BOLETÍN mercantil de puerto rico. DIARIO INDEPENDIENTE DE lUFOBmCIOU UNIVERSAL Dir*ctor-Prop Jetarlo: NEMcSIO PEREZ MORIS. Director: JOSA PEREZ LOSADA. Suscrición mensual U Número suelto 50 centavos. >1 2 centavo. NO SE PUBLICA LOS DOMINGOS. Dirección y Redacción: Plaza de Baldorioty de CastroNo. 29 Telefono: n? 44—Corree: apartado n? 488—Telógrafo: MORIS. Eutcrcd nt San Juna ae aeconrl clase mnil maticr. El Sr. Coll y Tosté Y SU INOLVIDABLE MADRE PATRIA . “Cuanto más vieja y más pobre, más se la debe querer.” LEOPOLDO CANO. cuantos tratan de indisponerle con las personas serias. Oigámosle, Oigámosle: Aunque ruja el huracán Y nos destroce el velámen, Nunca, los que bien la amen, La patria abandonarán! ¡AI timonel lanzarán Tal vez la doliente queja! Mas, á la madre que deja Para cubrimos su manto, La amaremos tanto, y tanto, “Cuanto más pobre y más vieja.” Y veamos, por último, cuan humilde y respetuoso, como es natural, se mues- tra con los generalesespañoles. Se di- rige á Leopoldo Cano, poeta y jefe mi- litar: El “P&rto Rico Sun” publica en su edición de anoche, última plana, un trabajo del Sr Coll y Tosté, trabajo ñoco sesudo por cierto, debido á lo poco me- ditado de la labor, y á lo imposible que es desmentir verdades reconocidas por todos, ó pretender oscurecerlas con cier- tos lunarcillos que, de no existir, pode- roso argumento serían para probar la suprema perfección del hombre. El artículo empieza por elevar him- nos á los franceses, alemanes, italianos, etc. etc., residentes en esta Isla, cosa muy natural. ¿No ha de ser cortés con ellos el señor Coll y Tosté, saludándoles, aunque nada les debe, como saludó siempre y halagó á todos los españoles que llegaban á Puerto-Rico, para des- pués, deberles mucho; y saludó y ha- lago y cantó ardientes amores á España, que fué la Madre Patria del señor Coll, según él mismo sostiene? Veámos'o en unos versos que el señor Coll encabeza con *a siguiente quintilla de Leopoldo Cano : A quien nos cría al nacer por anciana no se deja, i Una patria nos dió el ser. Cuanto más pobre y más vieja mas se la debe querer. Oigamos ahora al señor Coll; ¡Salve, oh ilustre cantor, (aquí falta una sílaba) que trasponiendo los mares, has llegado á nuestros lares trayéndonos una flor. Es un emblema de amor abrazarnos con placer; Y en el humano querer es el símbolo más bello, echar los brazos al cuello A QUIEN I\OS CRIA AL NACER. Hoy empieza tu jornada Trayendo olivo en la mano, Y la palabra de hermano, En tus labios engarzada; Quiera Dios, que tu llegada Venga la dicha á traer, Y con amor imponer " Este lema sacrosanto: ¡A la patria en su quebranto, “Mas se la debe querer!” Y basta. R.C. —nr Horrendo crimen Salvajada sin nombre ¿Vamos al caos? La indignación salta por los puntos de nuestra pluma. En momentos como este, compren- demos la aplicación de la terrible ley de Lynch. No la recomendamos. Oigan los lectores. Once días hace que don José Nuñez Carmona habló con los activos detecti- ves Gutiérrez y Vargas, á los cuales manifestó que su hijo Eduardo, de once años de edad, había sido víctima de uno de los crímenes que el mismo Có- digo califica de infames: delito contra natura. ¿Cómo se cometió? Los criminales atrajeron al niño, ciándole cuentos en la plaza de Colón. De ahí lo llevaron al laberinto militar, conocido con el nombre de “El Aba TANARUS üico”. * * Gutiérrez y Vargas se pusieron en campaña, con el celo de siempre, con vuluntad decidida. Yya tienen presos á diez criminales Estos son: Arturo González, Eduardo Visú (a) Madamo, Benito Otero (a) Bebé, Cataii- no Fernandez, José Belén Rodríguez, Octavio Félix (a) Colorado, Hilario Cátala (a) Yayo, Anselmo Vizcarrnndo 1 a) Chen, Candelario Andino \ (a) Caballo y Rafael Peña (a) Chorongo. Dicen los insensatos, los amigos de indisponer á las personas decentes que el señor Coll acusa á los españolesque redactan los periódicos españoles que se publican en Puerto Rico de “tener intenciones más aviesas que las que había en los malhadados tiempos de la colonia;” de “sembrar la semilla del odio contra loque sea americano;” de “cohibir (¡esto sí que tiene‘gracia!) que los naturales de Puerto Rico ejerciten uno de los más sagrados de los dere- chos,” cual es “maldecir indignados de ¡os inícúos tiempos de Pezuela, Sanz y Palacios.” Eso es mentira: el señor Coll no ha dicho tal cosa jamás, porque el señor Coll profesa veneración raya- na en delirio por España, que no la deja por anciana, aun cuando haya, co- mo es cierto, llegado ya á adulto. El mismo lo afirma. Oigámosle, pues: De las averiguaciones hechas por Gutiérrez y Vargas, con una sutileza digna de encomio, resulta que son tres los niños víctimas <¿el execrableatropello. Se llaman: Juan Gutiérrez Torres (ocho años), Eduardo Nuñez Rodríguez (once años), y Eduardo Acuña Dávila (doce años). * * * Horripilan los detalles. Nunca se ha realizado nada más brutal. Los doctores Quevedo y Cueto hi- cieron ayer el reconocimiento de los. niños, certificando que es real el atro pello cometido en la persona del niño Nuñez. Las otras víctimas fueron so- lamente estropeadas. El Juez Bazan exigió á cada bandi- do $5.000 de fianza, poniendo á los diez á disposición de la Corte de Distrito. ¡Madre! Palabra sublime que el niño barbota apenas; la que nos libra de penas cuando el dolor nos oprime; la madre al hijo redime; escucha amante su queja; le da la dulce conseja; y, en pago de su cariño, ' al llegar á adulto el niño Por anciana no la deja. Picaros, picaros los que aseguran que el señor Coll ha olvidado á la “vieja”, por la que siente idolatría rayana en locura. Bien elocuentemente lo dice él mismo señor Coll: “el lodo del panta- no salpica y mancha á la bestia que lapachea en él; no ála encina frondosa y corpulenta que lo mira con despre- cio.” En este caso, la bestia, como di- ce muy bien el señor Coll, son los pi- caros que aseguran que hoy él. el señor Coll, no ama á España, á la “vieja", con igual idolatría que antes, cuando España le di<s múltiples empleos y to- da clase de prebendas. Yse atreven todavía á añadir los maliciosos, los amigos de indisponer á las personas decentes, repetimos, que el señor Coll expuso públicamente, en el “Puerto Rico Sun”, ayer, que “España dejó en sus colonias de América un semillero de odios contia sus hijos.” ¡Mentira! ¡mentira! ¡picaros! ¡pica- ros! los inconscientes murmuradores. El, el señor Coll, fué testigo de que en esta isla, particularmente, se amó á España, “tanto, y tanto, cuanto más pobre y más vieja." Y públicamente lo manifiesta el Sr Coll, dando el más rotundo mentís á Los detectives Gutiérrez y Vargas han prestado un buen servicio á la so- ciedad. Caiga todo el peso de la Ley sobre los miserables esos, peores que caní- bales. mr * Incendio en Caguas UN BUEN GUARDIA HERIDO El sargento Villariny comunica ála Jefatura de la Policía Insular, por telé- grafo, que anoche ocurrió en Caguas un incendio, que destruyó el almacén de tabaco de los hermanos Solá. Dentro del tumulto consiguiente, una mano criminal se levantó contra el guardia Lozada, funcionario muy cum- plidor de sus deberes, y le asestó una puñalada, por la espalda. Está grave el herido. Mañana ampliaremos esta noticia. Servicio telegráfico especial DEL Boletín Mercantil 1 m n uii La tarifa para las Filipinas Votaron en contra Nueva York, miércoles.—Te- legrafían de Washington que ha sido derrotado en el Senado el proyecto de tarifa comercial pa- ra las Filipinas. Los miembros del Senado vo- taron. casi unánimemente en contra de la proposición pasada en la Cámara de representantes.. h kgttfl Mui Estrada Palma obsequioso En el Ejecutivo Nueva York, miércoles.— Co- munican de la capital de la Isla j de Cuba, que el Presidente Es- rada Palma obsequió con un banquete á Mr Morgan, en el: Palacio del Ejecutivo. Al banquete asistieron todos os ministros y urna comisión da ambas Cámaras. IB lili(1 lAR r De lo que se habló en el feauquete- E 1 pago del ejército Nueva York, miércoles.—Mas despachos de la Habana, dicen que en el banquete celebrado en honor de Mr Morgan; se habló con este Senador americano del empréstito de los treinta y cinco millones que necesita Cuba. La mayor parte de esta suma se destinará al pago del: ejército cubano. Ii nljl ínsito El Sr. Tejera abandona d gobierno La opinión pública. Nueva York, miércoles.—El ministro de Hacienda de la Re- pública dominicana Sr: Tejera ha dimitido su cargo en señal de protesta á la resolví- ion del gobierno de Horacio Vázquez, aceptando la reclamación de los Estados Unidos. El país está con el Ministro dimitente. I tinio * Los barcos apresados serán devueltos- Ya están en la Guayra Nueva York, miércoles.—Co- munican de Venezuela, que los barcos que fueron apresados á esta República por los alemanes, están ahora en La Guayra, pron- tos á ser entregados á las auto- ridades venezolanas. En una de las carboneras del “Restau- dor”, fué hallada una bomba de dinamita. Tribunal Supremo Dia 5- Manuel Román Guerra fué condenado á cuatro meses de arresto mayor por el Tribunal de distrito de San Juan, en causa por disparo de ar- ma y lesiones. Contra ese fallo imter- puso casación, que el Fiscal impugna. Abogado; Rossy. Dia 5. La corte de San Juan Impu- so la pena de un año, ocho meses y 21 dia de prisión correccional á Rafael Llanos Verdejo, por disparo de arma de juego contra Juan de la Cruz Nivel; y el acusado ha interpuesto recuiso de casación, que es impugnado por el Mi- nistro fiscal. Abogado: Rossy. Civil. Casación en pleito que sostie- nen hace tiempo don Antonio Ramos Meneo, hoy su sucesión, con don Ma- nuel Díaz Caneja sobre verdadero cur- so de la quebrada “Margarita”. Abo- gados: Rossy y Ouevillas. ¿L.... ... Dos aereooramas POR EL SISTEMA DE FOREST Como decíamos ayer, el señor Harri- son, ingeniero de la “American De Fo- rest Wireless Telegraph Company” em- barcó en el vapor “Coamo,” para los Estados Unidos. Antes de salir pro- metió que comunicaría con la plaza, co- mo lo hizo ayer tarde, á cincuenta mi- llas de esta isla. El despacho recibido estaba redacta- do en los siguientes, términos:—“Em- piezo á sentirme mareado. Mañana tendré instaladas las baterías de más potencia y seguiré telegrafiando.” Esta mañana se recibió un nuevo despacho diciendo: “La mar está recia, pero el “Coamo” navega bien.” Se esperan nuevos mensajes de ma- yores distancias. En la Cámara UN INCIDENTES DE AYER Se discutía el bilí de Mr. Cora-web sobre auto de Mandamus, presidiendo Fajardo. Discurian de Diego v Hernández Lc- pez y eL primero juzgó el carácter del segundo. La áiscus : ón tomaba mal cariz, é intervino la Cámara. Nada más ocurrió. * * * Hacemos esta ac'aración, porque se ha dicho por ahí que Hernández López v de Diego se habían maltratado y no hay tal cosa. A2£Ú@@B*eS MERCADO DE NUEVA YORK New York, Marzo 4-- Los azúcares centrifugados se coti- zan hoy á 3 3J4 y los mascaba- dos 3 i[4. ¡¡ Flores ü Deseo comprar un manual del flori. cultor óun tratado cualquiera del cul- tivo de las flores. ¿Quién lo tiene? ¿Quién lo vende? Espero noticias en la redacción del Boletín Mercantil. 1-6 J.M. ¡Y dale...! Siguen las pelotifas Ayer, en la plaza principal, pegaron un pelotazo en el ojo izquierdo á nues- tro cajista José Pedregal. Ya hemos dicho que la policía no de- be consentir que los niños vagamundos continúen jugando con pelotas en las calles y plazas. Insistiremos. ‘Tin r w. Libras en New York v* New York, Marzo 4 Las libras esterlinas se cotizan hoy en esta plaza á $4.84. Literatura universal La librería del Boletín Mercantil recibe libros nuevos por todos los co- rreos. Hoy ofrece: La Aldea Perdida. A. Palacio Valdes El Colectivismo. E. Vandervelde. La Debacle. Emilio Zola. Trabajo. Verdad. Cria del Canario. X X Nosotros también Estamos afortunadamente en tiempos de líbre examen, según dice el Dr. Coll y roste, y vamos á examinar el artí- culo que publica ayer en el “Sun”. . Si el Dr. Coll y Tosté insiste en fas- cinarnos con su erudición, como en la carta de marras, para decirnos después- que no conocemos la historia de Puerto Rico, nosotros, desde luego, vamos *á demostrarle que no conoce la gramáti- ca castellana, para que no diga des- pués que le respondemos con una gua- sa. Ahora es con una verdad, °una> verdad muy dura, pero que ya verá co- mo le deja convencsdo: Veamos lo que ha escrito el doctor: “Nosotros creíamos que al arriarse la bandera española de los castillos del Morro y San Cristóbal,, en San Juan, la prensa española hubiera abandonado el campo de la po ítica candente, hubiera, dejado de inmiscuirse en nuestra reor- ganización, y, como extranjeros (?) ya en este país, se hubieran dedicado al desarrollo financiero da sus empresas, imitando á los franceses,.alemanes é ita- lianos, que viven en paz y concordia con nosotros”- Está bien:. ¡La prensa española co- mo “extranjeros”! ¡La prensa espa- ñolase “hubieran” dedicado!. .Valiente construcción! Esto es imperdonable en un hombre que ha estudiiado la carrera de médico en España. Aunque bien mirado, el Sr. Coll y Tosté tiene una disculpa. Estudió en Barcelona y allí tío se ha- bla mucho en castellano por des- gracia. A lo demás que-dice el Sr. Coll y Tosté no tenemos ojie contestarle. Cosas yiejas, gastadas por el uso, vulgaridades- que están al alcance de las inteligencias más modestas. Ya le en otio artículo que no penSaba así.el Dr. Coll y Tosté,. cuando el Gobierno español pudo ha- berle hecho sentir el peso de su enojo. Que le vamos á haceir. Pero vamos á aprovechar uno de los; argumentos que si erudito Doctor Coll. y Tosté emplea para fascinarnos: “En Madrid. d>ce, hay un sabio es- pañol, el Dr. Ramón y Cajal, antedi cual nos descubrimos con respeto. Es una gloria española que los demás sa- bios, europeos y americanos estiman y veneran. Pues bien, este sabio ha di- cho: “España ha vivido, con leves pe- riodos de bonanza, volviendo del. revés, aquella hermosa divisa política de Pla- tón, cual es Libertad, Concordia y Cul- tura; poniendo en su lugar Intolerancia, Discordia é Ignorancia: tales han sido,, y no. otras las causas de la decadencia de la raza española.” Por lo que al Doctor Coll y Tosté res- pecta, y puesto que admite como bueno el dicho del sabio Ramón y Cajal ¿por qué se queja de lo que haya podido suceder en Puerto Rico si España, “ha vivido con ieves periodos” de bonanza y etc? Ya vé el doctor Coll y Tosté como le respondemos con sus mismos argumen- tos, España no pudo dar lo que no tenía. Yel tiempo de reclamar ha pasado, doctor Coll y Tosté. Ya es tarde. ¿No están en frente de Pezuela, Mar- chesi, Sanz y Palacio,los Iñigo, Abbad, Alejandro Ramírez, Rufo y el Conde de Mirasol? Que tiene, pues, que decir el doctor Coll y Tosté en contra de aquel tiempo? Nosotros, lejos de desechar lo dicho por el doctor Cajal, lo aceptamos y lo agradecemos. Así aprenden los pue- blos á regenerarse. ¡Ah' si el doctor Coll y Tosté, en vez de molestar á los. españoles, se dedicase á enseñar ásu pueblo, csu qu gusto le aplaudiriámosü Por h6y, hemos terminado. Los pe- riódicos no deben ser reflejos de los en- conos de ¡os hombres, sino de las aspi- raciones de los pueblos. Cuando hemos censurado al Doctor Coll y Tosté, nos hicimos eco de la opi - nión pública. El Doctor Coll y Tosté tiene á quien preguntarle si no es ver- dad lo que decimos. A 1p Latimeí Sr. Alcalde: Me alegraré que al recibo de esta se encuentre gozando de la misma perfec * ta salud que para mi desea La mía es buena, á Dios gracias. Don Ramón: yo me senté en un ban- co de la plaza de Baldorioty y me se rompieron los pantalones. Eso no está bien, don Ramón. Ni siquiera medio bien, don Ramón. La moral se resien- te en ciertos casos. Don Ramón : yo no quiero que me pague los calzones, ni que ordene al se- cretarioóal tesorero que me los cosan, pero le ruego que haga poner unas ban- eos nuevos, Very respectfully. Cascarilla.