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Transcript
Historiasdel
señor Garabato2
Víctor Olaya
Historias del señor Garabato 2.
Copyright ©Víctor Olaya, 2019.
Ilustración página 216, Copyright ©Vladimir Konashevich, 1958.
Eqipaje1
1Adaptación libre del cuento Bagazh(1926), de Samuil Marshak
Garabato esta mañanava a hacer un viaje en tren,montado en un coche camaen el que dormir muy bien.
En el equipaje llevauna maleta y un bolso,un retrato y una cesta,y un perrillo muy gracioso.
Ha entregado su equipajey le han dado un comprobante,para que, cuando se baje,no haya nada que le falte.
[3]
Ya se han llevado sus bultosde camino hacia el vagón,y sin perder ni un minuto,él ocupa su colchón.
En el tren ya van las cosas,y ahora bien puede partir.Contemos, por si las moscas,que todo se encuentra allí:
Primero va una maleta,luego un bolso y un retrato,y después están la cestay el perro de Garabato.
[5]
Va a ponerse en marcha el tren,ya no queda más que un rato,y ha sonado en el andénel sonido del silbato.
El perrito escucha el ruido,y se asusta de repente,sale huyendo poseído,por en medio de la gente.
Allí siguen la maleta,la cesta, el bolso y el cuadro;el perro, cual escopeta,ha salido disparado.
[7]
Tres estaciones después,un revisor se da cuenta:el perro que iba en el trenpor ningún lado se encuentra.
Pasa entonces por delanteun gran perro callejero,sin pensarlo ni un instante,al vagón lo mete entero.
Ahora viajan la cesta,la maleta, el bolso, el cuadro,y un perro enorme que apestay es grande como un caballo.
[9]
Al destino ya han llegado,hora es de coger las cosas,Garabato está enfadado,y es con razón que se enoja.
«¿Dónde está mi buen amigo?,no entiendo lo que aquí pasa,este perro no es el mío,¡este perro es de otra raza!
Cuadro, cesta, caja y bolso,tengo todo lo que traje,pero este perro pulgoso,¡no estaba entre mi equipaje! »
[11]
Garabato va y protesta,y un hombre viene a ayudarlo.«Contemos sus pertenencias,veamos si falta algo».
Aquí está el cuadro tan bello,y ya tiene su maleta,están el bolso y su perro,y eso la lista completa.
Señor, este es su equipaje,aquí nada se ha perdido,más el perro en el viaje¡puede ser que haya crecido!
[13]
Pesca
A pesar de que hace fríoy de que el tiempo refresca,Garabato hoy ha ido al ríopara practicar la pesca.
Al hombro lleva la caña,y en ella el sedal ha puesto,sueña con pescar pirañaso algún salmón que esté fresco.
Ha traído como cebolombrices y moscas buenas,y un bocadillo que luegocomerá mientras espera.
[17]
Junto a la orilla se ha puestodonde el río está tranquilo,y hace su primer intentolanzando con arte el hilo.
No ha apuntado con acierto,se le ha enganchado el anzueloen un ala y en el cuerpode un pajaro que iba en vuelo.
«No sé si estará muy ricoeste pez en el puchero,mas nunca vi un pez con pico,creo que mejor lo libero».
[19]
De nuevo lanza la caña,con buen pulso la gobierna,el cebo cae bien al agua,ahora a esperar a que muerdan.
Al rato nota que tiran,ha picado ya el primero,habrá que traerlo arribae ir a por otro pez nuevo.
Mas no es pez lo que ha cogido,vaya decepción se lleva,es un zapato podridoque con el sedal se enreda.
[21]
Todo el día se ha pasadolanzando la caña al río,pero el día se ha acabado,y se vuelve de vacío.
Garabato entristecidorecoge en el maleterola caña, la silla, el hilo,y sus cajitas de cebo.
Sin darse cuenta el sedalasomando se ha dejado,y el anzuelo, al avanzar,arrastra de lado a lado.
[23]
Llega a casa y le preguntansi trajo la cesta llena.Garabato se disculpay pone cara de pena.
Pero al ir a por su caña,se lleva una gran sorpresa,lleva al anzuelo enganchadauna colección de piezas.
«Para la pesca de altura,la verdad es que no me sirve,mas para coger basura,¡esta caña es infalible!»
[25]
Música
Sobre el tejado una duchade pequeñas gotas frescascae y Garabato escuchala música que allí dejan.
Qué sonido tan perfecto,qué agradable melodía,escuchando este conciertopodría estarse todo el día.
Deja abiertas las ventanaspara oír todo mejor,y un pajaro en una ramale ha cantado en do menor.
[29]
La lluvia sobre las �orestambién arranca unas notas,y en cada petalo acordeshace sonar con sus gotas.
A cada color su tono,a cada forma un sonido,las �orecillas a corosuenan a canto divino.
A Garabato le gustacómo resuenan las plantas,y en el jardín hoy las busca,para oír cómo le cantan.
[31]
El viento entre unos arbustosquiere sumarse a la �esta,y allí toca con gran gustoy hace parte de la orquesta.
Qué virtuoso �autista,con sus notas embelesamerece ser el solistade esta y de todas las piezas.
Garabato al escucharlocierra los ojos y sueñacon un enorme escenarioy una música tan bella.
[33]
El viento hace su quejido,las ramas crujen y suenan,y las aguas en el ríoentonan su cantinela.
El paisaje es musical,nada está fuera de ritmo,las ranas van a compás,y se oye cantar un mirlo.
Garabato sin embargo,oye un ruido que no encaja,allá fuera escucha algoy no entiende lo que pasa.
[35]
Con gran prisa al jardín saley trepa arriba de un árbol.Qué hace allí nadie lo sabe,¿por qué ha subido tan alto?
Un par de ramillas corta,y escucha soplar el viento,mueve de sitio unas hojasy ya vuelve tan contento.
«Ahora ya suena bien todo,problema solucionado,ese árbol tan sonoro¡estaba desa�nado!»
[37]
Enamorado
Cuando viene Garabata,Garabato está nervioso,no sabe lo que le pasa,mas no cabe en sí de gozo.
«Debo estar enamorado»,piensa lleno de alegría,y siente que nada malopuede ya traerle el día.
Pero de pronto le asaltauna pregunta inquietante:¿siente acaso Garabatapor él amor semejante?
[41]
A caminar ha salidoy no deja de pensarsi será correspondidosu amor o no lo será.
Para no seguir así,la cuestión hay que aclararla,coge una �or de un jardíny se pone a deshojarla.
«Sí me quiere, no me quiere»,dice y le quita uno más.Cuando ni un pétalo quede,sabrá cuál es la verdad.
[43]
Ha salido «no me quiere»,qué disgusto el que se lleva,no sabe qué es lo que puedehacer para ahogar su pena.
Mas duda del resultado,quizás no ha contado bien,otra �or más ha arrancadoy a ver qué sale esta vez.
Qué tristeza la que sienteal ver que le sale igual,pero eso no le convence,y lo intenta una vez más.
[45]
Quitando una �or tras otra,ha dejado allí un desierto,no ha quedado ni una sola,con un pétalo bien puesto.
¿Qué va hacer para arreglarlo?¿Cómo contárselo al dueño?El jardín ha destrozado,y eso no tiene remedio.
Se abre la puerta y resultaque es casa de Garabata.Con vergüenza y mucha culpa,Garabato se delata.
[47]
Pronto entiende Garabatalo que allí estaba pasando,se siente muy halagada,y no piensa en regañarlo.
«A esos juegos de chiquillosno les hagas ningun caso,yo también siento lo mismo»,dice dándole un abrazo.
«La próxima vez, no obstante,si dudas de mis amores,mejor ven a preguntarme,¡no me destroces las �ores!»
[49]
Papiroflexia
La niña de Garabatocon papeles crea cosas,palomas, ranas y barcos,y muchas piezas hermosas.
Dobla aquí y dobla allá,un pliegue tras otro hace,y de una hojita no más,una �gura le nace.
Las regala en el colegio,las pone en la estantería,no hay quien no muestre su apreciopor tan linda artesanía.
[53]
Garabato está orgulloso,y le gustaría ayudar,para que haga algo grandioso¿qué le puede regalar?
Ha decidido comprarleuna enorme cartulina,y que con ella levanteuna escultura divina.
Le gustan los animales,quizás quiera hacer un tigre,con tan buenos materiales,no hay nada que sea imposible.
[55]
Ha salido de la tienda,lleva el papel con cuidado,una tempestad violentade pronto se ha levantado.
El descomunal papelen cometa se transforma,el viento sopla sobre ély vuela como una alondra.
Garabato no lo suelta,él tambien sale volando,para cuando se da cuenta,ya los cielos va surcando.
[57]
Garabato tiene miedo,lo piensa pero no sabecómo devolver al suelotan peculiar aeronave.
De pronto tiene una idea,él hará como su hija,lo doblará según creapara que el rumbo corrija.
Tres pliegues en una esquinay resuelve su desgracia,la hoja queda convertidaen un avión de acrobacias.
[59]
La hija se queda asombradacuando lo ve aterrizar,de tal forma no esperabaver a su padre llegar.
La gente en la calle espera,todos quieren conocer,a su vecino el que vuelaen un avión de papel.
Gracias a su inteligencia,no tiene ni un hueso roto.sabe hacer papiro�exia,¡y además es gran piloto!
[61]
Circo
Una compañía de circoa la ciudad ha llegado.Garabato a verlo ha idoy ha salido emocionado.
Al volver a casa quierealcanzar el estrellato,en un artista circenseconvertirse de inmediato
Sin dudarlo ni un momento,ha empezado a practicar,por ver si tiene talentoy un día podrá triunfar.
[65]
Coge naranjas y perasy unas manzanas a paresy allí intenta hacer con ellasunos juegos malabares.
Una fruta da en el techo,otra rompe una bombilla,otra se estampa en el sueloy termina hecha papilla.
«Va a ser que esto no es lo mío»,dice cuando se da cuentade que ha gastado tres kilosde manzanas de su cesta.
[67]
No se rinde a la primera,es tozudo y algo necio,ahora cree que es buena ideaintentar con el trapecio.
Se ha colgado de la cuerdadel columpio de su niña,se impulsa con mucha fuerza,para coger carrerilla.
Intenta una voltereta,no consigue hacer ni media,aterriza de cabezay contra un árbol se estrella.
[69]
De domador con la gataun número quiere hacer,que ella baile con dos patasy que aprenda a obedecer.
Pero el animal le ignora,y se tumba en el sillón.Queda lejos por ahoralo de domar un león.
«Si con gata tan calmadano consigo hacer gran cosa,mejor será no hacer nadacon una �era furiosa».
[71]
A la cuerda en la que estánlas ropas para secarse,se ha subido a caminarcomo si fuera un alambre.
Tropieza en un calzoncillo,pisa en una camiseta,ha perdido el equilibrioy cae sobre unas macetas.
«Yo a esto del funambulismono le veo gran futuro,caigo pronto hacia el abismoy este suelo está muy duro».
[73]
Se siente desconsolado,no sabe qué puede hacer,de todo lo que ha probado,nada se le ha dado bien.
Mas su hija lo ha visto todoy viene a darle consuelo,ella piensa de otro modo,y opina que él es muy bueno.
«Papá, no te desanimes»,dice dándole un abrazo.«No he parado de reírme,¡eres un genial payaso!»
[75]
Saludos
Se ha comprado Garabato,para ver el �rmamento,un telescopio baratoque tiene muchos aumentos.
En cuanto la noche llega,sale al balcón un ratito,el ojo muy cerca pega,y enfoca hacia el in�nito.
Qué emocionante que es estode buscar algo allá arriba,y quizás saber si es ciertoque en otro planeta hay vida.
[79]
Encontró sin darse cuentaun planeta muy curioso,con tres lunas dando vueltas,y con un color terroso.
Un planeta garabato,rodeado de un anillo,¿habitarán allí acasohombrecitos amarillos?
Hará falta para verloun telescopio potente,irá a comprar uno nuevoque tenga mejores lentes.
[81]
Ahora todo ve bien claro,no se pierde ni un detalle,y busca por todos ladosa un simpático habitante.
Ha encontrado un ser extraño,un alienígena feo,que aunque tiene aspecto huraño,le saluda con el dedo.
Se ha quedado estupefacto,¡qué bicho tan raro este!,acaba de hacer contacto¡con un ser extraterreste!
[83]
Ahora en vez de lo lejano,quiere ver lo diminuto,y un microscopio ha compradosin pensárselo un minuto.
Las cosas que a simple vistano parecen existir,aunque sean tan chiquitas,las verá todas así.
Un poquito de salivaha puesto sobre una placa,y con emoción lo mira,a ver lo que de allí saca.
[85]
Se ha quedado ensimismadocon un grupo de bacterias,que andan haciendo algo raroy tienen pinta muy seria.
De pronto una de ellas mueveun apéndice alargado,Garabato le devuelveel saludo con la mano.
«¿Será que me ha visto acaso?¿Tendrá ojos para verme?¡Qué amigo tan pequeñajoeste que acabo de hacerme!»
[87]
De tanto mirar se cansay a la ventana se asoma,y todos los que allí pasanparan a decirle hola.
Le saludan los chavales,los señores, las ancianas,el frutero y el alcaldeque venía con su hermana.
Garabato es muy querido,todo el mundo le saluda,las bacterias, los vecinos,¡y mas allá de la luna!
[89]
Nuevos vecinos
Garabato se ha enteradoa través de unos amigos,que van a llegar al barriopronto unos nuevos vecinos.
Ha visto llegar tempranoun gran camión de mudanzas,y en la ventana asomado,contempla lo que allí pasa.
Se sorprende cuando sacanrodando un cajón enorme,no sabe de qué se trata,ni lo que dentro se esconde.
[93]
Garabato al día siguiente,al timbre curioso llama,comprueba que allí no hay gentey mira por la ventana.
En el centro del salón,junto a un gato de escayola,encuentra la solución:es un piano de cola.
Qué instrumento más hermoso,con sus teclas tan brillantes.Vuelve a casa muy dichoso,le parece fascinante.
[95]
«Tengo un vecino pianista»,piensa con gran alegría,e imagina ya una listade valses y sinfonías.
«Ojalá sea oportuno,toque al empezar el día,y me alegre el desayunocon alguna melodía.
O quizás a media tarde,y entonces la dulce ofrendade su musica se encarguede alegrarme la merienda».
[97]
Piensa que sería, además,una fabulosa ideaa Garabata invitara la hora de la cena.
Sentados los dos al lado,comerán carne y verdura,mientras suena en el pianouna hermosa partitura.
Qué alegría que es tenerun gran músico tan cerca,solo ventajas le ve,y de pensarlo se alegra.
[99]
Se oye entonces, de repente,un ruido desa�nado,como si alguien diera golpesen las teclas de un piano.
Con espanto ha descubiertoque es el vecino el causante,resulta que no es experto,sino que es un principiante.
Todos sus sueños se han ido,no habrá ya bellas canciones,mejor para los oídos...¡será comprarse tapones!
[101]
Regalo
Garabata y Garabatoson los mejores amigos,y ella hoy como regaloun paquete le ha traído.
Con cuidado viene envuelto,y trae un lazo muy grande.Garabato está contento,le encantan estos detalles.
Garabata va con prisa,no se queda ni un momento,se marcha rauda a su citaantes que él vea qué hay dentro.
[105]
Garabato abre la ofrenda,y qué disgusto mas grande,no le gusta lo que encuentra,le parece horripilante.
Un jarrón hecho de plástico,tan feo que duele verlo,esperaba algo fantástico,y esto no hay donde ponerlo.
«¿Qué hago ahora», se pregunta,«con pieza tan espantosa?Pone los pelos de puntay es de color verde y rosa».
[107]
Prueba a tenerlo escondidoal fondo de la terraza,pero lo ven los vecinosy la gente que allí pasa.
En el cuarto de su hijatampoco puede ponerlo,a la niña le horroriza,dice que le quita el sueño.
Lo ha metido en la despensa,lo ha guardado en el trastero,es mejor que nadie veaun cachivache tan feo.
[109]
La señora Garabatale llama por la mañana,quiere pasar por su casaun día de esta semana.
Garabato se preocupa.¿Qué va a hacer con el jarrón?No quiere que ella descubraque le parece un horror.
Lo ha puesto en el descansillo,para que ella pueda verlo.Espera que venga hoy mismoy poder luego esconderlo.
[111]
Garabata llega y vea la entrada su regalo,pone cara de tenerque contarles algo malo.
«Con tal prisa y frenesí,me confundí el otro día,el regalo que te díno era el que correspondía.
Discúlpame, Garabato,yo sé que el jarrón te encanta,pero a cambio aquí te traigootra sorpresa muy grata».
[113]
Garabato está feliz,del jarrón ya se ha librado,veremos ahora sile agrada el nuevo regalo.
«¿Qué podrá ser?», se pregunta.¡Una caja de bombones!«Ya lo creo que me gusta»,dice y dos de ellos se come.
A su hija otro le day ella dice muy contenta:«Con chocolate, papá,un regalo siempre aciertas».
[115]
Zapato
Es una nueva mañana,y con aire de mozuela,la pequeña Garabataacaba de irse a la escuela.
Ha olvidado en la mesillala cajita del almuerzo.«Qué desastre de chiquilla»,dice Garabato al verlo.
«Hoy que había preparadomi plato más estupendo,va y se olvida de llevarlo,yo esto sí que no lo entiendo».
[119]
Mientras recoge la casa,descubre con gran enfadoque ha olvidado la muchachatambién parte del calzado.
El zapato del pie izquierdoolvidó en el zapatero,cogió solo el pie derecho,en lugar del par entero.
Pobrecito Garabato,no le queda más remedio,que ir a llevar el zapatoy la comida al colegio.
[121]
Al llegar allí se encuentrade niñas varias decenas,con uniforme de escuela,vestidas de igual manera.
Al olor del alimento,todas vienen a buscarle,a ese plato suculentoel diente quieren hincarle.
«¿Cómo voy a conocerentre todas a la mía,y saber con ello a quiéndebo darle la comida?»
[123]
Recuerda entonces que tieneel zapato allí guardado,y un plan de pronto le vienecomo de un cuento sacado.
«A quien le valga el zapatoy en su pie mejor le encaje,daré este sabroso plato»,proclama frente a la clase.
Las muchachas de inmediatoforman una �la larga,y allá empieza Garabatoa probarles la sandalia.
[125]
Ya se lo han probado todas,pero hay una que aún juegaen el patio toda solay por intentarlo queda.
A esta le va como un guante,está hecho a su medida,a su hija tiene delante,la misión está cumplida.
«Papá, qué gran alegríaque hayas venido a buscarme,este pie ya me dolíay estaba muerta de hambre».
[127]
A casa vuelve contento,ya dejó arreglado el día,su hija el zapato se ha puestoy ya tiene su comida.
Pero aparcado en la plazadonde el coche había dejado,encuentra una calabazacon ratones a su lado.
«Esto no me lo esperaba»dice subido a la acera.«¿Acaso no terminaba...el cuento de otra manera?»
[129]
Caracol
Garabato hoy encontrócon sorpresa y gran asombro,un gracioso caracolque iba con su casa a hombros.
Le ha mirado el animalcon sus dos ojos tan �nos,él lo ha intentado tocar,y en su concha se ha metido.
Garabato lo ha dejadomuy tranquilo descansando,y veloz en casa ha entradopara avisar de este hallazgo.
[133]
A su hija le ha contadosobre aquel descubrimiento,y al jardín los dos del brazosalen para poder verlo.
Van hacia el mismo lugardonde el animal estaba,pero allí no queda yamás que un buen rastro de baba.
«Habrá ido a dar un paseo»,dice la hija tan contenta.«Que esté lejos no lo creo,esta es criatura muy lenta».
[135]
A seguir el rastro empiezan,convencidos de encontrarlo,pero unos metros se alejany ya no saben buscarlo.
Las huellas pronto se pierden,no hay más baba que seguir,tan veloz como una liebre,se ha ido corriendo de allí.
Sería extraño que hubieraescapado tan deprisa,aun así por la parcelaprosiguen con sus pesquisas.
[137]
Garabato con tesónbusca junto a unos arbustos,piensa que allí el caracolhabrá de estar muy a gusto.
Su hija va a unos matorralesque hay junto a la carretera,luego aguarda por si saleen mitad de una pradera.
«Hurra», Garabato grita,parece que lo ha encontrado,y aunque piensa no se explicacómo hasta allí ha llegado.
[139]
«Ya sé cómo se ha movido»,dice de pronto su hija,al ver al bicho subidosobre una gran lagartija.
«Eso ya lo explica todo»,dice entonces Garabato.«Avanzando de tal modova veloz como un jabato.
Es hermoso y ademáseste caracol es sabio,no anda como los demás,¡también sabe ir a caballo!»
[141]
Comilón
Garabato al levantarsedesayuna como un rey,despierta con tanta hambreque podría comerse un buey.
Tostadas y panecillos,café, zumo y fruta fresca,leche y carne de membrillo,y algo más que le apetezca.
Ha terminado el festíny se siente en plena forma,no le cabe ni un colíny la panza tiene gorda.
[145]
Es aún media mañanacuando va a verle el vecino,trae un pastel de manzana,dice que sabe divino.
«No se corte, coja usteduna porción generosa».Él lo hace con placer,la tarta está deliciosa.
El trozo es realmente inmenso,mas no deja una miguita,nota el cinturón más tensoy le va a explotar la tripa.
[147]
Piensa para la comidatomar algo ligerito,pero pronto se le olviday le vuelve el apetito.
El horno a plena potencia,los fogones encendidos,cocina con gran pacienciaun cordero y diez pepinos.
Hasta el último bocadocome a gran velocidad,como un globo ahora está in�adoy no puede casi andar.
[149]
Para la cena otro tanto,come y come sin mesura,el buche se sigue hinchando,y la tripa está más dura.
Al �nal del atracón,le entra sin remedio el sueño,antes que se ponga el sol,él ya duerme como un leño.
Apenas entra en la cama,el colchón le queda estrecho,se le ha rajado el pijamay su ombligo da en el techo.
[151]
Se convence al despertarde que sobran calorías,hay que andar o pedalear,para quemar energía.
Se pone rápido en pie,mas al instante se sienta,se ha puesto tan gordo que¡ya no cabe por la puerta!
«Esto es cosa positiva:aunque no haga bicicleta,tampoco entro en la cocina,¡así que ahora estoy a dieta!»
[153]
Escayola
Garabato en un tropiezose ha partido un hueso o dosy ahora lleva puesto un yesoy se ayuda de un bastón.
Él que siempre a todos ladosiba andando y tan contento,desde que está escayolado,es un caminante lento.
Pero no hay quien le detenga,él se empeña en ir a pie,rápido coge la senday no hay quien pueda con él.
[157]
No hay comida en la despensa,hay que salir al mercado,ni un instante se lo piensay echa a andar acelerado.
El día está muy lluvioso,otro hubiera preferidoen casa dormir cual osoy no ser tan aguerrido.
Con una mano sujetael paraguas bien abierto,y con otra la muleta,y así avanza como el viento.
[159]
A la vuelta del mercado,se encuentra un charco gigante,no puede ir al otro ladocon tanta agua por delante.
Pero coge carrerilla,con la muleta se impulsa,y al verlo una mujer chillay queda patidifusa.
Aterriza en suelo seco,cae sobre su pierna buena.«¡Menudo salto que he hecho!»,dice al cerrar la faena.
[161]
Un grito escucha de prontoque suena desesperado,alguien que pide socorrodesde la calle de al lado.
Es una pobre señoraa quien un ladrón roñosoha acorralado y ahoraquiere robarle su bolso.
Garabato no lo duda,va en su auxilio de inmediato,y alza de forma oportunasu muleta hacia lo alto.
[163]
El ladron muerto de susto,huye por si alguien lo atrapa,se tropieza en un arbusto,y sigue corriendo a gatas.
«Gracias, gentil caballero»,ella dice agradecida,«con un útil tan certero,me ha salvado usted la vida».
«Ha sido un placer, señora,mas no creo que lo repita,la muleta y la escayola¡esta tarde me las quitan!»
[165]
Reloj
Recién ha salido el soles hora de levantarse,Garabato va al relojpara saber si ya es tarde.
«Este reloj está raro»,dice al ver la hora que marca,«será que se ha estropeado,o las agujas se atascan».
Pero lo mira un momento,y parece que funciona,aunque a ratos va muy lento,y otros se revoluciona.
[169]
De pronto se ha vuelto loco,algo extraño le ha pasado,en lugar de poco a poco,da vueltas como un tornado,
En apenas un minuto,ha avanzado siete días.«¡Pero qué reloj más bruto!¡Vaya cómo desvaría!»
«¡Qué locura es este ritmo!»,le ha gritado a viva voz,«si además hoy es domingo,no hace falta ir tan veloz ».
[171]
Garabato lo detiene,lo pone en hora y lo ajusta,y espera que recupereel ritmo que a él le gusta.
El buen reloj, en efecto,la calma ha recuperado,pero aún tiene desperfectosy ahora va hacia el otro lado.
Después de marcar las tres,marcará luego las dos.¿Por qué gira del revés?¿Qué le pasa a este reloj?
[173]
Y no es solo que no déla horas como es debido,es que el cuatro, el diez y el seis¡ahora han desaparecido!
Las cifras se le han borrado,le han aparecido nuevas,veintisiete él ha contado,en lugar de una docena.
Y junto a sus dos agujas,le han salido ahora tres más,que cuando giran se cruzanporque marchan hacia atrás.
[175]
Y no acaba ahí la cosa,esto es todavía peor,ahora del cuerpo le brotanunos brazos al reloj.
Y ademas de aquellos brazos,le han salido un par de piernas,que le asoman por debajoy va corriendo con ellas.
«¿Y ahora qué voy a hacer yo?»dice con voz de lamento,«Está loco mi reloj,¡voy a hacer todo a destiempo!»
[177]
Pero entonces piensa queaquello no es tal problema,si no sabe qué hora es,lo hará todo cuando quiera.
«No me importa no saber,si es la hora de la merienda,da igual las dos que las seis,yo haré lo que me convenga.
Se está mucho más felizsin hacer caso al reloj.¿Por qué no te unes a mí,querido amigo lector?»
[179]
Navidad
A Garabato y su niñales encanta decorarcon muchas luces que brillanel árbol de Navidad.
Cuelgan de varios coloresen las ramas muchas bolas,y junto a ellas también ponenunas guirnaldas muy monas.
En lo alto han instaladouna estrella muy brillante,y con esto han terminado,¡qué árbol más impresionante!
[183]
Ha quedado tan hermosoque a las aves también gusta,y un gorrión muy melodiosoha hecho su casa en la punta.
Trae un palito tras otro,lo coloca con cuidado,y un gran nido de este modopronto queda terminado.
«¡Qué casa más elegante!»,dice la gorriona al verlo,y quiere en él instalarsey poner dentro sus huevos.
[185]
También le gusta al lirón,y la ardilla lo disfruta,y de noche al irse el sol,se posa en él la lechuza.
No hay árbol más popularen todo este vecindario,no queda un solo animalque no quiera visitarlo.
Los vecinos al pasarmiran con admiración,y Garabato les dade regalo un polvorón.
[187]
Qué feliz es Garabato,su árbol es todo un acierto,a su sombra los regalosse cuentan casi por cientos.
Un gran montón de presentestrajeron los Reyes Magos,y antes de volver a oriente,una nota le dejaron.
«Estimado Garabato,nos ha encantado tu abeto,y por eso tus zapatoshemos dejado repletos»
[189]
Garabato piensa que aunquela Navidad ya ha pasado,es mucho más eleganteque el árbol siga adornado,
Una ardilla trae entonces,unas nueces estupendas,y bajo el árbol las rompepara dejar una ofrenda.
Más animales contentosllegan para celebrarlo.Tendrán el árbol luciendo¡todos los días del año!
[191]
Gotera
Garabato al despertarse,sobre un charquito ha pisado,quién podría imaginarseque el suelo estaba mojado.
«Qué desgracia, una gotera»,dice al ver caer el agua,y una gran gota le pegaen lo alto de la calva.
Parte en busca de un barreño,una palangana, un cubo,trae también un bol pequeño,una taza y un embudo.
[195]
Desde la cocina nota,que se escucha un ruido extraño,cuando llega en vez de gotas,cae del techo todo un caño.
Aquello ya no es gotera,sino catarata enorme,que el barreño pronto llenay hace que el agua desborde.
Ha traído un nuevo cubo,y este ya también rebosa,¡en el mundo nunca hubogotera tan caudalosa!
[197]
De pronto algo le salpica,y de aletas oye un ruido,hay algo que no se explica,y se siente confundido.
Levanta la vista y veque ya no solo agua baja,sino que también un pezen el caudal se desplaza.
Y tras ese pez va otro,y uno más después le sigue,«¡El cielo se ha vuelto loco,no comprendo este des�le!»
[199]
Garabato, intrigado,sale a ver ese aguacero,que deja grandes pescados,además de lluvia y truenos.
Se sorprende al descubrirque el tiempo está soleado,el cielo es color añil,como un día de verano.
¿De dónde provienen, pues,ese agua y esos peces,si aquí lleva sin lloverya va para un par de meses?
[201]
Alguien ha tocado el timbre,abren y ven al vecino,tiene algo que decirles,parece estar compungido.
«He perdido mis mascotas,deben haberse escapado,la pecera estaba rota,no las veo en ningun lado».
Garabato entiende entoncestodo lo que ha sucedido.«No se preocupe, buen hombre,sé dónde están sus amigos»
[203]
Un gran cubo le ha traido,del que los peces asoman,al verlos todos reunidos,el vecino se emociona.
«Aquí están mis pequeñines,y ninguno se ha hecho daño,ahora mismo aunque me arruineles compraré un nuevo acuario».
Está feliz Garabato,hoy ha hecho ya algo bueno,aunque le queda trabajo. . .¡ahora hay que fregar el suelo!
[205]
¿�é ha pasado? 1
1Adaptación libre del cuento Chto sluchilos?(1958), de Natalia Koncha-lovskaya
Se le da muy bien a la hijade Garabato pintar,no hay duda de que es artista,tiene un talento sin par.
Pide papel y unas ceras,y algunos rotuladores,para hacer una banderaque tenga muchos colores.
Lo que pinta, sin embargo,esta vez mal le ha salido,más que bandera es un trapomuy vulgar y chuchurrío.
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«Quiero pintar un palacio»,dice y coge otro papel,y comienza muy despacioa pintar una pared.
Pero aquello le ha salidomuy birrioso y algo insulso,los trazos son poco �nos,y no tuvo �rme el pulso.
Ya no pinta como entonces,ni es artista talentosa,su palacio está deformemás bien parece una choza.
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«Ahora dibujaré un bosque,con sus árboles y frondas,donde los lirones ronden,y los pájaros se escondan».
Pero aquello no es un bosque,apenas se le parece,es un simple monigote,con unos palos que crecen.
Los troncos están torcidos,y las copas muy mal hechas,allí no haría su nidoni una paloma maltrecha.
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«Yo no logro comprenderlo»,dice triste Garabato,«mi hija perdió su talento,y ahora pinta como un pato».
«Tranquilo, papá, no temas»,le dice ella sonriendo,«aquí no hay ningún problema,ahora mismo te lo cuento.
En lugar de con la diestrahago hoy todo con la zurda,y por eso salen estaspinturas así de absurdas».
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Cambiando el lápiz de mano,el dibujo hace de nuevo,y esta vez le sale guapolo que antes era feo.
Los árboles, la bandera,cada línea del palacio,de hermosos trazos se llenadel papel todo su espacio.
Vaya dibujo tan lindo,Garabato está admirado,si quieres verlo tú mismo,mira lo bien que ha quedado.
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Índice
1 Equipaje . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12 Pesca. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 153 Música . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 274 Enamorado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 395 Papiro�exia. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 516 Circo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 637 Saludos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 778 Nuevos vecinos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 919 Regalo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10310 Zapato . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11711 Caracol . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13112 Comilón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 143
13 Escayola . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15514 Reloj . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16715 Navidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18116 Gotera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19317 ¿Qué ha pasado? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 207
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