Cosita linda versión narrador omniciente

COSITA LINDAAnthony Browne

Versión de segundo grado

Colegio Las Cumbres

Narrador omnisciente

Había una vez un gorila llamado Koko que era muy especial y que vivía en un zoológico. Era grande y gordo, su pelaje era negro, peludo y marrón. Por otra parte, era tranquilo y paciente. También era muy cuidado y mimado por todos los cuidadores y le enseñaron el lenguaje de señas. Cuando quería algo, se lo pedía a los cuidadores haciendo señas con las manos. Parecía tenerlo todo, pero estaba triste. Él se sentía aburrido y solo.

Un día Koko le dijo a sus cuidadores: "Yo quiero amigo", haciendo señas con las manos. Entonces los cuidadores pensaron y pensaron porque no había

más gorilas en el zoológico. De repente, uno de ellos tuvo una idea: le consiguieron una pequeña gatita llamada Linda. Koko se encariñó rápidamente con Linda pero ella estaba un poco asustada.

Rápidamente a Linda se le fue el susto y se hicieron muy amigos. Koko le daba leche y miel. Fueron felices mucho tiempo… Hacían TODO juntos: comían, miraban la tele, pasaban el tiempo y hacían travesuras, descansaban, jugaban a treparse de las lámparas como si fueran lianas, hacían piruetas, hasta iban al baño en el mismo momento y en el mismo lugar (¡Qué olorete!!!).

Una noche, en que estaban viendo una película en donde un gorila llamado King Kong era amenazado y atacado por los humanos; Koko se enojó, se puso furioso y cada vez más encrespado estalló como un volcán en erupción y rompió la televisión.

Rápidamente, los cuidadores, al escuchar un ruido de vidrio roto, entraron corriendo al cuarto y vieron la tele rota. Entonces preguntaron: "¿Quién rompió la televisión?", y otro dijo: "Vamos a llevarnos a Linda." En ese momento Koko miró a Linda con tristeza y lágrimas en los ojos, y Linda lo miró preocupada. Velozmente, Linda comenzó a hablar con señas con las

manos y mirando a los cuidadores dijo: "Fui yo, yo la rompí." Los cuidadores no lo podían creer.

Todos comenzaron a reir porque la gatita tan chiquita era muy “graciosita”. Finalmente, el gorila y la gatita vivieron muchas aventuras más juntitos pegaditos para siempre.