad que transforme el corazón. Esas propuestas parciales y desintegradoras sólo llegan a grupos reducidos y no enen fuerza de amplia penetración, porque mulan el Evangelio. Siempre hace falta culvar un espacio interior que otorgue sendo crisano al compromiso y a la acvidad. Sin momentos detenidos de adoración, de encuentro orante con la Palabra, de diálogo sincero con el Señor, las tareas fácilmente se vacían de sendo, nos debilitamos por el cansancio y las dificultades, y el fervor se apaga. La Iglesia necesita imperiosamente el pulmón de la oración, y me alegra enormemente que se mulpliquen en todas las instuciones eclesiales los grupos de oración, de intercesión, de lectura orante de la Palabra, las adoraciones perpetuas de la Eucarisa. Al mismo empo, «se debe rechazar la tentación de una espiritualidad oculta e individualista, que poco ene que ver con las exigencias de la caridad y con la lógica de la Encarnación». Existe el riesgo de que algunos momentos de oración se conviertan en excusa para no entregar la vida en la misión, porque la privazación del eslo de vida puede llevar a los crisanos a refugiarse en alguna falsa espiritualidad. 263. Es sano acordarse de los primeros crisanos y de tantos hermanos a lo largo de la historia que estuvieron cargados de alegría, llenos de coraje, incansables en el anuncio y capaces de una gran resistencia acva. Hay quienes se consuelan diciendo que hoy es más dicil; sin embargo, reconozcamos que las circunstancias del Imperio romano no eran favorables al anuncio del Evangelio, ni a la lucha por la juscia, ni a la defensa de la dignidad humana. En todos los momentos de la historia están presentes la debilidad humana, la búsqueda enfermiza de sí mismo, el egoísmo cómodo y, en definiva, la concupiscencia que nos acecha a todos. Eso está siempre, con un ropaje o con otro; viene del límite humano más que de las circunstancias. Entonces, no digamos que hoy es más dicil; es disnto. Pero aprendamos de los santos que nos han precedido y enfrentaron las dificultades propias de su época. Para ello, os propongo que nos detengamos a recuperar algunas movaciones que nos ayuden a imitarlos hoy. El encuentro personal con el amor de Jesús que nos salva 264. La primera movación para evangelizar es el amor de Jesús que hemos recibido, esa experiencia de ser salvados por Él que nos mueve a amarlo siempre más. Pero ¿qué amor es ese que no siente la necesidad de hablar del ser amado, de mostrarlo, de hacerlo conocer? Si no senmos el intenso deseo de comunicarlo, necesitamos detenernos en oración para pedirle a Él que vuelva a cauvarnos. Nos hace falta clamar cada día, pedir su gracia para que nos abra el corazón frío y sacuda nuestra vida bia y superficial. Puestos ante Él con el corazón abierto, dejando que Él nos contemple, reconocemos esa mirada de amor que descubrió Natanael el día que Jesús se hizo presente y le dijo: «Cuando estabas debajo de la higuera, te vi» (Jn 1,48). ¡Qué dulce es estar frente a un crucifijo, o de rodillas delante del Sansimo, y simplemente ser ante sus ojos! ¡Cuánto bien nos hace dejar que Él vuelva a tocar nuestra existencia y nos lance a comunicar su vida nueva! Entonces, lo que ocurre es que, en definiva, «lo que hemos visto y oído es lo que anunciamos» (1 Jn 1,3). La mejor movación para decidirse a comunicar el Evangelio es contemplarlo con amor, es detenerse en sus páginas y leerlo con el corazón. Si lo abordamos de esa manera, su belleza nos asombra, vuelve a cauvarnos una y otra vez. Para eso urge recobrar un espíritu contemplavo, que nos permita redescubrir cada día que somos depositarios de un bien que humaniza, que ayuda a llevar una vida nueva.