Claves para comprender el papel del periodista y sus retos actuales en la ciudad de Ocotlán, estado de Jalisco, México

Año 16, núm. 31Enero-Junio de 2015

CONSEJO EDITORIAL

Cuahutemoc Acosta Lua (UdeG), Jaime Aboites Aguilar (UAM Xochimilco), María del Carmen Anaya Corona (UdeG), José de Jesús Alvarez Ramírez (UAM Iztapalapa), José Luis Alvaro (Universidad Complutense de Madrid),

Salvador F. Capuz Rizo (Universidad Politécnica de Valencia), Héctor L. Del Toro Chávez (U. de G.), Luz de Lourdes Eguiluz (UNAM), Colin Fraser (University of Cambridge, England), Carlos Gómez Chiñas (UAM Azcapotzalco), Cándido

González Pérez (UdeG), Rafael Guzmán Mejía (UdeG), Alberto Hidalgo Tuñon (Universidad de Oviedo), Jaime Inclan (New York University), Stan Ingman (University of North Texas), Hirotaka KoKubu (UdeG), Juan Luis Linares

(Universidad Autónoma de Barcelona), Luis Arturo Macías Garcia (UdeG), Ricardo Macip Bazán (Universidad Autónoma de Puebla), Raúl Medina Centeno (UdeG), José Francisco Muñoz Valle (UdeG), Rogelio Rivera Fernández (UdeG), Jaime Sánchez Valente (Instituto Mexicano del Petróleo), Rebecca Danielle Strickland (Ciesas), Darcy V. Tetreault (Universidad

Autónoma de Zacatecas), Alberto J. Valencia Botín (UdeG), Francisco Vera Soria (U. de G) César Castillo Quevedo (UdeG), Durruty J. de Alba Martínez (UdeG).

graficosymas.com

Claves para comprender el papel del periodista y sus retos actuales en la ciudad de Ocotlán, esta-

do de Jalisco, México

Ramos Rojas, D. N.*

Resumen

Este documento presenta un análisis y discusión articulada entre la prác-tica periodística y el contexto de la ciudad de Ocotlán, Jalisco. Más allá de caracterizar a los medios locales, este trabajo centra su interés en el papel emergente de la periodista en tres escenarios específicos, la universidad, el trabajo y los ciudadanos. Este trabajo tiene base teórica sobre los newma-king estudios que utilizan las prácticas diarias del trabajo periodístico, y a partir de ello se proponen algunas claves para entender el papel del perio-dista, en general como específica.

Palabras clave: Periodista, Ocotlán, medios locales, producción de noti-cias. Abstract

This document presents an analysis and articulated discussion between journalistic practice and context of the town of Ocotlán, Jalisco. Beyond characterize the local media, this paper focuses its interest in the emerging role of the journalist in three specific scenarios, university, labor and citi-zen. This paper have theoretical basis on newmaking studies using the daily practices of journalistic work, and from this some keys are suggested to understand the role of the journalist in general and specific.

Key words: Journalist, Octolán, Local media, Newsmaking.

* El Mtro. Diego Noel Ramos es Profesor de Tiempo Completo adscrito al Departamento de Comunica-ción y Psicología del Centro Universitario de La Cienega, Universidad de Guadalajara. Correo electrónico: [email protected]

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Introducción

La condición del periodista es un tema que ha sido estudiado en diver-sas ocasiones, tanto en el plano universitario como en lo laboral (Martinez Mendoza et al, 2009; Hernández, 2004), pero pocas veces se ha dimensiona-do su respectivo rol en un tiempo y lugar concreto. Los periodistas, los que están en este momento escribiendo alguna nota o reportaje, entrevistando a algún personaje, conduciendo algún programa de radio o televisión, go-zan de gran popularidad por desempeñarse en los medios de comunicación. No obstante, se ignora por el resto de la sociedad, la relevancia que juegan en la construcción de la realidad desde las mismas condiciones en las que trabajan, su incidencia en la opinión pública, y su formación profesional.

El periodista es un personaje clave no solo porque aspira constante-mente al profesionalismo laboral, sino también por que vigila de cerca los acontecimientos cotidianos y extraordinarios. Es un personaje genérico y particular a la vez, es participe del cambio social†.

El espacio o plataforma mediática que ha ganado el periodista (ya sea en radio, televisión, prensa escrita, o multimedia), no fue un camino expe-dito, por el contrario, con el pasar de los años, se puede decir que es un el lugar que ha sido el resultado de un serie se eventos escritos la historia.

La intención principal de este trabajo es discutir y plantear ciertas claves para entender el papel que juega en la actualidad el periodista, revisando estudios que lo trabajan desde su forma genérica hasta un trabajo empírico y particular donde se coloca la voz del quehacer periodístico de la ciudad de Ocotlán Jalisco.

Para ello, se ofrecen cinco apartados fundamentales, en el primero se presenta un resumen histórico desde la llegada de la prensa Jalisciense, delimitando el texto al surgimiento de algunos semanarios de la ciudad de Ocotlán, los cuales representan hasta la fecha las pocas opciones informa-tivas para los lectores de la región Ciénega.

† Conclusiones finales de la conferencia titulada “El periodista como personaje clave en el siglo XXI” im-partida por el Mtro. Diego Noel Ramos Rojas y dirigida a estudiantes de la Licenciatura en Periodismo del Departamento de Comunicación y Psicología realizado el 4 de febrero de 2015 en el Centro Universitario de la Ciénega.

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El segundo apartado esboza brevemente el anclaje teórico del presente trabajo, el cual se basa en los aportes teóricos del newsmaking studies y los elementos de estudio que se han generado desde hace algunas décadas desde la sociología de la producción informativa, o mejor conocida como media sociology.

Como tercer apartado se puede encontrar la propuesta analítica de tres escenarios contextuales desde donde se puede estudiar el papel del perio-dista en la contemporaneidad de un espacio situado geográficamente.

Cada escenario refiere a ciertos espacios en los que el actuar del perio-dista resulta relevante. El primero se acota a la productividad de su forma-ción universitaria desde el involucramiento del periodista en ciernes; el se-gundo está estrechamente ligado al ámbito laboral, es decir, todas aquellas condiciones y retos actuales que se presentan en las nuevas formas de hacer periodismo dentro de un marco mediatizado y repleto de intereses particu-lares; el tercero se puede considerar como el escenario de acción donde el periodista cumple un rol con la ciudadanía, la democracia, y el acceso a la información pública.

Para el cuarto apartado hubo un esfuerzo metodológico de corte cua-litativo, el cual implicó aplicar entrevistas semiestructuradas a cinco estu-diantes de la carrera de Periodismo del Centro Universitario de la Ciénega, que cumplieran a cabalidad con cierto perfil. El criterio más importante fue que estuvieran trabajando en algún medio de comunicación mientras estu-dian semestres avanzados de la carrera (de quinto semestre en adelante). El número de entrevistados es pequeño porque no se trata de demostrar representatividad numérica, sino de profundizar en la subjetividad de los entrevistados, además de que el universo de estudiantes oscila en alrededor de 250 estudiantes, según el ingreso, egreso e intercambio estudiantil. El objetivo principal de dichas entrevistas fue conocer el involucramiento en los tres escenarios mencionados anteriormente.

En el quinto apartado se elaboran algunas conjeturas para enriquecer la discusión sobre el papel que juega el periodista de forma genérica en el contexto ocotlense, y reflexionar sobre las formas en las que estos escena-rios promueven o limitan el actuar del periodismo local.


Resumen histórico

Para entender el papel del periodista en el siglo XXI, es menester hacer un recuento del devenir histórico de la prensa Jalisciense, puesto que en su proceso cronológico se recatan eventos que darían lugar a la nueva escena que se presenta en la prensa de nuestros días.

En su tan citado libro “Las disputas de las conciencias. Los Inicios de la prensa en Guadalajara, 1809-183” de Celia del Palacio Montiel (2001), se explican algunos factores que influyeron en la necesidad del establecimien-to de la imprenta en Guadalajara en 1792, ciudad que contaba en aquella época con 35 mil pobladores. Aunque Montiel (2001) asegura que la llega-da de la imprenta a Guadalajara no tiene una fecha exacta, algo interesante es la relación que se ha sostenido por algunos historiadores sobre que, la llegada de la imprenta en Guadalajara fue el resultado directo de la funda-ción de la Universidad, ambas en 1792.

Transcurrieron aproximadamente 18 años para que surgiera el primer periódico en editarse en tierras jaliscienses titulado El Despertador Ameri-cano, que como es conocido en la historia mexicana, pese a sus siete ejem-plares de vida, tuvo un papel relevante en los sucesos relacionados con la independencia de México. En las siguientes etapas los diarios que circula-ron fueron de corta duración y no ocuparon grán importancia en el siglo XIX. En el trabajo de Ammand (1989) nos muestra que la constante de es-tas publicaciones fue su efímero paso por la vida pública de Jalisco, ninguna siguió con vida después de la revolución mexicana.

Los decanos en la prensa tapatía son El Informador y su rival El Occi-dental, el primero data desde el año 1917 bajo la propiedad de la familia Álvarez del Castillo, el cual a lo largo de los años se ha creado la imagen de ser un periódico conservador desde sus inicios (Sánchez Ruiz, 1989), y el segundo, perteneciente en un primer momento a la cadena García Valseca ‡, tendría su fundación en el año de 1942.

‡ Aunque la empresa fue convertida en la Organización Editorial Mexicana y vendida a Mario Vázquez Raña durante el sexenio de Luis Echeverría, la cadena García Valseca funda una de las primeras Academias Teórico-Práctica de Periodismo en 1949. Cabe decir que, un poco antes ya había aparecido la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Más adelante ahondaremos en la formación universitaria del periodis-mo en México.


En cuanto a la prensa de Ocotlán, ciudad industrial ubicada en una región agroindustrial, influenciada por la Iglesia católica. Bajo esa lógica Arellano & Cárdenas (2010:101) aseguran que el primer medio impreso de comunicación local fue La Voz del Párroco editado en 1941 por el cura de la ciudad. Empero, en la investigación documental propia dentro de la hemeroteca histórica de la Biblioteca Publica del Estado de Jalisco, se pue-den encontrar otras publicaciones anteriores como El Centinela, Semanario humorístico y de Combate, editado por primera vez en el año de 1922.

Los medios impresos informativos que circulan actualmente en la ciu-dad de Ocotlán tuvieron su origen a mediados del siglo XX y otros de re-ciente origen, de siete años a la fecha. Para el año 2008, los ocotlenses ya contaban con cuatro medios impresos conocidos: El Faro, La Ribera, Guía y La Extra, todos ellos con circulación y formato de semanarios. Va-rios trabajos señalan que, a excepción de La Ribera y Guía que sugieren una línea editorial más coherente pero con tareas pendientes para mostrar un periodismo de calidad, los medios locales no tienen la capacidad aún para convertirse en diarios, y mucho menos en una prensa que represente al periodismo contemporáneo y crítico, y cercanos a los favores políticos, las secciones de sociales, la nota roja, y publicidad local (Amman, 1989: 56; Arellano & Cárdenas, 2010:101).

En cuanto a radio y prensa se refiere, en el año de 1941, ya funcionaban 148 difusoras como XEN y XEW en México. A nivel Jalisco la radio llega con fuerza en 1939 y la televisión en 1960. En Ocotlán se contaba con una estación de radio local y una de televisión local a finales de los años 80. Ahora la ciudad cuenta con tres estaciones de radio y una de televisión: XHAN 91.1 FM Estéreo Vida Ocotlán (FM), XEAN 800 AM Estéreo Vida Ocotlán (AM), XHUGO- 107.9 FM propiedad de la Universidad de Gua-dalajara, y Visión Tv canal de televisión local que se transmite a través del canal 112 que corresponde a Cablemas Digital.

Cabe recordar que lo central de este trabajo está colocado en la figura del periodista como actor medular del espectro social estudiado. En este apartado no se pretende ahondar con la historia específica de los medios de comunicación masiva ocotlenses, pero se considera pertinente considerar este resumen histórico para analizar el escenario laboral dentro del tercer aparatado.


Acercamiento teórico desde la sociología de medios y el newsmaking

La perspectiva teórica utilizada es fundamental para comprender desde dónde se observa el objeto de estudio. En este caso, se partió desde los estudios de la Media Sociology (Sociología de los medios), los cuáles re-fieren precisamente al estudio de la producción de noticias o información periodística, las cuales tuvieron un origen anglosajón, pero desde finales de los años setenta, estos comenzaron a implementarse en otras zonas, por lo que estos estudios, además de expandirse y cobrar auge, se particularizaron según las necesidades de investigación de cada lugar.

De los precursores para estudiar cómo se formaban las noticias en los años setenta tenemos a Tuchman (1978) y Mauro Wolf (1987) a mediados de la década de los ochenta, ambos fueron los primeros en sentar las bases de lo que se conoce bajo el nombre Newsmaking Studies. Sin embargo, se sabe ahora que el Newsmaking es más profundo que únicamente estudiar la rutina de la producción de noticias (Wolf, 1987), ya que el trabajo pe-riodístico conlleva cierta carga de condicionamientos. Uno de ellos refiere a la compleja figura del emisor y su entorno para realizar su trabajo, es decir, la labor del productor/periodista, la cual comienza a gestarse desde su profesionalización, seguida de sus circunstancias y rutinas laborales, y el margen de acción que posee como orientador de la opinión pública ante los filtros de diversas índoles, como las condicionantes comerciales y políticas editoriales de las empresas periodísticas (Wolf, 2007).

Con esta acepción del Newsmaking es insoslayable no ver la producción noticiosa como construcción de la realidad y a la noticia como un producto social. Esa mirada ha sido “un consenso en los análisis de la producción in-formativa” (McQuail, 1994 citado en Hernández, 1997:207). Al considerar a la noticia como un producto social y su producción como una construc-ción social, Hernández (1997) apunta que la práctica de las organizaciones periodísticas y sus integrantes tiene un papel preponderante, pues son par-te del proceso de dicha construcción a través de normas operativas estable-cidas por los propios medios de información.

McQuail (1994 citado en Hernández, 1997: 230) Ofrece las siguientes relaciones que impactan la actividad organizacional de los medios y ayudan


a explicitar el papel del comunicador/periodista: La relación de los medios con la sociedad, la relación de los medios con los clientes y los dueños, la relación con sus fuentes de información, y las relaciones al interior de las organizaciones periodísticas.

Tres escenarios para reflexionar el papel del periodista: Universitario, laboral y ciudadano

Según datos sociodemográficos del Consejo Nacional de Evaluación (CO-NEVAL) del año 2010, la población total del municipio en 2010 fue de 92,967 personas, lo cual representaba en ese entonces al 1.3% de la pobla-ción en el estado. También contaba con diez escuelas de formación para el trabajo, entre ellas el Centro Universitario de la Ciénega(CUCI), de la Universidad de Guadalajara (UDG). Para ese año una de sus carreras ya contaba con cinco años de incorporación al sistema educativo, la carrera de Periodismo, del departamento de Comunicación y Psicología. La licen-ciatura en Periodismo fue dictaminada en el año 2004, pero los primeros estudiantes fueron los del calendario 2005-A. Según datos de la sección de noticias en la página web de la UDG hasta hace unos dos años la carrera registraba 350 egresados desde su creación.

La licenciatura comenzó a formar parte de la oferta educativa de la re-gión y de estados colindantes principalmente, y también se integró al uni-verso de programas de comunicación y periodismo a nivel Latinoamérica. El estudio realizado el año 2005 por la Federación Latinoamericana de Facultades de Comunicación Social (FELAFACS), decía que en ese mismo año, había alrededor de mil, 400 programas de comunicación y periodismo a nivel superior en Latinoamérica, considerando a las facultades que no es-tán asociadas a FELAFACS (alrededor de 350), con un cálculo aproximado de 700 mil estudiantes en dicha área dentro de América Latina.

En esa tónica Mellado (2009) no dice que los programas deben de res-ponder y adaptarse a las necesidades de su entorno y que, quienes hoy es-tudian periodismo, necesitan tener la habilidad de difundir contenido, de combinar distintos medios para gestionar mensajes de distinta proceden-cia y trascendencia, en una sociedad compleja y dinámica. El programa de la carrera de periodismo (CUCI) en Ocotlán busca actualmente ofrecer


las condiciones sociales y profesionales para la región, y estar acorde a los cambios formativos del periodista, adoptando un modelo educativo por competencias que consista en reconocer al estudiante como futuro perio-dista y vincularlo con la realidad.

El escenario de la formación del periodista es relativamente nueva, aproximadamente cincuenta años, pero eso no la hace menos simple, por el contrario la vuelve compleja de describir. (Mellado, 2009) habla de estos inicios desde un recorrido histórico, debido a que primero surgió el perió-dico y después apareció el periodista, y que por estos mismos ajustes existe un posible desfase a nivel internacional entre lo teórico y lo práctico de la profesión.

Y a propósito de la profesionalización del periodismo, en el artículo publicado en la revista Comunicación y Sociedad “La formación universi-taria de periodistas en México” (2004), María Elena Hernández describe cuidadosamente la trayectoria de la enseñanza del periodismo en México a través de la apertura de escuelas de esta disciplina y el lugar que ha tenido la enseñanza del periodismo en los propios periodistas, y concluye que “el tema se convierte en una cuestión de opinión, en donde las apreciaciones más relevantes serían las de los formadores, los empleadores y los propios periodistas” (Hernández, 2004: 133) arrojando ciertos cuestionamientos interesantes “¿Se puede hablar de un cambio en la calidad de las prácticas periodísticas por la intervención de los egresados de escuelas de periodis-mo?” (Hernández, 2004: 133).

La relación Universidad-Sociedad es una relación compleja. Casteñeda y Solorio (2014) nos muestran que se puede tratar de una estrecha relación que realmente amalgama cuatro elementos: Estado-Universidad-Socie-dad-Mercado. Casteñeda y Solorio (2014) trabajan el caso de la carrera de psicología, preguntándose hasta que punto dicha carrera del Centro Uni-versitario de la Ciénega responden a necesidades regionales. Sin embargo, al aplicar este misma formulación a la formación del periodista en la ciudad de Ocotlán, nos aparece un panorama alentador, puesto que el plan de estudios se ha reformulado acorde a las necesidades que tienen los perio-distas en la actualidad, bajo un esquema de desarrollo de competencias


digitales, que pueda colocar a los alumnos en una plataforma del mismo nivel que las exigencias del periodista del siglo XXI.

Con el objeto de definir el papel del periodista en estos tiempos de cam-bios, uno de los escenarios emergentes para pensar al informador es pre-cisamente el universitario, esto debido a dos puntos centrales. El primero porque el ejercicio periodístico ya desdibujó la frontera entre la profesión y el oficio, resultando un debate superado tras el campo ganado por los programas de periodismo en toda Latinoamérica. Y el segundo, que para develar el nuevo rol que juega esta figura (en su forma genérica) es funda-mental describir su formación previa al escenario laboral, esto a partir de conocer la particular voz de los actores mismos, los alumnos.

El siguiente escenario es precisamente el laboral. Para ello, es necesario iniciar con un descripción general de sus principales medios impresos dón-de se pueden insertar laboralmente dentro de la localidad. Según Amann (1989) los semanarios con mayor influencia en la región son La Extra de Ocotlán, fundada en 1968, con altibajos económicos por fracasos políticos de la directiva; El Faro de Jalisco, fundado en 1975 con tinte conservador; Guía fundado en 2006 y en 2008 lanza su página web, también se encuen-tran otros semanarios de reciente creación como Mi región y La Ribera.

De acuerdo con Farina (2012), quién afirma que los medios menciona-dos tienen un alcance limitado por sus pocas zonas de distribución, tiraje semanal y pocas páginas en sus publicación. La constante entre los medios impresos son sus descuidos en los textos y su espacio mayoritario destinado a la publicidad, inclusive en las mismas portadas, mermando de esta forma sus contenidos informativos.

Cuando un periodista se integra a la platilla laboral de dichos medios, debe de saber que además de que se en sus página se le otorga poco espacio a las necesidades informativas de la región, sus principales patrocinadores, son los grupos políticos, especialmente la publicidad oficial del gobierno en turno.


En la consulta de un reporte de egresos en comunicación social (anun-cios gubernamental) del Ayuntamiento de Ocotlán efectuados del 29 de enero al 16 de octubre del 2014, se encontró que el total de gastos fue de $536,281.76 pesos. De la cifra total, se destinaron los siguientes gastos con sus respectivos proveedores de la siguiente manera:

Como podemos observar, la oferta laboral local tiene una marcada re-lación comercial, en este caso con el gobierno municipal. Esto puede ser un indicador de las condiciones bajo las cuales realizan su quehacer perio-dístico los profesionistas. Además, “tienen que adaptarse y actualizarse tanto a las normas operativas de las organizaciones periodísticas en medios tradicionales como a la de la red de redes” Crovi, (2002:231). Este última implica una lógica laboral diferente, con exigencia y calificación profesio-nal ligada a las habilidades en la difusión digital y multimedia, reto que se puede solventar durante la formación universitaria y posuniversitaria. Está dinámica suele presentarse en la cotidiana jornada laboral y el periodista debe explorar y moverse en diversos medios y formatos.

El periodista vive un escenario laboral de transiciones, donde se adapta de forma permanente. Hace algunos años, cuando alguien decía que es-taba leyendo el periódico era porque realmente tenía entre sus manos el ejemplar de algún medio impreso, y para consultarlos había que esperar su circulación diaria. Con el vertiginoso desarrollo de Internet se propu-sieron nuevos elementos en los procesos productivos tanto en los medios impresos como en las cadenas de televisión y radio.


En el trabajo de investigación de Martínez Lozano (2012:21) nos dice claramente que el ritmo de trabajo y la propia noción de la tarea a reali-zar de las redacciones comenzaron a cambiar con la llegada de las nuevas tecnologías digitales. Internet, y todos los dispositivos que se fueron desa-rrollando, provocó un replanteamiento de los tiempos y los espacios acos-tumbrados para la producción de noticias. Uno de los supuestos de dicha investigación señala lo siguiente:

Las tecnologías digitales provocan nuevas formas de relacionarse, de jerarquizar, de funcionar y de proceder dentro de una redacción. Con ello llega otro supuesto que sugiere que la estructura interna de los me-dios llega a un punto de quiebre que motiva el cambio de las jerarquías, la creación de nuevas áreas de operación y el desarrollo de habilidades, competencias y saberes para permanecer dentro de la estructura del me-dio (Martínez Lozano, 2012:26).

Sin embargo estos cambios de estructura parecen no permear la con-diciones económicas de forma significativa dentro del escenario laboral al que se pudieran enfrentar los periodistas en cualquier parte del País. En cuanto a condiciones económicas se refiere, existen otros espacios geográ-ficos donde las personas que ejercen la profesión no tienen las condiciones mínimas, un claro ejemplo es en el sureste mexicano. Entre el siglo XIX y XX, la ausencia de salarios fue parte del paisaje cotidiano en esa zona del país, los dueños de los periódicos llegaron incluso a pensar que no debía de ser pagada porque corrompía a los periodistas (Martínez, 2009:103). A finales de los setenta y principios de los ochenta, algunos periódicos co-menzaron a pagar a sus principales reporteros.

La Comisión Nacional de Salarios Mínimos en razón de considerar al-gunas ciudades más caras que las otras, determina el monto de los salarios (CIMAC, 2008). Los estados del suerte son de la zona C. En comparación con estados de la zona B como Jalisco, Nuevo León, Sonora, entre otros, el salario mínimo profesional de reportero es mayor ($153.12 diarios, en el año 2011 ascendió a $174.67) pero no suficiente.

Ante estos escenarios que parecen estar determinados por los cambios estructurales, se sugiere en este trabajo pensar el papel del periodista den-tro de un escenario ciudadano.


Dicho escenario integra elementos de solidaridad, de protección, de in-teligencia colectiva.

Con la ola de violencia generalizada que vive el país, la región occidente no es la excepción, inclusive la cobertura de ciertos hechos ligados a temas de seguridad, corrupción y delincuencia organizada parecen ser riesgosos en la ciudad Ocotlán y sus alrededores. Esto implica que México sea uno de los páises más riesgosos para ejercer el periodismo según informe de AR-TICLE 19, que resalta el dato que desde el año 2000, más de 77 periodistas han sido asesinados y 17 desaparecidos. En años recientes han asesinado a cinco y dos han desaparecido, ante esta situación, los periodistas buscan mecanismos de protección en organizaciones no gubernamentales, en el marco legal y en la autoprotección de datos, ya sea por amenazas de muerte hacía ellos o sus familiares. Este tipo de seguridad no se las garantizan sus propias empresas, un caso representativo es el de Moisés Sánchez, asesi-nado por un grupo de hombres armados en este año, mientras fungía su labor de editor en el diario La Unión de Medellín en Veracruz, uno de los estados con mayor represalia a los periodistas que no siguen los intereses oficiales. Cuando el periodista opta por tener un postura y principios y eso trastoca intereses de cierta esferas de poder, la profesión se convierte en un estilo de vida delicado, pero cuando en pleno siglo XXI, este tipo de sucesos quedan impunes, deja una preocupación aún más latente.

Al identificar este panorama se puede enfatizar que los retos en el siglo XXI para el periodista no solo tienen relación con el acceso a las llamadas “tecnologías de la información y la comunicación” sino también con garan-tizar la libertad de expresión y la integridad. De tal forma que, no solo se han adaptado a los cambios tecnológicos, sino que también han promovido el respeto irrestricto de los derechos humanos.

En la nota escrita por Julio Ríos publicada en la Gaceta UDG el lunes 19 de enero del 2015 se pudo observar como periodistas de distintos medios salieron a las calles de la ciudad de Guadalajara en aras de garantizar la libertad de expresión, la seguridad del autor y la protección de esos dere-chos, los cuales no son exclusivos de los que trabajan para algún medio, sino para cualquier bloguero, estudiante, o cualquier persona que hace uso de su cotidiano comunicar. El papel del periodista en el escenario ciudadano


en estos tiempos resulta de vital relevancia, no porque antes no lo haya sido, sino por la imperante necesidad de construir tejido social, transmi-tir información confiable, colocar a disposición de los usuarios contenidos emergentes, y sobre todo insistir en la permanente lectura de nuestro en-torno como oportunidad para generar conciencia colectiva.

Finalmente, este escenario ciudadano resulta neurálgico para efectos de trabajo, puesto que busca definir al periodista como un intelectual por di-versas razones: escribe para ser leído; busca que sus ideas, informaciones o reflexiones aviven la discusión pública (Martínez, 2009:19). Entonces todo aquel periodista debe de hacer públicas sus reflexiones, su análisis, hacer circular la información que recoge pero también interpretarla (Martínez, 2009:21). En resumidas cuentas es intelectual porque no solo transmite in-formación sino también ofrece perspectivas diferentes y al mismo tiempo lecturas paralelas a las estructuras de poder.

Sin embargo, estas lecturas de la realidad no son siempre completas y el periodista deber ser conciente de ello, “este proporciona a los lectores un porcentaje de los acontecimientos del ayer inmediato, de lo contempo-ráneo” (Cruz Soto, 2008: 27) al brindar toda clase de información, “pue-de tomar un partido ante los hechos porque el periodismo no puede ser neutral” (Castillo, Hernández y Martínez, 1990: 32). Estos tres escenarios descritos se entrelazan y se traslapan para ayudar en la comprensión del papel del periodista, buscando que, con los especificidades de los discursos de los periodistas en formación que fueron entrevistados, se pueda identi-ficar una panorama más claro de los respectivos significados del quehacer profesional.

Pistas desde los perfiles de alumnos con involucramiento universitario al medio laboral

El primer perfil es el de Valeria§, tiene 20 años y estudia el sexto semestre de la carrera en Periodismo en el CUCI. Actualmente se desempeña como reportera de tiempo completo en la sección de Cultura del periódico La

§ Todos los nombres de los entrevistados fueron cambiados para cuidar su anonimato y considerar las implicaciones laborales.


Crónica de Hoy en su versión Jalisco. Su primer involucramiento como pe-riodista fue desde tercer semestre cuando realizó su primera nota, desde la elección del tema hasta su publicación. Una etapa para conocer el contexto real fue al comenzar su servicio social en La Gaceta de la Universidad de Guadalajara. Valeria tiene una idea particular del papel del periodista y su entorno laboral:

No importa en qué período estemos, un buen texto siempre se defende-rá por sí solo. Yo creo que hay que creer en las buenas historias pero, principalmente, saber contarlas, narrarlas y no perder esa riqueza crea-tiva del periodismo. Es necesario creer en el periodismo perfectible que puede subsanar todos los baches éticos y económicos aparentemente deplorables del medio (…) Supongo que cada uno cuenta de la feria como le fue en ella. Creo que al principio para mí fue desalentador pues trabajé en un diario con poca calidad ética al servicio del poder, como muchos medios, estoy convencida. Pero creo que todavía hay buen pe-riodismo en Jalisco y creo que hay quienes lo defienden con capa y espada aunque las condiciones no les sean favorables (…) Creo que hay que buscar los espacios y valorar el propio trabajo sin arrogancia ni visiones capitalistas. (Entrevista a Valeria, mayo, 2015)

El involucramiento en los medios desde semestres tempranos le otorgó a Valeria una visión distinta a las otros compañeros de su carrera. De lo más notable es su distinción entre los medios impresos y las características que logra percibir a partir de la lectura de sus productos informativos:

Los medios impresos de Ocotlán no cuentan con un contenido serio, profundo, vaya ni siquiera con cuidado de la ortografía o la coherencia de ideas, menos con el fundamental cruce de fuentes, todos se inclinan de manera absurda con el partido en el poder (…)el periodismo regio-nal cuenta desde su naturaleza con grandes problemas estructurales, financieros y políticos (…) el equipo humano con el que cuenta es, además de limitado, muy poco instruido en cuanto a profesionalización periodística. Los alumnos de periodismo pocas veces están interesados en prestar sus prácticas o servicio social en los medios locales porque, en mi opinión, no cuentan con algo para enseñarte más que el periodis-mo corrupto de una guardia que concibe la noticia como un objeto de


producción industrial y tampoco representan una posible oferta laboral seria. Me parece que si bien existe la oportunidad de generar un medio competitivo en Ocotlán es muy complicado realizarlo dado que muy pocos de los estudiantes de la carrera pertenecen a esa zona de la región Ciénega. (Entrevista a Valeria, mayo, 2015)

El siguiente perfil es el de Sergio de 23 años, quien cursa el sexto semes-tre de la carrera de periodismo, actualmente labora en una televisión local (Ocotlán), como responsable de la producción. Para él, uno de los factores más importantes para comenzar el ejercicio periodístico profesional es la experiencia y el trabajo cotidiano en los medios porque es la única forma de entender su dinámica. Otro factor que resalta entre sus compañeros pe-riodistas que no tuvieron formación educativa, son las herramientas que el escenario universitario provee para que se haga un periodismo de calidad.Sergio, quién se involucró en el periodismo desde los 17 años, nos narra brevemente sobre su entorno laboral y su percepción sobre los medios lo-cales, lo que arroja algunas pistas que describen el periodismo local tal y como se ha revisado en otros estudios:

Bastante hostil aunque con brillantes excepciones, que hoy por hoy hacen la diferencia, y las audiencias las notan, y las reconocen (…) cuando estás en la academia es menospreciado si aún estudias, aunque puedas tener y desarrollar las mismas habilidades que exigen a los pe-riodistas “de oficio”. Bueno, después de todo el sueldo no depende de mi y mencionar también que en las regiones pequeñas de por sí es mal pagado. (…) También hay que relacionarse por exigencias del oficio con otras personas, y cada quién va viendo hasta qué nivel. Nunca he aceptado ni un agua en eventos políticos, aunque hay quienes hasta van de viaje con ellos (políticos) y eso de alguna u otra manera condiciona el ejercicio periodístico. Los medios locales están a años luz del perio-dismo que se hace en Guadalajara (…) El de aquí es un periodismo muy pobre, sin mayores pretensiones que mantener el estado de las co-sas. (Entrevista a Sergio, abril, 2015).

También aparece el perfil de Pablo de 20 años, estudiante de periodismo de sexto semestre, y actualmente labora en una televisión local (Ocotlán), como operador del master desde octubre del año 2014. Pablo nos cuenta


que la profesionalización del periodismo es un proceso de continuo apren-dizaje, escolar y extra escolar, y que este proceso Inicia desde la formación académica y se desarrolla en cada etapa de la vida laboral y profesional. Al asumir dicha postura expresa su percepción sobre el entorno laboral y los medios locales:

Para los periodistas principiantes hay muchas emociones encontradas. Hay quienes te echan la mano y te brinda su apoyo pero también hay quien te desprestigia. Se tiene que aprender a lidiar con eso (…) Los medios locales que conozco en Ocotlán se inclinan a cierta ideología política, tratan de quedar bien con todos y sacar provecho de ello (…) En la producción de contenido es muy superficial (…) además de que a veces parecen revistas publicitarias. Sin embargo, con la apertura a más estudiantes, el contenido de los periódicos y medios locales, cada vez va mejorando. (Entrevista a Pablo, mayo 2015)

Otro perfil a destacar es el Ricardo de 22 años, quién cursa el séptimo semestre de la carrera en periodismo. Su primera experiencia fue en ter-cer semestre en Radio Universidad, donde lo llamaron para colaborar. Se desempeña desde hace dos años como reportero del semanario Guía, su sueldo es a base del número de notas que entrega a la semana. Para él, los trabajos escolares y los laborales, son de igual manera, te exigen tener fuen-tes, redactar bien, la diferencia es el nivel de exigencia, pues si te equivocas manchas tu nombre.

Ricardo nos narra sobre la red de contactos profesionales y fuentes de información de la que se ha hecho en estos años. También nos ofrece su percepción sobre el ejercicio periodístico a nivel local:

Mi trabajo me ha abierto más puertas, ahora tengo una lista de fuentes y una red de contactos que sirven hasta para los trabajos de la univer-sidad. Además de que, cuando sales (de la universidad), es más fácil encontrar otras oportunidades por la experiencia previa. (…) Considero que este involucramiento es muy productivo tanto para la formación como para el ámbito laboral. (…) En lo que respecta a Ocotlán debo decir que hay otros medios (menos Guía) que únicamente bajan sus notas de Internet, no reportean. Se puede encontrar de todo, desde un


periodismo serio hasta el amarillismo. Veo las notas locales muy defi-cientes en redacción, sin gente preparada, con dueños que por el simple hecho de tener un imprenta, publican un periódico y lo atiborran de publicidad, eso me parece grave para la prensa ocotlense. (Entrevista a Ricardo, Abril, 2015).

Aldo, de 21 años, cursa el sexto semestre y labora en un programa de deportes radiofónico y de televisión como conductor. En radio lleva dos años y en televisión apenas tres meses. En ninguno de ellos ha recibido un solo peso, pues el espacio es para aprender y ganar experiencia.

Siempre satisfecho de los que hasta ahora ha logrado en el periodismo deportivo, nos cuenta su experiencia y además señala su percepción acerca de la prensa local:

Siempre me siento satisfecho cuando hablamos del deporte local, eso le gusta a la gente de aquí (Ocotlán), porque cuando hablamos de temas nacionales, nos dicen los radioescuchas que eso ya lo saben por otros medios, que les interesaría escuchar notas del acontecer deportivo de la región. Siempre que le hago una nota a algún deportista destacado de la ciudad, me comprometo a publicarla, que no se quede guardada en mis archivos (…) La prensa local es mala porque no tienen suficiente personal para sacar adelante el trabajo, he visto que una persona tiene que producir todas las notas y no se da abasto. En los semanarios por ejemplo, tienen a dos o tres trabajadores que ni siquiera son egresados de periodismo o alguna carrera afín, solo llegaron y quisieron colaborar con el medio. A todos los medios locales les falta mucho por trabajar, la radio es quizás la más lograda. (Entrevista a Aldo, Abril, 2015).

De igual forma aparece un discurso común en los estudiantes entre-vistados que ya se encuentran vinculados con el escenario laboral, lo cual abre un abanico de posibilidades para indagar en sus prácticas sobre el pa-pel que está jugando actualmente el periodista en Ocotlán. Para ellos el perfil del periodista debe cumplir varios aspectos, se una persona crítica con el trabajo de investigación, instruido en temas de diversa naturaleza, con reconocimiento del contexto local y de las relaciones empresa-estado y empresa-sociedad, con habilidades para desarrollar productos para distin-


tos medios y formatos, con competencias digitales y ser autodidacta, y que pueda lidiar con presiones de tiempo, económicas y morales.

Conclusiones

Al definir el concepto de periodista ("journaliste") como un "analista del día", se expresa que únicamente tiene 24 horas para analizar de forma rápi-da el acontecer inmediato. No obstante, la mayoría de los sucesos se produ-cen en directo y tiempo real como radio, televisión y periodismo digital, lo-grando así cambios sustanciales en las rutinas del periodista. La tendencia en los estudios sobre la dinámicas periodísticas dicen que ahora habría que pensar al periodista acorde a la dinámica de los hechos, y como la instanta-neidad ha pasado a formar parte de la rutina, el periodista sería un “insta-taneista” con función de mediador entre los hechos y su comunicación ma-siva, ya no sería el de un intelectual, el de un analista de acontecimientos.

Como hemos visto a lo largo de este documento, el periodista vive en un ecosistema complejo de diversos escenarios, o en palabras de Reig (2007) un enorme telaraña que integra nuevos sectores económicos, nuevos públi-cos, y nueva forma de hacer periodismo.

Desde la bondades del escenario universitario, estudiantes de periodis-mo se insertan en el escenario laboral, el cual suele consistir en un esquema atento a los agentes económicos y sociales como el caso de la publicidad en los medios de Ocotlán, los cuales se dedican prioritariamente a fabricar anuncios.

El papel del periodista, sobre todo en el municipio de Ocotlán, no cum-ple con el perfil ideal pues está sujeto a este último escenario que advierte subempleo y precariedad laboral. A pesar de eso, es necesario apuntar que el escenario ciudadano ha cobrado fuerza para reconfigurar el papel del periodista en formación, el cual ayuda a reconocer el contexto que lo rodea para comunicar en nuevas plataformas y hacia nuevos públicos, un espacio está aún construcción pero con posibilidades para un periodismo compe-titivo, con libertad de prensa, que genere debate público y promueva la dignificación de la profesión.


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Claves para comprender el papel del periodista y sus retos actuales en la ciudad de Ocotlán, estado de Jalisco, México

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