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FILOSOFIA DE LA FILOSOFIA ENCENTROAMERICA
Filosofa de la filosofa es la discusin sobrelos objetivos y
contenidos que abarca la investiga-cin filosfica. Es, precisamente,
la cuestin estra-tgica de la filosofa. Comprende tanto.los
plantea-mientos que procuran el esclaracimiento de la disci-plina
misma, como los que conciernen a la seleccinde sus materiales de
trabajo y al discernimiento desus problemas, segn las condiciones
en las que elfilsofo y los dems hombres, todos con l de carney
hueso, se desenvuelven en circunstancias concre-tas.
La filosofa es un modo de abstraccin, deexplicacin de la
realidad. Hay diversos modos deabstraer la realidad para explicarIa
racionalmente, deconformidad con el aspecto sobre el que se
opere,ya sea en cuanto a la naturaleza o a las relacionesque los
hombres contraen entre s. En todo caso, losdistintos modos de
abstraccin, cuando proceden ra-cionalmente a dar explicaciones
constituyen la cien-cia y la filosofa, as sea en su proceso de
elabora-cin; como contraposicin a la mera especulacin,que todava
muchos ejercitan en nombre de ellas,con lo cual se sitan en los
terrenos de lo irracional.
Lo que hace que tales procedimientos de pen-sar y organizarse
sistemticamente como tales y paraalgo que no sea consumirse en la
sola y misma activi-dad de pensar, sino que lleguen a establecerse
comoherramientas de transformacin de la realidad, loque hace que la
ciencia y la filosofa sean eso, cien-cia y filosofa, es que se
estructuren y desarrollen apartir y a tono con la diversidad de
caractersticasque tiene la realidad, explicndolas. En esto
consistela racionalidad, la objetividad, que no en inventarias,ya
que en lo que a esto se refiere as se produce lairracionalidad por
subjetividad. Lo que determinarque se trate de una o de otra
modalidad es el con-junto de posibilidades de comprobacin que
me-diante la praxis puedan obtenerse, una y otra vez,con respecto a
los puntos de arranque.
Que se trate de las denominadas ciencias ofilosofa, solo
depender de sus campos de opera-cin, de sus materiales de trabajo,
de los aspectos de
Jos Luis Balcrcel
la realidad que les corresponda investigar. En un ca-so son
disciplinas que se hacen cargo de conjuntosparticulares de
elementos y procesos que interrela-cionados en general constituyen
la totalidad de larealidad, en otro del estudio de las
interrelacionesmismas, de las coyunturas que se expresan en
losconocimientos obtenidos en y por aquellas discipli-nas; a estas
les proporciona su aporte terico encuanto a la metodologa que ellas
se encargan pornecesidad de poner en prctica. Todo a partir de
lapraxis que las lleva a constituirse como tales discipli-nas,
condicin tambin necesaria para la constitu-cin de la filosofa y de
la averiguacin de su propiomtodo y su puesta en funciones para
aprehender yexplicar los aspectos generales de la realidad
concre-ta que implican las particularidades todas que inves-tigan
cada una de las disciplinas, para con ello iratando y desatando los
cabos que le permitan, atravs de las interrelaciones, de las
coyunturas, irpenetrando las concatenaciones que
conjuntadasconstituyen el todo, la totalidad. De tal manera quela
filosofa como teora de la praxis y praxis de lateora opera como
disciplina cientfica con ya seme-janza de las dems particulares,
sirvindose de y sir-vindoles a ellas para interpretar objetivamente
larealidad, coadyuvando en el proceso transformadorde la
sociedad.
Por lo mismo que la filosoffa es averiguacin yexplicacin
objetiva de la realidad concreta, de latotalidad, a travs de
procesos abstractivos, por sumedio, con apoyo en las otras
disciplinas cientficas,el hombre adquiere las condiciones
pertinentes paraestablecer, en condiciones determinadas, el orden
delos problemas especficos que advierte en y comoresultado de las
mediaciones en las que funciona elrazonamiento, al impulso de la
praxis para deveniren praxis.
Todo lo cual quiere decir que en y con laflosoffa, segn las
condiciones sociales concretas enlas que vive, a la luz de los
resultados cientficos ypropiciando el inters y desarrollo que
conduzcan aotros nuevos en disciplinas especficas y en ella
mis-
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]05E LU 15BALCARCEL198
ma, el hombre necesita establecer prioridades encuanto al examen
de los problemas y la sistematiza-cin de sus explicaciones.
En Centroamrica, como en cualquier lugar dela tierra, no se
puede hacer filosofa al margen de lascondiciones sociales
existentes. En base a la observa-cin y al anlisis que directamente
pueda conseguirla filosofa, pero sobre todo, complementndoloscon lo
que revelan las investigaciones de economis-tas y socilogos, de la
antropologa, de la biologa,de la medicina, realizadas
especficamente sobre larealidad centroamericana, se vienen
caracterizandolas relaciones de produccin imperantes, cmo
fun-cionan y qu consecuencias acarrean a los individuosque
intervienen en ellas.
No existe, por lo tanto, el centroamericano enabstracto,
referido a quien procede de o vive en estarea geogrfica. En
Centroamrica hay hombres deuna u otras clases sociales por el lugar
que ocupan yel papel que desempean en las relaciones de pro-duccin,
de distribucin y de consumo. Eso lo vie-nen repitiendo los
socilogos y los economistas, ycon ello no plantean ningn
descubrimiento, obvia-mente. Sin embargo, se hace cada vez ms
impres-cindible, y algo se tiene andado, sin duda, en esecamino,
contar con una ms cabal caracterizacin delas clases sociales en
Centroamrica y de los gruposen los cuales se diluyen algunas
peculiaridades declase, sin que eso signifique apartarse de ella o,
enotros casos pudieran ser la manifestacin de trnsitohacia otra.
Ahora bien, esas no son averiguacionesque pudieran hacerse
aisladamente, en la parcialidada la que conducen estudios que se
intentan, preten-diendo la exclusividad de la disciplina que se
practi-ca. Para saber de eso se necesita abordar la proble-mtica
desde una diversidad, desde una multiplici-dad de ngulos.
Esto es, que en ello intervienen varias discipli-nas, entre las
que la filosofa no tiene participacinmenor, como que sus alcances
son tanto los atar ydesatar los cabos a los que antes nos
referamos, locual permite avanzar en el recorrido que conduce ala
totalidad concreta, como los de proporcionar loselementos de juicio
necesarios, por lo mismo de suactividad unificadora, que permitan
la explicacinobjetiva del problema en sus diversos aspectos. Porlo
dems, la filosofa, con todo el material recogido,investigado en y
por otras disciplinas, al desarro\1arsu anlisis podr explicar en
general el problemaconcreto, en el contexto de una situacin bien
de-terminada. Adems de que, por el mismo proceso deinvestigacin con
el que tiene que desenvolverse, al
rastrear distintos conceptos y categoras orientapreocupaciones
tericas que luego demandarn serresueltas por la filosofa misma o
por otras cienciasespecficas. As, estn demandando ser
examinadosproblemas como el de la enajenacin, ms no parareiterar lo
que sobre esto se dice todos los das y entodas partes, sino, como
podra ser, se nos ocurre,para determinar si existen algunas
pecualiaridades enlos procedimientos de manipulacin que conducen
amanifestaciones enajenan te s en el mbito del merca-do comn
centroamericano o de la integracin cen-troamericana. No sabemos si
son la misma cosa o siuno, se pretende, conduce a lo otro.
O bien problemas, que no s si sea prudentemencionar tan
inmediatamente, como la dependen-cia econmica centroamericana del
imperialismo ysus consecuencias enajenantes por medio de los
sis-temas neocolonialista y/o neofacistas de adoctrina-miento
cultural y poltico que apenas si constituyenpartes de
procedimientos ms vastos para sojuzgartcnicamente el comportamiento
social de millonesde habitantes del rea centroamericana. Lo cual,
sinembargo, no es situacin exclusiva de esta parte delplaneta, pero
convendra saber si algunas relacionessuyas le otorgan matices
especiales.
Con lo anterior no queremos decir que sea a lafilosofa a quien
corresponda dar todas las respues-tas sobre tan variadas gama de
asuntos. Ya antesdecamos que su desenvolvimiento orienta
preocu-paciones que luego pueden encontrar respuestas enella misma
o en otras ciencias. Ha sido una prcticamuy difundida hasta hoy que
varios de los proble-mas y planteamientos explicados y discutidos
porlas ciencias especficas han tenido sus primeros desa-rrollos en
la filosofa para ir a parar de nuevo, yaavanzado su
esclarecimiento, a la filosoffa. Por igualrecorrido han pasado las
cosas tambin, naturalmen-te, por qu no, en Centroamrica. Sin que
aqu,tampoco, tengan que ver nada con eso los
profesorestradicionales de filosofa.
No se requerira ser un sabio y muy acuciosoinvestigador para
percatarse de la situacin econmi-ca, social y poltica de
Centroamrica. Independien-temente de que en algunos de sus pases
integrantespuedan existir gobiernos menos represivos que el
deGuatemala en donde los que han venido funcionan-do desde el
derrocamiento del rgimen democrticoy nacionalista de Arbenz han
asesinado a 60.000gentes, o de que otros tengan una tradicin
civilista,lo que caracteriza en general, propiamente, sus
rela-ciones econmicas es la dependencia creciente res-pecto del
imperialismo norteamericano, con la con-
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FILOSOFIA EN CENTROAMERICA
siguiente servidumbre que se manifiesta en lo socialy en lo
poltico. Todo esto se revela a travs deprocesos cognocitivos como
el que sealbamos y,muchas veces, hasta en el sentido comn. Sin
embar-go, hoy ms que nunca se hace necesario profun-dizar en la
apreciacin de las variantes que vienenadquiriendo las modalidades
de penetracin y con-trol por parte de las transnacionales, como son
lasustitucin de productos de explotacin y las varian-tes de
mercados, para inquirir sobre sus conse-cuencias.
La situacin concreta de Centroamrica, segnse pone de manifiesto
a travs de exmenes, nosiempre muy profundos, determina en cuanto a
lalabor de las investigaciones filosficas una demandaprioritaria de
lo que se denomina ftlosofa social engeneral y poltica en
particular. Con esta afirmacinno planteamos, de ninguna manera, el
abandono o lasustitucin de especialidades ya asumidas, que
noestuvieran inscritas o no sean afines con aquellas. Loque
interesa en todo caso es que, indistintamente dela especialidad que
se tenga en filosofa resulta im-prescindible estar al tanto,
informarse y profundi-zar, en la medida de lo posible, sobre las
condicioneseconmicas, sociales y polticas que existen en
Cen-troamrica dentro del contexto de lo inmediato y lomediato. De
tal manera que el conocimiento que elfilsofo adquiera con
objetividad lo pueda conducirpositivamente a participar de alguna
manera en sen-tar las bases que lleven a una transformacin de
lascondiciones ahora imperantes, con el objeto de con-seguir una
mejor situacin social, as sean, por lomenos, la que le permita
mayores facilidades para sutrabajo y especializacin. Tal
participacin podraser, .al menos, la de discutir y combatir a los
idelo-gos de la oligarqua centroamericana, siempre al ser-vicio de
intereses extraos, an a costa de los pro-pios.
Por cierto, hay un aspecto de este terreno am-plio en donde la
filosofa tiene mucho que hacer enCentroamrica. En la filosofa de la
historia. EnCentroamrica siempre se comenta que su historiaest por
escribirse; tanto la que tuviera un enfoquede conjunto como la que
debiera tratar lo que serefiere a los pases que la constituyen. Slo
el enfo-que filosfico, crtico, podr contribuir con su cri-ba,
coadyuvando en esa tarea a superar el caudal demeras descripciones,
que no por incluir series de da-tos econmicos dejan de ser
descriptivas, o que porlo mismo adolecen de un mecaniscismo
interpretati-vo, como an frecuentemente se elaboran.
En ese sentido el aporte o participacin de
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la ftlosofa en Centroamrica, como en cualquier otraparte, no se
refiere nicamente a lo social, aunqueen otra instancia tenga que
ver con ello. La filosoffade la ciencia, lo es de las ciencias
naturales y de lassociales, en la medida en que stas se
desempeen,efectivamente, como tales. Lo que aqu importa des-tacar
es que el inters del filsofo por las cienciasnaturales, situndolas
en un contexto histrico so-cial determinado puede muy bien conducir
a incidiren la necesidad de que se aborden estudios de lasciencias
naturales en niveles que con respecto a esasituacin concreta
demuestran carencias o solucio-nes inadecuadas. Lo mismo vale para
la aplicacinde la tecnologa en circunstancias bien determinadasde
atraso econmico y social, o subdesarrollo, si asse prefiere
denominarle.
El desarrollo del proceso cognoscitivo de lascaractersticas y
pecualiaridades que puedan produ-cirse en los diversos aspectos de
la realidad centro-americana y su explicacin objetiva, pues,
requierenecesariamente de la averiguacin interdisciplinariaque
incluya, tambin de manera imprescindible, laparticipacin de la
filosof'a, mediante la cual se con-seguir la unificacin del
conjunto de resultados, delos obtenidos por ella o de los
conseguidos por otrasciencias, como producto de la relacin recproca
quenecesitan mantener. Esta recapitulacin que no es,de ningn modo,
mera formalidad. Est dirigida asealar el contraste que la realidad
demanda estable-cer frente a una suerte de deformacin que comien-za
a darse en Centroamrica, la cual no es ms queejemplo de dos maneras
de poner de manifiesto losriesgos a los que conduce la falsa
posicin de supo-ner excepcionales por quienes las practican, por
so-bre el conjunto de las dems disciplinas, ojal seapor lo reciente
de su inclusin en el curriculum aca-dmico centroamericano como
carreras autnomas,a la sociologa o a la Ciencia Poltica. Es lo que
traecomo consecuencia cierto dogmatismo en la argu-mentacin de sus
planteamientos, hasta hoy en sumayora eminentemente informativos y
descriptivosy cuando no mecanicistas en su interpretacin; enfin,
restrictivos por su unilateralidad. Nos llama laatencin, sobre todo
en cuanto a la Ciencia Poltica,la tendencia de ver en la carrera
una perspectiva parael acomodo poltico y los reacomodos
ideolgicos.Es de esperarse que el estudio de las
condicionespolticas determine asumir actitudes y posicionespolticas
conforme a principios, superando el meropragmatismo y que la
sociologa al profundizar enlas investigaciones que le corresponde
llevar a caboopere como tal y deje de auto considerarse la
llave
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del marxismo.Consideramos, en fin, que en la medida en que
la filosofa va conociendo con objetividad la reali-dad
centroamericana, se propone as el esclareci-miento de su situacin y
opera en direccin a coad-yuvar a la transformacin y desarrollo de
las con di-
ciones que actualmente mantiene, se va constituyen-do, en el
orden de prioridades que decamos, comouna filosofa social, poltica,
que sirva de marco te-rico al desenvolvimiento del proceso de la
revolu-cin econmica, social y poltica que su propia reali-dad
demanda llevar a la prctica.