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Instituto de Estudios Humansticos Sede de la Sabidura
Instituto de Filosofa
El proyecto de vida da sentido al hombre, una propuesta
entre
Emmanuel Mounier y Jean Paul Sartre
Materia: Seminario de Tesis Asesor: Pbro. Lic. Oscar Efran Tamez
Villarreal
Profesor: Pbro. Lic. Anuar Tofic Canavati Gonzlez Tesina para
obtener el grado de
Licenciado en Filosofa Alumno: Alan Lorenzo Snchez Valencia
Ciudad Benito Jurez, Nuevo Len, a marzo del 2013
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DEDICATORIA
A Nuestro Seor Jesucristo y Nuestra Madre Santsima La Virgen
Mara, que a lo largo
de este tiempo le han dado a mi vida sentido participndome de su
Gracia y me han mostrado
cual es el camino de la verdadera felicidad; La Santidad.
A la Comunidad Cristiana de Cd. Victoria, que sin merecerlo ha
confiado en m para
que esta obra que Cristo ha comenzado en mi persona florezca y
no desfallezca; Gracias por
sus oraciones!
Al Seminario Diocesano de Cd. Victoria y el Seminario
Arquidiocesano de Monterrey
que me han permitido encontrarme con Jess quien me ha llamado; y
me han enseado a
servirlo en mis hermanos y a responder a Jess generosamente.
Al Padre Enrique Jr. Gmez Ramrez y Toda mi Familia, por sus
desvelos y su sincera
ayuda desinteresada; siempre han tratado de darme lo mejor aun
sin merecerlo, Gracias por
formar parte de mi vida!
A todos mis formadores del Instituto de Filosofa del Seminario
Arquidiocesano de
Monterrey juntamente con la Comunidad Cristiana de Monterrey, me
han acogido como uno
de los suyos; por medio de su esfuerzo y dedicacin, me han
formado para dar lo mejor de
m como persona y como hijo de Dios.
A Todos mis Hermanos Seminaristas que me han acompaado hasta
este momento de
mi formacin, he aprendido muchsimo de ustedes sobre todo la
fraternidad.
A Todos Aquellos que de alguna manera me han apoyado en esta
aventura de la
Vocacin.
Por ltimo, pero de manera especial dedico este trabajo a todos
aquellos jvenes que
todava no encuentran sentido a su vida, ojala encuentren
herramientas que les ayuden a
encontrarse y por medio de estas, y ser verdaderamente felices
como Dios lo quiere.
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NDICE
INTRODUCCIN
....................................................................................................
3
1. EL SENTIDO DEL HOMBRE SEGN JEAN PAUL SARTRE
...................................... 5 1.1 CONTEXTO HISTRICO
...................................................................................................
5 1.2 EXISTENCIALISMO DE SARTRE
.......................................................................................
6 1.3 EL HOMBRE Y EL MUNDO
..............................................................................................
8 1.4 EL HOMBRE Y LA LIBERTAD
........................................................................................
10 1.5 EL PROYECTO TICO DE SARTRE
.................................................................................
11
2. EL SENTIDO DEL HOMBRE SEGN EMMANUEL MOUNIER
................................. 14 2.1 CONTEXTO HISTRICO
.................................................................................................
14 2.2 EL PERSONALISMO DE MOUNIER
..................................................................................
16 2.3 EL HOMBRE Y LA COMUNIDAD
....................................................................................
18 2.4 EL HOMBRE Y LA LIBERTAD
........................................................................................
20 2.5 LA ACCIN PERSONALISTA
..........................................................................................
22
3. EL PROYECTO DE VIDA COMO ACCIN DEL HOMBRE
....................................... 25 3.1 POR QU UN PROYECTO
DE VIDA?
..............................................................................
26 3.2 ELEMENTOS DEL PROYECTO DE VIDA
..........................................................................
28 3.3 VALORES DE UN PROYECTO DE VIDA
..........................................................................
30 3.4 EL PROYECTO DE VIDA COMO RESPUESTA AL SENTIDO DEL HOMBRE
....................... 31
CONCLUSIN
.......................................................................................................
34
BIBLIOGRAFA
.....................................................................................................
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3
INTRODUCCIN
A lo largo de la existencia del hombre hemos de observar lo
compleja y el emocionante
sentido de poder ser y el realizarse dentro de ella; lo ms bello
que podemos conocer, es decir,
la vida slo es comprendida por el hombre cuando se empea en
mejorarla continuamente,
trazando la vivencia lo mejor que le convenga. Es emocionante
vivir y pasar por todo lo que
implica la existencia del hombre an las dificultades, porque a
travs de toda la existencia
descubrimos y conocemos todo aquello que nos conviene y lo que
no. Compleja porque
ningn otro ser en este mundo puede decir como el hombre Me he
Realizado! O Soy Feliz!
En la actualidad la existencia del hombre se esta tornando cada
vez ms confusa. ste ya
no se pregunta por quin es o de donde viene y ni siquiera
alcanza a visualizar cul es su
finalidad. Todo este sinsentido que se ha creado por la cultura
totalitarista y utilitarista en
torno a la vida del hombre lo confunde a tal punto que hay
quienes abogan por un sinsentido
de la vida ms que un sentido. Las expectativas del hombre quedan
aplazadas pues, el mundo
no gira en torno a l y su vida ha sido transformada por
literalismos que solo lo reducen por
debajo de su Dignidad.
Ante la incertidumbre que gira alrededor del hombre y donde no
se puede adquirir un
verdadero sentido de la vida. Es necesario preguntarse por cual
es el proyecto de vida que le
conviene y si este le da sentido a su vida, es decir, el hombre
para alcanzar su finalidad debe
preguntarse por si el proyecto de vida da sentido a su vida? De
forma que al hacerse esta
primer pregunta pueda empezar a reflexionar sobre aquello que lo
define y obtenga identidad
ante un mundo que confunde a aquellos que no saben quienes son.
Esta pregunta tambin nos
la hacemos nosotros para poder guiar esta reflexin.
Sartre y Mounier tuvieron esta experiencia de vida; experimentar
los xitos y fracasos,
debido a esto, pusieron en marcha lo mejor que le pueden heredar
al hombre; el pensamiento
de cmo enfrentar la vida especialmente en los momentos de mayor
trascendencia para ella.
En cada pensamiento expresado por ellos, encontramos elementos
ticos para una mejor
claridad de identidad de la persona.
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La tesina contenida en cuanto a su objeto material refiere al
proyecto de vida y su objeto
formal al sentido de la vida en Sartre y Mounier. Expone como
objetivo el poder identificar el
proyecto de vida como una herramienta necesaria para la vida,
por medio de la reflexin de
los pensamientos de Jean Paul Sartre y Emmanuel Mounier como
respuesta al sentido de la
vida humana. El mtodo utilizado es el Analtico-Sinttico.
Se expresa a cada uno de los pensamientos de los autores,
empezando en el primer
captulo con Jean Paul Sartre, utilizando especialmente la obra
El existencialismo es un
humanismo y apoyndose con algunas otras obras que tienen
elementos importantes que
aportar al tema; el segundo con Emmanuel Mounier, esencialmente
en la obra Manifiesto al
servicio del personalismo adems de algunas otras que contribuyen
a clarificarlo; y el tercero
es una comparacin de las dos propuestas interpretadas a la luz
de varios autores de lnea
moderada. Llegando al final con una conclusin de corte
cristiano.
En cuanto al cuerpo del trabajo en el primer captulo,
presentamos a Sartre sintetizando
su pensamiento, con la intencin de desmenuzar algunos aspectos
que ayudan a comprender
el proyecto de vida del hombre, para establecer as su propuesta,
que proporciona luces a la
existencia del hombre y la cual compararemos con Mounier. En el
segundo captulo al igual
que el primero, sintetizaremos el pensamiento sobre Mounier, del
cual se desprende un
lenguaje propio pero que tiene relacin con la forma de
expresarse de Sartre; enfocndose en
lo vital que es para l darse cuenta de s mismo y tomar accin. En
el tercer captulo,
estableceremos las perspectivas de cada pensamiento, de manera
que juntos con aciertos y
errores le ayuden al hombre a vislumbrar la importancia de tomar
conciencia del proyecto de
vida y llevarlo a la prctica.
La aportacin de este trabajo, da comprensin a la existencia del
hombre indefinido
acentuando en la tica una forma de cmo dar respuesta congruente
para ste, adems nos
ayuda a establecer criterios a seguir ante las dificultades que
algunas veces podemos
experimentar por el sinsentido nihilista y el utilitarismo que
reducen al hombre, centrndolo
slo como un objeto que funciona o no.
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1. EL SENTIDO DEL HOMBRE SEGN JEAN PAUL SARTRE1
Las personas en nuestros das se han empezado a preguntar sobre
el sentido del hombre,
esto debido a la prdida de identidad en la juventud, provocado
por la falta de atencin a las
necesidades bsicas de ste. Se recurre frecuentemente a terapias
como la Psicoterapia
Cognitivo Conductual2, en donde se plantean visualizar proyectos
y metas concretos3 de
manera que la persona alcance cierto grado de madurez. El
sentido del hombre propuesto por
Sartre, puede ayudar a profundizar, sobre los verdaderos retos
del hombre y las herramientas
que la vida ofrece para superarlos.
Debido a esto, es de suma importancia su doctrina, llamada:
existencialismo ateo, que
tuvo su mayor apogeo en las dcadas de los 40s a los 60s. Desde
luego l no ha sido el nico
que se ha preguntado por el sentido de la vida, ha habido otros
pero, nos interesa ste por la
claridad que maneja y desde luego porque da luces de cmo
interpretar el sentido del hombre.
Para comprender esta doctrina, es necesario entender cuales eran
las circunstancias en las que
vivi, porque as su propuesta encuentra ms significado y de las
cuales subrayaremos las ms
relevantes.
1.1 CONTEXTO HISTRICO
El pensamiento de Sartre est fuertemente marcado por los hechos
histricos que
dominan la primera mitad del siglo XX (Hay dos Guerras Mundiales
con casi o ms de 60
millones de muertos, las Revoluciones sucedidas en los pases de
Rusia y China, las dictaduras
de Italia y Alemania, la crisis econmica de los aos 30 y el uso
de la energa atmica con
fines armamentistas); todos ellos determinaron un proceso de
despersonalizacin que hizo que
el hombre perdiera su identidad, diluido en una masa social que
se manipula fcilmente.
1 Sartre naci en Pars en 1905 y muri en 1980 en la misma ciudad.
Escritor y filsofo, tras la guerra se convirti 2 CASTILLO, J., Tu
eres lo que te imaginas, pg. 20. 3 CFR. CASTILLO, J., Tu eres lo
que te imaginas, pg. 20.
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Los tiempos en que vivi Sartre fueron demasiado turbios, es una
poca de crisis; todo
esto contribuy a una despersonalizacin del hombre donde pierde,
aunque no totalmente, su
identidad. Por parte del capitalismo el hombre se vuelve un
consumidor y por parte del
socialismo se entierra la individualidad del hombre volcndolo a
las masas. El hombre de este
tiempo est inanimado, ve pasar los acontecimientos como un
espectador, temeroso de
expresar su pensamiento.
Sartre con su propuesta filosfica revolucionar esta actitud
extremosa de identidad de
parte del hombre proponiendo a ste como creador de su propia
historia y que participa
activamente de sta, su filosofa es comprometida con el individuo
y otorga prioridad a la
existencia frente a la esencia, a la vida sobre la razn, a la
praxis sobre la teora y a la libertad
sobre el determinismo.4
En el campo de reflexin hay que resaltar las muchas corrientes
filosficas que se dieron
en su tiempo pero, el problema que se plantearn sintticamente
era, en que los fines no
correspondan a los intereses que se haban trazado aquellos
hombres y que en nuestros
tiempos se refleja por una falta de atencin a la fidelidad, a la
verdad y a la perdida de valores.
Cuando los intereses de estos se turnaron ms a la tcnica, se
dejaron de lado valores
como la dignidad humana, pues si en la poca moderna el hombre
fue el centro de reflexin,
en la poca contempornea este se ve relegado por lo que puede
realizar.
Los intereses estn por encima del mismo hombre, pues se ve
afectado por la necesidad
de vender su mano de obra y lo que produce no es suyo sino de
alguien que lo ha contratado.
Empiezan a surgir en cierta forma categoras de hombres y ante
esto surge la pregunta: Para
qu existe el hombre? Sartre, atendiendo a esto, lo explica a
travs de su existencialismo.
1.2 EXISTENCIALISMO DE SARTRE
Entendemos por existencialismo una doctrina que hace posible la
vida humana y que,
por otra parte, declara que toda verdad y toda accin implica un
medio y una subjetividad
4 Cfr. SARTRE, J., El ser y la nada, pg. 107.
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humana5. El existencialismo, entiende a un hombre que se
construye a s mismo y que el
mundo es cierto en la medida en que fue construido6. Pareciera
adems que esta doctrina nos
lleva a un campo en donde el hombre no ve ms sino lo mal que se
encuentra; no hay otra
forma ms que la que l da a sus acciones y que el mismo
emprende7, debido a esto Sartre
menciona: El reproche esencial que nos hacen,[] es que ponemos
el acento en el lado malo
de la vida humana8. Al analizar la historia, observaremos en
ella lo sangrienta que ha sido la
vida del hombre, se trata de ver al hombre de una manera natural
pero no de una manera
biolgica sino ms bien sociolgica.
en realidad es la doctrina menos escandalosa, la ms austera; est
destinada estrictamente a los tcnicos y filsofos. [] hay dos
especies de existencialistas: los primeros: son cristianos, entre
los cuales yo colocara a Jaspers y a Gabriel Marcel, de confesin
catlica; y, por otra parte, los existencialistas ateos, entre los
cuales hay que colocar a Heidegger, y tambin a los existencialistas
franceses y a m mismo. Lo que tiene en comn es simplemente que
consideran que la existencia precede a la esencia, o si se
prefiere, que hay que partir de la subjetividad9.
La divisin que hace Sartre es para diferenciar claramente su
propuesta de los otros que
como l trataban de dar sentido al hombre por medio de un
proyecto. No incluye a Dios dentro
de su propuesta pero lo cierto es que no podemos prescindir de l
y menos un existencialista,
pues es necesario para que exista una moral. En su intento por
querer mostrar a un hombre tal
cual es, algunos lo critican por ser demasiado crudo al explicar
su realidad. Dios es tomado
como un concepto y no como un Demiurgo10 (considerado por los
cristianos). Lo cierto es que
el hombre no puede dejar de lado su naturaleza, es quien es y no
hay posibilidad de negarse y
si de algn modo lo hiciera sus acciones lo delataran; puesto que
no obra aquello que no es.
5 SARTRE, J., El existencialismo es un humanismo, pg. 12. 6 Cfr.
SARTRE, J., El ser y la nada, pg. 233. 7 Continuamente el
pensamiento de Sartre es considerado como pesimista pues cada
hombre adecua su vida a como ve conveniente, segn hemos expuesto
hasta ahora, pero nuestro autor no busca ms que ver al hombre en
cuanto a su naturaleza. Debido a esto consideramos necesario el
exponer las opiniones que l da a sus crticos. 8 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 12. 9 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 14. 10 Cfr. SARTRE, J., El ser
y la nada, pg. 202.
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8
La existencia de cada individuo est condicionada y definida por
una magnitud y
fuerzas que desde el pasado influyen en el presente, creando una
situacin en la que nos
hallamos emplazados y que sigue marcando nuestra propia
existencia11.El mostrar a un
hombre tal cual es, sera fijarlo de manera que se de cuenta de
quin es y la relacin que este
tiene con su entorno. Un hombre que no se integra con otro no
forma un proyecto de vida y
ste camina sin sentido en la vida, es decir, el hombre se hace
con otros hombres y se
configuran juntos. El hombre est condicionado a estar en el
mundo, vivir en el tiempo y
segn lo que construya ser la forma que tomar su mundo. El hombre
es un ser que se va
haciendo de un modo concreto, jams se construir algo que no sea
hombre; en este sentido
est condicionado a ser hombre. ste tiene la seguridad de s mismo
por lo que otros han
construido, es decir, nosotros aprendemos a ser hombres; una
configuracin que se nos va
formando desde la infancia y que la personalizamos segn nuestros
gustos y criterios
aprendidos a lo largo de nuestra historia. Toda esta construccin
que se hace el hombre la hace
sobre l mismo pero el hombre tambin est inmerso en el mundo.
1.3 EL HOMBRE Y EL MUNDO
[] la esencia [] procede a la existencia; y as est determinada
la presencia frente a
mi []. Tenemos aqu una visin tcnica del mundo, en la cual se
puede decir que la
produccin procede a la existencia12. Lo que trata de mostrar es
que el hombre primero se da
cuenta de su existencia, luego ste toma conocimiento del mundo,
en el cual l trata de
definirse. As pues, el hombre no es nada, pues debe construirse,
incluso su misma naturaleza
porque el hombre es lo que l se hace. En sntesis, Sartre muestra
con esta expresin a un
hombre que se construye a s mismo. Ese construirse puede
entenderse como el concepto de
bien a primera vista, es decir, es apetecible en el hombre el
hecho de hacerse pero, para Sartre
este concepto se realiza en un proyecto tico13, es decir, el
hombre va marcando y va eligiendo
lo que le conviene; refirindose de que si el hombre se
construye, ste tiene que construirse en
algn lugar, es decir, el mundo que se ha creado.
11 CORETH , E., Qu es el hombre, pg. 232. 12 SARTRE, J., El ser
y la nada, pg. 202. 13 Se profundizar ms adelante sobre el proyecto
tico.
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El mundo es el modo de ser del hombre y este es el fundamento
del existencialismo
pues no se es fuera del mundo sino dentro de ste, el hombre se
encuentra indeterminado en
esta realidad, de forma que su vida es un proyecto lleno de
posibilidades a realizar, es decir, el
hombre no es en s sino para s.14 En l la existencia configura su
esencia, esto es pues, que el
hombre no es hasta que se hace en el mundo.
El reflejante no es sino para reflejar el reflejo, y el reflejo
no es reflejo sino en tanto que remite al reflejante. As, los dos
trminos esbozados de la dada apuntan el uno al otro, y cada uno
compromete su ser en el ser del otro. Pero, si el reflejante no es
nada ms que reflejante de ese reflejo, y si el reflejo no puede
caracterizarse sino por su ser para reflejarse en ese reflejante,
ambos trminos de la cuasi dada, apoyando sus dos nadas la una sobre
la otra, se anonadan conjuntamente. Es preciso que el reflejante
refleje algo para que el conjunto no se desmorone en la nada15.
El otro es indispensable para mi existencia, como mi
conocimiento, pues m
intimidad me descubre al otro que es una libertad ante m y que
adems es totalmente
diferente, puesto que piensa y quiere lo diferente de m. As
descubrimos a la
intersubjetividad llamado el mundo del hombre que decide qu es y
lo que son los otros.
La forma de existir de cada hombre comienza primeramente por el
cuerpo, despus por
su conciencia y luego su definicin que se hace en el mundo. El
hombre est tan relacionado
con el mundo que no puede existir sin el otro. Es una condicin
de la cual est condicionado,
es decir, no existe en otro lugar en el cual habitar, sino en el
mundo que conoce y se construye.
La construccin de este es definida por el hombre pues es el que
tiene la capacidad de
modificarlo, es decir, no entendida desde un sentido idealista
sino ms bien en la forma en que
ste se construye el estar en l.
Esto exige responsabilidad de parte del hombre pues se elige y
lo eligen, habita con
otros hombres y en su libertad los elige a ellos. De no ser as
queda en la esterilidad de su
mundo pues ste se construye con los otros y nunca sin estos ya
que los otros ya decidieron
14 Cfr. SARTRE, J., El ser y la nada, pg. 203. 15 SARTRE, J., El
ser y la nada, pg. 203.
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escogerlo y formar parte de su mundo de manera directa16. La
libertad del hombre es la
eleccin que realiza, pero esta libertad que el hombre ejerce
hasta qu punto lo hace como el
piensa?
1.4 EL HOMBRE Y LA LIBERTAD
[] El hombre est condenado a ser libre. Condenado porque no se
ha creado as
mismo, y sin embargo, por otro lado, libre, porque una vez
arrojado al mundo es responsable
de todo lo que hace17. Cada uno de nuestros actos, crea al
hombre que queremos ser, adems
se llega a crear una imagen del hombre que creemos es el ideal,
es decir, nuestra
responsabilidad es mucho mayor porque compromete a la humanidad
entera. Para descubrir
mi libertad es necesario observar la del otro pues con ste se
descubre como dice: el hombre
no es otra cosa que lo que l se hace18.
La libertad del hombre lo hace reinventarse cada da y no tiene
otro porvenir que l
mismo; este porvenir condiciona al hombre, pues est desamparado
y no tiene a quin lo
reinvente sino l mismo. La libertad en el hombre exige una
disposicin de ser lo que se ha
trazado pues la angustia que suele salir de l mismo lo sumerge a
un estado del cual no puede
salir y solo l mismo se puede rescatar.
En la bsqueda de la libertad, descubre el hombre la necesidad de
intimidar consigo
mismo; esto no como una monada cerrada sino abierto a los dems;
que dan el sentido que
debe emanar mi existencia ya que sin los otros hay sinsentido y
se est condenado a una
angustiosa vida pues no se tiene porque existir y el hombre se
pierde a s mismo.
La eleccin que hacemos es lo que nos da la libertad. Y es aqu
donde entra en la
encrucijada de qu elegir, pues construirse est claro pero el qu
construir es lo que nos dar
sentido y nos dar un proyecto que nos lleve a la felicidad a una
vida ms fecunda. La libertad
consistir entonces en elegir construirse pero de manera que no
cause dao en otro ni en uno
mismo. La eleccin contribuye a la libertad pero, el hecho de ser
libre no nos tiene asegurado
16 Cfr. SARTRE, J., La Nusea, pgs. 13-14. 17 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 22. 18 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 16.
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la asertividad en nuestras vidas. Nos enfrentamos a la eleccin
que hace el hombre y que se
orienta hacia la libertad, es decir, a la que se ve orientado
por ser creatura, este sera el bien
mximo del hombre19. Todas las elecciones que por libertad
construimos deben estar dirigidas
hacia el bien de uno mismo y del prjimo y esta se da a travs de
un proyecto al que Sartre lo
ha llamado proyecto tico.
1.5 EL PROYECTO TICO DE SARTRE
El hombre es ante todo un proyecto que se vive subjetivamente []
el hombre ser
ante todo lo que habr proyectado hacer20. Este proyecto es
perfectible y es entendido no de
una manera moral cristiana sino natural y que conduce al hombre
hacia un actuar tico llevado
a cabo con responsabilidad de manera prctica.
La tica siempre se realizar en un proyecto ya que sta forma es
la nica garanta que
se tiene de la accin perfectible del proyecto. Representa adems
la construccin de la vida
con sentido del hombre. ste configura las ideas de bien y de
mal, entendido como el
dualismo de devenir en el hombre. Sartre con esto nos muestra su
preocupacin por hacer
valer las orientaciones ticas para el proyecto perfectible a
partir de la libertad del hombre
como un sistema siempre abierto en el que el hombre se realice
histricamente.
Primeramente para la construccin de este proyecto Sartre dice:
ninguna moral general
puede indicar qu hay que hacer21, esto no refirindose a un
subjetivismo puro, sino ms
bien a la conciencia que el hombre debe tomar al momento de
ejercer su libertad, por medio
de la eleccin, poniendo por debajo cualquier inters que no
corresponda a una moral natural22.
Al momento de tomar una eleccin el hombre se compromete consigo
mismo y con el otro.
Esta conciencia adems toma una dimensin de autonoma que
significa despertar al hombre
como ser libre.
19 Cfr. SARTRE, J., La Nusea, pgs. 17-20. 20 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 16. 21 SARTRE, J., El
existencialismo es un humanismo, pg. 25. 22 Refirindose a aquello
que no viene del mismo hombre no puede ser para l.
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Estoy en el dominio de las posibilidades; pero no se trata de
contar con los posibles
sino en la medida estricta en que nuestra accin implica el
conjunto de esos posibles23. Esta
segunda caracterstica de la construccin del proyecto hace
referencia al hombre que en
determinadas situaciones elige realizarse como un hombre con
sentido recto en cuanto a la
accin, es decir, lo que se explica es que ste no es un hombre
sino una serie de posibilidades
que se tienen y, es la de hacerse hombre con cada accin que
realiza, englobndola de manera
que podemos decir que el hombre es lo que se imagina.
Debo comprometerme; luego, actuar segn la vieja formula: no es
necesario tener
esperanzas para obrar24. No tengo la seguridad de la accin del
otro, lo que tengo seguro es lo
que yo har, esto en la medida de mis posibilidades y que llevar
a buen termino. El hombre
no puede relegar su compromiso esperando a que el otro responda,
tiene que responder l
mismo porque fuera de esto no tiene nada y por el contrario
tiene todo que ganar; tiene que
ponerse en movimiento, tomar accin de lo que hace y no ser
pasivo en lo que acontece.
La doctrina que yo les presento es justamente lo opuesto al
quietismo, porque declara: solo hay realidad en la accin; y va ms
lejos todava, porque agrega: el hombre no es nada ms que su
proyecto, no existe ms que en la medida en que se realiza, no es
tanto el conjunto de sus actos, nada ms que su vida 25.
La realizacin de este proyecto incluye un dinamismo sugerente en
el cual no hay
posibilidad de desviacin y que lleva a la persona al compromiso.
Sartre con su contundente
reflexin deja de fondo, que se es hombre en la medida en que se
realiza en su proyecto;
fuera de este no es nada. Esto nos lleva a la realizacin del
hombre segn sus actos y estos
seran su mayor virtud porque el hombre es lo que se hace y su
vida lo que se construye en
ella pero, este obrar es conforme a la recta razn.
23 SARTRE, J., El existencialismo es un humanismo, pg. 26. 24
SARTRE, J., El existencialismo es un humanismo, pg. 28. 25 SARTRE,
J., El existencialismo es un humanismo, pg. 28.
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El hombre es el que escoge, determina, exige y define, es lo que
en resumidas cuentas
podemos decir de Sartre. Hay otros elementos dentro de ese
proyecto de vida, ya que ste slo
implica al hombre que escoge, hay adems otros que dan identidad
al hombre al momento de
determinar y que no podemos dejar pasar por alto. Y es
conveniente hablar de Mounier como
aquel que nos introduce a los valores que han de practicarse en
ese proyecto.
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2. EL SENTIDO DEL HOMBRE SEGN EMMANUEL MOUNIER26
Es interesante poder observar las circunstancias en las que el
hombre vive actualmente,
si hacemos consiente el pasado nos daremos cuenta de las luchas
que el hombre ha tenido que
ir surcando para vencer y no ser vencido, es decir, la corrupcin
que ha sufrido en su vocacin
lo ha llevado a declararse en oscuridad y crisis. Mounier trata
de ayudar a este hombre con su
tenacidad y preocupacin en su pensamiento.
El hombre y sus estructuras se han degradado; ya que no ve con
sus ojos sino a travs
de instrumentos que le falsean la realidad. Ya no confa en s
mismo sino en lo que los otros
le dicen y debido a esta actitud el hombre ha perdido identidad,
adems de que no encuentra su
camino a la felicidad. Pero, siendo ms intuitivos, observando
mas all de lo que realmente al
hombre le sucede, es decir, el hombre actual piensa que ya no
tiene tiempo sino solo para el
hoy, por lo tanto el pasado no sirve porque ya pas y el futuro
tampoco pues todava no llega.
Se evidencia que se ha evocado slo al presente pero, a dnde
lleva al hombre? cul es su
finalidad? cmo establece su proyecto? etc. Es lo que trataremos
de descubrir con Mounier,
adems de establecer su propuesta ya que nos sirve para el doble
objetivo de reflexionar y
enfocar.
2.1 CONTEXTO HISTRICO
A pesar de la presencia ubicua y repletiva del fenmeno blico,
pocas generaciones como la de Mounier se habrn visto tan obligadas
a encuadrar sus biografas en el marco de los horrores colectivos.
La Primera Guerra Mundial (1914-1919), la Revolucin de Wall Street
(1929), la Guerra Civil Espaola (1936-1939) Y, claro la nusea
existencialista, la nusea burguesa, y todas las nuseas,
manifestaciones de un mismo desfondamiento antropolgico. Por si
faltaban caonazos, la Segunda Guerra Mundial27.
26 Mounier nace en 1905 en Grenoble y muri en 1950 en
Chatenay-Malabry, junto a Pars Francia. Principal representante del
personalismo, abandon el estudio de la medicina para dedicarse a la
filosofa. En 1929 renunci tambin a ejercer una carrera
universitaria para trabajar como periodista. Cfr. FRANCO, V.,
Enciclopedia de Obras de Filosofa, pg. 1520. 27 SELLS , F.,
Propuestas Antropolgicas del Siglo XX, pg. 137.
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15
Hemos de observar lo cruenta que es la realidad en que vivi
Mounier. Todas estas
situaciones que le toc vivir lo llevaron, sin duda, a ser un
gran luchador contundente que no
dud en tratar de establecer algo con qu contribuir a la juventud
que en su tiempo estaba
perdida porque no haba tiempo para ellos. Pero antes de hablar
de su propuesta es necesario
fundamentar el contexto en el cual vivi para descubrir la
profundidad de sus palabras.
Mounier es un inspirador nato tal es el caso de muchos filsofos
de su tiempo pues se
adhirieron a la causa que representaba Esprit28. Mas all de ser
una revista era un movimiento
de hombres jvenes que queran difundir las ideas personalistas
con el objetivo de transformar
la sociedad29. Adems con esta revista el personalismo30 se
vuelve ms relevante y Mounier se
convierte en su referente debido a la interaccin intelectual con
la realidad31.
Por otra parte Mounier se opone abiertamente a los ambientes que
se fraguan tal es el
caso del capitalismo y el socialismo muy latentes en la cultura
en su poca. Otro factor
importante es la desconfianza del hombre en s mismo pues ah se
encuentra devaluado,
extraviado, y ha perdido la brjula de su puesto en el
cosmos32.
Siendo ms precisos para establecer el pensamiento de manera
clara sobre Mounier, se
puede realizar a partir del dilogo con la tradicin, cada nueva
doctrina se desprende de lo ya
habido, siendo esta nueva voz la manera de perpetuar desde el
presente este dilogo con el
pasado33. Refirindonos por supuesto a este enfoque que nos da
Mounier y debido a esto es
necesario empezar a hablar un poco de lo que le aconteci.
28 Revista fundada por Mounier junto a G. Izard y A. Dlage en
1932. Cfr. BURGOS, J., El personalismo, pg. 55. 29 BURGOS, J., El
personalismo, pg. 55. 30 Doctrina que insiste acerca del valor
absoluto de la persona y sus relaciones de solidaridad con otras
personas. Cfr. Voz Personalismo en ABBAGNANO, N., Diccionario de
Filosofa, Fondo de la Cultura Econmica, 1963, pg. 913. 31 BURGOS,
J., El personalismo, pg. 11. 32 Cfr. GONZLEZ, R., Emmanuel Mounier
y el Existencialismo Ateo: Debate en Torno a la Intersubjetividad y
la Muerte, Persona y Biotica, 2010, Vol. 14, Nm. 1, pg. 68. 33
GONZLEZ, R., Emmanuel Mounier y el Existencialismo Ateo: Debate en
Torno a la Intersubjetividad y la Muerte, Persona y Biotica, 2010,
Vol. 14, Nm. 1, pg. 68.
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16
La vida y obra de Mounier se sita en una encrucijada marcada por
tres grandes acontecimientos que condicionaron continuamente su
reflexin: la crisis econmica que sucedi a la Primera Guerra Mundial
(1929), la influencia de la Revolucin Rusa de 1917 en el movimiento
obrero de toda Europa, la notable represin existente ms proclive al
anatema que al dilogo34.
El pensamiento Mounieriano se fragu en estas circunstancias y
cuanto ms importancia
tienen sus palabras pues tomarn ms relevancia ya que se cobijan
de las problemticas por las
que originalmente fueron escritas. Y s fueron de ayuda en su
momento; con la mirada que
realizamos hoy nos ayudar para entender el proceso que vivimos
los hombres actualmente y
sobre la cual nosotros trataremos de responder al proyecto de
vida que cada quien observa
esperando sirva para su reflexin.
2.2 EL PERSONALISMO DE MOUNIER
Llamamos personalista a toda doctrina, a toda civilizacin que
afirma la primaca de
la persona humana sobre las necesidades materiales y sobre los
mecanismos colectivos que
sustentan su desarrollo35. El pensamiento de Mounier trata de
llevar a aquella parte de la
vida que se olvida y que muchos han tratado de manipular: a la
verdadera finalidad del
hombre, vida que busca pero que est ms all de lo que parece.
Esta revolucin como
Mounier la llama trata de centrar al hombre, es decir, todas las
cosas que se llevan a cabo
cosifican al hombre y lo que se pretende ms bien es dignificarlo
puesto que fueron hechas
precisamente para que estn al servicio de l y no el hombre al
servicio de las estructuras de
desarrollo.
Personalismo no es ms para nosotros ms que un santo y sea
significativo, una
cmoda designacin colectiva para doctrinas distintas que, en la
situacin histrica en que
estamos situados, pueden coincidir en las condiciones
elementales, fsicas y metafsicas, de
34 GONZLEZ, R., Emmanuel Mounier y el Existencialismo Ateo:
Debate en Torno a la Intersubjetividad y la Muerte, Persona y
Biotica, 2010, Vol. 14, Nm. 1, pg. 69. 35 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 367.
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17
una nueva civilizacin36. Con esta afirmacin Mounier busca dar un
verdadero fin a la causa
del hombre. Las ideologas que se han practicado no han dado ese
verdadero sentido al
hombre; se han querido establecer proyectos dentro de los cuales
el del hombre mismo lo han
llevado a la desesperacin. Estos nuevos valores de los que nos
habla Mounier tienen la
intencin de renovar al hombre dentro de una comunidad, puesto
que ste no se desarrolla
fuera de ella.
Nuestra finalidad inmediata es definir, frente a unas
concepciones masivas y parcialmente inhumanas de la civilizacin, el
conjunto de primeras aquiescencias que pueden servir de base a una
civilizacin centrada en la persona humana. Estas aquiescencias
deben estar lo bastante fundadas en la verdad como para que este
nuevo orden no se divida contra s mismo; lo suficientemente
comprensivas tambin como para agrupar a todos los que, dispersos en
las diferentes filosofas, participan de este ltimo espritu37.
El hombre en su condicin de ser superior del cosmos se ha
dispersado en ideologas que
lo han rechazado a l mismo y al estar excluido se ha perdido.
Todo aquello que se realice
para el desarrollo del hombre ha de estar apegado a la verdad y
es que lo llevar a su
verdadera finalidad pero, debe estar encausada, es decir, el
hombre puede conocer la verdad
pero no sabe cmo llegar a ella, sabe que hay una felicidad pero
tal parece que no es tan
necesaria porque requiere salir del efecto del somnfero que le
han dado a beber las ideologas
que solo buscan excluir al hombre. Y precisar estas filosofas no
es competencia de la carta
comn que aqu esbozamos: eso es labor propia38. por lo tanto el
proyecto ha de realizarlo el
mismo hombre, apegado a la verdad que ayuda a ste a descubrirse,
adems de revolucionar
la sociedad en la cual vive y se desarrolla.
El despertar del hombre hacia una nueva visin de su vida debe
conllevar en l una serie
de acciones. Estas lo ponen en el camino de conocimiento
personal. Todo esto que se ha
despertado en l no ser posible sin antes entender, no slo lo que
le acontece a s mismo,
36 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 367. 37 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 367. 38 Cfr. MOUNIER, E., El Personalismo
Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del Personalismo-, pg.
367.
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18
sino tambin lo que hay a su alrededor ya que es ah donde se
realizar esta revolucin; con
un nuevo sentido y a la cual Mounier nos invita.
2.3 EL HOMBRE Y LA COMUNIDAD
El primer acto de mi iniciacin a la vida personal es tener
conciencia de mi vida annima. El primer paso, correlativo, de m
iniciacin a la vida comunitaria es la toma de conciencia de mi vida
indiferente: indiferente para los dems, porque est indiferenciada
de los dems. Aqu estamos por debajo del umbral donde comienza la
vida solidaria de la persona y la comunidad39.
La vida del hombre est marcada claramente por la conciencia que
ste toma de ella pero
no puede ser fecunda para Mounier si no se realiza en una
comunidad. Llamado a estar inserto
en ella, porque es su forma de expresin, es ah donde adquiere
una posicin e identidad junto
con los dems.
Este despertar que nos menciona Mounier no sera correcto si
antes de ello el hombre no
se da cuenta de lo que sucede a su alrededor, refirindose a que
no ha habido un despertar de
su voluntad para los otros, por lo tanto tampoco para s, pues
permanece indiferente, es decir,
no por l sino por lo que hace a los dems; por as decirlo,
considera al otro como objeto y no
como persona.
Esta salida del anonimato en su conciencia y la comunidad, mueve
al hombre a la
solidaridad con los dems y por lo tanto se abre al mundo que lo
rodea, al cual Mounier llama
comunidad pues es ah donde el hombre se encuentra y es
responsable no slo l sino los otros
tambin de l.
39 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 422.
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19
El mundo del no estaba diseado: el mundo del nosotros adquiere
unas referencias, unas costumbres, unos entusiasmos definidos. El
mundo del careca de voluntad comn: el mundo del nosotros tiene
fronteras y se realiza all con vigor. El mundo del se es el mundo
del dejar pasar el de la indiferencia; el mundo del nosotros se
templa por una abnegacin consentida y a menudo heroica a la causa
comn40.
Varios hombres forma una comunidad un hombre no. Esta comunidad
a menudo est
determinada con ciertos valores para que el hombre tenga un
desarrollo ntegro. Mounier no
entiende al hombre y la comunidad indefinidas por lo tanto hay
en ella criterios del cual el
hombre aprende y los pone en prctica de manera que hay una
identificacin. La definicin
por parte de la comunidad depende del hombre y viceversa pues
todo est puesto para el bien
comn.
En esta comunidad no se pude dejar para el maana lo que se puede
hacer en el hoy pues
es una aportacin que se hace, con la intencin de mejorar el
porvenir. La conformacin de
todo lo que implica la comunidad tendr repercusiones con el
hombre en todos los mbitos,
por eso es necesario que el hombre no deje de hacer lo que le
toca pues todos son responsables
de lo que acontece. El hombre no puede ser, si no lo es con los
dems hombres, pues de no ser
as no prosperar y se quedar en la indiferencia, por eso mismo la
comunidad en la que se
desarrollan no avanzar pues estar siempre esperanzado en lo que
el otro realiza.
Cuando comienzo a interesarme por la presencia real de los
hombres, a reconocer esta presencia frente a m, a aprehender la
persona que ella me revela, el t que ella me propone, a no ver en
ella una , una cualquiera, una cosa viva pero extraa, sino otro yo
mismo, entonces he realizado el primer acto de la comunidad sin la
cual ninguna institucin tendr solidez41.
40 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 422. 41 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 425.
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20
El precio que paga una persona al no ser responsable con lo que
hace es, segn Mounier,
la despersonalizacin del que tiene enfrente, pues el otro es una
cosa ms que est puesto a mi
lado. El no salir de s hace que se pierda, y que no encuentre su
verdadera vocacin pues no
se descubre o no se le revela sino es con el otro. El hombre en
su necesidad de definicin no
puede dejar de lado la entrega constante y fiel. Todo lo que
emprenda, ya lo dice Mounier,
ser slido pues el otro ya no es una cosa sino un yo mismo como
lo menciona, y el otro
conforma conmigo una responsabilidad compartida en la
comunidad.
La realidad y posicin del hombre est para Mounier en la entrega
que realiza en la
comunidad. Es ah donde se realiza y encuentra todo lo que es
necesario para su felicidad. La
vida del hombre no esta creada para la infecundidad sino para un
fin y no lo encuentra solo
sino con el otro conformando un nosotros. Esta posicin en la
comunidad que el hombre
busca no puede estar slo en un discernimiento muy idealizado
tiene que realizarse en la
comunidad la cual es accin para el hombre de una entrega de su
libertad al otro pues,
solamente as su proyecto adquiere sentido ya que es en el otro
donde se consuma.
2.4 EL HOMBRE Y LA LIBERTAD
La libertad del hombre es la libertad de una persona, y de esta
persona construida y
situada en s misma as, en el mundo y ante los valores42. La
respuesta que Mounier da es
clara, la centra en la persona, pues la libertad es un acto del
hombre y por el cual se determina.
La libertad est determinada concretamente a la accin del hombre.
Lo que el hombre realiza
est marcado por su libre albedro. Es aprobable este ejercicio en
la medida en que est
centrado en la persona, el mundo y los valores.
Estos conceptos de los que nos habla Mounier son garantes de una
verdadera conciencia
y una verdadera libertad, pues el hombre acta conforme a un acto
racional que tiende
siempre al bien, es decir, el hombre no puede ejercer una
libertad irresponsable pues atentara
contra su persona.
42 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -El
Personalismo-, pg. 726.
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21
Esto implica que est por regla general estrechamente
condicionada y limitada por nuestra situacin concreta. Ser libre
es, en primer lugar, aceptar esa condicin para apoyarse en ella. No
todo es posible en todo momento. Estos limites cuando no son
demasiado estrechos, constituyen una fuerza. La libertad no
progresa, al igual que el cuerpo, sino gracias al obstculo, a la
eleccin, al sacrificio43.
Como se sabe no podemos hacer todo lo que se dese. Nuestra
libertad es algo que se va
construyendo con responsabilidad y se apoya en la integridad de
la persona. Debe ser adems
consciente de sta, pues no podemos establecer demasiados
condicionantes de la conducta
puesto que no sera una regulacin de la libertad sino una
opresin. Tambin la libertad es un
modo de ser antes que una forma de hacer, es decir, tiene una
identificacin con el hombre en
su esencia y no con su obrar, pues lo que el hombre realiza nace
del ser que posee.
Nuestra libertad es la libertad de una persona situada, pero es
tambin la libertad de una persona valorizada. No soy libre por el
simple hecho de ejercitar mi espontaneidad; me hago libre si
inclino esta espontaneidad en el sentido de una liberacin, es
decir, de una personalizacin del mundo y de m mismo44.
La libertad de la que habla Mounier adems tiene que ser madura.
No podemos caminar
por el mundo sin un sentido de libertad, debe estar encausada
para el desarrollo integral de la
persona y la comunidad. Encausada la libertad adquiere un valor
importante para el hombre,
pues es libre aquel que, an estando impedido por ciertas
opresiones, sabe administrarlas y
decidir an en circunstancias difciles.
El hombre en el ejercicio de su libertad se descubre ciertamente
con determinismos
como, ocupar un espacio determinado y que desde un primer
momento pueden parecer que
coartan la libertad. Tampoco podemos identificar la libertad con
libertinaje, pues sta consiste
en la responsabilidad que se tiene del ejercicio propio y del
otro. El hombre es en verdad libre
no por lo que puede hacer y sin que sea interpelado por otro,
sino en la medida en que
43 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -El
Personalismo-, pg. 726. 44 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa
Esencial -El Personalismo-, pg. 728.
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22
administra y es responsable de s mismo pues, todo hombre tiene
derechos as como tambin
obligaciones y dentro de ellos se ejerce la libertad que es
racional, consiente y responsable.
2.5 LA ACCIN PERSONALISTA
Y ahora si, cmo hacer para salir adelante? Porque no basta con
comprender, hay que actuar. Nuestra finalidad, el fin ltimo, no es
desarrollar en nosotros o alrededor de nosotros el mximo de
conciencia, el mximo de sinceridad, sino el asumir el mximo de
responsabilidad y transformar el mximo de realidad a la luz de las
verdades que hayamos reconocido45.
El conocer no da la certeza de que algn problema se resuelva, es
decir, el conocer es un
paso de la solucin y se concretiza con la accin del hombre que
acta y ms an porque
conoce que acta. El hombre puede conocer todos los valores pero
se ven reflejados en l por
los actos que realiza y no porque los conoce. La accin no puede
ser esperada sino urgida
pues el tiempo que tenemos es bastante corto.
Para Mounier este asumir en mi conciencia y transformar mi
comunidad como
consecuencia, sera en cierta forma vivir a la luz de las
verdades. Hay muchos actos que
podemos realizar para la toma de conciencia y transformacin y el
principal, adems de
rector sobre todos, es el sentido que decidamos darle.
Mounier no pretende dar un mtodo sino un camino por el cual
podamos andar y pensar.
Y todo esto que se propone se logra por la meditacin, es decir,
ser antes que obrar46. Todo
lo que pretende Mounier es dirigirse hacia un bien integral de
la persona realizado en su
proyecto de vida en el cual no puede haber desanimo sino ms bien
animo por lograr lo mejor
para el hombre, su prjimo.
45 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 527. 46 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 529.
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23
El proceso que nos propone Mounier contiene unas directrices
para que no nos
desviemos. El primero de ellos es el compromiso personal47. En
un primer momento nos
podemos encontrar en la participacin en la comunidad de manera
inconsciente pero, al
momento de hacer consiente mi compromiso este se vuelve ms
participativo y ms fecundo,
es decir, hay una nueva actitud y brota de ella la voluntad
orientada al compromiso y no tanto
al poder o el xito individual. La segunda seran las rupturas48.
En la cual nos invita
Mounier tiene de consecuente que no podemos romper con la
persona sino ms bien con
aquello que en cierta forma es farisaico, es decir, no ayuda en
el desarrollo e integracin de la
persona pues slo es superficial en cuanto al efecto que causa en
ella y slo la somete a una
dependencia que no lo lleva realmente a ser libre. La tercera
sera una tcnica de los medios
espirituales49. Todo lo que la persona utilice debe estar regido
por ella misma de manera que
adquiera un medio proporcional a ella. Mounier supone aqu un
desposeimiento50, es decir,
una ascesis, todo aquello que perturbe al hombre y lo desvi de
su camino hacia la pureza de
un verdadero compromiso. Adems estas son las coordenadas de la
accin de su proyecto que
llevan al hombre a un verdadero estado de donacin.
Entendmoslo bien. Por definicin una accin personalista est al
servicio de todas las personas; no puede cubrir ningn inters
parcial, ningn egosmo de clase, aunque sea de la clase ms
necesitada. Pero cualquier accin, si ha de ser inspirada por
valores universales, se apega a unos intereses, a unas situaciones
colectivas, a unos sentimientos dominantes. Debe actuar sobre una
situacin histrica de la que ella no ha elegido los elementos51.
Toda accin que emprendamos debe estar dirigida al servicio de la
comunidad, a los
otros, y por ningn motivo fuera de esta pues se estara
desvirtuando el sentido que se ha
trazado. Ningn fin puede justificar los medios por los cuales
pretendo alcanzarlos sino ms
bien aquello que est conforme a la dignidad de la persona. Ella
tiene ideales que toma para
vivir su proyecto de vida y debe ser coherente en sus
compromisos y decisiones pues se debe a
47 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 533. 48 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 534. 49 MOUNIER, E., El Personalismo Antologa
Esencial -Manifiesto al Servicio del Personalismo-, pg. 534. 50
MOUNIER, E., El Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al
Servicio del Personalismo-, pg. 535. 51 MOUNIER, E., El
Personalismo Antologa Esencial -Manifiesto al Servicio del
Personalismo-, pg. 527.
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24
una comunidad. El hombre es bueno por esencia por lo tanto sus
sentimientos deben y estn
encausados en aquello que acontece en su momento pues es el nico
referente para
enfrentarlos y resolverlos. No hay nadie atrs de esa silueta a
la que llamamos hombre sino
una persona que se integra y desarrolla en la donacin personal
de s mismo hacia el otro.
Mounier pretende que descubramos un camino por el cual podamos
avanzar y sobre l
meditar, adems de ponernos al servicio del otro. Ya que en la
accin est la integracin y
fijacin del hombre. La persona es ms de lo que podemos ver, es
un misterio pero que no
puede permanecer en este misterio, aunque lo sea, sino ms bien
debe emprender aquello que
lo lleve hacia la direccin correcta; primero y por medio de su
proyecto de vida, que Mounier
lo entiende como la accin direccionada a la persona y que nos
conduce de facto a la felicidad
que es fin ltimo de la persona.
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25
3. EL PROYECTO DE VIDA COMO ACCIN DEL HOMBRE
El hombre como en cualquier otro tiempo busca la manera de cmo
responder a su
finalidad. Segn los filsofos antes vistos; ellos vivieron en
circunstancias similares y desde la
subjetividad de sus juicios trataron de encontrar la forma de
cmo responderse y poder
acercarse a una forma de vida que los condujera a tal meta. Esta
finalidad se convierte en
accin para el hombre pues es lo que conduce su diario vivir.
Sartre en su propuesta para que el hombre alcance esta meta, lo
deja a criterio personal,
es decir, el proyecto de vida lo confecciona el hombre a su
gusto sin nada que alcanzar, ms
que, lo que el hombre quiera, pero siempre recordndole su
responsabilidad.
Mounier en su propuesta, hace que el sujeto tome conciencia de
lo que acontece a sus
semejantes; propone qu el proyecto adecuado del hombre ha ser
aquel en donde se retome a
l mismo y de igual modo a su semejante, es decir, la identidad
que tiene cada quien realizado
en su vocacin.
Los humanos somos, por naturaleza, tentadores y escudriadores de
una realidad que siempre se nos muestra incierta. Por ello, la
experiencia se forma a travs de las mltiples probaciones que
hacemos de y con la realidad que vivimos. Esa probacin nos vincula
con toda una suerte de pertenencias y adscripciones que van
moldeando nuestro devenir. Pero la pertenencia sola no es un
absoluto que asegura todas las respuestas a nuestra inagotable sed
de preguntas. Toda pertenencia, en el orden social, poltico o
religioso, es una meditacin que nos acerca o nos aleja de forma de
vida solidarias y encarnadas en el territorio de lo concreto52.
Cada quien busca la manera de realizarse y llegar a la finalidad
de la vida y, atendiendo
a lo de Sartre, desde la perspectiva de Mounier es complicado no
estar comprometido en la
vida, pues se caera en un libertinaje porque no hay una
directriz adecuada para su realizacin,
puesto que el hombre no es autosuficiente y necesita de la
atencin del otro.
52 ARANGUREN, G., Vivir es Comprometerse, pg. 15. Autor que
interpreta a Mounier
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26
Aunque con Sartre el hombre puede tener esta opcin nada asegura
que se pueda
comprometer primeramente consigo mismo y despus con el otro,
pues no hay un valor que le
de sentido, a diferencia de Mounier .
Los dos coinciden en la integracin del hombre pero, Sartre lo
deja a criterio personal, es
decir, no hay algo que le gui al hombre ms que su propia
intuicin. En cambio Mounier
propone vivir conforme a los valores, en especial el de la
verdad pues solo aqu encontrar un
proyecto adecuado para su vida personal y como consecuencia la
felicidad.
No siempre hemos sido como somos ahora, ni tenemos por qu ser en
el futuro como
somos ahora. Digan lo que digan los profetas del fin de la
historia, de nosotros depende el
futuro, como antes les sucedi a nuestros antepasados53. Lo que
Sartre y Mounier proponen en
su visin del hombre y cmo ste debe interpretar lo que acontece a
l mismo y su alrededor;
no es ms que tomar las riendas de su vida encausndola hacia el
bien: para Sartre el que se
construye el mismo hombre, para Mounier el que se apega a la
verdad, pero a fin de cuentas
retomar y dirigirla hacia algn lugar. El hombre por su parte no
debe ser ajeno a todo esto ya
que es lo que le conviene para el buen vivir, adems no se puede
existir y decidir la no
existencia pues, eso implicara un dao muy profundo para el
hombre. En este punto los dos
coinciden en procurar siempre la integridad personal y la del
prjimo. Debido a esto, en
palabras de los dos: iniciarse en la vida; solo se inicia a
partir de la conciencia que tengo de
ella y de la capacidad de perfeccionarla con lo que he aprendido
en ese devenir de acierto y
error.
3.1 POR QU UN PROYECTO DE VIDA?
Tenemos que aprender por nosotros mismos y, despus, ensear a los
desesperados que en realidad no importa que no esperemos nada de la
vida, sino si la vida espera algo de nosotros. Tenemos que dejar de
hacernos preguntas sobre el significado de la vida y, en vez
53 Cfr. FERNNDEZ, M., Memoria para la Esperanza, pg. 10.
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27
de ellos, pensar en nosotros como en seres a quienes la vida les
inquiera continua e incesantemente54.
Sartre en su reflexin deja claro que no hay nada que la vida te
ofrezca, por eso su
respuesta es tajante; el proyecto que da sentido es aquel que
uno quiere. Mounier, por su parte,
atendiendo la necesidad de su tiempo, no le interesa tanto
aquello que la vida pueda ofrecer
sino lo que l puede darle a ella. Y para eso refiere al
compromiso lo que uno est dispuesto a
hacer por el bien del otro. Sin lugar a dudas no hay nada que en
esta vida nos ofrezca como
Sartre nos lo menciona pero Mounier en su reflexin va ms all de
la gratuidad sin sentido; la
que espera Sartre, va por una proyecto adecuado que le ayude al
hombre a ser hombre y este
no se logra si no se comparte con el otro, es decir, hay que
buscar comprometerse con la vida
y no a la inversa pues ese ser el verdadero proyecto del
hombre.
Nuestra contestacin tiene que estar hecha no de palabras ni
tampoco de meditacin, sino de una conducta y una actuacin rectas.
En ltima instancia vivir significa asumir la responsabilidad de
encontrar la respuesta correcta a los problemas que ello plantea y
cumplir las tareas que la vida asigna continuamente a cada
individuo55.
Esperamos de la vida ms de lo que nos puede ofrecer y ofrecemos
poco de lo que la
vida nos exige. Este dilema vivido hoy por innumerables personas
nos devela la falta de
identidad que padecemos. Ya Sartre en su reflexin habla de la
definicin que se hace el
hombre pero, en nuestros tiempos como en los suyos se descubre
la falta de identidad. ste ya
no logra vislumbrar la finalidad de la vida y ni siquiera sabe
como lograrla pues no hay
proyecto de vida, y si llegara a tenerlo se pierde esperando a
que la vida lo haga por l. Sartre
habla de un hombre emprendedor que procura dar a su vida lo que
necesita pero sin esperar
nada de ella, pues lo logra por su ingenio. Mounier no es ajeno
a esta realidad y el hombre
para l es aquel que se entrega a la comunidad esperando
ciertamente de ella pero, no de
manera pasiva sino contribuyendo en lo necesario, es decir, toma
conciencia de su realidad y
54 FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 113. 55
FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 114.
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28
se dona, pues es consiente y sabe que al no hacerlo su vida se
ha perdido. Como nos dir
Vctor Frankl el significado de la vida difiere de un hombre a
otro, de un momento a otro, de
modo que resulta imposible definir el significado de la vida en
trminos generales56.
Refirindonos a que como los autores mencionan cada quien tiene
que procurar el sentido de
su vida, es decir, el proyecto de vida es subjetivo y debe
amoldarse a cada hombre pero, debe
realizarse pues de no hacerlo se ha llegado al sinsentido del
hombre.
La vida del hombre busca un por qu vivir, y cada quien trata de
dar ese porque. El
proyecto de vida propuesto por los autores mencionados definen
al hombre y le dan ese por
qu vivir. Como Frankl nos advierte, no podemos definir la vida
en trminos generales. Pero
lo que s podemos hacer es encausarla por medio del proyecto de
vida, en el cual cada ser
humano es responsable de lograrlo y de perfeccionarlo. Logrando
as encontrar la finalidad de
la vida o su sentido. Debe aspirarse a lo absolutamente mejor si
se quiere llegar a lo
relativamente mejor57. De esta manera el proyecto de vida se
vuelve indispensable para
cualquiera pues es la forma en que vivimos nuestras decisiones y
as nuestro actuar ser
siempre de manera adecuada.
3.2 ELEMENTOS DEL PROYECTO DE VIDA
Los elementos del proyecto de vida siempre ser algo difcil de
encontrar sobre todo
porque resulta difcil la definicin de la vida. Lo cierto es que
nuestros autores dan ciertos
criterios a tomar en cuenta.
Para Sartre un elemento importantsimo es la conciencia de
responsabilidad. No busca
algo que lo determine en el hacer sino que hay un mundo lleno de
posibilidades a realizar.
Otro elemento importante es la realizacin del proyecto de vida
llamado por l proyecto tico
pues es el regulador de las ideas de bien o mal. Es decir, en la
medida en que yo me imagine
sern los elementos que debern tener mi proyecto de vida.
56 FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 114. 57 LUCAS,
R., Explcame la Persona, pg. 217.
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29
Mounier tambin habla de la toma de conciencia pero a diferencia
de Sartre se toma
conciencia para desarrollar la realidad y potenciarla apegados a
las verdades que hallamos
reconocido de manera que adquiramos la mayor responsabilidad. No
se puede ser consiente y
no tomar accin de lo que nos sucede alrededor, sera imposible
para Mounier por eso para l
un elemento importantsimo es el compromiso personal que es
llevado a cabo en la
comunidad.
Hay dos maneras de actuar. La accin de los unos est dirigida al
xito, entiendo por ello el xito histrico, la adscripcin temporal
que seala el fin del riesgo, el comienzo del confort, de la
seguridad, de la tranquilidad. La accin de los otros est dirigida
al testimonio; saben que sus pequeas victorias sobre el mal no sern
ms que victorias incipientes y siempre cuestionadas. Los primeros
tienen prisa y utilizan tcticas de corto alcance. Los segundos
ponen su confianza en el tiempo y en su fe. Los primeros son los
propietarios de su causa. Los segundos son testigos de lo que les
sobrepasa. En fin, los primeros se preocupan en hacer antes que
ser, los segundos intentan ser para hacer, o para que sea hecho,
con o sin ellos58.
Cada quien sabe lo que le conviene para su vida personal y no
hay forma de cmo
poner en las decisiones del hombre lo que debe tomar pero, lo
que si se puede hacer es
ayudarle a que en la medida que sus acciones sean apegadas hacia
el bien ste trascender su
vida. Los elementos son importantes en el proyecto del hombre no
porque le definan el
proyecto sino porque le dan pautas para dirigir todas sus
acciones, pues estas son las que dan
sentido al hombre y siempre estn antepuestas por su ser como nos
dice Ramn Lucas Lucas:
el hombre es un espritu encarnado59. Todo cuanto realice el
hombre debe estar dirigido
hacia algo por su condicin.
La forma de actuar ya nos la dice el autor anterior ser antes
que hacer. Para Sartre, es el
hacer antes que el ser, es decir, no hay un fin por el cual
actu, y con l se ha perdido el
sentido de porque actuar y se acta por una necesidad muy
personal. Al contrario de Mounier
porque soy, hago esto o aquello comprometindome con el otro. Los
elementos son parte
aguas a la hora de actuar pues nos demuestran el contenido de la
accin y agregarlos al
58 ARANGUREN, G., Vivir es Comprometerse, pg. 20. 59 LUCAS, R.,
Explcame la Persona, pg. 174.
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proyecto de vida que emprendo sern de mucha ayuda pues, no son
una condicionante para el
hombre sino un garante de la libertad que poseo y que en relacin
con la verdad me llevarn
a esa autntica libertad60. sta es a la que todos los hombres
aspiran lograr y que a veces se
confunde con el libertinaje, es decir, se confunden pensando que
la libertad en mis acciones es
hacer lo que yo quiero, sino es ms bien el actuar con
responsabilidad, porque soy consiente
de lo que acontece.
3.3 VALORES DE UN PROYECTO DE VIDA
La temporalidad de la existencia no est cargada solo de aos sino
tambin, y sobre
todo, de significados61. Estos son los que procuramos dar a la
vida y son aquellos que nos
darn esa voluntad de sentido, adems de que ellos son los valores
que vivimos en nuestra
vida, es decir, tomamos valores que nos parecen adecuados a
nuestra existencia y los
desarrollamos, tambin son conocidos como los hbitos que pueden
procurar una virtud o un
vicio. Debido a esto, la importancia de la vivencia de los
valores, pues en la medida en que los
vivamos obtendremos una jerarqua de lo importante en la vida y
ser el obrar adecuado de
cada persona.
Sartre en su reflexin tica nos dice que el valor importantsimo
de un proyecto de vida
es la autodeterminacin. El hombre se hace a s mismo, es
responsable para consigo mismo y
para con el otro pero esta accin que emana del pensamiento de
Sartre, es porque al no haber
nada que se ofrezca en la vida la nica opcin que se tiene es la
que l mismo se inventa. As
es que el valor de la autodeterminacin va en busca de una
vivencia que ms o menos le d
algo al hombre en que entretenerse mientras llega su muerte. Es
evidente que hay una vivencia
de valores en l pero no de aquellos que den significado a la
vida del hombre y lo lleven a su
verdadera finalidad en la vida.
Mounier reflexiona sobre una serie de necesidades que ataen al
hombre y la
comunidad. La vivencia y participacin en la comunidad sera un
valor importante para
Mounier pues esta es la que lo integra y desarrolla. Entonces el
valor importante que para
60 Cfr. LUCAS, R., Explcame la Persona, pg. 116. 61 ARANGUREN,
G., Vivir es Comprometerse, pg. 86.
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Mounier sera indispensable en el proyecto de vida es la donacin.
Esta es una salida del
hombre que se encuentra encerrado por sus necesidades personales
y se abre para participar de
las necesidades de los otros, es decir, de la comunidad. Esta
nueva actitud del hombre hacia la
vida hace que adquiera un camino, en donde encuentre un
verdadero significado por lo que
hace y su vida se llena de contenido adecuado para sus acciones,
es decir, lo que el hombre
realiza tiene un verdadero significado que lo determina.
Nunca el hombre se ve impulsado a una conducta moral; en cada
caso concreto decide actuar moralmente. Y el hombre no acta as para
satisfacer un impulso moral y tener una buena conciencia; lo hace
por mor de una causa con la que se identifica, o por la persona que
ama, o por la gloria de Dios62.
Los valores son los que hacen que nos identifiquemos con algo o
lo rechacemos; que
actuemos o no, y decidamos hacerlo. Pero, lo cierto es que
nuestra vida no puede estar sin
significado y ella siempre tender hacia ellos ya sea de manera
consiente o inconsciente.
Debido a esto nuestros autores tratan de dar su perspectiva:
Sartre con la autodeterminacin y
Mounier con la donacin. Con estos conceptos los autores
pretenden establecer una forma
adecuada de concebir los valores y la manera como te marcan en
la vida por medio del
proyecto de vida.
3.4 EL PROYECTO DE VIDA COMO RESPUESTA AL SENTIDO DEL HOMBRE
El vaco existencial es un fenmeno muy extendido. [] Ello es
compresible y puede deberse a la doble prdida que el hombre tiene
que soportar desde que se convirti en un verdadero ser humano. []
Carece, pues, de un instinto que le diga lo que ha de hacer, y no
tiene ya tradiciones que le indiquen lo que debe hacer; en
ocasiones no sabe ni siquiera
62 FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 142.
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lo que le gustara hacer. En su lugar, desea hacer lo que otras
personas hacen (conformismo) o hace lo que otras personas quieren
que haga (totalitarismo)63.
El proyecto de vida que hemos venido hasta este momento
develando, por medio de nuestros autores, muestra que su efecto
final es la felicidad. Tanto Sartre como Mounier tienen
algo en comn: el activar al hombre y de rescatarlo de la
desesperanza tal vez uno con mayor
grado que otro.
El hombre no puede definirse con una sola cosa, es decir, son
muchas cosas a la vez
integradas en su persona. Su felicidad depende de lo que l
entienda por felicidad. Pero, en
este camino que se llama existencia y en la cual algunos saben
como enfrentarla y otros no.
Conviene que sepamos que lo mejor que podemos realizar es no
esperar a que ella haga algo
con nosotros sino tener la esperanza de que lo que realicemos
con ella a travs de nuestro
proyecto personal de vida, nos dar el significado verdadero de
nuestras vidas.
El sentido que tal vez podemos vislumbrar debe trascender en mis
acciones pues ah es
donde se manifiesta lo que realmente deseo y adems en donde la
voluntad es llevada a la
prctica. No basta conocer la verdad si esta no es practicada.
Nuestros autores nos dicen lo que
conviene para vivir pero llevarlo a cabo depende de cada quien y
jams dejar de estar
perfecto sino hasta la muerte.
El proyecto de vida viene a ser para el hombre la forma en cmo
llegar a la finalidad de
la vida. El desconocerlo nos llevar por la vida como meros
espectadores y jams saldremos
de la observacin. En cambio si me decido por realmente formarlo,
lo que haga ser vivir
como un hombre ntegro que se dona, segn Mounier y habremos
alcanzado lo que nuestros
autores nos mencionan: el verdadero sentido de ser hombre, pues
un animal no se pregunta por
quin es, slo el hombre puede y junto con el otro podr
contestarse pues es lo que conoce,
segn Sartre.
El proyecto de vida da sentido al hombre, pues no es una
definicin sino un definidor de
lo que al hombre le conviene para su vida. Su prctica y
constancia lo har un hombre capaz
63 FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 149.
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de responder a las necesidades que la vida le depare adems de
que adquiere un por qu vivir y
as podr soportar cualquier cmo de la vida64. En pocas palabras
es el motor del sentido del
hombre.
64 Cfr. FRANKL, V., El Hombre en Busca de Sentido, pg. 147.
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CONCLUSIN
Hemos de enfocar este trabajo como una reflexin sobre el
proyecto de vida, matizado
en dos autores que ayudan a comprender las caractersticas con
las cuales el hombre puede
identificarse, adems de que es una forma de cmo ayudarle en su
proceso de conocimiento
sobre s mismo, hasta que llegue al pleno consentimiento de su
identidad; por lo tanto hemos
de concretizar esta reflexin tica sobre aquello que hace al
hombre alcanzar la felicidad.
Podemos visualizar que el fin ltimo del proyecto de vida es
conducir al hombre hacia la
felicidad, pues es el objetivo de cada uno de los autores. En la
vida, hay angustia y
desesperacin que ahogan al hombre causando en l a que no
encuentre la forma de cmo
llevar a cabo su vida; muchas veces por la inconciencia de sus
actos o porque no se ha dado
cuenta de quin es. Este devenir en el hombre de retomar aquello
que le conviene ocupa de
herramientas necesarias que lo conduzcan por la senda buena,
garantizndole un sentido de
vida alcanzado por acciones buenas que lo determinen.
Cada quien en menor o mayor grado posee un proyecto de vida que
lo conduce por la
vida proporcionndole valores que determinan sus actos y por ende
un sentido de vida. En la
vida del hombre este va construyendo como dira Sartre o va
tomando conciencia como dice
Mounier de lo que le conviene. Y es que cada quien practica lo
que le parece adecuado y toma
de ello lo necesario para ir tejiendo su vida por medio del
proyecto de vida que le da sentido
en su existir.
Concluimos primeramente con Sartre, la visin de este filsofo
sobre el proyecto de vida
es bastante simple, no busca otra cosa que mostrar al hombre tal
cual es sin establecer nada
que no sea natural y sin describir un fin ultimo del cual el
hombre pueda alcanzar, pero, esto
en cuanto a su vida; no tanto a la visin que tiene el hombre
sobre ella y esa es la gran
diferencia que marca la pauta en el proyecto de vida.
Lo que hay alrededor del mundo tal vez parezca sinsentido como
algunos pueden acusar
a Sartre por la descripcin pesimista que hace ste de la
realidad, pero el mundo no puede
condicionar al hombre, al contrario ste es el que modifica su
entorno; y lo invita, este
filsofo, a que sea responsable con lo que construye y es ah
donde Sartre descubre su
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pensamiento, heredndonos elementos que aportan al proyecto de
vida como la accin y la
responsabilidad del hombre en relacin con el otro y la cosa.
Por lo tanto Sartre, da al hombre herramientas que le ayudan a
definirse pero sin
condicionar en l la forma de proceder, pues seria contrario al
espritu transparente de su
pensamiento, ms bien se queda en la lnea racional de todo
aquello que el hombre puede
tomar para su actuar, dejando a su libertad responsable la
construccin adecuada de su
proyecto de vida como garanta para Sartre de un correcto
proceder que configura al hombre
como lo que es, hombre libre responsable que se construye a
travs de un proyecto de vida
tico. Dentro de nuestra reflexin Sartre prepara para al hombre,
por as decirlo, la masa con
la que se construye el molde que da paso a la construccin del
proyecto de vida.
Mounier, es contemporneo de Sartre y tiene una visin de la vida
muy distinta a la de
su par. Sin embargo busca la misma finalidad que el otro: la
realizacin del hombre,
proponiendo para l la manera adecuada de cmo lograrlo.
En una vista general a su pensamiento descubrimos que es un polo
opuesto al de Sartre,
aparentemente. La visin de proyecto de vida que tiene Mounier se
lleva a cabo y se descubre
en la comunidad. El hombre no puede realizarse fuera de ella y
debido a esto su propuesta
toma la lnea de potenciar la conciencia del hombre en cuanto a
su comunidad. Todo se
traduce para Mounier a la accin del hombre por los otros.
La propuesta Mounieriana ayuda al hombre a descubrirse lo
indiferente que es y al
momento de darse cuenta de ello lo invita a que tome accin de su
realidad, pues no basta para
l slo el conocer. La comunidad genera, en el hombre, valores
como el bien comn, la
solidaridad y donacin adecuando al proyecto de vida de ste
valores esenciales para armar su
proyecto de vida de forma que lo conduzca con sentido por el
sendero de la vida. Entonces
para Mounier el hombre es aquel que se descubre indiferente y
que superando su
indiferencia por medio de la comunidad, adquiere para su
proyecto personal de vida los
valores necesarios que le dan sentido. De esta forma el
pensamiento de Mounier aporta para
nuestra reflexin el marco dentro del cual el hombre da forma a
su proyecto de vida.
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El encuentro de estas dos visiones nos dan pautas para poder
tomar de cada una de ellas
tanto valores como elementos que iluminan al hombre en su
bsqueda de sentido por medio
del proyecto de vida. Tanto la masa como el marco que
descubrimos, son componentes
necesarios que ayudan al hombre a descubrir su identidad de
forma que su vida toma sentido.
Tanto Sartre y Mounier, pujan al hombre a que descubra quin es,
de manera que su
vivencia sea muy lgica y congruente en adecuacin con su
naturaleza. Y lo que proponen
estos autores es de gran vitalidad para el hombre pues dan molde
a su vida, pero no la llenan
debido a que eso le corresponde al Acto Puro que lo
participa.
El proyecto de vida provee al hombre de aquellos elementos
necesarios de anclaje como
la conciencia, responsabilidad y accin en l. Pero, los valores
que son incluidos en el hombre
emanan del bien y al cual el hombre ha de observar y practicar
para poder llenarse de aquello
que por s mismo no puede ser en l de manera innata. Refirindonos
a que los grandes valores
que dan trascendencia a la vida del hombre y un verdadero
sentido de vida dependen del Acto
Puro, por lo tanto el hombre se descubre necesitado de l y al no
poder alcanzarlo por su mal
mtodo estos autores nos ayudan a dar un buena forma de cmo crear
ese molde para despus
poder ser llenado.
En el objetivo que trazamos al inicio de esta reflexin por lo
tanto se desenlaza de
manera positiva porque cumple con la principal inquietud que es
la de descubrir aquellos
elementos que dan sentido a la vida del hombre, adems de la
importancia de hacer consiente
y practicar el proyecto de vida como fuente generadora de
sentido para la vida del hombre. Tal
vez podremos decir que el concepto de algo es su descripcin pero
cuando se trata de discernir
sobre la vida del hombre y lo que le conviene ya no es
descripcin sino que pasa a ser
significado y es lo que pretende el proyecto de vida.
Por lo tanto para el hombre de estos tiempos en donde se
descubre necesitado de sentido
de vida, el proyecto de vida es una herramienta indispensable
para todos aquellos que han
decidido no seguir en el anonimato y aislamiento del sinsentido,
brindndole un soporte para
que todas sus acciones adquieran significado y a su vez den
sentido alcanzando la felicidad.
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