NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 1
AÑO TRECENÚMERO 205NOVIEMBRE DE 2016
EDITORIAL
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El estado de San Luis Potosí posee una gran diversidad de cactáceas: la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) tiene registradas 151 de las 669 especies que se conocen en México.
En todo el mundo se estima la existencia de 1 400 especies de cactus, y aproximadamente la mitad se encuentra en México, por lo que desde hace algunos años, cada 10 de octu-bre, se conmemora el Día Nacional de las Cactáceas, especie protegida por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-Semarnat-2010.
Lamentablemente, hay especies de cactus que están en riesgo por la destrucción de su hábitat natural o por el saqueo inmoderado, pues algunas son muy apreciadas en el extran-jero, como da cuenta el artículo principal de esta edición, en el que las autoras hablan del valor ornamental de las cactáceas, que embellecen espacios en diversos países.
RECTORManuel Fermín Villar Rubio
SECRETARIO GENERALAnuar Abraham Kasis Ariceaga
DIRECCIÓN GENERAL
Ernesto Anguiano García
COORDINADORA EDITORIALPatricia Briones Zermeño
ASISTENTE EDITORIALAlejandra Carlos Pacheco
EDITORES GRÁFICOSAlejandro Espericueta Bravo
Yazmín Ochoa Cardoso
REDACTORAS Y CORRECTORAS DE ESTILOAdriana del Carmen Zavala Alonso
Diana Alicia Almaguer López
COLABORADORESInvestigadores, maestros, alumnos de
posgrado, egresados de la UASLP y otras instituciones
CONSEJO EDITORIALAlejandro Rosillo Martínez
Facultad de Derecho Abogado Ponciano Arriaga LeijaAdriana Ochoa
Facultad de Ciencias de la ComunicaciónAnuschka Van´t Hooft
Facultad de Ciencias Sociales y HumanidadesIrma Carrillo Chávez
Facultad del HábitatMaría del Carmen Rojas Hernández
Facultad de PsicologíaHugo Ricardo Navarro Contreras
Coordinación para la Innovación y Aplicación de la Ciencia y la Tecnología
Amado Nieto CaraveoFacultad de Medicina
Vanesa Olivares IllanaInstituto de Física
Juan Antonio Reyes AgüeroInstituto de Investigación de Zonas Desérticas
UNIVERSITARIOS POTOSINOS, nueva época, año trece, número 205, no-viembre de 2016, es una publicación mensual gratuita fundada en marzo de 1993 y editada por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, a tra-vés del Departamento de Comunicación Social, que tiene como principales objetivos difundir el conocimiento generado por la investigación científica y tecnológica de la UASLP y otras instituciones nacionales y extranjeras e informar sobre los avances, descubrimientos y teorías que se han obtenido en las diversas áreas del conocimiento. Calle Álvaro Obregón número 64, Colonia Centro, C.P. 78000, tel. 826-13-00, ext. 1505, [email protected]. Editor responsable: LCC Ernesto Anguiano García. Reservas de Derechos al Uso Exclusivo núm. 04-2012-112911453700-203, ISSN: 1870-1698, ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor, licitud de Título núm. 8702 y licitud de contenido núm. 6141, otorgados por la Co-misión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Sistema Regional de Información en Línea para Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal, Latindex, folio: 24292. Impresa por los Talleres Gráficos de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, avenida Topacio s/n esquina Boulevard Río Españita, co-lonia Valle Dorado, San Luis Potosí, S.L.P., este número tuvo un tiraje de 3,500 ejemplares.
Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura de la universidad.
Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización del Instituto Nacional del Derecho de Autor.
Se reciben colaboraciones exclusivas y originales al correo electrónico: [email protected], que serán revisadas por evaluadores externos y los miembros del Consejo Editorial.
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TIPO 1
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TIPO 4TIPO 5
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9º
13.5º
18º
22.5º
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Columna DE FRENTE A LA CIENCIA • 11MARÍA ELENA ÁLVAREZ–BUYLLA ROCES
Divulgando • 34¿QUIERES PROBLEMAS?Torres hiperbólicasRAÚL ROJAS GONZÁLEZ
DESDE LA AZOTEAEcho la mochaMARCOS ALGARA SILLER
CONCIENCIARTEReflexiones sobre las aventuras del capitán MartesÓSCAR MONTERO
Protagonista de la psicología experimentalEmilio Ribes Iñesta • 38DIANA ALICIA ALMAGUER LÓPEZ
Primicias • 40JOSÉ REFUGIO MARTÍNEZ MENDOZA
El colapso de las poblaciones humanas puede predecirse
Las cabras y su forma de comunicarse con los humanos
AGENCIA INFORMATIVA CONACYT
Buscan convertir plástico ordinario en biodegradable
Ocio con estilo • 44El horror en la cotidianidadADRIANA ZAVALA ALONSO
SECCIONES
CONTENIDO
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4
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El valor ornamental de las cactáceasMARÍA DEL SOCORRO SANTOS DÍAZ Y COL.
Reforma energética: posibles impactos ambientales y sociales LUCÍA BENAVIDES MONDRAGÓN
Regeneración óseaMIGUEL ÁNGEL CASILLAS SANTANA Y COL.
Diseño ergonómico para la prevención de desórdenes de trauma acumulativoMARTHA LETICIA VILLA FAJARDO
La mendicidad infantil en San Luis PotosíMARIANA LÓPEZ VILLAGRÁN Y COL.
La tuna universitariaDIANA GUADALUPE ALVARADO DE LA PEÑA
.22
.4
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 2016
Inter-University Sustainable Development Research Programme
Hochschule für AngewandteWissenschaften HamburgHamburg University of Applied Sciences
29 y 30 de Junio de 2017Universidad Autónoma de San Luis Potosí,
San Luis Potosí, México.
SIMPOSIO SOBREINVESTIGACIÓN
EN DESARROLLOSOSTENIBLEEN MÉXICO
• Profesionales de la enseñanza e investigación
• Estudiantes de posgrado
• Personal de Instituciones de Educación Superior
• Encargado de proyectos y consultores
• Otras personas interesadas en el campo
PERFIL DE LOS PARTICIPANTES
Se publicará un libro revisado por expertos titulado “Sustainable Development Research at Universities in Mexico”, con todos los trabajos
aceptados. Este libro será parte de la reconocida serie “World Sustainability”, publicada por
Springer, uno de los cinco principales editores científicos del mundo.
http://ambiental.uaslp.mx/sdrmexico2017
Más información: Ana Pé[email protected]
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 20164 SANTOS, M.S. Y SANTOS, M.L. PÁGINAS 4 A 10
El valor ornamental de lascactáceasMARÍA DEL SOCORRO SANTOS DÍ[email protected]ÍA DE LOURDES SANTOS DÍAZ FACULTAD DE CIENCIAS QUÍMICAS
Recibido: 08/12/2015Aceptado: 01/10/2016
Palabras clave: Cactáceas, ornamentales, mercado, cactus y comercio.
La familia de las cactáceas es nativa del continente
americano y comprende aproximadamente 2 000 es-
pecies. La mayor diversidad de ejemplares se localiza
en México con alrededor de 600, de las cuales 80
por ciento son endémicas, es decir, sólo crecen en
nuestro país. Si se considera la distribución de espe-
cies por estado, los de mayor diversidad, en orden
descendente, son San Luis Potosí, Coahuila, Nuevo
León, Oaxaca, Zacatecas, Tamaulipas y Sonora. Las
mayores densidades de cactáceas se han detectado
en la región del Huizache en San Luis Potosí, con un
total de 75 especies.
Las cactáceas han desarrollado diferentes maneras
de adaptarse para almacenar grandes volúmenes de
agua y reducir al máximo la superficie de transpira-
ción, como la modificación de sus hojas por espinas
y la presencia de tallos verdes fotosintéticos. Estos
cambios les han permitido crecer y desarrollarse en
zonas áridas y semiáridas donde la disponibilidad de
agua es escasa.
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NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 5CACTÁCEAS COMO ORNAMENTALES
La palabra cactácea proviene del griego Káctos, tér-
mino introducido por Lineo para designar un cardo
espinoso. Con este nombre se agrupan diversos gé-
neros de la familia Cactaceae, conocidos en Méxi-
co con los nombres comunes de pitayas, saguaros,
xoconostles, nopales, biznagas, órganos, tetechos,
pitahayas y garambullos, entre otros.
Desde que fueron descubiertas por los primeros ex-
ploradores del Nuevo Mundo, las cactáceas genera-
ron gran interés y admiración. En 1535 apareció el
primer volumen de la Historia natural y general de
las Indias, islas y tierra firme del mar océano, escrito
por Gonzalo Hernández de Oviedo y Valdés, don-
de se representan ejemplares de plantas que ahora
conocemos como Cereus y Opuntia. Estos géneros
también aparecieron en las primeras ilustraciones a
color en el Codex Badianus en 1552, escrito por el
indígena Martín de la Cruz.
Durante la segunda mitad del siglo XVI, diferentes
cactáceas fueron llevadas a Europa, de esta manera
se formó el primer núcleo de estudio para los herba-
rios que se multiplicaron en aquella época. Durante
el siglo XVII se establecieron diversos jardines botáni-
cos que usaban plantas completas o propagaban los
especímenes por semilla, así iniciaron las primeras
colecciones privadas de cactáceas.
Actualmente más de 300 especies de cactáceas se
cultivan como plantas de ornato. Éstas son aprecia-
das debido a la belleza de sus flores, la forma de
sus tallos y/o la disposición de sus espinas. Las flo-
res de las cactáceas son especialmente atractivas y
su número, tamaño y color varían según la especie.
Las flores nocturnas son blancas con algunas tona-
lidades amarillas o rojas, en cambio, las diurnas son
blancas, amarillas, púrpuras o naranjas. En ocasio-
nes se combinan varios colores produciendo franjas
o destellos tornasol en los pétalos. Algunas cactá-
ceas con flores notables son las Neolloydias, Turbi-
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 20166 SANTOS, M.S. Y SANTOS, M.L. PÁGINAS 4 A 10
nicarpus y Echinocereus y ciertas cactáceas epífitas
cuyas flores pueden alcanzar de 25 a 30 centímetros
(cm) de longitud.
Los tallos de las cactáceas también son de formas
variadas, pueden ser globosos, cilíndricos, cande-
liformes, columnares o en forma de raqueta. Una
característica notable e interesante es la disposición
espiralada de los tubérculos. Esta clase de crecimien-
to simétrico guarda una proporción matemática que
se conoce como serie de Fibonacci (0, 1, 1, 2, 3, 5,
8, 13, 31…) muy frecuente en el reino vegetal. Por
ejemplo, el número de costillas en Ferocactus la-
tispinus sigue esta secuencia, ya que el número de
costillas aumenta con la edad; así las plántulas jó-
venes usualmente tienen tres costillas, las pequeñas
cinco, las intermedias ocho y las grandes 13. Entre
las cactáceas atractivas de tallos globosos están las
especies de los géneros Mammillaria, Coryphantha
y Stenocactus y las muy conocidas biznagas, que
pertenecen a los géneros Ferocactus, Echinocactus
y una especie del género Melocactus. Los antiguos
mexicanos denominaban a las biznagas con el voca-
blo náhuatl huitznahuac, que significa ‘rodeada de
espinas’. La especie Echinocactus platyacanthus es
tal vez la de mayor crecimiento, pues alcanza hasta
2.5 metros de altura.
La distribución y forma de las espinas en las cactá-
ceas es otro de sus aspectos llamativos. Pueden ser
aciculares (forma de aguja), subuladas (con la base
más ancha), plumosas, papiráceas o ganchudas. Por
La familia de las cactáceas comprende aproximadamente
2 000 especies
En México se localiza la mayor diversidad con alrededor de
600 especies
80%son endémicas(sólo crecen en nuestro país)
Los estados con mayor diversidad son:
San Luis PotosíCoahuilaNuevo LeónOaxacaZacatecasTamaulipasSonora
Las mayores densidades de cactáceas en San Luis Potosí se han detectado en la región del Huizache, con un total de:
75 especies.
Sonora
CoahuilaNuevo León
ZacatecasSan Luis Potosí
Oaxaca
Tamaulipas
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 7CACTÁCEAS COMO ORNAMENTALES
su dirección pueden ser divergentes, es decir, pro-
yectadas en diferentes direcciones; porrectas, que
forman un ángulo recto con respecto al eje central
del tallo; curvas, reflejas, dirigidas hacia la base del
tallo; pectinadas, dirigidas hacia los lados en forma
paralela una de otra, semejando un peine; adpresas,
aplanadas contra el tallo; ascendentes, dirigidas ha-
cia el ápice del tallo.
Por su ornamentación se clasifican en lisas, anilla-
das, acanaladas con un surco central, o envainadas
si están cubiertas por una envoltura papirácea que
se desprende fácilmente. Muchas veces hay dos ti-
pos de espinas en la misma areola: las radiales en
el exterior, generalmente delgadas y numerosas, y
las centrales gruesas y escasas. En cuanto al color,
pueden ser blancas, ámbar, amarillas, rojas o negras.
Su tamaño es variable y algunas especies como los
Ferocactus, del latín ferox, que significa ‘feroz’, pre-
sentan largas y “feroces” espinas rojas.
Mercado de cactáceasLos principales países donde se comercializan las
cactáceas son Estados Unidos de América (EUA), Co-
rea, China, Canadá, Reino Unido, Alemania, Suecia,
México, España e Italia. En EUA, Texas tiene la mayor
producción que se canaliza a los estados de Arizona,
Nevada, California y Nuevo México.
Corea y Japón son líderes en el mercado de cac-
táceas injertadas. Este proceso se usa para cultivar
cactus difíciles de propagar o que no pueden crecer
de manera independiente, también para acelerar el
crecimiento de especies, salvar alguna planta que
sufre de pudrición de la raíz, o recuperar algún es-
pécimen delicado o especial. El cultivo de cactus in-
jertados requiere una planta receptora, la cual debe
ser compatible con la planta que va a propagarse.
Los cultivadores hacen cortes adecuados en el re-
ceptor y el donante, después los unen para favorecer
el establecimiento de las conexiones vasculares y su
posterior cicatrización. El género Astrophytum es
uno de los más comúnmente injertados; sobresale
el Astrophytum asterias que ha generado el llama-
do “super kabuto”, éste probablemente se formó
de una mutación que apareció en la naturaleza en
un individuo de A. asterias, luego fue propagado en
Japón a través de la polinización cruzada con A. ca-
pricorne. Por ello, el “super kabuto” se considera un
híbrido interespecífico. Los híbridos obtenidos pre-
sentan cambios en la textura, número de costillas y
un variado mosaico de manchas blancas, lo cual los
hace altamente demandados en el mercado.
Se estima que en 2011 la producción de cactáceas
injertadas en Corea superó los 48 millones de espe-
címenes y alcanzó un valor en el mercado de 4 millo-
nes de dólares. Los países que más importan cactus
injertados son los Países Bajos, EUA, China y Canadá.
La popularidad de las cactáceas como plantas or-
namentales también va en aumento en la India
donde se están usando para la decoración de par-
ques y jardines.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 20168
Opuntia47 especies
Coryphanta37 especies
Echinocereus35 especies
Mammillaria93 especies
Principales cactáceascon las que se comercializa
SANTOS, M.S. Y SANTOS, M.L. PÁGINAS 4 A 10
No todas las especies de cactáceas tienen la mis-
ma demanda en el mercado internacional. Las más
solicitadas pertenecen al género Mammillaria (93
especies), Opuntia (47 especies), Coryphanta (37 es-
pecies) y Echinocereus (35 especies). Sin embargo,
existen otras altamente apreciadas por los coleccio-
nistas especializados como los géneros Ariocarpus,
Astrophytum, Aztekium, Epithelantha, Geohinto-
nia, Hamatocactus, Isolatocereus, Leuchtenbergia,
Lophophora, Neolloydia, Obregonia, Pelecyphora,
Strombocactus, Thelocactus y Schlumbergera trun-
Las cactáceas
almacenan grandes volúmenes de agua
y reducen al máximo la superficie de transpiración
cata, conocida como cactus de navidad o de acción
de gracias, también se comercializa ampliamente en
el norte de EUA, Canadá y Europa.
El precio de las cactáceas es muy variable y depende
de su tamaño. Por ejemplo, una planta de dos cm
de Ariocarpus fissuratus puede costar tres dólares,
pero una planta de 10 cm se cotiza hasta en 125
dólares; en Inglaterra las plantas pequeñas
propagadas por semilla pueden costar tres
libras, en tanto que las adultas pueden
cotizarse hasta en 200 libras. Otras espe-
cies han alcanzado precios mayores. Ejem-
plares de Pellecyphora strobiliformis
y Strombocactus disciformis se
han vendido en EUA en 150
dólares y especímenes de
Geohintonia mexicana
y Aztekium hintonii en
2 000.
Existen tres tipos de
mercados para las cactá-
ceas ornamentales: vive-
ros, supermercados y colec-
cionistas privados. Los viveros
proporcionan plantas para jar-
dines residenciales, campos de golf
o áreas públicas, como parques. El paisajismo con
plantas del desierto está ganando popularidad en las
ciudades de zonas áridas donde tienden a sustituir
las plantas que requieren mucha agua. Debido a su
gran tamaño y morfología, las especies más usadas
para el paisajismo son los saguaros (Carnegiea gi-
gantea), las biznagas (Ferocactus spp) y los nopales
(Opuntia spp). Se estima que entre 1998 y 2001 cer-
ca de 100 000 suculentas provenientes de Texas y
México se usaron para proyectos de paisajismo en
Phoenix y Tucson, con un valor aproximado de 3 mi-
llones de dólares.
En México se ha promovido el establecimiento de
Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 9CACTÁCEAS COMO ORNAMENTALES
Silvestre (UMA). Una UMA se define como una uni-
dad de producción o exhibición en un área delimita-
da claramente bajo cualquier régimen de propiedad
(privada, ejidal, comunal, federal), donde se permite
el aprovechamiento de ejemplares, productos y sub-
productos de los recursos de la vida silvestre que re-
quieren un manejo para su operación. La Secretaría
de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat)
es la que autoriza el registro de las UMA, y una vez
que aprueba el Plan de Manejo, se emite el registro
correspondiente.
De acuerdo con datos de la Universidad Nacional
Autónoma de México (2006), en nuestro país exis-
ten 300 viveros relacionados con la comercializa-
ción y propagación de cactáceas, pero sólo siete
producen plantas a gran escala y en conjunto su-
peran el millón de plantas comercializadas al año.
Los productores de cactáceas en nuestro país se
encuentran en 24 estados y la Ciudad de México
(antes Distrito Federal); de los viveros registrados,
el estado de Puebla es el que cuenta con el mayor
número (46 por ciento), seguido por la Ciudad de
México (5.7 por ciento), Morelos (5 por ciento) y
Guanajuato (4.3 por ciento), aunque se descono-
ce los inventarios de cada uno. El establecimiento
de las UMA ha empezado a rendir frutos, pues la
producción masiva a precios económicos disminuyó
el saqueo de cactáceas en el valle de Metztitlán,
Hidalgo.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201610 SANTOS, M.S. Y SANTOS, M.L. PÁGINAS 4 A 10
MARÍA DEL SOCORRO SANTOS DÍAZ
Es doctora en Biotecnología de Plantas del Cinvestav del IPN, unidad Irapuato. Es profesora investigadora de la Facultad de Ciencias Químicas de la UASLP y trabaja en el proyecto “Producción de antioxidantes por callos de Mammillaria candida, Turbinicarpus laui (Cactaceae) y Pyrostegia venusta, estudio de su acción vasodilatadora en anillos de aorta y caracterización de los principales principios activos”.
El otro mercado de cactáceas corresponde a los su-
permercados. Especialmente en California y Arizona,
allí se venden grandes volúmenes y variedades de
cactus miniatura propagados por semilla.
Los coleccionistas privados representan un mercado
especializado interesado principalmente en cactus
raros o en especies recién descubiertas de alto valor
comercial como Pelecyphora strobiliformis, Strombo-
cactus disciformis, Geohintonia mexicana, Aztekium
hintonii y Mammillaria luethyi. Muchas de las espe-
cies solicitadas por los coleccionistas privados no se
consiguen fácilmente en los viveros, por lo que se
recurre a la extracción y colecta ilegal de cactáceas,
en su mayoría mexicanas. Esta práctica ha origina-
do que muchas especies se encuentren en peligro
de extinción. Por ejemplo, una de las dos poblacio-
nes donde crecía Mammillaria herrerae está prácti-
camente acabada, por el saqueo de muchos años.
Las plantas que son saqueadas y extraídas del país
aparecen en otros lugares como la República Checa
o Japón, pues los coleccionistas solicitan plantas de
campo y no cultivadas.
En cuanto a los sitios en la red que ofrecen la venta
de cactáceas, han proliferado: tan sólo en 2005, el
gobierno mexicano contabilizó 3 791 sitios que trafi-
can con 531 especies de cactáceas.
Para lograr la conservación de las cactáceas se re-
quiere del esfuerzo conjunto de instituciones gu-
bernamentales, académicas y de la sociedad civil.
En la UASLP diversas entidades están enfocadas a su
conservación y propagación. Así, el Jardín Botánico
de la UASLP ubicado en el Parque Tangamanga I y el
Jardín de Cactáceas de la Facultad de Agronomía y
Veterinaria, propagan cactáceas por semilla y alber-
gan plantas decomisadas por la Procuraduría Federal
de Protección al Ambiente (Profepa), por su parte en
la Facultad de Ciencias Químicas se propagan por
medio de técnicas de cultivo de tejidos, especies co-
merciales o con algún grado de amenaza.
El mundo de las cactáceas es fascinante y estas es-
pecies nos siguen sorprendiendo por su tenacidad
y resistencia para crecer y desarrollarse en condicio-
nes donde otras no sobrevivirían. Es nuestro deber
protegerlas para evitar su extinción y que las futuras
generaciones sigan gozando y sorprendiéndose por
su belleza natural.
Bibliografía:Bárcenas, R.(2006) Commercial trade of Mexican cacti
and perspectives for their conservation. Biodiversitas, volumen 68, pp. 11-15.
Godínez-Álvarez, H. y Ortega-Báez, P. (2007) Mexican Cactus Diversity: environmental correlates and conservation priorities. Boletín de la Sociedad Botánica de México, volumen 81, pp. 81-87.
Hernández, H. Gómez-Hinostrosa, C. y Bárcenas, R. (2001) Spatial arrangement, and endemism of Cactaceae in the Huizache area, a hot spot in the Chihuahuan Desert. Biodiversity Conservation, volumen 10, pp. 1097-1112.
Myeong Il J., Chang-Hui C. y Jung-Myung L. (2004) Production and breeding of cacti for grafting in Korea. Horticultural Science Focus, volumen 44, pp. 7-10.
http://www.cactusart.biz/schede/ASTROPHYTUM/Astrophytum_asterias/ Astrophytum_asterias_superkabuto/Astrophytum_asterias_cv_superkabuto.htm
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 11
DE FRENTE A LA CIENCIA
MARÍA ELENA ÁLVAREZ–BUYLLA ROCES
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA UNAMCOLUMNA
Con la ciencia puede hacerse mucho, sin ella, poco
En el centro de mi empeño científico han estado las indagaciones que me apasionan: los procesos evolutivos y la ecología evolutiva del desarrollo de los organismos pluricelulares, la regulación de las redes genéticas involucradas en él, así como la emergencia dinámica de los patrones morfológicos en los seres vivos. También me ha guiado un profundo interés en la comprensión de lo que resulta cuando se rompen restriccio-nes biológicas que definen lo vivo, con prioridad en lo que respecta a las enfermedades crónico-degenerativas, el desajuste de los ecosistemas y el entorno biocultural que los acompaña.
También me motiva que mi quehacer tenga un impacto virtuoso en esta sociedad, en este Mé-xico tan querido que nos duele a todos. La ciencia es imprescindible para prevenir, comprender a fondo y resolver los complejos problemas que nos aquejan. Sin la ciencia no hay soluciones efectivas en el ámbito de la salud, el medio ambiente o los conflictos sociales. Sin la ciencia no podrán dete-nerse ni la injusticia que nos ofende, ni hallarse una solución sustentable a la destrucción de bos-ques o de los cuerpos de agua. Con la ciencia se puede hacer mucho y sin ella muy poco.
En momentos como éste, conviene recordar por qué es tan importante festejar la ciencia, sobre todo cuando el régimen económico-político en el ámbito mundial está poniendo en peligro a la ciencia como un campo social, cuya finali-dad histórica ha sido constituir una reserva de objetividad para la sociedad. Los fragmentos siguientes provienen de lo publicado en la sec-ción “Opinión” de La Jornada, el pasado 7 de mayo que llevó por título La ciencia: reserva de objetividad en disputa, redactado por mi y Juan Carlos Martínez García:
En efecto, en este siglo la consolidación del neoliberalismo global se ha visto acompa-ñada por la generalización de negocios que usan la ciencia como su fuente fundamental de legitimación. Muchos de ellos venden pro-mesas sustentadas en supuesto conocimiento científico. Por ejemplo: el uso de marcadores moleculares para la detección, prevención o cura “infalible” de enfermedades complejas, como el cáncer, o el uso de transgénicos para aumentar rendimientos agrícolas y “resolver” el hambre del mundo.
La internalización de la ciencia a la lógica de los mercados globales ha implicado cambios profundos en la lógica misma de operación de la ciencia, dando lugar al desarrollo de tecno-logías que se aplican globalmente, con base en políticas de desregulación de intercambios económicos y estrategias mercadotécnicas bien articuladas, pero divorciadas de la ciencia imperante en un momento particular.
[…] los intereses corporativos globales han impactado y sesgado el quehacer científico, tanto en entidades y proyectos públicos como en los privados. Esto se traduce en la reducción de la diversidad de los enfoques y las pregun-tas del quehacer científico, en la aceleración de la gestación del conocimiento aplicable, en la promoción mercadotécnica de tecnolo-gías obsoletas, insuficientes o riesgosas, en la preeminencia de objetivos de producción más que en la curiosidad durante la praxis científi-ca, en la erosión del comunalismo a favor de la privatización del conocimiento mediante títulos de propiedad o patentes, así como la desestimación estratégica de la complejidad ya innegable de los sistemas implicados (sa-
lud, agricultura, etcétera), evitando, por tanto, el principio de precaución.
[…] La ciencia bajo peligro puede actuar en detrimento de la humanidad, nos dice Pierre Bourdieu. Cuando las aplicaciones tecnocien-tíficas no son precedidas de ciencia básica rigurosa, es urgente someterlas a un intenso escrutinio teórico. Es imprescindible trans-parentar qué interacciones de la ciencia con otros campos sociales están determinándo-las por encima de los principios del conoci-miento, para asegurar la preeminencia de la objetividad.
A pesar de esta realidad innegable, triste quizás, existen en el mundo investigadores comprometi-dos con el quehacer científico, con responsabilida-des ética, social e independencia de intereses que no sean los del conocimiento. De ahí lo relevante de promover redes de científicos comprometidos con la sociedad y el ambiente. Yo soy afortunada por haber tenido el ejemplo de mis queridísimos padres, Elena Roces y Ramón Álvarez-Buylla, am-bos investigadores en fisiología, apasionados por el saber y por la enseñanza. De ellos aprendí que la ciencia debe ir aparejada con un sentimiento de servicio, de dar y enseñar con humildad, pues, como decía mi padre: “todos somos principiantes; sabemos aún muy, muy poquito, ¡y entendemos aún menos!”.
Extracto del discurso pronunciado por la doctora María Elena Álvarez–Buylla Roces en la ceremonia en que la Universidad Autónoma de San Luis Potosí le entregó el Premio Nacional a la Investigación Científica y Tecnológica 2016. 26 de septiembre de 2016.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201612 BENAVIDES, L. PÁGINAS 12 A 17
La reforma energética del 2008 y 2014Lo que se ha llamado reforma energética (RE) en México es un conjunto de reformas a la Cons-
titución Política de los Estados Unidos Mexicanos y otros textos legislativos de la nación, que
se han dibujado como posibilidad o se han concretado, desde el sexenio presidencial de Felipe
Calderón (2006-2012). Hay que tener claro que, para que estas reformas hayan ocurrido en el
siglo XXI, fue necesaria una serie de cambios de políticas nacionales, impulsadas desde la dé-
cada de 1980 por los presidentes Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari, que pueden
ubicarse dentro de las tendencias globales hacia las economías neoliberales y de globalización/
integración de los mercados mundiales. Este tema no puede tratarse aquí con cabal amplitud,
pero es necesario mencionarlo para contextualizar la discusión: múltiples factores y la histo-
ricidad, inercia y legado de estos rigen el panorama actual. El presente es producto histórico.
Reformaenergética: posibles impactos ambientales y sociales
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a.es
LUCÍA BENAVIDES MONDRAGÓN [email protected] DE LA MAESTRÍA EN CIENCIAS AMBIENTALES DE LOS PROGRAMAS MULTIDISCIPLINARIOS EN CIENCIAS AMBIENTALES
Recibido: 11/05/2016Aceptado: 24/09/2016
Palabras clave: Reforma energética, pueblos indígenas, autodeterminación, participación pública-privada, soberanía energética.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 13ENERGÍA, FUTURO Y COMUNIDADES
En el 2008, el entonces presidente Felipe Calderón
propuso e impulsó algunos cambios en la legislación
sobre energía en el país, que se concretaron en siete
decretos presidenciales aprobados por el Congreso
de la Unión (Vargas Hernández, 2003). El punto me-
dular era, según algunos académicos, completar la
reforma neoliberal de Petróleos Mexicanos (Pemex)
para permitir la inversión extranjera directa en con-
tratos (Ángeles, 2014) con la paraestatal. Los decre-
tos que conformaron la reforma energética en ese
momento se resumen a continuación (Vargas, 2003):
a) Se reformó el reglamento del artículo 27o. de la
Constitución (referente al suelo y subsuelo) en el
ramo del petróleo.
b) Se reformó el artículo 33o. de la Ley Orgánica de
la Administración Pública Federal.
c) Se reformaron, adicionaron y derogaron diversas
disposiciones de la Ley de la Comisión Reguladora
de Energía.
d) Se expidieron nuevas leyes:
De Petróleos Mexicanos (se abrogó la anterior
Ley Orgánica)
Para el Aprovechamiento de Energías Reno-
vables y el Financiamiento de la Transición
Energética
Para el Aprovechamiento Sustentable de la
Energía
De la Comisión Nacional de Hidrocarburos
e) Se hicieron adiciones a los artículos 3o. de la Ley
Federal de las Entidades Paraestatales y 1o. de la
Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados
con las Mismas.
f ) Se adicionó un párrafo (tercero) al artículo 1o. de
la Ley de Adquisiciones Arrendamientos y Servi-
cios del Sector Público.
g) Se creó la Comisión Nacional de Hidrocarburos
(CNH).
Esta primera reforma se continuó y consolidó en el
sexenio actual, con Enrique Peña Nieto como presi-
dente. En 2013 y 2014 se publicaron decretos apro-
bados por el Congreso de la Unión por medio de
los cuales:
a) Se reformaron los artículos 25o., 27o., 28o. cons-
titucionales.
b) Se crean dos órganos reguladores, desconcen-
trados de las secretarías: la Agencia Nacional de
Seguridad Industrial y de Protección al Medio
Ambiente del Sector Hidrocarburos, y el Centro
Nacional de Control de Energía.
c) Se solicitó al Congreso de la Unión la creación
de leyes secundarias y los reglamentos necesarios
para ajustar el marco jurídico mexicano en fun-
ción de los nuevos cambios.
Quizá lo más relevante del conjunto de reformas
conocidas como reforma energética culminadas
en 2014, es que la exclusividad de propiedad que
tiene la nación sobre el petróleo del subsuelo se
detiene una vez extraído, pues a partir de la refi-
nación y la petroquímica, los productos pueden ser
propiedad privada (Torres Flores, 2014). Además,
las actividades reservadas a la nación (exploración y
extracción) se realizarán ahora mediante contratos
con particulares, nacionales o extranjeros, que por
supuesto sólo querrán ingresar al trato si les resulta
costeable. La energía eléctrica puede ahora ser ge-
nerada por particulares, y sólo la distribución públi-
ca y su planeación queda exclusivamente en manos
del Estado, pero también puede ser realizada por
un tercero por medio de un contrato. Para decirlo
brevemente, todas las actividades relacionadas con
la extracción, generación y distribución de energía
está abierta a la inversión de empresas privadas.
Habría que precisar que en las leyes secundarias, se
limitó el gasto de Pemex para desarrollar ciencia y
tecnología a 5 000 millones de pesos.
El debate se polarizó, grosso modo, de esta manera:
por un lado se argumentaba que la RE era en reali-
dad una velada privatización de los bienes públicos
y que, como en otras ocasiones, las reformas no
iban a redundar en beneficios generalizados para los
mexicanos. Partidos políticos (autodenominados “de
izquierda”, como el Pártido de la Revolución Demo-
crática) así como una buena parte de la academia
liberal argumentaron que la liberación de capitales
estatales a la inversión privada e internacional con-
duce a la privatización de bienes comunes que his-
tóricamente había perjudicado al país: Ferrocarriles
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201614 BENAVIDES, L. PÁGINAS 12 A 17
de México, Teléfonos de México (Telmex) y el Fondo
Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) se cita-
ron como ejemplos. Se desmintieron los argumentos
principales dados por el gobierno federal, demos-
trando por ejemplo, que las reservas probadas eran
al menos dos veces mayores de lo que aseguraban
los funcionarios, y que la RE fue llevada a cabo por
la necesidad de los Estados Unidos de América de
acceder a hidrocarburos más baratos, y no por algu-
na preocupación por el bienestar de los mexicanos
(Saldaña, 2016).
Además, se afirmaba que era en realidad una opor-
tunidad de modernizar y hacer eficiente el sector
energético nacional, en particular a Pemex, que su-
fre atraso tecnológico e insuficiencia de presupuesto
para explorar y extraer, y que estas medidas ten-
drían beneficios económicos para todos. El partido
que representa el presidente afirmó en el Senado
que la RE traerá un crecimiento anual de 3 por cien-
to para el 2025. El sector conservador-empresarial,
representado en un debate por Juan Pardinas (31
de julio de 2014) afirmó, sin cifras que lo susten-
taran, que Estados Unidos de América no necesita
más petróleo.
Pemex aseguró en su informe de labores de 2008
que procuraría la participación de inversionistas y
contratistas nacionales, y que tenía el propósito de
aumentar las adquisiciones nacionales a 25 por cien-
to. ¿Porque no 51? ¿Cómo se incentivará la participa-
ción nacional sin candados, si las grandes petroleras
trasnacionales tienen capitales mucho más fuertes y,
por ende, más competitivos que los nacionales?
Contra el crecimiento económico prometido por el
Partido Revolucionario Institucional, de 3 por ciento
los críticos de la reforma argumentan que ésta pro-
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NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 15ENERGÍA, FUTURO Y COMUNIDADES
vocará que la renta petrolera se fugue al extranjero,
lo que potencialmente propiciará el aumento de la
pobreza, incrementará la polarización en la concen-
tración de la riqueza y provocará la desaparición final
de la industria petrolera mexicana (Muciño. 2014. Sal-
daña, 2016). Se puede añadir que 3 por ciento de cre-
cimiento (sin especificar de qué tipo) a cambio de per-
der las utilidades más importantes provenientes de la
industria petrolera, desincentivar el desarrollo de cien-
cia y tecnología nacionales y seguir apostando por la
primacía de los hidrocarburos en la matriz energética
(Torres, 2014) en lugar de apostar al desarrollo de tec-
nologías más limpias, es un mal negocio.
Impactos ambientales de la reforma energéticaLas regulaciones ambientales se pusieron en el últi-
mo lugar de prioridad cuando se determinó el pla-
zo de generación de las leyes secundarias (Torres,
2014). La RE no cuenta con ejes transversales de
respeto a los derechos humanos o de precauciones
ante el cambio climático (Cemda, 2014). En particu-
lar, es disonante con respecto a la política climática y
las metas internacionales de reducción de emisiones
de gases de efecto invernadero (GEI), pues procura
el aumento y no la reducción de la extracción y uso
de hidrocarburos. A continuación algunos detalles:
La RE prioriza la generación de hidrocarburos como
base de la matriz energética nacional, al tiempo que
se aleja de la posibilidad de incentivar el desarrollo tec-
nológico y el uso cotidiano de las energías renovables
(Torres, 2014). Actualmente la matriz energética nacio-
nal tiene 91.5 por ciento de presencia de hidrocarbu-
ros. La RE no contempla la disminución de
esta dependencia, sino su aumento,
pues al incentivar el crecimiento
del sector, no deja espacio para
el desarrollo de las energías re-
novables. Además de incurrir
en inexactitudes y confusio-
nes al establecer la captura y
secuestro de carbono como
una energía renovable, y al
incluir la energía nuclear como
una posible alternativa de energía
limpia (Cemda, 2014).
a) Las áreas Ramsar no están protegidas por la RE.
La extracción de hidrocarburos se limita a las Áreas
Naturales Protegidas, pero no así la generación de
energía geotérmica ni eléctrica. En el conjunto de re-
formas de la RE, los mecanismos para la protección
a los ecosistemas y la salud ambiental son escasos, y
no hay, por ejemplo, mención de principios precau-
torios que protejan las regiones y a sus habitantes
ante la posibilidad de daños (Cemda, 2014).
b) El escenario actual de generación de GEI, de seguir
su tendencia, provocará que para el año 2020 las
emisiones incrementen 28 por ciento. Al acelerarse
la extracción de hidrocarburos y la generación y que-
ma de combustibles fósiles, este incremento será,
probablemente, aún mayor (Cemda, 2014).
c) Con la RE se creó la Agencia Nacional de Segu-
ridad Industrial y Protección al Medio Ambiente
(Asea), que tiene, según el análisis del Centro Mexi-
cano de Derecho Ambiental (Cemda, 2014), faculta-
des concurrentes o iguales a las que se establecen
para otros organismos de regulación ambiental en
la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protec-
ción al Ambiente (LGEEPA), como la Secretaría de
Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat)
y la Procuraduría Federal de Protección al Ambien-
te (Profepa). Esto puede muy probablemente causar
contradicciones en la legislación y un debilitamiento
general del sector ambiental del gobierno.
¿Cómo podría afectar la reforma energética a los pueblos indígenas?
La RE establece que las actividades re-
lacionadas con la generación de
energía son de interés público y
tienen, por lo tanto, prioridad
sobre cualquier otro uso de la
superficie del suelo. Esto es
probablemente uno de los
enunciados que más ponen
en riesgo los modos de sub-
sistencia de los pueblos indí-
genas, pues de ser deseadas
sus tierras para producir energía
(parques eólicos, por ejemplo),
La energía eléctrica puede
ser generada por particulares, su
distribución pública y planeación queda en
manos del Estado
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201616 GBENAVIDES, L. PÁGINAS 12 A 1719
instalar plantas de refinamiento, puntos de alma-
cenamiento o cualquier otro uso relacionado con
los energéticos, sus tierras pueden ser ocupadas y
quedar, con respecto al propietario, en condición
de servidumbre u ocupación temporal. No se enun-
cian mecanismos para evaluar la viabilidad y con-
veniencia de un proyecto energético con respecto
a los beneficios y conveniencia de la conservación
de un sitio en las condiciones en las que se encuen-
tre en ese momento. Estas ocupaciones o servi-
dumbres públicas, al no poder ser rehusadas por
los pobladores si el trato no les parece beneficioso,
podrían fácilmente convertirse en expropiaciones
forzadas, pues además no se reconoce, en ningún
decreto de la RE, el derecho de las comunidades
a ser consultadas ni consideradas en la planeación
de proyectos energéticos en sus regiones (Cemda,
2014). Numerosos conflictos a lo largo de la historia
reciente de México dan cuenta de la injusticia y vio-
lencia del trato hacia los pobladores indígenas (y no
indígenas), cuando se trata de instalar gaseoductos
o plantas termoeléctricas (Concha, 2015; Boege,
2013). La figura de servidumbre legal hará más sen-
cillos los procesos de despojo y violación de los de-
rechos de estos pueblos. Desde 2015 se documen-
tó que al menos 13 territorios indígenas (totonacas,
chontales y popolucas, entre otros) estaban ya en
peligro, pues Pemex había asignado contratos de
exploración de hidrocarburos en la llamada ‘ronda
cero’. La Comisión Nacional de Derechos Humanos
rehusó atender el caso y argumentó que no entraba
en su jurisdicción (Montalvo, 2015).
Al respecto, el Centro Mexicano de Derecho Am-
biental (Cemda, 2014) afirma:
Los impactos de estas disposiciones pueden pro-
vocar daños, menoscabos y perjuicios a los Dere-
chos Humanos reconocidos por la Constitución
y los tratados internacionales de los que México
es parte, entre los que se incluyen la violación
al derecho a un medio ambiente sano, derecho
humano al agua, derechos de las comunidades
y pueblos indígenas, derechos de propiedad, de
trabajo, de alimentación, derechos de acceso a la
información, de participación y de acceso a la jus-
ticia, y los principios de no regresividad en materia
de Derechos Humanos.
Las comunidades indígenas no fueron consultadas
(como no lo fue ningún otro sector de la sociedad)
durante la confección de la RE. Los pueblos indí-
genas tienen, por mandato constitucional, derecho
al uso preferencial de los recursos naturales. La RE
contraviene, con la figura de “utilidad pública” que
hemos mencionado anteriormente, este uso prefe-
rencial. A propósito de la consulta, el secretario de
energía, Pedro Joaquín Coldwell, aseguró en una
columna de el periódico El Financiero en el año
2015, que la secretaría a su cargo actuaba respe-
tando el derecho de los pueblos a ser consultados.
Presentó cuatro ejemplos, sin referencias para ma-
yor información. Cemda y otros actores han demos-
trado, tras el análisis de la legislación de la reforma
energética, que la consulta no está prevista en sus
leyes y que el Estado tiene la posibilidad de obligar
a los moradores de cierta región a desplazarse, aún
cuando hayan sido consultados y el resultado haya
sido negativo para el proyecto (Cemda, 2014).
Ya que en los decretos de 2014 de la RE se establece
que el objetivo de los contratos y asignaciones de
Pemex es brindar ingresos para el Estado, sin men-
cionar, por ejemplo, la seguridad nacional en mate-
ria energética, el crecimiento o mejora del abasto
a comunidades marginadas, se puede suponer que
el objetivo que se persigue no tiene que ver espe-
cíficamente con mejorar la calidad de vida de los
mexicanos, sino acrecentar los ingresos del Estado.
Podemos suponer que el gasto estatal se distribuirá
de la misma manera como hasta ahora, sin benefi-
cio particular para los pueblos indígenas.
ConclusionesLa situación del sector energético en México es alar-
mante. Al parecer las reformas emprendidas por los
últimos dos representantes del ejecutivo federal, no
tienen entre sus prioridades ni la mejora de la situa-
ción económica de la mayoría de los mexicanos, ni
el cuidado del ambiente en el desarrollo del sector.
La sociedad en su conjunto está perdiendo riqueza,
pues el panorama más probable es la exportación
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 17ENERGÍA, FUTURO Y COMUNIDADES
de la parte más importante de las utilidades deri-
vadas de la extracción y procesamiento de hidro-
carburos. Si bien una reforma del sector energético
no era en su momento un mala idea, pues segura-
mente muchos componentes de Pemex, de la Co-
misión Federal de Electricidad y otros actores del
sector podrían haber sido ajustados para funcionar
mejor, ser más eficientes y proporcionar un mejor
servicio a los mexicanos, parece que la RE perdió
esa oportunidad y más bien está sirviendo a inte-
reses distintos a los mencionados. Quizá el ejemplo
más representativo es la limitación del presupuesto
para ciencia y tecnología en Pemex. No se limitó el
monto del beneficio privado que un contrato puede
generar, pero sí el destinable al desarrollo científico
que sería, en última instancia, propiedad de la na-
ción. Increíble, pero cierto.
Si los pueblos indígenas y las comunidades rurales se
encontraban ya en un estado de relativa indefensión,
con la RE su vulnerabilidad es mayor, con la introduc-
ción de las figuras jurídicas de servidumbre legal y
ocupación temporal (donde lo temporal, por cierto,
está en entredicho, pues una ocupación autorizada
por un juez puede implicar la construcción de una
planta generadora de energía, difícilmente reversi-
ble). Esta vulnerabilidad no es exclusiva de dichas co-
munidades. El deterioro ambiental que seguramente
generará esta RE afectará a todos los mexicanos. La
fuga de utilidades, el detrimento de la ya de por sí
escasa generación de tecnología propia, la preferen-
cia de trabajadores extranjeros, que ya se ha visto en
los primeros proyectos de compañías trasnacionales
que invierten en energía en México, y generan muy
pocos empleos directos para mexicanos, son sólo al-
gunas de las consecuencias de esta reforma.
A pesar del balance negativo, y dado que quienes
promueven la reforma han anunciado aumentos en
la productividad y sustentabilidad del sector energía,
así como la creación de empleos y generación de
tecnología, resta aún la posibilidad de que legislado-
res y otros actores clave ejecuten la reforma con gran
sentido de responsabilidad, logrando que la nueva
configuración jurídica del sector opere a favor de la
prosperidad de los mexicanos y la sustentabilidad
de nuestra economía. Esta meta no es irrealizable,
dependerá de los tomadores de decisiones y de la
ciudadanía que se mantenga al tanto, informada y
participando.
Nuestro papel como universitarios debiera ser rea-
lizar crítica informada y responsable. También po-
dríamos incidir en la realización de mejores políticas
públicas y legislación, a través de mesas de traba-
jo con los funcionarios pertinentes, avanzando de
esta y otras maneras en una agenda de incidencia
política. Otras maneras de participar podrían ser: la
organización de debates en recintos académicos, la
discusión en clase, la propuesta de proyectos aca-
démicos aplicados a los problemas nacionales para
promover que los jóvenes estudiantes se involucren
en la conformación del país que les gustaría tener.
Bibliografía:Ángeles Cornejo, S. (2009). Crónica de una muerte
anunciada: La reforma energética propuesta por el gobierno de Calderón : Memoria histórica. Dimensión Económica, Revista Digital, Instituto de Investigaciones Económicas UNAM.
Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda). (2014). Posibles impactos ambientales de la reforma energética. Extraído de: http:/www.cemda.org.mx/posibles-impactos/
Consulta Indígena Juchitán. (2015) Dossier: Reforma energética y pueblos indígenas. Extraído de: https://consultaindigenajuchitan.files.wordpress.com/2015/01/dossier-reforma-energetica-y-territorios-indc3adgenas-feb-2015.pdf
Torres Flores, R. (2014). ¿La reforma energética, coadyuva al desarrollo?. Economía. UNAM. Extraído de: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-952X2014000200007
Vargas Hernández, J. (2003). Desarrollo de la legislación ambiental en México. INECC. Extraído de: http://www2.inecc.gob.mx/publicaciones/consultaPublicacion.html?id_pub=395
LUCÍA BENAVIDES MONDRAGÓN
Es arquitecta-urbanista por la UNAM y actualmente es estudiante de la Maestría en Ciencias Ambientales de los PMPCA en la UASLP. Por el momento radica en Alemania, en donde realiza una parte de sus estudios de maestría e investiga el uso de recursos naturales que hacen las ciudades, la relación ambiental región-ciudad, y las posibilidades de involucramiento ciudadano para tener ciudades más sustentables, sanas y prósperas.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201618 CASILLAS, M. Y MARTÍNEZ G. PÁGINAS 18 A 21
Regeneración ósea
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201618
MIGUEL ÁNGEL CASILLAS [email protected] GABRIEL ALEJANDRO MARTÍNEZ CASTAÑÓN FACULTAD DE ESTOMATOLOGÍA
Recibido: 09/03/2016Aceptado: 01/09/2016
Palabras clave: Hueso, regeneración ósea, nanomateriales, plata y quitosán.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 19
En el campo de la cirugía oral y maxilofacial siempre
ha existido un gran interés en la utilización de mate-
riales que promuevan la regeneración ósea, a pesar
de que el hueso tiene una gran capacidad de rege-
nerarse por sí solo, la reparación de los defectos de
geometría compleja es uno de los grandes retos a los
cuales se enfrentan los cirujanos, no sólo en odon-
tología, sino en la medicina en general, además, su
objetivo no sólo es la regeneración sino la calidad de
la misma y el tiempo de reparación.
El primer trasplante de hueso del que se tiene infor-
mación fue realizado por Job Janszoon van Meeke-
ren en el siglo XVII, a partir de ese momento comen-
zó una carrera en la investigación de biomateriales
que llega hasta nuestros días en la búsqueda de un
material que promueva las tres características desea-
bles de un injerto óseo:
a) Osteoconducción: es la propiedad de los mate-
riales de injerto para funcionar como un andamio
de soporte para las células osteogénicas permi-
tiendo la inclusión celular y promoviendo la neo-
vascularización.
b) Osteoinducción: es la capacidad del injerto para
inducir que las células madre se diferencien en cé-
lulas óseas maduras, asociado principalmente con
la presencia de factores de crecimiento dentro
de los injertos y proteínas morfogenéticas óseas
(BMP, por sus siglas en inglés).
c) Osteogénesis: es la capacidad del injerto para
formar nuevo hueso dependiente de
la presencia de células vivas os-
teoprogenitoras en el injerto.
Ahora bien, es de amplio co-
nocimiento en la literatura
que el hueso autógeno es-
ponjoso es el único injerto
capaz de cumplir estas tres
características, por lo tanto
se le considera el tratamiento
gold standard de la regeneración.
¿A qué nos referimos con hueso au-
tógeno? Por definición es todo aquel material óseo
que se toma de una zona diferente, distante o no, del
mismo organismo, para reconstruir un área de interés.
¿Pero qué es lo que lo vuelve tan valioso para la re-
generación? Básicamente es su alta biocompatibilidad
con la zona receptora: al tener su origen en el mismo
organismo, genotípicamente es idéntico al receptor,
por lo que las probabilidades de rechazo son mínimas
o nulas, además de presentar el complejo proteico y
de señalización que promueve satisfactoriamente la
regeneración; sin embargo, presenta múltiples des-
ventajas, como someter al paciente a una intervención
quirúrgica en una zona diferente a la de interés y a la
anestesia general con los riesgos que ésta conlleva,
aumentar la morbilidad y riesgo de infección, además,
de manera recurrente hay que intervenir quirúrgica-
mente un par de ocasiones, ya que este material óseo
sufre colapsos, con lo cual se pierde la arquitectura y
continuidad del defecto reparado.
Debido a lo antes mencionado, ha surgido un amplio
interés en generar biomateriales que cumplan no sólo
con las características de los autoinjertos sino que los
mimeticen y disminuyan al máximo sus desventajas.
En este punto, la nanobiotecnología tiene su razón de
ser en el campo de la regeneración ósea y cumple un
papel muy importante en el avance obtenido en los
últimos 10 años en esta área de la investigación.
Los científicos han desarrollado una
amplia variedad de materiales sin-
téticos, sin embargo, todos ellos
tienen como objetivo formar
un andamio que permita la
inclusión del complejo celu-
lar y que se lleve a cabo un
libre intercambio de nutrien-
tes, gases y metabolitos de
deshecho dentro de su ma-
triz, esto permite que al mismo
tiempo que se lleve a cabo el
depósito de material osteoide (que
ERA DE NANOBIOTECNOLOGÍA
El primer trasplante de
hueso lo realizó Joe Janszoon Van
Meekeren en el siglo XVII
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201620 CASILLAS, M. Y MARTÍNEZ G. PÁGINAS 18 A 21
posteriormente será mineralizado), se degrade el
injerto, idealmente a una velocidad que permita un
proceso de reparación adecuado, ya que la presencia
extendida del injerto lo deteriora.
Los materiales sintéticos representan una alternativa
a los inconvenientes que se presentan con los injer-
tos convencionales y proporcionan una matriz con
arquitectura manipulable donde se generará el tejido
nuevo o pueden servir como vehículo de promotores
de regeneración, como las proteínas morfogenéticas
óseas, o algunas drogas.
¿Cuál es la clasificación de estos biomateriales?De acuerdo con el objetivo y su aplicabilidad, pue-
den clasificarse en varias vertientes, sin embargo, en
este artículo hablaremos de los materiales utilizados
como matriz, los cuales pueden incluir los llamados
‘polímeros’ y ‘cerámicos’ o combinaciones de am-
bos, estos engloban una serie de materiales que
presentan características particulares y cada uno de
ellos tiene aplicaciones específicas.
Entre los polímeros naturales podemos encontrar
materiales que han tenido un amplio uso en rege-
neración ósea, como el colágeno tipo I, el cual re-
presenta 90 por ciento de la matriz extracelular de
manera normal, además de ser parte importante en
el depósito del nuevo material osteoide, sin embar-
go, su costo es elevado.
Otras alternativas de polímeros son la fibrina, el
ácido hialurónico y el quitosán, todos ellos son al-
tamente biocompatibles y su característica principal
es la osteoconducción pero a pesar de ello tienen
una baja estabilidad mecánica, por lo que se han
combinado con otros materiales para compensar sus
desventajas.
El quitosán es un biopolímero que se obtiene de la
desacetilación de la quitina, un desecho de la indus-
tria camaronera que en investigación se ha utilizado
por sus propiedades bactericidas y antifúngicas que
además ha sido usado en modelos de regeneración
ósea en diversas áreas.
Asimismo, entre los polímeros sintéticos que han
tenido mayor aceptación debido a sus propiedades
de degradación están el polímero de polilactida-co-
glicólida (PLGA) y policaprolactona (PCL).
En cuanto a los materiales cerámicos, éstos proveen
mayor fuerza a la tensión, con lo cual son altamente
resistentes a la deformación, pero es precisamente
esta característica el inconveniente en su utilización
como injertos óseos.
Entre ellos podemos encontrar los sulfatos de calcio,
vidrios bioactivos y fosfatos de calcio; de estos últi-
mos se desprende un material al cual se ha recurrido
bastante en la generación de injertos óseos, la hidro-
xiapatita, debido a que es el constituyente principal
de huesos y dientes, hasta en 70 por ciento del peso
seco del tejido óseo.
Ahora, con el interés de proporcionar un nuevo bio-
material con atributos físicos, químicos y mecánicos
que en sinergia mejoren la capacidad regenerativa
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 21ERA DE NANOBIOTECNOLOGÍA
MIGUEL ÁNGEL CASILLAS SANTANA
Maestro en Ciencias Biomédicas Básicas, Biomedicina Integrativa y Molecular por la Facultad de Medicina de la UASLP. En la actualidad realiza el Doctorado en Ciencias Odontológicas y nanoBiomateriales en la misma facultad donde desarrolla el proyecto “Uso de nanohidroxiapatita-quitosán y nanopartículas de plata–quitosán en la osteoregeneración de defectos de tamaño crítico.”
ósea, el Laboratorio de Nanobiomateriales del Doc-
torado en Ciencias Odontológicas de esta universi-
dad se ha dado a la tarea de sintetizar dos bioma-
teriales que actualmente se evalúan en un modelo
experimental llamado ‘defecto óseo de tamaño crí-
tico’, definido como un defecto que no reparará en
ningún momento del curso temporal de su evolu-
ción, es decir, no podrá repararse por sí solo a menos
que exista una intervención externa como la coloca-
ción de un injerto.
Los materiales sintetizados y que actualmente se eva-
lúan en nuestro laboratorio son: nanohidroxiapatita-
quitosán y nanopartículas de plata-quitosán; la plata
ha sido utilizada históricamente con fines antibacte-
rianos como apósito en pacientes con quemaduras de
piel o heridas y recientemente se ha comprobado que
tiene un papel importante en su regeneración, por lo
cual creemos que puede tener un papel similar en te-
jidos duros. Sin embargo, existe una gran controversia
en la literatura científica acerca de la utilización de la
plata en materiales de injerto, ya que sus propiedades
bactericidas o regenerativas dependen del tamaño,
forma y concentración de la misma, pero son esas
mismas propiedades las que pueden promover toxi-
cidad en los tejidos, por lo que además de evaluar el
proceso de regeneración, también se debe observar la
biocompatibilidad y distribución a órganos importan-
tes (hígado y riñones) de estos materiales.
Hasta el momento, no se ha observado ningún cam-
bio en la mortalidad, efectos adversos o diferencias
significativas en el comportamiento de los animales
así como ninguna modificación en la ganancia de
peso durante el periodo del estudio.
De acuerdo con los exámenes hechos en modelos ex-
perimentales, no hay modificación en la ultraestructu-
ra y morfología de los tejidos, además, no se han ob-
servado infiltrados inflamatorios que indiquen rechazo
de los injertos, aunado a esto, los valores sanguíneos
de marcadores de daño hepático y renal permanecen
sin cambios, lo que nos sugiere un panorama bastante
favorable en la utilización de estos materiales.
Un hallazgo radiográfico muy importante, fue que
las nanopartículas de plata-quitosán, a las cuatro se-
manas de su colocación como injerto, lograron un
67.5 por ciento de regeneración ósea y cuando fue-
ron evaluadas a las ocho semanas lograron una for-
mación de hueso de un 79.3 por ciento, recordemos
que este proceso de regeneración fue analizado en
defectos de tamaño crítico, es decir, defectos que ja-
más repararían, además, los porcentajes alcanzados
con este material igualan o superan a los reportados
para otros materiales utilizados actualmente, inclusi-
ve a aquellos establecidos para el hueso autógeno.
Ciertamente se requieren más investigaciones sobre
los mecanismos básicos de participación de estos
materiales en la regeneración ósea, sin embargo,
con nuestro trabajo están estableciéndose bases
para continuar con una investigación prometedora
en uno de los campos de mayor interés en cirugía
oral y maxilofacial y en cualquier área de la medicina
donde se precise promover la regeneración ósea.
El reto es sustituir o reducir al mínimo la utilización
de los injertos óseos convencionales y sus conocidas
desventajas, además de mimetizar las propiedades
osteoconductoras de los polímeros sintéticos y natu-
rales, además de llevar una función de matriz envol-
vente que sirva de anclaje y soporte celular dinámico,
no como un injerto estático y forzosamente poroso,
como lo hacen los injertos actuales, sino que permita
el libre movimiento del complejo celular, pero con la
fuerza mecánica sustancial para soportar las fuerzas
ejercidas por los tejidos blandos.
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Los desórdenes de trauma acumulativo (DTA)
constituyen un conjunto de enfermeda-
des de los tejidos blandos, caracte-
rizados por molestias, debilidad,
incapacidad para generar mo-
vimientos o trabajos que causan
dolor continuo. Estos desórdenes
son causados principalmente por una serie de fac-
tores de riesgo, como las actividades repetitivas, la
carga muscular estática, las posturas inadecuadas
del cuerpo, etcétera, que en general están asociadas
con el sobreuso y sobreesfuerzo. Igualmente exis-
ten factores no ocupacionales como los individuales
(peso, talla, sexo, edad, estado de salud, caracterís-
ticas genéticas) y ambientales (temperatura extrema,
ruido, humedad, adecuaciones de la ropa) que pue-
den contribuir a dichos desórdenes, (Putz, A., 1988).
Diseño ergonómico para la prevención de desórdenes de trauma acumulativo
Los DTA tienen consecuencias de largo alcance para
las personas en todas las áreas profesionales. Estos
trastornos se clasifican como la principal causa de dis-
capacidad entre la fuerza de trabajo. Se estima que
en Estados Unidos de América (EUA), Canadá y Eu-
ropa, los trastornos musculoesqueléticos relacionados
con el trabajo afectan a más de 30 por ciento de la
población trabajadora activa (Ratzon, N. y Jarus, T.,
2009). Las personas con desórdenes musculoesque-
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MARTHA LETICIA VILLA [email protected] DE LA FACULTAD DEL HÁBITAT
Recibido: 11/05/2016Aceptado: 29/09/2016
Palabras clave: Ergonomía, DTA y diseño.
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PREVENCIÓN DE DTA
léticos constituyen de 56 a 60 por ciento de todos
los problemas de salud relacionados con el trabajo en
EUA, por lo que representan una carga importante
para las instituciones de cuidado de la salud, y para
los empleadores debido a la ausencia en el trabajo. La
detección temprana y el tratamiento se recomiendan
con el fin de minimizar o evitar días de trabajo per-
didos y la cronicidad, (Brouwer, B. y Faris, M., 2006).
Baldwin, M. y Butler, R. (2006) men-
cionan que la mayoría de los tra-
bajadores, incluso con lesiones
más graves, vuelven al trabajo
al menos una vez después
de la lesión, pero la primera
vuelta no significa necesaria-
mente el fin del periodo de
incapacidad para el trabajo
asociado con un trastorno de
las extremidades superiores, ya
que dos tercios de los trabajadores
que experimentaron dicha incapacidad
al volver al trabajo, se ausentaron debido a la
lesión original. Este problema se asocia con la falta
de un diagnóstico que tenga en cuenta la interfaz del
sistema, es decir, las condiciones de la estación de tra-
bajo y las tareas que realiza el trabajador durante su
jornada laboral, ya que muchas veces, al recibir sólo
un diagnóstico clínico y regresar, no se ataca el pro-
blema de fondo y el paciente vuelve a recaer debido a
que los grupos musculares lesionados son sometidos
a las mismos factores que generaron el problema.
Los costos de los desórdenes de trauma acumula-
tivo en las extremidades superiores incluyen los di-
rectos de atención médica para el tratamiento de la
enfermedad y los indirectos que incluyen pérdidas
de productividad, administrativos, de capacitación a
trabajadores de reemplazo y psicosociales asociados
con los trabajadores lesionados.
Los DTA relacionados con el trabajo son un grupo de
trastornos dolorosos de los músculos, tendones y ner-
vios, algunos de los ejemplos más frecuentes en el
miembro superior son la tendinitis, sinovitis, epicon-
dilitis y el síndrome del túnel carpiano, estos se han
convertido en una de las reclamaciones más comunes
de indemnización de los trabajadores en las últimas
dos décadas, (Baldwin, M. y Butler, R., 2006).
Los problemas en brazos y manos surgen de accio-
nes como agarrar, sujetar, torcer, entre otras, en las
que hay alta repetitividad y/o aplicación
excesiva de fuerza. Los DTA se aso-
cian con patrones de trabajo que
incluyen: repeticiones conti-
nuas, posturas fijas, fuerzas
concentradas en pequeñas
partes del cuerpo, como las
manos o muñecas y un ritmo
de trabajo que no permite la
recuperación suficiente entre
los movimientos. Su efecto es
aún mayor si estos patrones se
combinan.
Los DTA pueden progresar en etapas de leve
a grave. La etapa temprana está acompañada de do-
lor y cansancio de la extremidad afectada durante
el turno de trabajo, que desaparecen en la noche
y durante los días de baja laboral, sin reducción del
rendimiento; en la etapa intermedia, el dolor y can-
sancio ocurren temprano en el turno de trabajo y
persisten en la noche, reduciendo la capacidad para
el trabajo repetitivo; en la etapa tardía, el dolor, fati-
ga y debilidad persisten en el reposo, acompañados
de incapacidad para dormir y realizar tareas livianas.
No todas las personas pasan por estas etapas de la
misma manera. De hecho, puede ser difícil decir con
exactitud cuándo una etapa termina y comienza la si-
guiente. El primer dolor es una señal de que los mús-
culos y tendones deben descansar y recuperarse; de
lo contrario, puede convertirse en una lesión crónica y
a veces, irreversible. Es responsabilidad tanto del tra-
bajador como del empleador tener conocimientos de
estos factores para una pronta atención, sin embargo,
a pesar de tener conocimiento preciso, actualmente
En Estados Unidos de América, Canadá y Europa,
los trastornos musculares esqueléticos afectan a 30%
de los trabajadores activos
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201624 VILLA, M. PÁGINAS 22 A 25
existen aún muchos puestos de trabajo, equipo y ma-
quinaria que no se adaptan a las necesidades específi-
cas de las poblaciones y actividades laborales.
Como ciencia, la ergonomía estudia las capacidades
humanas, limitaciones y otras características con el
fin de desarrollar la tecnología de interfaz hombre-
objeto-entorno y como práctica la aplica para el aná-
lisis, diseño, evaluación, estandarización y control del
sistema, (Hendrick, H., 1996). Parte de sus objetivos
es reducir el estrés, eliminar las lesiones y trastornos
asociados con el uso excesivo de los músculos, las
malas posturas, tareas repetitivas, incrementar la se-
guridad, el confort, la satisfacción, entre otros, que
se logra mediante el diseño de tareas, espacios de
trabajo, controles, pantallas, herramientas, ilumi-
nación y equipos para adaptarse a las capacidades
físicas del empleado y sus limitaciones. Cuando un
puesto de trabajo no cumple con las adecuaciones
necesarias para una óptima interacción, se pueden
desarrollar los DTA y, por tanto, generar un alto costo
para las empresas.
El principal esfuerzo para proteger a los trabajado-
res de los DTA debe centrarse en una estrategia de
prevención a través de la ergonomía, evitando los
patrones repetitivos mediante el diseño del puesto
de trabajo y la implementación del equipo adaptado
a las necesidades específicas de los trabajadores.
Algunas de las soluciones que pueden considerarse
para prevenir los DTA en la actualidad son el diseño
automatizado, en que se eliminan las tareas repeti-
tivas de una forma rápida obteniendo resultados in-
mediatos en pro de la disminución de los trastornos
musculoesqueléticos; sin embargo, en ocasiones no
llega a ser factible o convincente, debido al costo
que genera en empresas en desarrollo, no obstante,
pueden aplicarse otras soluciones con menor costo
de inversión como la rotación de los trabajadores, lo
Recomendaciones para una postura adecuada
La altura de la superfiecie de trabajo debe permitirle trabajar
sin alcanzar la flexión. Organizar los elementos de uso común, tales como grapadoras y télefonos para
que sean de fácil acceso.
El tercio superior de la pantalla de la computadora debe estar colocado en o por debajo del nivel del ojo.
Antebrazos deben estar paralelos al suelo y en ángulo de 90 grados aproximadamente de sus brazos superiores.
La profundidad del asiento debe permitir que la parte posterior de sus rodillas se extienda más allá del borde de su asiento. Los muslos deben estar aproximadamente paralelos al piso.
Ajuste la altura de su asiento para que sus pies se apoyen firmemente en el suelo. Use un reposapiés si siente que sus pies no están bien soportados.
Las muñecas, cuello y cabeza deben de estar en posición neutral relajada, no en ángulo hacia arriba o hacia abajo.
La distancia entre ojos y el monitor debe de ser de al menos 15.7 pulgadas o más, por lo general con los brazos extendidos.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 25PREVENCIÓN DE DTA
Es maestra en Ergonomía con Orientación en Diseño por el Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño en la UDG. Actualmente es coordinadora técnica del II Congreso Internacional de Turismo Inclusivo en México y directora de investigación en el proyecto “Evaluación ergonómica de las ambulancias en Ecuador”, en alianza con el PHTLS Capítulo Ecuador.
cual requiere que se muevan en diferentes áreas y ta-
reas para enfocarse en diferentes grupos musculares,
ya sea en periodos de tiempo fijos o irregulares, y
así permitir la recuperación de los mismos. El trabajo
en equipo también puede proporcionar una mayor
variedad y trabajo muscular distribuido de manera
más uniforme, debido a que todo el equipo está in-
volucrado en la planificación y asignación de la obra.
Por tanto, cada miembro del equipo lleva a cabo un
conjunto de operaciones para completar la totalidad
del producto, lo que permite al trabajador alternar
entre las tareas. Sin embargo, la automatización, la
rotación de puestos y el trabajo en equipo, por sí so-
los no van a ser eficaces en la reducción de los DTA,
si no se combina con el diseño adecuado de las esta-
ciones de trabajo, equipo y herramientas adaptadas
a las necesidades particulares tanto de la actividad
laboral como de los trabajadores mientras el alto rit-
mo de trabajo persista.
Una solución accesible y completa es la evaluación er-
gonómica del lugar de trabajo que identifica la fuente
o fuentes de trastornos musculoesqueléticos relacio-
nadas entre sí, no sólo con el trabajador, sino con su
entorno y sus actividades. Un diseño adecuado de la
estación de trabajo disminuye el esfuerzo requerido
para mantener una postura adecuada, el estrés y los
accidentes laborales, por el contrario incrementa la
productividad, el confort, la seguridad y la satisfac-
ción, entre otros. Idealmente, la estación de trabajo
debe ser totalmente ajustable, proporcionando al
empleado las opciones para trabajar de pie, sentado
o de pie-sentado, así como ajustes antropométricos,
a la par de un diseño apropiado de herramientas y
equipos, lo cual disminuye significativamente la fuerza
necesaria para completar la tarea. Por tanto, en re-
lación con las prácticas laborales, la implementación
de los programas de ergonomía permite al empleado
evitar el movimiento innecesario del cuello, hombros y
extremidades superiores e incrementar el rendimiento
real en las tareas que se realizan.
Otros factores como capacitar a los trabajadores que
están involucrados en puestos que incluyen tareas
repetitivas, ayuda a que sepan cómo ajustar las esta-
ciones de trabajo para adaptarse según sus necesida-
des individuales. La capacitación también debe hacer
hincapié en la importancia de los lapsos de descanso
y enseñar cómo tomar ventaja de periodos cortos de
tiempo entre las tareas para relajar los músculos y la
forma de controlar conscientemente la tensión mus-
cular a lo largo de todo el turno de trabajo.
El incremento de la comunicación y el apoyo, junto con
un aumento de la capacidad del trabajador para con-
trolar su labor (cuando sea posible), son las prácticas
que no sólo reducen los riesgos de trastornos muscu-
loesqueléticos, sino que también aumentan la satisfac-
ción de los trabajadores, creando un entorno de traba-
jo más cómodo, saludable, seguro, eficiente y eficaz.
En conclusión, la prevención de los DTA siempre será
el resultado de un buen diagnóstico sistémico, hom-
bre-objeto-entorno, ya que con el análisis de cada
uno de estos elementos se logrará un diseño íntegro,
donde no sólo se beneficie el trabajador, sino direc-
tamente a la empresa, pues se disminuyen los costos
y aumenta la productividad.
Bibliografía:Baldwin, M. y Butler, R. (2006). Upper extremity
disorders in the workplace: Costs and outcomes beyond the first return to work. Journal of Occupational Rehabilitation. 16, pp.296-316.
Brouwer, B. y Faris, M. (2007). Are deficiencies in manual tracking associated with upper extremity cumulative trauma disorders?. Journal of Occupational Rehabilitation. 17. pp. 63-72.
Hendrick, H. (1996). Good Ergonomics. Is Good Economics. HFES.
Putz, A. (1988). Cumulative trauma disorders: a manual for musculoeskeletal diseases of the upper limbs. Taylor y Francis, London-New York.
Ratzon, N. y Jarus, T. (2009). Prevention of Workers’ Musculoskeletal Disorders Musculoskeletal Disorders: A Four-Stage Model, en Söderbuck, I., (Ed.) International Handbook of Occupational Therapy Interventions, pp. 507-514, New York, Springer.
MARTHA LETICIA VILLA FAJARDO
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201626 LÓPEZ, M. PÁGINAS 26 A 2926
El concepto de ‘trata de personas’ es
una ampliación del delito conocido
hasta la década de 1980 como ‘trata
de blancas’, que se circunscribía a la
explotación sexual sufrida por muje-
res caucásicas; el delito consiste en la
explotación que se ejerce sobre otra
persona para sacar provecho económi-
co de ella, considerándola el capital de
un perverso sistema mercantil, donde
tiene que obtenerse la mayor ganan-
cia con la menor inversión.
La indiferencia ante el sufrimiento aje-
no ha llevado a la sociedad a adquirir
personas como mera “res” y explotar-
las de diversas formas: sexual, trabajos
o servicios forzados, esclavitud, servi-
dumbre y prácticas análogas, entre es-
tas últimas podemos encontrar la men-
dicidad forzada que muchas ocasiones
se ejecuta en contra de los niños.
Ante la creciente explotación observa-
da en el ámbito internacional, princi-
palmente de mujeres, niñas y niños, se
creó el Protocolo para Prevenir, Repri-
mir y Sancionar la Trata de Personas,
especialmente contra estos grupos,
que complementa la Convención de
las Naciones Unidas contra la Delin-
cuencia Organizada Transnacional, fue
aprobado el 15 de noviembre del año
2000 por la Asamblea General de las
Naciones Unidas.
Dicho documento describe que los ele-
mentos de la trata de personas como
la captación, el transporte, traslado,
acogida o recepción de personas ten-
drá que haberse ejercido en contra de
la voluntad de la víctima; cabe hacer
mención que es común en este delito
que se obtenga el consentimiento de
la persona explotada bajo engaño o
coerción abusando de una situación
de vulnerabilidad con el fin primor-
dial de explotarla. Este documento
La mendicidad infantil en San Luis Potosí
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MARIANA LÓPEZ VILLAGRÁN [email protected]
FACULTAD DE DERECHO ABOGADO PONCIANO ARRIAGA LEIJA
Recibido: 16/11/2015Aceptado: 28/09/2016
Palabras clave: Trata de personas, mendicidad y mendicidad infantil.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 27MENDICIDAD INFANTIL
fue el parteaguas para que las naciones
firmantes llevaran a cabo su legislación
específica contra la trata de personas. En
el caso de México en noviembre 2007 se
promulgó la Ley contra la Trata de Perso-
nas, que posteriormente fue derogada, y
se publicó en su lugar en junio de 2012
la Ley General para Prevenir, Sancionar y
Erradicar los Delitos en Materia de Trata
de Personas y para la Protección y Asis-
tencia a las Víctimas de estos Delitos.
La ley general vigente en materia de trata
de personas estipula la mendicidad ajena
como una forma de explotación cuyo fin
es lucrar al obligar a una persona a pedir
limosna o caridad contra su voluntad, re-
curriendo a la amenaza o al daño grave,
el tratante hace uso de la fuerza u otras
formas de coacción sobre su víctima; este
delito se agrava cuando incide sobre un
menor de edad.
Los niños son considerados vulnerables
por no tener aún la edad que médica y psi-
cológicamente se ha determinado como
madura; para su pleno desarrollo físico y
mental deben ser apoyados y protegidos
por su familia, el Estado y la sociedad en
general, aportándoles las herramientas su-
ficientes para enfrentar la vida adulta.
Para lograr la madurez, debe proveérse-
les de una alimentación adecuada, salud,
educación, afecto, recreo, una vivienda
digna y demás cuidados en razón de su
edad. A las niñas y niños explotados en
las calles se les están violando estos de-
rechos y es una situación ante la cual no
podemos ser indiferentes.
Debe buscarse como prioridad proteger
el interés superior de los menores, éste se
entiende como la garantía de protección
ante cualquier situación; frecuentemente
se ha considerado como tal mantenerlo
integrado a su familia, sin embargo, no
en todos los casos es lo más correcto, por
ello deben adecuarse leyes y criterios de
las autoridades para no supeditar el in-
terés superior del niño al apego familiar,
pues en muchas ocasiones es en este nú-
cleo en que resultan más lastimados los
menores, como en el caso de la mendici-
dad obligada por la misma familia.
Una de las principales dificultades que
existen en nuestro estado para enfrentar
el fenómeno de la mendicidad infantil es
que no se han cuantificado los niños que
se encuentran inmersos en este delito
como víctimas; al parecer se trata de me-
nores cuya familia o grupo delincuencial
son quienes los explotan.
Es oportuno hacer la distinción entre el con-
cepto de ‘niños de la calle’ y ‘niños en la ca-
lle’, la preposición de da un sentido de per-
tenencia o adjudica determinada cualidad;
mientras que en indica lugar, por lo que el
término ‘niños en la calle’ puede enten-
derse como aquellos infantes que vagan,
transitan o trabajan fuera de su casa. Sin
embargo, en ambos casos están expuestos
a diversos tipos de abuso, accidentes auto-
movilísticos, daños en su salud a causa del
clima, a ingerir drogas con mayor facilidad
que si estuvieran bajo el cargo, vigilancia y
protección de una familia; dentro de todos
los riesgos que existen para los menores de
y en la calle, se encuentra ser captados o
enganchados por un tratante con el fin de
explotarlos para obtener un lucro.
La diferencia entre los niños de y en la ca-
lle víctimas de trata de personas será que
los primeros difícilmente serán buscados
por alguna persona pues carecen de lazos
familiares, mientras que los segundos se-
rán buscados por su familia; hay que acla-
rar que el riesgo no es menor para estos
últimos, puesto que las células delictivas
de trata suelen trasladarse de una ciudad
a otra y evitan dejar rastros.
Las niñas y niños son actores sociales y,
por lo tanto, su conducta repercute en la
sociedad, los que son obligados a mendi-
gar sufren violaciones que atentan contra
su dignidad humana, esto muy probable-
mente dará como resultado resentimien-
to social, al asumirse abandonados a pe-
sar de su calidad de víctimas.
Los niños y niñas que son víctimas de tra-
ta en su modalidad de mendicidad forza-
da, son elegidos por sus captores por el
sentimiento de lástima que provocan en
las personas, estos serán relegados por el
tratante cuando crezcan, probablemente
serán explotados en otra de las formas de
trata; las opciones que tendrán las vícti-
mas al ser mayores serán limitadas, pues-
to que no asistieron a la escuela, tampo-
co cuentan con los valores que pudieron
haber obtenido en un núcleo familiar, no
conocen sus derechos y han asumido la
mendicidad como forma de vida, lo que
significa que pueden replicar lo que vi-
vieron, convertirse en captores de algún
otro menor, incluso de sus propios hijos y
explotarlos o entrar a las filas de la delin-
cuencia organizada, donde la vida pende
de un hilo a cada instante.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201628 LÓPEZ, M. PÁGINAS 26 A 29 33
En el ámbito nacional se observa una di-
ferencia entre la cantidad de niños y niñas
en la calle, esto se debe a que las niñas son
ocupadas primordialmente para labores
domésticas o explotación sexual, activi-
dades que por su naturaleza no son exhi-
bidas, en cambio, los niños en la calle se
dedican a lavar coches, traer mandados o
simplemente vagar, y con mayor frecuen-
cia son capturados para explotarlos o es-
clavizarlos en la modalidad de mendicidad.
En San Luis Potosí, nuestras instituciones
estatales y municipales no cuentan con
cifras que permitan conocer el número de
niñas y niños en situación de calle y cuán-
tos son explotados para la mendicidad;
las políticas criminales que se han imple-
mentado para el combate específico de
ésta, se concretan a lo establecido en la
ley general mencionada anteriormente,
es decir, la conducta se encuentra tipifica-
da pero no existe una sola consignación
por este delito, según datos obtenidos en
Infomex; aunque a diario observamos ni-
ñas y niños en diversas calles de nuestra
ciudad pidiendo una moneda.
La Oficina de las Naciones Unidas contra
la Droga y el Delito ha documentado que
hace poco más de 10 años, en 2005, las
víctimas de trata eran alrededor de 2.4 mi-
llones en todo el mundo, siendo la explo-
tación sexual la más común, ya que un 79
por ciento corresponde a esa forma deni-
gración y solo 21 por ciento al resto de las
modalidades de trata de personas, entre
las que se encuentra la mendicidad infantil.
Las cifras de esta tragedia mundial arrojan
que por cada cinco víctimas de trata de
personas, una ese encuentra en su eta-
pa de infancia, situación que se agrava
en los países y regiones donde la mise-
ria es la forma más común de vida.
En el diagnóstico de trata de personas en
México, emitido por la Comisión Nacio-
México promulgó en 2007
la Ley Contra la Trata de Personas
nal de los Derechos Humanos en 2013,
y que es el más reciente en nuestro país,
se expone la explotación en su modalidad
de mendicidad forzada para niñas y niños
con discapacidad, lo que agrava aún más
el problema.
Se evidencia el caso United States v. Pao-
letti-Lemus, en el que las autoridades esta-
dounidenses detectaron y sancionaron a
una familia mexicana que llevó a 62 sordo-
mudos a Estados Unidos de América para
forzarlos a pedir limosna o ser vendedores
ambulantes, entre ellos se encontraban
algunos niños y niñas que fueron resca-
tados, de la vida infrahumana que tenían.
Ahora bien, no hay que perder de vista
que en nuestro país, las averiguaciones
no son tan efectivas como quisiéramos y
que al ser la trata de personas un delito
transnacional, son mayores las complica-
ciones de dar con el paradero de los niños
que desaparecen y saber a ciencia cier-
ta cómo son explotados; lo que vemos
y consta a la sociedad son los niños que
están unos días en algún lugar pidiendo
limosna y luego desaparecen, por eso el
obtener cifras ha sido complicado.
La Ley para Prevenir, Atender y Erra-
dicar la Trata de Personas en el Estado
de San Luis Potosí tiene como finalida-
des primordiales la prevención del deli-
to de trata, la protección y asistencia a
las víctimas, fomentar la participación
ciudadana y sensibilizar a los servidores
públicos para que atiendan con respon-
sabilidad su tarea; ordena la creación de
una comisión para atender, prevenir y
erradicar la trata, que es presidida por
la Secretaría General de Gobierno y la
Secretaría de Seguridad Pública fungirá
como secretaría técnica; sin embargo, la
responsabilidad no recae sólo en éstas,
sino que debe ser apoyada por otras 18
instituciones estatales más los ayunta-
mientos que representen cada uno de
los municipios que conforman las cuatro
zonas del estado potosino.
El trabajo realizado hasta ahora por parte
de las instituciones estatales radica en dar
a conocer el delito de trata de personas,
pero éste gira alrededor de la explotación
sexual; la trata de menores de edad en su
modalidad de mendicidad aún es un pro-
blema al que no se le ha reconocido su
dimensión, pues como se mencionó an-
teriormente no hay estadísticas y mucho
menos consignaciones por dicho delito.
Por lo anterior, podemos concluir que a
las niñas y niños víctimas de mendicidad
les son transgredidos sus derechos más
elementales, denigrando así su dignidad
humana; al no tener la oportunidad de
desarrollarse libre y plenamente, crecen
con pocas opciones para enfrentar las
responsabilidades de la vida adulta, per-
filando como una de las formas de sobre-
vivir, la comisión de un delito, quizá del
mismo del que fueron víctimas.
Es urgente la obtención de datos que
nos permitan conocer el perfil victimoló-
gico de los menores, así como las cifras
de víctimas de mendicidad infantil en
nuestro estado, obtenidas bajo proce-
dimientos confiables en que no se pon-
ga en riesgo al menor.
Fue apenas el 10 de junio de 2014, que
se emitió la primera sentencia de men-
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 29MENDICIDAD INFANTIL
MARIANA LÓPEZ VILLAGRÁN
Obtuvo la Maestría en Política Criminal por el Posgrado en Derecho de la Facultad de Derecho Abogado Ponciano Arriaga Leija de la UASLP. Labora en el Ayuntamiento de San Luis Potosí en el Área de Contraloría Interna Municipal y es docente en la Universidad Tangamanga campus Saucito.
dicidad forzada en contra de una familia
que explotaba a sus hijos y sobrinos obli-
gándolos a pedir limosna; el asunto se ju-
dicializó gracias a un ciudadano que no fue
indiferente ante los niños que se acerca-
ban a vender chicles y pedir dinero en la
avenida Colón, del Estado de México, y de-
nunció a las autoridades lo que observaba
cotidianamente.
La primera línea de investigación se con-
centró en determinar si esos niños coinci-
dían con desapariciones, la Fiscalía Espe-
cializada en Trata de Personas aclaró que
no se trataba de niños raptados, sino que
eran parientes directos de sus explotado-
res, quienes los obligaban a conseguir al
menos 100 pesos diarios; en caso de no
reunir la cuota, les daban “huevos cocidos
hirvientes”, lo cual les producía ámpulas en
la boca, que les causaban quemaduras y
les impedían comer.
Este procedimiento tuvo su fundamento
legal en la ley general contra la trata de
personas de 2012 y los captores fueron
sancionados con una pena de cuatro años
y siete meses de prisión, mientras los niños
fueron atendidos por las autoridades para
procurarles un desarrollo integral.
Según el diagnóstico sobre la situación de
trata de personas en México, efectuado por
la Comisión Nacional de Derechos Huma-
nos en 2013, los estados que concentran
81 por ciento de averiguaciones previas
del fuero común, sin que se conozca que
se haya resuelto con sentencia condenato-
ria, son: Aguascalientes, Tlaxcala, Chiapas,
Chihuahua, Puebla, Oaxaca, Veracruz, Hi-
dalgo y la Ciudad de México; un dato que
tampoco se publica es la modalidad de tra-
ta a la que corresponde ese porcentaje de
indagatorias, sólo se hace hincapié en que
la mayoría son por explotación sexual, ya
sea de mujeres, niños y niñas.
Se requiere urgentemente que las autori-
dades en todos sus ámbitos muestren in-
terés real en atender el problema, y para
su atención es pertinente que sea medido
a través de estadísticas confiables y que
contengan datos suficientes para prevenir,
sancionar y erradicar este delito en todas
sus formas.
Del diagnóstico referido en el párrafo ante-
rior, se exhibe que en el periodo compren-
dido del año 2009 al 2013, los estados de
Baja California Sur, Jalisco y San Luis Potosí
no reportaron una sola averiguación previa
por el delito de trata de personas.
Por lo anteriormente señalado, se requiere
urgentemente que las autoridades en to-
dos sus ámbitos, muestren interés real en
atender el problema de trata de personas,
y para su atención es pertinente que sea
medido a través de estadísticas confiables
y que contengan datos suficientes para
prevenir, sancionar y erradicar este delito
en todas sus formas.
Es inminente crear alternativas de solución
al problema y determinar las instituciones
que abanderarán responsablemente el
programa que se proponga, el cual deberá
ser incluyente, es decir, tendrán que par-
ticipar todas las instituciones que confor-
man la Comisión para Prevenir, Atender y
Erradicar la Trata de Personas y la Atención
a las Víctimas de este Delito, a las asocia-
ciones civiles y comunidad en general. El
programa que se construya deberá prever
el plazo en el que proyecta el resultado,
así como el monto del recurso que tendrá
que aplicarse para la creación de una polí-
tica pública y conocer su factibilidad, pues
sabemos que su éxito está supeditado al
compromiso que se adquiera por parte de
los responsables de ponerla en marcha, así
como a la disponibilidad de recursos que
se destinen a la misma.
Es necesario que tomemos conciencia del
fenómeno de la trata de personas en su
modalidad de mendicidad infantil, donde
los niños son los más afectados, pero no
son los únicos, como se ha planteado an-
teriormente; si dejamos pasar más violacio-
nes a sus derechos, estamos propiciando
una sociedad desigual donde es fácil pre-
ver el aumento de la delincuencia, pues
ésta no disminuirá con la dureza de las
penas, por lo que no podemos limitarnos
a describir la mendicidad infantil como de-
lito grave y atribuirle una sanción corporal
muy amplia, sino que debemos trabajar en
diversas disciplinas para disminuir la bre-
cha de desigualdad que afecta a nuestras
niñas y niños.
Bibliografía:Oficina de las Naciones Unidas Contra la
Droga y el Delito (2014), Diagnóstico Nacional sobre la Situación de Trata de Personas en México. Recuperado de:
https://www.unodc.org/documents/mexicoandcentralamerica/Diagnostico_trata_de_personas.pdf (consultada el 18 de noviembre de 2016).
Comisión Nacional de Derechos Humanos (2013). Diagnóstico sobre la situación de Trata de Personas en México. Recuperado de: http://200.33.14.34:1033/archivos/pdfs/diagnosticoTrataPersonas.pdf (consultada el 18 de noviembre de 2016)
González de la Vega, R., (2001) Políticas Públicas en materia de criminalidad, México, Editorial Porrúa.
Orozco, R., (2011) Trata de personas, México. Instituto Nacional de Ciencias Penales.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201630 ALVARADO, D. PÁGINAS 30 A 33
Una de las tradiciones artísticas más re-
presentativas de España son las tunas,
aunque cabe aclarar que ya forman
parte de la cultura latinoamericana. La
tuna es un grupo musical en el cual se
tocan instrumentos de cuerda y algunas
percusiones, está conformado, históri-
camente, por estudiantes que pertene-
cen a una universidad a la cual la tuna
está adscrita y, por ende, lleva el nom-
bre de la institución.
Conocer la historia de la tuna no es fácil,
no porque existan obstáculos al buscar
información al respecto, sino porque
hay poco interés por parte de las perso-
nas ajenas a este grupo. El modo en que
los estudiantes pertenecientes conocen
la historia es gracias a los integrantes
más antiguos, quienes transmiten de
forma oral este conocimiento a los nue-
vos “pardillos”, como se les conoce se-
gún la jerarquía de este grupo.
Dado que existe poco interés por inda-
gar más allá de los conocimientos orales
que los tunos brindan a los jóvenes, es
importante buscar la repercusión que
las tunas tenían en la literatura, pues
es a través de las obras literarias que se
puede fundamentar o refutar la historia
que actualmente se transmite en rela-
ción con los orígenes de esta tradición
musical. Existen diversas teorías respec-
to al origen de este grupo artístico, hay
quienes aseguran que los trovadores y
juglares son antecedentes de la tuna,
mientras otros rechazan tal teoría y ase-
guran que todo inició con el nacimiento
de las universidades.
Para hallar información acerca de este
grupo musical, es necesario dar a co-
nocer los diversos nombres que los in-
tegrantes llevaban y hacer mención de
la parte histórica. El posible origen de la
tuna se atribuye a la época en que los
estudiantes buscaban un modo de sus-
La tuna universitaria
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201630
DIANA GUADALUPE ALVARADO DE LA PEÑ[email protected] DE LENGUA Y LITERATURA HISPANOAMERICANAS
Recibido: 15/09/2016Aceptado: 28/09/2016
Palabras clave: Tuna universitaria, estudiante, tunante, sopisa y grupo musical.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 31LA MÚSICA ESTUDIANTIL
tentar sus gastos y lo hacían cantando y
tocando algún instrumento mientras se
trasladaban de su hogar a la universidad
y viceversa. En las obras literarias, se en-
cuentran fragmentos donde se describe
el acto de cantar y bailar por parte de
un estudiante con la finalidad de ganar
dinero. Sin embargo, hay otras palabras
usadas para referirse a estas personas
como tuno o tunante que viene del
verbo tunar y significa “el que tuna o
anda vagando”. Esta acepción se debe
a que estas prácticas estudiantiles no
eran muy bien vistas por la sociedad en
épocas anteriores y se les consideraba
vagabundos a aquellos estudiantes que
al recorrer las ciudades ofrecían un rato
de entretenimiento; se pensaba que era
una pérdida de tiempo, pues ellos debe-
rían dedicarse exclusivamente al estudio.
Otra de las palabras con que se referían a
estos estudiantes (o algunos de ellos) era
“sopista”, puesto que siempre cargaban
con una cuchara para comer la sopa boba
que se les regalaba. La sopa boba, como
la define Carlos Belmonte, era “el resul-
tado de combinar las sobras y deshechos
de otros alimentos con algo de verduras
y vegetales, todo removido en agua”
(2015, p. 68). Se considera que estos so-
pistas fueron los primeros en practicar
las actividades propias de la tuna, de ahí
que la cuchara sea símbolo de las tunas
actuales. Además, el hecho de no tener
una sola designación para hacer referen-
cia a estos músicos estudiantes no sólo
sucede con los integrantes de la tuna,
también ocurre con el nombre mismo
del grupo artístico, pues a las tunas tam-
bién se les conoce como estudiantinas.
Belmonte (2015) da a conocer al lector
la diferencia semántica de estas dos pa-
labras, donde la tuna es un grupo forma-
do por universitarios, que se encuentra
adscrita a una universidad, mientras la
estudiantina no tiene que cumplir forzo-
samente estos requisitos. No obstante, si
en la actualidad aún se suelen utilizar es-
tas palabras como sinónimos, es muy po-
sible que en siglos pasados no se hiciera
mucho énfasis en marcar sus diferencias,
por lo que es plausible considerar las dos
palabras como referentes al investigar en
obras literarias.
Entre las pocas personas interesadas en
indagar un poco más sobre la historia de
la tuna, se encuentra a quien he men-
cionado anteriormente, Carlos Belmon-
te Trujillo, etnomusicólogo, quien en su
tesis doctoral Evolución organológica y
de repertorio en la Estudiantina o Tuna
en España desde el fin de la Guerra Civil
española. La influencia de “ida y vuelta”
entre España y Latinoamérica, asegura
que la consolidación de la tuna como
se conoce hoy en día, fue después de la
Guerra Civil, es decir, hasta la década de
1940. Afirma, además, que los grupos
musicales existentes antes de esa fecha
difícilmente pueden considerarse an-
tecedentes de las tunas y lo demuestra
con algunos textos pertenecientes a la
época medieval, donde se comprueba
que la música de los goliardos, juglares
y trovadores no se parece en absoluto a
la música interpretada por las estudian-
tinas. Si bien tiene razón en este punto,
no parece tener en cuenta el material
literario del siglo XIX que a continuación
se presenta, con el que puede demos-
trarse que, si la tuna no tiene sus orí-
genes antes del siglo XV, no se puede
aseverar que el grupo no se haya conso-
lidado durante los siglos XV al XIX.
A continuación presento un texto que
hace mención de a quién se le nombraba
“tunante”, para relacionar las acepciones
de estudiante con tunante, cabe hacer la
aclaración que de ahora en adelante se
conserva la ortografía de los textos con-
sultados. Dado que a los estudiantes les
gustaba salir a beber, comer y divertirse,
se les relacionó con los “tunantes” por
ser vagos y borrachos. En Escenas noc-
turnas (Del Pino, 1855), libro dedicado
a describir las costumbres andaluzas, se
menciona a quien gusta de beber:
¡No ves tú que a los borrachos
en onde quiera que os ven
os atorean también
sin reparo los muchachos!
Cuanto ven a un hombre asina,
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201632 ALVARADO, D. PÁGINAS 30 A 33
uno le tira un peñón;
otro le da un empujón
o le hecha una escupitina:
otro, porque caiga abajo
le pone un estorbo elante:
mucho le disen ¡tunante!
(Del Pino, p. 47).
Una vez conocidos algunos elementos
de la acepción “tunante” aplicada a los
estudiantes, recurro a un texto donde
existe una mención sobre escolares
practicantes de la música, se trata de la
Memoria de los regocijos públicos con
que el excelentísimo Ayuntamiento de
la muy noble, leal y fidelísima ciudad
de Valencia celebró el tránsito y perma-
nencia de los muy excelsos y poderosos
Reyes de las Dos Sicilias, y de su augus-
ta hija la Princesa doña María Cristina
de Borbón, en su viaje a Madrid, con
motivo del augusto enlace de S.A. con
el Rey nuestro Señor (que Dios guarde),
de la imprenta de Benito Monfort, pu-
blicada en el año de 1830. En esta me-
moria se describe cómo los estudiantes
cantaron y tocaron para los reyes:
En la noche del día 1 de Diciembre
los Estudiantes de esta Universidad
literaria, dispusieron una serenata
en la plaza del Real Palacio, a cuyos
balcones se dignaron presentarse
SS.MM para oír un Himno com-
puesto por los mismos escolares, y
acompañado de orquesta; a cuyo
canto siguió el de la Jota Estudian-
tina; este último agradó tanto a SS.
MM., que se dignaron mandar se
repitiese (p. 10).
Claro está que la mención que se hace
sobre estos estudiantes no forzosa-
mente es de un grupo de tuna, pero sí
se puede comprobar que ya para la pri-
mera mitad del siglo XIX, los estudian-
tes practicaban dicha actividad musical.
La consolidación de la tuna
fue después de la Guerra Civil Española
hasta la década de 1940
No obstante, sólo nueve años más tar-
de, en la obra de Abenamar y el estu-
diante (1839), se habla ya de la estu-
diantina como grupo musical. En este
texto, se describe una escena donde
una cocinera canta las coplas de la es-
tudiantina, en las cuales se hace burla a
un tal “Luis Felipe” y el señor de la casa
se molesta con ella:
A lo mejor le interrumpen a uno y...
estas malditas cocineras todas son
filarmónicas y todas saben unos
cantares que no parece sino que se
los soplan a la oreja. ¡Oiga!... ahora
muda de tono, y de las seguidillas
manchegas se ha pasado a la jota
aragonesa.
Quien se acuesta con chiquillos
y en Luis Felipe confía,
cuando despierta y repara,
solo encuentra...porquería.
Drilimn... drilim... tirilimn... Mucha-
cho... —¿Señor? —Di a la cocinera
que venga. —Allá voy. —Ahora sa-
bré yo de dónde saca mi cocinera
semejantes cantares. —¿Qué man-
da V. señor? —Mando que me diga
V. quien le ha enseñado esa copla
de Luis Felipe que V. cantaba aho-
ra. —Señor, ¡pues si no hay nadie
que no sepa las coplas de Luis Feli-
pe! Esta mañana en la plaza, había
una música... esa música estudian-
tina... (pp. 218-219).
En la Fisiología del estudiante (Borrajas,
1842), se ofrece una descripción de-
tallada de los estudiantes músicos y
se narra el encuentro que unos hom-
bres tienen con los escolares. Ya para
este momento los instrumentos mu-
sicales coinciden con los de las tunas
actuales, así como también el baile del
pandero, característico de este grupo:
Presentábaseles a veces como llo-
vida una bandada de cuervos, que
así llamaban ellos a los estudiantes,
con guitarra el uno, el otro con
violín, con bandurria aquel, ese
con flauta y el de más allá con las
sonajas, que nada fuera sin ellas
la estudiantina cuadrila. Veíanse,
y apenas reconocida la calaña de
los manducantes, daba ya vueltas
por el aire la pandereta, empeza-
ba una de esas jotas que arancan
de la cama a las doncellas, que ha-
cen bailar el corazón en el pecho
y que trabucan el celebro de quien
las oye, y cantábala a dúo con un
mocetón carrilludo y casi hercúleo
otro de más delgada figura que era
el poeta de la tuna (Borrajas, p. 10).
En la tuna existe una jerarquía, donde
los llamados tunos son los integrantes
más antiguos y los pardillos y novatos
son los aprendices de los primeros. Al
ser del grupo de los estudiantes nuevos
se sufren humillaciones y castigos por
parte de los antiguos, para que cada
uno demuestre que realmente quiere
ser uno más de la tuna y es digno de
portar la indumentaria que lo conver-
tirá en tuno: la beca (banda que se lle-
va sobre el pecho y los hombros). En
la Fisiología del estudiante se narra la
causa de esta tradición actual, donde
un estudiante “desprotegido” sufría
humillaciones:
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 33
Es estudiante de la Licenciatura en Lengua y Literatura Hispanoamericanas en la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la UASLP e integrante de la Tuna Universitaria de la misma casa de estudios.
DIANA GUADALUPE ALVARADO DE LA PEÑA
LA MÚSICA ESTUDIANTIL
El que llegaba a la Universidad sin
valedores pasaba el aprendizaje
de estudiante, que no es el mejor
por vida del diablo: a los primeros
días salía de casa embarazado con
el manteo que llevaba el sombre-
ro como alguacil de plaza de toro,
tropezaba con la sotana que vestía
sin intermisión para completar el
traje, y hecho burla y blanco de los
más añejos, tal vez le alcanzaba un
empellón, tal vez un sopapo clan-
destino, tal vez un tronchazo que
le obligaba a descubrirse sin ver a
quien saludaba (pp. 14-15).
Asimismo, en otras obras se advierte
cómo los estudiantes tienen un papel
importante. En la zarzuela de Agustín
Azcona, La pradera del canal (1847), los
estudiantes acompañan a los persona-
jes principales a cantar:
Escena III.
Dichos PACA, PABLO, rondalla de
Estudiantes que traen guitarras,
bandurria, violín, panderetas,
hierros, etc. Viene con ellos una
MAJA de rumbo. [...]
(Tocan los estudiantes.)
Pablo: Niñas, las del Manzanares,
que venías hoy al Canal,
no me deis, por Dios, jachares,
y apiadaos de mi mal.
Mal de amor el pecho siente
Cuando os miro frente a frente.
¡Sí, señor!
El curar esta dolencia
es hermosas, vuestra ciencia.
Siente el pecho mal de amor
Coro: Mal de amor
(pp. 12-13).
Y en El novio pasado por agua (1852),
Manuel Bretón de los Herreros explica
la división que la Estudiantina realiza
para cantar y bailar alrededor de los
personajes principales.
Suero: Cantad hasta por los codos.
Estudiantina: ¡Viva!
Suero: Y cueste lo que cueste.
(Jota cantada y bailada con acom-
pañamiento de panderetas, etc.
Durante cada copla de las dos pri-
meras bailan solo seis u ocho pa-
rejas, y en los estribillos toma parte
toda la ESTUDIANTINA dividida en
tres cuadrillas, una de las cuales dan-
za en torno de Elena, otra en el de
don Lope y otra en el de don Suero.)
Parte del coro.
¡Vitor, vítor a la joya
que estos valles engalana;
a la Elena valenciana
que oscurece a la de Troya!
Todo el coro.
¡Alegría, alegría, alegría!
¡Viva el sol
español
que pimpollos tan lindos nos cría!
¡Viva el sol!
¡Alegría, alegría, alegría!
(Bretón, p. 71).
Como se ha podido observar, o al me-
nos los grupos que pueden considerar-
se como antecedentes, aparecen como
grupos artísticos consolidados desde el
siglo XIX. Si bien Belmonte no acepta
que las tunas tengan antecedentes des-
de los siglos XII y XIII, no puede afirmar
lo mismo para las décadas de 1800,
donde la literatura ya demuestra la
consolidación de un grupo musical de
estudiantes. Una manifestación artística
no puede “nacer” de la nada, lleva un
proceso de evolución y en algún mo-
mento de la historia, en el caso de la
música, se crea un grupo musical con
características específicas que pueden
ser identificadas y señaladas sólo para
tal grupo. La tuna universitaria tomó di-
versos elementos para crear lo que hoy
se conoce de ella, no obstante, no se
debe olvidar que aunque ya tiene sus
cimientos, un grupo musical (artístico
en general) siempre está en constante
evolución y hay un incesante intercam-
bio de elementos con otras agrupacio-
nes. Por tanto, la tuna de nuestra uni-
versidad no es la tuna del siglo XIX ni
se mantendrá igual, pero sí tendrá la
esencia estudiantil universitaria.
Bibliografía:S/A, (1830). Memoria de los regocijos
públicos con que el excelentísimo Ayuntamiento de la muy noble, leal y fidelísima ciudad de Valencia: celebró el tránsito y permanencia de los muy excelsos y poderosos Reyes de la Dos Sicilias, y de su augusta hija la Princesa Doña María Cristina de Borbón, en su viaje a Madrid, con motivo del augusto enlace de S. A. con el Rey nuestro Señor (que Dios guarde). Valencia: Benito Monfort.
S/A. (1839). Abenamar y el estudiante. Capricho periodístico. Madrid: Imprenta de la Compañía Tipográfica.
Azcona, A. (1847). La pradera del Canal, Madrid: Imprenta Nacional.
Belmonte Trujillo, J.C. (2015). Evolución organológica y de repertorio en la Estudiantina o Tuna en España desde el fin de la Guerra Civil española. La influencia de “ida y vuelta” entre España y Latinoamérica. Universidad de Extremadura: Departamento de Didáctica de la expresión musical, plástica y corporal.
Borrajas. (1842). Fisiología del estudiante, Barcelona: Antonio Bergnes.
Bretón de los Herreros, M. (1852). El novio pasado por agua. Zarzuela de figurón en tres actos, Madrid.
Del Pino y Moreno, P. (1855). Escenas nocturnas. Pieza de costumbres andaluzas. Dividida en dos partes y en verso, Málaga: La Ilustración Española.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201634 DIVULGANDO ¿QUIERES PROBLEMAS?
DIVU
LGAN
DO
¿Quién no las ha visto? La elegantes torres que se estiran hacia el cielo, colosos de con-creto que encontramos al lado de muchas plantas generadoras de energía. Es por una buena razón: las plantas termoeléctricas convierten, a veces, menos de 50 por ciento del calor que producen en electricidad. La otra mitad se captura en el agua usada para la refrigeración de la planta. Ese calor debe ser disipado en las torres de enfriamiento, a menos que el agua pueda usarse para calentar hogares o fábricas, como en Nueva York en Estados Unidos de América o Berlín, Alemania. En esas ciudades, tuberías de varios kilómetros de longitud llevan el agua caliente desde las plantas generadoras de energía eléctrica hasta los edificios, es lo que llaman “calefacción remota”.
Torres hiperbólicas
RAÚL ROJAS GONZÁLEZ
[email protected] LIBRE DE BERLÍN
Imagen: http://www.pictureicon.com
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 35DIVULGANDO ¿QUIERES PROBLEMAS?
Las estructuras, que más bien parecen elegantes floreros, se llaman torres hiperbólicas de enfriamiento. La base y la salida superior son redondas. Las paredes, vistas de perfil, respetan la forma de una hipérbola, la cual podemos imaginar que se ha girado alrededor del eje vertical central de la torre. Una estructura de este tipo tiene curvatura negativa, es decir, se hunde en lugar de abultarse como una esfera. Los elipsoides y los hiperboloides son figuras duales, casi lo mismo, pero con signo contrario, como el Dr. Jekyll y Mr. Hyde.
¿Por qué se utilizan torres hiperbólicas, qué ventajas tiene esta forma de construir? La tarea de las torres es acelerar el enfria-miento del agua caliente que viene de la planta termoeléctrica y cae en su interior, por medio de regaderas de aspersión. Las pe-queñas perlas de agua caen, mientras por la base de la torre entra aire frío que sube por el interior. El flujo de aire se puede apoyar con ventiladores para que sea más intenso; al entrar en contacto con el agua, la enfría, pero se calienta al mismo tiempo y por eso continúa ascendiendo por la torre. Al flotar se reduce la superficie transversal de la chimenea y eso hace que aumente la velocidad del flujo de aire. Este efecto fue descubierto por el italiano Gio-vanni Battista Venturi y se aplica a flujos incompresibles. Es como en una carretera: si se pasa de tres a dos carriles, vamos despacio en tres y al llegar a donde tenemos dos, aumenta la velocidad del tráfico. Para que el mismo número de autos por minuto avance por la carretera, van más despacio en tres carriles y mas rápido en dos. La velocidad mayor de los autos ayuda a compensar la pérdida de un carril. Este efecto Venturi, que acelera el flujo del aire, ayuda a que no se formen torbellinos en el interior de la chi-menea hiperbólica: el aire que entra por la base de la torre va directamente hacia la boca de salida en forma de flujo laminar, es decir, de capas paralelas de aire que no se entrecruzan. Al final de la torre, aumenta de nuevo el área transversal de la chimenea, ahí se mezcla el aire caliente con el frío y se producen los remolinos que siempre asociamos visualmente con chimeneas.
Para enfriar sería posible construir las torres como largos cilindros-chimenea. Sin embargo, mientras mayor superficie tiene la chimenea mejor resulta el en-
friamiento. Las chimeneas cilíndricas con gran área transversal son ineficientes debido a los torbellinos que pueden produ-cirse. Lo que queremos es que el aire se mueva siempre hacia arriba y nunca hacia abajo, al interior de la chimenea.
Además, las torres hiperbólicas tienen la ventaja de ser estruc-turalmente muy estables. Es muy fácil construir un hiperboloi-de de revolución (como los que describimos aquí). Imagínense que tomamos dos anillos, uno de mayor radio para la base y uno de menor radio para la salida de la torre. Conectamos los dos anillos con largas trabes verticales que salen del anillo in-ferior hacia el superior. Una construcción así corresponde a un cono truncado. Si ahora giramos el anillo superior, mantenien-do los puntos de contacto de las trabes de soporte, la figura que obtenemos tiene un perfil hiperbólico. En los museos de ciencia, muchas veces los visitantes pueden realizar este ex-perimento. Pueden comprobar también que el giro del anillo superior le da mucha estabilidad a la estructura, así como capacidad de resistencia a la compresión, es decir, podemos poner algo sobre el hiperboloide de revolución y lo sostiene. Una vez creado el hiperboloide es difícil comprimir las pare-des, lo que es muy importante para que el viento no afecte la estructura. Una torre hiperbólica de enfriamiento es como una chimenea cónica que hemos girado hasta que en la parte media se produce un cuello de botella que será responsable de producir el efecto analizado en el siglo XVIII por Venturi.
En términos estructurales, tendríamos también gran esta-bilidad si hubiéramos abultado las paredes de la torre. Pero,
además de las turbulencias al interior de la estructura, es claro que una to-
rre hiperbólica es estéticamente más atractiva que una barrigo-na. Por eso los hiperboloides de
revolución han encontrado muchas aplicaciones en la arquitectura desde
que el ruso Vladimir Shukhov presentara los primeros en 1896, no para chimeneas
sino para torres de agua. El gran arquitecto catalán Antoni Gaudí experimentó tam-
bién con estas curvas voluptuosas en las bóvedas de la Sagrada Familia en Barcelona, España.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201636
MARCOS ALGARA SILLER
[email protected] de Ingeniería
DIVU
LGAN
DO
DIVULGANDO DESDE LA AZOTEA
Así como el papá de Nemo aprovecha una corriente marina para buscar a su hijo hasta Sidney, Australia, yo voy a 10 000 metros sobre el nivel del mar (msnm) “echo la mocha” a tie-rras asiáticas sobre una corriente de aire buscando algo de las experiencias que colegas de países lejanos puedan com-partir sobre esta delirante búsqueda del conocimiento lla-mada ciencia. Un poco más al norte de donde estaba Nemo atrapado con la malvada sobrina del dentista australiano, es a donde me dirijo. El destino es Vietnam, aquel atribu-lado país donde Rambo sirvió al ejército de Estados Unidos de América en aquella fallida guerra de la década de 1960 y que tan mala impresión dejó sobre ese país tropical. Así como Asia es ahora el epicentro de esta pequeña reunión sobre recursos naturales, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí ya ha sido anfitrión, luego de haber pasado por Egipto y Alemania. Ahora Kenia se ve en el horizonte cerca-no, seguido quizá por Indonesia.
Sin duda el concepto de “turismo académico” es uno de los ganchos que más utilizo para atraer estudiantes incautos y que vean el camino de la ciencia como un estilo de vida a seguir. La academia ofrece una amplia variedad de opciones para cada gusto: hay espacio para los científicos locos con sus batas manchadas y experimentos extraños congelando átomos para encontrar la fuente de los poderes de la Hormiga Atómica; existen también cubículos retacados de ecuaciones en las pa-redes que nadie entiende, pero que explican un pedacito de las leyes de este planeta; hay aulas para aquel profesor de saco con codos parchados y dedos blanqueados por el gis de tanto trazar los secretos de nuestra existencia a sus alumnos; claro que también hay cabida para aquellos que buscan desenterrar con una pala los secretos de la madre tierra.
Echo la mocha
Si además de ese espacio propio, ese que uno hace suyo y está fijo, anclado al suelo para echar raíces, le agregamos un espacio común en las salas de aeropuerto como oficina temporal y en remotos países donde las ideas se comple-tan, tenemos entonces un gran laboratorio del conocimien-to, divertido y lleno de sorpresas. Yo sí creo que la ciencia debe ser así. Si el fundamento de la ciencia es la generación del conocimiento, entonces debería ser siempre un camino desconocido, algo parecido al impredecible clima potosino, ahora con la moda del cambio climático, donde no se sabe la dirección en la que soplará el viento cada temporada.
Mientras tanto, debo recuperar el horario perdido durante estos 14 000 kilómetros volando, ajustar el reloj del sueño, acostumbrar el estómago a otra dieta y afinar el oído en esta reunión, que me recuerda a la Torre de Babel y que necesito del inglés para salir bien librado.
En esta búsqueda del saber se trata de que Nemo se vuelva a perder para comenzar su búsqueda otra vez.
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 37DIVULGANDO CONCIENCIARTE
Año de 2171 en Hope City, al parecer la única ciu-dad subterránea con apenas unos cuantos miles de habitantes que sobrevivió después de la cuarta erupción del volcán Yellowstone: un lugar donde los gobernantes manipulan los consejos, las cámaras y los medios de comunicación para permitir que cir-cule sólo la información que le conviene al Estado, pero se autoproclama “sociedad democrática”. Una ciudad futurista con casi 30 000 habitantes, casi to-dos víctimas de la inconciencia de continuar con el vicio de las plazas comerciales y la devastación del consumo desmedido. ¡Oh, la torpeza de los citadinos, remarcada incluso en el año 2171, no puede ser!
Hope City, donde los clones de aves son la principal fuente de alimentación humana y cada día crece el miedo ante la posibilidad de no ser el único grupo que todavía habita el planeta; donde los ricos, los poderosos y los dueños del Estado tienen miedo de que la gente recupere los espacios y salga en busca de una auténtica Ciudad de la Esperanza bajo el cielo azul. En Hope City, sí, en ese lugar el capitán Al Tues-day protagoniza una aventura de ciencia ficción ti-tulada: 2171 ¡Después de la catástrofe de Yellowstone!
¿Cuál sería nuestra posición con respecto a otros humanos?, se pregunta el autor en alguno de sus ca-pítulos, y con ese cuestionamiento construye una in-teresante metáfora en la trama de su obra, que busca retratar las actuales sociedades endogámicas, medio-cres y llenas de prejuicios que niegan toda forma de vida distinta a ellas. El autor nos propone en su novela la creación de un nuevo orden para refundar nuestro planeta; el capitán Al Tuesday tendrá que enfrentar las oscuras intenciones de un estado totalitario para que la
Reflexiones sobre las aventuras del capitán Martes
ÓSCAR MONTERO
[email protected] de Ciencias de la Comunicación
sociedad de Hope City entienda que los terremotos y holocaustos, pero sobre todo las conspiraciones, son la mejor arma para someterlos y mantenerlos bajo tierra literal y metafóricamente.
Al Tuesday resulta una suerte de personaje puente entre el futuro que el autor imagina y presenta de manera jocosa y entretenida, casi siempre argumen-tando con base en la física y el pasado, un tiempo pasado incluso para nuestro tiempo. La conciencia en el personaje es detonada por los recuerdos de las enseñanzas de su padre mezcladas con la herencia de las narraciones y cuentos de los abuelos.
Destacan también la alegoría sobre la milenaria sabi-duría de los lobos y algunos pasajes en los cuales los personajes van de cacería; en ellos Al Tuesday y su gente tendrían que ver más con la vida de los prime-ros habitantes del planeta, los llamados hombres de las cavernas. Esta línea le sirve al autor para hilvanar otra metáfora en su obra que tiene, sin duda, que ver con la Alegoría de la caverna de Platón y la película El topo, dirigida en los años setenta por el chileno Ale-jandro Jodorowsky.
En una sociedad tan tecnológica resulta paradójico que algunas armas que utiliza el ejército represor funcionen aún con balas.
Cuando algunos personajes exploran el exterior, su piel siente los efectos del sol, el choque y las irrita-ciones que podrían causarles incluso cáncer, pues se trata de una sociedad que no tiene la vida resuelta ni mucho menos su futuro; tampoco una explicación de su pasado. Los gobernantes saben que no es po-
sible vivir en el subsuelo sin vivir en el exterior, pero esa verdad se la ocultan a todos y tratan de reservar-se el paraíso para ellos.
Les recomiendo que lean 2171 ¡Después de la catás-trofe de Yellowstone!, novela editada por la Univer-sidad Autónoma de San Luis Potosí, de mi amigo Alejandro Ochoa Cardiel, quien se dedica a la física cuando no escribe novelas.
Celebro que Alejandro, en medio de ese universo que inventó, muy parecido a las tiras cómicas, mencione a Edgar Allan Poe, al igual que a uno de los grandes de la ciencia ficción, Ray Bradbury.
Cuando comencé a leer esta novela me fue imposible dejar de pensar en la cinta soviética Cartas a un hom-bre muerto, dirigida en 1986 por el cineasta ucrania-no Lopushanski, donde un grupo de niños sobrevi-vientes al holocausto, trata de vivir dentro del Museo de Historia alejados de la estupidez suprema de los adultos junto a un físico ganador del Premio Nobel. Y claro que hay coincidencias entre ambas obras: la creación dramática, un físico, un holocausto, la cien-cia ficción, pero sobre todo, la imperiosa necesidad de los hombres quienes aún les queda conciencia humana y que, pese a toda adversidad harán hasta lo imposible por repoblar el planeta de manera más pura, inteligente y ecuánime.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201638
PROTAGONISTA DE LA PSICOLOGÍA EXPERIMENTAL
Emilio Ribes Iñesta
DIANA ALICIA ALMAGUER LÓPEZ
La psicología es una disciplina relativamente nueva
que ha construido sus métodos y criterios de aproxi-
mación a los fenómenos a través del tiempo y conti-
núa en desarrollo. Cuando se empezó a trabajar en
este campo, en nuestro país hacían falta personas
especializadas y programas curriculares enfocados
en la realización de estudios científicos.
El doctor Emilio Ribes Iñesta, quien a lo largo de su
trayectoria ha sabido mirar con ojos críticos el pano-
rama de la educación, dedicó varios años de trabajo
a estructurar los contenidos de estudio en la psico-
logía para propiciar el emprendimiento del quehacer
científico en dicha disciplina. Por ello esta universi-
dad le otorgó recientemente el título de Doctor Ho-
noris Causa.
38 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 2016
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 39
El homenajeado nació en Barcelona en
1944 y, debido a los conflictos políticos
que se vivían en España, su familia se
trasladó a México cuando él tenía poco
menos de tres años y se instalaron en
Cuernavaca, Morelos. Durante su infan-
cia estudió piano en la academia de su
padre e, incluso comenzó a dar clases; él
consideraba que la música era su voca-
ción, sin embargo, cuando terminó sus
estudios de bachillerato a los 15 años,
decidió ingresar en la recién fundada
carrera de Psicología de la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM).
Era el primer programa formal de psico-
logía en el país y en aquella época dicha
disciplina se impartía a través de la pers-
pectiva de la psiquiatría y el psicoanálisis,
y era parte de los estudios de filosofía y
pedagogía.
En su etapa de estudiante, Emilio Ribes
Iñesta formó parte de un grupo llamado
Galileo Galilei, cuya finalidad era adqui-
rir las bases para desarrollar investiga-
ciones científicas en el área de psico-
logía; sus miembros estructuraron una
propuesta para modificar la currícula
de la licenciatura y crear un Instituto de
Investigaciones Psicológicas, que le pre-
sentaron al entonces rector de la UNAM,
el cardiólogo Ignacio Chávez, a quien le
pareció una excelente idea, pero no era
viable debido a la falta de auténticos
psicólogos en aquella época.
En vista de que el proyecto no podía
llevarse a cabo en ese momento, Emilio
formó junto a sus compañeros del gru-
po Galileo Galilei un seminario de auto-
formación en psicología experimental y
posteriormente desarrolló su tesis sobre
el problema de la atención selectiva en
el control cognoscitivo, trabajo que fue
supervisado por Riley Gardner, uno de
los estudiosos más representativos en el
estudio del control cognoscitivo. Poste-
riormente se trasladó a la Universidad
Veracruzana, donde se dedicó a la do-
cencia y la evaluación clínica; la primera
materia que impartió fue Psicología del
Aprendizaje. Resulta interesante señalar
que complementaba sus conocimientos
al tiempo que enseñaba a sus alumnos,
quienes eran mayores que él, ya que
terminó tempranamente sus estudios.
En dicha universidad, Emilio Ribes y
sus colegas, con la asesoría de Víctor
M. Alcaraz y Serafín Mercado, elabo-
raron una propuesta de plan de estu-
dios basada en la que presentaron an-
teriormente en la UNAM y realizaron
las gestiones necesarias para fundar la
Facultad de Ciencias, de la que comen-
zó a formar parte la Licenciatura en Psi-
cología, cuyo programa era innovador.
Asimismo, construyeron un laboratorio
rudimentario que contaba con un labe-
rinto en T, otro en Y y una caja de salto
de discriminación de Lashley.
Posteriormente, Emilio Ribes Iñesta estu-
dió su posgrado en la Universidad de To-
ronto, Canadá, donde realizó un trabajo
de tesis sobre conducta epistémica.
En 1968 volvió a Xalapa, donde aplicó
sus conocimientos y consolidó las bases
de su práctica docente. Además, en el
Centro de Entrenamiento, Educación Es-
pecial y Rehabilitación de la Universidad
Veracruzana diseñó programas de en-
trenamiento con técnicas conductuales
para remediar deficiencias en el desa-
rrollo de los niños. Dos años más tarde
escribió su libro Técnicas de modificación
de la conducta: su aplicación al retardo
en el desarrollo y en 1975 fundó la Revis-
ta Mexicana de Análisis de la Conducta.
Después, la UNAM le dio la oportunidad
de estructurar un plan curricular cohe-
rente de carácter conductista y coor-
dinar el programa de psicología en el
campus Iztacala.
Cuenta con un gran número de obras
bibliográficas publicadas, ha organizado
simposios y ha brindado conferencias y
cursos en diversas instituciones, colaboró
con la Secretaría de Salud en la evaluación
y planificación de programas generales
de salud. En 1991 fundó en la Universi-
dad de Guadalajara el Centro de Estudios
e Investigaciones en Comportamiento, el
primero de este tipo en México.
Estudió el Doctorado en Filosofía en la
UNAM y en 1995 terminó su trabajo de
disertación, que fue publicado con el tí-
tulo Teoría del condicionamiento y len-
guaje: un análisis histórico y conceptual.
Su trayectoria profesional es larga y lle-
na de esfuerzos que dieron frutos en la
consolidación de las bases para la ense-
ñanza y la investigación en el campo de
la psicología. Resulta admirable su bús-
queda del conocimiento a través de la
autoformación y su afán por cuestionar
su propia postura teórica confrontando
diversos puntos de vista.
Es
seguidor
del Toluca
y del
Barcelona.
Apuntes:
Comenzó a
estudiar en
la UNAM a los
15 años.
Su padre le
enseñó a leer
y transcribir
música a los
tres años. Su lengua
materna es
el catalán.
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201640
PRIM
ICIA
SJOSÉ REFUGIO MARTÍNEZ MENDOZAFACULTAD DE CIENCIASCOMPILACIÓN Y ADAPTACIÓNAntropología
Predecir y, por lo tanto, prevenir el colapso de poblacio-
nes humanas es posible si se evalúa una serie de indi-
cadores llamados señales de alerta temprana (EWS, por
sus siglas en inglés). Así lo evidencian antropólogos de
la Universidad de Maryland, Estados Unidos de Amé-
rica, y del University College London, Reino Unido, en
un estudio publicado en la revista Proceedings of the
National Academy of Sciences.
“Nuestras investigaciones anteriores ya demostraban
que el aumento y el declive de una población podía ser
detectado mediante el estudio de restos arqueológicos.
Pero este estudio es el primero en predecir el colapso
de poblaciones antes de que suceda”, declara Sinc Sean
S. Downey, antropólogo en la Universidad de Maryland
y uno de los autores del estudio.
Cuando un ecosistema colapsa a menudo se produce
por un debilitamiento de la resiliencia de las poblacio-
nes, es decir, una disminución de su capacidad para
tolerar perturbaciones del ecosistema o pérdidas drás-
ticas de población. “Las enfermedades, las guerras, la
deforestación y la migración son los conductores más
comunes que llevan al colapso social”, detalla Downey.
Los estudios teóricos y empíricos de ecosistemas no hu-
manos revelan que la disminución de la resiliencia es
detectable a través de las señales de alerta temprana
El colapso de las poblaciones humanas puede predecirse
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 41
que evalúan indicadores como la ralentización del creci-
miento poblacional o el tiempo que tarda el ecosistema
en recomponerse tras un cambio.
“Las señales de alerta temprana son indicios de que un
sistema, como las sociedades humanas en el caso de
este estudio, está a punto de someterse a un cambio
drástico en sus tasas de crecimiento”, explica el antro-
pólogo. El trabajo confirma la efectividad de estos indi-
cadores para pronosticar futuros cambios en ecosiste-
mas humanos.
Mediante la datación por radiocarbono de restos ar-
queológicos de 2 378 lugares de nueve regiones del
Neolítico europeo —un periodo ocurrido hace 9 000
años—, los investigadores estimaron que las poblacio-
nes avisaron del colapso mucho antes de que ocurriera.
El desarrollo y la expansión de la agricultura y las he-
rramientas de piedra pulimentada provocaron un cre-
cimiento generalizado de la población, que después
acabó en una época de inestabilidad.
Las poblaciones estudiadas mostraron una desacelera-
ción del crecimiento y un mayor tiempo de recomposi-
ción tras sufrir pérdidas de población. “Las nueve regio-
nes que incluimos en este trabajo parecen haber tenido
dramáticas disminuciones de la población durante el
Neolítico”, expone Downey. Se estima que la población
de estas regiones descendió en un rango de 20 a 60
por ciento en tan solo un siglo.
Los hallazgos demuestran que las señales de alerta
temprana pueden ser aplicadas a estudios arqueológi-
cos, para con ello prevenir y monitorizar las consecuen-
cias que puedan acarrear los futuros cambios sociales.
“Los gobiernos, políticos y ciudadanos deben estar
dispuestos a tomar medidas cuando se les presentan
pruebas que demuestran que las sociedades están en
riesgo, como actualmente ocurre con los datos sobre el
cambio climático”, defiende el autor.
La deforestación y el paso del nomadismo al sedenta-
rismo son unos de los muchos factores que los autores
atribuyen al colapso de las sociedades. Sin embargo,
según Downey, el declive de una población no es pro-
ducto de una sola causa ambiental sino de un conjunto
de factores.
“Los seres humanos son increíblemente adaptables y
han llegado a vivir en ambientes extremos. Aunque un
solo cambio ambiental no pueda provocar el colapso,
hay algunos que harían inhabitables ciertas áreas, por
ejemplo, un aumento del nivel del mar podría inundar
comunidades costeras en todo el mundo”, concluye el
investigador.
Fuente: Servicio de Información y Noticias Científicas
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PRIM
ICIA
SJOSÉ REFUGIO MARTÍNEZ MENDOZAFACULTAD DE CIENCIASCOMPILACIÓN Y ADAPTACIÓNZoología
Según los resultados de un estudio reciente, las ca-
bras también buscan comunicarse con los humanos,
así como otros animales domésticos. Al igual que los
perros, buscan el contacto ocular con un humano que
pueda ayudarles a solucionar un problema.
El equipo de Christian Nawroth y Alan McElligott, de la
Universidad Queen Mary de Londres (QMUL) en el Reino
Unido, ha comprobado que, ante un problema que no
pueden resolver solas, las cabras buscan el contacto ocular
con humanos a quienes consideren proclives a ayudarlas.
Y juzgan las probabilidades de recibir ayuda del individuo
humano basándose en un análisis de la conducta de éste.
Para realizar la investigación, el equipo adiestró a ca-
bras a fin de que sacaran la tapa de una caja para con-
seguir así una recompensa guardada en su interior. En
la prueba final, hicieron que dicha recompensa fuera
inaccesible, y grabaron la reacción del animal ante los
experimentadores, quienes estaban mirando a las ca-
bras o bien les estaban dando la
espalda.
Las cabras redirigieron mucho más
frecuentemente su mirada entre la recom-
pensa inaccesible y el experimentador humano
cuando éste las estaba mirando. También mira-
ron antes, más a menudo y durante más tiempo
hacia una persona que veían de frente, que hacia otra
que les daba la espalda.
La táctica de las cabras al mirar a los ojos a los hu-
manos es comparable a la que emplean los perros
para captar la atención de su dueño cuando quieren
conseguir un objeto (comida, por ejemplo) que están
viendo pero está fuera de su alcance y creen que pue-
den lograr que él se lo dé.
La investigación sugiere que la domesticación de ani-
males ha tenido una influencia mucho más amplia so-
bre la comunicación humano-animal de lo que se creía
previamente. No sólo el perro posee una clara tenden-
cia a comunicarse con el hombre; también la poseen
otros animales que han convivido durante miles de
años con él. En el caso del perro, se ha asumido que su
capacidad para percibir información de los humanos es
el resultado de cambios en su cerebro al ser convertido
en un animal de compañía a través de la domesticación
y la crianza selectiva, al preferir a los individuos que se
muestran más sociables con su dueño.
Se cree que las cabras fueron la primera especie de
ganado en ser domesticada, hace unos
10 000 años.
Los autores del nuevo estudio ya sabían,
por investigaciones anteriores, que las ca-
bras son más listas que lo sugerido por
su reputación (recordemos por ejemplo
la frase despectiva “¡Está loco como
una cabra!”), pero los resultados de la
nueva investigación muestran además
su propensión a comunicarse con hu-
manos e interactuar con ellos incluso
a pesar de no haber sido domesti-
cadas como mascotas o animales
de granja.
Más información:http://rsbl.royalsocietypublishing.org/con-tent/12/7/20160283
Las cabrasy su forma de comunicarse con los humanos
UNIVERSITARIOS POTOSINOS 205 NOVIEMBRE 201642
NOVIEMBRE 2016 205 UNIVERSITARIOS POTOSINOS 43
AGENCIA INFORMATIVA CONACYTBiotecnología
Científicos del Centro de Nanocien-
cias y Micro y Nanotecnología (CNMN)
del Instituto Politécnico Nacional (IPN)
lograron convertir plástico normal en
biodegradable, aplicando propieda-
des de la cutícula del jitomate reci-
clado de los desechos agroindustria-
les por medio de procesos químicos
y enzimáticos.
El doctor Daniel Arrieta Báez, res-
ponsable del Laboratorio de Espec-
trometría de Masas, explicó que co-
menzaron analizando las cutículas,
parte externa del fruto que cumple la
función natural de ser una bolsa que
evita la pérdida de agua; es un bio-
plástico que la naturaleza utiliza como
mecanismo de defensa, por lo que
analizaron la posibilidad de crear un
complemento que pudiera aplicarse
en el plástico normal.
Después de separar los compuestos
del jitomate, se implementaron dife-
rentes técnicas químicas para unificar
y volver a formar la cutícula, siempre
con procesos que no afectaran el me-
dio ambiente. “A partir de ahí surgie-
ron dos vertientes de aplicación: una
en medicina, ya que es un producto
inocuo y detectamos que se puede
formar un biomaterial ideal para trans-
portar algunos compuestos al cuerpo
humano, como los nutracéuticos, y la
parte química para la fabricación de
materiales más biodegradables”.
El proyecto de investigación como
tal nació hace cuatro años, y sobre
el futuro del mismo, el doctor Daniel
Arrieta aclaró que no es su idea fabri-
car bolsas de plástico de la cutícula
del jitomate, pero sí contribuir a que
los plásticos sean menos dañinos. “Lo
que estamos haciendo es introducir
este tipo de cutícula a plásticos tradi-
cionales, de esta manera van a tener
una base biodegradable”.
Para la doctora Mayra Beatriz Gómez
Patiño, que también coordina el pro-
yecto, uno de los principales aportes
es el aprovechamiento de los dese-
chos agroindustriales. “El caso tam-
bién es utilizar los desperdicios que
muchos pensamos que ya no sirven,
dar ese valor agregado a la basura,
utilizar esos residuos que causan pro-
blemas y transformarlos en productos
amigables con el medio ambiente”.
En ese mismo sentido, el doctor Da-
niel Arrieta aclaró que los productos
que se pretenden desarrollar son a
base de los desechos del jitomate que
se producen en lugares como la Cen-
tral de Abastos. “Tenemos estudios
que demuestran que alrededor de 20
por ciento del jitomate que se produ-
ce se convierte en residuo, y si con-
vertimos ese porcentaje en toneladas
es una cantidad enorme. Lo que bus-
camos en un futuro cercano es hacer
todo integral, es decir, recuperar todo
lo que podamos del jitomate, como el
licopeno que es un antioxidante muy
poderoso y algunos azúcares con los
que se podría fabricar bioetanol”.
La diversificación de esta investiga-
ción puede resultar en otros grandes
aportes, como el aprovechamiento
del licopeno, pues se ha demostrado
que reduce la probabilidad de padecer
en algunos tipos de cánceres, como
el de próstata y el de mama. “Si lo
recuperamos y procesamos, podría-
mos encontrar las alternativas para
aprovechar este nutriente esencial
para los humanos”, aseguró el doctor
Daniel Arrieta.
Este proyecto ha tenido el apoyo de
la Secretaría de Ciencia, Tecnología e
Innovación del Distrito Federal (Seciti),
de la Secretaría de Investigación y Pos-
grado (SIP) del IPN y en la actualidad
cuenta con un Fondo de Investigación
Científica Básica del Consejo Nacional
de Ciencia y Tecnología (Conacyt). So-
bre esta investigación se han publica-
do cinco artículos en revistas científi-
cas y están por publicarse dos más, en
cuanto se obtenga la patente.
Buscan convertir plástico ordinario en
biodegradable
Fuente: http://www.conacytprensa.mx/index.php/tecnologia/biotecnologia/10730-buscan-convertir-plastico-ordinario-en-biodegradable
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LiteraturaOCIO CON ESTILO
La ficción es la verdad dentro de la mentira
Sthephen King
Cinco adolescentes se reúnen para jugar a la ouija,
apenas pudieron juntar el dinero compraron la ta-
bla y, como lo hacían a escondidas, jugaban de día.
Cuando la madre de la Polaca las descubrió, las echó
a patadas, así que tuvieron que ir hasta la casa de
la Pinocha, que vivía retirado y tardaban dos horas
en llegar. Su cuarto era grande y su familia no las
molestaba, así que podían jugar libremente. A pesar
de que la casa de Nadia estaba más cerca, a todas
les daba miedo ir porque estaba ubicada en una villa
donde todas las noches se oían disparos.
Las chicas juraron con sangre que ninguna de ellas
movía la copa, escribían en una libreta las respues-
tas que les daban los espíritus. Decidieron hablar con
quienes habían desaparecido, a quienes se los habían
llevado, ellos querían saber si estaban muertos y dón-
de estaban sus cuerpos, todas conocían a alguien, así
que hicieron una imagen mental de ellos, recordaron
su olor, su ropa y gestos. Julita por fin habló de sus
padres, en la escuela sólo se decían rumores, nadie
sabía a ciencia cierta cómo fue que desaparecieron.
En la cuarta noche lograron comunicarse con uno
que conocía al novio de la tía de la Polaca, le pre-
guntaron por qué los demás se iban cada vez que les
preguntaban si estaban muertos y donde estaban
los cuerpos, les dijo que una de ellas estaba de más.
Entonces alguien tocó la puerta.
El horror en la cotidianidad
ADRIANA ZAVALA ALONSO
Los tres párrafos anteriores son la trama del cuen-
to Cuando hablábamos con los muertos de Mariana
Enríquez, escritora y periodista argentina, conocida
como la princesa del terror, aunque prefiere deno-
minar a sus cuentos como de horror. Sus escritos se
desarrollan en espacios habituales, las calles, la casa,
el entorno familiar.
En el cuento se denuncia la desaparición de perso-
nas, las balaceras por las noches, la preferencia de
las chicas por ir más lejos con tal de sentirse seguras.
Para la escritora “el miedo es la policía, el barrio, la
pobreza, la violencia, los hombres”. Si bien el final
deja al lector desconcertado, miedo es lo que causa
el cuento en su totalidad, pues a fin de cuentas lo
que sucede en él —el trasfondo—, es lo que vivimos
día a día, es nuestra realidad más cercana y en donde
más inseguros estamos.
El cuento se encuentra en Página/12, diario argentino
en el cual Mariana Enríquez es subeditora y escribe
el suplemento Radar. Otras de sus obras más reco-
nocidas y traducidas en todo el mundo son Bajar es
lo peor, Los peligros de fumar en la cama y Alguien
camina sobre su tumba, la más reciente es Las cosas
que perdimos en el fuego publicado por Anagrama.
Enríquez. M. Cuando hablábamos con los muertosMontacerdos ediciones, Santiago 2013.