Un estudio de caso sobre la devocin cristiana temprana a Jess:
Filipenses 2, 6-11.(Captulo cuarto de Cmo lleg Jess a ser
considerado Dios?, por Larry W.
Hurtado.)------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Entre
los pasajes del Nuevo Testamento que expresan devocin cristiana
temprana a Jess, Filipenses 2:6-11 tiene una especial importancia,
y ha sido tema de considerable estudio especializado. En la
discusin que sigue, mis objetivos son hacer un balance del pasaje y
su notable posicin religiosa, y considerar cmo fue la ocasin de
estos versculos frecuentemente estudiados y su significacin
histrica. De modo que este ser un estudio de caso de un pasaje
crucial que viene a ser una ventana particularmente reveladora
acerca de la creencia y piedad cristianas tempranas, especialmente
en referencia al lugar que ocupaba Jess en la primera fe y prctica
cristianas.
Temas introductorios
Antes de dedicarnos al pasaje mismo, ser conveniente tomar nota
de algunas de las principales cuestiones introductorias y de sus
respuestas ms ampliamente aceptadas. Para tener tiempo de tratar
del texto mismo, ser necesario abordar de manera ms bien breve
estos temas sobre los cuales ha versado un enorme cuerpo de
publicacin especializada.
Un himno?
Aunque parece que a nadie se le ocurri la idea antes de
comienzos del siglo XX, la visin dominante en la actualidad, entre
los especialistas en NT, es que Filipenses 2:6-11 preserva (o
deriva de) un temprano himno cristiano u oda cristolgica
proveniente en origen de un mbito de adoracin colectiva. Segn esta
visin, Pablo incorpor las palabras de esta composicin hmnica en su
carta a los cristianos filipenses, como una inspiradora narracin
acerca de la humillacin y exaltacin de Jess. La fecha probable de
la carta de Pablo a los filipenses (ca. 60 E.C. si escrita durante
su prisin en Roma, segn la visin mayoritaria; quiz unos pocos aos
antes si escrita durante una aparente prisin en feso, como proponen
algunos especialistas) hara de este pasaje el ejemplo ms temprano
existente de una composicin hmnica cristiana. A partir de otros
textos tempranos tenemos referencias al canto/salmodia de salmos
(probablemente los salmos bblicos, al menos algunos de los que se
entendan como referidos a Jess en los crculos cristianos) y de
otras composiciones que eran expresiones de la piedad cristiana ms
temprana. Tambin hemos sabido de himnos y canciones espirituales
(en griego: odai pneumatikai) nuevos, que fueron al parecer
compuestos en tempranos crculos cristianos.
Entre las caractersticas que -se piensa ampliamente- indican la
naturaleza potica de Filipenses 2:6-11, destacan su fraseo
altamente comprimido y su estructura sintctica. Habr oportunidades
de ilustrar estas caractersticas cuando observemos brevemente los
detalles del pasaje. De varios otros textos del NT se piensa tambin
ampliamente que son de un gnero hmnico similar, pero repito que
este pasaje puede ser el ejemplo ms temprano que ha sobrevivido de
las pocas primersimas dcadas del movimiento cristiano
emergente.
Ha habido numerosos intentos de identificar la estructura potica
especfica de esta supuesta oda. Los estudiosos han propuesto dos o
tres estancias principales y hasta han intentado discernir
estrofas. Las actuales ediciones impresas del NT griego tienden a
reflejar estos esfuerzos, exhibiendo el pasaje en un formato
potico. Sin embargo, no es posible, ni es tremendamente importante,
dedicar aqu ms tiempo a estas materias ms bien tcnicas. Estoy ms
interesado aqu en los contenidos del pasaje, y en lo que ello
significa sobre el estatus de Jess en la ms temprana devocin
religiosa cristiana.
Es claro que el pasaje no exhibe las caractersticas formales de
la poesa griega, tales como la mtrica potica. Pero es algo que caba
esperar. En los indicios y aparentes evidencias en el NT sobre
odas/himnos/cnticos cristianos del siglo primero usados en la
adoracin, la impresin clara es que en este perodo los cristianos
imitaban el estilo y las estructuras de los salmos bblicos. Esto se
muestra tambin en otras composiciones tales como la coleccin
extra-cannica de poesa religiosa juda conocida como los salmos de
Salomn (fechada usualmente hacia la mitad del siglo primero A.C.).
Por otra parte, el canto cristiano ms temprano era probablemente ms
parecido a lo que llamaramos salmodia que a las melodas ms
elaboradas que vinieron a caracterizar posteriormente a la himnodia
cristiana. En el perodo ms temprano del cristianismo, el uso de la
mtrica y la meloda preferidas por la cultura ms amplia era
desestimado por los cristianos como elementos paganos que no tenan
cabida en la adoracin cristiana.
Idioma original?
Del mismo modo, tampoco vale aqu demasiado la pena atender mucho
a la cuestin de si la oda cristolgica que subyace a este pasaje fue
compuesta originalmente en griego o en arameo. En principio, es
posible que hubiese un original arameo, pero no hay ninguna razn en
particular para pensar que fue as efectivamente. Si, como parece
probable, Pablo esperaba que sus lectores reconocieran el pasaje (o
que reconocieran al menos las ideas expresadas en el pasaje),
entonces sus lectores greco-parlantes de Filipos tendran que haber
estado familiarizados con la supuesta oda (o con expresiones como
las del pasaje) en griego. Adems, debemos tener presente que, desde
sus primeros momentos, el joven movimiento cristiano (al menos en
Jerusaln y otros enclaves urbanos) era una entidad bilinge, que
inclua a creyentes greco-parlantes y arameo-parlantes, y a un buen
nmero de otros que eran hablantes efectivos de ambos idiomas. As
que, por temprana que fuese la oda cristolgica que puede subyacer a
Filipenses 2:6-11, podra haber sido compuesta de entrada en
cualquiera de los dos idiomas. Pero subsiste en griego, y nuestro
primer deber es dar cuenta del texto tal como lo tenemos, para ver
lo que puede contarnos acerca de la piedad que refleja.
Himnos y cristologa.
En cuanto al contenido, es evidente que Filipenses 2:6-11 trata
de cristologa (esto es, de afirmaciones acerca de la significacin
de Jess). La idea clave del pasaje es, claramente, una afirmacin de
la significacin especial de Jess. En realidad, virtualmente todos
los pasajes cristolgicos ms tempranos, de tamao considerable, y
significativos, en el NT, tienen el aspecto de ser restos de himnos
cristianos tempranos, y parece que tales odas a, y sobre, Jess
pueden haber sido un modo crucial en que se expresaba la excelsa
significacin de Jess durante los primeros aos del cristianismo.
Bajo el impacto del fervor religioso caracterstico de los crculos
cristianos ms tempranos, que ellos entendan como la manifestacin
del Espritu de Dios, los creyentes fueron impulsados a expresar su
devocin a Jess componiendo y cantando odas que celebraban sus
hechos y estatus excelso. Como la mayora de los estudios previos
del pasaje, vamos a centrarnos en el contenido de esta supuesta oda
sobre Jess, pero tambin es importante reconocer la importancia de
la prctica devocional consistente en entonar odas/cantos sobre Jess
como una cualidad caracterstica de la adoracin. El canto/salmodia
de estas odas es uno de los varios fenmenos que demuestran la
naturaleza notable e innovadora de la adoracin cristiana temprana,
en la cual se inclua a Jess programticamente en el patrn devocional
de los primeros crculos cristianos hacia Dios, y de maneras que
estaban reservadas para Dios. Yo sostengo que esta incorporacin de
Jess al patrn devocional, como tema y objeto de la devocin
colectiva, es tal vez la innovacin religiosa ms significativa que
caracteriza a la adoracin cristiana ms temprana, especialmente en
el contexto de la tradicin religiosa del judasmo del Segundo
Templo, que constitua la matriz inmediata a partir de la cual se
desarroll el cristianismo ms temprano.
Contexto y propsito.
Me vuelvo ahora al pasaje mismo, enfocando primero su contexto y
propsito probable. Si bien lo que ahora es Filipenses 2:6-11 se
origin como una oda temprana acerca de Jess, en su contexto actual
forma parte de una seccin ms larga de esta epstola, en la que Pablo
exhorta a los lectores a tener humildad y consideracin hacia los
dems (esp. 2:1-5, 12-18). Aunque estamos principalmente interesados
en lo que el pasaje afirma sobre Jess, es importante notar que
Pablo presenta este material sin introduccin ni indicacin alguna de
que necesite explicacin para los lectores. Es decir que aunque el
pasaje es una expresin particularmente importante de las tempranas
creencias cristianas, el modo en que se usa en Filipenses
prcticamente nos hace pensar que Pablo esperaba que sus lectores
reconocieran y asintieran o bien el pasaje (i.e., como una
oda/himno ya conocido por ellos) o por lo menos lo que el pasaje
expresa como reflejo de lo que ellos ya saban y afirmaban sobre
Jess.Esto es muy significativo en trminos histricos. Quiere decir
que los elevados conceptos asignados a Jess en este pasaje eran ya
suficientemente familiares, al menos en los crculos cristianos
tempranos en los que se mova Pablo, de manera que Pablo no estim
necesario introducir o explicar esta notable, casi lrica declaracin
de los hechos de Jess y de su posicin. Esto es, que Filipenses
2:6-11 es evidencia fuerte de que lo que los estudiosos llaman una
visin alta de la significacin y el estatus de Jess haba llegado a
ser ampliamente compartida, razonablemente, dentro del corto perodo
de tiempo entre la muerte de Jess y la fecha de la epstola en que
aparece este pasaje. Entonces, vamos a examinar ahora el pasaje
para ver ms especficamente en qu consista esta visin alta de Jess
tal como se expresa en l.
Enfoque bsico.
En vista de las muchas publicaciones que hay sobre este pasaje,
resulta irnico que uno de los estudios ms valiosos, la tesis de
doctorado de Takeshi Nagata [Princeton, 1981], no se haya publicado
nunca. Uno de los valiosos nfasis de Nagata es sobre la importancia
del punto de vista interpretativo desde el que se aborda el pasaje.
Como ya he anotado, el modo muy compacto de expresin en Filipenses
2:6-11 indica que se esperaba que los lectores vinieran
familiarizados con las convicciones que refleja y la forma en que
son expresadas. O sea que estos versculos suponen expectativas y
demandas particulares sobre sus lectores. As que una gran cantidad
de la discusin especializada sobre el pasaje ha sido respecto de qu
clase de esquema conceptual y punto de vista presupone.Como seala
Nagata, los estudiosos han abordado a menudo Filipenses 2:6-11
basndose en tal o cual esquema conceptual y con presupuestos que no
se siguen inductivamente del pasaje, y pueden ciertamente hacerle
violencia interpretativa. As, por ejemplo, un intrprete muy
influyente, el especialista alemn Ernst Ksemann, presupuso un mito
precristiano acerca de un redentor gnstico como fondo del pasaje y
de su presentacin de Jess. Con el deceso crtico de esta hiptesis,
algunos estudiosos han propuesto que el pasaje representa la
adaptacin de un supuesto mito permeante de la Sabidura, mientras
otros han afirmado un gran esquema de especulacin antigua sobre Adn
como fondo clave, viendo entonces estos versculos como una expresin
de la llamada cristologa admica, con la obediencia de Jess
presentada aqu en contraste deliberado con la desobediencia de
Adn.En lo que sigue, adoptar un enfoque que implica dos
caractersticas principales. Primera, en vez de presuponer que el
pasaje refleja la adaptacin de algn esquema conceptual
pre-cristiano sobre esta o aquella figura reveladora o redentora e
interpretar entonces las afirmaciones a travs de las lentes de este
esquema, intentar una aproximacin ms inductiva. Pretender construir
un cuadro de las creencias que presenta y presupone el pasaje,
mediante atencin cuidadosa a lo especfico del pasaje mismo. La
segunda caracterstica de mi enfoque es tal vez la ms novedosa.
Mientras la mayora de los estudios se han concentrado ms en las muy
difciles primeras pocas lneas del pasaje (vv. 6-8), yo comenzar por
los versculos finales (vv. 9-11) por motivos que, espero, se harn
persuasivos en breve.
Anlisis textual.
Hago ahora un anlisis ms directo. Deseo empezar con una visin
global y las observaciones ms obvias, para pasar luego a mayores
detalles. Puede ser til proporcionar el texto griego y una
traduccin (la ma propia).
5 ,6 ,7 , 8 , .9 ,10 11 ' .Filipenses 2:5-11
5 Tened esta actitud entre vosotros,la de Cristo Jess,6 quien,
siendo de la forma de Dios,no se aferr, para aprovecharse, a esto
de ser igual a Dios,7 sino que, en cambio, se vaci de s
mismo,tomando la forma de un esclavo,asumiendo la semejanza
humana.Y hallndose en forma humana8 se humill a s mismohacindose
obediente hasta la muerte,y una muerte de cruz.9 Por lo cual Dios
lo exalt a lo ms altoy le otorg el nombreque est sobre todo
nombre,10 de manera que al nombre de Jesstoda rodilla se doble,en
el cielo y en la tierray en los abismos,11 y toda lengua
proclameque Jess Cristo es Seorpara gloria de Dios Padre.
Estructura
Podemos empezar tomando nota de que el pasaje es una narracin,
esto es, ciertos eventos y actos recitados en una secuencia. Ntese
que hay dos actores principales en esta narracin. En los versculos
6-8, Jess es el sujeto de todas las formas verbales, y la figura
clave. En los versculos 9-11, en cambio, l es el objeto de todos
los verbos, y Dios es la figura cuyas acciones dirigen todos los
eventos que se mencionan. De manera que, en una observacin muy
bsica, vemos que el pasaje tiene dos partes principales, los vv.
6-8 y los vv. 9-11. Adems, las acciones de los vv. 9-11 no slo se
presentan a continuacin de las de los vv. 6-8, sino tambin, de
alguna manera directa, como consecuencia de lo que se recita en
estos versculos. La expresin que inicia el v. 9, por lo cual (en
griego ), enlaza directamente lo que la sigue a lo que la precede.
As, lo que se enfatiza no es que la exaltacin por Dios revierta la
humillacin de Jess (si esa fuera la intencin, esperaramos una
palabra de contraste como : pero. En cambio, ese por lo cual hace
de la humillacin de Jess la base o fundamento, de alguna manera,
para su extraordinaria exaltacin por Dios. La humillacin y la
exaltacin de Jess, entonces, son tratadas como un conjunto conexo
de acciones, con un objetivo y propsito final.Este objetivo y
propsito se expone en los versculos 9-11, lo que significa que
estos versculos han de entenderse como el pice de la narracin, que
presenta lo pretendido por todo el drama. Sin embargo,
principalmente debido a la exhortacin de 2:1-5 a humillarse y ser
considerado con los dems, que proporciona el contexto inmediato de
los vv. 6-11, los estudiosos han tendido a concentrarse mucho ms en
los actos de Jess segn los vv. 6-8, considerando los vv. 9-11
generalmente con ligereza, y a veces hasta como algo incmodo y
difcil de incorporar a la preocupacin por suscitar humildad. Adems,
los vv. 6-8 estn erizados de dificultades exegticas que se hacen
evidentes cuando se intenta precisar el sentido exacto de algunas
expresiones muy inusuales, tales como forma de Dios, la afirmacin
de no estimar la igualdad con Dios como algo de lo que
aprovecharse, se vaci de s mismo, la semejanza humana, y aun otras
ms. Adems, el enfoque caracterstico de la reflexin doctrinal
cristiana hacia temas cristolgicos ha sido otra razn por la que se
entiende que estas afirmaciones fascinantes sobre los hechos y el
estatus de Jess hayan atrado ms atencin que los vv. 9-11.Pero es
precisamente a causa de las dificultades de los vv. 6-8, que puede
ser ms til comenzar con los vv. 9-11. Tambin, dado que en el mundo
conceptual presupuesto en el texto Dios es la autoridad ltima,
cuyos actos y propsitos otorgan sentido a todo lo dems, tenemos
otro motivo para concentrarnos en estos versculos en los que Dios
es el actor clave, y donde sus propsitos son expuestos, a mi
juicio, con bastante transparencia. Sugiero que el comenzar
atendiendo a los vv. 9-11 nos conducir con mayor seguridad a una
comprensin correcta del pasaje entero.
Aclamacin de Jess y alusin bblica.
Podemos notar en primer lugar que, como es ampliamente aceptado,
en los vv. 9-11 tenemos apropiaciones de la tradicin bblica y juda
que se esperaba reconocieran los lectores. Esto nos dar un valioso
indicador al punto de vista conceptual de los pretendidos lectores.
El caso ms obvio aqu es la apropiacin y adaptacin interpretativa de
la fraseologa de Isaas 45:23 en los vv. 10-11 para describir la
obediencia debida a Jess por todas las esferas de la Creacin. Isaas
45:18-25 ha sido insuperado como declaracin altsona de la unicidad
del Dios del Israel bblico. Tres veces aparece el refrn de que no
hay otra deidad (w. 18, 21, 22), y en 45:22-25 se convoca a toda la
Tierra a unirse a una sumisin universal a este nico verdadero Dios.
No deja de ser asombroso, pues, que se haya encontrado apropiado el
fraseo de este pasaje para describir el reconocimiento de la
supremaca universal de Jess. A continuacin voy a traducir primero
desde la versin griega de Isaas (que es probablemente la versin de
Isaas que conocan los crculos cristianos tempranos, fueran
cristianos judos o gentiles, en esa poca), y luego har notar cmo el
pasaje de Isaas fue apropiado aqu en Filipenses.
Volveos a m y seris salvados, vosotros los de los confines de la
Tierra. Yo soy Dios, y no hay otro. Por m mismo he jurado; la
verdad saldr de mi boca; mis palabras no sern vanas. Ante m se
doblar toda rodilla, y toda lengua confesar a Dios [ ] diciendo
verdad, y la gloria se le entregar, y todos quienes se separen sern
avergonzados; por el SEOR [ ] ser rehabilitada, y en Dios [ ] ser
glorificada, toda la filiacin de Israel.
En lo que puede considerarse un distintivo midrs cristolgico del
pasaje de Isaas, en Filipenses 2:10-11 se presenta la aclamacin
universal de Dios tomando la forma de una aclamacin de Jess como
Seor (Kyrios, en griego). Con todo, en el pasaje de Filipenses esta
reverencia a Jess est inducida por Dios mismo. En el v. 9, es Dios
quien ha exaltado a Jess y le ha dado el nombre sobre todo nombre,
y en las palabras finales del v. 11 (que, sostengo, son el clmax)
es a la gloria de Dios Padre a lo que sirve y expresa en el fondo
la aclamacin del estatus de Jess.Nuevamente tengo que agradecer al
anlisis de Nagata, que me parece ha captado con mucha plausibilidad
lo especfico del procedimiento empleado por el temprano exegeta
cristiano. Nagata propone que la curiosa variacin en Isaas 45:23
entre el pronombre en primera persona (a m) y el nombre Dios (i.e.,
una referencia en tercera persona) puede haber proporcionado una
apertura del texto para que algn cristiano temprano descubriera en
el pasaje dos figuras a las que rendir reverencia: Jess, el Seor
que habla en primera persona, y Dios. La misma variacin entre el
Seor y Dios aparece tambin en otras partes del contexto -- por
ejemplo en Isaas 45:25.As que, habiendo llegado con la conviccin
previa de que Dios haba exaltado a Jess a una preeminencia
celestial, y lo haba designado como el Seor al que toda la creacin
debe rendir homenaje (una conviccin que creo emergi al parecer a
travs de poderosas experiencias religiosas), algunos cristianos (o
comunidad cristiana) tempranos encontraron una confirmacin
escriturstica de esta forma binitaria del plan divino plasmada en
Isaas 45:23. Esta comprensin creativa del pasaje de Isaas debe
estar seguramente detrs de Filipenses 2:9-11, y, ciertamente, esta
especie de exgesis carismtica de numerosos pasajes bblicos parece
que jug un papel principal en los esfuerzos cristianos ms tempranos
para entender los poderosos eventos y experiencias religiosos que
provocaron y moldearon su fe. Sugiero que puede haber sido algo
caracterstico de los crculos judeocristianos, que escrutaban sus
escrituras tradicionales buscando averiguar los propsitos de Dios
respecto de Jess, y hallar adems justificacin escriturstica a sus
convicciones acerca de su significacin y estatus. Adems de leer a
Isaas 45:23 con referencia a dos figuras, el Seor Jess y Dios el
Padre, la otra adaptacin del pasaje es la especificacin de tipo
midrsico de la aclamacin universal de Jess en Filipenses 2:10. Jess
debe ser aclamado por todas las esferas/seres, celestes, terrestres
y del mundo inferior [literalmente subterrneo]. Este fraseo
refleja, por supuesto, una conocida cosmologa de la era romana, la
realidad entendida como poseedora de dimensiones adicionales,
superiores e inferiores, ms all de la terrestre y mundanal. La
supremaca universal de Dios en Isaas 45:23 est expresada aqu
abarcando a todas y cualesquiera dimensiones de la realidad,
comoquiera sean entendidas.
Exaltacin y el Nombre Supremo.
Ese nfasis en el estatus elevado de Jess ya ha sido destacado en
el v. 9, que relata las acciones de Dios en respuesta a la
auto-humillacin de Jess. En consecuencia de, y respondiendo a, la
humilde obediencia de Jess hasta la muerte por crucifixin, Dios
exalt a lo alto a Jess. Exalt a lo alto traduce aqu al mismo verbo
griego utilizado en el Salmo 96:9 (LXX; Salmo 97:9 en la Hebrea)
para alabar la supremaca de Dios lejos por encima de todos los
dioses. Dios tambin dio a Jess el nombre sobre todo nombre. Aunque
no tenemos aqu una referencia explcita a la resurreccin de Jess, es
ms que probable que la exaltacin de Jess por Dios en Filipenses 2:9
est enlazada implcitamente a ese evento. En el Nuevo Testamento, la
resurreccin de Jess no consiste solamente en su revivificacin;
involucra tambin su vindicacin y exaltacin por Dios a un estatus
nico por ejemplo, a la diestra de Dios (con imagen y fraseo tomado
del Salmo 110:1 [LXX 109:1], un texto bblico clave para la expresin
ms temprana del estatus de Jess). Otros textos tempranos del Nuevo
Testamento contienen pretensiones similares respecto de la
exaltacin de Jess por Dios. Por ejemplo, en Hechos 2:29-36, tenemos
afirmaciones sobre la resurreccin de Jess (w. 31-32) ligada a su
exaltacin por Dios (v. 33) y el nombramiento por Dios de Jess como
Seor y Cristo/Mesas (v. 36), todas formas claramente
complementarias de referirse a la misma accin divina. De manera que
la resurreccin de Jess de entre los muertos involucraba su
exaltacin a la gloria celestial y a un estatus nico. En Romanos
1:3-4, Pablo refiere que Jess ha sido designado como Hijo de Dios
con poder por su resurreccin de entre los muertos, frase que los
estudiosos comnmente consideran una temprana confesin de fe
incorporada por Pablo aqu en su carta. En el curioso escrito del
Nuevo Testamento llamado Carta a los Hebreos, tenemos otra
referencia ms a la idea de que Jess, despus de su muerte redentora,
fue exaltado a un estatus celestial nico por Dios (1:3-4), y este
aparece descrito explcitamente como conllevando la superioridad de
Jess sobre los ngeles y obteniendo un nombre que refleja su
superioridad. Tambin podemos sealar a Efesios 1:20-23, donde otra
vez se liga la resurreccin de Jess a su exaltacin por Dios muy por
encima de toda norma y autoridad y poder y seoro y de todo nombre
que se mencione, no slo en esta era sino tambin en la era venidera.
En 1 Pedro 3:21-22 hay una similar expresin de fe.Volviendo a
nuestro pasaje de Filipenses, particularmente al v. 9, la
referencia a que a Jess se le ha dado el nombre sobre todo nombre
prcticamente requiere que pensemos en la estimacin juda devota
tradicional del nombre sagrado de Dios. Adems, tenemos aqu
probablemente otro eco de Isaas 45:18-25. En la versin LXX del
pasaje de Isaas, YHWH es el Kyrios cuya supremaca se manifestar a
todos. As que la aclamacin de Filipenses 2:11, "Kyrios Isous
Christos" (Jess Cristo/Mesas es [el] Seor), especifica el nombre
exaltado que lleva ahora Jess. Por asombroso que pueda parecer,
Filipenses 2:9 debe ser entendido como reclamando que de algn modo
Dios ha dado a Jess (para compartirlo?) el nombre divino que en
griego era representado por Kyrios, y en hebreo por el
Tetragramatn. Como dice Nagata: Los vv. 10-11 hacen virtualmente
Dios al Jess exaltado. Como veremos en breve, esto no significa,
sin embargo, que Jess eclipse al Dios de la tradicin bblica. Las
afirmaciones de exaltacin que se hacen aqu sobre Jess, constituyen
una distintiva mutacin del monotesmo judo tradicional, pero no
ciertamente un rotundo rechazo de este.Resumiendo en este punto, la
descripcin de la accin y el propsito de Dios segn Filipenses 2:9-11
est adaptada a partir de, y hace alusin deliberada a, la tradicin
bblica juda. As que, si hay un punto de vista conceptual y un marco
interpretativo con los que se espera que los lectores aborden el
pasaje, parece ser esta tradicin bblica/juda, no algn supuesto
mito-redentor gnstico pre-cristiano, ni algn otro esquema tal como
el de la entronizacin del emperador romano o la apoteosis de los
hroes. Claro que lo que se hace con la tradicin bblica juda en
Filipenses 2:9-11 es novedoso y hasta asombroso. Pero no se puede
captar realmente el pleno sentido de lo que se asevera en estos
versculos sin reconocer la tradicin que se ha trazado hasta aqu
para hacer estas afirmaciones sobre las acciones y propsitos de
Dios respecto de Jess. La siguiente cuestin es, obviamente, por la
circunstancia que pudo conducir a formar estas aseveraciones y a
esta apropiacin novedosa de la tradicin bblica juda. Reservo esta
cuestin para un poco ms adelante, despus de haber considerado los
vv. 6-8.
La auto-humillacin y obediencia de Jess.
Como anotamos antes en esta discusin, la mayor parte del estudio
especializado de Filipenses 2:6-11 se ha dirigido principalmente a
los vv. 6-8, en los que Jess es el actor principal y el sujeto de
todas las formas verbales. Para sondear estos versculos, podemos
comenzar en un nivel sintctico bsico, y pido paciencia a los
lectores que no sean demasiado aficionados a la gramtica. Hay tres
verbos indicativos que constituyen la columna vertebral sintctica
del pasaje. En el v.6, Jess no estim (ouch hegsato) la igualdad con
Dios como una oportunidad de la que aprovecharse. En vez de eso, se
vaci de s mismo (heauton ekensen, v. 7) y se humill a s mismo
(etapeinsen heauton, v. 8).El primero de estos verbos principales
forma parte de una frase idiomtica en griego, cuyo sentido acepto
que ha sido identificado correctamente por Roy Hoover. La expresin
idiomtica bsica griega incluye el verbo hgeomai
(considerar/estimar/contemplar algo), y el sustantivo
harpagmos/harpagma (ventaja/oportunidad), y la clase de expresin
utilizada en Filipenses 2:6 connota considerar algo como dando una
oportunidad que aprovechar para obtener algn tipo de ventaja. En
este caso (v. 6), se describe a Jess como alguien que ha rehusado
considerar la igualdad con Dios de esta manera esto es, como algo
que aprovechar en ventaja propia. La accin de Jess, de rehusar
tomar ventaja de su situacin, nos queda clara si notamos que est
ligada con la accin contrastante del prximo verbo principal en el
v. 7. Jess no aprovech para s el ser igual a Dios sino que, en
cambio, se vaci de s mismo (itlicas mas), y esta accin es explicada
mejor mediante las dos frases participativas que siguen a
continuacin: tomando la forma de un esclavo (morphn doulou labn) y
naciendo en semejanza humana.As que el auto-vaciamiento de Jess es
descrito aqu como involucrando su haber tomado una forma-de-esclavo
y habiendo nacido en semejanza humana esto es, como un ser humano.
Y este auto-vaciamiento es lo que Jess escogi para s, en vez de
estimar su igualdad con Dios como algo de lo que aprovecharse para
ventaja propia. En sntesis, el v. 7 traza el curso de accin
emprendido por Jess, en contraste con la alternativa rechazada en
el v. 6. Pero podemos sondear ms profundamente en lo que se retrata
en estos versculos? En la primera lnea del v. 6, Jess es descrito
como habiendo sido/existido [hyparchn] en la forma de Dios [en
morph theou]. Un enorme debate se ha suscitado sobre el significado
de esta frase, especialmente sobre la connotacin de la expresin en
la forma de Dios. Pero vamos a aproximarnos a esta frase teniendo
en mente su estatus sintcticamente subordinado en el v. 6. Esto es,
que la sintaxis indica que el nfasis est aqu en los dos verbos
indicativos ligados usados en los vv. 6 y 7 (que describen a Jess
escogiendo no aprovecharse de su igualdad con Dios y habindose
vaciado de s mismo). La frase en participio de la primera lnea del
v. 6, siendo de la forma de Dios, da el encuadre, por decirlo as,
de la eleccin de Jess de no estimar su igualdad con Dios como algo
de lo que aprovecharse. Aunque los intrpretes se han mostrado
curiosos, comprensiblemente, y hasta fascinados por lo que pueda
significar siendo de la forma de Dios, debemos mentalizarnos de que
este fraseo da poco estmulo a la especulacin metafsica. Cualquiera
sea lo que se adscribe a Jess en esta frase, no se trata de la
asercin focal y clave, sino del contexto y enmarque para la
auto-humillacin de Jess, que es el verdadero foco de los vv. 6-8.
Adems, parece que el significado de siendo de la forma de Dios
puede haberse dado por evidente y conocido por los lectores a
quienes est dirigido, ya que el texto no hace virtualmente nada
para explicar esta interesante frase. Pero cmo entender nosotros la
funcin de esta frase? Hay que tomar siendo de la forma de Dios en
algn sentido apropiado para realzar la significacin de la decisin
de Jess? Si fuese as, deberamos traducir: aun siendo de la forma de
Dios, Jess no escogi aprovecharse de ser igual a Dios, sino que se
vaci de s mismo (como p. e. en RSV, NRSV)? O esta construccin en
participio debe ser entendida simplemente como estableciendo la
circunstancia en la que Jess tom su decisin? Esto es, deberamos
entender la frase como algo as: estando en la situacin de ser (ya)
de la forma de Dios, l no estim la igualdad con Dios como algo de
lo que aprovecharse? O, como arguye C.F.D. Moule, debemos tomar
esta frase en participio para expresar la base o razn de la decisin
de Jess: siendo de la forma de Dios, l (por eso) no estim la
igualdad con Dios como algo de lo que aprovecharse?Yo me inclino
hacia lo que me parece el sentido ms simple de los trminos, entre
estas opciones. Sugiero que la funcin ms plausible de la frase en
participio que abre el v. 6, es simplemente indicar la
circunstancia de Jess en la cual ocurri su decisin. Esto es, que
encontrndose en la situacin de ser de la forma de Dios, escogi no
aprovechar en ventaja propia la igualdad con Dios que ello
involucraba. De modo que hay que considerar que la decisin de Jess
fue tomada desde una posicin en la que l tena realmente la
oportunidad de elegir hacer algo distinto, alguna otra cosa que la
auto-humillacin que se muestra que escogi en los vv. 6-8.
De la forma de Dios.
Pero, cul era, ms precisamente, la posicin de Jess en la que
pudo rechazar usar la igualdad con Dios en beneficio propio? Qu
quiere decir que Jess haya sido de la forma de Dios? Esto ha
generado una atencin tan intensa que tendremos que detenernos a
considerarlo tambin nosotros, lo que requerir cuidadosa atencin a
ciertos detalles lingsticos adicionales. Hay dos opciones
principales propuestas por el estudio especializado actual. Una
visin que ha ganado alguna popularidad en las ltimas dcadas es que
forma de Dios (morph theou) es aqu una expresin totalmente sinnima
de la imagen de Dios (eikn theou), la frase usada para caracterizar
a Adn en el relato de la Creacin del Gnesis (1:27). Quienes abogan
por esta visin tienden a ver aqu un contraste intencionado y
enftico entre Jess y Adn, tomando a Filipenses 2:6-8 como expresin
de una cristologa admica que se supone habra sido bien conocida en
los crculos cristianos del siglo I, y especialmente caracterstica
del pensamiento de Pablo. El otro contendiente principal para el
significado de forma de Dios es que ello connota algn estado y modo
de tipo divino de Jess previo a su vida terrena esto es, una
pre-existencia celestial. Segn esta visin, la eleccin de Jess de
vaciarse de s mismo, que involucr tomar la forma de un esclavo y
asumir la semejanza humana (v. 7), debe entenderse como lo que
despus en la tradicin cristiana se llam la Encarnacin, por la que l
vino a ser la figura histrica genuinamente humana Jess de Nazaret.
Aquellos que proponen una alusin a, y un contraste intencionado
con, Adn, en los vv. 6-8, suelen cuestionar que siendo de la forma
de Dios connote realmente aqu una pre-existencia celestial de Jess,
instando en cambio a que forma de Dios era simplemente una manera
de referirse al estatus de Jess similar al de Adn en su existencia
humana/terrenal. Segn este punto de vista, los vv. 6-7 describen la
decisin del Jess humano/terrenal de seguir el camino de la humildad
y obediencia a Dios; y el rechazo de Jess a estimar la igualdad con
Dios en su propio provecho debe verse en contraste intencionado con
la desobediencia de Adn al ceder este a la tentacin de ser como
Dios/dioses (Gen. 3:5). Una de las principales pretensiones que se
ofrecen para sostener esta posicin es que las dos palabras griegas,
morph y eikn, deben tomarse como trminos sinnimos en el mismo campo
semntico. Esta es, sin embargo, una pretensin dudosa, al menos como
se suele presentar, porque, como ha mostrado David Steenburg, las
dos palabras se usan de hecho de modo distinguible. Adems, debemos
tener en cuenta que la unidad semntica en cuestin, en Filipenses
2:6, no es morph sino morph theou. La cuestin no es meramente sobre
el alcance general de la palabra griega para forma; en vez de eso,
la cuestin es sobre el significado de la expresin griega especfica
para forma de Dios. Lo que necesitamos saber no es si las palabras
griegas morph y eikn tienen alguna clase de ligazn conceptual, sino
si las dos palabras se usaban de manera intercambiable, en
particular en este tipo de expresin. Las palabras a menudo tienen
en general un conjunto de significados posibles, pero sus
significados particulares aparecen en el uso y sus relaciones
sintcticas con otras palabras, en frases y sentencias. As que la
cuestin precisa que se nos plantea es si la expresin forma de Dios
pudo probablemente usarse aqu como una manera de aludir a la
descripcin de Adn en el Gnesis, como creado a imagen de Dios.Como
he indicado en una discusin anterior de este tema, la respuesta es
claramente negativa, ms bien. En la traduccin al griego de los
pasajes relevantes del Gnesis, se utiliza consistentemente la
expresin eikn theou para expresar el estatus y significacin
especial de Adn y la Humanidad (Gen. 1:26-27; 5:1; 9:6), y esta
misma expresin se utiliza consistentemente tambin en las
subsiguientes alusiones a esta idea y estos textos en los escritos
griegos de proveniencia juda o cristiana temprana (e.g., Sab. de
Sal. 2:23; 7:26; Sirach 17:3; 1 Cor. 11:7; Col. 3:10). Por otra
parte, los autores del Nuevo Testamento usan consistentemente el
trmino eikn cuando quieren apropiarse de la idea de imagen divina
como una manera de indicar la significacin de Jess (2 Cor. 4:4;
Col. 1:15), y cuando hacen una clara relacin o un contraste de Jess
con Adn (e.g., 1 Cor. 15:49; 2 Cor. 3:18). En cambio, nunca se
utiliza morph en ninguna alusin a Adn en el Nuevo Testamento, y
morph theou no se utiliza para nada en la versin griega del
Tanaj/Antiguo Testamento ni en ningn otro texto judo o cristiano
donde podamos identificar una alusin a Adn.As que la pretendida
utilizacin de morph theou para ligar a Jess con Adn en Filipenses
2:6 sera un caso singular sin ninguna analoga o precedente. Como he
sealado previamente, esta manera de hacer una alusin a Adn sera
tambin una manera particularmente inepta, desde luego. Porque para
que funcionen las alusiones a otro texto o tradicin oral esto es,
para que los lectores/oyentes a quienes est dirigida capten la
alusin- se debe usar o adoptar algo de aquello a lo que se est
aludiendo, que sea suficientemente identificable para que se note
la alusin. Sin embargo, en Filipenses 2:6-8 no hay una sola palabra
de los relatos en griego del Gnesis sobre la creacin o la tentacin,
salvo la palabra Dios. Esto no parece ser un intento serio de
alusin! La frase empleada en Filipenses 2:6 para describir que Jess
escogi no aprovecharse de ser igual con/a Dios (to einai isa theo),
parece funcionar como otra manera de caracterizar el estatus de
Jess previo a su auto-humillacin, haciendo un paralelo entre la
expresin ser igual con Dios y la expresin de la forma de Dios. La
estructura del griego aqu prcticamente lo requiere, o al menos
enlaza estrechamente siendo de la forma de Dios con ser igual con
Dios.Conviene notar, sin embargo, que siendo igual a Dios tampoco
se usa, en ninguna parte, en alguna alusin identificable a Adn o su
pecado. En otros escritos de la antigedad s encontramos referencias
a personas que pretendan la igualdad con Dios/los dioses, y en
estas referencias esto es presentado siempre negativamente, como
hibris de locura. Parecera pues que en Filipenses 2:6 debemos ver
la eleccin de Jess de no aprovecharse de ser igual a Dios, un
estatus que ya tena, como un marcado contraste con los locos
esfuerzos de los humanos para alcanzar dicho estatus. En suma, la
alusin aqu no es a Adn en particular, sino a una expresin comn de
vana hibris humana, de la cual debe verse como opuesta la
auto-humillacin de Jess. Y la accin de Jess es presentada como
tanto ms impresionante cuanto lo que l escogi no usar en provecho
propio fue precisamente aquello que algunos humanos arrogantes se
saba que buscaban en vano obtener para s mismos.Hay otro problema
con la pretensin de que Filipenses 2:6-8 hace un contraste
intencionado con Adn, que, extraamente, no suele notarse. Ni en el
Gnesis ni en otros textos sobre Adn se relaciona a Adn con la frase
de la serpiente en Gnesis 3:5 acerca de que comer del fruto del
rbol prohibido har a los humanos como Dios/dioses. En el pasaje del
Gnesis, por supuesto, la insinuacin de la serpiente se dirige en
realidad a Eva, quien es presentada como inclinada a comer el fruto
prohibido a causa de las que ella juzgaba sus atractivas cualidades
(Gen. 3:6). Las referencias a Adn en los escritos subsiguientes no
lo mencionan en particular como deseoso de ser como Dios. Esta
caracterstica precisa no forma parte de la pintura antigua
tradicional de Adn como transgresor. As que, una vez ms, si en
Filipenses 2:6 se esperara que viramos una alusin a Adn en la
referencia a la eleccin de Jess de no aprovecharse de su igualdad
con Dios, esto sera algo sin precedente ni analoga. Hay todava una
observacin adicional que creo relevante y a la que no se ha
prestado atencin suficiente. Recordemos de nuestro anlisis
precedente de los vv. 9-11 que tenemos all clara apropiacin de, y
alusin a, tradiciones bblicas y judas. Podemos juzgarlas as porque
estn sealadas por un fraseo que puede identificarse fcilmente con
un pasaje bblico (como la apropiacin de Isaas 45:23 en los
versculos 10-11, y la alusin probable al Salmo 97:9 en el versculo
9), o un fraseo que connota obviamente un concepto tradicional
(como en el v.9, el nombre sobre todo nombre). As que debemos
preguntarnos por qu un autor (ya sea Pablo o algn compositor annimo
de una oda que Pablo incorpor) que saba perfectamente cmo hacer
alusiones mediante el uso de tales recursos verbales pudo haber
fallado tan completamente en emplear alguno de esos recursos en los
vv. 6-7, si buscaba efectivamente hacer ah una alusin y contraste
con Adn. Por lo tanto, la conclusin ms probable es que en los vv.
6-7 no se intent hacer una alusin o contraste directo con Adn. As
que, por varias razones, parece ms probable que en los vv. 6-7 se
haga referencia a que Jess tena un estatus o modo de ser de alguna
manera divino, y que luego devino un ser humano. Sabemos que este
tipo de visin de Jess apareci pronto y est expresada bastante
explcitamente en el Evangelio de Juan, especialmente en Juan
1:1-18. Ntese tambin Juan 17:5, donde, cuando su muerte se
aproximaba, se describe a Jess orando: Padre, glorifcame en tu
presencia con la gloria que tena en tu presencia antes de que el
mundo existiera. El Evangelio de Juan suele datarse alrededor del
80-90 E.C., as que, por entonces, esta clase de ideas estaba
circulando al menos en algunos crculos cristianos, est claro. Pero,
podemos imaginar realmente que ya por la fecha de la carta de Pablo
a los filipenses, veinte o treinta aos antes del Evangelio de Juan,
se haba formado esta nocin? A la luz del anlisis precedente de
Filipenses 2:6-7, as parece. Ciertamente, el uso en estos versculos
de un fraseo compacto sin explicacin (p.e., de la forma de Dios)
sugiere que se esperaba que los lectores reconocieran a qu se haca
referencia, lo que significara que, bastante antes de esta carta,
la idea de la pre-existencia de Jess formaba parte de la creencia
cristiana. Como he indicado en una publicacin anterior, hay
suficiente evidencia de que en la tradicin juda pre-cristiana haba
libertad, y quiz tendencia, a enlazar los personajes particulares
de excepcional importancia al estado celestial y pre-temporal.
Especialmente en el antiguo pensamiento apocalptico judo y
cristiano, se poda pensar que las figuras de gran importancia
escatolgica tenan de algn modo una pre-existencia celestial. As
que, dada la firme conviccin de que Jess era el redentor
escatolgico, habr sido lgico, quiz, pensar que deba adscribrsele un
estado o existencia previa celestial, comoquiera que esto se
entendiese.Como para corroborar la prueba de los escritos tempranos
del Nuevo testamento, la mayora de los estudiosos ve esa referencia
de Pablo a Jess como aquel por quien son todas las cosas y por el
cual somos nosotros (1 Cor. 8:6) como reflejando la conviccin de
que Jess fue, de alguna manera, el agente de la creacin adems del
agente de la redencin. La mayora de los estudiosos ve tambin una
referencia ms figurada a la idea de la pre-existencia y encarnacin
de Jess en 2 Corintios 8:9, donde Pablo cuenta a sus lectores que
Jess se hizo pobre, aunque era rico, a fin de que vosotros
pudierais enriqueceros con su pobreza.Lo que se dice en Filipenses
2:6, de Jess siendo de la forma de Dios, se entiende claramente en
cierto modo de contraste/comparacin con su subsiguiente tomando la
forma de un esclavo en el v. 7. Si esto ltimo representa su estatus
y modo de ser como una figura humana histrica y terrena, entonces
lo de siendo de la forma de Dios debe ser entendido con seguridad
que representa un estatus y modo de ser diferente y previo muy
superior al humano, del que l no eligi aprovecharse en ventaja
propia. Esto tambin sugiere que debemos imaginar alguna nocin de
pre-existencia celestial de Jess detrs de las palabras que inician
el v. 6.
La obediencia de Jess
El ltimo de los tres principales verbos usados en Filipenses
2:6-8 para describir las acciones de Jess est en el v. 8, el cual
nos dice que Jess se humill a s mismo hacindose obediente hasta la
[su] muerte, y una muerte de cruz. Una pregunta obvia es cmo debe
entenderse esta accin en relacin a las acciones descritas en los
vv. 6-7. Por ejemplo, debemos entender la auto-humillacin de Jess
del v. 8 como esencialmente una descripcin paralela del
auto-vaciamiento del v. 7? O los vv. 6-7 prosiguen el movimiento
descendente, por as decir, de Jess desde ser de la forma de Dios (y
capaz entonces de plantearse y rechazar aprovecharse de su igualdad
con Dios) a tomar la forma de un esclavo y llegar a asumir la
semejanza humana, lo que el v. 8 prosigue con una accin conexa pero
distinguible y subsecuente de auto-humillacin?Esta ltima opcin
parece hacer ms justicia a la sintaxis griega de los vv. 7-8,
especialmente si tomamos la ltima lnea del v. 7, Y hallndose en
forma humana, como sealando la circunstancia en la que Jess se
humill a s mismo hacindose obediente hasta la [su] muerte (v. 8).
Esto es, que la auto-humillacin y obediencia del v. 8 deben ser
entendidas en probable referencia a la disponibilidad del Jess
humano a emprender el camino del servicio (y esto debe ser
entendido como obediencia a Dios), aun al costo de su vida por la
violencia de la crucifixin.
Resumen
Filipenses 2:6-11 representa una narracin en dos partes que
relata la auto-abnegacin de Jess, seguida por la consecuente
exaltacin de l por Dios, y una presentacin del propsito de Dios de
hacerlo as. Comenzamos con los versculos 9-11, donde el nfasis est
puesto en la exaltacin de Jess por Dios, notando en estos versculos
la bastante evidente alusin a tradiciones judas y bblicas. Tambin
notamos las asombrosas pretensiones expresadas en estas alusiones.
La afirmacin de la exaltacin de Jess por Dios en la primera lnea
del versculo 9 emplea un verbo que se usa para celebrar la
superioridad propia de Dios sobre todos los seres
divinos/celestiales en Salmos 97:9 (96:9 LXX). En el mismo
versculo, se describe luego a Jess como receptor del nombre propio
nico de Dios, en alusin a la reverencia tradicional juda por el
tetragramatn. En los vv. 10-11 se adapta la terminologa de Isaas
45:23 para describir la aclamacin divina y universal de Jess como
Seor. Aunque esta aclamacin universal de Jess se dirige de hecho
tambin a servir a la gloria de Dios Padre. Los versculos 9-11
proporcionan el objetivo ltimo de las acciones narradas por el
pasaje entero. Este objetivo es fijado por Dios, pero contiene la
sobrecogedora inclusin de Jess en el centro de las cosas, como el
Seor por nombramiento del propio Dios, y al que se le debe la
aclamacin csmica.Esta incomparable exaltacin de Jess por Dios es
presentada como la respuesta de Dios a las acciones de Jess, que se
cuentan en los vv. 6-8. En estos versculos Jess es el nico actor, y
sus obras se dedican por completo a la auto-abnegacin, el servicio
y la obediencia, hasta el punto de padecer una muerte cruel. La
abnegacin de Jess en toda su extensin incluye probablemente una
encarnacin por la cual l pas de alguna manera de ser de la forma de
Dios y poseer la igualdad con Dios (v. 6), a vaciarse en cambio
para tomar el lugar y la forma de un esclavo, naciendo como un
humano (v. 7). En esta situacin/condicin de ser un hombre, se
humill con una obediencia que debe entenderse ofrecida a Dios (v.
8), de manera que su muerte por crucifixin debe ser considerada
como la ms profunda expresin de su aceptacin de seguir el camino de
la obediencia.
La ocasin de esta oda
En su contexto actual inmediato, Filipenses 2:6-11 parece
haberse hecho con la intencin de inspirar la humildad y la
consideracin hacia los dems que Pablo exhorta alcanzar a sus
lectores en 2:1-5. Pero est claro que 2:6-11 no presenta a Jess
simplemente como un ejemplo a imitar, porque el pasaje narra
acciones que no son en realidad factibles por los lectores. Por
ejemplo, si nuestra estimacin del significado de los vv. 6-8 es
correcto, y se retrata all a Jess en un estatus o modo divino,
situacin en la cual l escogi libremente asumir una existencia
humana, esta no es, obviamente, una eleccin que puedan replicar los
meros mortales! Asimismo, aunque los cristianos filipenses son
ciertamente animados a someterse a Dios con la esperanza de una
vindicacin divina, que incluye una resurreccin (3:20-21), la
vindicacin y exaltacin de Jess que se describe en 2:9-11 es
categricamente nica. No hay motivo para pensar que se espere que
los lectores a los que se dirige aspiren a una exaltacin
equivalente para ellos mismos, con el cosmos entero aclamndolos
como el divino Seor.Adems, para dirigir la atencin hacia otro
importante punto, en la descripcin de la abnegacin de Jess en los
vv. 6-8, no hay una indicacin directa de que esto lo hace por el
bien de otros. La eficacia redentora de sus acciones no est a la
vista en estos versculos. Si Pablo hubiese compuesto el pasaje en
el proceso de escribir esta carta a los filipenses, sugiero que
esperaramos de l que hubiese descrito la auto-humillacin de Jess
con una referencia ms explcita a que lo hace por otros. Pero,
dentro de los lmites de 2:6-11, el enfoque est puesto del todo
sobre la auto-humillacin de Jess, su exaltacin por Dios en
respuesta, y el resultado de todo ello, sin referencia directa a
ningn beneficio para otros. Por lo dems, el climax de las acciones
del pasaje est en vv. 9-11, donde se relatan la incomparable
exaltacin de Jess y su propsito final. Adems, aunque el pasaje nos
presenta algunas expresiones compactas que parecen presuponer
conceptos y creencias fundamentales ms que explicarlos, 2:6-11
constituye una lnea de pensamiento completa en s misma. Esto es, se
espera que los lectores aporten al pasaje cierto conocimiento
previo de la afirmacin de fe que este refleja. Con tal
conocimiento, el argumento de estos versculos es razonablemente
completo, aun si el pasaje se lee fuera de su contexto. En
respuesta al movimiento radical de bajada de Jess que result en su
crucifixin, hay el movimiento radical de subida de los vv. 9-11,
con el que Dios lo exalta a un estatus muy por encima de todo. Esta
recitacin de la abnegacin de Jess y su exaltacin obrada por Dios,
es una historia que est completa en s misma y tiene un objetivo
explcito: la gloria de Dios.Todas estas consideraciones se combinan
en apoyo de la idea de que 2:6-11 no fue probablemente compuesto
por Pablo cuando l estaba escribiendo esta carta a los filipenses.
En vez de eso, como la mayora de los estudiosos del Nuevo
Testamento hallan ahora probable, este pasaje fue originalmente
compuesto en alguna otra circunstancia, y fue luego incorporado por
Pablo a esta carta, en la cual presenta a Jess como el ejemplo del
Seor para los creyentes. En lo que sigue, quiero considerar
brevemente la posible situacin en la que fueron creadas estas
fascinantes lneas. Tenemos que preguntarnos qu clase de sentimiento
puede haber impulsado a algunos cristianos tempranos a componer
estos famosos versos. Sugiero, nuevamente, que el enfoque y el
contenido de esta oda nos proporcionan los mejores
indicios.Comencemos reiterando que, donde podemos identificar
alusiones, son todas a textos y tradiciones judos y bblicos. As,
por ejemplo, aquello de lo que Jess rehus aprovecharse para su
beneficio (el ser igual a Dios) es precisamente lo que los
escritores judos de la poca condenaban como el tipo de loca
presuncin humana ms ignorante (exhibida especialmente por los
gobernantes humanos que buscaban ser tratados como divinos).
Asimismo, las afirmaciones positivas del pasaje respecto de la
auto-humillacin y obediencia de Jess y su exaltacin por Dios, hacen
alusiones generales reconocibles a textos bblicos y tradiciones
judas (p.ej., el justo sufriente vindicado por Dios). Propongo, por
lo tanto, que el contexto originador ms plausible para esta oda fue
la preocupacin por expresar y defender la devocin a Jess por
aquellos cuya perspectiva religiosa y mundo de referencia estaban
conformados por tradiciones judas y bblicas. Esto es, que la oda
parece haber sido compuesta inicialmente para retratar de manera
inspiradora la carrera terrena de Jess, incluida su horrible
muerte, precisamente como expresin de su servicio ejemplar
obediente a Dios, y tambin para aseverar una exaltacin nica en
respuesta de Dios a la vida de Jess y su muerte violenta. Adems, la
oda tambin justifica implcitamente (para otros?) la veneracin
cristiana de culto de Jess como Seor, porque al ofrecer esta
devocin, los creyentes responden a la exaltacin por Dios de l y su
propsito, y anticipan la aclamacin universal que se presenta aqu
como abarcando eventualmente todos los mbitos de la realidad.Es,
sin embargo, una oda, no un discurso apologtico. El pasaje es
primordialmente una celebracin de las acciones de Jess y de Dios
que se cuentan, presentando, en un fraseo lrico (aunque tambin
denso y compacto), unas nociones que requeriran pginas para ser
explicadas en prosa ordinaria. Resplandece todava con la calidez de
la devocin religiosa que lo gener en primera instancia. Su mpetu
es, claramente, por las convicciones que expresa, y su propsito
originario fue probablemente doxolgico afirmar y alabar a Jess y a
Dios.Ms especficamente, sin embargo, sugiero que la oda puede
reflejar el deseo de enfatizar que los acontecimientos terrenos de
la vida de Jess deben ser vistos como la carrera del nico
obediente, que el resultado de esta carrera fue su exaltacin nica y
vindicacin por Dios, y que todo esto a la vez manifiesta y sirve
para la gloria de Dios. Esto es que, mientras sostiene una
asombrosa visin binitaria, en la cual enlaza a Jess con Dios y sus
propsitos divinos de un modo sin precedentes, el pasaje tambin
refleja la intencin de enfatizar que la carrera de Jess e incluso
su exaltacin consiguiente no constituyen en realidad una amenaza al
concepto de Dios nico de la tradicin bblica. La exaltacin de Jess,
en efecto, tiene su base y significacin ltima en la gloria del Dios
nico.As que quiz (escasamente podramos estar ms confiados que en
esta sugerencia) esta oda se origin, al menos en parte, para
articular una celebracin de alabanza y comprensin del Jess terreno
y exaltado, particularmente entre y para judeocristianos, o al
menos creyentes para quienes esta especie de monotesmo binitario,
presentado mediante alusiones a tradiciones bblicas y judas, haya
sido especialmente significativo. En palabras de Nagata: Lo
teolgico es judo En particular, la creativa adaptacin e
interpretacin de Isaas 45:23 plasmada en Filipenses 2:10-11
constituye un esfuerzo para presentar la colocacin del Jess
exaltado, segn la devocin cristiana, como algo vlido y defendible,
y precisamente en trminos del pasaje bblico que era reputado
insuperado como expresin de la unicidad de Dios. En suma, esta
memorable expresin de la fe cristiana, que aparece en Filipenses
2:6-11, puede preservar para nosotros un notable testimonio acerca
de cmo los primeros cristianos descubrieron a Jess en las Sagradas
Escrituras del judasmo del Segundo Templo bajo el impacto de
poderosas experiencias religiosas de revelacin e inspiracin.