Estudio preliminar
Estudio preliminar
Modelos lejanos: Ral A. Orgaz, la sociologa y la historia de las
ideas sociales argentinasEzequiel Grisendi
Pablo Manuel Requena
El hbito colectivo de pensar, y de pensar con alguna
originalidad, no es cosa que los pueblos improvisan
Ral A. Orgaz, 1927Entre 1927 y 1940, Ral Orgaz produjo una serie
de trabajos encaminados a la construccin de una historia de las
ideas sociales argentinas. Las principales publicaciones fueron el
artculo Historia de las ideas sociales en la Repblica Argentina
(1927) y los cuatro libros dedicados al romanticismo social
argentino: Echeverra y el saintsimonismo (1934), Alberdi y el
historicismo (1937), Vicente Fidel Lpez y la filosofa de la
historia (1938) y Sarmiento y el naturalismo histrico (1940). El
primer artculo apareci en el Boletn de la Junta de Historia y
Numismtica Americana luego que Orgaz, invitado por Ricardo Levene a
recibir su diploma de miembro correspondiente por Crdoba de la
mencionada Junta, ofreciera una conferencia dedicada a revisar los
presupuestos generales de una empresa historiogrfica que tuviera a
los productos del pensamiento nacional en el centro mismo de su
indagacin. El sentido programtico de aqul texto guardaba estrechos
vnculos con otras aproximaciones a la temtica previamente
elaborados por Orgaz. Entre ellos se destacan dos, seleccionados
para este volumen: Las ideas sociales Argentinas, publicado
inicialmente por la Revista de Filosofa de Jos Ingenieros en 1921,
y Las relaciones de Echeverra con Sarmiento, editado en la coleccin
de artculos de Orgaz, Pginas de crtica y de historia, editada por
Manuel Gleizer en Buenos Aires. En ambos casos el inters por
desentraar las fuentes filosficas y literarias que nutrieron las
reflexiones de los romnticos argentinos busca explicar aquel primer
ensayo de una poltica concebida y orientada por una elite
intelectual (Orgaz, 1927).
Los tres artculos permiten reconstruir, progresivamente, las
orientaciones que tomaron las investigaciones de Orgaz a lo largo
de la dcada de 1920. En esos aos, su predileccin la sociologa, cada
vez ms aceptada en el medio acadmico local, y sus continuas
exploraciones en la historia argentina del siglo XIX se combinaran
en un plan de escritura y edicin que vera la luz en los aos
treinta. La historia de las ideas sociales, en ese entonces
subespecie que combinaba los rasgos de una naciente sociologa de
bordes disciplinares difusos con la prctica historiogrfica erudita
ms fuertemente legitimada en el espacio acadmico argentino, buscaba
organizar las tradiciones intelectuales mediante la recuperacin de
un corpus de obras y pensadores que haban reflexionado sobre la
realidad social argentina. Los cuatro libros de Orgaz publicados en
Crdoba entre 1934 y 1940, reunidos en este volumen, testimonian
aquella productiva mixtura de intereses intelectuales y las
reconocidas deudas con quienes, antes que l, ya haban recorrido
caminos anlogos.Apuntes para una biografa intelectual
Ral Andrs Orgaz naci en Santiago del Estero en 1888. Junto con
sus padres, Eleodoro y Mercedes Ahumada, se traslad a la ciudad de
Crdoba donde nacieron sus siete hermanos Poco ms de una dcada
despus, inici su educacin secundaria en el Colegio Nacional de
Monserrat para luego ingresar a la carrera de Abogaca de la
Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FDyCS) de la Universidad
Nacional de Crdoba. Egres en 1913 con el ttulo de doctor en derecho
con la tesis Condicin jurdica internacional de las sociedades
annimas bajo el padrinazgo de Estanislao Zeballos. Siguiendo sus
pasos como los de Enrique Martnez Paz, Orgaz se integr en la
tradicin que reconoca como la gran disciplina jurdica de nuestro
tiempo al derecho internacional privado. En las Proposiciones
accesorias encontramos el siguiente comentario: La historia no es
una ciencia. Debera llamarse sociografa (descripcin de lo social)
por oposicin a sociologa (ciencia de lo social). Esta observacin se
reiterar en la obra de Orgaz en el constante esfuerzo por
diferenciar la sociologa de la historia como saberes distintos de
un mismo tronco de conocimiento de lo social.Una vez graduado,
obtuvo en 1914 entre otros, junto a Pablo Mariconde una beca que la
Facultad de Derecho y Ciencias Sociales junto con el Ministerio de
Instruccin Pblica de la Nacin otorgaban a los mejores promedios de
la carrera para continuar sus estudios en Europa. Henoch Aguiar
menciona el recorrido de manera sucinta y, como Capdevila,
puntualizaba la brevedad de esa estada debido al inicio de la Gran
Guerra: lo sorprendi la guerra del 14, cuyo estallido lo oblig a
regresar al pas antes de haber cumplido su programa de estudio que
se haba trazado y, cuando solo haba visto superficialmente a [sic]
Londres, La Haya, Bruselas y comenzado a asistir en La Sorbona, a
alguno de los cursos dictados por eximios profesores como Emile
Durkheim, Henri Capitant o Marcel Planiol (Aguiar; 1961: 10 y 11).
Durante su estada en Europa public una traduccin francesa de su
artculo Sociologa general y sociologa especial. Dos tendencias en
la sociologa actual en la Revue Internationale de Sociologie (Marzo
de 1914), que previamente haba sido publicado en la Revista
Argentina de Ciencias Poltica y fue luego recogido en su libro
Estudios de sociologa de 1915. El mismo ao, Orgaz se incorpor como
profesor suplente a la ctedra de Sociologa a cargo de Enrique
Martnez Paz. Tras el alejamiento de ste de la ctedra con
posterioridad a los acontecimientos del ao 1918, Ral Orgaz pas a
ocupar la titularidad de Sociologa durante casi treinta aos.
A lo largo de la dcada de 1910 particip de las redes
intelectuales que se haban estructurado en torno a tres revistas de
la ciudad de Buenos Aires: las ya mencionadas Revista de Derecho,
Historia, y Letras y la Revista Argentina de Ciencias Polticas
dirigidas por Zeballos y Rodolfo Rivarola respectivamente, adems de
la Revista de Filosofa fundada por Jos Ingenieros en 1915. La
edicin de sus primeros trabajos en el medio intelectual porteo le
permiti a Orgaz lograr una proyeccin y un temprano reconocimiento:
si bien fue en la publicacin dirigida por Rivarola donde comenz su
presencia en revistas nacionales, la mayor parte de su obra fue
canalizada principalmente a travs de la Revista de Derecho,
Historia y Letras y de la Revista de Filosofa. En ambas edit
ensayos sobre historia, comentarios bibliogrficos y notas sobre
sociologa, pero fue en la revista de Ingenieros donde Orgaz despunt
un volumen de textos pasibles de ser analizados como un corpus
separado. Con 18 trabajos a lo largo de 13 aos, permaneci cercano
al proyecto de la Revista de Filosofa con aportes que fueron desde
artculos inditos hasta el retrato como formato de comentario
bibliogrfico propio de la sociabilidad intelectual de la poca.
Ingenieros es presentado en la obra de Orgaz como un referente
intelectual; en diferentes trabajos, la figura de Ingenieros es
retratada como el fundador de la sociologa cientfica en Argentina,
en un lugar que cierra la labor encarada inicialmente por los
precursores del pensamiento social nacional que eran, para Orgaz,
Echeverra, Sarmiento y Alberdi. Asimismo, Ingenieros dio cuenta de
su cercana al trabajo de Orgaz en un comentario sobre Estudios de
Sociologa, all lo present como un autor, [que] estima con justo
criterio, las diversas corrientes que desenvuelven dentro de la
sociologa contemporneaTratndose de una ciencia en formacin, cuyas
mismas lneas fundamentales no consiguen unificar la opinin de sus
cultores ms eximios, la sociologa ofrece materia vasta para
discusiones y distingosSera de una suma utilidad que esta somera
informacin bibliogrfica interesara en favor del libro a cuantos
cultivan la sociologa en nuestro pas; y la Revista de Filosofa se
complacera vivamente acogiendo en sus pginas los comentarios
crticos que l sugiera (Ingenieros, 1915: 321).Durante las dcadas de
1920 y 1930, Orgaz obtuvo un amplio reconocimiento en los espacios
intelectuales porteo y platense. En primer lugar, se convirti en un
regular colaborador del diario La Prensa de Buenos Aires. Sus notas
bibliogrficas y comentarios eruditos sobre filosofa e historia all
aparecidos, as como tambin sus lecciones en el Instituto Popular de
Conferencias, le valieron una importante reputacin.. Paralelamente
a esos contactos, los crculos de los intelectuales liberales
contaron con Orgaz para numerosos emprendimientos culturales, tales
como el Colegio Libre de Estudios Superiores (CLES), inaugurado en
1930. All contribuy con escritos en la revista Cursos y
Conferencias y dictando seminarios sobre sociologa (Orgaz, 1933).
Por otro lado, Orgaz particip de los espacios de sociabilidad
intelectual que giraban en torno a las publicaciones reformistas de
La Plata, Sagitario y Valoraciones, en inclusive del grupo
latinoamericanista del boletn Renovacin. Es que pese a ostentar un
perfil ms acadmico que otros reconocidos participantes de la
reforma universitaria, Orgaz permaneci vinculado a las redes del
reformismo en Argentina y Amrica latina. Paralelamente, form parte
de quienes continuaron una estrecha relacin con los crculos de
intelectuales espaoles crticos del cientificismo y cercanos a
Ortega y Gasset.
Exceptuando una importante cantidad de separatas y folletos, Ral
Orgaz public entre 1915 y 1946 un total de 15 libros, de los cuales
10 fueron puestos en circulacin por editoriales e imprentas de la
ciudad de Crdoba. A su vez, a lo largo de casi cuatro dcadas public
alrededor de 130 artculos de los cuales ms de un 70% fueron
editados antes de 1932, inclusive. Caracterizaba su obra la opcin
de presentar sus diversos avances a travs de revistas siendo sus
libros, con excepcin de La sinergia social argentina: La colonia
(1924), recopilaciones de esos aportes. Durante los aos treinta y
cuarenta, esta tendencia se desplaz hacia una lnea ms pedaggica,
plasmada en manuales disciplinares, a la vez que profundiz sus
indagaciones historiogrficas a travs de estudios sobre el
pensamiento social y la historia de la Universidad de Crdoba. En
ese sentido, Orgaz experiment el momento de mayor
institucionalizacin en relacin con la prctica historiogrfica
durante esos mismos aos: si bien desde 1926 era miembro
correspondiente de la Junta de Historia y Numismtica Americana por
la provincia de Crdoba, en 1936 se transform en miembro fundador y
vocal del Instituto de Estudios Americanistas de la universidad, a
la vez que densific los intercambios con el crculo de Ricardo
Levene. Esta cercana se tradujo en su participacin en la monumental
Historia de la Nacin Argentina y en el proyecto de un libro que
jams se public, sobre la historia de las ideas sociales.
La estrecha cercana de la historiografa con los nveles estudios
sociolgicos en Argentina fue transformndose hasta invertir, a
mediados de siglo, el inicial predominio intelectual de la primera
sobre la segunda. La trayectoria de Ral Orgaz, de esta manera,
visibiliza parte de esa lenta variacin. Su formacin en Derecho lo
vincul con una tradicin acadmica que postulaba a la sociologa como
gran ciencia articuladora de los dems saberes sociales. En el giro
de siglo, y de acuerdo con el horizonte epistmico compartido por
Orgaz, Ernesto Quesada, Juan Agustn Garca o Jos Ingenieros, los
conceptos sociolgicos precisaban de demostraciones histricas. As,
objetivar el pasado argentino permita verificar el devenir de las
reglas del progreso social; de esta forma, el ciclo comprendido
entre el perodo colonial y las ltimas dcadas del siglo XIX fue
concebido como un proceso lineal segn el cual la identidad nacional
triunfaba sobre los atavismos coloniales. Si la labor del
historiador era la de registrar y describir las vicisitudes de aqul
proceso, la del socilogo era la de interpretarlo y darle
sentido.
Desde finales de la dcada de los cincuenta esta concepcin de la
sociologa qued irremediablemente relegada al pasado cuando fue
caracterizada como parte de un momento ideolgico, pre-cientfico o
profesoral de la disciplina. Luego de la Segunda Guerra Mundial, se
transform el modo en el que se practicaban las ciencias sociales en
general y la sociologa en particular; estos cambios afectaron las
posibilidades institucionales de su desarrollo. La
profesionalizacin del socilogo result de la consolidacin de un
sistema internacional que regulaba y legitimaba su prctica y de la
creacin de grandes polos de financiamiento para la investigacin
social. Este proceso trajo aparejado el afianzamiento de nuevos
modos de recoleccin y procesamiento de datos apareciendo as el
trabajo de campo como la exigencia fundamental para la produccin
del trabajo cientfico, mientras que el empleo del instrumento
estadstico garantizaba la fiabilidad del procesamiento de grandes
masas de informacin (Gonzlez Bollo & Pereyra, 2003). La figura
de Ral Orgaz en el contexto disciplinar de postguerra fue
desplazada paulatinamente del canon sociolgico. En efecto, las
historias de la sociologa producidas en las ltimas cinco dcadas le
han guardado un lugar marginal pese a que haba sido central en el
establecimiento de la disciplina en nuestro pas entre los aos
veinte y cuarenta; a este respecto, no resulta ocioso recordar que
en 1945 el director del Instituto de Sociologa de la UBA, Ricardo
Levene, comenz a pensar en la organizacin de un congreso
latinoamericano de sociologa y escribi por un lado al francs Roger
Bastide, quien por entonces se encontraba en Sao Paulo, y por el
otro a Ral Orgaz.
Su singular trayectoria lo llevara a ocupar, sucesivamente, un
cargo en el Tribunal Superior de Justicia y como decano en la
Facultad de Derecho. Separado por la intervencin universitaria del
peronismo de su cargo docente, orient su labor a la Academia
Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de Crdoba y a la Revista
Jurdica del Colegio de Abogados de Crdoba, religndose con sus
lecturas sobre la historia jurdica local. Falleci en 1948 en la
ciudad de Crdoba a la edad de 60 aos. Un libro que no fue.
Socilogos e historiadores en los aos veinte
Socilogo e historiador, Ral Orgaz ha evidenciado en libros y
colaboraciones periodsticas, que atesora una vasta cultura, que ha
logrado la perfeccin de las ideas claras y generales y que ha
trabajado el instrumento de su estilo hasta dotarlo de sobriedad y
precisin.
Sus meditaciones le impulsan a continuar, ahondando en una
escuela de ideas que tiene ilustre abolengo en la Argentina, los
estudios de la sociologa nacional, que de tal podran titularse los
escritos fragmentarios de los hombres de la generacin de 1810 y los
orgnicos de la generacin constituyente, estudios que en nuestra
Junta tienen cultores de la nombrada de Quesada, Rivarola,
Dellepiane y Ayarragaray
Ricardo Levene, 1927
En 1927 el Boletn de la Junta de Historia y Numismtica Americana
(en adelante JHNA) public el ya mencionado artculo Historia de las
ideas sociales en la Repblica Argentina. El trabajo se inscriba
dentro de los intercambios nacionales a que haba dado lugar la
compleja trama de alianzas cimentadas desde aos antes entre los
hombres de la JHNA en la ciudad de Buenos Aires y un conjunto de
estudiosos cordobeses entre los que se contaban sacerdotes y
juristas.
La JHNA desarroll desde principios de la dcada una poltica de
expansin hacia la repblica, esto es las provincias o el interior,
incrementando el nmero de miembros correspondientes a la vez que
fundando Filiales en diversas ciudades del pas. Esta poltica
expansiva -desarrollada bajo las presidencias del cordobs Ramn J.
Crcano, el entrerriano Martiniano Leguizamn y Ricardo Levene- puede
interpretarse como un modo de nacionalizacin de la Junta para
competir con el Instituto de Investigaciones Histricas de la
Facultad de Filosofa y Letras de la UBA dirigido por Emilio
Ravignani. Frente al instituto universitario que tena la facultad
de controlar la expedicin de ttulos, la seleccin de recursos
humanos y [] la actividad profesional en su conjunto, la JHNA pudo
construir un universo relacional en tanto institucin cristalizada,
cerrada, autoselectiva, con poder decisional autnomo y cuyos
miembros revisten una variada extraccin profesional y carcter
vitalicio lo que le permiti en 1938 transformarse en la Academia
Nacional de la Historia, un organismo semi-oficial subsidiado por
el Estado argentino. En este contexto, la vinculacin con el
interior -ya sea a travs de de figuras como de las relaciones
interinstitucionales- tena la intencin, no del todo declarada, de
controlar recursos humanos, fuentes documentales y dominar el
mercado historiogrfico (Pagano & Galante; 2006: 70ss; Devoto
& Pagano, 2010; 163).
En 1926 sucedieron dos hechos particularmente relevantes para la
comunidad acadmica cordobesa. Nos referimos a la presentacin en la
JHNA de un proyecto de fundacin de filiales en la Repblica,
convinindose en la necesidad de establecerla en Crdoba en primer
trmino, y la designacin de Enrique Martnez Paz y Ral Orgaz como
miembros correspondientes. Se informaba tambin que la Filial
Crdoba, la primer entidad de esa naturaleza fundada en el pas,
estaba integrada por hombres de positivo valer como los mencionados
Martnez Paz y Orgaz, Pablo Cabrera (presidente de la filial y
correspondiente de la Junta desde 1915) y Santiago F. Daz, sumndose
en 1928 Henoch Aguiar, Juan B. Gonzlez y Pedro Grenn. Se prevea
asimismo que las actividades de la filial se relacionaran con la
promocin de la investigacin en torno a problemas histricos
provinciales y la reedicin facsimilar de peridicos locales.Cabe
preguntarse por qu la JHNA vea en Crdoba un polo de importancia en
el que deba fundarse una Filial. Podemos aventurar varias razones;
por un lado, la importante tradicin documentalista cultivada en la
Universidad; por otro la presencia del coleccionista, etnlogo e
historiador Pablo Cabrera (Zabala, 2010); finalmente, las distintas
recuperaciones que del pasado colonial realizaron a partir de la
dcada de 1910, de Juan Kronfuss a Deodoro Roca entre otros, desde
lo arquitectnico a lo musestico (Agero, 2010b). El foco de la
sensibilidad histrica predominante en las elites cordobesas en el
cambio de siglo se concentraba en la iglesia y la universidad;
ejemplo de ello fueron las obras de Juan Mamerto Garro, Zenn Bustos
e Ignacio M. Garzn, llegando stos ltimos a ser miembros
correspondientes de la JHNA desde 1909 y 1901, respectivamente. En
ambos polos exista una voluntad de preservar la memoria
institucional a travs de trabajos monogrficos sobre algn detalle de
la vida universitaria o religiosa durante el perodo colonial. La
prctica historiogrfica se cea a la reconstruccin de la vida de las
instituciones venerables de la ciudad, pues en cierto modo la
imaginacin de las elites locales asociaba la historia de la Iglesia
y de la Universidad con su propia historia y con la historia de la
Nacin. Sin embargo, cabe sealar que en el perodo analizado tambin
fueron publicados trabajos que se apartaban parcialmente de esa
perspectiva, son ejemplos obras como La medicina en Crdoba de Felix
Garzn Maceda (1916 1917), los trabajos de Ramn J. Crcano y los
mencionados Kronfuss y Cabrera, o la Geografa de la provincia de
Crdoba de Manuel Ro y Luis Achaval (1904 1905). Hacia fines de los
aos veintes, un grupo de los integrantes de la filial Crdoba de la
JHNA, algunos quienes en la dcada siguiente seran los fundadores
del IEA, haban acumulado un plus diferencial de recursos mediante
la pertenencia a redes institucionalizadas que los legitimaban como
practicantes de la disciplina historiogrfica. El 27 de Agosto de
1927 el flamante miembro correspondiente Ral Orgaz, dict su
conferencia en la JHNA y fue presentado por Ricardo Levene. Los
intercambios prosiguieron durante el ao siguiente: Enrique Martnez
Paz ley la conferencia titulada El Den Funes y la Iglesia argentina
mientras que Mariano de Vedia y Mitre expuso sobre el mismo tema en
la sede de la Filial en Crdoba y, finalmente, se homenaje a Pablo
Cabrera en Buenos Aires; a estos, se debe agregar el proyecto de
incluir entre los doce primeros volmenes de la proyectada
Biblioteca de Historia Argentina y Americana a El Den Funes de
Enrique Martnez Paz (volumen X), Ensayos sobre etnologa y lingstica
americana de Pablo Cabrera (volumen XI) y, finalmente, Historia de
las ideas sociales en la Argentina de Ral Orgaz (volumen XII). La
inclusin de los tres trabajos en la coleccin no era menor, pues en
cierto modo objetivaba un vnculo cultivado desde haca tiempo. Sin
embargo, de los tres volmenes propuestos originalmente se edit slo
el de Cabrera bajo el ttulo definitivo de Ensayos sobre etnologa
argentina. Onomstica indiana de Tucumn en 1931. Pese a que Historia
de las ideas sociales en la Argentina no fue publicado, parte de
ese proyecto intelectual fue finalmente editado en cuatro volmenes
dedicados a Echeverra, Alberdi, Sarmiento y Lpez entre 1934 y 1940.
La casa editora encargada de publicarlos fue la Imprenta Argentina
de Vicente Rossi, editor uruguayo afincado en la ciudad de Crdoba,
relacionado con Ral Orgaz desde sus aos de universitario.
Es probable que el trabajo de Orgaz no fuera finalmente incluido
debido al perfil con el que fue concebido, es decir, se trataba de
una obra demasiado sociolgica que se cea mucho ms a un modelo de
historia de las ideas alla Ingenieros que a los supuestos
metodolgicos de una historiografa de ideas donde los trabajos de
Juan Agustn Garca y Ernesto Quesada, en efecto miembros de nmero de
la JHNA desde 1901 y cultores de la sociologa, eran referencia
obligada (Pereyra, 2008). En segundo lugar, Orgaz parta desde una
perspectiva demasiado especulativa para los protocolos
documentalistas de la Nueva Escuela Histrica y los supuestos
metodolgicos dominantes (Pasolini, 2007: 88-89). Cabe recordar los
comentarios que Rmulo Carbia en su Historia crtica de la
historiografa en la Argentina le propin a Orgaz y a los socilogos
en general; al primero se refera como uno de los amigos de aquella
sociologa cuya finalidad no parece otra que el incesante malabareo
de adjetivos (Carbia, 1939: 260, subrayado nuestro), mientras que
defina a los segundos como ensayistas que partiendo de la tendencia
de escribir la historia en filsofo, marchan hacia la fcil sociologa
que no requiere mayor informacin para filosofar sin freno y sin
reparos [] los socilogos declamadores que siembran el sofisma de la
generalizacin.
Por lo tanto, esa exclusin de la obra de Orgaz podra explicarse
a partir del progresivo proceso de especializacin disciplinar que
consolid acadmicamente a la historia erudita. Frente a la inicial
coexistencia entre historiadores de perfil documentalista e
historiadores abiertos al dilogo con la sociologa en el seno de la
JHNA le sigui a lo largo de la dcada de 1930 un proceso de gradual
separacin conforme la JHNA fue reafirmando su institucionalizacin.
No es ocioso preguntar por qu Orgaz, con formacin jurdica aunque
con una trayectoria importante en reflexin sociolgica, devino
integrante de una red cuyo perfil era abiertamente historiogrfico.
El trnsito por la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Crdoba
haba sido por largos aos la llave de acceso a las prcticas
intelectuales de la alta cultura local; si a este dato se le suma
la debilidad congnita en Buenos Aires de la Facultad de Filosofa y
Letras (Buchbinder, 1997), no debera sorprender el hecho de que los
miembros, tanto de nmero como correspondientes, fuesen abogados con
vocaciones tan variadas como las de numismticos, anticuarios,
publicistas, literatos y diplomticos. Para un practicante de una
disciplina nueva como la sociologa, la oportunidad de insertarse
como miembro correspondiente en la JHNA era la posibilidad de ganar
legitimidad y prestigio acadmico a escala nacional.
Nacin, ideas sociales, sociologa. El Romanticismo social
argentino como temaLa corriente argentina dbil retoo del
romanticismo europeo incorporado en los trabajos de Leroux, Cousin,
Lerminier y Quinet, est destinada a enlazarse con el credo positivo
de la generacin del 80, cuyo evolucionismo, a pesar de su especie
mecanicista, procede, en buena parte, de Hegel.
Ral Orgaz, 1940. Ricardo Levene, quien se haba desempeado hasta
la intervencin peronista como director del Instituto de
Investigaciones Sociolgicas de la UBA, editaba en 1947 su Historia
de las ideas sociales argentinas con un prlogo de Arturo Capdevila.
En la definicin del mbito de su indagacin, subyaca su perspectiva
en torno a los lmites temporales que deban ser incluidos para
pensar el derrotero de las ideas en Argentina: desde la produccin
de la Generacin de Mayo hasta las reflexiones de Juan Agustn Garca
a principios de siglo. Al detenerse en la obra del autor de La
ciudad indiana, Levene confirmaba que la razn de este recorte
obedeca a que aqul representaba el punto de partida de una nueva
concepcin en la historia de las ideas argentinas (Levene, 1947:
25). Esa novedosa orientacin intelectual inclua nombres tan
dispares como Carlos Octavio Bunge y Alejandro Korn;
significativamente, retornaba sobre otros casos de historia de las
ideas en Argentina como los de Jos Ingenieros y Ral Orgaz, ambos
interesados por marcar las influencias exteriores en el pensamiento
nacional.La tradicin intelectual de historiar las ideas fue
defendida por Orgaz en tanto espacio privilegiado para el estudio
del progreso del pensamiento nacional a partir de la reconstruccin
de su pasado (Orgaz, 1927). Para diferenciar el objeto de la
historia de las ideas sociales del propio de la historia de la
sociologa sostena que, si sta se preocupa por extraer la teora del
gnesis de dicha ciencia, desentraando de los sistemas o doctrinas
de los distintos autores, las tesis en que se advierten elementos
vitales para la constitucin de la sociologa como ciencia moderna,
la historia de las ideas sociales argentinas deba concentrarse en
estudiar el pensamiento de los escritores argentinos en materia
social sin detenerse en buscar antecedentes conceptuales
definitivos para la sociologa ya que entenda que no cabe hablar an
de sociologa argentina ni de escuela argentina de sociologa (Orgaz,
1921: 353 y 354). Es necesario analizar el sentido del planteo de
Orgaz que, de la misma manera que los estudios precedentes de Garca
e Ingenieros, busc insertarse en la tradicin intelectual que
reafirmase su posicin ante la an frgil especializacin del saber
sociolgico.En la conferencia de 1927 Orgaz problematiz la cuestin
sobre la supuesta falta de originalidad de la produccin cientfica,
filosfica y literaria argentina: topos clsico y fundamental para
pensar el desarrollo de las ideas en el pas. Oper una serie de
corrimientos conceptuales que le permitieron revisar aquellos
tpicos segn los cuales no sera ms que una versin imperfecta de las
elaboraciones culturales realizadas en los pases centrales; este
gesto implicara alejarse de la nocin de historia de las ideas como
subdisciplina filosfica que buscaba infructuosamente y sin
resultados los aportes de Amrica Latina al pensamiento occidental,
limitndose entonces a la bsqueda de las desviaciones
latinoamericanas al modelo original/ ideal europeo (Palti, 2008).
Historiar las ideas en pases como Argentina supona una
autoconciencia del valor de la produccin cultural propia,
reconocimiento que Orgaz plantea a la vez como necesidad terica y
poltica: los pensadores romnticos argentinos mostraran
particularmente la condicin incompleta de las virtudes de la
cultura nacional a la luz de sus contactos con producciones
internacionales. Las ideas sociales no eran presentadas en trminos
de auto-referencia sino como necesariamente en dilogo con la
produccin europea.En las primeras dcadas del siglo XX, comenzaban a
estar materialmente disponibles las obras de Echeverra o Alberdi a
travs de los proyectos editoriales como La Biblioteca Argentina y
La Cultura Argentina, dirigidos por Ricardo Rojas y Jos Ingenieros
respectivamente, desde 1915 ; hasta ese momento no era difcil
constatar que los libros de autores argentinos resultaban
inaccesibles, siendo demasiado elevado el costo de los que se
conseguan. Las dos colecciones se proponan subsanar estas carencias
reditando obras de pensadores, polticos y hombres de letras
argentinos ya fallecidos (Merbilha, 2006: 42. Vase tambin, Delgado
& Espsito, 2006). La historia de la produccin literaria
argentina responda, en la visin de Orgaz, a una imperiosa demanda
de la nacin, que slo revelara su perfil a travs de la palabra
escrita. El estudio de las ideas y su desarrollo en Argentina
aparece as menos enraizado en una mera preocupacin especulativa que
en desmontar las formas que cumpli la colonizacin de la mentalidad
argentina por el pensamiento europeo (Orgaz, 1927: 377). Atento al
recambio de metrpolis cultural que significara la retirada de Espaa
de sus dominios coloniales americanos en favor de la ascendente
Francia, Orgaz sealaba la necesidad que tuvieron las elites
argentinas de nuevas lneas de pensamiento. La recepcin de ideas
sociales, filosficas o polticas estaba asentada en una refraccin,
un movimiento a travs del cual el viaje de teoras, conceptos o
doctrinas de Europa al Ro de la Plata no implicaba su repeticin
acrtica. Los principales agentes de la cultura nacional con
posterioridad a 1810 fueron fundamentalmente los integrantes de la
generacin de 1837. En torno a ese lugar comn en la historiografa
argentina, Orgaz postulaba una larga duracin de la recepcin de la
cultura latina ya no en trminos de ruptura en el proceso
revolucionario sino a partir de un ciclo de mayor que abarcaba
tanto al momento colonial como al siglo XIX en su conjunto. Este
ciclo de irradiacin de la cultura latina era caracterizado por
Orgaz en trminos de la aparicin de nuevos problemas locales para
los que la referencia cultural espaola ya no brindaba las
respuestas que habilitaba la renovada metropolis intelectual
francesa. La legitimidad poltica, la soberana, el republicanismo y
la idea de nacin fueron temticas caras al pensamiento francs de la
primera mitad del siglo XIX. El conflicto revolucionario abierto de
1810 no se presentaba como una fractura en ese ciclo sino como un
evento ms en el largo proceso de refraccin de las ideas europeas en
el Ro de la Plata. En los cuatro libros, este cometido por
descifrar la conexin entre las elaboraciones de los pensadores
sociales decimonnicos argentinos y las ideas provenientes de la
metrpolis cultural europea impuls la reconstruccin de la tradicin
intelectual nacional.
El inters por interpelar a los representantes del romanticismo
social argentino responde a la intencin de una fraccin liberal de
la elite intelectual de los aos treinta por filiarse en un linaje
que remita a los nombres de los jvenes Sarmiento, Echeverra y
Alberdi (Palti, 1997); la Generacin de 1837 efectivamente actu como
una referencia en el debate poltico intelectual de la dcada de
1930, atravesada por el quiebre del consenso liberal y el
fortalecimiento cada vez mayor de alternativas abiertamente
antiliberales: en este contexto, la identificacin con los jvenes
del Saln Literario permita oponerse al rosismo que defendan
pblicamente figuras como Carlos Ibarguren o Julio Irazusta
(Quatrocchi Woison, 1995 y Cattaruzza & Eujanian, 2004). Ms all
del gesto ideolgico, esta opcin por recuperar a los escritores
romnticos responda a la vocacin intelectual por restituir , las
alternativas de la lucha constante entre la metafsica y el espritu
positivo (Orgaz, 1921: 354); se trata entonces de intervenir en el
mapa de las tradiciones intelectuales tornando visibles las
experiencias fundantes de una filosofa social que en los aos de
entreguerras tenan por horizonte la emergencia del saber sociolgico
a principios del siglo XX. El romanticismo social se presentaba
para Orgaz como el momento de surgimiento de las bases de una
reflexin sobre la nacin argentina a partir de la adopcin de algunas
de las doctrinas disponibles en el contexto europeo. Aquel legado
cultural del romanticismo fue objeto de las reconstrucciones de
Ricardo Rojas y Paul Groussac quienes, adems de los mencionados
Garca e Ingenieros, sealaron los avatares de las obras de los
pensadores europeos en los mbitos universitarios argentinos de
fines del siglo XIX. Ms all de las diferencias establecidas por
cada comentarista, Orgaz organiz su relato identificando la
necesaria conexin entre intelectuales nacionales y las fuentes
internacionales que abastecieron su produccin.
Las figuras seleccionadas por Orgaz daban cuenta de una
pre-historia de la sociologa haciendo hincapi en que aquellos no
eran sino anticipadores de la disciplina sociolgica mas no
socilogos en sentido estricto. Esta reconstruccin se fundaba en el
objetivo de recomponer los orgenes de las reflexiones de pensadores
argentinos decimonnicos:
Las grandes etapas de la historia de las ideas sociales en la
Repblica Argentina, estn sealadas por el fuerte influjo de dos o
tres escritores europeos sobre las elites argentinas. Los hombres
que nacieron en nuestro pas alrededor del ao diez, estuvieron
subyugados por Pedro Leroux y por Lerminier, amn de admirar a
Tocqueville, Guizot y Lamennais. En Espaa no hallaron orculo digno
de consulta en lo ataedero a problemas poltico-sociales (Orgaz,
1934:129. Subrayado nuestro)
La clara predileccin por las lecturas francesas del romanticismo
social argentino llev a Orgaz proponer un criterio gentico que
articulase necesariamente la posicin de cada uno de los escritores
[en relacin con] las corrientes poltico-filosficas europeas y de
las sugestiones prcticas del ambiente nacional [haciendo] que cada
personaje encuentre su sitio natural en la tendencia ideolgica que
le corresponde, sea de origen metropolitano, sea de procedencia
transpirenaica (Orgaz, 1927: 386). Las coordenadas presentadas
buscaban entonces iluminar algunas secretas afinidades, no siempre
visibles por la incesante correlacin entre teora y prctica [entre]
ciencia social pura y ciencia social aplicada (Orgaz, 1927: 386).El
anlisis de la refraccin de las ideas en Argentina a lo largo del
siglo XIX tena un inters clave para Orgaz por su proyecto de
explorar los contornos de una cultura intelectual nacional cuyos
orgenes eran an difusos. Ya en su trabajo La Sinergia social
argentina. La colonia, de 1924, expuso el particular valor del
estudio del perodo inicial de la historia de la nacionalidad. Desde
la perspectiva terica del Sarmiento de Conflicto y armona de las
razas en Amrica, ampliada luego por Ingenieros, Orgaz adscriba a la
teora racialista de la nacin segn la cual sta fue un producto
anterior a la emancipacin, resultante de una dinmica de interaccin
entre grupos raciales. Este trabajo de 1924 es deudor tambin de la
metodologa utilizada por Juan A. Garca en La Ciudad Indiana (1900):
existen preguntas afines y un empleo de fuentes documentales
asociadas a la vida cotidiana como indicios de las cualidades
colectivas del carcter nacional. La perspectiva
racial-psicologicista predominante desde mediados de la dcada de
1910 en Orgaz sufri una progresiva mutacin hacia una interpretacin
donde la nacin argentina dej de ser presentada como preexistente al
proceso de emancipacin. En la renovada mirada de Orgaz, la nacin
haba sido una construccin de una lite con una enorme confianza en
la fuerza de las ideas. El proyecto de historiar las ideas sociales
en Argentina, supona reactualizar la tradicional historia de las
doctrinas a partir de un ejercicio intelectual que, lejos de
confeccionar una enumeracin exhaustiva de pensadores y
producciones, deba construir un objeto de estudio sensible a las
variabilidades no siempre atendidas por los comentaristas.
Discutiendo la perspectiva asumida por Juan Agustn Garca en en su
conferencia Historia de las ideas sociales en la Argentina: mtodo y
fuentes de estudio de 1915, Orgaz concentr su crtica en el inters
por historiar las ideas del pueblo argentino de Garca donde
encontraba una falencia metodolgica. En su afn por extender la
mirada sobre el amplio espacio de las ideas populares para evitar
la atomizacin que significara considerar a cada productor de ideas
por separado Garca, para Orgaz, se acercaba a las investigaciones
del folklore en donde las ideas sociales son, siempre, las ideas
populares. Si el objeto de la indagacin para Garca era el carcter
nacional, Orgaz remarcaba que en su aproximacin se confunden una
historia de ideas a una historia de creencias; esta distincin
estaba sostenida en clivajes sociales pues para Orgaz el trmino
ideas remite al mundo de las elites mientras que creencias al de
las masas y a la accin colectiva. Sostena que era interesante hacer
el inventario de las cosas que han credo las masas argentinas pero
propona otro inventario: el de las elites en el contacto con los
viejos autores, graves, solemnes, cautelosos (Orgaz, 1927:388).
Pensar las ideas supona anclarlas a sus agentes, asimilndolas a su
produccin literaria y filosfica. Era preciso evaluar los vnculos
que construyeron los pensadores en el Ro de la Plata -ya sea a
travs de procesos de reflejo, prstamo y creacin- con un corpus
necesariamente europeo. Este giro metodolgico implicaba poner en
dilogo ideas con productores y textos con contextos, remitiendo a
los libros como fuente privilegiada:Si queremos saber lo que
pensaban, acudamos al recurso elemental de saber qu es lo que lean.
Las ideas abejas milagrosas- trabajan ms a gusto en la colmena del
librolos lectores de la Colonia formaban la elite. Lean por placer?
Es difcil saberlo (Orgaz, 1927:384 y 385)La otra referencia terica
con la que discuti el socilogo cordobs era el Ingenieros de La
evolucin de las ideas argentinas, publicado en 1918. Antes que el
antagonismo entre revolucin y restauracin, presentado como
principio ordenador que terminaba reduciendo la historia del
pensamiento social a una filosofa ideolgica [y normativa] de la
historia nacional (Orgaz, 1927: 380), para Orgaz el desarrollo de
las ideas nacionales no resultaba de un visin teleolgica en el
sentido de un necesario triunfo del progreso sobre la reaccin como
planteaba Ingenieros. En su trabajo en homenaje a Ingenieros,
marcaba las cercanas que una su proyecto de historia de las ideas
al del creador de la Revista de Filosofa; sin embargo, en ese
trabajo procedi a elaborar su crtica a la visin sociolgica dualista
de Ingenieros en trminos de falso naturalismo y mecanicismo social,
que excluan la agencia de los actores. Emparentando a Ingenieros
con el Francisco Ramos Meja de Historia de la evolucin argentina
(1921) por su perspectiva naturalista al momento de interesarse por
la evolucin de las ideas, Orgaz desplaz los aportes del primero
hacia el grupo de pensadores cientficos de los cuales buscaba
distanciarse (Orgaz, 1926).La definicin del objeto del proyecto de
historia de Orgaz asuma un carcter programtico y sugerente para
pensar el proceso de organizacin de la disciplina sociolgica. La
autonomizacin de la sociologa respecto del derecho y de la filosofa
en tanto campo de saber especializado, adquira estratgicamente una
configuracin histrica para estabilizar los lmites disciplinares an
en ciernes:
Lo que ha de entenderse por ideas sociales no puede, en nuestro
sentir, ser apartado del concepto de ciencia o de filosofa de la
sociedad. La historia de las ideas sociales en nuestro pas ser, en
consecuencia, la historia de todo lo que han pensado los hombres
representativos de la cultura argentina a propsito de la vida
social, mirada como objeto de ciencia o de especulacin (Orgaz;
1927:381. Subrayado nuestro)
SalidaEn los cuatro libros que sobre el romanticismo social
argentino escribi Ral Orgaz se puede visibilizar parte del estado
de las ciencias sociales en nuestro pas durante las primeras dcadas
del siglo XX. Hemos intentado ubicar el ciclo de obras en una serie
de contextos pertinentes en el sentido de tramas activas cuyas
huellas, ms o menos sensibles, habitan hasta el ms pobre aislado
documento (Agero & Garca, 2010: 25): la densa trama y la lgica
de intercambios propia de la elite universitaria cordobesa en la
que resaltaba Ral Orgaz; la prctica historiogrfica y,
consecuentemente, las redes a nivel nacional que se construyeron en
torno a ella entre los aos veinte y cuarenta; finalmente, las
condiciones epistmico-metodolgicas de la historia de las ideas como
subdisciplina durante la dcada de 1930.La prctica de la sociologa
estuvo superpuesta con la historiogrfica; la disciplina sociolgica
vivi un proceso de institucionalizacin y especializacin de
complejas temporalidades, que tuvo a partir de la dcada de 1940 su
momento de mayor densificacin. Sin embargo, los vnculos que ataron
a los practicantes de la sociologa y de la historia hasta ese
momento no fueron escasos, hubo por el contrario un permanente
dilogo entre ambos grupos (Blanco, 2004, 2006, Altamirano, 2004,
Devoto, 2009). Esto explicara la compleja relacin entre Orgaz y los
miembros de la Junta de Historia y Numismtica Americana.Los
deslizamientos en su perspectiva y las crticas de los trabajos de
Garca e Ingenieros mantuvieron la autoadscripcin de Orgaz a un
linaje intelectual que afirmaba la posicin dominante de los hombres
de ideas en la Argentina. Esa operacin de recepcin del pensamiento
del romanticismo social por parte de la elite cultural del
centenario a los jvenes de la Asociacin de Mayo como antecesores
ilustres de su labor intelectual. Por otro lado, escribir una
historia de las ideas sociales argentinas significaba poner en
valor e inventariar una cultura nacional a travs de sus atributos
legtimos, sus obras y sus pensadores, evidenciando la acumulacin de
productos culturales que justificaba la participacin en el mundo
civilizado (Sor, 2003: 30 y 31). En esos trminos, Orgaz sostena que
siempre es til y honrado adquirir conciencia de lo que debemos al
esfuerzo propio, a la sugestin extraa o al azar favorable y
benigno. Todo pueblo que se siente inferior a su ideal esta, por
esto solo, saliendo ya de su inferioridad (Orgaz, 1927:376 ).El
proyecto de una historia de las ideas sociales argentinas fue
paralelo, por ejemplo, al de una historia de la literatura
argentina desarrollado por Ricardo Rojas o al de una historia de la
filosofa argentina pergeado por Alejandro Korn pero nunca terminado
de desarrollar. El trabajo de Orgaz fue significativo como una
empresa intelectual elaborada en la estela del nacionalismo
cultural del Centenario y escrito, no sin tensiones, en el cruce de
distintas disciplinas.Bibliografa citadaFuentes
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Miembro del Programa CEMICI (Cultura Escrita, Mundo Impreso,
Campo Intelectual) del Instituto de Antropologa de Crdoba
(IDACOR-CONICET), Facultad de Filosofa y Humanidades, Universidad
Nacional de Crdoba. Doctorando en Ciencias Antropolgicas por la
misma Universidad. Es becario doctoral del Consejo Nacional de
Investigaciones Cientficas y Tcnicas (CONICET). Dedica su
investigacin a la historia de las ciencias sociales, a la sociologa
de la vida intelectual y a la antropologa de la circulacin de
ideas.
Miembro del Programa CEMICI (Cultura Escrita, Mundo Impreso,
Campo Intelectual) del Instituto de Antropologa de Crdoba
(IDACOR-CONICET), Facultad de Filosofa y Humanidades, Universidad
Nacional de Crdoba. Doctorando en Historia por la misma
Universidad. Actualmente es becario doctoral del Consejo Nacional
de Investigaciones Cientficas y Tcnicas (CONICET). Su investigacin
est orientada al estudio de los vnculos entre Universidad,
intelectuales y cultura en Crdoba durante el siglo XX.
Publicada por Beltrn y Rossi en 1913. La mesa examinadora
present la siguiente conformacin: Eufrasio Loza (Presidente); Luis
J. Posse, Juan de la Serna, Aurelio Crespo, Marcelino Beltrn
(Vocales); Enrique Martnez Paz, Blas Ordez, Arturo Capdevila,
Deodoro Roca, Eladio Segovia (Replicantes. Los tres ltimos
estudiantes).
Vase Agero, 2006. Estos vnculos tal vez se remonten a la poca en
la que Zeballos fue Ministro de Relaciones Exteriores y Culto del
presidente Miguel Jurez Celman en el ao 1890. Zeballos, de notable
presencia entre fines del siglo XIX y comienzos del XX en el mbito
jurdico cordobs asimismo, fue quien apadrin la tesis de Arturo
Capdevila en 1914.
Es recurrente el reconocimiento a Enrique Martnez Paz (Crdoba,
1882 Crdoba, 1952) como una personalidad que tuvo una influencia
decisiva en la formacin acadmica y cultural de distintas figuras de
la llamada generacin de 1914. Mina Alejandra Navarro reproduce en
su libro Los jvenes de la Crdoba Libre! el trabajo monogrfico
dedicado a Esteban Echeverra que Arturo Orgaz elabor para la ctedra
de Sociologa, a cargo de Martnez Paz, en 1912; el titular de la
ctedra haba incluido como tema de trabajo monogrfico la historia de
las ideas sociales argentinas, de hecho el ttulo del escrito de
Arturo Orgaz es Las ideas sociales de Esteban Echeverra (Navarro;
2009: 237 y siguientes). El propio Ral Orgaz reconoca en el
homenaje que la Universidad le hiciera a Martnez Paz en 1938: El
que estas lneas escribe, sucesor, en esa ctedra, del doctor Martnez
Paz, e integrante del grupo escolar al que este dict la materia en
la Facultad, durante el ao 1911 [] [recuerda que a sus cualidades
como socilogo] se una un entusiasmo contagioso, sin el que no
existe verdadero maestro, y por obra del cual, logr vencer, ms de
una vez, la natural timidez de los alumnos hasta llevarlos a
redactar pequeas monografas y notas (Orgaz; 1938: 49 y 50). Entre
las veces que evoc su figura, en una de ellas Arturo Capdevila lo
record con las siguientes palabras: Saludo al doctor Enrique
Martnez Paz, el que supo despertar inquietudes fecundas (Capdevila,
1935: 38).
Segn se menciona en algunas ediciones del diccionario biogrfico
Quin es quien en la Argentina, en el mbito privado se desempe, en
el estudio de H. Aguiar; en el pblico, fue Secretario del Juzgado
Federal (1915 1916) y miembro del Consejo Provincial de
Educacin.
Martnez Paz haba sido el candidato de los estudiantes
reformistas en la fallida eleccin del sbado 15 de junio de 1918 que
culmin con la intervencin de la Universidad por parte del Gobierno
Nacional a travs de Telmaco Susini. La serie de reformas que el
interventor llev adelante incluyeron la designacin del Dr. Eliseo
Soaje como rector y del propio Enrique Martnez Paz como vice. ste,
a su vez, pas a ocupar las ctedras de Derecho Civil Comparado y
Filosofa del Derecho. Adems de Orgaz, otras figuras coetneas como
Deodoro Roca, Arturo Capdevila o Arturo Orgaz que pese a ser jvenes
egresados estaban innegablemente ligadas al reformismo- ocuparon
ctedras.
Los textos a los que hacemos referencia son El Pensamiento
Argentino en Sociologa, publicado en la Revista de Amrica en Pars
en 1914; en la mencionada conferencia de 1920 Las Ideas Sociales
Argentinas, luego incluida tambin en el libro Cuestiones y notas de
Historia de 1922, y en el texto presentado ante la Junta de
Historia y Numismtica Americana en 1927,
En 1924 Orgaz contribuy a Renovacin con un artculo Las dos
concepciones del panamericanismo. Sobre la Unin Latinoamericana y
su boletn, vese Pita, 2009. Sobre los contactos entre intelectuales
espaoles y argentinos en los veintes y la tradicin del Colegio
Novecentista vase Carreo, 2012, Fuentes Cordera, 2011 y Vasquez,
2000.
Entre los dems espacios editoriales en donde Orgaz logr
visibilidad mencionamos sus aportes a la Revista de la Universidad
Nacional de Crdoba, publicacin fundada y dirigida entre 1914 y 1918
por Enrique Martnez Paz, en la que hasta 1931 present 8 trabajos;
como as tambin en revistas internacionales: la ya mencionada Revue
Internationale de Sociologie (3 trabajos en 1914, 1924 y 1932),
Interamerica (1921), Sociology and Social Research (1931) y en
diversos peridicos nacionales como La Prensa y La Voz del
Interior.
Sobre la historia de la Universidad Nacional de Crdoba vase La
filosofa en la universidad de Crdoba a fines del siglo XVIII,
Cuadernos de Historia, 11, IEA, 1942; La primera constitucin
republicana de la universidad de Crdoba, Imp. De la Universidad,
Crdoba, 1940; Para la historia de la Facultad de Derecho y Ciencias
Sociales de Crdoba, 1942. Las contribuciones de Ral Orgaz a la obra
de Levene fueron La enseanza de la filosofa y La enseanza del
derecho en el volumen 4: El momento histrico del Virreinato del Rio
de la Plata de la Historia de la Nacin Argentina, Academia Nacional
de la Historia, 1936-42.
Si bien Orgaz comparta con Ingenieros, y con buena parte de los
historiadores del giro-de-siglo, una interpretacin histrica
evolutiva, se distanciaba de ste por su de materialismo histrico
biologicista (Orgaz, 1926; Pasolini, 2007: 95 y Tarcus, 2007:
413-444). El peso del concepto de raza en la explicacin histrica de
Ingenieros (Acha, 2009) fue, inicialmente, objeto de acercamiento
con la lnea interpretativa de Orgaz, especialmente en los textos de
la dcada de 1910 (Ingenieros, 1915a)
Tanto Quesada en La poca de Rosas (1898), Garca en La Ciudad
indiana (1900) como Ingenieros en La Evolucin de las ideas sociales
argentinas (1918) ubicaron entre la colonia y el siglo XIX el mbito
en el cual aplicar sus conceptos sociolgicos. Vase Altamirano,
2004, Devoto, 2006 y Pereyra, 2011.
La presencia de Gino Germani en la Universidad de Buenos Aires y
la apertura del Departamento de Sociologa de la Facultad de
Filosofa y Letras han servido como hitos fundadores de la moderna
sociologa cientfica en Argentina (Germani, 1964). Una relectura de
este proceso de institucionalizacin vase Blanco, 2006.
Las notas a Bastide y a Orgaz, publicadas en el Boletn del
Instituto de Sociologa (III, 1944), estn fechadas respectivamente
el 20 y el 22 de Agosto de 1944. Ricardo Levene escriba a Bastide:
le solicitar al doctor Ral Orgaz, mi eminente colega y amigo, para
que nos pongamos de acuerdo acerca de la creacin de este nuevo
organismo. El director del Instituto de Sociologa de la Facultad de
Filosofa y Letras le escriba a Orgaz: usted, que representa una de
las ms altas autoridades en la enseanza y la investigacin de la
Sociologa contempornea. Orgaz contest el 28 de Agosto de ese ao
proponiendo una serie de ejes temticos.
Noem Girbal de Blacha sostiene que las polticas expansivas de la
Junta a finales de la dcada de 1910 correspondieron al programa del
nacionalismo integrador en el que Ricardo Rojas, Leopoldo Lugones o
Joaqun V. Gonzlez produjeron sus reflexiones sobre la Nacin.
Durante los ocho aos cruciales comprendidos entre 1919 y 1927 se
incorporaron 38 acadmicos, 16 numerarios y 22 correspondientes: en
esta poca aument notablemente la designacin de miembros
correspondientes internos de la Junta, que otorg una mayor
representacin a las provincias, especialmente desde 1925, y tambin
de correspondientes en el exterior con participacin preferente de
Espaa y de los pases limtrofes (Girbal de Blacha, 1995: 101). La
autora seala que la Mesa Directiva presidida por Martiniano
Leguizamn se propuso como objetivos prioritarios mantener la
autoridad y los prestigios de la institucin dentro y fuera del pas,
estimulando relaciones espirituales con las asociaciones similares
de las naciones hermanas vinculadas por un comn origen e incorporar
nuevos y activos miembros numerarios y, especialmente,
correspondientes en el interior del pas (Girbal de Blacha, 1993: 31
y 32). Vase asimismo Escudero, 2010.
No se ha subrayado suficientemente el rol que jugaron los
manuales de linajes a la vez que la conformacin de las sociedades
de estudios genealgicos como mbitos de produccin de memorias que a
la vez volvan visibles el prestigio de las viejas elites sociales
en un momento de transicin. En Crdoba, Gustavo Lazcano Colodrero
public su Linajes de la Gobernacin del Tucumn: los de Crdoba en dos
tomos a mediados de los aos treinta.
Las investigaciones de Martnez Paz sobre la figura de Funes son
anteriores a los aos treinta. El libro El Den Funes, Apostol de la
libertad fue publicado finalmente en Crdoba, en 1950.
Vicente Rossi public los primeros trabajos de Arturo Capdevila a
principios de la dcada de 1910. Vase Agero, 2010a. Vase la voz
biografica dedicada a Rossi en HYPERLINK
"http://www.culturasinteriores.ffyh.unc.edu.ar"
www.culturasinteriores.ffyh.unc.edu.ar
Rmulo Carbia haca una efectiva caricatura del esquema analtico
de Ingenieros cuando vea a los socilogos ocupados en las leyendas
negra (la colonizacin espaola) y roja (la dictadura rosista) a la
vez que preocupados por extraer leyes del pasado que puedan servir
al futuro de la comunidad (Carbia, 1938: 245 y siguientes). Paul
Groussac fue igualmete objeto de la crtica de Carbia, por su estilo
narrativo y escaso de rigor en el tratamiento de las fuentes
(Prado, 2001).
Se trata de una concepcin presente ya en el artculo de 1915
titulado La raza como factor social que Orgaz public en Revista de
Filosofa. Cfr. Zimmermann, 1992.
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