Don pio alvarado

Don Pio Alvarado

El Tamunangue

PIO RAFAEL ALVARADO 1895-1983

El viejo roble de Curarigua

En Curarigua de Leal, Parroquia Antonio Díaz de Municipio Autónomo Torres del estado Lara, nació el 4 de marzo de 1895, Pío Rafael Alvarado. Hijo de Gualdo Suárez y María Trinidad Alvarado, ocupa un lugar en la evolución de la música larense como autor y compilador de décimas, tonos y aguinaldos., además de músico ejecutante de los instrumentos típicos larenses.

Don Pío fue un destacado exponente de una variedad del Golpe Tocuyano, que más adelante tomará el nombre de “Golpe curarigueño”, debido a las diferencias rítmicas existente en el tono y ejecución de los instrumentos que lo diferencian notablemente del “Golpe Tocuyano.”

Era muy joven todavía cuando comenzó a cultivar el golpe y el tamunangue, dos de las expresiones genuinas del folklore larense. se inició en el arte de cultivar una de las tradiciones más ricas del Folklore Venezolano: El Golpe y el Tamunangue, o Sones de negros, como también se le denomina

Galleron Los Golperos En El Tocuyo

El Sapo Pio Alvarado

General Jacinto Lara Pio Alvarado

Pío Alvarado, el músico policía

Durante un tiempo Pío Alvarado fue funcionario público como correo de a pie de Curarigua a Carora. A los veinte años de edad formó parte de la Policía de Curarigua y en el año de 1945 ingresó a la Policía de Barquisimeto, cargo que le permitió organizar con Nicolás Pichardo y Félix Campos un conjunto musical folclórico en la capital larense, dando a conocer sus primeras creaciones musicales: El sapo, La Chuchurucha, La Niña Heriberta, El Caimán y El Barbero. Estos temas los compuso este curarigueño inspirándose en el folklore popular larense.

Cuentan que antes de aprender a tocar el cuatro, siendo muy niño ya componía décimas y canciones. En el año de 1965 grabó su primer disco, un 45 RPM, para un homenaje al maestro Alirio Díaz. Aquí en esta primera grabación quedaron plasmados dos de sus grandes éxitos, El Sapo y El Gavilán Trabalenguas, dos fábulas musicales ricas en genio, humor, alegría y sátira, elementos estos que acompañaron la fecunda obra musical del Viejo Roble de Curarigua, como le apodaron sus seguidores, vecinos y familiares.

Su segunda grabación (LP) la hizo Pío Alvarado con el sello disquero local PIORA, en el cual se recogieron 16 temas más. El más grande golpero, como le catalogó Mario Álvarez tuvo una musa pródiga que aportó al folklore larense una larga lista de composiciones populares, entre las cuales hay que destacar:

Esta Mañana la vi,

Lucerito, Las Décimas de las Viejas, Las décimas del Borracho, Las Décimas del Chimó Romelia, entre otras.

La crítica lo consideró “un cantor fino con una curiosa y potente voz de contra tenor”, quien además parecía uno de esos rapsodas de la época Medieval, en el decir de Juan Martínez Herrera.

Fue el creador del conjunto de “Golperos Don Pío Alvarado”, quien hizo del trabalenguas y el golpe curarigueño una forma de cantarle a las cosas cotidianas de la vida. Murió en Barquisimeto, el 24 de agosto de 1983.