flüilTP.,o* :iJ} Instituto Geolóqico Y c*Nc^ ,> y Minero deEsflaña EDITOR SINTE
MINENT,IY DESARROLLOECoNóH¿tco EN Espnña
Miguel Á. P&et de Perceval VerdeMiguel A. López-Morell
Alejandro Sánchez Rodríguez (eds.)
ft*$ f #,i.,r#,". 1l f ililH%.,?"¿:B:RaTDITORIALSINTESIS
) el ue ?u?u¡nH) Jelnln roseJord
ruv uaqo) uqrv
d aP ?lrsre^lun,laP orI19¡Pel?J
'¿8ruspcl7 ?¿Y"t?g
^run el ua s€f,Itu-{ eP orl19¡Pere]'o¿ t?u2"rv roy?)
ap oreutlAl ,( ocr8
rre¿ f e;ruouocg,,
rlIN ep oretua8ul
eqru?S o'tpuutalV
'eIcrnIAI aP PePseuolJnlflsul a eIl
rJolsrH ue Jolcocl
-zalg'¡ 'Y Pnft¡11¡
'Elf,rnw eP PEPolf,nlllsul e ?IJ
fJolsIH u3 Jol3oc
zatV¿ 'V pn&7¡¡
'V'S'slseruls [eIrorIPA aP
ou¡¡sa ¡od er¡tatd ugr.cezr.tolnt BI uls 'o.uo :arnbpnc :od o
erdocolo3 rod'orudgo:rca¡a'ortlTu3eru'of,Iu9llf,ela'of,lupf,aur 33s'
'otpt,i rarnb¡enc:od f ugrcerednrar rP erurlsls ramb¡eno lod
ar.rr*plrrzd'o er8atu¡ 'ugroecr¡qnd trsa JIIIIuSIJEJI o ¡tr¡lsl8a¡'rrrnpordt. 'sala¡ sel ua solsr,ra¡d II^L oluelu¡IJJ¿sa'r ia I sa¡euad
sauorrrrss st1 ofeq'oprqrqord ylsfl 'soqf,aláP sol soPol soP"^lasa¡
ured5 ur parur.r¿-egeds3 ua oserdurl
gyOZ-rcL'$ '1r1 :P8e¡ olrsgdaq
6-L-gg0V8L-VB-g¿6 :logtdsg o:aur7q I ocr39¡oa5 olnlrlsul NgSI
9-Z-ty99 L6-V8-8l6 :slsaluis IEIro:lIPa NgsI
uo}srsaf uts'rtr,nLrr,r.¡7:drf t1
86 0l 869 (I6) ouoJ?lar
PITP?W s I 087,'' t'osourreq'lle^.V'S .SISAIN-IS'IVnIOJICI O
1'spa) zan?rLPo¡ z)tl)uts o:Puel:ry
J¡aro¡¡-zad91'y JanS¡¡1¡^aPrr^ Ie af,rr¿ eP z¿r?¿ 'v
lensll/\l o
(rx op¡s ¡ap sordr:ur.rd) olull oI¡I 3P orrrlqe olalr ü seuoJ sBI ur
oluár{ü¿uolJunJ ua snróng ¿JoPE^Brxe :PlJtIgnJ áP u9ll?JlsnlI
ANTECEDENTES DE LA MINERIA ESPAÑOLACONTEMPORANEA: LA MINEzuA EN LA CORONA
DE CASTTLLA (151 5-r7r5)
Emiliano Fernández de Pinedo Fernández
2.1. Lafuente
La principal fuente impresa para el estudio de la minerla de la corona de Castilla en los siglosXVI y XVII y muy inicios del xr,'lu es la obra de Tomás González, Registro y relación general deminas de la corona de Castil/a, en dos volúmenes, ediada en Madrid en 1832, basada en docu-mentos del A¡chivo General de Simancas. Su laborioso trabajo se enmarca en los esfuerzos quese llevaron a cabo en la segunda etapa del gobierno absolutista de Fernando VII por estimularlas actividades industriales, artesanales y extractivas. La deflación monetaria, el déficit enlabalanza de comercio de resultas del declive de las exportaciones de lana y hierro v el fin de lallegada de metales preciosos de Améíica subyacen al interés por fomentar'el artesanado autóc-tono, la industria,nacional y las actividades mineras. El canónigo González habría tratado deseñalar los lugares en donde, en siglos pasados, se intentaron obtener minerales, y en los que,con nuevas técnicas, talvez se pudieran reabrir las minas. La obra reúne, por orden alfabéticode localidades, de Abarán a Zuya,los lugares y las fechas (la primera en 1508 y la última en1716) en las que se solicitaron permisos y se llevaron a cabo prospecciones, e incluso saca deminerales. Dado que, con frecuencia y una cierta amplitud, transcribe o copia modernizandoel original, sus textos suelen proporcionar informaciones de tipo técnicol.
Hemos procedido a ordenar en torno a 1.290 registros, recogiendo lugar, provincia, fecha,tipo de mineral y denunciante. Estas dos últimas informaciones son las más difíciles de siste-matízar. En bastantes ocasiones se precisa el tipo de mineral que se espera obtener, pero conuna frecuencia superior a la deseada se mencionan varios minerales o simplemente se dice que"cualquier metal" o "cualquier mineral", o mina, minas o metales, sin ofrecer más precisiones.En el caso del o de los denunciantes, se suele dar el nombre o los nombres, en algunas ocasio-nes su profesión y si se trataba de un titulado o de un don; pero Ia mayoría de las veces igno-
nf,ur^ 'Jsly''ounsaP
¡od Á 'oumJaur f
rrglf,YzlTlln efnc sa¡
FBIS EE8 saluelsarrrqo ered sBullu aPdn 9nb P eJBIf,E as
I se¡ ua elurpunqeuegurglcadsa as op
Pr{ EqeuuoJ aruslc
ueq ueqErlnseJ J"1e¡euolcuaru as enbrtJEd rolelu ETrord ery Elreulrü tlrgetueJ e¡ ered so,,'ugrceroldxa ap sarere8n¡ ua uEgEIIErluelg splu Ergo eP
IE PI E 'íU"Je uoJeIJrgrd uacered setuet3re soruo¡d uo erlr
pretu ap epanbsr,rq
iaP orarulu IeP o]
) IeP solEP so'I
:I 1¡196I) zmU Uun8¡e uo: anbuny:ero¡
?)JnFPuV
PrJJntr {
E.¡nPeürrJlxE
¿^enN ¿l EIIITS?J
elar¡ e¡ ¿lllrse3
eJJE eN + ESIU¡oJ
w{yáoa8 auoT
actod ugnnqtttrstg
) sauot8ar seru
¡ egedsg ap rnst:)¡Ja luoIJPJIqn ns '
J \ /.
9LZ'I seleC]
882'I.IVTO¿OIeJouJez
aP¡oubr asePIoP"ll"AzErlus]EcoJoJ
ezoSenT>dEIJOS
zuoberyc)c
€.u9¡erv€I¿Juelu¿]es
6rIBrnP¿rueJtxaIZerf,uePd
€,7.seJrJ9JzeuJso
7.1zolePegeyu9a'l
,r7.B.rnPErr¡aJlxaIouror EIInSED
I8errrnJAIOCng
8BUJ¡etJE3ZI€II,'68ErrrntrAI661ul ellrrs¿c
€8IEIIr^áSeo
CIetselgl lZ¿rroq¿le)
Z9u?eIsósóÉo]e^PnHI1ü¿S
69ePeu?JDgTrsuJJo
9ZEqoPr9:)IoPeuoPuoIAl
eEr)nJ¿PuvB6¿rrJruIVi¿gnro) ¿'I
oocPI3nlePuv8EI]II?D
tBoPrloI6e¿lrlIeS
6IPIrP¿l ¡0zs¿r.¡n1ry
9VErlruEW €-I9JáPu?rues
tzPTBIEI¿penD9IeJJe^¿N
LEBluanS€r^ JP oJrogrs
IBl¿eu P"Pnl:)lzeoozndrnS
harareqlvBe1'e
682¿€nN el ¿llnseJs?f,sB^ sErJur oJd
o'1{o!.¿01yt2Jo'l{0!,t01!uaJ
(ggZ'l) spxrunua? sr¡ ay rtfuñoa7 ugnnqutrstq
I'Z orPenJ
'GILü aqro8a5 ua osrca¡d ono I (1g¿1 ap) ¡eraue8 oun 'Erruele^ ap ourar ¡a ue sorrsr8a.rsop ue)erede II¡N( olSrs IOp sorcrur y '("'ern8ag 'n¡arze5 ,ern8ag ,u98erpuo1z,g ,atrgo .urc;a3)
eocz¡dmg ap sr?srcolp ep orurqtu un I 1"'eperroceged 'olpolT ap elle^ 'e.ln7'etuatt¡ueg ,¡eerr
-e1¡;\ 'uen8eqcg 'euoleurery) E^e[y Jp or{ro seun lseuyvlzr,rsauorf,E]Jerug sel ua 'uzuerJel ap alp^
Ie ue seJr rs o¡ad 'opesen8uerng I eue¡1 etn¡u(wz;.¡ap orJoges Ie ue eqetugl es enb o1 ap peprl-eco1 eun8utu rrn8g ou 'oulBrzr^ oJery Ia ua opr3elgelsa ol E Epnp urs oprqap 'sersB selcur,rord se1uE '(erar,rry I ruo¡drue¿ (sollrrnle^pN 'uzra-I <?nsEsIV 'uruetrAJ uES 'nrele¡ zoJO '<¿qelsg ,e¡alsg ,el-embr¡ '"ppnl) trmr'e¡1 f (ereftfenen¡ ua arn8g eluaurlsruce enbune 'uo8ery ua errqn al as eun ue'oelrlru alsa Buorf,uaur as anb ue seuorsero sop sel ap) sa¡rrag o euozeJelop opedslqo Ia oruoc 'es-euo8e¡e pEplIEOol o euoz eunS¡e uoo 'EIInSEJ ep ruoJof, pl se opelJegt ocr3grSoa8 oroedse 1E 'epellerl etueuJetunse¡d euru¡ el ap soropepeJle sol ap soulsad-urer oluaurelqeqord lnru 'sa.roprrgnrsep so¡ ap enord Ierogel pepl nc¿ EI ep erJeoe opot sour"J
qJxruguora qfl^¿&tap L ry"tautW :a1.ffi¿ ?¿awl¿ g,
-
blemente cam-
localidad íu€one-iona este núcleo,(Tirdela, Urquie-
yArieta). Enninguna loca-
pero si tres en el, Echagüen, Vlla-
iiéis de GuipúzcoaXWII aparecen dos
(r715).
48 1
) /
Ioz
r31 8 3
72
1.288
2146r98 1
Caphulo 2: Antecedentes de la minería española contemporánea... 49
De las 7.275 denuncias (excluidas las de Aragón, Valencia y aquellas de las que se ignorasu ubicación) efectuadas entre 1508 y 1716, tres cuartas parres se llevaron a cabo en la mitadsur de España (Castilla la Nueva, Extremadura, Murcia y Andalucía) y la mitad en las tres últi,mas regiones (véase cuadro 2.2).
Ctadro 2.2Distribuciónporcentualde las denuncias (1505-1,716) y surelación con elpeso demográfico de cadazona,
según el censo de 1591
Zona geográfca N.o de denuncias Porcentaje o/o poblacíón 1591
Cornisa + Navarra r t 3 8,86 18,46Castilla la Vieja 204 16,00 31,93Castilla la Nueva 289 22,67 20,45Bxtremadura 214 r6,78 8,06Mu¡cia 89 6,98 2,05Andalucía 366 28,71 19.05
1.275 100 100
Nota: Aunque con algunas reservas, utilizamos los datos ofrecidos en el cuadro "Población de Castilla en 1591" y los deF. Ruiz (1967, t. I: 199).
Los datos del cuadro 2.2 evidencian que no existió una correlación positiva enrre el repar-to del número de habitantes y el número de registros. La primacía dada por los mineros a labúsqueda de metales preciosos primó las prospecciones en la mitad sur de la península, la másrica en plomos argentíferos. Sólo en Castilla la Nueva el porcentaje de denuncias y de habi-tantes parecen próximos. Las zonas más ricas o aI menos aquellas en las que más minas se denun-ciaron eran, a la altura de 1591, áreas de reducida densidad demográfica y por ranro de manode obra más bien escasa. No pocos textos de época ponen de relieve cómo muchas minas sehallaban en lugares casi desérticos y de muy difícil acceso. Desde el punto de vista de los cos-tes de explotacióny de transporte,Iabap densidad y el aislamienro no fueron factores positi-vos para la rentabilidad de las minas. Uno de los elementos aducidos para explicar la crisis dela minerla fue precisamente la carestía de la mano de obra.
La mayor parte de las denuncias Íaravez afectaron a un solo producto. Lo m¿ís frecuente eraque se mencionaran dos, tres e incluso más. En algún caso, los materiales que se esperaban explo-tar resultaban harto heterogéneos, como el caso extremo de Oviedo en 1625, en que el denun-ciante confiaba hallar topacios, cristal y carbón de piedra. Hemos efectuado la clasificación, cuan-do se especificaban los minerales, por el primero mencionado, estimando que era el producto másabundante en las primeras catas y en la muestra. De las 1.288 denuncias clasificadás, en 431 nose aclara a qué tipo de mineral se referían -metales, minas, venas, escoriales...- y en dos se rratóde minas para obtener agua de riego. Prescindiendo de estos 433 cxos, hemos sisrematizado losrestantes 855 siguiendo dos cricerios. Por un lado hemos distinguido aquellos minerales y meta-Ies cuya udlización podía ser diversa: oro, plata, plomo, alcohol, anrimonio, cobre, estaño, hierroy mercurio. Y por otro hemos agrupado varios productos en función de su muy verosímil uso odestino. Así, vinculados al sector textil, el alumbre, la caparrosa, el vitriolo y la greda; o el azufre
2669
8 l
orJenl aP seP?PIruBl s31
arred Eu3nq ¿)Ps o?qlg
rnrlaJa ugIJ?JoP ¿l ec
y I O 6I) Przrfif) : aluani's¿JIJJeq U3 Og?lsa *
ueJr Elel€foq uof
oJo ua glueuIel^qo
rr Ie ue JEIraJde eP
ry:r,eele EI .( ogelso
P aP oPlP"rjlroPl)sE
<s€tl3u?ld ua ^
B "rrel"l8ul
aP 3gE1
I anb oJad 'ogBtso I'
)t)od? ug'¿IrusJC
(oJal?, o orJeII{ ua
:r as u91"1 ua ÍSEJ3P
E 3l aP ruEd uErS
eaPI EI eP reseq v
ePusuraP e-f 'z'z
oIJslIJc Iá PJauIuua aJIIPS Ie I
ugrsardrutar 'o:ñ970w
un JP JJquou IJ ?lJ aJq
ra) uotsuro eun ug
sera.t e ernSg ¡nzYr¡en tBloq eP ?JraII
olo: optxg '3J3¿ú[V
BtrserJ¿u'etl le3:eYt¡
za^ Pl 's?IuJag
: ''*sot:a:d selPatd
s:letaru so:lo ,t : .' ,'(€'z orPBnJ
0J/utouoJa 0710./¿ataa lL ?uauthl :¿1tp,r at¿u,l/J.l ll I / .tt09
882'ITYJOIzo8ar.r r.red srur¡A¡
Íc,I"lol ¡"srf,eJd urs
OIorJe^ IeroJ9lI¿1oJ
IErrl¿3rEIZ" ''l'ew1d'an8ozy
Ir"iog eP "rrar
IbIan3ozy
su.dgletp>r¿9eJ¿roJeruelq ErPrrd"',{ ouar¡1
IPüEJV17.oJJerH
orurl oDr ¡ep enSyLI¿1oI
OI"sesorce¡d serpard ¡uro¿e."'l ogersg
err¡d I oro 'reguy,ogelsE
Zsetsrl¿urv0ziIEroI
ZlElsrrr 3P sEurwa.rqor-Jluedrue3
"¡etsr.rr 'sorcedo¡"'l a:qo3
esesor:erd serpar¿VLérqo)
rTnzp¡srde1€.,I¿roI
5e.rpard ugq.re: ¡vro¿oruournuv
8'' optüpr^'?lnlurd lEtolv
' f loqoo¡y
tsa¡oturd ep Inze'lnzy,elrld I ¡ogocryar8eru¡yv€loqorlV
'',{ ouo¡d 'srurag0t/lletoJ
"3UlUJ zruJegII"'so:ro d oruol¿
ZI,,Bro^J9d,, I¿roJ9I"'f eteld 'otuo¡¿
AJlII¿S9Bereld I oruol¿
€"f arSnzyLZoruold
BalrqarJl¿ ierjnzvrvzFTOI
IC"[r]xar,, [BroJZZIsa¡etaru so.tto I rtel¿
e?PeJDI'd oro (Et¿Jd
Zeso¡.rede: I o¡ornr¡8o:o I erel¿
v"l esor.rede3v0r¿1?ld
ZJJqrunlE f eso.r:edu3LLIFlOI
6esorrede39ssptaru so:ro I o.rg
Z"l ¿so¡:ed¿¡ 'aJqun¡y€ZI"'l ere¡d 'org
7.I e-rqurn¡yIZereJd I o.r6
Laqafe o a.tqrunryLZoro
synunu?P aF o'Nprautu ay odt¿stltJul'tu¿P ¿F o'N1auurut ap odr¿
l21alu o la¿auxru ay 0¿!x ¿o¿ (ggz'D wlrunua? sE 2? ugpnq,¿lslQ
xaut tol a? otJat¿
T-II
Capítulo 2: Antecedentes de la minería española c0ntem?0ránea... 5T
Notas:y. . .: y otros metales o minerales.piedras preciosas...: piedrm preciosas o semipreciosas.Be¡nias, tal vez berniz, es decir, barniz.Margaiita, marcasita, sulfuro de hierro. Probablemente para producir chispas al golpearla con el eslabón,Almagre, óxido rojo de hierro empleado en la pintura.Tierra de bolar, tierra arcillosa con propiedades astringentes.Azul figura a veces como piedra azul para pintores (en 1577) o azul de pintores (i627).En una ocasión (Tirdela, 1665) figura alambre y cobre, que no es un error por alumbre y cobre. En la Edad Media el alam-
bre era el nombre de un metal, en general cobre. Lo usan asl Nebrija y F. de Rojas en 154 i (J. Corominas, Diccionario crítico eti-mológico, reimpresión 1954, voz: alambre).
y el salitre en pólvora ya que su fabricación sería verosílmente su destino. En un caso ha sido elmineral el criterio utilizado, en el oúo su probable uso (véase cuadro 2.3).
2.2. Lademanda
A pesar de la idea de que el país estaba bien dotado de recursos mineros, España fue durantegran parte de la Edad Moderna claramente deficitaria en cobre y estaño y a veces en plomo, yobviamente en oro y plala Cobre y estaño "en pasta" y objetos en cobre, estaño y latón, junto
con hojalata eran bienes habitualmente traídos del exterior. El cobre labrado consistía en cal-deras; en latón se importaban calderas, cazuelas, vacías, candeleros, cucharas... Los cuchillosen hierro o "acero" procedían en torno a 1563 de Flandes (Belduque y Malines), Bohemia yFrancia. En época de Felipe III (1598-1621) se admitía que España adquiría en el exterior cobrey estaño, pero que exportaba alumbres, azogve, hierro y plomo2. A mediados del xvtl se impor-taba de Inglaterra alambre, toneles de perdigones, estaño en barriles, plomo de Bristol en barrasy en planchas, asl como cuchillería y cucharas en pelffe y otros metales3. Al margen del altovalor añadido de algunos de esos bienes, Ios metales adquiridos en el exterior por España (cobre,
estaño y la aleación latón) se enconüaban entre los de precio más elevado, tal y como se pue-de apreciar en el cuadro 2.4.
Cuadro 2.4Precio de los metales y objetos en metal importad.os por elpuerto de Bilbao en mrs./quintal, en 1563
* estaño en barricas.Fuente: Griard(1905-1912, t. III, Bilbao: 510 a528).Delavaloraciónefectuadapormercaderes"delasmercaderíasextranjerasysuprecioenlaVi l la ' , en26abr i l l563.AunqueporBilbao salla buena parte del hierro vizcaíno, importaba objeros en hierro y acero, incluso para ciertos menesteres especlficos modes-tas cantidades de hierros menos dulces que Ios autóctonos.
ral
N.o de denuncias
3 1
1,2
3
z2
I
10
uoIcEIeJ anb feq
Crur se¡ aP rIPuIrEuoru EI eP PePIS¡91- ocr8g¡ouorc
Iotr { <"P"rraJuo¿
c¡¡alsod o sEf,IJrilJl 'o3ulf,Ilule^'ol
D aP olJars"uoy{oqcollula^ sEI aP
r¡d asa E olgs uaJ
1 'auerr¡) secg¡c
lg,r ua opueto¡dxar8r¡rapls solualrürlad e¡ ora¿ 'erratr
sad so1 anb sa¡gel
rerrd ap o sEAIlrIItuapEJ 's"lcu? u"JJ
lsuoJ IE ePslncul^BrnlceJnuBul EI aP
JElse oJJeIg ua sol
ueJrar{ st1 ap arse8
ldura ¡a ¡od oluel
ol8rs ye ua prcadseel eP EPuEureP E IBTUPII sel tP oluns, sEfoJ o(uor 'soflE
ernr¡nou8e e1
PU"nJ soJlls?uJoPr t¡ogedsa EcoJJBg
[ 'Pralu ua soJesEf
rsuoc f oPe^ale el
Janc EI ueqca d otr
fqnJJE^oJ aP u9I1
IEPIH,, UPJJAJ IEns aluaurl€If,uE]
EI 'oJas?f aleuau¡
sodtt saruaraSrP al
¡orad'stlreq 'seu
E SJJolfás sol
a EJa oJJeII{ IEoJ Eq"lsa ¡uedtuecE^EU U9IJ?nJISUOC
ref,Irq"i ercd oP
rtgat ered o ugqrl
r) socnsgtuoP sotl'.argor Ig
'sprrunuap se¡ ua oruo¡d Ia uoo BpunJuoc al as anb a¡q-eqord lnru sa orad '1sofo sol ap oluorurroar8auua; ouruaurej ,rr.3" o-o, eqir¡dur as (orr¡oru
-IluE aP oug o,r¡od 3P EtuJoJ ue <loqo)p IE
']elaur or{rrP uof, uelrEr{ as otsandtur orrarc ope8edergeq as anb rtcrpur ered 'se¡¡og s€l oruor 'so¡1as sounBIE aruaualqeqord f ueqezrlnn ol u?lq-u¡et ecsad ep saPar se'I '(887 tI'1 'Z€,8I 'zelgzuo)'¿) zanluery ap ((orlrs Iap EISI e1 ap u¡prel
1a ua rauod ep eJqel{ as enb atuonJ Eun ap sotonpuof, so¡ eled,, soJEurI ap otuo¡d ap sa¡rrumb
669'E reSarru? EqePuelu EInP?f, IEOu Eun SggI ug 's€JJeger ercd;s ored 'sorce¡ed ap opol argos'sopelal ua osn ns ap selruapr^e sepersetuap leq o¡1 'se8arceled sauorcecgpa ep sEJJagEc sEIua esresn ¡e o sauo3tprad ;rcnpord ered asrco¡dtua p o8an3 ap wrure setJarc ap ugrsnJrp EI uorotuerurrreJr Ie Japuar opnd anbune 'oprpuerxe lnur ¡etsa ep EJqep ou oruo¡d ep otunsum IE
r/Z'6,[¿toIBl'0e.rprrd uoq:e3
LI'IOIJ¿A60',,oJr)rH
LI'Isesonard se:par¿z8'0ogEtsg
€,9'€¡<lpxaJ.,r/0'YIarqoJ
,6',ooP"rJPr^ '!rJntur¿€0'9
wleJo^To.IL€'91ourold
atwuatto¿opn?oJ¿afuluat,to¿opnq0¿¿
osn frufl¿a(t ns ap ugnunt ua "alp.tautut
I sosona¿d ou saplaru aF Mnunua? t?I ¿y lantudJtod uontnqulstg
9'z orPeíJ
'saluesaJatur s,Bur oqfnur uetlnsoJ eJeurur erraSo I [Euesa]Jt Epu¿ruep JJtua soxeu sol ep Etsr ap or-und
¡a apsap I 'S'Z oJrynr 1a ue rerce'rde epand as ouroc alngrnsrp as sopnpord so¡ ap otser IA'orrncreru ap o oJaJltue8re oruo¡d ap o ere¡d ap seuru ep epanbs¡q
e1 f s9;erul 1a uecqdxa anb so¡euorcrpe soluawele uoJary ere¡d ua oprualuof, ofeg uoc seleJeururrero¡dxa ered eureSprue EI ap o olred lop Erue$rs ¡a .lod seperrcsns srzue¡edse se1 I 'ezorc1ea t(.'eIVzpJ'euacery ap o8anl f puerpppn3 ap seurur sel ap lerrrur o1rx? Ie Á (lESt 'o) oruanuugnc-sap
E 'sosolce¡d seleleru ap epanbs¡q e¡ re¡nonred eruJoJ ap glnrunse anb o,r,rsrcap oluourele Ia
atuauelqtqo¡d 'osed ep JorceJ un res ep Blgep oprualqo preuru 1e rod oper;au Ia ua opezunleJoF Ie'uglcero¡dxa ap salsof, soprcered V'G'Z oJpenf, aseg,r) selcunuap sel ap prtrrrr EI ueluas-etdet (o7o¿g'1) ouncraur I (o/o6t'gZ) erc1d'(o7og¿'02) oro 'era;¡rua8re euop8 ep o 'oral¡rua8re
ouro¡d ep g1€rr as Epnp uls enb el yorlocp lap f ouo¡d ¡ap arred rrpeqa anb e¡.rgeq alueruelqeq-o¡d odn¡8 ara y '-anSoze o orJnrJeur 1o- eurS¡erue el ep errur?l EI uoc solreuergo ered opea¡-un F o -ew1d Á oro- sosorreJd sapraru sol E ouJol ua uore¡13 serrunuep se¡ ap er.led Euang
'('ss '{ Vg+, iI 1 'Zegl 'zaryzuo5) oge p ourold ap saprurnb
000'f orrcrple p reuotc.rodord ap E)qep ars? anb e¡oalgersa sorpenJ I ec¡euoul Ia arrue IEgIJp oluerse un 'selrJqeJ seJl septln sEI opetue^rl Blqeq'eqelrpul'1t/gl rpsep'lp:sa¡ea.r sorro;efeso¡ e oruo¡d ap uglsl.tord 11 o8rtc ns e eruel anb 'sorpen3 ap edrlag o8arg ap ugrurdo e¡ e.raersE 'zaprder I sotca¡d ua ,,ptprporuor spur er{rnur uoo sotlcrgla so1 uaa,ro-rd os serrrgpj ser{l¡psEI ap eres as anb ¡a uoc I erenS ap oruold eJlua ou el,, sa¡ene se¡ e sercerS 'sogeg I saqolrA 'sa.l
-EurI ua oruold ap selrrq?EJ saJl opeeJr uelqeq os 079I epseq 'etsrurrrdo.{nru ugrsr^ Eun ep eleJlas panb o¡ad 'Ilzü oprs 1ep soperpew elcrg oprrSol eJrqeq as ourold ue Erf,uerf,rJnsotne e'I
oJta0uoJ¿ o1101"¿ps¿a L ?t.t¿UUAI :¿lty.t p,t¿utu-rtI I / .A I U , qL\
oqorlv
[o XVII, pero quizá seas de plomo en Lina-r el que se saca de las'ecios y rapidez. Estaisión de plomo a losrricas. Un asiento denar al ejército 4.000
oro y plata- o al uti-:-. A esre grupo pro-Ja se trató de plomo:urio (1,87o/o) repre-explotación, el valorreso, probablementeles preciosos. El des-de Aracena, CazaJla,lgama para explotarplican el interés y la
,,2.5,ydesde el pun-no mas lnteresantes.
ión d.e su uerosímil uso
Capítulo 2: Antecedenus de la minería española contemporánea... 53
El cobre, como el estaño, tenía muy diversos usos, sobre todo en la fabricación de utensi-lios domésticos (calderos, objetos en peltre...), p.to también artesanales como calderas parajabón o para teñir y toberas de los barquines o fuelles. Aleados producían bronce, muy utiliza-do para fabricar cañones para buques, menos pesados que los hechos en hierro colado. En la
construcción naval se recurría al cobre para objetos que debían resistir la corrosión. El llamado
campanil estaba relacionado, como lo sugiere su nombre, con la manufactura de campanas.,El hierro era el metal de uso más frecuente tanto en las casas y eI ajuar doméstico, como en
los sectores artesanal, agrícola, minero, naval y militar. La demanda de mazos, picos, almáde-
nas, barras, peroles, trébedes, trasfuegos, cuchillos, tijeras, cerraduras, herrajes... y obviamen-
te diferentes tipos de clavos dependía del número de habitantes y de sus ingresos. Pero en el
menaje casero, la competencia del cobre, del estaño y sobre todo del barro podían alterar sus-
tancialmente su consumo. Y no necesariamente favoreciendo la compra de objetos en metal.
El refrán "Hidalgo pobre, jarro de plata y olla de cobre" alude, según la interpretación de Sebas-tián de Covarrubias en 161 1 , a que "los jarros y las ollas de tierra se quiebran muy de ordina-
rio y echan la cuenta que les son de más gasto"4, Io que nos indica un nexo entre nivel de ren-
ta elevado y consumo de alfarcría pintada y de objetos en vidrio, no de batería y utensilios
caseros en metal. La abundancia de piezas en barro decoradas y copas de cristal en la pinturabarroca española también sugiere una preferencia por la cerámica y el vidrio en ciertos usos
domésticos cuando el nivel de renta era alto.La agricultura constituyó sin duda otro sector demandante de muchos productos siderúr-
gicos, como rejas de arado, azadas, picos... así como los medios de transporte merced al con-
sumo de las llantas de las ruedas de los carros, los frenos, bocados y estribos de las monturas.
La demanda de la construcción, sobre todo urbana y palaciega, tuvo que tener importancia, en
especial en el siglo XVI, época de crecimiento de las ciudades castellanas (S. Piquero, 1991: 189)
tanto por el empleo de clavos, verjas, cancelas, cerraduras y bisagras, como por el rápido des-
gaste de las herramientas en hierro de los canteros. Pero, sin duda, el gran demandante de obje-
tos en hierro estandarizados fue la flota, tanto mercantil como militar. La parcial mecanización
de la manufactura de clavos gracias a las varillas obtenidas con las fanderías en Lieja estuvo muy
vinculada al consumo de puntas por parte de la flota holandesa. Pero los navíos además reque-
rían anclas, cadenas, pernos, etc., y en el caso de los buques de guerra, y a veces en épocas con-
flictivas o de piratería los mercantes también, cañones, aunque sobre todo en bronce, más mane-jables que los pesados en hierro colado, éstos destinados iobre todo a fortificaciones fijas en
tierra. Pero Ia pelotería solía ser en hierro colado. Nuestra fuente no recoge los principales yaci-
mientos siderúrgicos, ubicados enYizcaya, en la zona de Somorrostro, bien porque se llevasen
explotando en régimen comunal desde hacía siglos bien por estar sujetos a unas normas espe-
cíficas (Uriarte, 1994: 57). De las denuncias y registros de minas de hierro, veintiocho se refie-
ren sólo a ese producto y siete a él más otros metales (oro, plata, plomo). Cronológicamente,
de las veintiocho, una se fecha en 1526 (Cuenca), otra en 1527 (hieno, aceto y raya, por eI
Monasterio de Guadalupe en Extremadura) y una tercera en 1673 (Beratón en Soria). El res-
to, veinticinco, temporalmente se sitúan entre I5B3 y 1633 y en zonas que ya se conocían como
ftrricas o posteriormente acogerán explotaciones mineras de gran importancia (Orbego en Soria,
Ponferrada, Molina de Aragón, Lena en Asturias...). Las calicatas efectuadas en este espacio
cronológico -1583-1633- tienen poco que ver con la coyrntura siderúrgica y más con Ia nece-
sidad de la monarquía de establecer fundiciones de cañones en hierro colado y pelotería y pres-
cindir de las importaciones (Alcalá-Zamora,1974:85-90 yFdez. de Pinedo, 19BB: 11-14).Y
hay que relacionarlas también con los registros de minas áe carbón de piedra. Éstot .o., m'.ty
Porcentaje
r,40
0,94
3,63
r , 1 7
t , t 7
49.24
al crecimientones o al usarse en
su uso en tejados,entregar 3.000de poner en elde pesca tam-
icar que se había¡lvo fino de anti-
es muy proba-
)l eP oPEuel"gE Ied ¡a ua saJolor sol3g 'yuar Jotras Ieno '¡eta8orr. ua8r¡o.uepunqe e¡ronbar
¡e f "'rtpunr ered
Fxal Jorcas IEleaturadulr EJEd ol'¡nze 'ar3etu¡e 'sac
) s3lBuesolrc sePEPsEI aP orsar Ig
'sa¡elaur sorto I o.r:arq ap eun ap f oüaII{ ep seuru oJ¡?nir ap ¿rlunuJp ;I + oJJerq T.saTetau so;ro I onlny:..,l,onaty1:wlo¡¡
o;:otq Ic/oo:rorg I€.e9o:rtrq Izg9oJJOn{ Irt9oJJstrl I66trorrJ[J z0€,9oJJsrq IB6'I
. ̂ orrorq I629üoqreJ€.69ru9qrEJI + orrDq 7BZ9OJJqz69r ' ^ o.lrorq ILZ9OJJEq069ruogrBJ,29OJJq689 ru9qreJIZ9oJJerr{e89l
orrarq I619u9grec609oJJf,¿ a OJJ)rrlL79T
orrarq I809oJJarrl9Zstz + orr¿tyg909
' a oJJ)rq>L> I
oJJJnl z,09I o:rarq7291upq"tp)0.1¿2!H?qJadu9q¿vJo.u2!Haqrai
a"ryad ap ugq"wr ap I otta1q a? taur?a a? s?xrunuae
9'Z orPEnJ
'elJntuef, elueInBIS EI aP soIcIuI a ¡4¡ o13rs IeP seurJ erlua sopEntrs sogE 'sEru zo^ Eufl'7,191 Á 60gI
'g691 ua uerpej as 'er3rntrAJ ua sopesrqn .'(. san 'at¡nze ep seurur rp sorlsr8er of-ulr sol aC 'sersalJ seualf ua so¡noyroadsa sol eP aUEd EqeuJJoJ 'saleqoc ep ErrrJoJ ua'anb l. ,(7gú66I'aueltfi) e¡rautur eyua e'{ecu.¡ua eqezrlnn as ero,r,19d el (IIAX opls 1e pernu epun8es EI uesouaur opuenr 'el anb Jepr^lo anb ler¡ ou o¡ad ,eqeurrrd epnp urs orcnpord atsa ap retrpu ol-cadsr ¡g
'e.ro,r19d JETIJqBJ e¡ed uenras eJappuJ ap uggJer 1a uoc orunf anb 'arrr¡es ap I errga;cpo erJnzt eP sEulur ap epanbs¡q EI slncul^ as sapueld op I uglr¡¡¡ op aruarpuedap ou errlaq errr-snpur eun reerr rod sozran3se sose V
'UtfZtI :Z86I (opeur¿ ap .zapC I oeq¡g) serrl?q sau-ozet tod oPor eJgos 'selutpulloJ stuoz I sepuEIC 'EruErurIV uo otrx? uoc sepeoqde seclSr¡raprsseuolcE^ouul sel e¡nsu¡uad e1 ua uereldope as enb ,oosnq anb.{ ¡ogedso ouedrul Iap or)r Jas p serel-Uur d solJeuolJury ap e¡rred anb oluelrulloru oqdure un ue ueJJeurue as so¡lsr8al solsa snb EJ-lPul sou 'euedsE rod socÉo¡ourel secuele sol uoJarpunJrp as anb EI apsep
"eJg 'sJpuEIC ue olrs
-;9fa ¡a ua opersa eJerqnq soile ap oun I sopeplD ueJenJ setuerrunuap sol ap sop enb ap oqraq
Ig'G,€, :y/.6I 'opauI¿ ap 'zap¿) sen8e.t; sel ua erpard ap uggrer ap osn Je arqos serf,uou ap ugrs-nJIP BI Jod ourot JSV'oPEIoc oJJOII{ ua sauouEr ap ugrccnJlsuor EI Ia ua Jerrqn ered opencapere8nl un p8nrro¿ uo o egedsE ua TEIIET{ rod ,11 odqag op opeural Iap sepug apsap ef ,e¡nbreuotu
el aP sozJenJSO sol uo) sEIr€uorJEIer enb ltq sEreurur sel?f, selsg 'uop un entJaJe e1 eno I reu-ldsE 1ap senb¡eu¡ Ia areJedtal Eun ue 'uggJer ep serrunuep ocur) ffil ug 'sopuelC ue sofleq€r apugrder feuldsE ¡ep spnbreru ¡e sop f efolA¿ ap sgnbreur Ia torcop un 'optrcuaf,rl un ,sauop oJl-enr uoJentreJa sEJ I 99 I Á gggt erlua oprpue¡duroc oporrad Ie uE 'ope^elJ etuau¡ltrurou? en3serlrril sauolccadso¡d selsa oqer e uez'e11 anb sauop o sopeprp ep orerulu IE
.(It9I lrOgt'06EI '688I) e8aq¡g ua oJlenr :oJJaII{ ep seuru ap serrunuep uezrleet as strlJej seproered rodanb r¡ ua evozelaluaruestca¡d sa elsg '(e8aq¡g ua eun 'ouele.r¿ ua sop) EuoS ep ercur,rord e1 uauorentls as sart soJlo so1'eluarrreultsJpuefr operoldxa'J€Jellep urs alsr'(oru Iep e,r,enue¡¡r¡)ellpes ua orlol (seouery) strrntsvua oun,solle oC 'BZ9I Áe6glenue o.rad,(ocurc) sosersr
qrtwquorz ollo"ups¿y tL 31t¿u1w :attp¿ p.tawl"t¿ 79
IIIIIp) y otro en Sevilla
Fos tres se srtuaron
|re la zona en la quepega (1589, 1590,ppecciones ferricasfas efectuaron cua-
lel Espinar, capitán
lmarqués del Espi-
llos esfuerzos de la
[r Ponugal un lugar
lcomo por la difu-
ledo, 1974: 32). EIp estado en el ejér-f España, nos indi-
lrncionarios y mili-
[a las innovaciones
lbre todo por razo-
I crear una lndus-minas de azufre opólvora. El aspec-
ya, cuando menos:ría (Uriane, 1994fiestas. De los cin,96,1609 y 1612.centuria.
Capitulo 2: Antecedentes de la rninería española contempord.nea... 55
El resto de las denuncias estuvieron muy directamente vinculadas a la demanda de activi-dades artesanales especlficas (piedras preciosas y sobre todo semipreciosas para joyeúa; barni-ces, almagre, azul, sin duda también parte del alcohol, para pinturas, esmaltes o vidriado, tan-rc paraimpermeabilizar, como para decorar la alfarerla), entre las que destacan las textiles.
El sector textil demandaba productos siderometalúrgicos en forma de tijeras para esquilar,para tundir... y algunos clavos en el telar. Pero la preparación, apresto y teñido de los pañosrequería abundantes productos químicos, como desengrasantes, tintes y mordientes, unos deorigen vegetal, otros mineral. Así, entre los productos buscados por los mineros y con destinoal sector textil, figuran el vitriolo, el alumbre o ajebe (principal mordiente que servía para fijarlos colores en el paño) junto con la caparrosa y la greda, esta utilizada como desengrasante enel abatanado de los paños mezclada con orina y agva caliente.
Ctadro 2.7Modientes y üntes de origen minerul
Almodóvar (Cd.RI.)
Bárcena (Burgos)
Vera (Granada)
Segura (Murcia)
Enguidanos (Cuenca)
Chiclana Qaén)
S. Ctodio (Lugo) Yeste (Murcia)
Guadalcanal (Sevilla)
fuo Tinto (Sevilla)
S.'Coloma (Palencia)
rierro y otros hetales.
a',,IEIrE3IPP?nDuagng erE¿)un EPEf, aP lenl) IsUoICnlIlsuI o)
l'wxllwz,u at aQ( eurpa¡l¡ ap ?turualurlJqnf,saP Iexe sEI oPeIguIEf,I sog€ sol uErs ue¡8 el oplqeP:l ognr{ ou IS
rlr l6L'8lIep ua f o/o90'7e
,Ia'9lLr-8091I-I9sl ug 'solqls
sogonbad otdecxoluaraJlP sol eP o^
seun .rauat oPnd
¡esued ertge1
'ocr¡p:3 ¡a op¿roqelr
Br{ as soJla uot ,L'¿g7'y ap se ojp¿n) a¡sa ua ¿luenJ ua sopruot sorlsr8ar ap oraunu Ia anb ¡ry .rqrrj ap a3aJel
so¡rsr3o: 8BZ'I so] ap oun orad .¡4 o¡3rs lep sop sol soprn]lxa ,ggZ.I e apuerJs? sonsr8a: ap ojéunu Ie :ppN
rcr)-09L60-009r!¿60LI-001c>669r-06tr€€.669r'069L9689I-08Er8'689r-089ZLI6L9I.OL9ILI6L9-019LIV69Sr-09tr17I699'09969699r-095r8I659-099Z6y9r'0v9r9Z619-0r9t)L68.9r-0€.trZ96e9-0e9I€.6Z9r-07.5rLI629-029II6IEI-OIII
LL679'029Z6OE I -OOE I
tananuaq aP o'NoxuaJzQspDunu¿P ¿F o N0tu2J2Q
soxuaray .tod sautu,t af) sanunua? ap so.t$t&a"t ap o.taiuy¡¡g'z orPen]
'(g'¿ orpenc asegl) u;uore elgeraprsuol eun epsroodg uos (6€9I e rolrelsod opopad Ie f I¡X o¡8rs 1ep petrul eJ3urrrd e1 ap o8re¡ o¡ p 'sandsap
I seruy 'soluelrslas Iep eluarpo soue sol ue ezue)Ie sol rsec anb alunda¡ oganbad un uor (oru
-erap I" gE ep ueleq ou '(IZ9I e 609I ep grnp EpueloH uor en8arl e1 anb rf ,peprpnser rod ou
$ elgl-Otg1 ap ugrodacxo EI uor 's?rrunuap se1 anb p ue .6e9I e 0gSI ap e,r enb Ie .opouod
oqdtue un leq anb se a¡al8ns sou '(1'¿ ern8g) eruanlole spur EurroJ ap gnnb orUgJS la f ,sorep
so1 ap orunfuoc 1a anb ol 'soluaraP soP sose aP sEüIc sEI souref,Uru8eru ou rS 'eellnseJ ep Eu-oJoc EI eP eIJauIuJ EI aP sPEJoP erodg e¡ uoJery 'souB eJuo sose eluaurcsrcerd sgw o 'sose etureAsoso enb JlnlruoJ sotu€)JageP 'eJOurLs uglccnpord EI ep uewnlo^ Ia opuarJouoosep .sorlsr8ar so1ua sorue¡elode sou rS 'soge a uo ue orrJat un ep eurrrua rcd ,o¡ogg p ¡LgI Á Wq rrtua ,olero-uoc ua sgru l' (6¿9y-09EI) soluof,ep sop ue eJluocuor es o/o9, un anb rf 'sel¡nruao ser¡due sopselse eP o8re¡ o1 e pn8rsap atuelwg EruJoJ ep ualnglrrsrp as srpr;rsr8ar srr)unuap 062'I rset sE-I
serrunuep ep oJaur1lu lep ugrcnlo e EI ap s? rrr e BJeunu e¡ntundoc E I .e.z
'G97-Z9I/:?002 'íoPOuI¿ ap 'zepg) elllrwJ eP euoroc e¡ ap e¡reged el oP sls-Irr el aP uorf,ezrPuryo¡d I solrlut sol uoc uarg oluErseq e{ecue 1¡g{ o13rs Iep oruecep opun8as
1ap rrrred r so¡tsr8a¡ sol ap otuorurcartrue orelr IE ' (L1g- Lg L til ,
Lg-596I ,u¡1rc1¡¡ u.n¿ I 76¡
e Zü 596I'1 'apue;e3) Eutllerser lllxet ugn)npord e1 ap oaSode ap ecodg el opentrs plrqerl
as sel{3al sPse e ouJotue'soluegEs anb o¡ Jod 'aluencole pllnseJ sog¡- 9€ ue uaJluecuoJ as selEJsEI aP %09 1a tsrc anb ol{rarl Ia (so¡8rs sop eJEd sBuarep sarr) eprcnper sa eJlsonrü e1 anbuny'9091 Á IL|I all:oe uoJ€nl)aJa as %88 Ie
'oqcorrerp <"Url ESe aC 'oun f erula¡r E uepuorf,se Irl-xal Jolf,3s P soPEIncuI^ sorcnpord ap sorlst8ar sole'7. orpenr Ie ua rBrreJdE apand es ouro]
oJtu,lquoJa oilo"u?tap lL 3t.t2u1w :aup¿ aDwl,t¿c)(
0
¿6160tst .olsL {osl
1!t ;I ¡
iil !i l, tl 1
ados al sector tex-rtre 1571y 1605.,asi el 60% de las.o a esas fechas see , I , 7 9 6 5 : I 7 2 a;istros a partir dellización de la cri-
r lo largo de estas9) y, más en con-s apoyáramos en:oncluir que esosinería de la coro-conjunto de los
te hay un ampliode 1610 -1619 ( yan de 50 al dece-scientos. Antes y1639, son épocas
e??ancxas
,88 registrosn ellos se ha
Capítulo 2: Anteced.entes d¿ la minería española c0ntemPorá'nea... 57
Cabría pensar que el período 156l-1570, en que se concentra un tercio largo d9 los registros,
pudo t.ner ,tnas caiacterliticas distintas al conjunto de los dos siglos. Un anrílisis del peso relati-
vo de los diferenres metales en 1561-1570 y su comparación con la totalidad, nos indica que,
excepro pequeños detalles, debido a que la muestra resulta más reducida, no hubo diferencias sen-
sibles. En [SeVSlO el49o/o de los registros se referían a oro (17,760/o) y a plata (31,03%). En
1508-1716, el49o/o (20,70 y 28,19 respectivamente). El plomo y el alcohol en el período corto
34,05o/oy en el latgo,2l,4ló/o. Esra seríá h única diferenciá relativamente significativa. En el cobre
el 13,79 y 14,060/o respectivamente.
?I
\--^.' r-\Y
1 560-69
Ftcunn 2.1. Evolución del número de denuncias por decenios.
Si no hubo un boom espectacular a la búsqueda de un determinado mineral, ¿a qué se habría
debido la gran subida en esos dos decenios?En los años cincuenta e inicios de los sesenta confluyeron una serie de factores que habrían
cambiado las expectativas sobre la minería peninsular. Entre ellos creo que hay que destacar
el descubrimiento de la mina de plomo argentífero de Guadalcanal, la innovación de Bartolo-
mé de Medina y lallegada de la ñoticia a España, la difusión de la obra de Georgius Agrícola
De re metallica, la mupanterior presencia de mineros alemanes en España y el cambio en el mar-
co institucional con las reformasde las leyes de minas de 1559 y 1563. Sopesar la influencia pun-
tual de cada uno de estos factores resulta difícil.
Para Eugenio Larruga, (1795, Memorias, CLIX: 63) "la mina rica de plata de la villa de
Guadalcanal ', en el parrido de Llerena, se habría descubierto por el año de 1551. A esta se aña-
r 5 0 0 - 1 s 1 0 - 1 5 2 G r s 3 0 - l s 4 0 - 1 5 5 0 .09 r9 29 t9 49 59
1 5 7 0 - 1 5 8 0 - 1 s 9 0 - l 6 0 0 " 1 6 ' , 1 0 - 1 6 2 0 - ' , l 6 3 0 - 1 6 4 0 - 1 6 5 0 - 1 6 6 0 ' 1 6 7 0 ' 1 6 8 0 - 1 6 9 0 ' 1 7 0 0 -
79 89 99 09 19 29 39 49 59 69 79 89 99 09
prrgurS€¡¿ IEeullx'lF
(o! oJQII
)od uo3 ouedal
urJou E1SA '((oI3
'ugqrer Ie
'Egal
,sepelgod Jeuel,,
uJ I í, 9'+7 ettüo)
saseu slas sol vroJ eP zur 005'€) ((u E'€8) sBre^)unuep e1 rod rP
rJ)sul Psa SEIP E]
atue f FeJ oueg
>saq'(ur 007'I)roparJap ua en8al
Ie oPuaIfEJslles,,s 'o8uapar eronj
reu I sorlpgr¡s so1
sepesed soPe)Jeu
I IEOJ OIUOUJIJIeo
usll sE] or{cenoJo
sarepctrrcd sol Iuof, s?l uauall anD'BuJelsIs elsg
ns ue¡tdnco f ue¡
Er eD otJf qo ouol
,,át", ""jp"a
t"uroldxa '¡eraua8 ua'elueruEIAgO'€I 'rP'o'9 orgll
b e¡calqersa anb
sol aP EIruasIT uls
l"InuE 'ErIl39Jo 3l
e3 ap opedsrgorsnlfxa ,{ ugrceztr
EI oP ozrelu aP 8eP Pelru "l
P Eqel
uoP'aruBPls[ oPnF sol rrgos
-rou EI 9fi1t 699l ElsEH 'oreulur otualurlf,eJr Ie aJgos puorf,nlnsur of,J"ur Ia elual anb ¿rcuel-¡odrur BI eP solual3suoc lnru uEJe epuorf,Er{ ap soutuorrunJ sol 1¡¡ o¡8ls Iap soperpaur E E
oa¡re¡s¡8a¡ orrtru lg 'r'Z
'e9gI Á 6gq ap seuru ap salo¡ se1 e pecraur oqeo e ope all .sor-euru sol I ¡eer epuatcel{ EI eJlua solrlJoueg so¡ ep orredar f ugrcero¡dxe ,prcunuap e1 eqein8a;anb ¡euorcnrnsur of,reur Iap orgtuer Ia anJ erruet¡odu¡r uer8 ap JolreJ un .Epnp urs .oJed
.Ot9 ttt .l I Btt Á L¡1¡,lg,O9,6r:I
.1 ,I€gI ,za¡,ezuoA) ,pg"dsg ap orluap sappntc.( sot
-uepl _sns rea¡drua uo.rat.rrJard Isolod Iap f ectlg,recuenH ep 'snelerez ¿p Á orenleuenS ap ueqe8
-e¡ anb^sora8_ns sorJe^ anb ¡erou ep opuers,, izeyzuoÍ) spruoJ el ope¡eges Elqer{ ol rry .ornrnJ le
ue prm8eso:d as I soge solse ¡od oltlur es úuerpur erreurur e1 ua sopeur8r.ro sa¡etrdeo ep u?rqrurlI epecS¡enc soueur o sptu eJgo ap oueru ap ErruereJsueJl EtsE ',,opetrsl,r I otsl,r se¡raneq I sero-qrtord se¡anbe ep seuruJ sel ap eruat anb elcllou e1 rod, 'BzopuatrAJ ap oruotuv uop .r,rre¿
1ep oB-en1 I rgedsg E^enN ep laun oPrs Elqeq anb lap ofiq 'ezopual¡1 ep ocsrcutr{ uop E oper,rua ergeLllar ¡a puec¡epenD ap seuru¡ sesa ¡euorccadsur erc¿ '(gt7g :066 I 'III 'r ,zuequa¡ay)
,erreu e1 apselernt€u so¡ anb s,eru [seutur se¡] se¡e e.led saleg f sosogcaao.rd
{nu,, uera 'seurru se¡to e¡ed se¡-Ellc sol aP rotf,ej un ¡od sopjErl sol uoc otsr EJgeq es ouror 'anb ap EqBpnp ou la.r 1a f opeuSeI ugrcrpury I en8esap 'sauorre Erxe ue sor¡adxa 'sa¡afntu sns uo3 seueurep 002 ap eplzrt eI gSSlerrEg elPro ewryZ eP ulrsn¿V sEurur sEI ep ropErtsrurwpe Ig
's?^nreJlxe sErruJ?r sa¡ofaru uorerp-urylP as solle uo¡ I sauBtueP soJauluJ ap epeSa¡ e anu eun e re3n1 orp atuaulolqegord oruarur-rPual ns rE els ua euoJoc EI ap saJatur 1a I puec¡epenD ap srurur sEI ep oluorurrJqnrsep IE _ '(jzs tI66I,orragr¿ z( o1-oreIAI) EPEIegas oPIs elgeq el 11 adrlag ep ecodg ua (.sorurruerf,,, saJaqes sollo ue oJOIr Iep Erf,ues-ard e1 '6seJeulur sauorcrloldxa se1 rod uoJESOJalur as sauernb JJlue sof,nsprsalJa ap erJuepunq¿E II€leJ el 'souozeJ seJlo uot orunf 'anbqdxe zet IEt ullel ue olrJcsa EJar^ntsa anb ap o u1\rJulrr ul -sruuztsr surl0 uor Olunl .anDrlctx¿ zeN IEl ullel ue ollJcsa EJal^ntsa enD ap oqleq Ia '(E91 urou '9ge Á yIe :6961(l 'zaruoD zaqcupg) ugrrrpa ns ep oge Ie rsef, .elorrr8y ap orqrl 1a orqrl Iau?Igtu"l e3a¡ oued IoP tulalsls lap rytdsg ue seJtlr serrnou ueuarl as anb ua ser{oeJ sel Jod
'9L91 1, IgEI snua sErfunurp ep ugrf,praJrTord e1 apsauotcectldxe sel aP Eun aJlue retsa uapand 'rlalefugap seleJauru ered epencap¿ lnu (Ecruf,?t
rsa.rectlde ¡od soluetul soT 'sollx? uoJal^nt ou ogeJ E sope e[ solesua sol (oprcouoc se ouJoJ'(.lEuerlEPEnD ap seulru sEI ua olle ap eqanrd EI sraltq '('acerl as elle ua orugf, ap sreq soJeur-ro3ut 'egedsfl E anN el ue ollaP resn E opezuaruor er{ es olsa ¡od anb I 'uesn as enb sotuau¡n¡l-sul,soJlo sol uoc anb elsoc souoru e ereld el sollap ¡rces -Á soFteul sol JertrJaurq rrcd osoqca,r.-o¡d lnru sa anSoze 1a anb uaorp sand ¡,,- IEuerlEpEnD ua ugrrezrTrln ns egezruoca¡d f ,oired
Iep purelsrs Iap serrnou sEJEIf, EJuel ef ec;euoru p Lggl e¡ed souaru W .GS :
9¿6 1 .uorllure¡1)
sa¡l ¡od uo;eor¡dnlnru as sogrrre sol oLEI-Ig9lv \ggI-IEEI oruecap Iac .errur?r E^anu EI
aP EIrEqta e1 e otoadsor srpnp secod glap rgedsE E Euerrreure ereld ap sepr8e¡ sel rp eprgns rel-ncercads,a e-I' tG99I A ySSl a.nuo) eure8prue el ap Euratsrs Iap rope ouul Ia ua auer uoc a1 anborSo¡r,rud un aqrrar Eurpett{ ep ?ruolotJeg
.euedsE E^anN ua ,sendsap oco¿ .(6gE :066I ,III
2uegueilo) '¡1) ere¡d ap ,,atred Elxes o rlurnb e¡ ourold ep ¡eturnb un ap Eres as anb orrJ uelsa I ¡eraru eP sesopunqe uaps anbrod otuou¡8ne serü ua EIp eW) ue ,, seurlu seqcrp enb EJrpur as<9991
Ir.rqe 0€ '.PlloPelle¡ ua ePerpü lar 1ap Elrer eun uE 'r¡odorraru EI e opepelserr ueJqeg
es souErlJerüe sosorce,rd saFtaur so1 Jod sepetl3sns se¡lletcadxa sel anb ¡esued ?)Jerl sal ErrDoue¡ ecoda EI ap souBllarsEf, soqrnu¡ e anb elqego.rd sg 'rzoreleg Ae¡ezeA 'euacpJv ap sEI uelJrp
0rlu,tquora ol/o.l.tptaq L pl"L7uxw :ailu¿ ttautx¿¿ gE
i
sres,( ugtcotpsunfdec'en3oze 'ete1d
e'Peq Lzqf ePsopedsrgo 'selrul^
cnpord sosJe^IPe soPetJeu aP
) 1 uenf aP eAI]Eru
nlt i ir l l
llnos de la época la;os americanos sed, 30 abril 1556,osas de metal y es. (H. Kellenbenz,:ibe un privilegioi)7 . La especracu-to a la eficacia deplicaron por rresrs del sistema del)gue es muy pro-:on los otros ins-va España, infor-[e Guadalcanal".rs por aplicar esalas explicaciones
rio llega también356, nota 163).
zones, la relativaninerase. La pre-señalada (Maro-
r elevar su rendi-rn ellos se difun-
pedía haciay fundición y
de los Fúca-ue los naturales
el reyEspaña y lue-relas Provln-cualificada y
proseguirá enque lle-
sus talen-. I I : 6 1 6 ) .stitucional quereal y los mine-
de la impor-9 rigió la nor-
Capítulo 2: Antecedentes de la minería esPañzla conteruporánea... 59
satisfaciend"o el daño a los dueñás". Queáabán exceptuadas las minas de Guadalcanal y una
mariva de Juan I (Briviesca, 1387), por la que las concesiones eran en la práctica el resultado
d. merc.d., a caballeros, nobles o .ótt.r"trót de alto rango, concesiones que afectaban a muy
diversos productos y a grandes demarcaciones territoriales, como términos municipales, pro'
vincias, obi.p"dor einJrrso arzobispados. Así una R. C. fechada en Burgos.el.l3 de diciembre
de l52l hacia merced de luro al secretario real don Francisco de los Cobos de las minas de oro,
plata, azogue, caparrosa, Li.t.o, plomo y otros metales de la ciudad de Cartagena, su término'
jurisdiccián y ..i, legu", alrededor. El mismo Cobos resultaba beneficiado con otra merced real'
,obr. lo5 "]n-br.r
Jel obispado de Cartagena (R. C. de 24 de diciembre de 1534) y el duque
de Escalante, don Diego LZprzPacheco, por R. C. de7 de marzo de 1539 con una que abar-
cabaala mitad d. los iu*bres del obispaio de Cartagena y del término de Lorca. La R. C. de
8 de marzo de 1536 concedía a Pedro Ortuño Ibáñez de Aguirre, del Consejo de S. M., auto-
rizacióny exclusividad para explotar los mineros de_oro, platay otros cualesquiera metales del
obispado de Calahorra. Er, .oáo, los casos debían de dai al rey la décima. Estas mercedes, en
la piáctica, anulaban la ley II que permitía "a cada uno buscar en sus heredades y las de_otros
sin licencia de los dueñor, no f"ri.ñdo perjuyzío, mineras" y modificaba el peso de los tributos
que establecía que el rey se llevaría dos t.r..t"s partes dr lo 1n9oryrado (Recopilación 11640l,
libro 6.", tit. 1i, ley IIi 133 y 134 y González, 1832, r..I: 225, 240 y 24f entre otras varias).
Obviamente, Ios beneficiados con las mercedes reales no llevaban a cabo prospecciones, ni
en general, explotaban minas, perc gozaban de un derecho preferente frente a terceros, a los
que"podían."igi. u.r porcentaje de lá hallado en el caso.quetrubiesen descubierto en el terri-
á.io objeto d.la -.r..d alguna mina y optaran por explotarla. O sencillamente' los desplaza'
ran y ocuparan su lugar unavez constatada la riqueza de la.mina...'Ert. ,irt.-", se ñconocí a en 1559 , desincentivaba el desarrollo de la minería ya que "los
que denen las concesiones denen poca diligencia en descubrir, beneficiar f Ja!9r1 dichas minas"
y los pa.ti",rlares que .to goraba.t de h mérced, aunque tuvieran noticia de "mineras ricas_y de
pro.rá.ho las tienen encu"bi.rtas". La nueva normativa de 10 de enero de 1559 incorporaba al
patrimonio real todas las minas, ya estuvieran en realengo-,.señorío o abadengo, a pesar de las
-.r..d., pasadas, aunque dejaba un portillo abierto a posibles ¡eclamaciones. A partir de 1559
los súbditás y natur"l., podían buscar y explotar minas en cualquier jurisdicción y.terreno, asl
fuera realengo, señorial-, abadengo, .on..jil, público, baldfo.o privado. En este último caso
legua en derredor (5.lOO m), las de Cazalla, Aracena y Galaroca y un cuarto de legua en torno
(1:400 m). Descubierras las minas y hallado metal, tenían que serregistradas ante.el escri'
ü"no .."1 y ante la justicia de la jurisdicción en que se hallaran enclavadas y antes de s^esen-
ta días .r" inr..ip.íón tenía q,r. hg,tr"r en el regiitro general de minas. La extensión afecta-
da por la d.nu.r.i", dentro de la cual ningtln otro podía entrometerse, era un terreno de 100
vaás (83,5 m) de largo por 50 (c.41,74 m) de ancho, es decir, una reducida superficie de
3.500 mz de forma ,á".tgrll"t, ya que se suponía que la mina seguiría una veta de mineral'
A los seis meses del registio el áenunciante tenía que haber profundizado hasta 3 estados
(em¡e 4,5 y 5 m) y l"eg:o continuar con su aprovechamiento' lo que los textos de época llaman':t.r.,
pobi"d"r; i", -In"r. Las autoridades no debían poner obstáculos a la obtención de la
leña, eicarbón, los animales o las herramientas que fueran necesarias "pagando_su justo pre-
cio". Esra normariva también modificaba el reparto de los beneficios establecido por Juan I,
reparro con pocos incentivos y que se volverá a cambiar con rapidez ,(Recopilac.ién_[-1^640] '
liÉro 6", tit. ^XIII,
Iey 4", ff . 134 i 136r" . Doña Juana, Valladolid, 10 de enero de 1559)' La
Real Pragmática de Madrid de 18 de marzo de 1563 alteró sustancialmente el peso de los tri-
)1rur9J1 sol rln8es
)luaurEIJelIJOleur
suad aqe] 'alqBq
)luaurclse ns sour,soruBruol IS
L
.I-5))IN
aIIIrg,lg
(6'Z orPerc asE?^)
IereueS ue (solruo
ruJJa un sy{u '.saJel
seJElIIIlu 'segoP I'ugreq) ePelnl:.tEz'sepor seuosrad aP
oPEf,uIsEIe souaq
eJa5o sou as (seJ
soperqdur sonPl^'sauolfeuJllse sElsa
un o IEnPIAIPUIr apend aS 'sonPl^
oq E9l) "uos sart e uegect¡drul'sohq a oun ¿nb
ad ser¡Brr o Bun uoJ
nuaP ggz'I sel eo
rw's'z
.seuruJ ap praua8 ortsr8ar ¡au¡ alunde ns eP s?^ert E sauolseJuof, sel ep loJluoc opnlu un Jeralqprsa ouor JsV
.orauru¡ oJloesJlnlrsluul e¡pod ou_anb el ua ePlParuoc atcgradns e¡ reqdrue I sepcsg s¿rcue8rxa sEI Jrnurur-sIP 'selBrau¡u ap sodtr selueJaJlp sol artua rezrleurr:Erel3 erruepuel Eun IIAX Iep sordrcur¡d I¡,¡4 o13rs IaP soPErPauJ a.rrua gm8ts ElJeurur el p arurraJeJ p8al ezrrreurou el ep uorcnlo^e E-J
'(rpeuer3 op ourar 'erarqeJ ap rr3n1 Ie ue eurru ,6291 ep argntro ep TI ep,.).¿.,027.,(6IZ'8IT:I
'1 'Z€8I 'za1yuo1) sezu"uepJo sel ueJ"putur anb o1 'atuelope ua f o.treecurnb ¡e .sar
-uatn8ls zaIP sol ua :oun <atula^ ep ue¡rc?ed soue soJerurJd o¡ulc so-J 'sepraru so¡lo I oro ;ere1deP sePeu^oPuege sen8nue lntu seutru sop ep ugrceroldxa ua ersand €l ue orpa)ns )se soueur IV'eso¡aua8 sEuJ EurJoJ ap gcrtde es L09I ap E^Ileurrou EI sauorsero setrarr ue anb res af,aJed
'(tzZgt ap oleru ap EI 'pupeW'L6Á96,9L,gL,yL:II.t.Z€gI .zepzuo3) anSoze
JErJ_oqe I relou ap sorua8ut rred o,r.tsnlcxe osn op so€a1r,urd seluault¡ad sol eJJalouor Áeueg-o;dt ugrgtuer etunf e1 'soulal sol ap ((soJepeqoa I setuouJsap 'seleuoJse 'seunu rarnbpnc apuglrErlslulu¡pe I roqel 'orc1¡auag
Ie Ererol anb o1 opot,, relnf,efa l;euapro fauodslp fecouorfal Íeterr ered seurl¡¡ ap erunfeun oerr es sare rlo oleq 'oporu orto ap ras e;pod ou ouroJ
'(09 ^ 6s'8s :II't 'ZegI 'zalpzuo1) olulnb 1ap ueresed ou anb Iet uor 'sor{raJep sns Jerueurenur er.rpod,(ar 1a soue elule^ soPIJJnJsu"¡r f er¡ed Eu¡rJep el 'oruefap
1a opesed,{ o,Leacurnb un uerr-e8ed saptrocsa I saluou¡sep sol 'ele¡d I oJo ep $urrü sel 'soge zarp rod 'salerslJ seroua8rxa se1alueullElru¿tsns uoralnpa¡ as f 't8lI aP olsoge ep 8Z ep srurul ap sezueuapJo sel atururlErf-red uo.rarpuadsns as L09l )p'J 'U Eun ¡od 'anb Erspq 'orueJep un Jurnrsue¡r enb o^nJ
'$e f OE \l't'Ztgl ,zepzuoD) o,reoournb un ?ru
-odo¡dl oso,re¡8 operseruep €getlnsal '¡eturnb rod ereld ap soueur o orpau¡ f oc¡eu¡ utqeuor:-¡odo¡d_onb sEI frrep sa 'sargod seurur sel ap oser 1e ua atred eu¡rf,ep eun ¡e8ed anb ec¡euou¡p e¡uodxe irapax solre] uop 'oura¡
Iap seurtu ap prauaS JopeJlsru[upe p 969I uE .E]Jourur
t1 ered e)lll:c ugrtentls €un gJeprsuoc as ecodg e¡ ua enb ol 9tr^a ou orqurel oturrgl elsg'(¡zygt ap otso?e ap 77 'ozueroT ues ua II adle{ '"^gZI 'j ,XI lel ,II¡X .rlt ,o.p orlrf ,lOrgtl ugnaydotay) ere^ EI ap
ugr))aJrp 11 opuanSrs <or{fup ap 69 ;od o3;e1 ap sEre 0gI :eperldue Jes e er^lo^ ¡eroldxa reuoz el aP uglsualxo e'I 'o etulert un eJgor ¡e ua f oleeturr^ un ouro¡d IO ur .Erurlrp E[ Erre^allas ,{er 1a
<loqoole IaP os"r Ia uÍ 'oJaulul
¡a ered ouro¡d ¡e opuepenb f selsoc sel Jeluorsep ursoPoJ 'erJeuour
¡a ered er¡as osorca¡d lereru IeP pelltu EI sres ap euJrrua ¡od I eued e]Jenr EI <sof-Jeur sles Elsel{ oJl?nf, op iorulnb un 'oJlenc e orpeu f oc¡eu¡ aq lar p aeld e1 ap arrcd
"uID?p eun uer¡e8ed soueur " Gl gil prulnb lod 13 grzE) ele{ ep orpatu I oc¡ru¡ un ue.ralp ere¡d
-oruold ap saleJauru sol rS 'orqruer oJto uetuaul¡edxe seurry ap sezueuepJo sEI tBEi uE
.rouJolue ns ua en8ua1 eun E Elpuolxa os ,lEuEJIBpenD ap oseJ Ie uo Elp-ecns el oruor (euarp ry Á ezorclea .elleze) ue seurur re ef,xe ep ugrrrqrqo ñ ey A ,
99 rcd g7¡ vSEJE^ 0E rod gg1 ap resed p eqrrTdwr es'65SI e olcadse¡ uor 'uorseruol el ep ercgradns ET .o-ealula un aJgoJ 1e ua I o,reecutnb un 'ere1d e¡od uoc <Jroap sa 'sarqod souold sol ua :o elJoun errsuog? es (eua¡e8) Ioqocp IOp oser Ie uE 'oreurlu
1a e.red e¡repanb opruatgo oruold 1E .ser
-sof, Jsruof,sap urs soses sol sopor ug dar Ia ered sIJOs pElrur EI ,oro lep osEs Ia ug .ereld 11 ap
P"llru "l e_gprt ered so)r?tu slas eP f olc¡at un prumb .rod ereld ep sras e sorJeur sarr eg 'ere1d
e1 ap er.red elJtnr Eun 'sorJeur seJl Ets¿I{ I ¡aumb ¡od oc¡eu¡ un ap srrü Brarp rS 'rre1d e1 ap o.t-Erro un ,bt ¡e eue?ed as ereld-oruold ueqerue¡ anb o1 ep (q 97) prumb rod errld ap (3 0€Z)of,Jeu¡ un eP soueur Eruetgo as Is 'solueruour sose ua of,srJ ¡ap f erraurw e1 ap orrrralqo pdrc-ut.rd 'sora3¡tua8re soruold sol ap osef, Ia uE 'seunu sEI ep ugrf,etoldxa e1 arqos uer€f,er anb sotnq
oJlu¿0u0J¿ 0110"t.t3tap lL ?t,¿¿u1til :aL.¿pl StautLt-r II I ' 'vV ', q . U09
rgentíferos, prin-ros de un marco6d, rcy un ocra-:uarta parte de laa arriba la mitadn descontar cos-t) se abonaría unobre un veintea-100 por 50 varasa, como ya suce-
erales de plomo-os pagarían unao hasta seis mar-lmonarca. Todorlcohol, el rey se,nsión de la zonardo la direcciónen San Lorenzo,
,n crítica para Iaedler, exponía allas que propor-
;ravoso y propo-
spendieron par-;ustancialmenteescoriales paga-inte años el rey.lez, 1832, t. II:
s para trata! ver,adminismación
r también apro-moler y ahorrar;24).a más generosa.rbandonadas delos diez siguien-2, t. I: 218,219,Granada).los del siglo Xt'tr minerales, dis-día inmiscluirsede su apunte en
Capítulo 2: Antecedentes dz la minería española contemPorá'nea... 6 1
2.5. Mineros-emPresarios
De las 1.288 denuncias, en 15 casos, incluido el de un monasterio, no se aclara si las efectua-
ron una o varias personas. En el resto se precisa si fue un individuo o varios. Consideramos
qlJe uno e hijos, ino y parientes, uno ! clmpdñeros, uno ! const,rtes, uno ! o-tros, como mínimo
implicaban á ,r.r p.irónas. De las 12-88 denuncias, el 600/o se llevaron a cabo Por una sola. per-
soia (765 hombres y 9 mujeres) y un 20o/o por dos. El resto, otro 20Vo, Por _tres o más indi-
viduos. Se puede inferir que la búsqueda yhallazgo de_minas fue sobre todo una aventura
individual á un hecho foriuito y qué el buscador Íató de reservarse el hallazgo para sí. .Conesras esrimaciones, hallamos un toial aproximado de poco más de 2.000 denunciantes o indi-
viduos implicados en los registro. (,rno. 2.06I enun cTlculo más bien bajo). De esos dos milla-
res, se no; ofrece el esrameáto o l" profesión de alguno de los denunciantes en 417 casos. Los
hemos clasificado en diversos grupts: burocracia real y municipal (consejeros reales, criados
de oersonas reales, oidoret d..ñ".t.ill.rías, contadores de hacienda, secretarios reales....), noble-
, iítul^d^(barón, marqués, conde...), órdenes militares (caballeros, comendadores...), dones
y doñas, militares (alcaiáes de fortalezas, capitanes, soldados...), eclesiásticos (seculares y regu-
iar.r, má, un ermitaño), títulos universitaiios (bachiller, licenciado, doctor) y profesiones y
oficios, en general manuales, específicos (armero, boticario, calderero, cantero, escribano...)
(véase cuadro 2.9).
Cuadro 2.9Estatus o profesión de 4I7 denunciantes de minas
Estatus/profesión Número Porcentaje
Burocracia real 37 B,B7
Burocracia local 6 t ,44
Titulados 24 5,76
Órdenes miiitares 1 0 2,40
Dones/doñas r ) z 36,45
Militares 54 12,95
Titulados universitarios 4> t0,79
CIero reqular 9 2 ,16
Clero secular 33 7,91
Ermitaño I 0,24
Profesiones/oficios 46 1 1 ,03
TOTAL 4 1 7 100
Si tomamos, cifra redonda, como total de denunciantes 2.000, estos 417 de los que sabe-
mos su estamento o trabajo representan en torno al 2lo/o. Un porcentaje !alo, Pero no dlde-
ñable. Cabe pensar q,r. .i resr; fueron en gran medida individuos sin cualificación específica'
mayoritarianiente carnpesinos, aunque con la suficiente capacidad y conocimientos como para
,.g,rit lor trámites y pig t las cosras requeridos por el registro de la mina.
's rP orau¡E
orereld
JoPErreq
roPell¿1ue-
-"f*t-
orrrePpf-------
(r) odnr)
OJEIUIdJ¿J
oJSfU?f
ugeqlB -'----(q) o4nt)
--- -*t*
IPunj olseeur
¡oPEfsng----'_
(o) odnr)
e EgP all as EUIUI el
un ua uEqsJluocua
el oruoo sourlrll'op"uf 'oueln¡rc
'solsand ueuJJoJun 'epar8 eqec
Io SoPlrrnr foP
uapand es Á (o¡oV¿p) ,LgI Á gSgl arlua ugrierluaruor elgerou eun uor o;od ,6g9y Á ¿ggtallua ueltls as aluerueclSglouoJr '(sauorouaur
97) seuorsaSord I sorc¡¡o sol B otuenr uArauodns uelap sotuaru
-Btse soIIrIp e soplnqlJle soIrEITIqou sorclnl¡ad so¡ anb ol op Eruroua ¡od lnu¡ I ¡e¡odso E)Jer{ oc-gprSourap afetueo¡od ns anb ol ap Eurrua rod opedrcnred ue¡rqeg ezalqou l;e¡n8ar oJalr :oJ-euru¡ orco8eu lap ua8rctu F uoJalcoueu¡¡ad ou soper8a¡rrrrrd solueurctso sol 'osef opor ufl
'Eleld JeJluof,ua ap se,rrteloadxa stpepunj ue)tsrxeenb se1 ue seuoz ua u?gertuorua Js sepuaru¡of,ua sns anb e glqop as .eJelugrlv ap uepJo el epsopot 'soropepuaruoc o sorelpgel ep elcuaserd ey e ercadser anb o1 rod .(IEII ua opalol ap op-edsrgozrc
1a ua eun) ouerpaurzo¡ ep uenf o (ZZtl ue epeuerD ua eun) osenS.ry op osuolv sel-uanc rP olrElrJres Ia ery (EPnP urs 'anb 'o¡en8ry ap osuolv o '(euoldue¿ ua eJe]Jol e1 I eperroS-uod ua erro 'u9ef ue Eun 'sePef,reru saJl soueuJ p) euqoyrq ap zanbzre¡uenf ouoc sorJelerJessoJlo ? u?rqruEt ored '¡etcadsa ue soqo] sol ep oosrruerg :;operedura IOp ourolue Iep sonphrpurE aluorualqlsuatso uorelreJo^EJ h solJEJ oleq 'saperraru sE"I '6EEI ap lal e¡ e JorJatue sauorsrr-uor ep erualsrs p oplqep opere8exa grse osad ns aluetualg"qord ,e¡n8¡eprq el E oluenr ug
'algBJo^eJ ugrf,rsoo eun ue opElolo? uErrqer{ sel sEl-soPotu EP€u 'sece^ e 'l sarr¡n8a; sEluer 'osEr u¡8¡e ua esor8rler ugrrEf,o^ ap elpJ 'arqr1 odruart'serlur?t sauolroN 'e¡oc¡r8y ep orxel Ie Japemt oprrrturad ElJqeq sel u'tel 1ap olldrue soueru osprü oluelurlfouof ns 'EgrBg osuolv ¿P szlruaw sol a? axtv p Eruournsel ol ou¡of e]Jaurur erqossoJqII ap uglrrepeJ EI ua Jelnras oJap Iop er¡uasa¡d ?l uoi elecua aferuac¡od atsg 'serrunuap
selep o/o99<I Ie og"J3 g^all socggr8ourap so^rlraJe solep o/of79'0le ouJol ue opurluaserderenb te¡noes oJalJ Ie ¡elcadsa ue I'sorar¡cad so1 ap olueurelse ¡a anb esuarur spu o8p EruJoJ opseulru ep o¡lsr8o¡ ¡e ue opedtcrl¡ed 'seu. satuaJeJrp.rod 'ue¡qeq soper8a¡,r.rrd sodn¡8 sop so-I
'0I'Z oJPEnl ¡a ua aSooer es selcunueP se¡rlcedse¡ sns ap aletuacrod ¡a I sotuaruetso sa¡lso¡ ep ocgprSoruap osad Io arlue ugrc¿ler el serlunuep uelrraJa anb sonpnrpq 000.2 ap awq EIergos 'rrso)rrsprsrlre ap o/oT un rser I so8pprq ep %0I un ,so;aqoad Jp %gg un E ouJot uo E)qEq6y o13rs Iop seuu e anb sourel¡eq'seluour I se¡rer3 990'IrZ so¡ I sorelnres Lg1.ee sol etuenrue sourauel Á rcq 3P osuar 1ap sorerlcad I solgou source^ sol oJlenr ;od sourclldrlpru rS
00r00I
0E'061',0orrlJ
s9'rh9'0re]nJas oJ'IJ
0I/'9192',01s¿zelqoN
qV',rBI €.88soreqrrd
s?tJunua? atwuatto¿sounaa afr1uat"to¿solual,uplsq
I69 I a? osuar p uySas ontytSoruap a{atuaaod ns I soxuautalsa .tod suuunua(J0I'z orPBnJ
'soursedu¡eo e¡to'(eut el etuau¡uJJs-orel 'soJal{tad ue¡ns _-679'I- 000'Z sol elser{ olseJ Ig
'oper8e¡r,r,r.rd otuouretse oJlo Iep sorrlsprs-¿Pe eII uaPEgE as anb so¡ e '8Ze saluerrunuop sol aJtua sourerJpual 'pzelqou etle e¡ r{ srJelrlru¡seuePJg sel oP soJguJerru sol elueurer^qo I sol¡etrs¡a.trun sopelntn sol 'saJetrpu so1 'segop fseuop sol 'pco1 I
IEOJ selreJ3oJng sEI e uerceuet¡ad sauornb e soSpprg ouroc soureurnse rS
oJlwouoJ? 0170,/.tps23 L p1"4¿u1til :dila-t alau,il"¿.f It I . ,tY ', U . U7.)
r^I])EnsEooplun 'er.r. ,lp"g" ,ptttd
:(.r) rarseueu ns aP
EPung" aluaure^llnqe ue¡ranbe.t
IeJauIU sol JeeJlx,O
'1unf (als? Jef,El{enD
ugtceroldxa "l
e oP
) olsa v'zroJeuluJas aruotuertr¡1dxa
Lr or.ttt ue ¡edn¡8e
nlt,Ii
y local, los donesos de las órdenese añaden 43 ecle-m pecheros, vero-
591
t
í91 y tenemos ennes del siglo XVIesiásticosl1. Sobre:mográfico de losLadro 2.10.registro de minas:lero seculaq quer el 1,6Jolo de laslacción de libros>nocimiento másociones técnicas,res, nada modes-
sistema de con-iblemente a
también a oÍosn, otra en Pon-
io de cuen-en el arzobispa-
lres, todosen las que
se sitúan entreo/o) y se pueden
agrupar en cinco categorías. Hay un grupo (a), curiosamente muy reducido (tres), en el que
.iplfuit"-.rrt. ,e alrrJ. a su actividad extractiva, "buscador", maestro fundidor y minero, o
-i'n.ro12. A este colectivo se puede añadir un conjunto de oficios (b) que,puede. estar vincula-
do a la explotación minera, .^o-o ., el caso de los albañiles, canteros y sobre. todo carpinteros,
qrreha..r é.te, junto con el de platero, que es el más mencionado (seis veces)' Los tornos para
.l*.r"., los miíerales, l" gang" y .l "gn",
las bombas para achicar y sobre todo la entibación
requerían abundantes d"át.tár y lo, ño..ror albañiles y canteros. Otro conjunto, también rela-
tivamente abundante, puede vincularse a Ia búsqueda de. un mineral requerido en el ejercicio
de su menes ter (c):."1á.r.ro, cerrajero, entalladof herrador, platero y armero. A este grupo se
puede añadir una serie de oficios (d¡ p^t"quienes el hallazgo.de ciertos minerales podría estar
.rnido o a su acrividad o al logro d. ,tr proárlcto sustitutivo de los utilizados: boticario, carda'
dor, curtidor, ollero, pintor y'rwrLdor.Es evidente en el caso del cardador segovian-o que bus-
."ba gr.da, .rn d.s.ngr"ranrÉ utilizado tras el abatanado de los paños. El resto, un260/o,lo con-
for*in puesros, org* o empleos diversos y con poca relación directa con los productos buscados:
cirujaná, criado, ,ri.r."d.r, t.ndero, silletero, teniente de tesorero, sastre y escribanos. E_stos
úldáos como ya habíamos señalado en la minería indiana (Fdez. de Pinedo, 1994: 44 y 46) se
enconrraban .r, ,r.r p,rnro al que afluía información privilegiada, ya q9e el primer registro de
la mina se llevaba a iabo "rrt.lo,
escribanos locales (véase cuadro 2.1 1).
Cuadro 2.11Profesiones y ofcios (cada año es una denuncia efectuada-
po, alpitn del que se ofrece el of'cio o empleo)
Capítulo 2: Antecedentes de la minería españok conternporánea... 63
Grupo (a) 6,52% Grupo (d) 19,56o/o
buscador 1561 boticario 1 5 6 1 , 1 5 8 3
maestro fundidor 1639 cardador 157 |
mlnero r537 cordonero 1574
Grupo (b) 21,740/o curtidor r57r
albañil 1561 , 1561 ollero r563
cantero 1557, 1585 plntor 1564, r570
cafPlntero 1562, 1567, 1567,1567,1599,1626
zurrador t597
Grupo (c) 26,090/o Grupo uario 26,090/o
calderero 1563, \563 clr!.I|ano I )04
cerrarero 1624 criado 1564
entallado¡ t571 escribano 1596, 1626,1626
herrador r565 mercader r601
platero 1557 , 1557 ,1557 ,1565,1.568, 1568
sastfe 1566 ,1567 , 1573
armero de S.M r564 silletero t > o /
tendero 157 1
teniente de tesorero r556
TOTAL 46
?vozer ?sEf,,, BUnjJor{E u8gEloldxaoP f ogI^aJI aP
EJqEI{ eullu Elsa
P spluaP€ anb u,e
q"f soP uof, anD
e)qEq es elueruel) aP ouBur ouoc
eq€Aala ouJol o^
a^ es f '(aq3esaP
ras tnSe IA 'sele^
r ournfir 1a f sor
1 'setuerdrcar soP
r8e 1a uaSocer eP
rutrd ¡e olcgradnsn 'souJol s€ll3 aP
rrgrrn8e¡rA ua eP
ap uglcdrrcsaP e¡
d ap euru e1
e^enu uot sa sPIIe
.EJ ?lse Jod wultu
od f 'apuer8 oleq
ll"J,, anb EgEIEgas
1e errd salgero^EJs EI ua soIJelES sol
JESafeu ?Ja anb el
arua8 e1 ePor anb
i u?Iqurel 'ooas od
aP z3sE3sa "T alu?IP0tu
elsa u[ 'eJqo aP'sellPum al
tz aruErnP soPEropot arqos I 'os
oq secod aselegerr
¡ ',,se¡anla1¡ec,,
sopeptunde uegaP osEr Ia uÍ
'9Y-t+t
aP sauol)EJlllJ sel
efap 'ecodg ersa
ua,, alueurEsualul
Irry aC 'an8esaP ¡a
d 1a 'oprqes uelq sa
IuI €]Jalf, aP
lqnc seuerrelat rod
pr¡nll el ap Jolratxa 1a ue sopÉaro¡d 'sozod sol ap stroq sel ua sopenlrs souJol aruerpau Eqez-IIeeJ as 'epuoq eql Burru el opuenf, 'arogrodns e¡ e r8ue8 e1 ap I leJeurur Iep ugrJceJrxa e-I
'Epeuor ps e¡ recrs e.redsopezrltn saleurrue 'selnur sop ap ernrr Ie ¡rrru¡ad ueJqap se¡rap8 sel rEIIatseJ ap Fs ep sol-uaru¡rcel sopetlc so[ uE 'seleu¡Iue resn ur¡pod as 'epuer8 eJe ou eurur ¿l ap peprpunJord e¡ op-uenJ <u?Iqu¡el o¡ad 'solsef ua ozeJq e uege8rec as soJquJorso so1 I ¡eraurur Ia seoe^ seqrntr [
'(9I tr/661 'eueun) euleazr^ EJreulurEI ua elperns oprcared o8¡y'(6q-Sq :9/gI '>lcoJ anblu,ra¡q) -,.egpluoLu el fftuatsns r¡¿d sa¡-epd soseru8 lnru eun¡¡ el ue opuexa g,,- vzo?etez ue ,rclla:sE) ap elll^ e1 ap ald p ueqeroldxeas anb sEuIIes ffil ua E8E I sIrEI{ Elpacns rsv 'lES ap seuruJ s¿l ue eqezrlnn es osnlcur anb 'sotse8
rlsnPar e¡ed eu¡orsrs olretueu¡rPnr un Ere sare¡d sosan¡8 refap p 'eJappru JEJJOT{e ered'¡ern]euat¡odos ep u€I^Jes anb sop¡errxa ou eSue8 I prauru ap seurunlof, trcep se ',,seluand,, ecodaEI ua Egeruell es enb o¡ ueqrlap as st¡ra¡e8 s€l ue sera V
'selerarel sapared I sogcar sol ueqeur-ape as I e¡opuprnSrs o eta El rczuwIe. erser¡ se¡rep8 o sozod opuarJge ueqr es eluauJleu¡roN
'sepuryord ocod o orralqe olerf, e sauorceto¡dxa ue¡8rxa 'a¡du¡els ou o¡ad 'eprpeur Euengua anb serlu)?t '(Zg ,y66D etr¿r{l 'U a arleJ ap osnd rl ou¡oc ',.3uruas-a-tg,,
Ie touelue Errur?lBun uor opueltslxaoc 'tt¡x ol8ls lep petnu epun8as e1 ep sordrcul¡d e¡ed el souaru Ie Euleru^ orr-aH rap Elraur"' er uo op'lsrsuoo 'rro'r'1ed r:x';:111,:ffiJlffiH::j'"T:i:r#,T,ffJ$""*sopot?ur ap pepIIIgBtueJ ouls 'peprcedrcur o oluarurrrouoJsap rerrJru8ls Tnb.rod ouen ou sesop-e^ou sef,rur?r ap ugrf,errlde ou e-I'OI9:1J 'r I gII Á üI
,I9 '0g ,6, tI't ,1gg¡ ,za1ezuo1)
999I E ouJol uo grrrur as ugtctro¡dxa vttnc '1euet¡epenD ep spurrü sel ap rre¡d ua otuaruJrpuer Iaa.Igos 'setslrulrdo fnru 'sellltou sele A 699¡ ap ugrce¡sr8a1 e¡ rod seprlalgetsa seuorf,rpuor st^enuse¡ e sener8 aluerueiqego¡d 'seuect¡arue sauotcetoldxa sel ua soprrlnbpe soluaru¡rJouoJ sol uoJegedsE e uoJeuJoteJ souerpul saJoprpunJ I so¡eultu soptlueuJrJadxa anb ours soueu¡Ja8 sor¡e¡-edo uo¡afe¡t es olgs o¡ 'ecodg el ep sopezuu E seru sorruc?t saJagps sol ep erJueJaJsueJl Eloryz-nue¡e8 rageg aoared 'ecr:gu¡¿ ue oruor egrdsE ue olurl '17¡4 o¡8¡s Iap perrru e¡aur¡d el rpsep
((seuetuale,, soJaulur ap ercuasa.rd e1 'secodT selsa uo Ef,ruJguof,e ErfuarJltaur ¡auodnse¡d anbeluaurcIJEsaf,au u3uall ou selEluoluele soPol?ur o oJluf,?l otualulBf,uetse oJOd 'sorrttecgtu8ts solq-urer opetueu¡l¡adxa reqeq Iu EpernsrJos fnu ru oprs raqer{ aro¡rd ou E nceJlxa e¡8oloucar e1
ocr89¡oucar Ie Iu Ig '9'Z
'prlsenuJ e1 ap on8rxa ol repr lo op eqap as ou ,spur ze^eun.oJad .II Xo¡8rs lap EtuIeJl soge sol sEJl uerzoredesep orrlJo un uor serop?rrunuop E sauorf,ueru se¡ anb rep-ua¡dtuoc e rcpn'{e e¡rpod leuesatre srsrJr p'I 'openrope orcnpord Ie oreurur Jotf,es Ia ua opuer-snq epuuruap esa Jef,EJsnBs Jetualur e saropelegeJl sns ep soun8p e opelndrua o optlnruuseeJJqEI{ anb 'et8rnpteur EI ap I oplrrnc ¡op
'(sarueser8uesap 'saruarp:our) ocru¡nb 'lllxat salol-fas sol ep arred ¡od seur¡d serJateur I ,,sa¡dulls,, sotJaro ep ppueurap el op otuaurne un Ie E op-elnourA I putsalre oluanul)eJr auanJ ep soruof,ap soun ap orrrpur un ras apend u?rgruer oJed'soseJalul sns E selqeJo^eJ syru seuJJou seun I se¡rue.re8 sElJaIf seun ep reuodsrp elser{ uoJer:)-unueP sel ou sBuruJ aP srcuetsrxa EI uB)nrul solue seualnb anb e '6991 ap ortnelslSal orqruer IEopeuolruaur ef o3o19rd 1e arat8ns oluof, (asJagap e¡rpod sorrlto ap afetuecrod ope,ra¡a Ia
'epel-rrürl sa Ensonru e1 anbuny '(o/otlLlr)
rLq ,(gggl enua aluaruel¡elr¡olerrr Á'6e9I 'l ¿gg1 anueuetllrs as II'Z oJpenJ ¡e ua soplSoreJ sorrl¡o 97 so¡'ocrSolouoJr Etsr^ ep olund Ie apsaq
olru.tguon ollot,tps¿y I a1uuz¡¡¡ :attp¿ pt¿u.u"t¿v9
Capitulo 2: Antecedentes d¿ la mineria española contemltordnea... 65
ho 2 .71 se s i t úana muestra es limi-o ya mencionadonas no las denun-es a sus intereses.tesanal y vincula-r parte de los sec-urgia, que habríasa demanda bus-rudar a compren-rs treinta del siglo
erimentado cam-:n necesariamenteneros "alemanes":ce haber garanti-o se trajeron ope-)rnaron a Españarente gracias a lasoptimistas, sobreen torno a1556
técnicas nove-idad de métodos
minería del hie-
I
I
I
t(
I' i
,t
liI
por tejavanas cubiertas con teja -los llamados cobertizos-. Es muy probable que en las minas
á. cierta importancia el movimiento de los tornos se realizase mediante animales. Pero como
es bien sabido, el principal problema de la minería de entonces consistía en las dificultades_para
el desagüe. De ah? la reiomendación, referida a las minas de Guadalcanal en 1557, de trabajar
intensamente "en tiempo de calor y enjuto", disponiendo de la mayor cantidad de mineros en
esta época, dejando la Fundición y afinado de los minerales y metales para elinvierno, cua_ndo
las filiraciones de agua de lluvia anegaban muchas minas o parte de ellas (M. Bargalló,1969:
4r-44).En el caso de la mina de Almadén las técnicas no eran muy distintas. Paredes y techos esta-
ban apuntalados con maderas. Existía una galería central de la que pa1tí?n ramales laterales,
"callejuelas", llamados también "hurtos". Las pésimas condiciones_de salubridad hacían que se
tr"bajase pocas horas al dla. El mercurio se extraía bien líquido, el llamado "virgen", muy esca-
,o, y robré todo embebido en piedras o en rocas que, luego, en unos alambiques de barro calen-
tados durante24horx,proporcionaban el metal líquido. El alumbrado se llevaba a cabo median-
te candiles. Como en otias minas el achique del agua absorbía una parte importante de Ia mano
de obra. En esta mina se precisaba que la extracción del agua se llevaba a cabo hacia 1575
mediante bombas, activadas manualmente (De Morales, 1997: 48).
La escasez de mano de obra, precisamente cuando más se podía trabajar en la mina, en tiem-
po seco, también se hacía nota-r en las minas de Murcia -"era en la fuerza de la cosecha de seda'
que toda la gente estaba ocupada en ella, y en coger el pan que hubo, y no se pudo juntar.gen-
te que era nécesaria para acudir a las obras"- (González, 7832, t. I: 412 y 413).La subida de
los salarios en la segunda mitad del siglo xW y luego la crisis demográfica no fueron fáctores
favorables para el desarrollo de la minería en España. A fines del quinientos Ia corona misma
señalaba que "faltan trabajadores paralalabor, por muy bien que se les pague_, por ser es.te tra-
bajo granáe, y por ocasión de lasiosechas, vendimias y siembras, acuden a ellas,_y quedan las
-in"i pot .ri" t"nr" sin recaudo, y se hinchen [sic] de agva, y se hunden y cuando se vuelve a
ellas es con nueva y mayor costa que al principio"13.La mina de plata, llamada de Albertos, en Almodóvar (La Mancha), hacia 1608, y según
la descripción d. don JuanLópezde Ugarte, administrador de las minas del Reino (carta fecha-
da en Villagutiérce2, el 28 de junio de 1608) tenla cinco entradas en_la su-perficie y en cuatro
de ellas torior, uno por boca, merced a los cuales se extraía el agua, Ia zafra y el metal. De la
superficie al primer zuelo había unos veinte estadosr4 en donde había "caldgras y:a1a: en don-
d. t..og.tr .l agua". El segundo suelo se hallaba a diecisiete estados más abajo y había pareci-
do, recúi.nt.r. El tercer iuelo se encontraba a otros dieciséis estados, con semejantes depósi-
tos y el ilti-o a ocho o nueve estados más abajo. Cada suelo se correspondía con una o varias
vetás. El agua se subía del piso inferior al superior en "marozas" y zacas (zaques grandes para el
desagüe), y se vertía en los citados recipientes. En estos se volvían a llenar los odres y un nue-
vo tJrno elevaba el agua al nivel superior. Asi hasta llegar a la superficie. Los tornos exigirían
como mano de obra u.ro, r.r.nta operarios al día, sólo en Ia labor de extraer el agua. Recien-
temente se había instalado en uno de los pozos de la superficie "un ingenio a manera de noria,
que con dos caballos saca tanta agua, escribíaLópezde lJgarte, como ahora con tres tornos'
ü q,t. además de facilitarse el desaguar la mina, vendrá en ahorrar el coste de doce hombres".
Esta mina había sido denunciada, por despoblada, hacía unos tres años (c. 1605) por Martín
de teviño y don Juan de Oviedo y ".rtor mismos con otros que han admitido a la parte" la
explotaban ahora. Alrededor de la mina había surgido rápidamente un poblado compuesto por
,rn" "."r" razonable", para acoger a los dueños cuando venían, y otras cuatro o cinco pequeñas
con unatécnicas que en
iéndola y se ade-se llamaba en la
rvían de soportea para reducir
las salinas que seuy gruesos pila-
sucedía en la
también, cuan-itados yacimien-
es utilizados
honda, se reali-ior de la lluvia
Elorü sol eP ?rerrrsnPur ?l aP) "uosJád
¿un8b rrcd eurpa¡/g
1 redsrS e pacorunf ap 91 ug'89'99'99'f79
Sreg orsepotr¡1argos I ugrcr.r
u sol ?PnP urs /Jeuru EI JP ?s
;EI-OEEI SOqEru9D zar{ru9s eIII:886I ergxlxnr)'s?l?tros:086I '.lII's'u
,f, Ir :?rJ?IOUIUI
"llaP osn,lleP
aP olnritr" IBesEe^'?JJeurru
rrnssJ un ¿Je¿ Eurs o¡ad 'olsn8'876I) r3nblupiI "'T TqT epa o vuallaxtar
) 3P upns¿qes ,rEN e3rtorlqrg ,'XIX)C{'r 5"2ErueP?lv I?3uouold f or-rergas anb eqeolpurJ9 ap orxer u¡ ,otto '{ g7V¡ ap)Prnlf,xe souaH r
¡olor ErrJ?urv EInbune'salelnoel
)IPSlnS OIUOf 'al
Ie ue soPePa^ouref,os un 'ouaJJal
¡a eranllurad ol IS 'JezIIeaJ 3 Eqetsul as spuJape I 'sel¡ou I sorue8ur ,souJo] .sequJog :seulur s'Elren8esap e seppunsep seurnberu sel utJauJnua es (00/I erceg'so18rs sop sol rp ruro9 1, ug
'(g9I \ 1'Ze8I 'zaryzuo1))ourol IaP eurelsls Ia uor EqBnurruof, Js tnb epgas 'u?peur¡y ap solEp opuep Á,LggI ercd ,za1-Vztro) sptuoJ I gOgt ErrEg solJag¡y ap otuenulcel opetrc Ie ua uegEzrlnn as errou I souro¿'1¡¡4 o13rs ]a ue selJou ¡od o sou¡ol rod stprnrrtsns uoranJ (reurgporu¡y ue (souaqly eurur EIua OEEI
'c I ugperu¡y_ua olsr^ souaq ovrcD gLgl ua) an8esap 1e ered ¡,¡4 o13rs Ia ua sepezrlnn'seqrrrog sel anb ua¡ar8ns soldruafe soCI'sr(ZOI :II't'ZggI 'zalgzuoD) seurur sEI ap,,an8esapoqrp Ie e¡ed'elsoc tcod ap ÁIltyJ,,seulry ep erunfe1 a]ue opetuasa¡d ole¡ede un e¡ed o€a1nudorlo aqrrer soDr sol ap oruaSnE alualn8rs oge [V
.Gll f II ,0II .60I :lI 1,Tggl ,za¡ezuo2)
"'((soleJJeJe eP sBlsor f sorse8 JesnJsa e¡¿d seutul sEI ep sElog sr1 e orua8ur oqcrp opuelrJgeJ,, sJI-Eleru aP odtr opor u?rqu¡er o¡ad 'o8r¡1 reloru ered rr,rras erpod anb ,,serpard sEI a^anur anb e¡r-arund eP EPOnJ f arapor 'e^anru as anb euJoJeuJ eun I 'aluarupruozrJor{ eperueld ,atrrelo,r. ap-ner8 epanr eun ua elueuJelos,, eqepunj as anb orua8ur un Jepue^ l, rccuqvlered soge alurarr ¡odorSa¡,r,ud opetsetuor un grgrrer ,(opa¡o¿) euerdr.rS ap odure3 ap IeJntEu f .epl,r.epp¡ ap Jop-Epuauloc 'uenf ueg ap uapro el ap oralleqer ,u91/y op opurTEC olqed uop LZ7I uE.oraurruJolfas Ia ua olgs ou o.¡ad :Euou ePEtrf EI oujoc 'seulnberu sErJelururrpn¡ 'er¡uel¡odrur elJelrEun eP sEulur aP osEr Ie ua feldope I sap;ogel selsol rerroqeercd ete3rre un;eluase¡da¡ anbuoJer^nt sotuerrsres 1ap ooge;Sourep osuof,sap Ia I ltx oprs 1ap sorreles sol ap Eprqns ET
'(t tg-Otq \I'1
'Z€.gI 'zelgzuo) a) ,,arqoc áp operqel eq anb
[eu¡u] el ue olsl^ erl rs olraja uor ouroc "'eprprad pre^ EI opuelap 'uapJo urs oueur e ár"lleqanb ¡eraul IO oPueces atctgradns e1 rod grr es loqel 11 ua ocrreld [sa] ou I ,oluaruegca¡.o¡de seruu¡€¡e uoc elsot EI Jeres ap ertrr olos anb,, euos¡ad sa enb¡od ,,ugrcerrdsa; ue8ual f uepunq es ouenb eJeuEru ep,, seurur wl er'ltrueq :609I ue eI]rlED ue 'ollog
Iep ugrDrpsrrnl ,ofla5 IJp EuruJ
EI ua aruod osuolv ugttdec ¡a rod ogtc E sEp?^ell sapepr^rlcE sel grqrJrsep uerguret erreS¡ apzadgluenf uoP oPerlf, rl ¡E
'¡se Jas ep glqap a¡druars ou ored 'sopeJral soursadu¡ec oqtc E uoJ-e ell EI uoroetoldxa ap odn alsa anb ¡esuad ágEJ 'olngu¡arsrs felngar ofeqerr un uo I sorrur?lsolualurlrouoJ sol ue anb seru alJens eueng EI ua opu"rJuoc 'ptrdec ap uorsJe^ur esecsa lnruuoc 'ectnb¡eue eurroJ ep seperoldxe uoJanJ seurur sEI op erroleru EI atueuelqeqord ora¿ 'epee-UIIEnr etuetseg Erqo ap oueur ep uo;atsndsrp anb .,( soruel¡odulr sauors¡e^ur uoJ¿zrlea¡ as enbsEI u_e 'sonPl IPuI solre aP uglf,Elcose uof, 'Etsrleldec odlr ap seserduta ue gzuerle es olos -sop-e¡n8ar olege;r eP souJnt- orrtltzrueS¡o I -ser¡ou (souJot 'seqtuog- ociSoloucat Ie^ru etsg
'(gZ-L tl1 'Zegl 'zalgzuoA)
((olPaur I sa¡l e eP seJlo I stun8p soptlsa oJlEnJ ap,, 'alJotEJ ep oJeuJtlu uo .seqruog en8e 1eJaeJlxé ercd opezrytn E)qEq as souJol eP z¿^ ua o¡ad 'eJoqe ouror otuet opezrpunJoJd ergeq asou onbunr 'r99I 5 'sogr etuencurt soun ener{ roqel ua opttsa Ergeq eurur e-I'GrZ-ZV:IIAX 'r<Z6LI 'e?nile1)
,,opurrrnbsep as.rr I ,o¡;eelsoc ered ppnrc Euru EI salopugp opl eq etuelepe
)I{E oP enb I 'ptaru p re8a¡ elsel{ EIJas prtdec ¡arul¡d ns ue uoJarsnd so¡a anb elsoc epor anbEPnP uls ¡od o8uar,,- prtdec Ie oPutznJoure utgr osnlrur e setsor sol E etue5 reoeq ue¡pod ue¡u-argo anb o1 uoc anb erce¡ed o;ad 'alqeraplsuoc enJ Ienrur uorsJe^ur E'I 'epen8esap .lrcap se <,cc-uoJ,, EgElse eulur EIoPuenc oldacxe 'aluoutu¡¡ed e¡a enSt ap uorJJeJtxa e-J '<rreuJell anb sepuefsns ¡od opuatpacard ue^ IsE 1,, receueurc Ie etseq ou¡nl ¡aun¡d 1a releq E E)^lo^ eqrou erpauap sgndseq 'aPJel EI etseq otsar Ia eqeJtue seruotue :Erporpatu I" BJIES ,(,euegevt e¡ rod rrfeq-eneeIPnJe PelIuJ E'I "'lelour 1a opuelerrxa soJto'opueAeo soJto'souJol sol ua soun ,sa;opef-eqeJr 00€ soun e ugrctdn:o eqeq 'ere1d e¡ ap ourold 1a reledes rred orcglpe Iep ueuJe <Epurrl
I ugsau 'e¡tdtc eun 'sauoed sol ered atueurer^qo 'sezoqJ Etuer{f o n Etuates I saprego so¡ ered
oJ tl,uo u oJ¿ 07 I o"t.t l2taa lL p|"t ¿u I tAI 2Jt3. I til ¿At 1,t.1 tr I / ,t v u . (too
¡na capilla, mesón yn a unos 300 traba-mitad acudí^ a tÍa-
a tarde. Después derrecediendo por susla mina estaba "ron-
Iue con lo que obte-"tengo por sin dudametal, y que de ahílo" (Larruga, 7792,c.1554, aunque norilizado para exrraers de a tres y medio"
rs de trabajo regula-rs individuos, en lasbra bastante cualifi-rma anárquica, conr los conocimientosexplotación la lleva-rdo don Juan LópezAlonso Ponce en lanas "de manera querr Ia costa con algúnrcando el metal quea visto en la fmina]
;elsclentos tuvleronso de minas de unano sólo en el sectorian Juan, comenda-ntestado privilegioen una rueda gran-y rueda de punte-
todo tipo de meta-de acarretos"...
Ríos recibe otrocosta, para el dichon que las bombas,adény c. 1550 en
en el siglo XVII.B y Tomás Gonzá-I sistema del torno
inadas a desaguar, si Io permitiera el
Capitulo 2: Antecedentes de la minería et?añold corctemporánea... o /
terreno, un socavón (una galería en este caso) de desagüe (González,I\32, t. I: 25I-253). Pocasnovedades en el aspecto más importante de la explotación minera subterránea. Probablemen-te, como sucedió en el terreno de la metalurgia con la técnica del patio, los avances más espec-taculares, aunque dentro del paradigma tecnológico "tradicional" ya conocido, se realizaron enla América colonial (González Tascón, 1990: 255).
NOTAS
1 Hemos excluido del cómputo dos registros, unode 1428 y otro de 1487.
2 un texto de época de Felipe III (1596-1621)indicaba que se exportaba alumbre, sal, azogue,hierro y plomo y se importaba cobre y estaño.Real Academia de la Historia, Colección Sala-zar, t. )OC(IX, fols. 53 a 56.
3 Biblioteca Nacional (Madrid), ms.7.615.a Sebastián de Covarrubias, Tesoro de la lengua
castellana o española, según la impresiónde 1611. . . Edic ión preparada por Mart ín deRiquer (1943,voz: cobre; 328). El texto dicegusto, pero sin duda es error por gasto.
5 Para un resumen del uso de la pólvora en laminería, véase la reseña de Philippe Braunsteinal artículo de Raffaello Vergani, "Gli inizidell 'uso della polvere da sparo nell 'att ivit)mineraria: il caso veneciano", Studi ueneziani,n.s. III, 1980:97.140, en Annales, Economies,Sociétés, Ciuilisations, n.o 5, septembre-octo-bre 1983: 1154-1156.
6 Sánchez Gómez (L989: 293 y ss.) calif ica losaños 1550-1559 como "La'Década prodigio-sa de la minería española".
7 Sin duda los mejores trabajos sobre esta inno-vación y sobre Bartolomé de Medina son los deModesto Bargal ló (1969: 34,54,55, 56,61,64,66,66,68,70,80-81, 85 y ss. entre ot ras) .En 16 de junio de 1556, México, se hizo "Mer-ced a Gaspar Loman Alemán y a Bartolomé deMedina para que por tiempo de ocho años nin-guna persona en esta Nueva España pueda usarde la industria que diere sobre sacar de la pla-ra de los metales con azoque sin su consenti-
miento". Ignoramos la fiabilidad de 1a cédu1a
de 4 de marzo de 1552 parcialmente reprodu-cida por P Madoz, Diccionario, voz: Almadén;24, nora, atribuida a la Princesa Gobernadora,que dice así: "Habiendo bisto lo que vosotrosy el Visorey de esa tierra nos habeis esctito, acer-ca de la necesidad grande que hay de que seenvie á ella canddad de azogue para beneficiarla olata'.
8 Dé las inst¡ucción del rey a Don Francisco deMendoza administrador general de minas,
de 30 de octubre de 1557, Bargalló (1969: 45y 8 1 - 8 2 ) .
e Por mencionar dos ejemplos ilustres. Un india-no clérigo, probablemente de origen valencia-no, Antonio Botelle¡, intentó sin lograrlo, aplicar la técnica de la amalgama en Guadalcanal.Y Alonso Barba, cura en Potosí, oriundo deLepe, además de hacer fortuna explotandominas, escribió y publicó el Arte d.e los Metales(1640). M. Bargalló, (1969: 64, 81-82 y 102).
r0 Recopilación (1640),libro 6.", tir. XIII, Iey VFelipe II en Madrid, 18 de marzo de 1563,f. 136v" a 148. Ejemplos de denuncias con lanueva normativa, en GonzáIez (1832, t. I: 29,
64 , 211, 212, 270, 271. . . ) .Ahora e l denun-ciante tenía que señalar el tipo de minerai, yefectuar una descripción del lugar y la veta anteel alcalde ordina¡io y escribano del lugar y esteregistro se tenía que presenta¡ en Ia Contadu-ría Mayor de S. M. en Madrid, que daría car-
ta de orovisión o R. C. a favor del solicitante
para que pudiera beneficiar la o las minas con-
forme a las ordenanzas de minas.
es olnllder )rsa (*)
)e ua atuBlJodurl
e oluEnf, uE
oPmuuru9rJEu¡)JodoJd -
,nPoJd)r1) errJJ))Jgos €r.)ruEtuof,)'sogru Iadsa sapoJaPerJf)lansqns
PENA Ig -
;atuarn8rs so1 ua
¡ e orcedse¿I as enb ugrcdecruoIJeIJe^ salueluele aP PePrruEl)rleJrsrururPV EIÍor3 el eP salol,rcepSor e1 ¡nbyed ¡rruaruepun3]lSE IEP ¡EdTd 1E
prnPorrul'I'€
V-I AflNIW
zalgzuoJ es??^ 'uonue,rur ep sor8elr,rr.rd ap
uorsaluoJ e1 ered soptranbar sarllrreJr sol tJ?¿'soDetsa ua
s?prpatu se1 relap .rod operdo t¡1 'ttgotoq
un ep EJntlE oruol optlsewap acared anb
ol'ur 96'I "p rul 8Z soun ?Iuor ard 1a anb
opep I sard atals ua tqrlg as uatqruel ored'.argurorl un ap Erntl? e¡ t e;ltarnba oldlr-urrd ug 'e¡n8as sr ou operse 1ap prur8uol e1
' ¿69¡ oynl8 (oule¿
Iap s"uru epp.reue8 ropertsrunupt'azueÁy e orro8a.rS '6
e ugrf,rnnsur eI ¿P 'rt tII 't 'zegl 'z¿IyzuoJ'ugrsa3ord ns
" apnp oprll
-ade 1a epnp urs enbune '(eraceg¡y) orprd u"Sep s"ged ue I6EI ua ereld 3p ?unu eun ¿¡rsr8a¡anb "po'qe7 oJa¿ eJlse?W E oprnpui sour_ar{ oN
'?P?^ele oP?rs?ueP soruElunse anD ¿ur3'sa¡uelrqeq uJ sourJJ^ JDJJAuo) e.ted g :ruerr-rJoor Ia ezrTnn zrn¿ '(L9I tL96l) uItrrry zrn¡
9IET
7.1
II ,I
oJlulouoJa ouo.uasa( lL p?autw :ailu¿ 3,4a1,u!,t¿ 89