Top Banner
71

Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Jul 30, 2022

Download

Documents

dariahiddleston
Welcome message from author
This document is posted to help you gain knowledge. Please leave a comment to let me know what you think about it! Share it to your friends and learn new things together.
Transcript
Page 1: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)
Page 2: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Índice

PortadaSinopsisPortadillaDedicatoriaPrólogo1. Eres más fuerte de lo que crees2. Pon nombre a lo que sientes3. Cuídate, eres importante4. Acepta las nuevas reglas del juego5. Da salida a tus emociones6. Pon tu imaginación bajo control7. Ocúpate en vez de preocuparteAgradecimientosNotasCréditos

2

Page 3: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Gracias por adquirir este eBook

Visita Planetadelibros.com y descubre unanueva forma de disfrutar de la lectura

¡Regístrate y accede a contenidos exclusivos!Primeros capítulos

Fragmentos de próximas publicacionesClubs de lectura con los autores

Concursos, sorteos y promocionesParticipa en presentaciones de libros

Comparte tu opinión en la ficha del libroy en nuestras redes sociales:

Explora Descubre Comparte

3

Page 4: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Sinopsis

Estamos ante una situación inaudita, no hemos vivido jamás una crisis semejante y esnormal que sintamos miedo, frustración, ansiedad, estrés… Pero que esta sea nuestraprimera pandemia no implica que no podamos hacer nada para gestionarla. Poseemosuna capacidad inmensa de resiliencia para superar momentos difíciles y una fortalezaemocional innata: solo necesitamos conectar con ellas.

Tomás Navarro ofrece un kit de rescate emocional para confinamientos, pandemias,crisis y todo tipo de situaciones extremas que te ayudará a darte cuenta de que eres másfuerte de lo que crees, que te permitirá activar tus recursos, aprender otros nuevos,desarrollar tu capacidad de resiliencia, dar una buena respuesta a las crisis, y adaptartemejor y más rápido a los nuevos escenarios que nos vaya planteando la vida.

Con consejos útiles y recomendaciones para convivir con esta nueva realidad, elmensaje es claro: cuídate, permítete sentir, gestiona mejor el conflicto y, en definitiva,utiliza todo tu potencial para hacer frente a la adversidad y salir reforzado.

4

Page 5: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

ERES MÁS FUERTE DE LO QUE CREES

5

Page 6: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Kit de rescate emocional para afrontar la crisis

Tomás Navarro

6

Page 7: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

A Núria, por hacer de Sísifo un aprendiz,

porque sigues avanzando aunque la vida sea cuesta arriba, porque has sido, eres y serás una alpinista…

A ti,por quedarte en casa,

por salvar vidas.

7

Page 8: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Prólogo

Tienes en tus manos mi primer libro escrito en confinamiento y, para ser sinceros,¡espero que sea el último! Cada vez que mi editora me dice que tenemos que hablar,suele ocurrir algo. El jueves 2 de abril recibí una llamada. «Tomás, tenemos que haceralgo, hay mucha gente que lo está pasando muy mal y tú puedes ayudarlos», me dijo.«¿Podrías escribir un libro para ayudar a superar el confinamiento y prevenir el estréspostraumático?», me preguntó. «Pues claro», respondí. «¿En una semana…?» «Pues lointentaremos…».

Y aquí estamos, aquí tienes en tus manos lo que parecía una locura, pero ¿qué es lavida, sino una sucesión de locuras?

Estamos viviendo una situación excepcional que requiere de toda nuestra capacidadde resiliencia. Lo estamos pasando mal, muchos han perdido a sus seres queridos, nosabemos qué va a pasar y el futuro económico que nos espera no parece muy alentador.

Tenemos que ser capaces de gestionar el estrés, el miedo, la ansiedad o la tristeza queestamos sintiendo. Además, debemos preservar al máximo nuestras energías para lo quese prevé una carrera de fondo. Por si todo esto fuera poco, esperamos que nuestra saludno se vea comprometida, y no sufrir las terribles consecuencias de una infección porcoronavirus complicada.

Nadie está preparado para tanta incertidumbre, nadie confía tanto en sus capacidadescomo para abordar una crisis sin precedentes, nadie tiene experiencia en algo similar.

Ciertamente, hay muchas cosas que escapan a nuestro control, pero eso no suponeque no podamos controlar algunas otras.

Eres más fuerte de lo que crees, lo que pasa es que no te has dado la oportunidad deconectar y de desplegar toda tu fortaleza emocional y todas tus virtudes. Te ayudaré. Yo,para ser sinceros, de pandemias no entiendo mucho, pero hay algo de lo que sí sé: cómosacar lo mejor de uno mismo ante la adversidad.

La vida es preciosa y merece ser vivida, pero tenemos que aceptar que la adversidad,las crisis y la desgracia forman parte de ella. Ya llevo varios libros proporcionando

8

Page 9: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

herramientas para poder convivir con la cara menos amable de la vida y sabergestionarla, así que, como psicólogo, me veo plenamente facultado para ayudarte.

A lo largo de todo el libro te proporcionaré herramientas para conectar con tufortaleza emocional, para descubrir tu capacidad de resiliencia y para aplicarla a lasituación que estamos viviendo y a las futuras crisis por venir. Esperemos que no seanmuchas, pero aceptemos que vendrán, y que cuanto mejor preparados estemos, mejor lassuperaremos.

Ante una crisis, la capacidad de respuesta es crítica y uno solo puede responder biensi se siente competente y si dispone de recursos para hacerle frente. En este libro teayudaré a que conectes con tu fortaleza y a que te sientas competente; además, teproporcionaré varias herramientas que te serán de gran ayuda para gestionar laadversidad y salir reforzado.

Tienes en tus manos todo un kit de rescate emocional para confinamientos,pandemias, crisis y todo tipo de situaciones extremas que te ayudará a darte cuenta deque eres más fuerte de lo que crees, que te permitirá activar tus recursos, aprender otrosnuevos, desarrollar tu capacidad de resiliencia, dar una buena respuesta a las crisis, yadaptarte mejor y más rápido a los nuevos escenarios que nos vaya proponiendo la vida.

9

Page 10: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

1

Eres más fuerte de lo que crees

A mí esto de la pandemia me ha cogido muy a contramano. Además, no sé tú, pero comote comentaba en el prólogo, mi experiencia con pandemias y confinamientos es cero. Noobstante, que sea la primera vez que vivimos algo no significa que no podamos hacernada para gestionarlo.

Es más, dependiendo de la manera en que gestionemos lo que estamos viviendosufriremos más o menos, tendremos más o menos secuelas o tardaremos más o menos enrecuperarnos y volver a estar fuertes, centrados y focalizados.

Es normal que ante una situación como la que estamos viviendo sientas una montañarusa de emociones. No te preocupes, lo analizaremos en un capítulo más adelante, ya quelo que tiene nombre puede gestionarse. Pero lo más importante es que tomes concienciade tu propia fortaleza emocional y de todos los recursos de los que dispones para hacerlefrente a la adversidad. En cualquier caso, viviendo lo que estamos viviendo, no tenemosotra opción que ser fuertes.

Sé que es posible que creas que no puedes, que te falten las fuerzas y que te sientassin recursos, pero que no los conozcas no implica que no los tengas. Es más,posiblemente tus recursos para hacer frente a la adversidad no se hayan activado porquetodavía no los has necesitado o quizá porque no has podido conectar con ellos. No tepreocupes, a lo largo de todo el libro yo me encargaré de que lo hagas.

Pero volvamos a centrarnos en el confinamiento. Lo más parecido a unconfinamiento que el común de los mortales contemporáneos ha experimentado ha sidopasar una tarde de lluvia en casa, un par de días en un hospital después de una operacióno una semana en casa con la pierna escayolada.

Sea como fuere, un confinamiento nunca viene bien. Antes de esta situación teníamosmuchos planes, una primavera que disfrutar, las vacaciones de Semana Santa y mil cosasmás que hacer.

10

Page 11: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Vamos, que si me preguntas si quiero estar confinado en casa, pues te diré que no.Ganas, lo que se dice ganas, no tengo ninguna. Pero una cosa son las ganas de hacer algoy otra muy diferente lo que tenemos que hacer o lo que se espera que hagamos, y ahora,a pesar de que no tengamos ganas, necesitamos tirar de responsabilidad para encontrar lamotivación necesaria para seguir confinados, no perder los nervios y preparar lo mejorposible un retorno a la normalidad en la mejor de las condiciones.

Así que vamos a hablar un poco de motivación y de cómo puedes despertarla,gestionarla e incluso engañarla.

La motivación es la energía que te permite iniciar una conducta, perseverar en tuempeño a pesar de la adversidad y los obstáculos y mantenerte orientado hacia unobjetivo, y entra en juego varias veces al día. La motivación es la responsable de quevayas o no al gimnasio, de que le des ese masaje a tu pareja, de que puedas seguir ladieta, de que sigas sin fumar, de que seas capaz de ponerte a estudiar en vez de irte dejuerga con los amigos o, en nuestro caso, de que sigamos confinados en casa sin perderlos nervios.

Cada uno tiene sus propias motivaciones, que pueden ser más o menos temporales.En mi caso es la siguiente: cuando le pones cara y ojos a la persona que puede morir porculpa del coronavirus y a la hija que dejaría huérfana, pues no te planteas otra opciónque no sea quedarte en casa. Núria, mi mujer, es un perfil de alto riesgo con unaenfermedad autoinmune compleja que afecta, entre otros órganos vitales, a los pulmones.De hecho, en agosto de 2019 la operaron del pulmón. Así que, como podrás ver, más quemotivado, estoy supermotivado.

Ahora mismo hace más de tres semanas que solo pongo un pie en la calle para tirar labasura una vez a la semana. La compra de la tienda y de la farmacia nos la traen a casa.Cuando convives con una persona de riesgo, no te faltan motivos para seguir confinado;no obstante, entiendo que si no tienes alguna motivación tan fuerte como la que acabo decomentar, pueda resultar difícil; pero no te preocupes, aquí estoy yo para explicartecómo puedes estimular tu motivación para conseguirlo.

A veces, cuando no estamos motivados para hacer algo, tenemos que tirar deincentivos, como por ejemplo un homenaje, un viaje o un paseo por la playa reservadopara cuando salgamos de esta. Un incentivo es como una especie de premio por elesfuerzo realizado. No nos engañemos, esto de estar todo el día encerrado requiere detoda nuestra energía, incluso para mí, que tengo claras las consecuencias que tendría nohacerlo.

Los esfuerzos deben ser recompensados. Sí, ya sé que en el mundo ideal no debería

11

Page 12: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

ser así, pero a veces vivimos una vida imperfecta y necesitamos de esa zanahoria que nospermita tirar un poco más del carro, ir un día más a trabajar o seguir una semana más encasa. Así que quizá puedas ir pensando en qué te vas a regalar para celebrar ese esfuerzotitánico que estás haciendo.

A veces la motivación no nos acompaña, los incentivos no existen y no nos quedaotro remedio que tirar de responsabilidad. No todo el mundo es capaz de hacerlo, ya querequiere de un cierto grado de madurez. Algunas personas son capaces de pensar que susacciones tienen consecuencias en otras personas e incluso son capaces de modular suconducta para no perjudicar a nadie. Eso, exactamente, es la responsabilidad. Otras, no.

¿Ganas de estar confinados? Ninguna. ¿Seguimos el confinamiento? Pues sí, con lasatisfacción del deber cumplido, que dicen algunos.

Así que o tiramos de motivación, o tiramos de incentivos o tiramos deresponsabilidad, pero en momentos como este tenemos que estar a la altura de lascircunstancias, ya que nuestra contribución en esta lucha contra la pandemia es muchomás importante de lo que creemos.

Pero volvamos a hablar de ti; sí, de ti. Eres mucho más fuerte de lo que imaginas.Quizá no seas consciente de tu fortaleza, quizá no te has dado la oportunidad de ponertea prueba. Pero te aseguro que estás repleto de virtudes que no se activarán hasta que lasnecesites.

Que no hayas hecho algo nunca no implica que no lo puedas hacer alguna vez, peropara conseguirlo necesitas confiar en ti, tener fe en ti y en tus capacidades. La fe en unomismo nace de la seguridad. Entonces, ¿qué seguridad tenemos para poder afrontar unapandemia con garantías si nunca lo hemos hecho?

Lo que te pasa es que te sientes inseguro. Normal. La culpa es de la percepción decompetencia. La percepción de competencia consiste en el juicio completamentesubjetivo sobre si seremos capaces de superar un problema o reto. Ante cualquiersituación, lo que hacemos es valorar si somos competentes para resolverla o no, es decir,si podremos darle una respuesta adecuada o no.

Cuando nos sentimos amenazados, lo primero que solemos hacer es ir a nuestroalmacén de recuerdos para ver si encontramos alguna estrategia de afrontamiento queencaje con el problema que tenemos que solucionar. Si en ese almacén aparece unaimagen nuestra haciendo frente con éxito a la misma situación con anterioridad, nossentiremos seguros, tendremos un punto de partida, una estrategia con la que contar y laesperanza de ser capaces de superar la situación que está exigiendo lo mejor de nosotrosmismos.

12

Page 13: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Al conocernos amparados por la experiencia, haremos del problema un reto queafrontar con el pecho inflado, la cabeza alta, la seguridad que nos da la experiencia y unaexpectativa de éxito.

Pero también puede ocurrir que al ir a nuestro almacén de estrategias deafrontamiento encontremos una estrategia, pero que supuso una experiencia de fracaso,pues fuimos incapaces de gestionar ese problema.

Ante esta expectativa de fracaso prevemos que no podremos hacer frente al nuevoproblema, quedamos sumidos en un estado de desesperanza, nos falta la motivación,perdemos la seguridad y acabamos creyendo que no podremos hacer nada parasuperarlo.

Finalmente, también puede pasar que al ir a ese almacén de experiencias vividas abuscar un recurso que nos ayude a superar la adversidad y a encontrar una motivaciónpara superar el confinamiento, no encontremos nada, vamos, que nunca hemos vividoeso, que es lo más probable que te esté pasando ahora mismo.

No te preocupes, si miras bien, posiblemente en tu memoria de recursos deafrontamiento no encontrarás nada exactamente igual, pero es probable que sí puedasencontrar alguna situación parecida que pueda darte alguna pista de cómo podríassuperar este confinamiento.

En definitiva, esto del confinamiento me recuerda cuando estuve realizando elservicio militar y tenía que hacer algo que no me gustaba, pero también guarda ciertosparalelismos con correr una maratón, un Ironman o una marcha ciclista de resistencia.También, salvando las distancias, es como superar una gripe, estar encerrado en un resortde esos de pulserita o hacer una megacolcha de patchwork. Ese jersey de punto quehiciste, decorar tu casa, esa mudanza interminable o abrir ese negocio requieren demuchas de las habilidades que necesitas para superar este confinamiento.

Me da igual lo que elijas, pero busca en tu memoria para encontrar aquellassituaciones en las que has superado un contratiempo que a priori creías que no ibas avencer. ¿Qué tal el embarazo de tus hijos, ese parto de ocho mil horas o la recuperaciónde ese tobillo roto?

En definitiva, si te paras a pensarlo, no difiere tanto. Necesitas persistir, nodesesperar, paciencia, creatividad para distraerte, capacidad de análisis para adaptarte auna situación nueva, afinar tus sentidos para percibir oportunidades, tolerar la frustracióny mantener una actitud positiva ante todo esto.

No me digas que no lo has hecho antes…Eres competente y estás preparado para superar este confinamiento y mil más porque

13

Page 14: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

la vida, la naturaleza o lo que sea en lo que creas te ha dotado especialmente para viviruna vida incierta y cambiante. Sí, ya sé que estamos acomodados, que preferimos estar lamar de a gusto en la rutina y la estabilidad, pero mira, quizá, analizándolo bien, parte delos niveles de depresión y ansiedad tan elevados que sufrimos sean por culpa de vivirvidas aburridas y rutinarias.

Necesitamos incluir retos en la vida, probarnos, comprobar que somos fuertes, quepodemos plantearnos metas y superarlas. Algunas personas lo hacen con el deporte, otrosa nivel profesional o con un hobby, pero lo cierto es que necesitamos sentirnos vivos eincorporar la aventura en nuestro día a día. Sí, ya sé que esta no la hemos elegido, perono está tan mal. De verdad. ¡Que tenemos internet! Televisión, frigorífico, lavabo y, demomento, papel de váter.

Plantéatelo así, es una prueba y estás preparado para superarla. De no ser así, ¿porqué tendríamos tantas funciones superiores adaptativas? Podemos analizar, crear,motivarnos, tomar decisiones, adaptarnos, modificar nuestro entorno… Somos uncompendio de virtudes especialmente orientadas a vivir una vida incierta y complicada.

Es posible que tengas momentos bajos, es normal, pero no caigas en la desesperanza.Seligman es un psicólogo contemporáneo que pasará a los anales de la historia pordescubrir el fenómeno de la desesperanza aprendida. Es un concepto muy sencillo quetodos hemos vivido en un momento u otro de nuestra vida. Si nunca has tenido laoportunidad de comprobar fehacientemente que puedes superar la adversidad o un reto,creerás que no eres competente para hacerlo, te conformarás con la situación actual,aunque te genere mucho sufrimiento, y te resignarás a vivir a merced de los deseos delos dioses o de los caprichos del destino.

Pero no es así, no caigas en la desesperanza, no hay pandemia que pueda contigo, nohay confinamiento que no puedas superar, créeme, puedes hacer muchas cosas aunquenunca las hayas hecho. Estamos de acuerdo en que no puedes controlar la pandemia,pero sí que puedes controlar y gestionar tu respuesta. Ahí, precisamente, es dondetenemos que poner el foco, en lo que podemos hacer, en aquello sobre lo que tenemoscapacidad de control, en lo que podemos incidir y que podemos gestionar.

Ante la adversidad y la falta de motivación, tratemos de regularnos. A veces tenemossuficientes recursos propios como para regularnos, como por ejemplo navegar un ratopor internet, cocinar, ver alguna película, leer un libro o darnos un baño.

Parece fácil, pero lo cierto es que no siempre es posible. A veces no podemosregularnos de manera autónoma y necesitamos de una ayuda externa. No pasa nada, note sientas mal. A veces esa ayuda es en forma de medicación, a veces en forma de

14

Page 15: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

llamada a un amigo o a veces una sesión online con un psicólogo. No lo olvides, solosomos humanos, y algunas situaciones, en algunos momentos, nos sobrepasan. Coge esamano que te tienden. No tienes por qué caminar siempre solo.

Hace poco un amigo me pedía ayuda.—Tomás —me dijo—, sabes que yo no soy de pedir ayuda y que trato de

arreglármelas solo, pero con esta situación no puedo, me he venido abajo, he perdido lafe en mí y creo que he estado viviendo en una farsa.

—No seas dramático —le dije—, es tu primera pandemia, lógicamente te faltanrecursos, los aprenderás y la superarás. Una cosa más —insistí—, la vida se vive mejoren compañía, en los momentos dulces y en los amargos. Asegúrate de que la compañíasea buena, pero no trates de tirar solo del carro.

Querido lector, no siempre podemos con todo, pero eso no significa que hayamosfracasado, ni mucho menos. Lo único que pasa es que tienes que buscar dónde o conquién inspirarte, recargarte y reconfortarte para volver a la batalla más fuerte y mássabio.

Mira, te voy a poner un ejemplo que te va a permitir comprenderlo perfectamente. Yoera waterpolista. Además, durante un par de años hice triatlón y travesías de nado enaguas abiertas. Sé nadar muy bien. Soy capaz de pasarme horas en el agua. Podría nadaro flotar en situaciones en las que una persona normal no podría hacerlo, como, porejemplo, en un río de aguas bravas —lo he hecho en innumerables ocasiones; tambiénsoy guía de rafting— o en un mar agitado. Pero estoy seguro de que hay situaciones enlas que no sería capaz. Estoy completamente seguro de que en un mar picado con olas detres metros no me serviría de mucho saber nadar como sé. ¿Me explico?

Pues algo así ocurre con el confinamiento y el miedo al coronavirus. Estamosdesbordados, es una situación tan tensa y tan excepcional que lo más normal que tepuede pasar es que no puedas llegar a regularte tú mismo y necesites ayuda en algúnmomento. Si es así, no pasa nada, pero sobre todo, querido compañero de confinamiento,no esperes a tocar fondo. Cuanto antes te des cuenta de que necesitas una ayuda, antespodrás pedirla y antes podrás recibirla.

Nadie se muere por caerse a un río, pero sí por quedarse en él. Además, para lapersona que te va a ayudar siempre es más fácil lanzarte un flotador que tener que tirarseal agua, recuperarte inconsciente del fondo del mar y tener que sacarte a flote. Tú ya meentiendes.

No caigas en la impotencia, puedes hacer muchas cosas, confía en ti y en tuscapacidades, date una oportunidad, date LA oportunidad, aplica todos los recursos que

15

Page 16: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

vas a encontrar aquí, eres mucho más competente de lo que crees, controlas mucho másde lo que piensas y a lo largo de este libro te irás dando cuenta.

No lo olvides…

Eres más fuerte de lo que crees.Cómo gestionas la adversidad determinará cómo la superarás.Que no conozcas tus recursos no implica que no los tengas.Encuentra tu propia motivación.Planifica incentivos y recompensas.Tira de responsabilidad.Actualiza tu percepción de competencia.Encuentra similitudes con situaciones anteriores que hayas superado.Transforma el confinamiento en un reto.Tu percepción de inseguridad es subjetiva y errónea.Gestiona tu expectativa de fracaso.Conecta con tu fortaleza emocional.No permitas que un bajón puntual te condicione.Pide ayuda puntual si lo necesitas; no es un fracaso, es una decisión inteligente.No caigas en la impotencia.

16

Page 17: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

2

Pon nombre a lo que sientes

Es la una de la madrugada del domingo 5 de abril; en realidad, ya lunes 6 de abril. Me hemetido en la cama a las once y llevo un par de horas dando vueltas. Parece que Morfeono quiere venir a verme. Después de bajar a por un vaso de agua decido empezar aescribir esto que ahora mismo estás leyendo.

Esto que me pasa se llama insomnio. Posiblemente tú también lo hayas tenido enalgún momento a lo largo de este confinamiento por culpa de la ansiedad inherente a estetipo de situaciones y experiencias. Bueno, vamos a ver, si llevas once cafés en el cuerpoo si te has comido un potaje de lentejas con su choricito para cenar, quizá en ese caso laculpa de tu insomnio no sea la ansiedad.

Existen varios tipos de trastorno del sueño relacionados con la ansiedad. Puede serque te cueste conciliar el sueño, pero que después puedas dormir bien. Quizá eres de losque caen rendidos en la cama y no les da tiempo ni a taparse, pero tu sueño es superficialy poco reparador. También puede ser que no tengas problemas para conciliar el sueño,pero que te despiertes de madrugada agitado y ya no puedas volver a dormirte.Finalmente también es posible que te pase todo lo que acabo que comentar y que, por lotanto, te cueste quedarte dormido, duermas mal y te despiertes temprano.

Sea cual sea el tipo de insomnio por ansiedad que estés sufriendo o que hayasexperimentado, después de pasar una noche así, lo más normal es que te pases el día consomnolencia, arrastrándote por casa y tomando café en vena.

A mí, particularmente, me cuesta conciliar el sueño, y además me resulta pocoreparador. Soy persona, como tú, y también sufro y disfruto de las mismas emocionesque cualquier mortal, como por ejemplo de la ansiedad. La ansiedad supone unaactivación del sistema nervioso, y esa activación provoca que el hámster que tenemos enla cabeza se ponga hiperactivo, decida montarse una juerga sin nuestro permiso y queademás tense e hiperactive nuestro cuerpo.

17

Page 18: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

A veces somos conscientes de que vamos pasados de vueltas y somos capaces deidentificar que estamos nerviosos, pero en otras ocasiones no somos conscientes y, por lotanto, no podemos hacer nada más que tratar de autorregularnos para no ponernos másnerviosos todavía.

Ahora que ya nos vamos conociendo, tengo que sincerarme contigo: he cogido unvaso de agua y un trocito de chocolate. Te voy a contar un pequeño secreto. Cuandohicimos la primera compra para el confinamiento le dije a mi mujer que papel higiénicono sé, pero que chocolate no podía faltar, y así fue. Cuando llegó la primera compra acasa, tenía un buen repertorio de chocolate a mi disposición. Ya sé que no es lo mejordietéticamente hablando, pero, una vez más, tan solo somos humanos, imperfectos, enuna desigual lucha por ser mejores; víctimas, a veces, de nuestras pasiones y miserias;valedores, otras, de nuestras virtudes y talentos. Y en ese ir y venir de lo ideal a lo realva pasándonos el confinamiento y la vida.

Sí, esas ganas que tienes de comer de manera compulsiva, sin hambre, esa especie deimpulso incontrolable, también tiene una explicación y un responsable: tu estado deansiedad. Algunas personas pierden el apetito; otras, como yo, todo lo contrario. Alcomer se activa el proceso digestivo, y al movilizarse la sangre hacia el estómago eintestinos nuestra mente se relaja un poco. Es un mecanismo simple: nuestro cerebro seha quedado sin sangre, sin nutrientes, sin oxígeno y, por lo tanto, nuestro hámster nopuede seguir el mismo ritmo frenético que le dicta un sistema nervioso estresado,hiperactivado y angustiado…

No te culpes por sentir ansiedad. No tiene nada que ver con que seas fuerte o no. Laansiedad que sientes está plenamente justificada. Vivimos momentos inciertos, de unimpacto elevado, que tendrán repercusiones negativas en nuestra economía, salud, vidasocial y familiar. Es humano sentir miedo ante un futuro que no pinta muy boyante.

Por si eso fuera poco, además, estamos sufriendo una concatenación de elementosestresantes importantes. Vivimos confinados sin poder salir a la calle, con el buentiempo que empieza a hacer, en casas que no están preparadas para vivir en ellasveinticuatro horas al día un día tras otro; compartimos casa con personas que están igualo más agobiadas que nosotros, con unos niños a los que les hemos roto sus rutinas porcompleto; quizá estemos solos, en una casa que se hace enorme, a kilómetros dedistancia de nuestros seres queridos, sufriendo por ellos, sin poder tenerlos cerca, sinpoder salir a la calle.

Además tenemos que aguantar todo el bombardeo mediático de noticias, números,indicadores, curvas y demás datos que nos ponen de los nervios. Damos por ciertas

18

Page 19: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

noticias falsas que solo buscan un clic, tenemos que discriminar qué creer y qué ignorar,nuestros amigos y familiares inundan nuestros móviles con más datos y noticias, y tantainformación no se puede gestionar.

Algunas personas tienen familiares, amigos y seres querido de alto riesgo cerca, porlo que el tema se complica mucho más. El miedo, la culpabilidad y la incertidumbre sesuman a esta concatenación de elementos que nos generan estrés.

Finalmente quiero hacer una mención especial a todas aquellas personas que hanperdido a un ser querido en unas condiciones tan extrañas y traumáticas, sin poderdespedirse, sin poder cuidarlo, y a todas las personas que tienen miedo de perder supuesto de trabajo o que ya lo han perdido por culpa de un despido o que se han vistoafectadas por un ERTE.

Querido lector, estamos en la tormenta perfecta para sentir ansiedad en algúnmomento u otro, si no a todas horas.

Pero sigamos avanzando en nuestro día a día confinados. ¿Qué nos pasa después deno haber dormido en toda la noche? Pues que por la mañana suena el despertador y nonos podemos levantar. Nos faltan la energía, la motivación y las ganas. Es normal. Esoes un síntoma de ansiedad y también de depresión. Esa falta de energía puede estarprovocada por el agotamiento que supone andar pasados de vueltas todo el día, perotambién puede causarlo la falta de un incentivo externo que nos motive a salir de lacama.

Si te paras a pensar, todos los días son iguales, no podemos hacer nada para controlarla situación, en cuanto pongamos un pie en el suelo estaremos enganchados al teléfono,pendientes de las noticias, y nos pondremos de los nervios. Desde la misma cama,nuestro cerebro anticipa otro día igual que el anterior, otro día más confinados y, claro,ante este panorama, unido al sueño agitado y poco reparador que hemos tenido, lo quemenos nos apetece es levantarnos dando un salto mortal e ir dando volteretas hasta elbaño, como decía aquella canción de la movida madrileña.

Finalmente hacemos acopio de fuerzas y conseguimos levantarnos. Tomamos café, téo cualquier cosa con cafeína que nos pueda ayudar a espabilarnos, sin saber que enrealidad supone un gran error. Nuestro sistema nervioso ya está suficientementeactivado, en realidad está hiperactivado y pasado de vueltas, así que si lo seguimosestimulando con excitantes estaremos complicándolo todo aún más.

Decidimos comer algo a ver si nos vienen las ganas de vivir. Desayunamos con elmóvil al lado, mirando las noticias. En realidad ya las hemos estado mirando desde lacama durante un buen rato, durante todo el rato que hemos estado tratando de

19

Page 20: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

levantarnos. De nuevo una conducta compulsiva más. ¿Te has parado a pensar la deveces que consultas el móvil durante todo un día?

Ante la ansiedad solemos observar tres tipos de respuesta: la compulsiva, laimpulsiva y la evitativa. La respuesta compulsiva se caracteriza por realizar de manerarepetitiva una acción, comportamiento o pensamiento, como mirar el móvil, comer,fumar o consultar las noticias sin parar. La respuesta impulsiva consiste en realizar unaconducta de manera no pensada y espontánea, como picar algo cada vez que pasamospor la cocina, gritarle al perro o empezar a hacer flexiones en el comedor. Finalmente, laconducta evitativa tiene como objetivo evitar todo aquello que crees que te generaansiedad, como, por ejemplo, mirar los correos pendientes del trabajo, estar con tus hijoso volver a casa directamente después de haber realizado la compra.

Solo somos humanos y es humano todo lo que te pasa. El problema es que con lasintomatología psicológica pareciera que si no la controlamos es porque somos débilesde carácter, poco disciplinados o demasiado sensibleros. Trata de imaginarte que te hashecho un corte en un dedo; nadie te va a criticar porque no laves los platos o porquetengas dificultades para abrocharte los botones de la camisa. En cambio, cuando nossentimos estresados, angustiados, tensos, tristes o con miedo, además de sufrirlo,tenemos que lidiar con la presión externa de que somos unos blandos y con la presióninterna que nosotros mismos nos autoimponemos de que deberíamos ser capaces decontrolar lo que sentimos. ¡Pues no! Desde aquí reivindico la libertad para sentir, seaalgo bonito o algo negativo, sabiendo que, en cualquier caso, siempre es real.

Ya desayunados, ¿qué hacemos durante toda la mañana? Pues procrastinar, y no esporque no sepamos qué tenemos que hacer; de hecho, tenemos muchas cosas que hacer.Si estás teletrabajando, posiblemente tengas un montón de trabajo, pero también puedeque tu mente no te responda; es como si no funcionara, sé lo que es. Hay días en los quea mí también me pasa.

Nos levantamos y nos ponemos otro café. Seguimos estimulando nuestro sistemanervioso. Van pasando las horas y no avanzamos. De nuevo esa incapacidad paraconcentrarse es culpa de la ansiedad o de la tristeza. La ansiedad y la depresióncomparten algunos síntomas. A menudo van juntitas de la mano. Siempre suele llegaruna antes y con el tiempo se acopla la que falta en la fiesta.

Decidimos parar a comer. Hay quien no come, deglute rápida y compulsivamente.También hay quien no come ni deglute, ya que tiene el estómago cerrado. Decidimosmirar un capítulo de nuestra serie preferida para distraernos un poco, para relajarnos,para entrar en esa especie de trance que nos permite desconectar, esperando poder volver

20

Page 21: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

a conectar con lo que tenemos que hacer y nos importa, pero no lo disfrutamos. Mientrasel protagonista de nuestra serie explica algo de sumo interés, estamos con el móvil en lamano pasando el feed de cualquier red social. Seguimos sin poder fijar nuestra atención.

Nuestro cuerpo está tenso, nos mordemos las uñas, las piernas no paran, nos duele laespalda, empezamos a tener eccemas, parece que nos ataca un herpes en los labios,tenemos la barriga hinchada, en parte por comer mal, en parte por los nervios, y todoesto que nos sucede, de nuevo, es por culpa de la ansiedad, el miedo, la inseguridad o unestado emocional negativo e intenso.

Cuando sentimos ansiedad es como cuando llevamos un coche pasado derevoluciones. Si lo mantenemos así mucho tiempo, se acabará rompiendo por algunaparte. Quizá sea el motor, la transmisión o el tren de rodaje. No siempre podemospredecir por dónde se romperá, pero siempre sabemos que se romperá por el eslabón másfrágil de la cadena.

De la misma manera que ocurre con el coche, la ansiedad provoca que alguno denuestros grandes cinco eslabones se rompa. El primero de los eslabones es el sistemacardiovascular. Cuando la ansiedad aprieta, aparecen problemas de circulación, infartos,presiones altas, etcétera. El segundo de los eslabones es el sistema esquelético motor, ylos síntomas que nos provoca el exceso de tensión son dolores articulares, contracturasmusculares, mialgias, etcétera. Seguimos con el sistema digestivo, y sus señales son enforma de úlceras, intestino irritable, malas digestiones, distensión abdominal, etcétera.Seguimos con la piel, el órgano más grande de todos y el más sensible a nuestro estadoemocional: eccemas, psoriasis, picores y dermatitis nos indican que estamos estresados.Finalmente nos queda el sistema inmunitario, que es altamente sensible a nuestro estadoemocional. Sí, la ansiedad nos baja las defensas, altera el correcto funcionamiento delsistema inmunitario y abre la puerta a un sinfín de enfermedades, virus y bacterias.

Cuando nuestro cuerpo se manifiesta mediante estos síntomas, deberíamos darnoscuenta de que lo que estamos considerando normal en realidad no lo es, de que estamospasados de revoluciones y de que tenemos que hacer algo para tratar de compensarnuestro estado emocional.

Además, la ansiedad no ataca únicamente y de manera aislada a nuestro cuerpo, sinotambién a nuestra mente de muchas maneras. Bajo la tiranía de la ansiedad nos volvemosmás intolerantes, pensamos peor, no podemos concentrarnos y aparecen la inseguridad,la amenaza y el miedo, el terrible miedo.

La ansiedad abre la puerta a un miedo difuso, miedo a todo y a nada, a todo lo quepodría ser, a todos los peligros que nos están acechando; un miedo irracional que nos

21

Page 22: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

limita y condiciona, un miedo que genera más ansiedad y la ansiedad más miedo, y así seperpetúa este círculo vicioso, hora tras hora, día tras día.

El miedo tiene una clara función adaptativa, ya que gracias a la experiencia del miedoseguimos vivos y adquirimos un aprendizaje que nos permite responder adecuadamenteal peligro, así como mantenernos alejados del mismo.

Pero con el miedo pasa como con la sal. Cada plato tiene su punto de sal. Tanto elexceso como el defecto pueden arruinarnos un plato; a cada comida, su dosis justa de sal.Pues con el miedo pasa igual. De hecho, el miedo en sí no es malo; es, incluso,necesario, pero, como ocurre con la sal, poco es malo y mucho también.

La horquilla adaptativa del miedo es muy estrecha. Si tenemos poco miedo viviremosuna vida temeraria sin tregua para nuestros ángeles de la guarda; en cambio, si vivimosuna vida con exceso de miedo estaremos muy limitados.

En la situación en la que estamos, tener poco miedo nos perjudica a todos, ya que nosolvidamos y pasamos de cumplir las pautas de protección y profilaxis que tantonecesitamos, provocando que las consecuencias de nuestra temeridad acabenperjudicando a muchas más personas de las que imaginamos y alargando este estado deconfinamiento.

El miedo siempre está acechando, esperando a que estemos bajos de defensas paratomar el control. A veces hay algún estímulo real y físico que nos provoca miedo, comopor ejemplo recibir un burofax de nuestra empresa; pero otras veces el miedo no necesitanada más que un recuerdo o la imaginación para tomar el control de nuestra vida ydejarnos temblando en un rincón.

Tienes que saber una cosa más: el miedo es altamente contagioso. ¡Mucho más que elcoronavirus! Basta una mirada, una palabra, una imagen para que contagies a laspersonas que tienes cerca. No olvides que tu pareja, tus amigos, tus familiares o tus hijosestán mirándote continuamente. Basta con que vean la inseguridad y el miedo en tus ojospara que se contagien.

Así, más o menos, saturados de emociones negativas y ligeramente aderezados conalgunas emociones positivas, van pasando los días de una persona confinada.

La combinación de emociones que estamos sintiendo estos días es compleja. Ademásdel miedo o la ansiedad, hay otra emoción que está compitiendo por alcanzar losprimeros puestos en popularidad: la tristeza.

Una profunda tristeza por algún ser querido que hemos perdido. Una tristeza seca quenos corroe por dentro, que nos roba la energía y que nos deja con una terrible sensación

22

Page 23: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

de impotencia; una tristeza que nos deja llorando por los rincones, sumidos en el silenciomás sórdido y que nos aísla del mundo, de los seres queridos y de la vida.

Una tristeza que nos pone al límite. Una tristeza por la pérdida cruel de una personade la que ni tan solo nos hemos podido despedir, o la tristeza que sentimos ante un futurosin trabajo, en plena crisis mundial y sin ningún tipo de ayuda.

Tristeza por sentirnos solos, por estar confinados en soledad y por no recibir ningunamuestra de apoyo o de cariño. Una tristeza que, además, llevamos en soledad, ya que nopodemos compartirla con nadie.

La principal característica de la tristeza es que nos roba la energía vital y nos dejatirados en la cama, sin fuerzas, sin saber qué hacer ante un futuro que se prevé oscuro ytenebroso, sin esperanza, sin capacidad para incidir en él. La tristeza es abatimiento,desesperanza e incapacidad para levantar la cabeza.

Como has podido ver, todo lo que te pasa tiene nombre. Pero déjame que te cuenteuna cosa más. Es posible que además de todo lo que hemos comentado también sientasemociones positivas. Más que normal, sería incluso deseable.

El problema es que las emociones negativas, en estado de confinamiento o detensión, te vienen a visitar ellas solitas, sin permiso, sin que las invites. En cambio, lasemociones positivas requieren de tu llamada, de tu planificación y de tu búsqueda activa.Como no invites a la alegría a que venga a visitarte, será muy difícil que la puedasexperimentar.

Uno se cree que esto del estado de ánimo es como una especie de dimensióncategórica en la que en un extremo está la felicidad y en el otro la tristeza, en un extremoestaría la calma y en el otro la ansiedad. Pues no, el tema no va así.

La alegría es una emoción con su propia dimensión que puede ir desde cero o bajaintensidad hasta cien o elevada intensidad y que puede convivir perfectamente con latristeza, que puede ir a su vez de baja a alta intensidad. Así pues, podemos estar tristespor la pérdida del trabajo, pero disfrutar de un efímero momento alegre al jugar connuestros hijos; podemos sentir un nivel elevado de ansiedad, pero relajarnos con un bañode agua caliente, o sentirnos inseguros y faltos de motivación, pero venirnos arriba conuna magnífica tarta casera en la que hemos estado trabajando toda la tarde.

Y esa, querido confinado, es la clave para mantener la cordura y el equilibrio en estasituación: buscar emociones positivas de signo contrario a lo que estamos sintiendo.Durante todo el libro te iré dando esas claves, no te preocupes. Lo que ahora me ocupaes que te des cuenta del estado de ánimo que tienes y de la necesidad de incluir, demanera buscada, premeditada y proactiva, emociones positivas en tu día a día.

23

Page 24: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

No es momento para hacerse el fuerte, ni para ignorar los mensajes que nuestrocuerpo, mente y emociones nos dan. Uno solo puede rectificar el rumbo si es capaz dever qué rumbo está llevando y analizar si es el correcto o no.

No te preocupes, lo que estás sintiendo ahora mismo tiene nombre, no te asustes. Sí,ya sé que posiblemente sea algo que no has sentido nunca, pero quizá es porque nuncaantes habías estado confinado…

No lo olvides…

La ansiedad suele cursar con insomnio.La tensión provoca dificultades para concentrarse y favorece la procrastinación.Comer por impulso, evitar volver a casa o fumar compulsivamente son respuestas aun exceso de estrés.La ansiedad, la tristeza, el miedo o la inseguridad que sientes están plenamentejustificados por la situación que estamos viviendo.No te culpes por lo que estás sintiendo, es humano y normal.Pon nombre a tus emociones, toma conciencia de tu estado emocional.Atiende a los mensajes y señales que te está mandando tu cuerpo en forma desíntomas somáticos y cognitivos.Las personas con las que te relacionas también están tensas.La horquilla adaptativa del miedo es muy estrecha.El miedo es altamente contagioso.Incluye emociones positivas en tu día a día para compensar la saturación deemociones negativas.Sé comprensivo contigo mismo y con los demás.No es el momento de hacerse el valiente o el fuerte ignorando lo que sientes.No te culpes, castigues o preocupes por lo que estás sintiendo, tan solo atiéndelo.

24

Page 25: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

3

Cuídate, eres importante

Empiezo a escribir este capítulo el miércoles 7 de abril. Ya no sé cuántos días llevamosconfinados. Vuelvo la mirada atrás y recuerdo todas las actividades y la agenda repletade clases dirigidas, Instagram Live, conexiones en directo y entrevistas a personalidadesde la primera semana de confinamiento.

Aquella primera semana de confinamiento tuve la impresión de que habíamos salidoal sprint. Quizá no teníamos una expectativa adecuada, quizá queríamos pensar que estode la pandemia no era para tanto o que tendríamos una vacuna milagrosa en un tiemporécord.

Con el tema del coronavirus tengo muy claro que esto es una carrera de fondo, deesas largas, de muchos kilómetros, y si alguna vez has hecho alguna, sabrás que en todacarrera de fondo necesitamos unos avituallamientos. Como corredor y atleta de fondo tepuedo decir que si quieres llegar lejos no puedes ir rápido, ni salir al sprint; así que,como corredor de fondo y psicólogo de fondo, me permito darte algunos consejos.

El primero es que no confundas resistir con aguantar. No es lo mismo. Siguiendo elejemplo de la carrera de montaña, o una excursión, hay una analogía muy clara. Cuandovas de excursión a la montaña tienes que resistir una serie de situaciones, como porejemplo el desnivel, el recorrido, la distancia, etcétera. Pero a veces aguantamos algunascosas que no deberíamos aguantar. Algunas personas aguantan el dolor por culpa de unasmalas botas, aguantan el peso de una mochila mal preparada y sobrecargada de cosasque no necesitan, aguantan el sol en la cabeza por no pararse a sacar un sombrero de sumochila (sí, has leído bien, ¡lo tienen, pero no lo sacan para no perder tiempo!) oaguantan el calor por no parar a refrescarse en un torrente o un lago de montaña.

El problema es que, cuando estamos en una carrera de fondo, como es esteconfinamiento, confundimos el esfuerzo con el sufrimiento. Confundidos y cansados,

25

Page 26: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

nos acostumbramos a sufrir, a cargar y a aguantar cosas, rutinas, relaciones ypensamientos que no son necesarios.

Estamos saturados, haciendo algo que no conocemos, que incluso nos sobrepasa, yclaro, ante tal embotamiento emocional, nuestra capacidad de análisis se ve mermada yacabamos cargando con cosas con las que no tendríamos que cargar.

Por ejemplo, tener que resistir en casa sin salir a la calle es algo que tenemos quehacer claramente, sin duda alguna; pero aguantar sin chocolate, en mi caso, no tienesentido, ya que puedo encargarlo online o ir a comprarlo a cualquier tienda o gasolinera.Tenemos que focalizarnos en resistir únicamente aquello que tiene que ser resistido, yaque nuestra fuerza y resistencia son limitadas y no podemos perderlas aguantando cosasque no tienen que ser aguantadas.

Resistir la tentación de ir a dar un paseo es lo que debemos hacer, pero soportar sinsalir a que nos den unos rayos de sol en la ventana o el balcón no tiene ningún sentido.

Es decir, confinados, sí, pero con todo el confort que nos resulte posible. No hay quesufrir por sufrir. Es más, se trata de compensar al máximo ese sufrimiento para poderregenerarnos y seguir conservando nuestras fuerzas y energías. Existen condicionantesque no pueden ser cambiados, ni tan solo podemos incidir un ápice en ellos, pero para elresto, vida normal o incluso vida optimizada.

Jamás olvidaré un episodio de algo que he dado en llamar enfurruñamientoemocional. Ya sé que no es un nombre muy técnico ni con glamur, pero ilustra a laperfección lo que le pasó a Alfonsito. Estaba yo jugando en un parque con mi hija,cuando de repente escuché unos gritos estremecedores, algo así como si le estuvieranarrancando las uñas, una a una, a un niño.

Claro, lógicamente, me giré sobresaltado para tratar de salvar a ese pequeño de tanmagno sufrimiento y cuál fue mi sorpresa cuando todo el problema era que Alfonsitoquería un bocadillo de chorizo y su desventurada madre había cometido el terrible errorde prepararle uno de jamón.

Alfonsito estaba tan enfurruñado emocionalmente que no atendía a razones. Nada, siel bocadillo no era de chorizo no quería nada. Su madre le decía una y otra vez que nofuera tonto, que el de jamón también le gustaba mucho.

Total, que en una de estas discusiones, Alfonsito le da un manotazo a su madre y tiraal suelo el bocadillo, que se desmonta completamente y deja ver que era un magníficobocadillo de jamón. «Pero, mamá, ¿por qué no me has dicho que era un bocadillo dejamón?», le dijo, y volvió a gritar con más rabia a su desconsolada madre: «Mira, lo hastirado, ahora me he quedado sin bocadillo por tu culpa».

26

Page 27: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Pues sí, a veces nos enfurruñamos emocionalmente y reaccionamos de la peormanera posible, perdiendo oportunidades magníficas. Es algo así como una especie detontería supina en la que entramos en espiral y no hacemos más que cometer unaestupidez tras otra.

Si Alfonsito hubiera atendido a su madre, no se habría quedado sin bocadillo yademás se habría ahorrado el disgusto.

Cuando nos da este enfurruñamiento emocional, necesitamos que alguien desde fueranos lo haga notar. Cuando adoptamos la decisión de aguantar por aguantar y cuandopensamos que a esta vida hemos venido a sufrir, está claro que hemos perdido laperspectiva y que no estamos pensando adecuadamente.

Nosotros a lo nuestro, pero la gente a nuestro alrededor nos mira como diciendo:«Pero qué le pasa a Alfonsito, que se va a quedar sin bocadillo; pero por qué no saca lagorra de la mochila, por qué no se compra un par de tabletas de chocolate, por qué noaprovecha para hablar por videoconferencia, por qué no se quita la ropa y aprovecha paratomar el sol… Nosotros, en consecuencia, deberíamos ser capaces de tener la humildadnecesaria como para plantearnos si lo que nos están diciendo tiene sentido y si podemoshacerles caso. Ni más ni menos.

No siempre tenemos la mente clara, ni podemos creernos lo que estamos sintiendo opensando, y es justo en esos momentos cuando nos viene la mar de bien una ayudaexterna que nos permita recuperar la perspectiva y romper ese enfurruñamientoemocional.

Otro de mis consejos para gestionar esta pandemia y el confinamiento es que tengascuidado con la «fiebre del objetivo». Ya llevamos algunas semanas confinados y hemospodido observar que nuestro objetivo de perder peso, ganar músculo, teletrabajar,escribir un libro, aprender un idioma o tocar la guitarra como Slash no va a ser posible.

No pasa nada, reajústalo. Posiblemente te lo fijaste en un momento de subidón. Laintención era buena, desde la teoría se veía bien, pero en la práctica la realidad es otra.La carrera va avanzando, tú también vas avanzando, coge un ritmo con el que te sientascómodo y sé capaz de adaptarlo a las diferentes necesidades que irán surgiendo.Volviendo a las carreras de montaña, no podemos ir a la misma velocidad en las subidasque en el llano o en las bajadas; no podemos correr igual de sueltos en un sendero que enuna trialera repleta de piedras. Y eso ni más ni menos es lo que nos está pasando entodas estas semanas que llevamos de confinamiento.

No podemos ir siempre a tope. Tampoco tiene sentido que cumplamos nuestroobjetivo a cualquier precio. Sí, ya sé que tienes que entrenar dos horas al día en el

27

Page 28: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

rodillo, pero si resulta que tu pareja necesita desconectar, pues quizá puedes aplazar tusesión de ejercicio para más tarde o incluso anularla.

Nuestro tiempo no debería estar a merced de cualquier persona y sus prioridades,pero tenemos que ser suficientemente flexibles como para poder levantar el pie delacelerador o no sacrificar según qué para conseguir llegar a nuestra meta.

Intenta que tus objetivos sean compatibles con los objetivos de las personas quetienes cerca. Mira, sin ir más lejos, mi meta ahora mismo es poder terminar este libro atiempo para no retrasar a todo mi equipo editorial, formado por mis editoras, correctorasde estilo, maquetistas y un largo etcétera de personas que están esperando recibir mimanuscrito el 14 de abril a más tardar.

Pero resulta que comparto casa con mi mujer y sus objetivos, necesidades yprioridades, y con mi hija y sus objetivos, necesidades y prioridades. Esta tarde teníaprevisto dedicarla a escribir, pero hace algunos días tuvimos un susto de salud muyimportante con mi mujer, nada que ver con el coronavirus, pero un gran susto.

Esta tarde, Núria necesitaba que estuviera a su lado, junto a mi hija, y muygustosamente he accedido, encantado y bien alegre. Ahora mismo son las once de lanoche, ya duermen y yo retomo mi cita contigo. Sé flexible con tus metas y ten en cuentalos objetivos, necesidades y prioridades de las personas que conviven contigo.

Otro de mis mejores consejos es que encuentres salida para tus emociones. Noacumules, comparte, exprésate, libérate. Puedes hacerlo de muchas maneras, puedeshablar con alguien, escribirlas en un diario o simplemente hacer un dibujo. El medio queutilices me da absolutamente igual siempre que no pierdas de vista el objetivo: noacumular tensión y darle salida en pequeñas dosis.

La creatividad, la plástica, el bricolaje, la música o la escritura son grandes canales dedescarga emocional. Yo, particularmente, escribo; mi mujer disfruta haciendomanualidades y mi hija bailando. Cada uno tiene su vía de salida. Se trata, en definitiva,de aligerar la tensión acumulada. ¿Y tú? ¿Cuál es la tuya? No seas exigente con elresultado, se trata de descargar, de liberar, de expresar y de sentir; lo de menos es siqueda bonito o no. ¿No sabes cuál es tu vía de descarga? Pues no pasa nada, explora,experimenta y prueba. Estoy seguro de que te vas a sorprender.

Sigo con mis consejos. Este es muy importante: cuida de ti mismo y de las personas alas que quieres. Pero vamos por partes. Fíjate en que lo primero que he dicho es quecuides de ti mismo. Tú eres importante para ti mismo, así que te mereces que te mimen,cuiden y traten con respeto. Puedes esperarlo de algunas personas, quizá en algunasocasiones, pero con quien siempre debes contar es contigo mismo.

28

Page 29: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Me llevan los demonios cada vez que escucho a alguien que dice «Pero mira que soytonto». No nos podemos hablar así, ni tratarnos de esta manera. Necesitamos mimarnos,cuidarnos y tratarnos con respeto, ya que lo que nos decimos, el tiempo que nosdedicamos y el que no nos dedicamos, lo que hacemos y dejamos de hacer influyen ennuestra calidad de vida.

No tengas miedo de caer en el narcisismo, ni mucho menos, ni en un hedonismoexagerado; lo que te estoy proponiendo no es que te adules sin parar y pienses que eresguapo, alto, joven y rico como aquel famoso futbolista. Lo que te estoy proponiendo esque te respetes, que contemples tus necesidades y que busques un tiempo y un espaciopara ti.

Crea tu oasis de bienestar, tu burbuja de calma, un búnker para tus retiros o ungenerador para recargarte… Siempre metafóricamente hablando, claro, no sea que vayasa meter los dedos en el enchufe para recargar tu energía. Yo tengo tres oasis de bienestar.El primero que disfruto cada día es a primera hora de la mañana. Soy muy madrugador yese rato hasta que se levantan mi mujer y mi hija me permite conectar y desconectar a lavez. Gracias a esas horas en la oscuridad, en silencio, me siento productivo y libre,inspirado y liberado.

El segundo de mis oasis de bienestar tiene lugar en forma de siesta. No la hago cadadía, tampoco es larga, no suele durar más de diez o veinte minutos. Durante ese ratopuedo dormir, pero también puedo navegar, consultar un libro, mirar las redes sociales osalir al balcón. Hoy, por ejemplo, me he quedado dormido apenas cinco minutos y me hepasado unos diez minutos más mirando los chistes que me ha enviado mi cuñado molón.

El tercero de mis oasis está en los juegos de sobremesa. Tenemos varios, ya que cadaaño para Reyes nos regalamos uno. Ese ratito en el que estamos todos juntos jugando meda la vida y a la vez la calma que necesito.

¿Y tú? ¿Tienes un oasis de bienestar? No es cuestión de cantidad, sino de calidad; noes cuestión de estar solo o estar acompañado, es cuestión de que hagas algo que tepermita desconectar y conectar.

Ahora que ya hemos hablado de ti es el momento de hablar del bienestar de laspersonas que amas. No hay nada que genere tanta ansiedad como ver que tus seresqueridos lo están pasando mal. De la misma manera no hay nada que reconforte más quepoder ayudar a que tus seres queridos tengan más calidad de vida y bienestar emocional.

La relación está clara y esa es mi propuesta, que en vez de preocuparte por elbienestar de tus seres amados, te ocupes de facilitarles las mejores alternativas. Creerásque es una tarea ardua y compleja, pero no siempre requiere de grandes esfuerzos. Una

29

Page 30: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

llamada, un abrazo, preparar una merienda, dibujar un rato juntos, charlar con una tazade café, de caldo o de chocolate, estar en silencio uno al lado del otro, sin móviles, sinlibros y muchos otros gestos son capaces de calmar a un corazón agitado y dar paz a unamente inquieta y angustiada.

Todo lo que he dicho puede ser real o virtual. Enviar esa foto por correo electrónico,tomarte el café mientras realizas una videollamada, o ir a buscar un cojín y abrazarlosimultáneamente, son ejercicios que ayudarán a las personas queridas en la distancia.

Además, cuidar de las personas tiene un beneficio muy claro sobre nosotros mismos,y es que desvía nuestra atención de todos nuestros problemas, miedos y fantasmas ypone nuestro foco en algo externo, constructivo, de utilidad y altamente reforzador.Cuando nos miramos demasiado, corremos el riesgo de imaginar cosas, dar rienda sueltaal pesimismo y entrar en caída libre.

Así que, ya lo sabes, cuídate y cuida, y podrás llegar más lejos y más descansado.Vivimos momentos duros y no siempre podemos estar encantadores. No somos más

que simples mortales, con nuestras virtudes y nuestras miserias, con nuestros talentos ynuestras limitaciones, con nuestros momentos top y nuestros momentos pésimos.

Es posible que durante estos días se haya escapado alguna bronca, quizá te has hechoel loco para no quedarte con los niños o simplemente has simulado que estabastrabajando cuando en realidad estabas navegando por internet o mirando un capítulo detu serie preferida.

No pasa nada, ha sido un momento de enajenación mental transitorio y estoy segurode que cuando has recuperado la calma y la perspectiva lo has lamentado. Por otro lado,estoy seguro de que a tu pareja le ha pasado algo parecido en algún momento, compartascasa con ella o esté en la distancia, así como a amigos y familiares.

Sea como fuere, no te enfades con ellos, en primer lugar porque son tan humanoscomo tú y en segundo lugar porque un enfado no va a hacer nada más que complicar lascosas. Si quieres cuidarte tienes que ser capaz de perdonarte y de perdonar, sí, nada deculpas ni de resentimientos. Cada uno hace lo que puede, y poder hablar de ello libre deculpa te va a permitir no tensionarte más y, en consecuencia, no necesitar más momentosde desconexión.

Simplemente aprende de lo ocurrido, ponle nombre y trata de no volver a repetirlo.Sin dramas. En definitiva, lo que ha pasado es un claro indicador de que vas pasado devueltas y de tensión.

El mejor mensaje de este capítulo es que te desahogues de manera planificada, queencuentres momentos para relajar la tensión, canales para comunicarte, personas con las

30

Page 31: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

que compartir y momentos para relajarte de manera activa.El diálogo interno que tienes es muy importante. ¿Eres consciente de lo que te dices?

Antes hemos visto la importancia que tiene que te trates bien, ahora es el momento devalorar los contenidos de tus pensamientos. ¿Cómo crees que va a ser el futuro? ¿Tienesun punto de vista optimista o pesimista? Mira, te propongo un ejercicio. Obsérvate condistancia, analiza lo que piensas como si de una película se tratara. ¿Estás viviendo en unmusical? Como dice mi hija —le encanta cantar e interpretar—, ¿estás viviendo en unmelodrama de los más dramáticos y tristes que te puedas encontrar? ¿Tu vida es unacomedia? ¿Es una peli de acción? ¿Un thriller?

Esto, que parece una broma, en realidad va muy en serio, ya que según sea tupelícula, así le darás instrucciones a tu cerebro para que filtre los estímulos a los que va aatender, cómo los va a procesar y qué va a concluir. Vivimos según creemos. Un ruidoen la oscuridad de la casa puede ser una amenaza para alguien que vive un thriller y algoirrelevante para alguien que vive un documental.

Si nos sentimos con baja autoestima y creemos que la gente nos menosprecia,veremos señales de menosprecio por doquier, a pesar de que sean reales o no. Sisentimos miedo veremos amenazas por todos los lados, incluso en las buenas noticias.Sí, la manera en que te tratas da instrucciones inequívocas a tu mente para interpretar loque te pasa y lo que no te pasa.

Quizá podrías parar y realizar un balance de cómo estás… Pero siendo realista, sinjugar a ser un superhéroe o a que puedes con todo. Mira, en las carreras de montaña hayuna situación que suele ser habitual. Si alguna vez decides hacer una, has de saber que enalgún momento te entrará una piedra o darás alguna pisada rara que provocará que se temueva el calcetín. Si ya has hecho alguna, estoy seguro de que sabes de qué hablo.

Cuando te entra la piedra o se te arruga el calcetín, la gente suele hacer dos cosas.Parar, perder un minuto, ponerse bien el calcetín, quitar la piedra o curarse la ampolla, sies que ya ha salido, y seguir. Pero también hay otro tipo de personas que suelen pensarque no pueden parar, ya que estarían perdiendo tiempo. Esta triste historia sigue como tevoy a contar. Posiblemente queden una, seis o diez horas de carrera por delante. Por noparar se va haciendo una rozadura, ampolla o llaga. Al cabo de unos kilómetros el pie yaempieza a doler, por lo que se baja el ritmo y se cambia la pisada. Al cambiar la manerade correr, se empiezan a cargar algunos músculos.

Después de un buen rato con dolor deciden pararse. En esos momentos la llaga es dedimensiones considerables y ya no basta con ponerse bien el calcetín o quitar la piedra…Vamos, que con un poco de suerte tardarán el mismo tiempo que hubieran tardado si se

31

Page 32: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

hubieran parado a las primeras molestias, pero tendrán que sumarle el tiempo perdidopor no poder correr bien, más el tiempo extra para curar un pie más maltrecho ycastigado por el paso de los kilómetros.

¿Me he explicado? Pues eso, no aguantes, no te acostumbres a sufrir, no cargues másde lo necesario. Gestiona, cuídate, mímate y encuentra una salida a lo que sientes. Abrela puerta de tu bloqueo emocional para que entre la luz y puedas ver mejor a esosfantasmas que te atormentan, comparte lo que piensas para que otra persona pueda darteun nuevo punto de vista y puedas ganar en perspectiva, cuenta la película que te estásmontando en tu cabeza para que puedas ver que estás confundiendo la ficción con larealidad. En definitiva, dale una salida a tus emociones, cuídate y ponte en valor. Si no lohaces tú, ¿quién lo va a hacer?

No lo olvides…

No confundas resistir con aguantar.No confundas esfuerzo con sufrimiento.Confinados, pero con confort.No te acostumbres a sufrir.Compensa tus emociones negativas.Ten cuidado con la fiebre del objetivo.Regula tu estado emocional.Incluye descansos en tu carrera confinada contra la pandemia.Compatibiliza tus objetivos con los de las personas con las que convives.Da salida a tus emociones.No acumules, comparte, exprésate.Cuida de ti mismo.Cuida a las personas que amas.Crea tu oasis de bienestar.Desconecta para poder conectar de nuevo.Relaja activamente la tensión propia y ajena.Controla tu diálogo interno.Haz balance de cómo estás.No te acostumbres a sufrir.Valórate.Trátate bien.

32

Page 33: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

4

Acepta las nuevas reglas del juego

Las cosas han cambiado, quizá no para siempre, pero sí durante una buena temporada.Sí, ya sé que no es el cambio que hubiéramos preferido, pero la vida es así y hay queentonarla tal como viene.

Dicen que Darwin afirmaba que el animal capaz de sobrevivir y evolucionar era aquelque se adaptaba más rápido a las nuevas circunstancias, y eso, precisamente, es lo quetenemos que hacer: adaptarnos rápidamente a esta nueva situación. No hay más. En mitercer libro, titulado Wabi Sabi, 1 explico que el primer paso para crecer es laaceptación. Aceptar no significa que estés de acuerdo, ni tan solo que te guste el cambioque estás experimentando; aceptar algo supone tener claro que las reglas han cambiado yque tenemos que hacer algo efectivo para adaptarnos y, además, querido lector, cuantoantes aceptemos algo, antes podremos gestionarlo.

Tenemos que estar confinados. No hay más que aceptarlo. Tendremos una afectaciónde la economía mundial. No podemos hacer nada más que aceptarlo. El futuro quetenemos por delante es completamente incierto y volátil, y la única opción que tenemoses aceptarlo. Tenemos que aceptar muchas cosas, y cuanto antes lo hagamos, puesmucho mejor, ya que antes nos podremos poner a tratar de compensarlo, a gestionar loscondicionantes que tenemos o a intentar buscar soluciones efectivas a un nuevo contextoen rápida evolución.

Ante cualquier novedad o cambio, tratamos de hacer nuestras predicciones comobuenamente podemos. Algunos cambios sabemos que son a mejor, mientras que conotros tenemos la certeza de que van a ser a peor. Finalmente, somos incapaces depredecir cómo irán algunos cambios y valoramos que serán de evolución incierta oimpredecible.

Sin ningún tipo de duda, podemos equivocarnos en nuestras predicciones yconsiderar que un cambio de evolución incierta va a ser a peor, que un cambio a peor va

33

Page 34: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

a ser incierto o cualquiera de las combinaciones posibles.Cuando creemos que un cambio va a ser de evolución incierta o a peor podemos

elegir entre diferentes actitudes. Por un lado, existen los típicos negacionistas, quepiensan que no es para tanto. Legiones de negacionistas se dedican a ir de barbacoa enbarbacoa y de tertulia en tertulia, negando lo evidente y creyéndose más listos quecientíficos, analistas, entendidos y especialistas. Si te ves reflejado en ellos, no pasanada. Lo mejor que puedes hacer es negar que eres un negacionista, y así,automáticamente, por la ley de la doble negación, dejarás de serlo. Creo que me haquedado un poco complicado para ser una broma ligera, ¿verdad?

Si analizamos con más detalle el perfil negacionista, veremos que no se preocupa porlo que pueda pasar y, por lo tanto, tiene un montón de energía disponible para pasar todasu vida buscando datos que confirmen que está en lo cierto y tratando de ganar nuevosadeptos a la causa. La parte buena, oye, es que no se preocupan por nada y viven la marde felices; la parte negativa es que son muy pesados.

Cuando se trata de predecir qué es lo que puede pasar, nos encontramos con un perfilde personas que mezclan sus miedos con el análisis de la realidad. Para este perfil, elfuturo es algo así como una especie de The Walking Dead donde el virus acaba mutandoy provocando que nos convirtamos en zombis obsesionados con el papel higiénico.Andaremos con los brazos en alto de súper en súper a la búsqueda del papel de doblecapa. Este perfil percibe que no puede hacer nada para controlar la situación y prevé quetodo va a ir a peor, muy a peor, terriblemente a peor, ante lo que no puede hacer nadamás que resignarse y esperar que llegue su hora zombi mientras acumula papel de váter.

Somos muy malos tratando de predecir el futuro, por lo que también existe el perfilde personas que mezclan sus deseos con la realidad de tal manera que creen que todo vaa ir bien, que el Fondo Monetario Internacional empezará a lanzar billetes desde losaviones, que todos los países seremos amigos, cantaremos el «Cumbayá» y nosperdonaremos todas las deudas, ofensas y malgastos. Este perfil cree que no puede hacernada, pero no se estresa. Espera que una solución mágica lo arregle todo, y si no acababien es porque no es el final… Anda, creo que esta frase es de una película deBollywood… ¿Te suena? Para este perfil de personas su vida depende de la suerte yestán convencidas de que ya ha llegado su momento y de que la suerte está a punto desonreírles y agraciarlas, porque ellas lo valen…

Como has podido deducir, ninguna de las actitudes anteriores nos ayuda a aceptar larealidad, y es que la clave para aceptar un cambio o una nueva realidad es tener unavisión realista, un punto de vista humilde y analizar sin atenuantes, sin miedos ni

34

Page 35: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

esperanzas y sin distorsiones la realidad desnuda, por más cruda, injusta e incoherenteque resulte.

Nuestra manera de vivir ha cambiado y posiblemente siga cambiando. Puedes estarseguro de que nunca volveremos a disfrutar de nuestra incierta vida normal, o por lomenos no volveremos a vivir en la aparente normalidad en la que supuestamentevivíamos. No obstante, si te paras a pensarlo, ¿era normal la manera en que vivíamos?¿Quizá la normalidad en la que vivíamos es el problema? Bueno, que me voy con tantapregunta y no quiero quitarles el trabajo a los filósofos… Cada uno a lo suyo…

Si existe alguna clave efectiva para poder hacer un buen análisis y adaptarnosrápidamente a los cambios que estamos viviendo es tener un buen punto de partida, y esepunto de partida no es otro que la cruda y desnuda realidad y la aceptación de que algoha cambiado. Puedes hacerlo a regañadientes, incluso puedes quejarte, maldecir y culpara los dioses, al pangolín, a la sopa de murciélago o a las autoridades un buen rato, peromi mejor consejo es que te pongas manos a la obra rápidamente. Quejarse sirve de pocoo nada; en cambio, aceptar y ponerse a trabajar es mucho más efectivo. Pasa de la quejaa la acción.

Una vez aceptada la realidad, pasamos al segundo paso: nuestra percepción decontrol. A ver, vamos a ser claros, si me sigues en las redes sociales, ya sabrás por misreflexiones y vídeos en mitad de la montaña, ahora confinados, que lo que voy a decir esun tema que me preocupa y que suelo tratar de manera periódica. No lo podemos todo,no controlamos todo ni tan solo nuestra mente. Si quieres un ejemplo, te invito a que tecojas una botella de orujo, ratafía o vodka, a que te la bebas de un trago y a que intentessumar dos más dos mientras tratas de andar, si es que lo consigues. Pues eso, que nuestramente no lo puede todo, que el deseo no es suficiente para introducir el cambio ennuestra vida y que si quieres hacer algo de provecho, más vale que te pongas a trabajar.

No obstante, que no controlemos todo no implica que no podamos controlar algunascosas, y esa, querido lector confinado, es la verdadera sabiduría, saber discriminaraquello que podemos controlar de lo que no, aquello en lo que podemos incidir deaquello en lo que nada podemos hacer.

A nivel operativo, esto que acabo de introducir se traduce de manera muy clara en eldía a día: tenemos que dejar de preocuparnos para empezar a ocuparnos. No sirve denada preocuparse por el trabajo, ya que no está en nuestra mano que nuestra empresadecida hacer un ERTE o cerrar.

Pero que no podamos hacer nada, de nuevo, para controlar el ERTE de nuestraempresa no significa que no podamos hacer nada para compensar sus consecuencias.

35

Page 36: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Tratemos de transformar esa preocupación en una ocupación. Quizá podamos buscarnuevas oportunidades de trabajo, aprovechar la estructura de nuestra empresa paraproponerle al jefe que, en vez de importar el producto que importábamos, nosdediquemos a importar mascarillas —este es un ejemplo real que se ha puesto enpráctica, y la persona que temía por su puesto de trabajo ha pasado a liderar el nuevoproyecto—. Mira, otro ejemplo real es el de una persona que dejó de preocuparse portener que cerrar su restaurante a ocuparse de transformarlo para poder servir comida adomicilio, o el de una empresa que hacía gorros que ha decidido buscar un materialnuevo y diseñar algo así como un ligero y transpirable pasamontañas para proteger a lossanitarios.

Sé que este ejercicio de creatividad y de reinvención no es sencillo, fácil ni banal,pero es la única alternativa que tenemos. Voy a intentar ayudaros a poder realizarlo.

Lo primero que tenemos que hacer es desaprender todo lo aprendido. Bueno, todo,todo, no. ¿A qué me refiero con desaprender? Pues mira, siempre hemos hecho las cosasde una manera determinada, nuestra vida siempre ha sido igual y, por lo tanto, siemprenos hemos planteado que había menos alternativas de las que realmente hay. Quizáhemos tenido que afrontar algunos cambios en nuestra vida, pero para la mayoría de laspersonas ese abanico no suele ser muy variado o amplio, es decir, solemos descartaralgunas alternativas sin contemplarlas, por lo que no entran en nuestro campo deatención ni de posibilidades viables.

¿Qué pasa? No me leas así… Si hasta a mí me ha pasado, ¡no te va a pasar a ti! Si mepreguntas te diré que no hay persona más adaptable y flexible que yo. He cambiado deresidencia siempre que lo he necesitado, he trabajado en un hospital, en medio de lamontaña, como consultor de empresa, dando conferencias, escribiendo libros y dandoclases en la universidad. Pues mira, en diciembre me di cuenta de que era un carca rígidoy lento de reacción, especialmente en el terreno profesional.

Siempre he defendido a capa y espada que las sesiones de psicología tenían que serpresenciales. Durante muchos años he estado haciendo mis sesiones en la montaña,andando, esquiando o en bicicleta. Durante todos estos años, muchas personas me hanpreguntado si realizaba sesiones online, ya que no se podían desplazar al Pirineo, y yo,inflexible y un poco tonto, siempre las he rechazado como purista ortodoxo defensor demi idea.

Pero, por un compendio de circunstancias relacionadas con la salud de mi mujer,pensé en hacer una prueba piloto a ver qué tal iba eso de hacer sesiones online. Pues oye,que tienen un montón de ventajas. No las hago al uso, como con todo lo que hago —no

36

Page 37: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

me preguntes cómo preparo la paella—, pero la verdad es que la distancia y la asincroníapermiten trabajar de una manera más profunda y mirar y remirar lo trabajado, lo quefavorece tremendamente la asimilación. Además, el ritmo de trabajo es más pausado, elvolumen de contenidos más dosificado y estos se pueden recuperar en cualquiermomento.

Cuando realizo una sesión en la montaña, la experiencia es magnífica, sin duda, peroel volumen de contenidos es muy elevado, el ritmo muy intenso y siempre acecha elmiedo a no acordarse de todo o a perderse algunos matices. En cambio, una sesiónonline cubre todas estas limitaciones de manera óptima.

Pues ya me tienes pidiendo disculpas una por una a todas las personas que me lopidieron en su día. Todavía me quedan unas cuantas. Si te sientes reconocido, te llegaráun correo electrónico mío. Aquí me tienes, algunos meses después, disfrutando de cadaproceso online tanto como lo hago —hacía, por culpa del confinamiento— con losprocesos en el Pirineo. Pues eso, tienes que estar dispuesto a desaprender, a revisar tusdogmas, a cuestionar y ver cómo se tambalean tus cimientos y a romper tus esquemas enmil pedazos.

Cada vez que le digo a Núria que he hecho una sesión online y que estoy muycontento, me responde lo mismo: «No será que no llevo años diciéndotelo…». A mí, yoque me tenía por un tipo flexible y rápido de reacción. Un psicólogo de mente abierta ytal… Si me ha pasado a mí, no te va a pasar a ti…

Querido confinado, no podrás buscar nuevos paradigmas hasta que no abandones losparadigmas obsoletos que tienes, de la misma manera que no podrás llenar un vaso deagua si antes no vacías el aceite que contiene.

A nuevos problemas, nuevas soluciones, y el primer paso que tienes que dar esempezar a sentirte capaz de hacerlo. Ya hemos visto que eso de la creatividad no es algomágico, sino que se puede hacer operativo y aprender con relativa facilidad.

Pasemos al siguiente paso: después de romper tus esquemas, empieza la tarea dedefinir el escenario que tienes, ponerle nombre y así conocer la base de la que partes parapoder construir un nuevo edificio con una sólida base.

Quizá puedas empezar por pensar en funciones distintas, en procesos distintos y enprofesiones distintas. Puedo hacer de psicólogo de manera presencial y a distancia, perono puedo hacerlo de la misma manera. He tenido que investigar, adaptar y testear unmétodo nuevo, pero todo ese esfuerzo realizado durante el mes de diciembre hamerecido la pena y ha quedado plenamente justificado.

Cuando decidí irme a vivir al Pirineo, hice exactamente lo mismo. El punto de partida

37

Page 38: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

era claro: quiero vivir en el Pirineo. ¿Qué tuve que hacer para conseguirlo? De nuevo,después de investigar, adaptar y probar, lo conseguí. Plantéate un objetivo y luego piensaen cómo puedes conseguirlo.

Esto es algo así como tener que ir a París. Yo he ido a París en tren, en coche y enavión. Lo de menos es el medio de transporte, lo realmente importante es que quería ir aParís. Piensa primero en el objetivo y luego en los medios.

¿Qué te quiero decir? Pues que posiblemente no tengas que hacer un cambio radical,sino pensar en cómo puedes hacer lo mismo o lo que te gusta en un nuevo escenario, conunas nuevas reglas y con nuevas prioridades. Y que cuesta un esfuerzo, pero hazlo sindemora y sin pesar, ya que será la mejor inversión que realices en tu vida.

Escribí mi primer libro sacrificando horas de sueño y de deporte. Diseñé un procesode trabajo online, de nuevo, sacrificando horas de sueño y de descanso. En ambos casos,viví ese sacrificio como una inversión. El que algo quiere, algo le cuesta. De nuevo, parapoder tener este libro en un tiempo récord y no desatender a mi familia, me he tenido queponer el despertador muy temprano. La vida, a veces, requiere de un esfuerzo, unesfuerzo que, sin duda, se verá recompensado.

Ahora me reservo dos días a la semana para escribir, disfruto de mis sesiones online yen unos días podrás tener este libro en tus manos. Querido lector confinado, si algo hepodido aprender a lo largo de la vida es que sin esfuerzo no hay resultados. Nadie regalanada, algunos no tenemos ni apellidos ni padrinos, pero tenemos talento, y capacidad detrabajo y esfuerzo. No tengo ninguna virtud que tú no tengas. Todo mi secreto es eltrabajo, el esfuerzo y el valor.

Pensar creativamente también es plantearse opciones que teníamos descartadas. Laúltima persona a la que ayudé aquí, en el Pirineo, acababa de ser despedida; le encantabala cocina, pero pretendía seguir trabajando como controller financiero. Le ayudé a que seplanteara la opción de trabajar como cocinero y montó su propio restaurante. Elconfinamiento le ha cogido con el restaurante abierto desde hacía apenas unas semanas,así es que de nuevo pensó cómo lo tenía que hacer para seguir cocinando y ganarse lavida, y encontró la solución: se dedica a enviar la comida a localizaciones de su ciudady…, atentos…, ha abierto una línea en la que envasa la comida no sé con qué criterios detercera o cuarta gama, no me hagáis caso, es algo muy técnico, y así puede enviarla máslejos, pues se conserva durante más tiempo.

Aquel que tiene un objetivo encuentra el camino, y si el objetivo es tuyo, ese caminose convierte en una autopista. Así que, puesto a redefinir tu vida, plantéate hacer lo quesiempre has querido. Te diré que ese es el acto de creatividad más grande que puedas

38

Page 39: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

imaginar, atreverte a ser libre y a hacer lo que siempre has deseado. Es posible, créeme.Te diría que toda la ayuda que he prestado a prácticamente la mitad de mis clientes no hasido otra más que hacerlos sentir competentes, romper su techo de cristal, ayudarlos adefinir ese sueño que tenían descartado y darles herramientas para que puedan vivirlo.

Una cosa más, como estás haciendo lo que te gusta, lo harás muy bien; al hacerlobien tendrás más trabajo y al tener más trabajo tendrás más oportunidades de hacerlomejor, entrando así en un círculo virtuoso. No lo olvides, sé creativo y piensa en vidasdistintas. Normalmente, pensamos en todo lo que no puede ser, y eso mata nuestracreatividad. Te propongo que cambies de paradigma y que en vez de pensar en lo que nopuede ser, empieces a pensar en lo que sí puede ser y en lo que necesitas para que asísea.

Es posible, te lo aseguro, lo he visto con muchos clientes míos, conmigo mismo, conmis libros, etcétera. Cuando te pongas a pensar en cómo vas a ocuparte creativamente dealgo que te está preocupando, no olvides que es mejor que no filtres las alternativas enprimera instancia.

Busca un momento y un lugar propicios, coge una libreta y déjate llevar por unalluvia de ideas. Mis mejores ideas se me han ocurrido andando, en la cama o en la ducha.¡En la ducha, las que más! ¿Me imaginas saliendo del baño, a medio duchar, para tomarnotas? Pues sí. Bueno, tampoco hace falta que te lo imagines con mucho detalle…

Tenemos que ser tenazmente creativos. Ejercita tu creatividad continuamente. Pruebanuevos platos de cocina, invéntatelos. Yo creo que no sería capaz de repetir ninguna delas sopas que hago, y alguna me queda mal, pero no dejo de innovar. Ordena tu ropa demanera creativa, date un paseo por la casa y sé creativo con la decoración y el orden.Dibuja, juega, compón música con estas aplicaciones tan chulas que hay, escribe, dilecosas bonitas y creativas a tu pareja, busca juegos creativos para jugar con tus hijos…Con la creatividad pasa como con los músculos: cuanto más los ejercites, más setonifican y desarrollan.

Y no me vengas con que no eres creativo. Está en los genes del ser humano pornaturaleza. No hay nada más motivador a nivel universal que la sensación de haberaprendido algo y la de haber solucionado un problema.

Eres creativo, y aunque tengas la musculatura de tu imaginación dormida, en cuantoempieces a entrenarla vas a ver cómo la desarrollas hasta límites insospechados.

Plantéate cómo buscas soluciones a los problemas que tienes o has tenido. Bien,ahora piensa cómo podrías buscarlas de otra manera. No te fijes en las limitaciones, no te

39

Page 40: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

fijes en lo que no puedes hacer, fíjate en todo lo que puedes hacer y en lo que puedescrear e investigar.

Analiza qué recursos tienes y qué puedes hacer con ellos.Una cosa más, analiza también cómo reaccionas ante los problemas. Los problemas

tan solo son situaciones que tienen que ser resueltas. Si buscas el problema, te estásequivocando, ya que es mucho mejor buscar la solución.

Ante un problema hay dos tipos de personas. Están las que empiezan a pensar enbucle algo así como «qué puedo hacer para solucionarlo» y se quedan focalizadas en quenecesitan una solución en vez de buscar una solución. Pero también están las personasque analizan el problema con detenimiento, miran de qué recursos disponen y soloentonces empiezan a pensar cómo pueden aproximarse y gestionarlo.

¡Gestionarlo! Esa es la clave. No pretendas solucionar el problema, a veces todo loque puedes y debes hacer es gestionarlo, adaptarte y jugar tu mejor baza, y te daráscuenta de que al gestionarlo quedará solucionado.

Esto, señores, es como cocinar. Hay quien piensa: «Si tuviera tomillo», «Si tuvieramostaza», y así se quedan, tratando de hacer un pollo a la mostaza sin mostaza,frustrados por lo que podría haber sido si hubieran tenido las condiciones óptimas. Porotro lado, están los que miran la nevera, analizan lo que tienen y tratan de hacer lo mejorposible con lo que tienen, sin ninguna idea prefijada, tan solo disfrutando del proceso yaprovechando los recursos de los que disponen. ¿De qué tipo eres tú?

La vida es como es, no como queremos que sea o como tendría que ser. Si no haymostaza, lo mejor que podemos hacer es renunciar al pollo a la mostaza y tratar de hacerotro plato con los ingredientes que tenemos.

Querido lector, a nuevos problemas, nuevas soluciones. Si sigues haciendo lo mismoque has hecho siempre, seguirás teniendo la misma vida de siempre. Si no haces nadanuevo, nada cambiará, así que mejor adopta una actitud creativa, entra en resonanciaconstructiva y cuestiónalo todo para acabar haciendo algo parecido o algo totalmentediferente. A veces, mejora tu vida; a veces, revoluciónala. Pero, eso sí, nunca copies, pordignidad y por respeto.

No lo olvides…

Acepta que todo ha cambiado y no tardes en adaptarte.No puedes predecir el futuro, mejor limítate a ir analizando lo que pasa y a irtomando decisiones.Nos equivocamos mucho en nuestros juicios; dale dos vueltas a lo que piensas.No descartes nada.

40

Page 41: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Nadie va a venir a salvarte.Tienes más alternativas de las que crees.La queja no sirve de nada.Culpar a otras personas tampoco.Olvida todo lo que no puedes controlar para poder concentrarte en lo que sí quepuedes controlar.Ejercita tu creatividad.Desaprende lo aprendido.Piensa en nuevas funciones, procesos, escenarios y soluciones a nuevos problemas.Practica la lluvia de ideas.Despierta tu espíritu analítico y conviértete en un «solucionador».Cuestiónalo todo.

41

Page 42: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

5

Da salida a tus emociones

Si el hacinamiento es el caldo de cultivo ideal para la propagación de los virus, la tensiónes el caldo de cultivo ideal para la propagación del conflicto. ¿A que no te lo podíasimaginar? Pues sí. Visto así, parece tan obvio, y en realidad es tan obvio, que a veces nosolvidamos. Es más, no hace falta ni que vivamos con nadie en casa; a veces, nosotrossolitos nos bastamos para tener conflictos y enfadarnos con nosotros mismos, ¿verdad?

Vayamos por partes. La mala noticia es que a mayor número de personas, a mayortiempo encerradas y a menor espacio, la probabilidad de que aparezcan los conflictos esmayor. Qué curioso, ¿verdad? ¿A que tampoco lo habías pensado?

De nuevo es cierto, obvio y real. ¿Por qué te pongo en contexto con estasobviedades? Pues porque ese ha de ser nuestro marco mental. Tenemos que estarpreparados para tener, vivir, provocar y sufrir conflictos y, por ende, para gestionarlos.

Conflictos tenemos de dos tipos, grandes y pequeños, y el problema en estado deconfinamiento es la acumulación de los pequeños conflictos del día a día. Encondiciones normales no te molesta especialmente que tu pareja no haga la cama, que tuhijo no recoja los platos del desayuno o que los niños de tu vecino te despierten a lassiete de la mañana.

En condiciones normales tampoco te molesta que se haya acabado el pan, tener quebajar al garaje a buscar la leche o que la persona que terminó el papel de váter no cambieel rollo. En un día a día normal, toleras bien la espera para comer, al cliente pesado queno para de cambiar de opinión, al colega de trabajo que se escaquea de susresponsabilidades y al proveedor que intenta colarte un sobreprecio.

Sí, la vida cotidiana es un compendio de pequeños conflictos, frustraciones ydesengaños que vamos tolerando, compensando y, en algunos casos, gestionando, y paraconseguirlo solemos tirar de paciencia, distracción y compensación.

Pero hoy no es un día normal. Ya llevamos unos cuantos días que no podemos

42

Page 43: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

tomarnos ese café con leche en la cafetería de la esquina mientras leemos el diario,tampoco podemos dar ese paseo por el parque de camino al trabajo, ni tomar unas tapascon nuestros amigos ni mucho menos salir a correr, a bailar zumba o a nadar.

Estamos viviendo en primera persona la receta perfecta para hacer un potaje deconflicto, a saber: póngale usted una cucharada sopera de tensión, medio litro defrustración, un vaso de confinamiento, una pizca de falta de espacio personal, dospastillas de caldo de miedo, medio kilo de cansancio y una pizca más de falta detolerancia y ¡ya tendremos el potaje de conflicto listo!

Uno de los secretos para gestionar el conflicto es no aguantar e ir microgestionandolos conflictos que van apareciendo poco a poco e incluso con un toque de humor. Mihija, como cualquier chica o chico preadolescente, tiene una especie de inhibición en ellóbulo frontal que no le permite recoger la ropa y cerrar los armarios o cajones que hautilizado.

Yo, como cualquier padre preocupado por el correcto desarrollo social de sus hijos,quiero que sea ordenada y que cierre los cajones y los armarios. Sí, ya sé que quizá seauna manía mía, pero es que se ve todo más ordenado, armónico y amable…

Pues tengo un juego con el que nos reímos y que la motiva a volver a la habitación oa su lavabo a recoger las cosas. Cuando veo que el tema está descontrolado, empiezo ajugar a narrador de una película de detectives: «Parece que una chica joven se levantó, secambió de ropa. Iba vestida con unos calcetines gordos y un pijama de rayas, cogió unoszapatos, se fue al lavabo y se peinó, cogió una goma del pelo, pero valoró dejarla y cogeruna pinza, se lavó los dientes, se puso unas lentillas y bajó a desayunar. Desayunó unamandarina…». A lo que me suele responder: «Se sintió observada por un profesional,era metódico, un poco obsesionado con el orden, diría yo, decidió volver sobre sus pasospara no dejar más pistas. Su vida estaba en juego…». Y tan amigos. Yo con mi objetivoconseguido, con el menor coste posible, y ella recogiendo a veces con una sonrisa, aveces no.

Los seres humanos somos como somos, y así debe ser. Convivimos con personas alas que tenemos que respetar, pero encontrar el equilibrio entre respetar la libreexpresión de la personalidad de mi hija y dotarla de hábitos y herramientas para quetenga una buena socialización no siempre es fácil.

En uno de mis libros hablo y desarrollo el concepto de debilidades toleradas, y enotro las manías que todos tenemos. En el día a día nos relacionamos con muchaspersonas, algunas más cercanas, otras no tanto. Nadie es perfecto, y que tire la primerapiedra el señor o la señora Maravillas. Lo cierto es que toleramos algunas debilidades en

43

Page 44: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

las personas con las que nos relacionamos habitualmente, sea en casa o cuando nos llamanuestra amiga en plan pesado o nuestra madre en formato criticón contra nuestra tía.

Pero cuando estamos confinados nuestra percepción y nuestro nivel de toleranciacambian de tal manera que esos encantos y virtudes que tiene nuestra pareja, padre oquien sea quedan atenuados en plan «uf, lo normal, vaya», sus normalidades se tornan enpequeñas molestias, sus debilidades toleradas en algo insoportablemente molesto y susvicios y defectos en actos satánicos imposibles de nombrar.

Sí, el confinamiento es lo que tiene, que lo que toleramos deja de ser relativamentemolesto para ser terriblemente molesto e ir provocando conflictos por doquier. Nada, telo digo solo para que lo tengas en cuenta, que muchas de las cosas por las que ahora teenfadas no te enfadaban antes, y que la persona víctima de tus enfados no va a entenderel motivo por el que eso sucede… Sin ir más lejos, a menudo suelo cerrar yo las puertasy cajones que deja abiertos mi hija, pero si estoy tenso o de mal humor, no.

En definitiva, el confinamiento provoca que esas debilidades toleradas dejen de serloy pasen a ser una fuente de microconflictos que antes no existían.

Otra de las claves para minimizar el conflicto durante el confinamiento es elsignificado que le das. A menudo no existe tal conflicto, pero nosotros lo vivimos comosi fuera real. Además, a menudo elevamos situaciones normales o sin carga afectiva aofensas personales, y claro, si te sientes ofendido, también sentirás ira, y si sientes ira, elconflicto está servido. Pero vamos por partes, empecemos por el tema de la gestión delconflicto.

En materia de conflictos la clave reside en la microgestión, en no acumular. Citandoal Principito, arrancar un baobab pequeño no supone mayor esfuerzo, arrancarlo cuandoya ha crecido puede llegar a ser imposible. Pues con los conflictos ocurre como con losbaobabs del Principito: cuanto antes los gestionemos, mejor.

Sabemos que el conflicto genera conflicto, y para ilustrarlo te voy a proponer unejercicio de imaginación, a ver qué te parece. Imaginemos que te vas a dormir antes quetu pareja. Ella se ha quedado mirando una película. Ha picado algo. Concretamente se hahecho unos mixtos de jamón y queso en la sandwichera.

Cuando te levantas por la mañana ves los platos en la mesa del comedor, lasandwichera que se ha quedado enchufada, el jamón dulce y el queso fuera de la neveray la cocina por recoger. Te pones de mal humor. Lo recoges y, mientras arreglas lacocina, te vas cargando. «Y mira la sandwichera enchufada, lo que podría haber pasado,podría haber salido ardiendo la casa y el seguro no cubre nada en situación de pandemia.

44

Page 45: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Esto es la ruina, tener que pagar una casa, que encima no es nuestra, y todo por nodesenchufar la sandwichera», y de esta manera vas acumulando más y más tensión.

Al levantarse tu pareja por la mañana, le sueltas un «qué, fue bien la juerga de ayer,¿no?». Tu pareja se enfada y te dice que por un rato que está sola sin niños no hay queponerse así, que ella está todo el día con vuestros hijos y no se queja. Tú le sueltas que laculpa es suya por ser tan permisiva con los niños, ella te dice que tú también eres supadre… Atentos, que ya estáis en plena escalada de ataques personales y no estáistratando para nada el tema importante, que era que desenchufara la sandwichera.

Discutís y luego, como el cien por cien de los mortales, os ignoráis por unas horas. Esnormal, evitamos lo que nos provoca malestar. Pero ¿qué pasa en esas horas? Pues quetu película mental sigue y la suya también, convirtiéndose en una especie de drama contintes de película de acción y thriller psicológico. Que si yo también soy el padre, y ellaqué, con todo lo que aguanto, como aquella vez que tal y tal… Total, que ya te estásremontando al Pleistoceno para recuperar una lista de agravios y discusiones que loúnico que hacen es complicarlo todo. Es normal, te has sentido atacado a nivel personal,has sentido cómo te juzgaban y atacaban tu autoestima y tu autoconcepto. Y todo poruna sandwichera enchufada que no ha supuesto nada más que algunos euros de más en lafactura de la luz.

Bueno, el día sigue y os encontráis de nuevo en la cocina. «Imagino que harás tú lacomida, ya que eres más listo…», a lo que tú le respondes: «El día que enseñaron adesenchufar sandwicheras en el cole dónde estabas…». Y ya volvéis a empezar. Tenéismucha tensión que descargar y habéis encontrado una vía. Lo que no sabéis es que envez de descargarla, en realidad, os estáis tensionando mucho más.

Bueno, lo dejo aquí. ¿Te resulta familiar la escena? Cambia sandwichera porcualquier otra tontería. Pues ese es el problema de las discusiones, que no estamos en lasmejores circunstancias para decir, simplemente y sin dramas: «Cariño, ayer te dejaste lasandwichera enchufada, hay que acordarse de desenchufarla». Este es el mensajeimportante, este es todo el mensaje que debe comunicarse, y tenemos que hacerlo de lamanera más simple posible.

En definitiva, si te paras a pensarlo bien, no ha pasado nada, absolutamente nada.Ese es el problema con mayúsculas: cuando discutimos no pensamos, y ese no pensar

puede provocar mucho dolor. Una discusión es como la válvula de escape de una olla apresión, libera un poco de tensión, pero no la suficiente como para liberar toda lapresión; además, con cada discusión nos tensamos más, nos volvemos más intolerantes yacabamos provocando más discusiones.

45

Page 46: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

El mejor secreto para no discutir consiste en vaciar ese vaso que está a punto dedesbordarse y en no acumular, no me cansaré de repetirlo. Acumulamos demasiado,sobreestimamos nuestra capacidad de aguante y, cuando no podemos más,implosionamos o explotamos, la mayoría de las ocasiones con la persona equivocada.

Además, a menudo acumulamos emociones negativas tontamente. A ver, no estoydiciendo que seas tonto, pero a veces haces tonterías. Yo mismo las hago. No tengo unpelo de tonto, pronto no tendré ni un pelo de ningún tipo —maldita herencia alopécica—, pero a veces hago tonterías.

¿Sabías que ocho de cada diez conflictos tienen su origen en un malentendido? A esolo llamo yo acumular tontamente. Nos enfadamos por malentendidos. Tan solo dos decada diez conflictos están provocados por acciones malintencionadas. Vamos a ver, si temeto el dedo en el ojo, eso es una acción malintencionada —o un accidente, perosupongamos que no—; en cambio, si creo que me has mirado mal, como desafiante, paraprovocarme, y yo he proyectado en ti todas mis inseguridades y miedos, pues no deja deser un triste y vulgar malentendido.

Así que la mayor parte de tus enfados, esos que te ponen la cabeza a mil por hora, enrealidad son por culpa de un malentendido sin sentido. Además, y eso da más rabia, lapersona que lo ha provocado no se ha enterado de nada y vive ajena a tu enfado. ¿Sabespor qué? Pues porque no tenía la intención de mirarte de manera desafiante y dedespertar todas tus inseguridades y demonios. De hecho, te ha mirado como ha podido,ya que ella o él también está confinado como tú, con todos sus miedos y tensiones.

¿Sabes cuál es el antídoto perfecto para gestionar los equívocos que suponen el 80 %de los conflictos? Pues tener una mirada amable y aprender a ignorar de maneraselectiva.

Trabajo con detalle los conceptos que acabo de comentar en Wabi Sabi; no obstante,te los voy a explicar.

Empieza por aprender a ignorar selectivamente, ya que te va a salvar durante elconfinamiento y, cuando todo esto pase, durante toda tu vida. No puedes hacer caso atodo lo que oyes, ves o incluso sientes. Las personas no siempre pensamos lo quedecimos, especialmente cuando estamos confinadas.

Tampoco tienes que hacer caso a todo lo que piensas o sientes. Si hay alguna clavepara cuidar nuestro bienestar emocional es la capacidad que todos tenemos para ignorarselectivamente. De hecho, saber ignorar plenamente es igual de importante que saberatender plenamente.

¿Qué cosas tienes que ignorar? Pues muchas. Trata de imaginarte a tu pareja, a tus

46

Page 47: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

hijos, a tus padres, amigos, compañeros de trabajo, clientes y demás con un semáforo enla cabeza. Así, como una especie de marciano con lucecitas. Pues todas esas personas, túincluido, tenéis tres estados. Cuando estamos en luz verde todo es maravilloso, estamosrelajados, nuestra mente funciona a la perfección y tenemos capacidad de análisis,tolerancia y mil cosas más maravillosas.

Pero también podemos estar en rojo. Cuando tenemos la lucecita roja encendida, nonos tenemos que hacer caso para nada, ni a nosotros ni a nadie que tenga el semáforo enrojo. Cuando estamos así es porque estamos cansados, agobiados, saturados, tristes,tensos, angustiados y cualesquiera de los cientos de estados emocionales negativos quepodemos sentir en la vida y, muy especialmente, en un confinamiento.

Todo lo que provenga de una persona en luz roja ha de ser ignorado, puesto encuarentena, confinado. De la misma manera, si tú estás en rojo, tu capacidad detolerancia se va a ver afectada, por lo que todo lo que pienses, interpretes, imagines,recuerdes o percibas debe ser puesto en cuarentena o ignorado.

No siempre funcionamos bien, así que aquel que aprenda a ver la lucecita de lossemáforos indicadores de nuestro estado de ánimo, tanto en él mismo como en otraspersonas, tendrá una clara ventaja.

Anda, me dejaba la lucecita ámbar. Pues es muy importante, ya que cuando alguienestá en ámbar nos indica que puede pasar al estado rojo o al verde, así que quizápodamos prepararnos, echarle el freno o más bien darle un achuchón según convenga. Sivemos que nuestra pareja está pasando a rojo, podemos tratar de analizar si estamoshaciendo algo que la tensa, si podemos hacer algo para que se relaje, como por ejemplodarle un masaje o preparar la merienda, o quizá tengamos tiempo para prepararnos parauna explosión y para repetirnos varias veces que no pasa nada, que es el momento deempezar a ignorar selectivamente y de no hacer caso de las barbaridades que puedallegar a decir.

Pero es que, aunque tenga razón en el motivo de su explosión, que puede ser que latenga, no es el mejor momento para entrar a debatir ni a discutir. Pongamos que haexplotado por las treinta latas vacías de refresco que tienes repartidas por toda la casa;pues nada, a recogerlas con humildad. Por cierto, sobre todo, ni se te ocurra justificarlo oargumentarlo. Tu pareja no está receptiva para escuchar, ha explotado, su vaso se hadesbordado provocando un tsunami de emociones que está fuera de control. Si deseasque vuelva a estar en verde, lo mejor que puedes hacer es recoger todas las latas yaprender que es conveniente que no vuelvas a repetir tu dejadez.

Esto que te acabo de explicar se aplica a tu pareja, a tus hijos y a mil situaciones más.

47

Page 48: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Justo esta semana he estado grabando un vídeo para una empresa tratando este tema paraque sus empleados puedan ignorar selectivamente algunas de las cosas que les dicen susconfinados y tensos clientes.

No eres tú, no son ellos, no es él, no es ella… Es el confinamiento. Nada personal, asíque no montes un drama.

Por cierto, derivado de lo que acabamos de comentar, hay una máxima más. Es muyimportante que sepas cuándo hablar y cuándo callar. Sí, ya sé que hay momentos en losque no puedes reprimirte, pero, una vez más, intenta preverlos. El secreto está, de nuevo,en no acumular para evitar así pasar esa delgada línea roja en la que perdemos el controly ya nada podemos hacer.

Saber callar ha salvado relaciones, destinos, infancias y vidas. Pruébalo, esrelativamente fácil, en cuanto te percibas cargadito, subidito de tono o tenso, te coges unpost-it y te apuntas algo así como «saber callar es de sabios» y te lo repites una y milveces. No, ahora en serio. No podemos decir todo lo que nos pasa por la cabeza,especialmente estando confinados, cuando todo el mundo está menos tolerante, mástenso y con menos capacidad para poner en contexto lo que pasa.

Ya sabes la máxima: en boca cerrada no entran moscas… y no salen reproches…Vamos un paso más allá con una nueva herramienta. Yo la llamo tener una mirada

amable. Me parece que el concepto queda bien claro y, además, lo encuentro muypoético. Una mirada amable es básica para convivir en situación de confinamiento.Nosotros no tenemos costumbre, pero hay lugares en los que hay guerras, confinamientoforzado y situaciones a nivel económico o de violencia armada muy pero que muytensas. Pues resulta increíble ver cómo en situaciones muy tensas suele reinar una miradaamable entre las personas más cercanas e incluso con personas desconocidas.

¿En qué consiste una mirada amable? Pues consiste en poder comprender que lapersona que tienes delante piensa, hace y siente, y que es posible que necesite de unapalabra bonita, de una justificación, de un poco o de mucha tolerancia o incluso de unadosis extra de tu benevolencia.

Puedes ver a tu hijo como una pequeña e indómita fiera que no para de molestar ocomo un simple niño de seis años que lleva semanas sin salir a la calle, encerrado en unpiso sin terraza, sin ver a los abuelos, sin poder jugar con sus amigos y sin comprenderexactamente qué es lo que está pasando.

¿A que cambia la cosa? Pero no me he inventado nada. La realidad es que los niños ylos adultos lo estamos pasando muy mal y que necesitamos que sean amables, empáticosy compasivos con nosotros.

48

Page 49: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Para poder tener una mirada amable tan solo necesitamos dos cosas. La primera esmirar a los ojos de la persona que tienes delante, y la siguiente es abandonar tupensamiento egocéntrico y focalizarlo en las necesidades y el contexto de esa persona.

Pongo un ejemplo. Hace unos días construimos un fuerte con mi hija en el comedor.Ya sabes, con cojines y sábanas. Cogimos un par de palos de cortina que teníamos porcasa —hacer tanta mudanza es lo que tiene— y varios metros de cuerda de escalada ynos montamos un fuerte de campeonato.

Pasamos todo un día maravilloso trabajando aspectos —de manera informal y muysutil— como la resolución de problemas, la capacidad de análisis, el cálculo, ladecoración, las proporciones, las estructuras y mil cosas más. Fue todo un ejemplo detrabajo por proyectos.

Llegada la noche, de camino a la habitación escuché cómo mi mujer le preguntaba ami hija si quería dormir en el fuerte. Alicia contestó que sí, pero que le daba miedo.Podía haber hecho dos cosas. Según mi pensamiento egocéntrico, en el que misnecesidades prevalecen sobre el resto, ignorar lo escuchado y proceder a meterme en micama al lado de mi mujercita y dormir a pierna suelta. Punto. Fin del tema. Ya es mayor.Si le da miedo que lo supere, que yo mañana quiero levantarme temprano para trabajar.

O puedo pensar con una mirada amable y olvidar mis necesidades para pensar en lassuyas, en sus necesidades y sus deseos, en sus miedos y fantasmas, en toda la tensiónque está acumulando, en definitiva, en su contexto. Gracias a una mirada amable tuveclaro qué hacer. Que uno de nuestros perros, el grandote, el de sesenta kilos, durmieracon ella en el fuerte…

No, ¡es broma! Me di media vuelta y le dije si quería dormir conmigo en el fuerte.Hay años que no son nada y segundos que lo son todo, y eso es lo que pasó. Ver sureacción no tiene precio. Hombre, yo prefería dormir en mi cama antes que en un sofáabarrotado de peluches con la cadera entre dos cojines y las piernas dobladas para podercaber en él, pero tenía claro lo que tenía que hacer. No me costó nada… ¡Y significótanto! Ese día, sábado 4 de abril, dormí en el fuerte y la noche siguiente también.Acordamos que todos los fines de semana dormiríamos en el fuerte.

En definitiva, si he dormido sobre una colchoneta de apenas un centímetro de espesorsobre la nieve a más de dos mil metros de altura, no iba a dormir en un fuerte casero…Cierto es que en aquel entonces tenía otra edad y otro cuerpo, pero no hay esfuerzo queno compense ver la emoción de mi hija, fomentar un vínculo de calidad y disfrutar de lacomplicidad antes de que el tiempo o la vida no me permitan seguir haciéndolo. Porcierto, ¿algún remedio para el dolor de espalda?

49

Page 50: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Pon en contexto el estado emocional de la persona que tienes delante, verás que estáigual o más tensa que tú. Ahora piensa qué impacto tendrá en ella tu mirada amable. Silo haces, verás que no te cuesta nada tener y aplicar esa mirada amable que todo lo hacemás sencillo.

Dos consejos más y ya dejo el tema. No acumules, no aguantes. Cuando ignoras, noaguantas. Que quede claro. Te propongo que veas dos películas. Una es Un día de furia,verás qué pasa cuando aguantas, aguantas y aguantas… La otra es Ejecutivo agresivo,verás lo que le pasa a Adam Sandler cuando aguanta y a Jack Nicholson cuando noaguanta. Además, te reirás un rato.

Aguantamos demasiado, por lo que solemos estallar en el peor de los momentos, y lapersona que nos hace explotar se come con patatas toda la tensión acumulada durantetodos los días de confinamiento. Injusto, ¿verdad? Pero real como la vida misma. Noolvides mi consejo. No aguantes. Gestiona. Gestiona las crisis y, una cosa más, ojito, nome vayas a implosionar. Implosionar es más cómodo porque no molestas a nadie, pero esterrible, es como esa especie de estornudo frustrado… Nada de implosionar, tenemosque dar una salida controlada, en el momento ideal, a nuestras emociones.

Evita las escaladas de violencia, tensión o nervios en casa. Si eres agente implicado,es más difícil que te des cuenta, pero si lo estás viendo como tercera persona, ya estástardando en preparar palomitas y ofrecer una inmediata merienda, distracción o lo que tucreatividad te permita. En el caso de peleas entre padres e hijos, siempre va bien llamar auno de los dos, como si te estuviera pasando algo terrible —como por ejemplo habertequedado sin papel higiénico o haber perdido las gafas «de cerca»—, ya verás como esuna magnífica estrategia para cortar por lo sano la discusión y el conflicto.

Eso sí, piensa a quién vas a llamar, a veces merece la pena llamar al adulto y otrasveces al niño. Lo dejo a tu buen criterio, tú los conoces más.

No lo olvides…

No aguantes, no acumules, gestiona los conflictos en pequeñas dosis.Tú también eres un generador de conflictos, toma conciencia.Aprende a tolerar algunas debilidades de las personas con las que convives.No lo vivas todo como una ofensa personal.Aprende a diferenciar un malentendido de una acción malintencionada.No permitas que el conflicto se cronifique.El conflicto genera conflicto.Céntrate en los hechos.Lo que tú no gestiones no lo gestionará nadie.

50

Page 51: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

No discutas nunca, no sirve para nada.Adopta una mirada amable.Ignora selectivamente.No hagas caso a todo lo que sientes o piensas.No eres tú, no es él o ella, es el confinamiento.Identifica el estado emocional propio y ajeno, y ponlo en contexto.Es importante saber cuándo hablar y cuándo callar.Evita las escaladas de violencia.

51

Page 52: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

6

Pon tu imaginación bajo control

Me dedico a escribir y lo hago porque, entre otras cosas, tengo una imaginación y unainventiva fuera de serie. Anda, releyéndolo ahora creo que me he pasado tirándomeflores.

Lo cierto es que las tengo y que tengo que convivir con ellas para bien y para mal. Elpoder de la imaginación es enorme y es capaz de condicionar lo que pensamos, hacemosy sentimos. De la misma manera, nuestra imaginación se ve afectada por lo quepensamos, hacemos y sentimos. De hecho, es un sistema simbiótico perfectamenteengranado en el que un movimiento en uno de sus elementos puede generar unarespuesta y una reacción en el resto.

Pues como ya te habrás dado cuenta, estamos viviendo confinados una pandemia, conmiedo, estrés, inseguridad y mil cosas más. Así que, sin pedirte permiso, el Spielbergque habita en tu cabecita se ha puesto a rodar. Algunas personas tienen a un prolíficodirector, con un magnífico equipo de producción, reputados guionistas y metros y metrosde cinta; mientras que otras personas como mucho elaboran un corto o una miniserie detres capítulos.

Yo no, yo soy de filmografía completa de Star Wars, versión extendida con extras,escenas descartadas y bonus track del director.

Pues ahora, con esto del coronavirus y el confinamiento, por mi mente ya han pasadovarias películas sobre el apocalipsis, la destrucción del planeta y el colapso de lahumanidad. También han pasado películas bonitas, románticas, familiares, alguna queotra comedia y alguna de hospitales y urgencias.

No puedo hacer nada, mi imaginación se activa sola, sin pedirme permiso, así quecuando me doy cuenta de que estoy en caída libre, con la imaginación a todo trapo, queno siempre es rápido, paso a revisar mi videoclub particular para elegir una película algomás optimista y así tratar de equilibrar mi desbordada imaginación.

52

Page 53: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

De lo que se trata, en definitiva, es de aferrarse a la realidad. Hace algunos años leíun interesante libro sobre la vida de Shackleton, el famoso explorador que estuvoperdido en la Antártida cerca de dos años.

Bueno, el hecho es que sir Shackleton era todo un maestro de lo que llamo aferrarse ala realidad de manera realista; parece redundante, quizá lo sea. Pues parece ser que en suequipo tenía a un peliculero como yo y, claro, a treinta bajo cero en la Antártida, rodeadode mil peligros bajo un viento huracanado y viendo cómo se estaba hundiendo pormomentos su barco, pues este peliculero era bastante prolífico en lo que a visióncatastrófica se refiere.

Parece ser que Shackleton, que es sir por la gracia de her majesty, sentó a sus chicossobre las pieles que llevaba y les lanzó el siguiente discurso, palabra más, palabramenos:

A ver, no sois conscientes de lo bien que estamos. No pasa nada, no os culpo, pero vamos a ver. Queestamos perdidos en la Antártida es cierto. Que nadie tiene ni idea de dónde estamos, pues también. Peroclaro, qué esperabais, venimos a lo que venimos, ¿o acaso no os advertí que sería toda una aventura? Lo ciertoes que nadie sabe qué va a pasar a partir de ahora. Solo sabemos que va a hacer algo de fresco por las noches.

Sí, estoy novelando, pero es que me he puesto en escena y mi imaginación…, yasabes… Sigo.

Entonces, como no lo sabemos, pues no hace falta que nos preocupemos por eso ni que nos pongamos enel peor escenario. Si lo pensáis bien, veréis que estamos de maravilla. A ver, os voy a hacer una serie depreguntas y me vais respondiendo sí o no.

¿Estamos todos juntos? Sí. ¿Seguimos todos vivos? Pues sí. ¿Tenemos leña? Mucha, todo un barcoentero. ¿Y comida? Mucha. ¿Y municiones para poder cazar? Pues sí. ¿Y las tiendas de campaña? Sí, claro.¿Y los jerséis que nos han hecho las abuelas con lana virgen de merino? Sí… ¿Y los calcetines gordotes?También…

¡Pues estamos de maravilla! Y ese ha de ser vuestro punto de partida, vuestra realidad y vuestro sentir. Aver, que vamos a pasar frío, pero tranquilos, que estamos de maravilla y, además, ¡todavía nos quedan cincobarriles de ron!

Fíjate, qué interesante. Mi mejor consejo es que te aferres a la realidad comoShackleton y su equipo. Que sí, que ya sé que estáis encerrados en casa. Que sí, que yasé que hace muy buen tiempo. ¿Qué te crees, que no lo veo? ¿Que yo no estoyconfinado?

Pero ¿qué ocurre?, pues que la ansiedad toma el control de tu imaginación y te dirigehacia la hecatombe mundial, te monta una película apocalíptica y acaba provocando quetengas más ansiedad, y así vuelta a empezar n veces, como una sevillana.

Mi mejor consejo es que cultives el optimismo y que lo compartas con las personascon las que te relacionas, y para conseguirlo tan solo hay un camino: reformular unasituación difícil aferrándonos a la realidad.

53

Page 54: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Tienes que ser consciente y tatuarte en el brazo a fuego que la ansiedad aplica unsesgo negativo a nuestra imaginación, distorsionando, así, nuestras previsiones yprovocándonos, en consecuencia, elevadas dosis de malestar y angustia.

Necesitamos reajustar nuestras expectativas. El problema es que estábamosacostumbrados a una vida cómoda y plácida y, claro, no hemos desarrollado capacidadestan esenciales como la tolerancia a la frustración, el espíritu de sacrificio o la gestión dela adversidad.

Pues ya acabas de ver que tenemos que aprender a convivir con la incertidumbre, lainestabilidad y la falta de control, y lo mejor que podemos hacer es poner bajo controlnuestra imaginación y focalizar nuestra energía y nuestra atención.

A veces la vida no nos trata bien, algo habrás podido ver. Salvando las distancias,para muchas personas este confinamiento viene a ser como una especie de reclusión enuna prisión. Para algunas personas la prisión tiene cuatrocientos metros, jardín, piscina ygimnasio, para otras personas tiene setenta metros compartidos con pareja e hijos.

Citando a Nelson Mandela, creo, quizá no fue él, bueno, para el caso es irrelevante…,dijo algo así como que siempre podrán recluir nuestro cuerpo, pero no nuestro espíritu.Calla, que quizá fue el conde de Montecristo. Bueno, lo que te propongo precisamente eseso, que tu mente pueda evadirse, pero sin dar rienda suelta a la imaginación.

Es posible, créeme. Para conseguirlo, todo lo que necesitas es una visión, un lugar alque irte, un elemento motivador que te permita distraerte de la realidad que vivimos, asícomo focalizar tu atención y energía en un objetivo futuro.

Ya lo hemos visto: el estrés, la ansiedad, el miedo, la tristeza o la inseguridad nosbloquean, dificultan que nos concentremos y provocan que procrastinemos durante horasy horas.

Tu visión va a ser tu salvaguarda, tu mejor elemento para automotivarte, parafocalizar tu energía, para dejar de procrastinar y activar todas tus virtudes y maravillas.

Empieza a hacer algo, pero que sea algo que contribuya a tu visión, a tu objetivo. Conel tema de las visiones pasa como cuando tenemos que hacer gimnasia. En mi casa lahora de la gimnasia es la una. Un día lidero yo la sesión y otro día mi hija Alícia.

Hay días en que no me apetece nada de nada hacer gimnasia. Hay días en que no leapetece a mi hija, pero ¿sabes qué?, pues que siempre sigo la misma estrategia: «Mira,cariño, vamos a empezar, vamos a hacer diez minutitos y luego ya decidimos siseguimos o paramos».

Pues siempre acabamos siguiendo. Con la gimnasia, el comer y los objetivos pasacomo con el rascar. Todo es empezar.

54

Page 55: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

De hecho, aquí estoy yo mismo escribiendo. Tengo un timing apretado, ya que elobjetivo de este libro es que te ayude en el confinamiento, así que tengo cierta prisa poracabarlo. Tengo un pequeño truco para poder escribir. Cuando estoy inspirado me pongouna lista de reproducción con canciones lentas, instrumentales, que no distraen pero queacompañan. Y ¿sabes qué? Pues que cuando no estoy inspirado empiezo a escribir y mepongo esa lista como música de fondo. Poco a poco, mi cerebro entra en resonancia, sefocaliza y empiezo a ser productivo. Hala, ya conoces mi secreto… Mira, voy a hacer lalista pública en Spotify, se llama «Tranquileta».

Pues cuando tengas un momento lúcido, de esos de lucecita verde, convierte esavisión en un propósito, define un objetivo y elabora un plan de acción. ¿Quieres verte devacaciones en la playa? ¿En un nuevo trabajo? ¿Presentando un libro? ¿Diseñando unvideojuego? ¡Pues a elaborar esa visión!

Te propongo que esa visión tenga dos componentes, uno personal y uno profesional.¡De hecho, eso ya son dos visiones!

Pero ¿cómo se define una visión? Muchos deportistas utilizan la visualización. ¿Teacuerdas de aquellas vacaciones tan divertidas? Sí, hombre, aquellas en las que te lopasaste tan bien. ¿A que se te está dibujando una sonrisa en la cara? ¿Sabes por qué?Pues porque ya estás visualizando.

¿Te haces una idea de cómo funciona la visualización? Pues sí, una visualización escapaz de generar emociones positivas, despertar la ilusión y darte la energía necesariapara motivarte y perseverar.

Y hablando de motivación. Querido, querida, no te queda otra que automotivarte.Cuando estés agobiado, haz algo, no importa lo que sea. Si es posible, que sea algo de lalista de tareas que te van a ayudar a acercarte a tu objetivo y a tu visualización. Mira uncatálogo de vacaciones en la playa, busca vídeos en internet de cómo restaurar esa motovieja que guardas en el garaje de la casa del pueblo o empieza a recortar botellas de aguapara montarte tu minihuerto sostenible en casa.

Haz algo, lo que sea; si no se te ocurre cómo incidir en tu objetivo, pues haz otracosa, arregla la cocina, el garaje, ordena los ficheros del ordenador, pon lavadoras o loque te dé la gana, pero pasa a la acción.

Ignórate un poco, ignora tus necesidades. Ya sé que crees que necesitas estar tiradoen el sofá mirando por cuarta vez Liberad a Willy, pero ignóralo y empieza a moverte.

Verás que al ponerte a hacer algo mejorará tu autoestima, te sentirás satisfecho de tufuerza de voluntad, activarás tu cuerpo y tu mente, y estarás distraído.

Define una visión a largo plazo, pero focaliza tu energía en el corto plazo. Como

55

Page 56: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

dicen los futbolistas, «partido a partido». ¿Quién me iba a decir que una frase tan simpleiba a guardar tanta sabiduría?

Sí, ya sé que a veces necesitamos distraernos, no pasa nada, pero si puedes es mejorque te distraigas de manera activa… Sabes que pasar una tarde tirado en el sofá no teayuda, aunque tú creas que sí, pero no.

Veamos qué suele pasar. Pues decides empezar a ver una nueva serie para ver si se tepasa el agobio. Acaba el primer capítulo y decides poner el segundo, el tercero y toda latemporada. Como tu ansiedad se va incrementado al ver cómo van pasando las horas,pues decides picar algo. Empiezas por unos frutos secos, algo sano, sigues con unazanahoria, de repente te apetece algo dulce, venga un poco de chocolate, pero qué buenoque está el chocolate. Ese poquito se convierte en un «muchito». Te duele la barriga.Decides tomarte un refresco a ver si con el gas se deshace el chocolate.

Uf, demasiado azúcar. Necesitas algo salado, tanto dulce te ha saturado, vas a porunas patatas fritas, seguidas de kikos, descubres unos ganchitos y les echas mano… Vapasando la tarde. Te das cuenta porque está oscureciendo. Te levantas para cerrar laspersianas e ir al baño. Ves la hora. Te agobias porque ha pasado un día más. De perdidosal río y te preparas una pizza. Cuando la vas a buscar dejas el helado fuera de la neverapara terminar con algo dulce…

¿Te resulta familiar esta escena?Pues te propongo que, para que eso no pase, tengas una alternativa preparada, y no

hay mejor alternativa que tener una visualización y el correspondiente plan paramaterializar esa visión una vez que se acabe este confinamiento.

Es muy sencillo. Empieza por definir esa visión con tus palabras. Sigue pordocumentarte e informarte. Si quieres escribir un libro, pues ponte a buscar tutoriales,editoriales, cursos y un largo etcétera de recursos que te podrán ayudar en tu cometido.

Después de un buen rato de documentación ha llegado el momento de analizar quénecesitas para conseguir esa visión, así que ya te puedes poner a hacer una lista denecesidades. Una reserva en la playa, una historia que contar, un papel de lija pararestaurar esa vieja mesa…, ¿qué sé yo? ¡Lo que necesites!

Acto seguido, identifica qué puedes hacer para acercarte a esa visión y transforma esalista en un plan de acción con tareas concretas. Así, de esta manera, cuando no sepas quéhacer, tan solo tienes que dirigirte a tu lista de tareas y elegir una de ellas.

¿Qué te parece? ¿A que, visto así, no parece tan complicado? Pues tienes razón, no loes. Mis últimas visiones han sido escribir un libro, mudarme a una zona que se adecúamás a mis necesidades y, ahora mismo, combinar mejor mi vida profesional con las

56

Page 57: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

limitaciones de salud que tenemos en casa —ya está bastante adaptada, pero tengo quereplantearme algunas cosas—.

Así que ya lo sabes, define tu visión y ve a por ella.No lo olvides…

Tu imaginación puede condicionar lo que piensas, sientes y haces.Aférrate a la realidad.Aprende a identificar cuándo la ansiedad ha tomado el control de tu imaginación.Reformula la situación que estás viviendo.Reajusta tus expectativas.Aprende a convivir con la incertidumbre, la inestabilidad y la falta de control.Utiliza tu imaginación para evadirte, pero no para angustiarte.Define una visión a largo plazo, pero focaliza tu atención en el corto plazo.Transforma tu visión en un objetivo.Diseña un plan de acción y elabora una lista de acciones.

57

Page 58: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

7

Ocúpate en vez de preocuparte

No todo tiene un porqué, ni un sentido ni tan solo una lección que ofrecernos; pero siesta pandemia te ha servido para que te des cuenta de que no puedes perder el tiempo yde que tienes que vivir la vida intensamente, puedes darte por satisfecho.

Somos vulnerables y tenemos que tomar conciencia y asumirlo, pero no para vivirprotegidos en una especie de jaula de cristal, no, sino todo lo contrario, para aprovecharnuestra vida y nuestra salud al máximo. A menudo llegan a mí personas que se han dadocuenta de que han perdido media vida, si no toda su vida, con tonterías —según suelendecir textualmente—, y uno suele darse cuenta de que ha estado perdiendo un tiempoprecioso de manera retrospectiva, por lo que no podrá recuperarlo.

La pérdida de un ser querido, sufrir un accidente o el diagnóstico de una enfermedadsuelen ser los detonantes de esta sensación de haber perdido la vida, de no habervalorado lo que teníamos y de darse cuenta de que vivir es algo más; y créeme, tomarconciencia de ello de esta manera es una revelación que se vive dolorosamente. Quizásea porque el tiempo nunca vuelve atrás y en su paso paciente nos hace repasar todo loque pudimos haber hecho y no hicimos.

La vida es caprichosa. Hoy, 11 de abril, en una mañana radiante, releo este fragmentoque escribí hace algunos días, concretamente el 4 de abril —sí, yo no escribo los librosde manera secuencial y ordenada—. El pasado 6 de abril por la noche me encontré a mimujer desvanecida en el suelo sin respirar. Afortunadamente, en cinco minutos tenía encasa a una unidad de soporte vital de los bomberos de Andorra y a los diez minutos a unequipo médico. Es como una broma del destino. A nosotros. ¡Precisamente a nosotros!Pero si no hace falta que nos recuerden que tenemos que vivir la vida intensamente. Loque ocurrió no fue más que un accidente, una enfermedad, una concatenación de factoresque provocaron un problema médico y un susto tremendo.

A veces perdemos demasiado tiempo tratando de entender cosas que no tienen nada

58

Page 59: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

que decirnos. No obstante, volvamos a centrarnos en el capítulo y en su principalmensaje: que aproveches la vida.

Te propongo que analicemos juntos los motivos por los que la gente no suele vivir lavida o, como mínimo, su vida.

Algunos han vivido la vida que sus padres querían que vivieran. Por cierto, si erespadre no cometas ese terrible error. Permite que tus hijos vivan su vida, cometan suserrores y disfruten de sus triunfos. La mayoría de las crisis de las cuarentenas se hanforjado cuando teníamos veinte años, cuando decidimos estudiar Telecomunicacionesporque según nuestros padres tenía mucha salida, o cuando nos vimos obligados acontinuar con el negocio familiar, fuera un bufete de abogados, un taller mecánico o elsúper del barrio.

En ese momento creíamos que estábamos tomando una decisión por nosotrosmismos, de manera autónoma, pero no es así. Somos jóvenes, un poco ingenuos ycualquiera puede tomarnos el pelo y, además, hacernos creer que somos unos rebeldes.

Poco a poco vamos creciendo y vamos viendo algunas cosas que no nos gustan.Podemos cambiarlas, pero no lo hacemos, a veces por comodidad, a veces por no tenerque asumir que nos hemos equivocado, a veces por no tener problemas, así que lasaceptamos y nos conformamos. Tenemos el camino tan claro, tan despejado de piedras,tan plano, tan bueno en teoría… A menudo tenemos señales de que no es nuestro caminoy preferimos ignorarlas hasta que son tan fuertes que no podemos evitar sentirlas.Cambiamos de estrategia y decidimos distraernos. Cambiamos el coche, nos compramosuna segunda residencia, un bolso muy caro, nos vamos de viaje a un destino paradisíacopara no salir del hotel o tenemos una aventura amorosa.

Tratamos de compensar todo aquello que no nos gusta de nuestra vida, pero no somosfelices, ni tan solo nos sentimos vivos, solo nos distraemos un rato y, pasado ese subidónmomentáneo, volvemos a la cruda realidad, a una realidad que no nos gusta. Pensamosque las decisiones que no tomamos no nos duelen, pero no equivocamos. Esperamos a lajubilación para ser libres y, cuando llegamos, si es que llegamos, no podemos disfrutarla.Atrapados en un trabajo que no nos gusta para pagar una casa que nos esclaviza, al ladode una pareja a la que no soportamos, rodeados de caprichos que no necesitamos, derepente sucede algo que nos cambia la vida y nos hace tomar conciencia de que hemosestado perdiendo el tiempo. La muerte y la enfermedad suelen ser las transmisoras deeste mensaje, mensaje que a veces llega demasiado tarde.

Por otro lado, también hay muchas personas que viven la vida sometidas a los deseosdel miedo. Eso no es vivir, tan solo sobrevivir. El miedo es muy cruel. A nuestro cerebro

59

Page 60: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

no le importa que seamos felices, lo que quiere es que estemos vivos y hará todo loposible para conseguirlo.

El problema del miedo es que te aconseja qué hacer y qué no hacer para darteseguridad, pero siempre lo hace desde unos parámetros de seguridad más propios delPentágono que de la vida real. El miedo a quedarnos sin dinero o sin trabajo es uno delos más habituales, pero también tenemos una extensa lista de miedos que noscondicionan la vida, como el miedo a no ser aceptados, el miedo a la soledad, a laincertidumbre o a no ser capaces de hacer frente a los retos de la vida. Cuando el miedotoma el control, la vida se vuelve aburrida y tensa, muy tensa. Eso es lo peor, el miedo esmuy dominante y, cuando ve que ha tomado el control, no quiere hacer otra cosa queexpandirse todo lo que pueda y más.

Algunas personas ni tienen miedo ni están presionadas, pero no viven su vida, sino lavida que deberían vivir. Sí, los «deberías» son terribles, ya que dictan cómo tiene que sertu vida según unas obligaciones. Los «deberías» te despojan de la espontaneidad, de lacapacidad para gozar y disfrutar, de la aventura y de la experimentación. No importa loque desees, sino lo que debes hacer.

¿Pero ¿de dónde nacen esos «deberías»? Pues a menudo de frasesdescontextualizadas que damos por buenas en un momento delicado o especialmentepermeable de nuestra vida. A lo largo de nuestra existencia vamos integrando «deberías»y obligaciones a título de esquema que rigen nuestra vida, decisiones y actos.

El problema con los «deberías» es que son demasiado rígidos; esa es la base de todaregla, la rigidez. Yo soy completamente antideberías, y mis buenas broncas me hacostado. Siempre he sido de vivir una vida con sentido —para mí— y de ir tomandodecisiones en función de cómo van yendo las cosas. Aun con esa libertad ganada a pulso,hubo una situación de mi vida en la que tuve problemas para gestionar los «deberías»: elservicio militar. Después de intentar escaquearme por todos los medios, al final no mequedó más remedio que hacerlo; bueno, lo hice como psicólogo y acabó siendo unaexperiencia profesional muy interesante.

Pues el primer «debería», que me pareció la cosa más estúpida del mundo, fue que apartir de una fecha determinada —no recuerdo cuándo— se tenía que ir con el uniformede verano. Daba igual si la temperatura era de cuatro grados —como era el caso—, peroa partir del 3 de marzo, por decir algo, uniforme de verano. Toma ya… Pues no pasé fríoni nada en Zaragoza, arremangado y sin camiseta interior, durante los meses de marzo yabril…

Confesaré que encontré un montón de excusas para saltarme un montón de

60

Page 61: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

«deberías» en forma de rebaje. El rebaje es una especie de disculpa ofrecida por unsuperior. Creo que el récord de rebajes del cuartel y del hospital militar era mío. Estabarebajado de afeitarme, de llevar la gorra, el cinturón y las botas, de maniobras, prácticasde tiro, deporte y no sé cuántas cosas más. Y es que es difícil ponerle la silla a uncorazón salvaje y libre. Eso sí, de llevar el uniforme de verano no me pude rebajar.

El problema de los «deberías» es doble, en primer lugar porque te reprimes mucho ytanta represión no se puede aguantar. Al final suele haber ciertas compensaciones osalidas de tono completamente desproporcionadas de consecuencias a veces noreconducibles. Cuando uno aguanta muchos «deberías» acaba teniendo cualquierconducta impulsiva. El otro problema es que acabas haciendo cosas sin sentido, y esadistancia entre lo que quieres y lo que debes acaba provocando desajustes, ansiedad,ataques de ira y mil cosas más. La realidad no siempre engrana a la perfección en lamaquinaria de las obligaciones, y las chispas que salen suelen ser en forma de trastornospsicológicos.

Otro de los factores que suelen limitar mucho la vida es la comodidad. Muchaspersonas lo sacrifican todo por la comodidad, pero esa comodidad muchas veces tan soloes aparente. Buscar la comodidad a menudo nos limita en exceso y es un peajedemasiado caro, por no hablar de todo aquello que nos perdemos. Con la comodidadpasa que no te da la oportunidad de ver, conocer y experimentar otras alternativas que amenudo son mejores, incómodas en el corto plazo, pero mejores a medio y largo plazo.

Por ejemplo, algunas personas no se han sacado el carnet de conducir por comodidad.Sí, ponerse a estudiar, hacer las prácticas y vencer ese periodo de aprendizaje resultacuando menos tenso e incómodo, pero necesario para poder tener una mayor libertad.Muchas personas no se separan por comodidad. Sí, buscar una casa nueva, empezar denuevo y reconducir tu vida es mucho más incómodo que liarte con otra persona, pero queno te quepa la menor duda de que a medio y largo plazo es mucho mejor una separación.Ese es el problema: por no asumir una pequeña incomodidad inmediata nos perdemosgrandes dosis de comodidad futura.

Es la paradoja de la comodidad, que no queremos plantearnos qué hay más allá, y enconsecuencia nos perdemos grandes aventuras. El que nada hace ningún error comete…Es algo así como vivir plácidamente, sin asumir incomodidades, ni importunos niposibles esfuerzos; pero la vida, querido lector, es un esfuerzo continuo.

Dormir en una pequeña tienda de campaña me permitió pasar el mejor verano de mivida; tiempo después, dormir en una furgoneta me pareció dormir en un palacio y denuevo pasé el mejor verano de mi vida; más tarde, dormir en una autocaravana me

61

Page 62: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

pareció dormir en una mansión, y de momento no he pasado el mejor verano de mi vidaporque estamos confinados… ¡Esperemos que lo podamos pasar! La comodidad es muymala consejera.

Finalmente está uno de los factores que más limitan la vida a millones de personas entodo el mundo: la seguridad. Pretendemos tener una vida segura, controlable ypredecible, sin sobresaltos, sin sorpresas, sin contratiempos y, como acabas de ver, lavida es inestable, dinámica, incierta y está completamente fuera de control.

Sacrificamos demasiadas cosas por una aparente seguridad. Ese contrato fijo, enrealidad, es un despido en cuanto les dé la gana. Ignoramos —después de leer este libro,ya no— que tenemos muchos más recursos de los que creemos.

Estamos preparados para vivir una vida incierta y dinámica. Tenemos una capacidadperceptiva increíble, podemos analizar millones de estímulos, tenemos una grancapacidad de análisis, creatividad, podemos tomar decisiones y mil recursos más.

Yo ya hace muchos años que tomé conciencia de que vivir es asumir riesgoscontinuos. Asumir el riesgo de una caída controlada por una cuerda me ha permitidoescalar altas paredes y montañas, asumir el riesgo de ser herido me ha permitido amarintensamente, asumir el riesgo a nivel profesional me ha permitido ser autónomo desdehace más de veinte años.

Ahora no es el momento de hacer historia ficción. Pensar en todo lo que pudo ser,pero no fue, no deja de ser una especie de tortura que no nos conduce a ninguna parte.En vez de perder el tiempo con lamentos, te propongo que te plantees todo lo que puedeser, lo que puedes hacer y lo que puedes vivir y sentir.

Acto seguido, plantéate todo lo que no puede ser, para analizar si realmente es así yde verdad no puede ser, o bien si existe alguna manera creativa de que sí sea y no tengasque renunciar a ello. En capítulos anteriores hemos hablado de la visualización comoestrategia para ayudarte a sobrellevar este confinamiento; pues mira, ahora ya puedesdotar de contenido a tus visualizaciones.

Esto ya se acaba, así que me permito darte algunos consejos finales para que puedasvivir la vida que quieres una vez que consigamos salir de casa. Empieza por tener valor.Estás más preparado de lo que crees para vivir en la incertidumbre.

Si pones tu imaginación bajo control, verás que no es tan complicado, tan solo tienesque probar, puedes probar a lo loco o con red, poco a poco o de manera impulsiva. Yodecidí ponerme a escribir libros a lo loco, y mira, este es mi quinto libro y estánpublicados por todo el mundo en varios idiomas. En cambio, a finales de año decidí

62

Page 63: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

empezar a hacer sesiones online poco a poco y ahora la vida, el coronavirus y elconfinamiento han provocado que acabe siendo a lo loco full time.

Que quieras cambiar de piscina no implica que te tengas que tirar ahora o en bomba;puedes hacerlo, sin duda, como yo con los libros, o puedes ir poco a poco o inclusoplanear el cambio de piscina para dentro de unas semanas o después de cumplir algunascondiciones.

Asume que la vida es incierta y cambiante y acostúmbrate a convivir con el riesgo. Elriesgo cero no existe, así que en definitiva se trata de que pases del riesgo diez que creesque tienes, cuando en realidad es un riesgo treinta, a un riesgo cuarenta o cincuenta. Elcambio no es tan grande.

La vida está detrás del miedo. Ojo, que yo tengo mis miedos como el que más, perosoy más valiente que temeroso, esa es la clave. Aprende a interpretar adecuadamente elmiedo, lo que tiene que decirte; el mensaje que tiene para ti es que te prepares mejor, noque dejes de hacerlo.

Asume también cierta dosis de incomodidad. Las mejores decisiones son incómodasen el corto plazo, pero mucho mejores a medio o largo plazo, no lo dudes. La últimaincomodidad que tuve que superar para tener grandes dosis de comodidad posterior fueun cambio de casa. Sí, la mudanza y todo el papeleo eran un palo, un auténtico rollo, unaincomodidad que salvar. Ahora bien, si me hubiera fijado en el corto plazo, me habríaperdido muchas ventajas de las que estoy disfrutando.

Nada bueno es fácil ni cómodo. Deja de esperar a que te pase algo que te cambie lavida desde el sofá y levántate y empieza a buscarlo. La incomodidad de ser autónomo ytener que buscar trabajo a diario me permite mucha libertad y enormes dosis desatisfacción. La vida es incómoda, así que asúmelo y no dejes de hacer nada porcomodidad.

Encuentra el equilibrio entre la cordura y la locura. Para las personas cuya prioridades la estabilidad, ser autónomo será una locura; en cambio, para otras personas serfuncionario es una gran locura. El equilibrio está en la dosis justa, y no olvides quesiempre estamos hablando de ti y de tus necesidades y prioridades. No necesitas laaprobación ni el permiso de nadie para vivir tu vida.

Prueba a llevar una vida más desinhibida, más espontánea. Piensa que en el futurollegará un momento en el que tendrás que tirar de nostalgia y de recuerdos, y no puedeser que añores lo que no has hecho, lo que te has perdido y lo que has sacrificado. Estásen el momento perfecto —cuando salgamos del confinamiento— para tener una vida que

63

Page 64: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

merezca la pena ser recordada. Aprovecha este confinamiento para empezar a diseñar tunueva vida, esa vida que merecerá un libro, una serie y una película.

Adopta el rol de un explorador, de un aventurero. Incorpora la aventura en tu vida.Yo he vivido mil aventuras y en ninguna de ellas me he hecho daño. He escaladomontañas, bajado en kayak por ríos desbordados por una riada, volado sin motor,trabajado por mi cuenta y riesgo sin la protección de una nómina, publicado varioslibros, cambiado de país de residencia, entrado en una base militar soviética abandonadaen Letonia y mil cosas más. Pero en mi día a día sigo disfrutando de numerosasaventuras. Descubro una nueva cafetería, me aventuro por un nuevo camino profesional,busco un lago escondido a más de dos mil metros de altura, trato de ser mejor padre yesposo y mil cosas más. Abre tu mente y disfruta del proceso que es descubrir una vidarepleta de oportunidades para aprender, disfrutar y crecer.

El secreto de la vida consiste en enriquecerla, y nadie enriquece la vida tanto comoun aventurero. Atrévete a ser un aventurero de pies a cabeza. Tengo una camiseta porcasa que pone «One life, live it»; es de las pruebas de selección para el Camel Trophyque realizó mi mujer. No puedo estar más de acuerdo. Solo tenemos una vida, no ladesperdicies.

Vive ligero. Cuanto más cargues, más te costará avanzar. Es posible que tengasalgunas cosas con las que cargar, pero revisa si son tantas y si realmente merece la penacargar con ellas. He vivido durante tres meses junto a mi mujer e hija en una furgonetaviajando por unos catorce países. Ha sido una de las experiencias de nuestra vida, enmayúsculas, y para realizarla necesitamos muy pocas cosas, exactamente las que cabíanen nuestra furgoneta.

Descárgate, libera obligaciones, repasa tus responsabilidades, revisa tus «deberías»,analiza todo lo que cargas y atrévete a liberar lastre.

Y, finalmente, una cosa más. Vive con sentido. Yo cada día, varias veces al día, mepregunto por el sentido de lo que estoy haciendo, de lo que voy a hacer o de lo que meproponen. Siempre me formulo la pregunta «¿qué sentido tiene?». Si la respuesta espositiva, voy de cabeza, y si es negativa, lo desestimo. Así que si vas a hacerme unaproposición, has de tener claro que me preguntaré si tiene sentido para mí o no.

Vivir con sentido requiere de valor, ya que cuando haces las cosas con sentido no haylugar para las obligaciones, los «deberías», la comodidad o el miedo. Eso sí, que lo quevayas a hacer tenga un sentido para ti, no para las personas que te rodean y que tepresionan de manera más o menos evidente. Sí, ya sé que es posible que la presión te lapongas tú solito. Pues lo mismo, si existe un antídoto, un único antídoto efectivo, es vivir

64

Page 65: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

la vida con sentido, pensando y analizando, tomando decisiones valientes, cambiando derumbo cuando sea necesario, con cierta flexibilidad para adaptar tus objetivos alcontexto, pero, muy especialmente, viviendo una vida que merezca ser recordada.

Pruébalo. Yo lo hice y ya no volví. Tuve que vencer muchas resistencias, os loaseguro. Pero no considero que pagara un precio elevado, al revés, el precio de nohaberlas vencido hubiera sido extremadamente caro.

Siéntete libre, actúa como si lo fueras y poco a poco lo serás. Gana en espontaneidad,vive de una manera más desinhibida. No dejes temas pendientes, no pospongas sueños.La vida cambia de un día para otro y se acaba de golpe. Querido lector, que el próximoconfinamiento no te pille sin haber vivido.

No lo olvides…

Somos vulnerables, no pierdas el tiempo.No vivas la vida que otros tienen preparada para ti.Atrévete a tomar tus propias decisiones y a cometer tus propios errores.Las decisiones que no tomamos también nos duelen.No dejes que el miedo te limite la vida.Revisa los «deberías» que tienes interiorizados.La comodidad es muy mala consejera.No sacrifiques tu vida por una seguridad que tan solo es aparente.La vida es incierta y cambiante, pero tienes todo lo que necesitas para vivirla.Vivir supone asumir riesgos continuamente.Es el momento de cultivar tus nostalgias futuras.Pon tu imaginación bajo control.Nada bueno es fácil, seguro ni cómodo.Deja de esperar y empieza a buscar.Adopta la actitud de un explorador.Enriquece tu vida, incorpora la aventura en tu día a día.Encuentra el equilibrio entre la cordura y la locura.Prueba a vivir una vida más espontánea y desinhibida.Vive ligero.Vive una vida con sentido.No pospongas la vida.

65

Page 66: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Agradecimientos

Mi primer agradecimiento va para mis vecinos Tere, Alfred, Sergi y Elisa. Este libro hacoincidido con un problema de salud de mi mujer y, gracias a ellos, hemos podidoocuparnos de la salud de Núria y despreocuparnos del bienestar de Alícia.

Mi agradecimiento también a todas las personas que me han apoyado en estosmomentos con sus muestras de cariño, oraciones, bendiciones, velas y buenos deseos.Formáis parte de mi vida, así lo siento y así lo vivo.

Mi agradecimiento más profundo a todas las personas que se han confinado en casa apesar de no tenerlo nada fácil. Vuestra responsabilidad merece todos mis respetos yadmiración. Alguien dijo que quien salva una vida, salva al mundo entero, y vosotrospodéis miraros al espejo sabiendo que habéis salvado al mundo entero.

Mi agradecimiento a Núria y Alícia; compartir la vida con ellas es todo un privilegioque merece ser agradecido en cada despertar.

Doy las gracias también a Txarli por sus audios, memes y chistes, que me ayudan arecuperar la sonrisa, y a Natalia por el simple hecho de ser una mujer extraordinaria,sensible y afable… También por cómo cocina. ¡Qué manos tiene!

Finalmente quiero dar las gracias a todo mi equipo editorial por el esfuerzo que estánhaciendo para que este libro llegue a vuestras manos lo más rápidamente posible, cuandomás se necesita. Hay temas intemporales que puedes tratar en cualquier momento;normalmente pasan meses entre que acabo un libro y se publica; pero algo tan exigente anivel emocional como lo que estamos viviendo requiere de un libro rápido, lo quesupone un gran esfuerzo compartido.

66

Page 67: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Notas

67

Page 68: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

1. Navarro, Tomás, Wabi Sabi: aprender a aceptar la imperfección, Barcelona, Zenith, 2018.

68

Page 69: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Eres más fuerte de lo que creesTomás Navarro No se permite la reproducción total o parcial de este libro,ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisiónen cualquier forma o por cualquier medio, sea éste electrónico,mecánico, por fotocopia, por grabación u otros métodos,sin el permiso previo y por escrito del editor. La infracciónde los derechos mencionados puede ser constitutiva de delitocontra la propiedad intelectual (Art. 270 y siguientesdel Código Penal). Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos)si necesita reproducir algún fragmento de esta obra.Puede contactar con CEDRO a través de la web www.conlicencia.como por teléfono en el 91 702 19 70 / 93 272 04 47. Diseño de la cubierta: Planeta Arte & DiseñoImagen de la cubierta: © Shutterstock © Tomàs Navarro Hernàndez, 2020 © de todas las ediciones en castellano,Editorial Planeta, S. A., 2020Zenith es un sello editorial de Editorial Planeta, S. A.Av. Diagonal, 662-664, 08034 Barcelona (España)www.planetadelibros.com Primera edición en libro electrónico (epub): abril de 2020 ISBN: 978-84-08-23181-3 (epub) Conversión a libro electrónico: Realización Planeta

69

Page 70: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

¡Encuentra aquí tu próxima lectura!

¡Síguenos en redes sociales!

70

Page 71: Eres más fuerte de lo que crees (Spanish Edition)

Índice

Sinopsis 4Portadilla 5Dedicatoria 7Prólogo 81. Eres más fuerte de lo que crees 102. Pon nombre a lo que sientes 173. Cuídate, eres importante 254. Acepta las nuevas reglas del juego 335. Da salida a tus emociones 426. Pon tu imaginación bajo control 527. Ocúpate en vez de preocuparte 58Agradecimientos 66Notas 67Créditos 69¡Encuentra aquí tu próxima lectura! 70

71