Crisis Existencial Lilian Rocio Wandurraga Gómez 11º 2
Crisis Existencial
Lilian Rocio Wandurraga Gómez
11º 2
¿Qué es una crisis existencial?
Una crisis existencial es cuando se ha tenido algún tipo de pensamiento profundo respecto a la muerte,
normalmente creado por una cercanía a la misma, ya sea real o de imaginación Todo cambio trae
aparejada una crisis, el crecimiento, el matrimonio, la llegada de un hijo, una mudanza. Me parece que existencial es cuando me pregunto ¿qué hago en
este mundo, qué rumbo tomo?, surge cuando pierdes el sentido de tu vida y no tienes claras tus metas...por ejemplo hay personas que tienen que
trabajar sino no comen y ya no se preguntan nada, pero hay personas que no tienen problemas
económicos y no identifican lo que deben hacer.
¿Qué sientes durante esta etapa?
Te sientes en una encrucijada no sabes hacia donde dirigirte mas aun si ya eres
mayor y alrededor hay personas que están
viviendo cosas que a ti no te ha tocado o no has podido o querido vivir. Por ejemplo, un adolescente entra en
crisis cuando no puede enfrentar sus cambios corporales, su "nuevo"
cuerpo, con su cosmovisión previa.
Es horrible pasar por una crisis de este tipo ya que tu autoestima está por los
suelos, a todo lo que te pasa le ves el lado
negativo, sueles ahogarte en un vaso de agua y sientes que el mundo entero esta en contra
tuya, a esto añádele un mar de lagrimas y el
deseo de estar solo por que quieres desahogarte,
porque crees que a los demás no les va a
interesar lo que te pase.
Características de una crisis existencial
Por un lado, tiene aspectos de una crisis de desarrollo en cuanto tiene
mucho que ver con el crecimiento y la maduración; pero por el otro, tiene
aspectos de una crisis circunstancial porque puede ocurrir a cualquier edad y en cualquier momento, más allá de
las fases evolutivas clásicamente prescriptas para el desarrollo humano
(como el pasaje de la niñez a la adolescencia, o de la adultez a la
senectud).
Una crisis existencial no necesariamente tiene relación con elegir una carrera, una profesión, una esposa, tener hijos, o con una enfermedad.
Las crisis existenciales implican además un cambio parcial en la identidad ("me siento otro") y en la cosmovisión de la persona ("pienso de manera distinta").
La pregunta existencial ha de ser, en primer lugar, conciente y explícita. Todos los seres humanos alguna vez nos hemos preguntado por el sentido de nuestra vida, más allá de sí hemos intentado o no contestarla, ya que muchas veces se guarda en un cajón de la memoria y no se vuelve nunca más a formular.
No todos padecen la crisis existencial con la misma intensidad. En algunos, la crisis está muy recortada y definida, de lo que nos damos cuenta porque el acontecimiento precipitante es muy puntual, o porque en poco tiempo la vida de la persona ha sufrido un cambio muy importante, no atribuible a cambios madurativos fisiológicos (pubertad, climaterio, etc.), y no necesariamente simultáneos con ellos.
¿Qué es lo más común de una crisis?
La crisis existencial puede ocurrir en cualquier momento de la vida, y no necesariamente coincide
con el casamiento, con la elección de una profesión, con la graduación, etc., ni menos aún
con números redondos, como cuando se habla de la crisis de los 30, los 40 o los 50.
Inclusive más: el casarse o el graduarse no implican necesariamente una crisis existencial, ni aún cuando cambie radicalmente la rutina de la
vida, porque bien puede ocurrir que esos eventos hayan sido impuestos por presiones familiares.
Tal vez la única etapa de la vida donde no
ocurran crisis existenciales sea en la niñez, entendiendo por tal el período que va desde el nacimiento
hasta la pubertad. Ya que en esta etapa
nada te preocupa, no tienes ningún
problema o por lo menos a si lo vez.
Por lo general es una crisis única en la
vida: Esta afirmación depende básicamente de los resultados de un
relevamiento estadístico. La gran
mayoría de los casos de crisis existenciales
ocurren sólo una vez en la vida.
El desenlace puede ser positivo o negativo. Positiva, en cuanto han
permitido a las personas dar sentido a su vida a
través del planteo y ejecución de un proyecto
vital. Negativo: otras veces, una crisis existencial puede
llevar a una depresión grave y aún al suicidio.
¡Una historia real!
Daniel, abogado y capellán:
"Un día me estaba vistiendo para ir a una fiesta con mi novia. De pronto sentí un gran silencio interior y la
convicción de que Dios me llamaba a su servicio. Pero lo rechacé: venía a trastocar todos mis proyectos. Ese silencio se empezó a suscitar más seguido, sobre todo de noche, cuando me iba a acostar. Sentí que Dios me llamaba y al mismo tiempo que era libre en la elección.
Me sentía halagado, pero me iba al río, remaba y remaba y le decía a Dios: 'No te confundas, a mí me
gusta esto'. Y le pedía que me contestara".
"Esa misma tarde se desató una tormenta brutal. Paré en San Fernando, justo enfrente de una iglesia. Y decidí entrar.
En ese momento, el cura pregunta si alguien puede
ayudarlo a dar misa. Me sentí señalado: era la contestación
que había pedido a Dios".
Consideré oportuno demostrar que no siempre en
necesario recurrir a un terapeuta a la hora de solucionar una crisis
existencial.
Para poder dar solución a esta crisis existencial,
recurro a utilizar una de las terapias que más se
especializa en crisis existenciales: la terapia
cognitiva y, dentro de esta terapia, la terapia
cognitiva conductual.
Esta terapia plantea que frente a una crisis
existencial hay factores que hacen que se
resuelva sin necesidad de un terapeuta, o se
requiera la colaboración del mismo.
Al final de todo pude concluir que no debes dejarte vencer por algo tan importante y a la
vez tan insignificante durante tu etapa evolutiva de la vida, pues como dice el dicho si te quedas en el limbo no sueñes con llegar al
cielo. Esta es la experiencia mas grande que he vivido y no me arrepiento de haber pasado por cada una de las cosas que enfrente. Ya que si
no las hubiera estoy seguro que seguiría siendo el mismo.
¿Cómo atravesar las crisis?
Este sentimiento despierta en nosotros todos los recuerdos de
las derrotas, de las crisis y de todos los
problemas, lo cual nos hace sentir incapaces e impotentes, perdiendo
la creatividad, la paciencia, el buen
humor, la energía y las ganas de enfrentar la
situación.
Es por ello muy importante vivir en el estado
de ser un Observador Desapegado, es decir, observar las situaciones y a las personas de forma desapegada, sin esperar nada y sin juzgar o sentirse afectado, desarrollando
una buena actitud nueva.
Por lo general, cuando ponemos etiquetas,
no estamos en la disposición mental, emocional ni afectiva de crear y de encontrar soluciones; estamos en la
posición mental de criticar, rechazar, patear y victimizarnos. Frente a la crisis lo más importante de contemplar es la actitud
¿Cómo salir de una crisis? Para salir de una depresión tan grande y tan devastadora como lo es una crisis, solo debes buscar dentro de ti, ir mas halla de
las dudas que tengas y buscar cada respuesta
en tu interior.
Si piensas que no hay solución, no te lo
creas; pues todo en la vida tiene solución
menos querer ocultar el sol con una mano.
Si crees que no podrás salir solo de esta situación solo mira a tu alrededor y veras que estas lleno de personas que querrán ayudarte sin pedirte nada a
cambio, solo debes confiar en los demás y no encerrarte en un mundo el cual no tiene salida para
ti, si confías en los demás podrás alcanzar esta búsqueda que tanto anhelas solo piensa en las satisfacción tan grande que experimentaras al
cruzar esta etapa de tu vida que importa si fue no pudiste solo, lo importante es que ya no te
encuentras en este vació que entorpece cada segundo de tu vida
Solo me resta decirte
¡No te dejes vencer por los obstáculos que se te presenten
en tu camino!