Dan Wells - Partials 01 - Partials. La Conexión

Partials, la conexin

A lo largo de su existencia la Humanidad fue atacada por diversos enemigos; ahora todas esas tragedias quedaron en la Historia.El da que los Parciales nos atacaron con el virus RM no perdurara en ninguna parte, pues no quedara nadie para recordarlo.-Declaracin del Presidente David R. Cregan en una conferencia de prensa el 21 de marzo de 2065 en la Casa Blanca. Tres horas despus se ahorco en su despacho.

La Humanidad est a punto de desaparecer tras haber perdido la guerra con los Parciales (seres creados con tecnologa gentica, idnticos a nosotros). Los humanos sobrevivientes fueron reducidos a unos pocos miles por el RM, un virus letal utilizado como arma biolgica, al cual solo parte de la poblacin es inmune. Los habitantes se concentraron en Long Island y, aunque los Parciales se han retirado misteriosamente, su amenaza persiste. Pero lo peor es que en once aos no ha habido un solo beb que haya sobrevivido al RM. Nuestro tiempo se acaba. Estamos al borde de la extincinKira Walker, una estudiante de medicina de diecisis aos, se encuentra en la lnea de fuego en esta batalla. Es testigo de los estragos que causa el RM y tambin de las leyes de embarazo obligatorio, que han llevado a la ciudad a las puertas de una guerra civil. En la desesperada bsqueda por salvar la continuidad de su raza, Kira descubra que la supervivencia de humanos y Parciales depender de sus esfuerzos por comprender la conexin entre ambos, algo que el mundo ha olvidado o quiz nunca supo que exista. En el camino develara varios misterios y un secreto que va ms all de las luchas por el poder, el control y la conservacin.Rebelda u obediencia? Autoritarismo o revolucin? La respuesta parece ser una sola: libertad. Pero a qu precio?Dan Wells lleva a los lectores en un viaje espeluznante a un mundo donde se cuestionan el concepto mismo de ser humano, en el cual nuestros rasgos son, a la vez, nuestra mayor desventaja y la nica esperanza de sobrevivir.

PARTIALSLA CONEXIN

DAN WELLS

Este libro est dedicado a los que rompen reglas, a los rebeldes y a los revolucionarios.A veces la mano que nos da de comer necesita una buena mordida.

PRIMERA PARTE

CAPTULO UNO

La recin nacida N485GA18M falleci el 30 de junio de 2076 a las 6:07 de la maana. Tena tres das de vida. Desde el Brote, el promedio de vida de un nio humano era de cincuenta y seis horas.Hasta haban dejado de ponerles nombres.Kira Walker observaba con impotencia mientras el doctor Skousen examinaba el cuerpecito. Las enfermeras (la mitad de ellas tambin embarazadas) registraban los detalles de su vida y su muerte, sin rostros, enfundadas en trajes de una sola pieza y mscaras antigs.La madre miraba, abatida, desde el pasillo. El vidrio atenuaba sus sollozos. Ariel McAdams tena apenas dieciocho aos. Madre de un cadver.Temperatura central: 37 grados al nacimiento inform una enfermera, mientras revisaba la lectura del termmetro. Su voz se oa metlica a travs de la mscara. Kira no saba su nombre. Otra enfermera apuntaba meticulosamente las cifras en una hoja amarilla. A los dos das, 36.5 grados prosigui la primera. A las cuatro de la maana de hoy, 37 grados y a la hora del deceso, 43 grados.Se movan suavemente por la habitacin, como plidas sombras verdes en una tierra de muertos.Djenme cargarla solloz Ariel, con voz quebrada. Djenme cargarla.Las enfermeras la ignoraron. Era el tercer nacimiento de la semana, y la tercera muerte. Era ms importante registrar el deceso, aprender de l para evitar, si no el prximo, s el siguiente, o el centsimo, o el milsimo. Encontrar el modo de ayudar a un nio humano a sobrevivir.Frecuencia cardaca? pregunt otra enfermera.No puedo seguir haciendo esto, pens Kira. Quiero ser enfermera, no enterradoraFrecuencia cardaca? volvi a preguntar con insistencia. Era la enfermera Hardy, jefa de maternidad.Kira puso atencin de inmediato; ella estaba a cargo de monitorear la actividad cardaca.Estable hasta las cuatro de esta maana; entonces pas de 107 a 133 pulsaciones por minuto. A las cinco, la frecuencia cardaca era de 149. A las seis, de 154. A las seis y seis minutos, de 72.Ariel volvi a gemir.Mis cifras lo confirman dijo otra enfermera.La enfermera Hardy apunt los nmeros pero mir a Kira, enojada.No te distraigas la reprendi. Muchos residentes daran su ojo derecho por ocupar tu puesto.S, seora.En el centro de la sala, el doctor Skousen se puso de pie, entreg la beb a una enfermera y se quit la mscara antigs. Sus ojos parecan tan muertos como los de la criatura.Creo que es todo lo que averiguaremos por ahora. Limpien esto y preparen los anlisis de sangre completos.Sali de la habitacin, y en torno de Kira todas las enfermeras prosiguieron con su ajetreo, envolviendo al beb para su entierro, limpiando los equipos y lavando la sangre derramada. La madre lloraba, sola y olvidada. A Ariel la haban inseminado artificialmente, y no tena un esposo o novio que la consolara. Kira, obediente, reuni todos los registros para guardarlos y analizarlos, pero no poda dejar de mirar a la muchacha que sollozaba detrs del vidrio.No te distraigas, residente insisti la enfermera Hardy. Ella tambin se quit la mscara; tena el cabello adherido a la frente por el sudor. Kira la mir en silencio. La enfermera le devolvi la mirada y levant una ceja. Qu nos dice ese aumento de la temperatura?Que el virus alcanz su nivel de saturacin respondi Kira, recitando de memoria. Se reprodujo hasta avasallar el sistema respiratorio, y el corazn empez a forzarse para compensarlo.La enfermera Hardy asinti, y Kira advirti por primera vez que tena los ojos irritados y enrojecidos.Uno de estos das, los investigadores van a encontrar un perfil comn en estos datos y van a aplicarlo para sintetizar una cura. Y la nica manera en que podrn hacerlo es si nosotros hizo una pausa y esper a que Kira completara la oracin.Estudiamos del mejor modo posible el curso de la enfermedad en cada nio y aprendemos de nuestros errores.De los datos que tienes en las manos va a depender que se encuentre una cura la enfermera Hardy seal los papeles de Kira. Si no los registramos, esta criatura habr muerto en vano.Kira volvi a asentir y acomod, aturdida, los papeles en su carpeta.La jefa de enfermeras se apart, pero Kira la llam con unos golpecitos en el hombro. Cuando la mujer se volvi, Kira no se atrevi a mirarla a los ojos.Disculpe, seora, pero si los mdicos ya terminaron con el cuerpo, Ariel podra cargarla? Solo un minuto?La enfermera Hardy suspir, y su semblante adusto y profesional dej vislumbrar la fatiga.Mira, Kira. S con qu rapidez cursaste el programa de capacitacin. Es evidente que tienes aptitudes para la virologa y el anlisis del RM, pero la habilidad tcnica es apenas la mitad del trabajo. Tienes que estar preparada emocionalmente o la seccin maternidad va a devorarte viva. Llevas tres semanas con nosotros; es el dcimo nio que ves morir. Para m es el novecientos ochenta y dos. Recuerdo a cada uno de ellos hizo una pausa y su silencio se prolong ms de lo que Kira esperaba; tienes que aprender a superarlo.Kira mir hacia el pasillo, Ariel segua llorando y golpeando el grueso vidrio.S que usted ha perdido a muchos, seora dijo, y trag en seco. Pero para ella es el primero.La enfermera Hardy mir a Kira un largo rato, con una sombra lejana en la mirada. Por fin, se dio vuelta.Sandy?Otra enfermera joven, que estaba llevando el cuerpecito hacia la puerta, levant la vista.Desenvuelve a la beb le orden la enfermera Hardy. La madre va a cargarla.Kira termin su papeleo como una hora ms tarde, justo a tiempo para la asamblea con el Senado. Marcus la esperaba en el vestbulo y la recibi con un beso. Ella intent dejar atrs la tensin de la larga noche. Marcus sonri, y ella respondi con una sonrisa dbil. La vida siempre era ms fcil cuando estaba l.Salieron del hospital y Kira parpade cuando sus ojos cansados enfrentaron aquel sbito estallido de luz natural. El hospital era como un bastin de tecnologa en el centro de la ciudad, tan diferente de las casas ruinosas y las calles cubiertas de maleza que bien podra haber sido una nave espacial. Lo peor del desastre ya se haba limpiado, por supuesto, pero incluso once aos ms tarde quedaban rastros del Brote por doquier: los automviles abandonados se haban convertido en puestos de venta de pescados y verduras; los patios cubiertos de csped ahora eran huertas y gallineros. Un mundo que haba sido tan civilizado el viejo mundo, anterior al Brote se haba convertido en unas ruinas prestadas para una cultura que estaba apenas un escaln por encima de la Edad de Piedra. Los paneles solares que daban energa elctrica al hospital eran un lujo con el cual la mayor parte de East Meadow solo poda soar.Kira pate una piedra en el camino.Creo que ya no puedo seguir haciendo esto.Quieres tomar un bicitaxi? le pregunt Marcus. El coliseo no est tan lejos.No me refera a caminar respondi ella, sino a esto: al hospital, los bebs. Mi vida record los ojos de las enfermeras, plidos, enrojecidos y fatigados, muy fatigados. Sabes a cuntos bebs he visto morir? pregunt, en voz baja. Los he visto personalmente, delante de m.Marcus la tom de la mano.T no tienes la culpa.Qu importa quin tiene la culpa? Igual estn muertos.Nadie ha podido salvar a un nio desde el Brote insisti Marcus. Nadie. Llevas apenas tres semanas trabajando all como residente. No puedes angustiarte por no hacer algo que ni los mdicos ni los investigadores han logrado hacer.Kira se detuvo y lo mir fijamente; no poda estar hablando en serio.Quieres hacerme sentir mejor? pregunt. Porque decirme que es imposible salvarle la vida a un beb es una manera muy estpida de hacerlo.Sabes que no me refera a eso dijo Marcus. Solo digo que t, personalmente, no eres responsable. A esos nios los mat el RM, no Kira Walker.Ella desvi la mirada hacia el lado opuesto de la carretera, que se iba ensanchando.Es solo una manera de verlo.La multitud se haca ms numerosa a medida que se acercaban al coliseo. Hasta era posible que lo llenaran, algo que no ocurra desde haca meses, cuando el Senado haba aprobado la Ley de Esperanza, que reduca la edad de embarazo a dieciocho aos. De pronto, Kira sinti un nudo en el estmago e hizo una mueca.De qu crees que se trate esta asamblea de emergencia?Conociendo al Senado, ser algo aburrido. Nos sentaremos cerca de la puerta, para poder escabullirnos si Kessler vuelve a lanzarnos una diatriba.No crees que sea importante? pregunt Kira.Bueno, ellos siempre se creen importantes. Ya sabes cmo son le sonri, y al verla tan seria, frunci el ceo. Si tuviera que adivinar, dira que van a hablar de la Voz. Esta maana, en el laboratorio, corra el rumor de que esta semana atacaron otra granja.Kira mir la acera, evitando la mirada de Marcus.No crees que vuelvan a bajar la edad de embarazo?Tan pronto? pregunt l. An no han pasado nueve meses No creo que vuelvan a bajarla antes de que las chicas de dieciocho aos lleguen a trmino.Son capaces de hacerlo dijo Kira, siempre con la mirada hacia abajo. Son capaces, porque la Ley de Esperanza es la nica manera que se les ocurre de intentar resolver el problema. Piensan que si tenemos suficientes bebs, habr alguno que sea resistente. Pero no est dando resultado y no lo ha dado en los ltimos once aos; entonces, nada va a cambiar solo por embarazar a un montn de adolescentes solt la mano de Marcus. Pasa lo mismo en el hospital: se ocupan de las madres, lo mantienen todo estril, registran todos los datos, pero los bebs siguen falleciendo. Sabemos exactamente cmo mueren; sabemos tanto al respecto que me siento enferma de solo pensarlo, pero no sabemos absolutamente nada de cmo salvarlos. Tenemos muchsimas chicas embarazadas, pero lo nico que tendremos despus sern ms bebs muertos y ms cuadernos llenos de las mismas estadsticas sobre cmo murieron.Kira sinti que se le encenda el rostro y los ojos se le llenaban de lgrimas. Algunos transentes la miraron al pasar; haba mujeres embarazadas y ella estaba segura de que la haban odo. Cruz los brazos con fuerza, enojo y vergenza.Marcus se acerc y la rode con un brazo.Tienes razn le susurr. Tienes toda la razn.Ella se recost contra l.Gracias.Entre la multitud, alguien grit.Kira!Ella levant la vista y se enjug los ojos con el dorso de la mano. Madison avanzaba entre el gento, agitando un brazo, exaltada. Kira no pudo sino sonrer. Madison le llevaba un par de aos, pero se haban criado juntas, prcticamente como hermanas en la familia que haban improvisado despus del Brote. Levant una mano y la salud de lejos.Madison los alcanz y abraz a Kira con entusiasmo. Su flamante esposo, Haru, la segua unos pasos ms atrs. Kira no lo conoca bien; l estaba en la Red de Defensa cuando conoci a Madison, y lo haban transferido para realizar tareas civiles apenas unos meses atrs, cuando se casaron. La salud con un apretn de manos, y a Marcus con un ademn solemne. Kira volvi a preguntarse cmo era posible que Madison se hubiera enamorado de alguien tan serio pero, por otro lado, supuso que cualquiera lo sera en comparacin con Marcus.Gusto de verte le dijo Haru.Puedes verme? pregunt Marcus, palpndose y fingiendo sbito asombro. Se debe de haber pasado el efecto de la pocin! Es la ltima vez que le doy mi almuerzo a una ardilla que habla.Madison rio y Haru levant una ceja, confundido. Kira lo observ, esperando, hasta que la falta de sentido del humor de Haru le result tan graciosa que no pudo evitar una carcajada.Cmo estn, chicos? pregunt Madison.Sobreviviendo respondi Kira. Apenas.Madison hizo una mueca.Mal da en la maternidad?Ariel tuvo a su beb.Madison palideci y sus ojos reflejaron una tristeza genuina.Kira pudo percibir cunto le dola la noticia; pronto cumplira dieciocho aos. Todava no estaba embarazada, pero solo era cuestin de tiempo.Cunto lo siento. Volver contigo despus de la asamblea para saludarla y ver si puedo ayudar en algo.Buena idea respondi Kira, pero tendrs que ir sin m; hoy tenemos una incursin de rescate.Pero si no dormiste en toda la noche! protest Madison. No pueden obligarte a ir.Dormir una siesta antes repuso, pero necesito ir. ltimamente el trabajo me est destruyendo y me vendra bien un cambio de ritmo. Adems, quiero demostrarle a Skousen que puedo hacerlo. Si la Red de Defensa precisa un paramdico en la incursin, pues ser la mejor que hayan visto.Tienen suerte de tenerte dijo Madison, abrazndola de nuevo. Jayden tambin va?S, es el sargento a cargo.Madison sonri.Dale un abrazo de mi parte.Jayden y Madison eran hermanos; no hermanos adoptivos sino verdaderos hermanos de sangre, los nicos parientes genticos directos que quedaban en el mundo. Algunos decan que eran la prueba de que la inmunidad al RM se poda heredar, lo cual solo haca ms frustrante el hecho de que, hasta ahora, ninguno de los recin nacidos la hubiera heredado. Lo ms probable, pensaba Kira, era que Madison y Jayden fueran una anomala que no volvera a repetirse.Jayden era adems, como Kira le deca a menudo a Madison, uno de los seres humanos ms atractivos que quedaban en el planeta. Kira le lanz una mirada pcara a Marcus.Solo un abrazo? Podra darle tambin un beso o dos.Marcus mir a Haru, incmodo.Bueno. Alguna idea de cul ser el tema de la asamblea?Las chicas rieron. Kira suspir feliz, Madison siempre la haca sentir mejor.Van a cerrar la escuela explic Haru. Los nios ms chicos de la isla ya estn cumpliendo catorce aos; prcticamente quedan ms maestros que alumnos. Supongo que van a graduar a todos por anticipado en los programas de oficios, y a los maestros los enviarn adonde puedan ser ms tiles.T crees? pregunt Kira.Haru se encogi de hombros.Es lo que hara yo.Probablemente ser otro discurso aburrido sobre los Parciales dijo Madison. El Senado no se cansa de hablar de esas cosas.Acaso los culpas? pregunt Haru. Mataron a todos en la Tierra.Salvo a los aqu presentes aclar Marcus.No digo que no hayan sido peligrosos insisti Madison, pero hace once aos que no se ve a ninguno. La vida contina. Adems, es obvio que ahora tenemos problemas ms graves. Yo supongo que van a hablar de la Voz.Bueno, pronto nos enteraremos dijo Kira, sealando hacia el norte con el mentn; empezaba a vislumbrarse el coliseo entre los rboles. El Senado tena su propio edificio, por supuesto, en un ayuntamiento, pero las asambleas a las cuales se convocaba a toda la ciudad, se llevaban a cabo en el coliseo. Rara vez lo colmaban, pero los adultos contaban que antiguamente se llenaba todo el tiempo, cuando lo usaban para los deportes. Antes del Brote.Kira tena apenas cinco aos de edad cuando se present el Brote; ni siquiera poda recordar la mayora de las cosas del viejo mundo, y no confiaba en la mitad de las que acudan a su memoria. Recordaba a su padre, su rostro moreno, su cabello negro desaliado y sus anteojos de armazn grueso sobre el puente de la nariz. Vivan en una casa de dos niveles estaba casi segura de que era amarilla y le haban hecho una fiesta cuando cumpli tres aos. No tena amigos de su edad, as que no hubo nios pequeos, pero s estaban casi todos los amigos de su padre. Se acordaba de que tena una caja grande llena de animales de peluche y que quera mostrrsela a los presentes, por eso la haba empujado hasta el vestbulo con gran esfuerzo; en su mente, le pareca que le haba tomado media hora o ms, pero saba que en realidad no poda haber sido tanto tiempo. Cuando por fin lleg a la sala y grit a todos que miraran, su padre rio, la rega y volvi a llevar la caja a su dormitorio. Tanto esfuerzo perdido en cuestin de segundos. No le molestaba recordarlo; nunca pensaba que su padre hubiera sido malvado o injusto. Era simplemente un recuerdo, uno de los pocos que tena de su vida en el viejo mundo.La multitud se haba ido concentrando y se apiaba entre los rboles mientras avanzaba hacia el coliseo. Kira se aferraba a Marcus con una mano y a Madison con la otra, y Haru los segua como el ltimo eslabn de una cadena. Se abrieron paso entre aquella masa humana y encontraron una fila de asientos vacos cerca de una puerta, como quera Marcus. Kira saba que tena razn: si la senadora Kessler arremeta con otra perorata, o si el senador Lefou se pona a hablar de horarios o cualquier otra temtica aburrida de la que estuviera encargndose este mes, sera muy til tener una salida a mano para escabullirse. Era obligatorio asistir, pero una vez que se hubieran tratado los asuntos importantes, no seran los nicos en retirarse temprano.Mientras los senadores se dirigan en fila hacia el estrado, ubicado en el centro de la pista, Kira se removi en su asiento, incmoda, preguntndose si Haru estara en lo cierto. Haba veinte senadores en total y Kira reconoci a casi todos, aunque no saba sus nombres. Sin embargo, uno de los hombres era nuevo: alto, moreno y de complexin fuerte. Se ergua como un oficial militar, pero llevaba un traje sencillo de civil. Le susurr algo al doctor Skousen, el representante del hospital en el Senado, y luego se alej y se perdi en la multitud.Buenos das.La voz atron en el inmenso estadio haciendo eco desde los altavoces hacia el exterior. El centro del coliseo se encendi con una imagen hologrfica gigante del senador Hobb. Si bien haba veinte senadores, siempre dejaban que Hobb tomara la iniciativa en las asambleas, pronunciara el discurso de apertura e hiciera la mayora de los anuncios. Era, sin duda, el ms carismtico.Vamos a dar inicio a esta asamblea prosigui el senador Hobb. Nos complace mucho verlos a todos aqu; es importante que ustedes participen en su gobierno, y estas asambleas son la mejor manera de estar conectados. En esta oportunidad queremos expresar un agradecimiento especial a la Red de Defensa de Long Island, especficamente al sargento Stewart y a su equipo, por haber pasado la noche girando la manivela de los generadores aqu, en el coliseo. Tal como les hemos prometido, estas asambleas nunca han quitado ni quitarn electricidad a la comunidad hubo unos cuantos aplausos y Hobb sonri con amabilidad mientras esperaba que se aplacaran. Empezaremos con el primer tema del da. Seora Rimas, podra acompaarme en el estrado?Es sobre las escuelas dijo Kira.Te lo dije record Haru.La seora Rimas era la directora del sistema escolar de East Meadow, que con el tiempo se haba reducido a una sola escuela que ella encabezaba. Kira escuch con una mano sobre la boca, mientras la mujer hablaba con orgullo del trabajo que haban realizado sus maestros, el xito que haba demostrado su sistema con los aos y los grandes logros de los alumnos que se haban graduado. Era una despedida, una mirada triunfante sobre el trabajo hecho con abnegacin, pero Kira no pudo evitar una sensacin de asco. Por ms vueltas que le dieran, por ms que trataran de concentrarse en los aspectos positivos, la cruda verdad era que, simplemente, ya no quedaban nios. Iban a cerrar la escuela porque se haban quedado sin alumnos. Los maestros haban hecho su trabajo, pero los mdicos no.El ser humano ms joven del planeta, por lo que todos saban, cumplira catorce aos en un mes. Era posible que hubiera sobrevivientes en otros continentes, pero nadie haba podido establecer contacto con ellos y, con el tiempo, los refugiados de Long Island haban llegado a creer que estaban solos. Que su habitante ms joven era el ms joven del mundo. Se llamaba Saladin. Cuando lo hicieron subir al escenario, Kira no pudo contener las lgrimas.Marcus la abraz, y juntos escucharon una serie de felicitaciones y discursos conmovedores. A los alumnos ms jvenes los transferiran anticipadamente a programas de oficios, tal como lo haba adelantado Haru. Diez fueron aceptados en el programa premdico que Kira acababa de terminar; en uno o dos aos empezaran a trabajar en el hospital como residentes, igual que ella. Habra cambiado algo para entonces? Los nios seguiran muriendo? Las enfermeras continuaran vindolos morir, registrando sus estadsticas y envolvindolos para sepultarlos? Cundo terminara todo eso?Mientras cada maestro se pona de pie para despedirse de sus alumnos y desearles lo mejor, se fue haciendo un silencio casi reverente en el coliseo. Kira saba que estaban pensando lo mismo que ella. El cierre de las escuelas era como clausurar el pasado, como reconocer por fin que el mundo se estaba acabando. Quedaban cuarenta mil personas en la Tierra y no haba nios. Tampoco una manera de hacerlos.La ltima maestra habl en voz baja y se despidi de sus alumnos con lgrimas en los ojos. Los docentes tambin ingresaran en escuelas de oficios y tendran un nuevo trabajo, una nueva vida. Esa maestra entrara junto con Saladin en la Comisin de Animales, para entrenar caballos, perros y halcones. Kira sonri al imaginar eso. Si bien l se vea obligado a crecer, al menos an podra jugar con un perro.La maestra se sent. El senador Hobb se acerc al micrfono y se detuvo con calma bajo el reflector. Su imagen solemne y afligida llen el coliseo. Hizo una pausa, orden sus pensamientos y luego mir al pblico con sus ojos azules.Esto no tena por qu ser as.Hubo un murmullo entre la multitud; una oleada de movimiento recorri el estadio mientras la gente rumoreaba e intercambiaba miradas entre s. Kira vio que Marcus la miraba. Lo tom de la mano con fuerza y mantuvo los ojos fijos en el senador Hobb.La escuela no tena por qu cerrar continu, en voz baja. Quedan apenas veinte nios en edad escolar en East Meadow, pero hay ms en el resto de la isla. Muchos ms. En Jamesport hay una granja con diez nios casi de la edad de Saladin; los he visto yo mismo. Los he tomado de la mano. Les he rogado que vinieran aqu, donde estaran a salvo, donde la Red de Defensa puede protegerlos mejor, pero no fue posible. La gente que vive con ellos, sus padres adoptivos, no los dejaron. Y justo una semana despus de que me march, hace apenas dos das, la llamada Voz del Pueblo atac esa granja hizo una pausa para serenarse. Hemos enviado soldados a rescatar lo que se pueda, pero temo lo peor.El holograma del senador Hobb examin atentamente el coliseo, atravesando al pblico con su mirada seria.Hace once aos los Parciales intentaron destruirnos, y les sali muy bien. Los diseamos para que fueran ms fuertes que nosotros, ms veloces, para que pelearan por nosotros en la Guerra de Aislamiento. Ganaron esa guerra fcilmente y cinco aos ms tarde, cuando se volvieron contra nosotros, no les tom mucho tiempo borrarnos de la superficie de la Tierra, especialmente luego de que liberaron el RM. Aquellos que sobrevivimos llegamos a esta isla sin nada: quebrados, fragmentados, perdidos en la desesperanza. Pero sobrevivimos. Reconstruimos. Organizamos un permetro defensivo. Encontramos comida y refugio, creamos un suministro de energa, gobierno y civilizacin. Cuando descubrimos que el RM no dejaba de matar nios, aprobamos la Ley de Esperanza para maximizar nuestras posibilidades de engendrar una nueva generacin de seres humanos resistentes al RM. Gracias a la ley y a nuestro incansable personal mdico, cada da estamos ms cerca de ese sueo.El senador Hobb hizo un ademn en direccin al doctor Skousen, que estaba sentado a su lado en el estrado, y volvi a levantar la vista. Tena los ojos ensombrecidos y solemnes.Pero a lo largo de ese camino, ocurri algo. Algunos decidieron apartarse. Algunos olvidaron que el enemigo an se oculta en tierra firme, que nos observa y espera, y tambin olvidaron al enemigo que puebla el aire que nos rodea, que habita en nuestra propia sangre y mata a nuestros nios como mat a tantos de nuestros familiares y amigos. Porque algunos ahora han decidido que la civilizacin que construimos para protegernos es, por alguna razn, el enemigo. Seguimos peleando por lo que es nuestro, solo que ahora peleamos entre nosotros. Desde la aprobacin de la Ley de Esperanza, hace dos aos, la Voz esos pandilleros, esos matones armados disfrazados de revolucionarios, han venido quemando nuestras granjas, saqueando nuestros almacenes, matando a su propia sangre, a sus propios hermanos y padres y, Dios nos ayude, a sus propios hijos. Porque eso es lo que somos: una familia, y no podemos permitirnos luchar entre nosotros. Y, sean cuales fueren sus motivos y lo que dicen defender quienes integran la Voz (llammoslos como lo que son: unos brbaros), simplemente estn terminando lo que los Parciales empezaron. Y no vamos a permitrselos su tono se endureci con la fuerza de la determinacin. Somos una sola nacin, un solo pueblo, una sola voluntad hizo una pausa. O al menos, deberamos serlo. Ojal pudiera darles mejores noticias, pero anoche la Red de Defensa encontr un escuadrn de la Voz saqueando un depsito de provisiones. Quieren saber dnde? Pueden adivinar?Algunas personas gritaron sugerencias, ms que nada relativas a las granjas y los pueblos de pescadores ms cercanos, pero la enorme imagen hologrfica sacudi la cabeza con tristeza. Kira mir hacia abajo, al hombre mismo: una diminuta figura de gastado traje caf que se vea casi blanco por la luz del reflector. El senador se volvi lentamente, negando con la cabeza a medida que el pblico propona lugares de todas partes de la isla. Se detuvo y seal al suelo.Aqu dijo. De hecho, justo all, al sur de la carretera, en la antigua escuela secundaria Kellenberg. Fue un ataque pequeo y logramos contenerlo sin derramar mucha sangre, as que ustedes quiz ni siquiera se hayan enterado, pero llegaron hasta ese lugar. Cuntos de ustedes viven cerca de all? levant la mano, asintiendo hacia quienes tambin levantaban las suyas entre el pblico. S dijo, ustedes viven all, yo vivo all, es el corazn de nuestra comunidad. La Voz ya no est solamente en el bosque: est aqu, en East Meadow, en nuestro propio vecindario. Quieren desgarrarnos desde adentro, pero no vamos a permitrselos!La Voz se opone a la Ley de Esperanza prosigui. La llaman tirana, la llaman fascismo, la llaman control. Ustedes la llaman nuestra nica oportunidad. Ustedes quieren darle un futuro a la humanidad; ellos quieren vivir en el presente, hacer lo que les d la gana y matar a quien trate de impedrselos. Acaso eso es libertad? Si algo hemos aprendido en los ltimos once aos, amigos, es que la libertad es una responsabilidad que se debe ganar, no una licencia para la temeridad y la anarqua. Si algn da, a pesar de nuestros mayores esfuerzos y nuestra ms profunda decisin, finalmente caemos, que sea porque nuestros enemigos al fin nos derrotaron, y no porque nos dimos por vencidos.Kira escuchaba en silencio, pensativa. No le apeteca en absoluto la idea de quedar embarazada tan pronto (le faltaban menos de dos aos para alcanzar la edad), pero saba que el Senado tena razn. El futuro era lo ms importante; sin discusiones, ms importante que las dudas de una chica sobre el siguiente paso.La Voz no est de acuerdo con la Ley de Esperanza continu hablando el senador y ha decidido expresar su disconformidad por medio de asesinatos, robos y terrorismo. Tienen derecho a estar en desacuerdo; lo que se cuestiona son sus mtodos. Hubo otro grupo, no hace tanto tiempo, que aplic los mismos modos; un grupo al que no le agradaba cmo eran las cosas y decidi rebelarse. Se llamaban Parciales. La diferencia es que los Parciales eran asesinos inhumanos, que no pensaban ni sentan. Mataban porque para eso los diseamos. Quienes integran la Voz son humanos y, en cierto modo, eso los hace an ms peligrosos.Hubo un murmullo entre la multitud. El senador Hobb baj la vista, se aclar la garganta y prosigui.Hay cosas ms importantes que nosotros, ms importantes que los lmites del presente y los caprichos del ahora. Hay un futuro que debemos construir y proteger. Y si vamos a hacerlo realidad, tenemos que dejar de pelear entre nosotros. Debemos poner fin al disenso dondequiera que se encuentre. Debemos volver a confiar los unos en los otros. No se trata del Senado y la ciudad; ni de la ciudad y las granjas, tampoco de un grupito o faccin. Se trata de nosotros. De toda la raza humana, unida en una sola. All afuera hay gente que quiere destruir eso, pero no vamos a permitrselo!El pblico volvi a clamar, y esta vez Kira lo acompa. Sin embargo, aun mientras gritaba a coro con los dems, no pudo evitar una sbita sensacin de miedo, como unos dedos helados en el fondo de su mente.

CAPTULO DOS

Llegas tarde, Walker.Kira no aceler el paso, sigui avanzando sin prisa hacia la carreta mientras observaba el rostro de Jayden. Se pareca mucho a Madison.Qu? pregunt. Acaso los soldados ya no tienen que asistir a las asambleas obligatorias?Y muchas gracias por la actitud dijo Jayden, apoyando su fusil en el hombro. Es un placer que t y tu encantador ingenio nos acompaen en esta incursin.Kira le apunt con el dedo ndice, simulando una pistola, y le dispar silenciosamente a la cara.Adnde vamos esta vez?A un pueblito llamado Asharoken.La ayud a trepar a la parte trasera de la carreta de metal, donde ya aguardaban diez soldados ms. Llevaban dos generadores porttiles; eso significaba que probablemente ella tendra que probar algunos equipos viejos para ver si vala la pena recuperarlos. Haba adems otros dos civiles, un hombre y una mujer, que probablemente iban para usar el segundo generador con algn otro equipo.Jayden se apoy en el borde de la carreta.Juro que esta isla tiene los nombres ms raros que o en mi vida.Ustedes van bien equipados observ Kira al ver los pesados fusiles de los soldados. Siempre iban armados cuando salan de la ciudad (hasta ella llevaba un rifle de asalto colgado del hombro), pero hoy pareca que iban a la guerra. Uno de los soldados llevaba incluso un tubo largo que reconoci como un lanzamisiles.Kira encontr un asiento libre y acomod su bolso y su maletn mdico detrs de sus pies.Esperan encontrar bandidos?Vamos a la Costa Norte explic Jayden, y ella palideci. La Costa Norte prcticamente no estaba colonizada, por ende, era terreno de la Voz.Valencio, llegas tarde! grit Jayden, y Kira levant la vista sonriente.Hola, Marcus.Tanto tiempo sin verte respondi con una amplia sonrisa y subi de un salto a la carreta. Lamento llegar tarde, Jayden. Tuve una reunin que se puso ms pesada de lo que haba calculado. Muy acalorada y sudorosa al final. Pero t fuiste un tema de conversacin importante entre algunos alegatos apasionadosAhrrate el comentario hasta la parte en que se trata de mi madre dijo Jayden; yo ir a la parte en la que te mando al diablo, y quiz entonces podamos continuar haciendo nuestro trabajo como se debe.Tu madre muri de RM hace once aos respondi Marcus, con una falsa expresin de horror. T tenas cunto? Seis aos? Sera muy grosero de mi parte.Y tu madre ya est en el infierno replic Jayden, as que seguramente la vers pronto. Mejor cambiemos de tema. Cabrn.Kira frunci el ceo al or el insulto, pero Marcus solo esboz una sonrisa socarrona, mirando a los dems ocupantes de la carreta.Diez soldados, eh? Adnde vamos?A la Costa Norte respondi Kira.Marcus silb.Y a m que me preocupaba que no furamos a hacer nada divertido. Supongo que a estas alturas ya limpiamos casi todo lo dems, no? mir a los dos civiles que estaban sentados frente a l. Tendrn que disculparme, pero no los reconozco.Andrew Turner se present el hombre, extendiendo la mano. Era mayor, de unos cincuenta aos, y tena una quemadura de sol incipiente entre el cabello ralo. Electricista.Mucho gusto dijo Marcus, y estrech su mano.La mujer sonri y lo salud con un gesto.Gianna Cantrell. Estoy en computacin.Ella tambin era ms joven que Turner. Kira le calcul unos treinta y cinco aos, edad suficiente para haber trabajado en computacin bastante antes del Brote. Kira le ech un vistazo rpido al abdomen, un reflejo del que ni siquiera tena conciencia hasta que ya lo haba hecho, pero desde luego la mujer no estaba embarazada. Las incursiones de rescate eran demasiado peligrosas para poner en riesgo a un nio; seguramente estaba entre ciclos.Una combinacin interesante coment Marcus, y mir a Jayden. Qu pasa en ese lugar?Hace unos das se hizo una incursin preliminar respondi Jayden. Registraron una clnica, una farmacia y una estacin meteorolgica, que no s muy bien qu significa. Ahora es mi turno de hacer la carrera del conejito. Imaginen lo contento que estoy dijo, y se dirigi al frente de la carreta. Subi al lado de la conductora, una joven a quien Kira haba visto algunas veces y que an estaba uno o dos aos por debajo de la edad de embarazo, lo que la haca apta para tareas activas. Bien, Yoon, vmonos.La chica sacudi las riendas y chasque la lengua para poner en marcha a la yunta de cuatro caballos. La Red de Defensa tena algunos autos elctricos, pero no tenan la potencia para llevar tanta carga con eficiencia. La energa era muy escasa y los caballos eran baratos, as que los mejores motores elctricos se haban destinado a otros fines. La carreta arranc con una sacudida y Kira puso un brazo detrs de Marcus para sostenerse del costado del vehculo. Marcus se acerc ms a ella.Hola, nena.Hola.La carrera del conejito? pregunt Andrew Turner.Es una expresin para referirse a una incursin de rescate, con especialistas como ustedes en lugar de los soldados rasos de costumbre respondi Kira, mientras observaba el color tostado del hombre. Nunca habas estado en una?Hice mucho rescate en los primeros tiempos, como todo el mundo, pero al cabo de uno o dos aos me asignaron a los paneles solares.Son fciles agreg Marcus. La Costa Norte da un poco de miedo, pero estaremos bien ech un vistazo alrededor y sonri. Aunque fuera del asentamiento el estado de los caminos no es de lo mejor, as que disfruta del viaje apacible mientras puedas.Viajaron un rato en silencio. El viento azotaba la carreta abierta y haca volar el cabello de Kira, recogido en una cola de caballo, contra la cara de Marcus. Ella se inclin hacia adelante, apuntando su pelo de lleno a la cara de Marcus, y rio cuando l intent quitrselo de la boca. l se puso a hacerle cosquillas; Kira retrocedi de un salto y cay contra el soldado que iba a su lado. Este le sonri, turbado: era un muchacho de su edad, obviamente complacido de que una chica prcticamente se sentara en su regazo, pero no dijo nada. Kira volvi a su sitio rpidamente, tratando de contener la risa.ltimo marcador. Ojos arriba! orden el soldado que iba junto a ella.Los soldados que estaban sentados en el piso de la carreta se enderezaron un poco, sostuvieron sus armas y no le quitaron los ojos de encima a los edificios que pasaban.Kira se volvi y mir pasar la ciudad vasta y vaca; se la vea desierta y probablemente lo estuviera, pero nunca estaba de ms ser cuidadoso. Los marcadores indicaban el lmite del asentamiento de East Meadow y el de la regin que sus militares alcanzaban a patrullar, pero de ningn modo era el lmite de la zona urbana. La antigua ciudad se extenda por muchos kilmetros en todas las direcciones, casi de costa a costa de la isla. La mayora de los sobrevivientes vivan en East Meadow o en la base militar, al oeste, pero por toda la isla haba saqueadores, vagabundos, bandidos y cosas peores. La Voz haba llegado a ser lo ms temido, pero distaba mucho de ser lo nico a lo que teman.Incluso fuera de East Meadow, el camino se vea muy transitado y bastante abierto. Haba basura, por supuesto, y tierra, hojas y los diversos desechos de la naturaleza, pero el trnsito regular mantena el asfalto relativamente libre de plantas, y muy raras veces la carreta se topaba con un hoyo o una zanja pronunciados. Ms all del borde de la calzada era otra historia: tantos aos de desuso haban dejado a la ciudad en el abandono; las casas se desmoronaban, las aceras estaban agrietadas y levantadas por las races de los rboles, la maleza creca sin freno y una extensa masa de plantas rastreras, estilo kudzu, lo cubra todo como una alfombra. Ya no haba csped ni patios, ni vidrios en las ventanas. Incluso la mayora de las calles laterales, menos transitadas que la principal, estaban surcadas por lneas verdes: la Madre Naturaleza reclamaba poco a poco todo lo que el viejo mundo le haba robado.A Kira, en cierto modo, le agradaba. Nadie poda darle rdenes a la naturaleza.Siguieron avanzando en silencio; luego uno de los soldados seal hacia el norte y grit:Rata!Kira se torci en su asiento y observ la ciudad. De pronto advirti un movimiento fugaz de reojo: un autobs escolar, con los costados llenos de toda clase de objetos colgados y el techo cubierto por pilas de cajas, botes, bolsas y muebles, todo asegurado precariamente con cientos de metros de cuerda. Junto al autobs, un hombre extraa gasolina del tanque de un auto estacionado. A su lado haba dos adolescentes; Kira calcul que tendran unos quince y diecisiete aos.Miren! exclam Marcus, todava usa gasolina.Tal vez encontr una manera de filtrarla dijo Gianna, observando el autobs con inters. Muchas de las comunidades exteriores lo hacen. Destruye los motores, pero los hay de sobra.Debera mudarse a la ciudad opin Turner. Podra tener una casa de verdad, podramos conectarle electricidad, seguridad y bueno, todo.Todo menos movilidad dijo Gianna. Y anonimato, y libertadCmo que libertad? pregunt el soldado que iba sentado junto a Kira. Su placa identificadora deca BROWN. Nosotros tenemos libertad lo que l tiene es anarqua.Seguridad, entonces insisti la mujer.El soldado Brown levant su fusil.Cmo llamas a esto?Las grandes comunidades fueron las primeras en caer durante la rebelin de los Parciales respondi Gianna. Los centros de poblacin son blancos fciles, y si los Parciales, dondequiera que estn, desarrollan una nueva cepa de RM que supere nuestra inmunidad, los fusiles no van a servirnos de nada. Un sitio como East Meadow sera el peor lugar para estar.Pues no hay de qu repuso Brown. Me alegra que aprecies tanto que arriesguemos la vida.No digo que no lo aprecie respondi la mujer. A lo que me refiero es a que bueno, acabo de decir a qu me refiero. Obviamente yo eleg vivir en East Meadow; solo estoy sealando por qu quiz l prefiri no hacerlo.Tal vez sea de la Voz gru otro soldado. Estn criando a esos chicos para que sean espas, asesinos o quin sabe qu cosa.El soldado Brown lo insult y Kira apart la vista, ignorndolos. Quera sentir el viento en la cara. Ya haba odo suficientes discusiones como esa. Era un da caluroso, pero haba una brisa que lo haca agradable, y ella siempre disfrutaba las oportunidades de acurrucarse contra Marcus. Pens en la noche que haba pasado, en la maana, en el beb muerto y en todo lo dems. Cmo era aquello que sola decir mi padre?, pens. Yo soy ms fuerte que mis dificultades.Yo soy ms fuerte que mis dificultades.

CAPTULO TRES

Pasaron varias horas hasta que llegaron a Asharoken; el cielo ya empezaba a perder luminosidad. Kira esperaba que pudieran terminar el rescate rpidamente y acampar en algn sitio ms alejado de la costa. Asharoken era ms un vecindario que una ciudad, conectado al resto de la isla por una red continua de calles, casas y edificios, pero Kira comprendi al instante por qu las incursiones previas haban evitado ese sitio durante tanto tiempo: era un istmo angosto que se extenda desde la isla hacia el norte, con un estrecho a un lado y una baha al otro. Si una costa ya pona nerviosa a la gente, dos eran demasiado.La carreta se detuvo frente a una pequea clnica veterinaria.Jayden, no dijiste que era una clnica para perros protest Marcus. Qu vamos a encontrar aqu?Si lo supiera, lo habra recogido yo mismo cuando estuve aqu, hace dos das respondi Jayden, mientras bajaba de la carreta. Los soldados que vinieron antes marcaron medicamentos y una mquina de rayos X; vayan a hacer su trabajo.Marcus baj de un salto, y tanto l como Jayden levantaron una mano para ayudar a Kira. Con aire travieso, ella tom las dos manos y sonri para s misma, mientras la ayudaban a descender con gestos hoscos.Sparks, Brown, entren primero ladr Jayden, y la mitad de los soldados empezaron a bajar de la carreta uno tras otro, llevando con ellos uno de los generadores. Patterson, t y tu equipo aseguren el rea, viglenla y escolten a los paramdicos al siguiente sitio. Parece que desde ayer anduvo alguien por aqu y no quiero sorpresas.Alguien anduvo por aqu? pregunt Kira. Cmo lo sabes?Porque tengo ojos, cerebro y un corte de pelo nuevecito respondi Jayden. Probablemente sea solo alguna rata, pero no quiero correr riesgos en la maldita Costa Norte. Si encuentran algo bueno ah adentro, chicos, preprenlo para el transporte y lo recogeremos a la vuelta. Yo llevar a mi equipo al norte, al sitio tres; Patterson, quiero informes cada quince minutos subi a la parte trasera del vehculo y grit a la conductora: Vmonos!La carreta arranc con una sacudida y se encamin al norte. Kira se colg su maletn al hombro y mir alrededor. Asharoken estaba cubierto de kudzu, como la mayora de las ciudades pequeas, pero el mar del estrecho de Long Island lama suavemente la costa y el cielo estaba despejado y sereno.Linda ciudad.Ojos arriba orden Patterson. Los dems soldados se esparcieron en abanico y formaron lentamente un permetro en torno de la clnica, mientras Sparks y Brown se acercaban al edificio derruido con sus fusiles de asalto a la altura de su lnea de visin.A Kira le fascinaba verlos moverse, sus cuerpos girando, elevndose e inclinndose para mantener esa lnea de visin slida como una roca; casi pareca como si el fusil caminara sobre rieles invisibles, mientras el soldado se mova libremente a su alrededor.El frente de la clnica haba sido principalmente de vidrio; ahora estaba destrozado y cubierto de kudzu. En una columna central de cemento haban pintado la marca anaranjada brillante de un equipo de rescate. Kira haba hecho suficientes incursiones como para reconocer la mayora de las marcas, y esta era la que conoca mejor: Parcialmente catalogado, regresar con paramdicos.Sparks y Brown se cubrieron impecablemente entre s al entrar, eligiendo el camino entre los escombros y la vegetacin. Patterson subi al techo con cuidado, mantenindose en los bordes, donde era ms seguro pisar, y mont guardia desde arriba.Mientras ellos aseguraban el edificio, Kira y Marcus probaron el generador. Era un aparato pesado con dos ruedas en un extremo; la parte de abajo contena una batera enorme y una manivela, mientras que la de arriba tena un panel solar pequeo y una bobina tras otra de cables y conectores. En todas las incursiones haba paramdicos para cuidar a los soldados, pero cuando las incursiones preliminares marcaban algn equipo mdico, traan esos generadores para que los paramdicos pudieran enchufarlo, probarlo y ver si vala la pena llevarlo. La isla ya estaba abarrotada de cosas; no tena sentido llenar East Meadow de porqueras recuperadas que ni siquiera serviran.La calle estaba repleta de automviles estacionados, con la carrocera oxidada, los neumticos desinflados y las ventanillas rotas por aos de descuido y exposicin a la intemperie. En uno de ellos haba un esqueleto en el asiento del conductor, con una sonrisa horrible: una vctima del RM que haba intentado ir a alguna parte para huir del fin del mundo. Kira se pregunt adnde habra querido llegar. Ni siquiera haba logrado salir de su casa.Dos minutos despus, Brown volvi a abrir la puerta y les hizo seas para que entraran.Todo est bien, pero miren dnde pisan. Parece que unos perros salvajes estn usando este lugar como guarida.Qu chicos tan leales. Habrn querido mucho a su veterinario dijo Marcus con una sonrisa burlona.Kira asinti.Vamos a encenderlo.Marcus inclin el generador sobre sus ruedas y lo ingres lentamente, pero Kira observ que Brown se haba colocado la mscara, as que se detuvo a preparar la suya: un pauelo doblado al que le aplicaba cinco gotitas de mentol. Los cadveres que hubieran quedado all se habran descompuesto aos atrs, como el esqueleto del auto, pero seguramente una jaura de perros habra trado ms carroa, sin mencionar el olor a almizcle, orina, heces y quin saba qu ms. Luego se at el pauelo de manera que le cubriera la nariz y la boca. Al entrar vio a Marcus haciendo una arcada y buscando su propia mscara en el bolsillo.Deberas prestar ms atencin le dijo, tranquila, al pasar junto a l rumbo a la habitacin trasera. Lo nico que yo huelo es el aroma fresco de la menta.La sala mdica estaba bien equipada, como si nadie se hubiera llevado nada an, sin embargo era evidente que alguien la haba revisado ltimamente, pues haba huellas y marcas en la gruesa capa de polvo. Probablemente los soldados de la incursin preliminar, pens, aunque nunca he visto que un soldado revise los medicamentos.Kira se puso a organizar el espacio sobre la mesa y design un rea para lo que serva y otra para lo que se destruira. En el entrenamiento de rescate era lo primero que aprendan los residentes: qu medicamentos podan durar todava, y cules llevaban demasiado tiempo vencidos para poder usarlos sin peligro. Ingresar sustancias vencidas a East Meadow era an peor que llevar mquinas rotas, no porque ocuparan espacio sino porque eran peligrosas. Los paramdicos eran los cuidadores de toda la raza humana; lo ltimo que necesitaban era que alguien tomara pldoras que no deba o que una enorme provisin de medicamentos descartados llegara a la reserva de agua. Era ms seguro y ms fcil clasificarlos all; hasta haban aprendido a trabajar con medicamentos para animales, precisamente por esa razn: un antibitico para perros era, al fin y al cabo, un antibitico, y al no tener grandes plantas de produccin, los isleos se vean obligados a tomarlos. Kira ya estaba clasificando con eficiencia el contenido de los armarios cuando entr Marcus, con la mscara puesta.Este lugar huele como una cripta.Es una cripta.Y lo peor no son los animales dijo Marcus, aunque juro que aqu debe de haber toda una civilizacin perruna para que apeste tanto abri otro armario y empez a arrojar medicamentos a las pilas que haba hecho Kira; saba exactamente cul era cul sin necesidad de mirar. No prosigui, lo peor es el polvo. Saquemos lo que saquemos de este lugar, me llevar medio kilo de polvo en los pulmones.Te ayudar a templar el carcter respondi Kira, riendo y burlndose de la enfermera Hardy. Yo ya llevo nueve mil millones de rescates, residente, y hay que aprender a sobrellevarlo. Respirar polvo de cadveres hace bien: activa los riones.Hacer rescates no solo hace bien repuso Marcus, haciendo una imitacin exacta del senador Hobb: es esencial para la supervivencia de toda la humanidad. Piensa en el papel que tendrs en la gloriosa nueva pgina de la historia!Kira lanz una carcajada. Hobb siempre estaba hablando de la nueva pgina de la historia. Como si lo nico que tuvieran que hacer fuera seguir escribiendo y el libro no fuera a acabarse jams.Las generaciones futuras recordarn con reverencia a los gigantes que salvaron a nuestra raza prosigui Marcus, a quienes vencieron a los Parciales y curaron el RM para siempre. A quienes salvaron la vida de innumerables nios y su discurso se desvaneci, pues de pronto se sinti incmodo en aquella habitacin, y siguieron trabajando en silencio. Al cabo de un rato, Marcus volvi a hablar:Creo que se estn poniendo ms nerviosos de lo que dejan ver hizo una pausa. No lo mencionaron en la asamblea, pero realmente estn pensando en volver a bajar la edad de embarazo.Kira se detuvo con la mano en el aire y lo mir rpidamente.Lo dices en serio?S. Me encontr con Isolde cuando iba a casa a cambiarme. Dice que en el Senado hay un nuevo movimiento que impulsa la estadstica por sobre la investigacin; dicen que no necesitamos buscar una cura, sino que basta con tener suficientes nios para alcanzar el porcentaje de inmunidad.Kira se volvi hacia l.Ya hemos alcanzado el porcentaje de inmunidad; 0.04 por ciento significa que uno de cada dos mil quinientos nios ser inmune, y ya duplicamos esa cantidad.S que es una tontera dijo Marcus, pero los mdicos los estn apoyando. Sea como sea, tener ms bebs les sirve: tendrn ms oportunidades de investigar.Ella volvi nuevamente a su trabajo en el armario.Una reduccin ms y llegaramos a los diecisiete aos. Isolde tiene diecisiete aos, qu va a hacer? No est lista para embarazarse.Buscarn un donanteEsto no es un servicio de citas lo interrumpi Kira, en tono spero; es un programa de reproduccin. Por lo que sabemos, podran estar poniendo drogas para estimular la fertilidad en el suministro de agua; de hecho, no me sorprendera que as fuera sac las cajas del armario con furia y empez a colocarlas bruscamente en la pila de medicamentos para conservar o a arrojarlas con fuerza a la basura. Olvdate del amor, olvdate de la libertad, olvdate de elegir; solo hazte embarazar y salva al maldito mundo.No son diecisiete aos dijo Marcus, en voz baja. Se detuvo, con la mirada fija en la pared. Kira sinti que se le haca un nudo en el estmago al presentir lo que iba a decir. Isolde dice que en el Senado hay un referndum para bajar la edad de embarazo a diecisis aos.Ella se qued helada, demasiado conmocionada para hablar. La edad de embarazo no era una restriccin sino una norma: todas las mujeres de cierta edad estaban obligadas, por ley, a embarazarse lo antes posible y con la mayor frecuencia permitida.S desde hace dos aos que esto iba a suceder, pens Kira, desde que promulgaron la ley. Dos aos para prepararme psicolgicamente, pero aun as pensaba que tena ms tiempo. Siguen bajando la edad. No estoy en absoluto lista para esto.Es una idiotez dijo Marcus. Es estpido e injusto, lo s solo puedo imaginar lo que sientes. Me parece una idea terrible y espero que la descarten lo antes posible.Gracias.Pero y si no lo hacen?Kira tosi, cerrando los ojos con fuerza.No empieces con eso ahora, Marcus.Solo digo que deberamos pensarlo dijo rpidamente, en caso de que la ley entre en vigor. Si no lo decides t, ellosDije que no ahora repuso Kira. No es el momento ni el lugar. Esto no se parece nada a las circunstancias en que quiero tener esta conversacin.No me refiero solo al sexo dijo Marcus. Hablo de matrimonio dio un paso hacia ella, se detuvo y mir hacia el techo; planeamos esto desde los trece aos, Kira: bamos a hacer la residencia juntos, trabajar juntos en el hospital y casarnos Era tambin tu planBueno, pues ya no lo es se apresur a responder. No estoy lista para tomar esta clase de decisiones, entiendes? No estoy lista ahora, y menos lo estaba a los trece aos se volvi hacia el armario, maldijo por lo bajo y luego se dirigi a la puerta. Necesito aire.Afuera, se quit la mscara y aspir larga y profundamente. Lo peor de todo es que entiendo muy bien por qu lo hacen.Hacia el norte, los rboles se iluminaron de pronto con un brillante resplandor anaranjado, seguido un segundo despus por un estruendo ensordecedor. Kira sinti que la onda expansiva la atravesaba, retorcindole las tripas. Apenas haba tenido tiempo de procesar la imagen y el sonido de la explosin cuando recuper el odo y escuch gritar a los soldados.

CAPTULO CUATRO

El soldado Brown se abalanz hacia Kira, la sujet y la derrib al suelo junto a un auto estacionado.Abajo!Qu pasa?Qudese abajo! orden Brown, luego sac su radio y puls el botn de llamada. Sargento, aqu Shaylon. Estn recibiendo fuego? Cambio!La radio crepit; nada ms que ruido blanco.Nos estn disparando? pregunt Kira.Si lo supiera, no estara preguntndoselo a Jayden respondi Brown, y volvi a llamar. Sargento, me escucha? Cul es su situacin?La radio emiti un zumbido vaco, mientras Kira y Brown la miraban con desesperacin. Una explosin poda ser un accidente, la Voz o hasta los Parciales mismos. Se trataba de un ataque? Una invasin? La radio no deca nada. Luego, bruscamente, irrumpi la voz de Jayden entre la esttica.El sitio tres estaba saboteado con explosivos! Hay cinco hombres atrapados Traigan a los paramdicos cuanto antes!Brown gir hacia la clnica y se puso de pie con un movimiento ligero.Heridos en el sitio tres!Kira ech a correr incluso antes de que l regresara; se vea el humo que ascenda desde el lugar, a unas quince cuadras de all. Brown la sigui, sujetando con fuerza el fusil por delante mientras corra a toda velocidad por la calle. Ella busc a tientas su maletn mdico, murmur un agradecimiento a cualquiera que fuera la razn por la que an lo tena al hombro, y baj la cabeza para tomar velocidad. El soldado apenas poda seguirla.Vio primero a Jayden, que de pie sobre la cabina de una camioneta cubierta de vegetacin escudriaba el crculo completo del horizonte con un par de binoculares. Luego estaba la carreta: la rueda delantera izquierda haba volado con la explosin y haba dos caballos cados; los otros dos relinchaban aterrorizados. Por ltimo vio el edificio, una ruina humeante entre otras dos estructuras, como una torre de bloques de madera derribada por un nio enojado.Un soldado arrastraba a otro, jalndolo por las manos para apartarlo de los escombros. Kira se dej caer junto al herido y le puso una mano en la mueca para verificar su pulso mientras, con la otra, le palpaba el pecho y el cuello en busca de lesiones.Estoy bien dijo el soldado, tosiendo. Busquen a los civiles.Ella se levant de un salto, mientras observaba, aturdida, la casa destrozada. Por dnde empezar? Sujet al soldado que estaba de pie y lo alej del cado.Y los dems?En el stano respondi, sealando hacia abajo. En esta esquina.Aydeme a entrar.El edificio tena dos pisos estn totalmente sepultados.Entonces aydeme a entrar insisti, llevndolo hacia la casa.Kira ya estaba avanzando con cuidado entre los escombros cuando lleg Marcus, sin aliento.Santo derrumbe exclam, mientras Kira caminaba hacia el interior de las ruinas.Seor Turner! llam. Seora Cantrell! Alguno me oye?Ella y el soldado se detuvieron a escuchar.Ah abajo dijo Kira, sealando el suelo a su izquierda.Se arrodillaron e hicieron a un lado un trozo ancho de revestimiento para pisos. Kira se detuvo y volvi a escuchar: una vibracin tenue, como un jadeo o una tos apagada. Seal una seccin de ladrillos y el soldado la ayud a moverla; todos escarbaban entre los escombros para liberar el paso. Kira volvi a llamar y oy una respuesta muy dbil.Aqu dijo una voz. Kira reconoci el timbre femenino, supo que era Gianna y levant un pedazo de mueble cado. Los soldados lo tomaron y lo quitaron del agujero. Gianna gimi de dolor. Gracias a los dioses.Kira se desliz ms abajo para ayudarla.An est atrapada?Creo que no respondi la mujer.Kira la tom de la mano con firmeza, sostenindose de otra seccin del piso cado. Perdi el apoyo, resbal y sinti que una mano fuerte tomaba la suya desde atrs.Ya la tengo dijo Kira, y ellos a m. Vamos.Poco a poco, la mujer se fue liberando de los trozos de madera y ladrillos que la cubran. Kira tir de ella para sacarla centmetro a centmetro. Cuando Gianna lleg a suficiente altura, la mano fuerte que sostena a Kira extrajo a ambas hasta arriba de la pila. Al volverse Kira vio a Jayden, tenso por el esfuerzo.Gracias le dijo.Aydame a encontrar al otro respondi l.Kira se dirigi nuevamente hacia el agujero.Seor Turner! Me oye?Estaba a mi lado cuando explot la bomba jade Gianna. No puede estar muy lejos.Seor Turner! Andrew! Kira ingres nuevamente en el hoyo, sin dejar de llamarlo.Se detuvo a escuchar con atencin y se agach lo ms que pudo. Nada. Volvi a erguirse para examinar los escombros, tratando de adivinar adnde habra ido a parar.Detrs de esa piedra dijo Gianna, sealando una roca grande y plana que estaba apoyada verticalmente entre los restos. En el stano haba una gran chimenea de piedra en vez de ladrillos. Probablemente era la parte ms vieja de la casa.Jams podremos moverla observ Marcus.Kira se desliz hasta abajo y se acerc a la piedra.Andrew Turner! grit Marcus, pero Kira lo hizo callar.Silencio, voy a hacer una prueba.El polvo se haba aplacado y no haba viento. Ella abri su maletn mdico y sac el estetoscopio, uno de los modelos digitales con amplificador de sonido. Puls el interruptor, rogando en silencio que la batera no se hubiera degradado, y apoy el instrumento contra los escombros.Pom, pom, pom, pomSon sus latidos avis a los dems. Est justo debajo de la chimenea cada.Esas piedras estn sosteniendo la mitad de la casa dijo Marcus. No vamos a tocarlas.Mientras su corazn siga latiendo, s lo haremos repuso Jayden. Fuera del paso, Walker se desliz hasta abajo junto a Kira y pidi ayuda a los dems. Yoon, consgueme una cuerda y ata el otro extremo a uno de los caballos.Un momento despus, la soldado dej caer un grueso cordn sinttico entre ellos y Jayden resopl, al tiempo que se extenda para rodear la roca con la cuerda. Kira volvi a acercar el estetoscopio a la piedra.Pom, pom, pom.An oigo los latidos se volvi, buscando vigas de madera. Pero Marcus tiene razn: si movemos esto ahora, se le va a caer encima toda la planta baja. Toma, hay que reforzarla con esto.Jal una larga viga del techo que an tena adheridos restos de madera del piso superior, y Jayden la acomod para que sostuviera los escombros.Listo Jayden empez a dar rdenes a la conductora de la carreta. Adelante, Yoon! Ms ms est bien, la cuerda ya est lista; ahora muy despacio.La cuerda se tens. Kira no vea que la piedra se moviera, pero la oa raspar el piso.Est funcionando! exclam.Jayden dio ms rdenes a Yoon.Sigue as, lentamente perfecto. Ahora, atenta a la cuerda.La piedra se zaf de su agujero y Jayden gru al ayudar a correrla a un lado. Kira se volvi hacia el hoyo abierto, mirando nerviosamente la improvisada viga de apoyo, cuando divis una forma en la oscuridad y se detuvo en seco. No la haba visto antes porque estaba detrs de la piedra.Era una pierna humana, cercenada justo por encima de la rodilla.No murmur.Se inclin hacia adelante con cuidado y palp el borde desparejo donde el hueso se haba quebrado. Aplastado, pens, palpando el dao. La chimenea cay y le cort la pierna. Cmo es posible que siga vivo? Aplic el estetoscopio contra la siguiente piedra.Pom, pom, pom.Maldicin dijo Jayden, agachndose detrs de ella. Es su pierna?Significa que estamos cerca.Significa que est muerto agreg Jayden. Esa chimenea lo habr hecho polvo.Te dije que oigo sus latidos susurr ella. Dame la cuerda.Los escombros se movieron un poco, y Kira cerr la boca y los ojos con fuerza para protegerse de una lluvia de rocas y polvo. La viga cruji y se oyeron gritos de alarma de los soldados que estaban arriba.Squenla de ah! exclam Marcus.Tiene razn dijo Jayden. Esto va a derrumbarse en cualquier momento. No vale la pena perder un paramdico por un muerto.Te digo que est vivo.Afuera le orden Jayden. Si no podemos sacarlo a l, a ti tampoco podremos rescatarte.Es una vida humana insisti Kira. No nos quedan demasiadas.Afuera!Kira apret los dientes y avanz unos centmetros ms. Jayden maldijo detrs de ella y trat de tomarla por los pies, pero ella lo apart de un puntapi.Pom, pom, pom.Kira palp la siguiente piedra para ver por dnde tomarla y determinar su estabilidad. Creo que puedo mover esta, pens. l tiene que estar justo del otro lado, y entonces lo vern. Estoy segura de que est vivo.Escuche, seor Turner grit, puede orme? Voy a rescatarlo, no vamos a dejarlo aqu.Se apoy en el piso del stano, rezando por no mover de su lugar ninguna pieza esencial. Empuj la piedra ms grande y la sinti girar ligeramente contra un eje rgido y descentrado. Volvi a empujar, esforzndose por el peso, y logr mover la piedra a un lado. En la oscuridad haba otra forma, demasiado retorcida para reconocer qu era. Volvi a encender el estetoscopio y lo extendi hacia adelante con desesperacin.Tic, tic, ticUn momento, pens Kira, esto no est bien. Sus dedos rozaron carne mojada y resbaladiza. Atrap un trozo de tela entre dos dedos y jal hacia ella. El tic se hizo ms fuerte en la caverna diminuta. Palp el miembro ensangrentado con ambas manos, sin querer creerlo; retrocedi apenas hacia la luz y lo levant para confirmarlo con los ojos.Es su brazo anunci, por lo bajo. Est muerto.Jayden la mir fijamente.Y los latidos?Kira levant el brazo y algo en la mueca emiti un brillo metlico.Tic, tic, tic.Su reloj se senta agotada y sin vida. Est muerto.Jayden le quit el brazo y la sostuvo con la mano.Salgamos de aqu.Tenemos que llevarlo dijo ella.Esto no fue un accidente respondi Jayden. Alguien vino y puso esta bomba, alguien que saba que vendramos. Es probable que est cerca todava.Kira frunci el ceo.Por qu querran volar una estacin meteorolgica?Era una radio explic Gianna. No alcanzamos a ver todo antes de la explosin, pero eso s lo s. Esto era el mayor nodo de comunicaciones que he visto.La Voz dijo Kira.Jayden respondi con voz grave y sombra.Y, despus de ese estruendo, sin duda saben que estamos aqu.

CAPTULO CINCO

Jayden reuni a los sobrevivientes a la sombra de la carreta humeante.Es imposible regresar en esto, o sea que tardaremos por lo menos dos das en llegar a la civilizacin. Nuestra radio tambin se destruy. Estamos solos.Tendremos que armar una camilla para el soldado Lanier dijo Marcus. Tiene fractura expuesta en la tibia. La compuse lo mejor que pude, pero no puede caminar.Kira escudri los rboles y las ruinas que los rodeaban, tensa en todo momento. Una vez haba estado en el hospital durante un ataque de la Voz; haba visto llegar a los soldados heridos, gimiendo y gritando de dolor mientras los mdicos los llevaban a ciruga. An le horrorizaba pensar que un ser humano pudiera hacer dao a otro.Armen una camilla orden Jayden. Nos quedan dos caballos; Patterson y Yoon irn por delante y enviarn refuerzos apenas lleguen al permetro de la Red de Defensa. Los dems seguiremos a pie.Son cuarenta y cinco kilmetros le record Yoon, y los caballos ya estn cansados. No pueden hacer el viaje sin detenerse.Pueden seguir por lo menos una hora repuso Jayden. Para entonces, de todos modos se quedarn sin luz. Vayan hasta donde puedan y luego dejen que los caballos descansen hasta el amanecer.No es necesario que vayamos hasta East Meadow sugiri Gianna. Hay una comunidad rural hacia el oeste de aqu, y varias ms hacia el este. Estn mucho ms cerca, y Lanier puede recibir ayuda ms pronto.Nuestro mapa estaba del lado de la carreta que destruy la explosin respondi Jayden. No estoy de humor para andar vagando por la isla en busca de ignorantes.No son ignorantes protest Gianna. La mayora tiene ms educacin que ustedesSu asombrosa educacin no nos sirve de nada sin un mapa para encontrarlos replic Kira. Por qu Gianna se pona a discutir en un momento como ese?. Nuestra mejor opcin es East Meadow; podemos ir por caminos principales hasta all.Lanier no llegar vivo insisti la mujer, no con esa fractura. Las granjas tambin tienen hospitales, igual que nosotros.Igual que nosotros, no dijo Kira. Y no: Lanier no va a morir en el viaje. Tienes estudios de medicina que hayas olvidado mencionar?Cualquiera se da cuentaCualquiera se da cuenta de que est mal intervino Marcus, con calma, pero lo hemos entablillado y vendado, y puedo darle medicamentos tan fuertes que pensar que est volviendo a casa volando sobre un arco iris mgico de caramelo. Podras sentir el efecto solo por aspirar sus pedos.Patterson y Yoon, vayan al sur hasta East Meadow orden Jayden. Los dems los seguiremos, pero agreg, mirando a Gianna si encontramos una granja, un puesto de avanzada o algo as, podemos tratar de hacernos de otra carreta.No tienes autoridad para apropiarte de una carreta dijo la mujer, enojada.Y t no tienes autoridad para desobedecer mis rdenes respondi Jayden. Esto es un operativo militar en estado de emergencia, y voy a llevarte de vuelta como me parezca mejor, aunque para eso tenga que drogarte tanto como a Lanier. Est claro?Esto es lo que nos espera? pregunt ella. As ser nuestro mundo cuando ustedes, los hijos de la peste, crezcan y empiecen a gobernarnos?Jayden no se inmut.Pregunt si estaba claro.Perfectamente respondi Gianna. Regresemos al paraso.Jayden se puso de pie y el grupo se dispers para recoger los equipos y prepararse para el viaje. Kira sujet a Jayden por el brazo y lo detuvo.No podemos dejarlos dijo. Los caballos muertos, est bien, pero en esa casa hay tres personas muertas. Cmo vamos a llevarlas?Podemos volver por ellos.Vi pasar seis gatos salvajes durante tu reunioncita de planificacin, y esa clnica donde estuvimos era la guarida de una jaura de perros bastante grande. Si dejamos tres cadveres, no encontraremos mucho al regresar.Jayden la mir con frialdad.Qu quieres que haga, Walker? No podemos cargarlos y tampoco tenemos tiempo para sepultarlos. Regresaremos con refuerzos para investigar el sitio y recuperar los generadores, pero por el momento, diez personas vivas son ms importantes que tres muertas.Diez minutos insisti Kira. Podemos disponer de ese tiempo.Crees que puedes sepultarlos en diez minutos?Ya estn medio sepultados repuso ella, y lo observ mientras l pensaba.Finalmente se encogi de hombros y asinti.Tienes razn. Te ayudar.Adems de Andrew Turner, la explosin haba matado a dos soldados, y sus cadveres se colocaron cuidadosamente junto a la casa. Un hombre y una mujer; en realidad, un muchacho y una chica, pues no tendran ms de diecisis aos. La chica podra haber sido ms joven, aunque Kira no poda discernirlo. Se detuvo junto a ellos con actitud solemne, preguntndose quines habran sido: qu haban hecho para divertirse, con quin haban vivido, cmo haban llegado all. Ni siquiera saba cmo se llamaban. Jayden tom a la chica por los brazos, Kira la sostuvo por las piernas y avanzaron con cuidado entre las ruinas. El hoyo ms profundo era el que haban abierto tratando de salvar a Turner; bajaron el cuerpo de la muchacha hacia el interior con la mayor suavidad posible y lo empujaron hacia el hueco que haba detrs de las piedras de la chimenea. A esas alturas, algunos de los soldados ya haban terminado sus tareas y se acercaron a ayudar: cargaron el cuerpo del muchacho y lo colocaron tambin en el hoyo.Kira observ, aturdida, cmo Jayden y el soldado Brown desestabilizaban la ltima pared que quedaba y la volteaban sobre el hoyo, para cubrir los cuerpos. Sinti que se le rompa el corazn al derrumbarse la pared. No era suficiente; era bueno sepultarlos, pero merecan ms. Trat de hablar, pero contemplar las lentas nubes de polvo de los escombros era demasiado, y no pudo pronunciar palabra.Marcus la observaba con ternura y dolor. Mir a Jayden.Deberamos decir algo.Jayden se encogi de hombros.Adis?Bueno dijo Marcus, adelantndose. Supongo que yo puedo hacerlo. Alguien sabe a qu dios veneraban?A ninguno muy bueno mascull Gianna.Maija era cristiana respondi Sparks. No s bien de qu comunidad. Rob era budista. Del civil, no tengo idea.Marcus mir a su alrededor en busca de esclarecerlo, pero nadie saba ms.No es la combinacin ms fcil dijo. A ver qu les parece esto, entonces. Creo recordar parte de un viejo poema que nos ensearon en la escuela.Se enderez, fij la mirada en la lejana y los soldados bajaron la cabeza. Kira sigui contemplando la pila de ladrillos cados, an cubiertos por una nube de polvo.No te enorgullezcas, muerte recit Marcus, aunque te hayan llamado poderosa y temible hizo una pausa, pensativo. Estoy destrozando esto. Eres esclava del destino, azar, reyes y hombres desesperados, pero no puedes matarme. Un breve sueo y luego despertamos a la eternidad, y la muerte dejar de existir.Jayden ech un vistazo a Marcus.Crees que van a despertar? As como as?Es un poema antiguo respondi Marcus.Bueno, donde sea que vayan a despertar dijo Jayden, va a haber muchsima gente dio media vuelta y camin hacia la carreta dando grandes zancadas.Kira se qued, de la mano de Marcus, contemplando cmo el polvo se iba depositando sobre los escombros.

La lluvia formaba charcos en el lodo y llenaba las gruesas huellas de neumticos de gotas saltarinas. Kira estir su capucha hacia adelante, tratando de protegerse los ojos, pero a medida que la tormenta arreciaba el agua desbordaba por todos lados, saltando desde los charcos y filtrndose entre las costuras de su ropa.Jayden volvi a detenerse y levantando el puo en alto hizo que la fila se parara. Las huellas de neumticos no provenan de Asharoken, pero cualquier presencia poda ser peligrosa all afuera, en la zona inhspita. En los viejos tiempos, esta parte de la isla haba sido ms adinerada que la mayora, de modo que en lugar de casas apiadas y frentes con los pastos crecidos, se hallaban atravesando un bosque denso y mojado, salpicado aqu y all por alguna mansin que se ergua solitaria en la oscuridad. Kira lade la cabeza para escuchar, con la esperanza de captar algn asomo de los sonidos que Jayden no dejaba de percibir a pesar del chubasco. Vio que Marcus haca lo mismo. Oy la lluvia, el agua que salpicaba, el sonido ahogado del lodo bajo sus pies. Jayden baj el puo y seal hacia adelante, y el grupo se puso en marcha nuevamente.Creo que lo est inventando susurr Marcus. Le encanta hacer esa sea con el puo y ver cmo todos le obedecemos.Nunca en la vida me moj tanto dijo Kira. Juro que hasta metida en una baera, estuve ms seca que ahora.Mira el lado bueno respondi Marcus.Kira esper.Este es el momento dijo en que, por lo general, deberas sugerir un lado bueno.Nunca fui un tipo previsible respondi Marcus. Adems, no digo que conozca un lado bueno; simplemente, que sera un momento excelente para ver uno.Jayden levant el puo y el grupo dej de caminar.l acaba de or un lado bueno susurr Marcus. Hay una metfora inspiradora merodeando entre esos arbustos.Kira buf, y Jayden se dio vuelta para mirarlos, enojado. Volvi a mirar al frente, seal con los dedos hacia el costado del camino y se dirigi hacia un claro entre los rboles.Ella lo sigui, sorprendida; se daba cuenta de que las huellas avanzaban derecho entre los retoos de la calle en ruinas. A ambos lados, los rboles se vean oscuros y abominables; qu oa Jayden en ellos?El grupo avanz con cuidado por un sendero angosto que sola ser el camino de entrada a una casa, ahora resquebrajado y roto tras una dcada de maleza. Adelante, una enorme casa se ergua oscura, casi tan negra como la noche que la rodeaba. Marcus avanz lentamente hasta alcanzar a Kira y camin a su lado, agazapado y en silencio. Ella se inclin hacia l para hacerle una pregunta, pero se detuvo bruscamente al divisar un destello de color: un resplandor anaranjado en la ventana, un brillo diminuto que desapareci en un instante. Fuego. Se qued inmvil, sujet el brazo de Marcus y lo acerc para susurrarle al odo.Hay alguien adentro.Kira aferr su arma con fuerza, con la esperanza de que no se hubiese mojado demasiado como para no disparar bien. Hasta rodeada por cinco soldados armados se senta desprotegida. Comenz a agacharse, jalando a Marcus para que hiciera lo mismo. Jayden fren bruscamente y levant el fusil a su mejilla. Entonces se oy una voz desde el interior de la casa oscura.No se acerquen ms.Era una voz dbil y ronca, como la de un espectro en la oscuridad. Con la lluvia repiqueteando sobre su capucha y su espalda, Kira prepar el seguro del fusil, un botoncito que converta ese grueso garrote plstico en una varita mgica mortal. Apuntar, hacer clic y mirar cmo explota el objetivo. El agua le escurra por el cuello, le entraba en los ojos y atravesaba el material de sus guantes.Me llamo Jayden Van Rijn anunci Jayden, sargento primero de la Red de Defensa de Long Island mantuvo el fusil apuntado al mismo blanco invisible; seguramente haba visto al hombre antes de hablar. Kira an no vea nada. Identifquese.No soy nadie con quien necesiten tener problemas respondi la voz. Y nadie que tenga problemas con ustedes.Identifquese repiti Jayden.Kira imagin que los rboles alrededor estaban llenos de Voces: hombres entre las sombras, amorfos bajo sus impermeables, aferrados a sus armas con la misma fuerza con que ella sujetaba la suya. Debajo de los rboles la negrura era total; la luna y las estrellas se perdan tras la gruesa capa de nubes de tormenta. Se pregunt si se atrevera a responder con fuego, en el caso de que alguien empezara a disparar. Cmo poda saber en la oscuridad qu formas eran enemigas y cules amigas?Quiz no sean de la Voz susurr Marcus. Su voz era casi inaudible; sus labios prcticamente rozaban el odo de Kira. Podran ser mercaderes, vagabundos, hasta granjeros. Qudate agachada.Tiene un nombre muy bonito dijo la voz en la oscuridad. Puede llevrselo cuando se vaya.Vamos camino a East Meadow dijo Jayden. Solo queremos confirmar que el rea es segura antes de acampar. Cuntos hay all adentro?La voz rio, ronca.Sera una tontera proporcionarles esa inteligencia sin conocer sus intenciones. Y si son Voces?Somos de la Red de Defensa insisti Jayden. Ya se lo dije.No sera la primera vez que alguien me miente.Kira oy un ruido entre los rboles: un crujir de hojas, un chasquido que podra haber sido una rama o un arma preparndose. Se agach ms an, esperando que se tratara de alguien de su grupo.Nosotros somos diez dijo Jayden. Las Voces son mucho ms sutiles por ejemplo, como un anciano solo escondido en una casa en ruinas.Supongo que en eso tiene razn respondi el hombre. Parece que ninguno de nosotros va a confiar en el otro la voz hizo una pausa y luego, solo hubo ms silencio. La lluvia golpeaba a travs de las hojas. Al cabo de un rato, volvi a orse su voz. Me llamo Owen Tovar. Yo tambin voy hacia East Meadow, justamente, y me vendra bien que me ayudaran con el guardia de la frontera. Si no les importa compartir el espacio con Dolly y conmigo, pueden entrar.Kira no oy nada, y luego percibi el sonido de una puerta que se abra. Jayden vacil apenas un instante, y luego baj el fusil a su cadera.Gracias por el ofrecimiento.

CAPTULO SEIS

Owen Tovar result ser un hombre alto, delgado y avejentado, que los esperaba apenas cruzando la puerta, con una escopeta negra de plstico al hombro. Sonri al ver a Kira y Gianna.Si ese tonto me hubiera dicho que haba mujeres, los habra dejado entrar mucho antes.Marcus se interpuso delante de Kira en gesto protector, pero Tovar rio entre dientes y le dio una palmada en el brazo.No se trata de nada impropio, hijo, solo son buenos modales. Los soldados no me importan mucho, pero temo que mi mam me educ demasiado bien como para dejar a una dama afuera con una tormenta como esta cerr la puerta cuando entr el ltimo soldado y avanz entre el grupo hacia el interior oscuro de la casa. Debo decir que aquel de ustedes que me encontr es mejor rastreador que la mayora. Est desperdiciando sus talentos en la Red.Abri otra puerta, que daba a una habitacin bien iluminada: una antigua sala, tal vez, sin ventanas exteriores y con un alegre fuego en una chimenea de piedra. La habitacin estaba atestada de viejos sofs y mantas, y en el extremo opuesto haba un carrito de madera contra unas puertas dobles. Kira se volvi hacia la derecha al entrar, para examinar el rea, y se sobresalt al encontrarse cara a cara con un camello.Saluda, Dolly.El camello buf y Tovar rio entre dientes.No sean groseros, amigos, respndanle.Marcus sonri e hizo una reverencia al animal.Mucho gusto, Dolly. El seor Tovar olvid mencionar lo encantadora que era su compaa.No s si todos los camellos son as de irascibles dijo Tovar, pero nos llevamos ms o menos bien. Supongo que habr escapado de un zoolgico o algo as; la encontr hace unos aos, vagando por ah hizo pasar al grupo y cerr la puerta; me tom mucho trabajo para que este fuego no se viera desde afuera les cont. Adems, la chimenea an funciona, pero con una tormenta como esta, que disimula el humo, nadie puede saber que estoy aqu.Seguimos las huellas dijo Marcus, quitndose el abrigo.Las huellas no vienen hacia aqu respondi Tovar. Al menos, no directamente.Lo o explic Jayden, con una leve sonrisa insinundose en las comisuras de su boca. Dolly necesita aprender a ser ms sigilosa.Tovar mene la cabeza.Quera ms azcar. Y ustedes acertaron a pasar justo en los dos segundos que ella decidi discutir conmigo. La mayora de la gente (me refiero a los que son suficientemente curiosos como para andar husmeando) nunca encuentra este lugar. Todos siguen mis huellas alrededor de la casa, se internan en el bosque y se dan por vencidos cuando llegan al arroyo. Resulta que el puente se cay, aunque no lo crean, y los tablones que uso para pasar estn bien escondidos, del lado donde no pensaran en buscar.Eres un vagabundo observ Jayden.Soy vendedor. Eso me convierte en blanco de todo tipo de cosas desagradables, pero no significa que deba ser un blanco de oportunidad quit una pila de mantas del sof ms cercano al fuego. Los mejores asientos, para las damas, naturalmente. Este lugar es muy acogedor cuando estoy solo, pero habiendo tanta gente, vamos a tener que ser buenos vecinos para poder dormir.Kira observ al hombre distribuir las mantas y acomodar los sofs para que pudieran dormir diez personas y un burro. Ser parte de la Voz? Imposible saberlo, a menos que tratara de hacerlos volar en pedazos.El hombre le entreg una manta a Brown, que lo mir con suspicacia antes de arrancrsela de las manos. Tovar sonri y dio un paso atrs.Va a ser una noche muy larga si seguimos desconfiando. De veras creen que soy de la Voz?Brown no dijo nada. Tovar se volvi hacia Gianna.Y t? gir una vez ms, se detuvo frente a Jayden y abri los brazos. Y t, cree que soy de la Voz? Que estoy arriesgando mi vida y compartiendo mis mantas secas como parte de un plan para destruir lo que queda de la civilizacin humana?Creo que usted fue militar dijo Kira, acercndose un poco ms al fuego.Tovar lade la cabeza.Por qu lo dices?Por algunas palabras que usa respondi Kira, como inteligencia y blanco de oportunidad. Por el modo en que sostuvo su arma cuando entramos. Porque en este momento usted y Jayden estn parados exactamente en la misma postura.Jayden y Tovar se miraron, primero el uno al otro y luego a s mismos: los pies separados el ancho de los hombros, la espalda recta y los brazos cruzados atrs con holgura. Se apartaron, incmodos, cambiando de pose y soltando los brazos.Que ya no sea militar no significa que no sea de la Voz dijo Brown. Muchos de ellos tambin son soldados.Si ser soldado es prueba de culpabilidad dijo Tovar, en esta habitacin hay siete de diez personas que parecen muy culpables.Bueno, hblenos de usted pidi Marcus, al tiempo que se acomodaba en un sof. Si voy a pasarme toda la noche esperando que ustedes dejen de coquetear y se maten a tiros, al menos quiero entretenerme.Owen Tovar repiti, con una reverencia, nac y me crie en Macon, Georgia. Jugu al ftbol en la universidad durante dos aos, me gradu, ingres en la Marina y me vol cuatro dedos de un pie en la guerra; en la guerra de Irn, no en la de Aislamiento, la que tuvimos con los chinos y en la que seguramente ustedes estn pensando, donde enviamos a los Parciales a pelear por nosotros. Aunque supongo que casi todos ustedes tienen menos de veinte aos, no? Tenan dos o tres aos cuando termin esa guerra y cuatro o cinco cuando se acab el mundo? No, cuando hablo de la guerra, probablemente ustedes piensen en la Guerra Parcial, tal como estn las cosas, pero lamento informarles que esa no fue ninguna guerra; solo peleas, muertes y nada ms. Vern: la guerra es cuando pelean dos lados, quiz no en forma pareja, pero al menos los dos tienen la oportunidad de dar algunos golpes. Lo que llamamos la Guerra Parcial fue como si a la humanidad la molieran a golpes en un callejn.Yo recuerdo la Guerra de Aislamiento dijo Gianna. No todos somos hijos de la peste.No me corresponde hacer suposiciones sobre la edad de una dama repuso Tovar, mientras se sentaba junto al fuego.Se vea relajado, pero Kira observ que an poda alcanzar su escopeta fcilmente y con rapidez. Jayden se sent frente a l, mientras la mayora de los soldados permanecieron de pie. Kira se ubic junto a Marcus y acomod el brazo de l sobre sus hombros. Se senta tibio y reconfortante.Supongo que no importa cul guerra fuera dijo Tovar. Perd cuatro dedos de un pie, abandon la Marina con licencia mdica y volv a Georgia a jugar al hockey.No es posible que jugaran al hockey en Georgia intervino Sparks. Era de los del sur, no? Georgia? El hockey se jugaba sobre hielo.El hockey era patinar sobre hielo asinti Jayden, y eso no se poda hacer en Georgia. Especialmente sin dedos en el pie.Tovar sonri.Ah es donde los hijos de la peste empiezan a demostrar su ignorancia se volvi hacia Gianna. Recuerda las pistas de hielo?Una sonrisa leve pero alegre se col en la cara de la mujer.S.Una pista de hielo explic Tovar era un saln inmenso, como toda una cancha de baloncesto, dentro de un refrigerador. Imagnense: un edificio tan fro que el hielo no se derrite. Se llenaba de gente, a veces cientos de personas (y apenas estbamos en las ligas menores), y todos alentaban, gritaban y se enardecan. La habitacin se calentaba como esta, todos los cuerpos, all apiados como troncos en una fogata, y aquel refrigerador gigante no dejaba de funcionar y de enfriar. El hielo se mantena tan helado que lo nico que tenan que hacer era rociarlo con agua entre tiempos: en cuestin de minutos quedaba liso y plano como una porrista de los Tiger Sharks esboz una sonrisa maliciosa. Mil disculpas. Viejas rivalidades.Eso es lo ms tonto que o en mi vida dijo Sparks. Con el gasto de electricidad que describe, se podra iluminar toda una ciudad durante un ao.Un lugar pequeo como East Meadow, seguro que s dijo Tovar; esa ciudad se podra iluminar con lo que consume un acondicionador de aire de buen tamao. Considerando cmo eran las viejas ciudades y sus costumbres, hasta un lugar tan pequeito como Macon se tragara entero a East Meadow. Con tantos cientos de miles de personas conduciendo automviles, mirando pelculas y navegando en la Internet ochenta y siete horas al da, aun as nos quedaba suficiente electricidad para tener una pista de hielo en el estado de Georgia, uno de los calurosos, como bien sealaste, donde no tenamos por qu congelar nada.Sigo sin creerlo mascull Sparks.Estamos hablando de hockey de ligas menores en Macon, Georgia prosigui Tovar. Ni yo poda creerlo. Saben cmo llambamos al equipo? Si no me creen lo anterior, menos van a creerme esto: lo llambamos la Juerga de Macon lanz una risotada. Eso parece la mentira ms grande de todas, pero es verdad: la Juerga de Macon se dio una palmada en la rodilla. Varios de los soldados rean, y hasta Kira no pudo contener una risita entre dientes. ramos un equipo de ligas menores que no aportaba a las mayores, en una ciudad que amaba casi todos los deportes, menos el nuestro. No tenamos futuro y lo sabamos, entonces por qu no divertirnos? En los aos cuarenta, cuando yo jugaba, ramos oficialmente el equipo ms violento del pas, y eso quiz significa del mundo entero y, a propsito, por eso poda patinar sin dedos en un pie. Un patinador artstico o uno de velocidad, incluso un delantero de la Liga Nacional de Hockey, s necesitan todos sus dedos para mantener el control, pero toda esa sutileza pasa a segundo plano cuando lo nico que quieres hacer es estampar a alguien contra una pared y romperle todos los dientes.Hockey murmur Marcus. El deporte de los reyes.Tovar hizo una pausa, con los ojos enfocados en un recuerdo lejano.A veces pienso que eso es lo que ms echo de menos de aquellos das. Los viejos tiempos. Tenamos tanto de todo y podamos derrocharlo en porqueras que nadie necesitaba. La Edad de Oro del hombre su sonrisa volvi, sarcstica y amarga. El orgullo llega, segn dicen, antes de la cada.Jayden asinti, con una sonrisa dbil.No puedo decir que ese relato me haga confiar ms en usted, pero ahora s que me cae mejor.Muy amable de tu parte, dadas las circunstanciasSac una licorera del bolsillo trasero, bebi un trago y se la ofreci a Jayden. El soldado bebi un trago y la devolvi.Debo admitir que, como paramdico, sigo esperando que llegue la mejor parte dijo Marcus.Cmo dices? pregunt Tovar, con sorpresa.Marcus esboz una amplia sonrisa.Los dedos, hombre, a ver ese pie!Los soldados aclamaron la idea y Tovar sonri con aire burln.Ustedes lo pidieron se inclin y empez a desatar los cordones de la bota. El propietario de este espectculo de horror recomienda que mujeres y nios aparten la mirada ante lo que van a presenciar, pero como eso los incluye a casi todos ustedes, supongo que no van a hacerle caso se quit el calzado, comenz a retirar el calcetn de su pierna plida y peluda, y por fin se lo quit con un movimiento histrinico. Contemplen esto!Todos dieron un grito ahogado, mezcla de horror y de risa. Kira sonri e hizo una mueca a la vez. El pie de Tovar era un mun de tejido cicatrizado y callos; los cuatro dedos ms pequeos quemados o perdidos; y el dedo gordo, el ltimo que le quedaba, estaba curvado de forma chocante hacia un lado, y le faltaba la ua. Su pie estaba totalmente blanco.Es un asco dijo Kira, entre accesos de risa. Cmo dijo que le pas eso?Yo era especialista en el Cuerpo de Marines explic Tovar, moviendo su dedo gordo deformado. Demoliciones.El ambiente cambi tan rpidamente que Kira habra jurado que pudo sentirlo: un fro helado en el aire, un roco de agua fra mientras los soldados ponan sus armas en posicin en un solo movimiento borroso. Aun sentado, Tovar perdi el equilibrio y se tambale hacia atrs, trataba de ponerse la media y casi se cae del sof al intentar apartarse de las armas.Qu qu hice?Tiene diez segundos para decirnos dnde estuvo en las ltimas cuarenta y ocho horas dijo Jayden, apuntndole con su fusil, o empezamos a dispararle por las dudas.De qu hablas? grit Tovar.Nueve dijo Jayden, en tono feroz. Ocho.Esperen pidi Kira, extendiendo las manos para tratar de calmar a todos. Denle tiempo para pensar.Siete continu Jayden.No s de qu hablan! protest Tovar.Ella se inclin hacia adelante con desesperacin.Clmense dijo, con voz firme. Ni siquiera sabe de qu hablan.No hagas ninguna estupidez, Kira.Ella se volvi hacia Tovar.Es porque usted dijo que estuvo en demoliciones. Hoy tuvimos un mal da en cuanto a explosivos; lo nico que quieren saber es si estuvoNi una palabra ms, Kira, o sabr exactamente qu negar.Solo dganos dnde ms estuvo insisti ella, con la vista fija en Tovar.Ayer estuve en Smithtown respondi el hombre. Luego vine directamente aqu. All tienen una granja en un viejo campo de golf. Fui a venderles armas.Armas?Qu creen que vendo? Cachorritos? Soy marine, vendo lo que conozco. All afuera, sin la Red de Defensa que tienen ustedes para cuidarlos, la gente necesita armas. La mayora de estas casas tienen armamento guardado en el stano, entonces yo las hago explotar y vendo las armas.No me est pareciendo menos culpable ahora dijo Jayden.La voz de Tovar estaba cargada de desesperacin.Por mucho que cueste creerlo con diez armas apuntndome, en la isla no todo el mundo tiene una. No todos cuentan con una patrulla de la Red de Defensa lista para entrar en accin cada vez que alguien les parece sospechoso. Aqu, la gente sabe que se aproxima una guerra entre East Meadow y la Voz y necesita defenderse. Solo me ocupo de darles las herramientas.Miente dijo un soldado.No lo sabes repuso Kira. No se puede matar a alguien por una corazonada.Alguien trat de hacerlos explotar? pregunt Tovar.Lo ven? exclam el soldado, dando un paso adelante. Lo sabe!Tranquilo dijo Jayden. No disparen hasta que lo ordene.Kira trag en seco.No hace falta ser un genio para examinar los ltimos minutos de esta conversacin y adivinar que alguien trat de volarnos. Si l hubiera sabido sobre la bomba, no nos habra contado que estuvo en demoliciones, verdad? se volvi hacia Tovar. Alguna vez estuvo en Asharoken?Tovar neg con la cabeza.Eso no puede ser el nombre de un lugar de verdad.Dice que vende armas y municiones dijo Jayden. Tambin vende explosivos?Sera un idiota si lo hiciera respondi Tovar. Cualquiera que los comprara estara en lo mismo que yo, o bien planeando algo peor, como lo que les pas a ustedes. Yo tengo mis explosivos muy bien guardados.Dnde? pregunt Jayden.Algunos en ese carro, otros escondidos en distintas partes de la isla.Gianna se apart del carro de un salto.Estuve apoyada en una bomba?Es estable dijo Tovar, ponindose de pie. Los soldados volvieron a apuntarle, pero el hombre levant las manos en gesto de inocencia. Son perfectamente estables, de acuerdo? se acerc al carro con dificultad, cojeando con una bota pesada y un pie descalzo. Es un gel de agua, completamente inerte hasta que se activa, y aun entonces necesita un detonador.Dnde encuentra explosivos por aqu? pregunt Jayden, an siguindolo con su fusil. Cre que los militares ya los haban recogido todos hace aos.Se llevaron los de uso blico, s respondi Tovar, pero esto se usa comercialmente todo el tiempo retir la pesada lona que cubra el carro y seal un paquete de plstico blanco, como una bolsa de agua racionada. Esto lo consegu en una obra en construccin; el polvo activador est del otro lado del carro